Chile: Frente Amplio: ¿Construir desde arriba o desde abajo?
Publicado el 14 Diciembre 2016
Escrito por Ricardo Candia Cares - El Clarín de Chile
Construir
una fuerza antagónica al duopolio que administra el neoliberalismo
impuesto a sangre y fuego y continuado con soberana fruición por parte
de la Concertación/Nueva Mayoría parece ser la tarea de la izquierda.
Durante
los decenios que han corrido desde que se inauguró la pos dictadura,
transición democrática no ha habido ni por pienso, esta idea ha estado
en todos los que se anuncian como de izquierda.
Mientras
duró el reinado extra parlamentario del PC no se avanzó un milímetro
hacia la conformación de una expresión anti sistémica. El pueblo se
desmovilizó. Los partidos de la Concertación fueron un freno. Y sus
sucesivos gobiernos aplicaron a la gente tanto garrote como zanahoria,
con una sostenida inclinación por lo primero.
Cuando
el PC emigró hacia los mejores pastos que ofreció el poder, terminando
con la endogamia concertacionista para dar paso a la briosa Nueva
Mayoría, el campo de la izquierda quedó huérfano de quien administraba
los rezagos de la derrota reciente. Y los de las más lejanas.
Y
ese hecho dio paso a que numerosas tribus de gente de izquierda
pudieran ahora recorrer esos campos desiertos en busca de una huella. El
espacio de la izquierda quedó disponible para el que pudiera.
El
proceso que se inicia al amparo majestuoso de las movilizaciones
estudiantiles, dio paso al protagonismo de actores sociales y a cuadros
jóvenes empujados por sus orgánicas que hacían sus primemos pinitos en
política en las universidades.
Y
en breve, esos dirigentes alcanzarían notable protagonismo por medio de
un discurso rupturista, que decía aquello que se escuchaba en muy pocos
lugares y que dejó al desfondado sistema político sin mucha opción de
responder.
Un
buen punto anotado por los muchachos de la Izquierda Autónoma fue
elegir al irreverente y chascón diputado Boric. Y por ahí cerca, el
diputado Giorgio Jackson, electo por la beneficencia de la Nueva
Mayoría, emigraba hacia un derrotero de mejor pronóstico,
transformándose en un nuevo líder de la izquierda.
Y
hace poco, precisamente por la extraña vía de consultar a la gente, un
grupo de organizaciones y dirigentes locales de Valparaíso, elegían al
autonomista Sharp como alcalde, dejando a su paso los restos humeantes
de la derecha y de la Nueva Mayoría.
De ahí a pensar en grande hubo bastante poco.
La
aparición del Frente Amplio, según se lee, se define más o menos “…por
la urgencia de dotar de espacios de representación del malestar larvado
en la sociedad chilena actual y que puedan rearmar un puente entre lo
político y lo social en pos de dar un cauce progresista a la actual
crisis de la política”.
La pregunta surge sola: ¿es que lo social necesita un puente a hacia lo político?
Esa
buena voluntad corre el serio riesgo de parecerse a la vieja política
que pensaba que a lo social, es decir, a las organizaciones que se dan
los trabajadores, estudiantes, pobladores, artistas, etc., les está
vedada la política y para acceder a ella deben optar a que los partidos
la representen.
Esta
idea de Frente Amplio no debe caer en el error de otras iniciativas
similares: intentar una construcción política que se proponga la
representación de la gente, pero por arriba.
La
propuesta de un Frente Amplio concebido y diseñado por las buenas
razones y voluntades de gente que intenta algo más que marchar, requiere
de la presencia de dirigentes sociales de verdad que anclen la
iniciativa en la gente común que siempre pone el mayor esfuerzo y que,
de paso, inhiba cualquier tentación por suplantar la voluntad de esa
gente. Un Frente Amplio no puede limitar con partidos políticos o sus
equivalentes.
Millones
esperan por una idea nueva, por una consigna, por una voz que le
ofrezca un camino de lucha y victoria. Y es de suponer que esa gente no
quiere que se reemplace su propia reflexión y sus decisiones.
Nunca más hablar a nombre del pueblo sin que el pueblo se entere de tan manifiesta buena voluntad.
En
otras palabras, el Frente Amplio debe ir mucho más allá de las siglas
que hasta ahora lo componen, hasta los límites del dominio de las
fuerzas sociales.
Lo
que falta en esa configuración son los trabajadores, los artistas, los
colectivos de pobladores, los mineros y pescadores; los profesores, los
mapuche, el mundo organizado o no, que no reconoce militancia alguna;
los numerosos colectivos de jóvenes que se mueven en sus barrios, la
gente que defiende sus poblaciones, los valiosos artistas de izquierda,
los intelectuales, en fin, un mundo de lo social que no tiene prensa ni
coberturas.
Y quizás, ni ganas de militar en algo que no sea una causa grande y de todos.
En
el mundo real hace rato que circula una izquierda silenciosa que ha
apostado más a la construcción desde abajo que a esperar la buena
voluntad y las buenas ideas de algunos que se erigen como lideres sin
más mérito que intentar ganar el quien vive.
Una
prueba viviente y palpable lo constituye la reciente victoria de Jorge
Sharp en la Municipalidad de Valparaíso, experiencia que no obedece
exactamente a la idea de Frente Amplio que circula.
Una
alternativa real a la cultura miserable del neoliberalismo deberá salir
desde abajo, desde la gente que lucha cada día, la que a duras penas se
organiza como puede y quiere; la que sale a las calles y que pone el
lomo cuando arrecia la represión, que es casi siempre.
Y la que de tarde en tarde, pone los muertos.
Desde
que algún poeta burlón instaló la idea de que la utopía sirve para
caminar, a la izquierda se le olvidó llegar. Y desde entonces anda en un
estéril derrotero radial que no le permite avanzar ni un solo metro.
Más que esperanza, la izquierda ha propuesto espera.
Una
reflexión atinada la dio el diputado Boric hace no mucho: la política
tiene que estar inserta en las luchas sociales, sino, es burocracia. Y
la burocracia cuaja cuando se comienza a creer que la inteligencia de
algunas personas puede sustituir la de mucha gente.
Los
instrumentos de liberación del pueblo van a salir necesariamente de sus
luchas, se crearán al calor de peleas ascendentes, afirmadas ya no en
cuestiones en los que el sistema maneja el calendario y todo lo demás,
sino imponiendo su propios tiempos y modos. Y, por sobre todo, con una
izquierda que entienda el tiempo en el que vive.
Si
hay una garantía para los poderosos, sinvergüenzas y ladrones, es
decir, para casi toda la casta, costra, de poderosos, es la inexistencia
de una izquierda irreverente, guapa, peleadora, decidida, que no acepte
bozales ni amaestradores.
La izquierda perdió la audacia, el sabor de la aventura.
Hace
falta una izquierda que emerja desde los que pelean por cosas
concretas, salud, educación, ambientes sanos, pensiones dignas, sueldos
justos, instituciones que sirvan, derechos sociales y políticos y que,
en un horizonte no muy lejano, se proponga cambiar el paradigma que hoy
construye una mierda de país, castigador de sus gente y premiador del
malvado.
Mal
visto, desprestigiado, rémora burguesa para unos, debilidad
socialdemócrata para otros, lo cierto es que el voto universal fue una
conquista del pueblo que se logró mediante mucha pelea, persecución,
represión y muertos. No fue una concesión graciosa del poderoso.
Hoy es el arma propicia para disputarles sus cotos a los sinvergüenzas.
Entonces,
una iniciativa política que se proponga enfrentarse al sistema con
reales opciones de triunfar, debe seducir a los millones que han sido
postergados, abusados y despreciados.
Eso
significa por sobre todo respetar esas voces. Y si se trata de trabarse
con el sistema en el campo electoral, debe imponerse el elegir
democráticamente, con la participación de todo el que quiera, a los
candidatos a todo lo que venga.
Un
Frente Amplio debe ser el impulsor de la participación popular,
propiciando elegir a los mejores representantes de de la gente, nacidos
desde abajo, desde la rabia de la gente común, levantando la
determinación irrevocable de hacer de Chile un país decente. Todo en
medio de las más tenaces luchas sociales.
O se construye y lucha desde abajo, o no se construye nada.
El otro Frente Amplio anuncia candidatura presidencial para 2017
Natalia Figueroa |Miércoles 14 de diciembre 2016 20:30 hrs.
Los
cuatro partidos que integran el otro Frente Amplio se reunieron por
primera vez para proyectar su trabajo para las próximas elecciones
parlamentarias y presidenciales de 2017. El referente afirmó que “no
apoyarán candidatos que tengan vínculos con la corrupción y con la Nueva
Mayoría que poco ha hecho de su propio programa de Gobierno”.
Este
miércoles se concretó una reunión oficial entre los partidos y
colectividades del otro Frente Amplio, conformado por Izquierda
Autónoma, Poder Ciudadano, Partido Ecologista Verde y Partido Igualdad
para evaluar su coincidencia en los lineamientos de trabajo y zanjar una
de las principales diferencias para agruparse en este pacto: decidir si
será un frente de izquierdas o un frente ciudadano.
La alianza integrada por estas cuatro fuerzas de izquierda anunció la presentación de una lista parlamentaria, además de anunciar una posible candidatura presidencial conjunta distanciándose de la Nueva Mayoría y de Chile Vamos.
De esta manera, esperan tener resuelto su cronograma político en enero de 2017 y la nómina de candidatos para ambas listas electorales en abril próximo.
El coordinador político del partido Poder Ciudadano, Jorge Ramírez, dijo que Revolución Democrática, el Partido Humanista y el Movimiento Autónomo deben precisar su postura respecto del Partido Progresista en el Frente, porque mientras mantengan la candidatura presidencial de Marco Enríquez- Ominami no entablarán relaciones con este partido.
“Nos parece importante que aclaren la posición que tienen con el PRO porque no es sólo con su candidato presidencial, sino es con todo un partido que ha terminado entregando boletas a SQM. Mirado desde esa lógica, no podemos ser parte de un espacio donde participe el PRO”, manifestó.
El vicepresidente del Partido Ecologista Verde, Cristián Villarroel, recalcó que la proyección del Frente es ampliarse a más actores sociales para concretar estas listas y participar del proceso electoral.
Una de las propuestas del Frente consiste en constituir un Parlamento ciudadano para 2018, según precisó la presidenta del Partido Poder Ciudadano, Karina Oliva.
Se refirió también a la figura de presidenciable Alejandro Guiller asegurando que si busca acercarse a un Frente Amplio debe dejar los ropajes tradicionales de la Nueva Mayoría.
En tanto, el coordinador nacional de la Izquierda Autónoma, Andrés Fielbaum, apuntó a la relevancia de conformar una bancada parlamentaria que no sea coaptada por el empresariado.
“Entendemos que el peso de una bancada parlamentaria fortalecida y articulada sería una tremenda potencia para conquistar demandas como educación, pensiones dignas, igualdad de género”, señaló.
Por su parte, presidente de Partido Igualdad, Guillermo González, hizo un llamado a los dirigentes sociales a unirse a este pacto amplio para constituir una lista unificada:“Desde esta alianza convocamos a los defensores de los territorios que sabemos han sido afectados por las malas políticas públicas impulsadas por la Nueva Mayoría”, dijo.
El Frente confirmó su participación en las primarias presidenciales de julio de 2017. “Esta debe ser una prioridad porque en general los movimientos transformadores se marginan del proceso”, expresaron.
Este jueves, en tanto, realizarán un encuentro ciudadano que contará con la participación de colectividades regionales, en Concepción, para discutir una propuesta conjunta y difundir su trabajo programático.
La alianza integrada por estas cuatro fuerzas de izquierda anunció la presentación de una lista parlamentaria, además de anunciar una posible candidatura presidencial conjunta distanciándose de la Nueva Mayoría y de Chile Vamos.
De esta manera, esperan tener resuelto su cronograma político en enero de 2017 y la nómina de candidatos para ambas listas electorales en abril próximo.
El coordinador político del partido Poder Ciudadano, Jorge Ramírez, dijo que Revolución Democrática, el Partido Humanista y el Movimiento Autónomo deben precisar su postura respecto del Partido Progresista en el Frente, porque mientras mantengan la candidatura presidencial de Marco Enríquez- Ominami no entablarán relaciones con este partido.
“Nos parece importante que aclaren la posición que tienen con el PRO porque no es sólo con su candidato presidencial, sino es con todo un partido que ha terminado entregando boletas a SQM. Mirado desde esa lógica, no podemos ser parte de un espacio donde participe el PRO”, manifestó.
El vicepresidente del Partido Ecologista Verde, Cristián Villarroel, recalcó que la proyección del Frente es ampliarse a más actores sociales para concretar estas listas y participar del proceso electoral.
Una de las propuestas del Frente consiste en constituir un Parlamento ciudadano para 2018, según precisó la presidenta del Partido Poder Ciudadano, Karina Oliva.
Se refirió también a la figura de presidenciable Alejandro Guiller asegurando que si busca acercarse a un Frente Amplio debe dejar los ropajes tradicionales de la Nueva Mayoría.
En tanto, el coordinador nacional de la Izquierda Autónoma, Andrés Fielbaum, apuntó a la relevancia de conformar una bancada parlamentaria que no sea coaptada por el empresariado.
“Entendemos que el peso de una bancada parlamentaria fortalecida y articulada sería una tremenda potencia para conquistar demandas como educación, pensiones dignas, igualdad de género”, señaló.
Por su parte, presidente de Partido Igualdad, Guillermo González, hizo un llamado a los dirigentes sociales a unirse a este pacto amplio para constituir una lista unificada:“Desde esta alianza convocamos a los defensores de los territorios que sabemos han sido afectados por las malas políticas públicas impulsadas por la Nueva Mayoría”, dijo.
El Frente confirmó su participación en las primarias presidenciales de julio de 2017. “Esta debe ser una prioridad porque en general los movimientos transformadores se marginan del proceso”, expresaron.
Este jueves, en tanto, realizarán un encuentro ciudadano que contará con la participación de colectividades regionales, en Concepción, para discutir una propuesta conjunta y difundir su trabajo programático.
Frente Amplio cierra la puerta a la Nueva Mayoría y define sus lineamientos políticos
T. González y G. Castillo |Martes 13 de diciembre 2016 20:43 hrs.
El
Frente Amplio entró en etapa de definiciones políticas para concretar
la formación de este nuevo referente, no obstante desde ya se plantean
algunas interrogantes, por ejemplo la forma de capitalizar el
descontento y apatía ciudadana, así como el desafío de mantener
cohesionada a una alianza de movimientos de izquierda.
Cómo
capitalizar el descontento ciudadano con las coaliciones políticas
tradicionales y cómo mantener la cohesión de una alianza de movimientos
de izquierda, que históricamente han tendido a la atomización y
división, son algunos de los cuestionamientos que desde ya debe hacer
frente el Frente Amplio, coalición que aspira a erigirse como una
alternativa a la Nueva Mayoría y Chile Vamos.
Revolución Democrática, Movimiento Autónomo, Izquierda Libertaria, Nueva Democracia, Partido Humanista y Convergencia de Izquierdas son los partidos y movimientos que integran este nuevo referente y que plantean aquí los elementos que los unen, y los cuales pretenden destacar por sobre las diferencias eventuales que pudieran minar la cohesión del nuevo referente.
Carla Amtmann integrante de la mesa ejecutiva de Nueva Democracia señaló que son tres los criterios a través de los cuales pretenden capitalizar el descontento y apatía que casi dos tercios de los chilenos manifiestan hacia la política: unidad, propuestas efectivamente transformadoras “que haga carne los intereses que la ciudadanía ha expresado y ha luchado”, y una metodología seria y convincente “con pasos y transformaciones reales y posibles para este período”.
La dirigenta hizo hincapié en que la pretendida unidad no implica homogeneidad, sino que respetar las diferencias de cada uno de los movimientos, “objetivos comunes, principios y formas de construcción comunes en la diferencia”, elementos que, a su juicio, están marcando de manera transversal a las fuerzas que deben confluir en este nuevo referente.
“Uno de los lineamientos centrales están marcados por los principales movimientos sociales de este último tiempo. Sin duda un proceso de asamblea constituyente para una nueva Constitución es uno de ellos, pero en general yo los englobaría como un eje de recuperación de los derechos sociales con un criterio de Estado garante y, por tanto, con la validación del criterio de derechos universales. Por otra parte, la recuperación de nuestra soberanía, todas las demandas que impliquen un fortalecimiento de la soberanía popular sobre nuestra tierra, nuestro mar, nuestros recursos naturales, y un tercer eje sobre todo vinculado a la democratización: proceso constituyente y mayores mecanismos de participación ciudadana”.
Felipe Ramírez, secretario general de Izquierda Libertaria, sostuvo que el principal objetivo del Frente Amplio es “desmarcarse completamente de las dinámicas que hoy han alejado a la gente de la discusión política”, como el financiamiento del gran empresariado de campañas, las designaciones a dedo, etc. y generar prácticas políticas que estén enraizadas en el movimiento social, en los problemas más sentidos por la población, “y el debate amplio de cara a las personas”, elementos que Ramírez juzga “fundamentales para re-entusiasmar a la gente y para también acercarlas al debate político, nuevamente”.
El secretario general de Izquierda Libertaria expresó que una de las características que tendrá el Frente Amplio es que, además de agrupar organizaciones políticas, “también tiene que tener un espacio de reflexión en las comunas”. La idea es generar espacios de discusión con los vecinos, aseguró, “con la misma gente que constituye el diario vivir en los territorios en los que estamos comenzando a trabajar”.
“Esto no se trata solamente de una elaboración política elevada, que se desarrolla en términos políticos e ideológicos, sino que también tiene que ver con hacer carne estos principios generales que enmarcan o engloban a este Frente Amplio, en donde los protagonistas no tienen que ser solamente los militantes, sino que fundamentalmente la ciudadanía”.
Ramírez hizo énfasis en la necesidad de generar espacios de confianza, tanto con la ciudadanía como entre los mismos movimientos que conforman el Frente Amplio, como una manera de proyectar la alianza y evitar así la atomización de las fuerzas de izquierda: “La manera de cómo poder superar estas dificultades y diferencias tiene que ver, en mi opinión, con hacer la política lo más de cara a la gente posible”.
“Otra cosa tiene que ver con cómo somos capaces de poder generar un programa que nos unifique en torno a los elementos centrales en los que estamos de acuerdo: en la orientación anti neoliberal, la orientación respecto al aseguramiento de los derechos sociales, la necesidad de contar con espacios de participación masiva, la definición de independencia frente al empresariado en términos de financiamiento de la política, por ejemplo, el rechazo terminante a la corrupción en los partidos, y a las dinámicas que fomentan el rapto del Estado y de la maquinaria estatal por parte de grupos dirigentes”, agregó.
Frente Amplio descarta apoyo a candidatura de Lagos o Guillier
Desde el Frente Amplio descartaron de plano adherir a cualquier candidatura presidencial que surja de la Nueva Mayoría, ya sea Ricardo Lagos o Alejandro Guillier, a pesar que este último ha manifestado que la suya es una candidatura surgida desde la ciudadanía y no de las fuerzas políticas.
De hecho desde el PPD manifestaron su aspiración a incluir a fuerzas como Revolución Democrática en las primarias presidenciales del conglomerado, situación que fue descartada de plano por su presidente, Sebastián Depolo.
“Nuestra política de alianza lo que busca es construir algo nuevo, lo que llamamos Frente Amplio, junto a quienes de verdad quieran transformaciones profundas en el país y no solamente administrar lo existente. Nosotros hoy descartamos ser parte de la Nueva Mayoría, descartamos algún tipo de acuerdo con un conglomerado que en realidad no fue capaz de empujar con profundidad y convicción, los cambios que creemos que el país necesita”.
Asimismo, desde el Frente Amplio reiteraron que mientras el Partido Progresista insista en alzar la candidatura presidencial de Marco Enríquez-Ominami, tampoco entablarán negociaciones con dicha colectividad en orden a integrarla a este nuevo referente, tal como lo expresó Carla Amtmann.
“Hay un límite ético y de forma de construir política en el cual nosotros somos tajantes: si queremos levantar un nuevo proyecto nacional para un Chile distinto, requiere de articularse y conformarse con quienes están construyendo también de una forma distinta, y por lo tanto nosotros no vamos a trabajar con personas que estén siendo procesadas e investigadas en casos de corrupción. Si, eventualmente, no salieran culpables y se demostrara que fue un montaje o cualquier malentendido como han dicho algunos desde el PRO, podríamos volver a conversar”.
En tanto, Felipe Ramírez señaló que si bien buscarán un acercamiento formal con la Coordinadora No+AFP, son cautos a la hora de concretarlo ya que no quieren que se planteen críticas que apunten a una posible cooptación del movimiento por parte de referentes políticos.
Por su parte, el vocero de No+AFP Luis Mesina señaló que si bien tiene buenas relaciones con los partidos y movimientos que conforman el Frente Amplio, “la Coordinadora no ha debatido una política de unidad en un plano diferente al que como movimiento social tenemos”.
“Nosotros recién nos vamos a juntar en una primera conferencia el 14 de enero, quizás ahí discutamos y debatamos cuáles son las políticas de alianzas nuestra y cuáles van a ser los desafíos para 2017, y en ese contexto por supuesto que vamos a tener que tener postura o posición respecto de lo que es el surgimiento de nuevos referentes políticos”, concluyó Mesina.
Revolución Democrática, Movimiento Autónomo, Izquierda Libertaria, Nueva Democracia, Partido Humanista y Convergencia de Izquierdas son los partidos y movimientos que integran este nuevo referente y que plantean aquí los elementos que los unen, y los cuales pretenden destacar por sobre las diferencias eventuales que pudieran minar la cohesión del nuevo referente.
Carla Amtmann integrante de la mesa ejecutiva de Nueva Democracia señaló que son tres los criterios a través de los cuales pretenden capitalizar el descontento y apatía que casi dos tercios de los chilenos manifiestan hacia la política: unidad, propuestas efectivamente transformadoras “que haga carne los intereses que la ciudadanía ha expresado y ha luchado”, y una metodología seria y convincente “con pasos y transformaciones reales y posibles para este período”.
La dirigenta hizo hincapié en que la pretendida unidad no implica homogeneidad, sino que respetar las diferencias de cada uno de los movimientos, “objetivos comunes, principios y formas de construcción comunes en la diferencia”, elementos que, a su juicio, están marcando de manera transversal a las fuerzas que deben confluir en este nuevo referente.
“Uno de los lineamientos centrales están marcados por los principales movimientos sociales de este último tiempo. Sin duda un proceso de asamblea constituyente para una nueva Constitución es uno de ellos, pero en general yo los englobaría como un eje de recuperación de los derechos sociales con un criterio de Estado garante y, por tanto, con la validación del criterio de derechos universales. Por otra parte, la recuperación de nuestra soberanía, todas las demandas que impliquen un fortalecimiento de la soberanía popular sobre nuestra tierra, nuestro mar, nuestros recursos naturales, y un tercer eje sobre todo vinculado a la democratización: proceso constituyente y mayores mecanismos de participación ciudadana”.
Felipe Ramírez, secretario general de Izquierda Libertaria, sostuvo que el principal objetivo del Frente Amplio es “desmarcarse completamente de las dinámicas que hoy han alejado a la gente de la discusión política”, como el financiamiento del gran empresariado de campañas, las designaciones a dedo, etc. y generar prácticas políticas que estén enraizadas en el movimiento social, en los problemas más sentidos por la población, “y el debate amplio de cara a las personas”, elementos que Ramírez juzga “fundamentales para re-entusiasmar a la gente y para también acercarlas al debate político, nuevamente”.
El secretario general de Izquierda Libertaria expresó que una de las características que tendrá el Frente Amplio es que, además de agrupar organizaciones políticas, “también tiene que tener un espacio de reflexión en las comunas”. La idea es generar espacios de discusión con los vecinos, aseguró, “con la misma gente que constituye el diario vivir en los territorios en los que estamos comenzando a trabajar”.
“Esto no se trata solamente de una elaboración política elevada, que se desarrolla en términos políticos e ideológicos, sino que también tiene que ver con hacer carne estos principios generales que enmarcan o engloban a este Frente Amplio, en donde los protagonistas no tienen que ser solamente los militantes, sino que fundamentalmente la ciudadanía”.
Ramírez hizo énfasis en la necesidad de generar espacios de confianza, tanto con la ciudadanía como entre los mismos movimientos que conforman el Frente Amplio, como una manera de proyectar la alianza y evitar así la atomización de las fuerzas de izquierda: “La manera de cómo poder superar estas dificultades y diferencias tiene que ver, en mi opinión, con hacer la política lo más de cara a la gente posible”.
“Otra cosa tiene que ver con cómo somos capaces de poder generar un programa que nos unifique en torno a los elementos centrales en los que estamos de acuerdo: en la orientación anti neoliberal, la orientación respecto al aseguramiento de los derechos sociales, la necesidad de contar con espacios de participación masiva, la definición de independencia frente al empresariado en términos de financiamiento de la política, por ejemplo, el rechazo terminante a la corrupción en los partidos, y a las dinámicas que fomentan el rapto del Estado y de la maquinaria estatal por parte de grupos dirigentes”, agregó.
Frente Amplio descarta apoyo a candidatura de Lagos o Guillier
Desde el Frente Amplio descartaron de plano adherir a cualquier candidatura presidencial que surja de la Nueva Mayoría, ya sea Ricardo Lagos o Alejandro Guillier, a pesar que este último ha manifestado que la suya es una candidatura surgida desde la ciudadanía y no de las fuerzas políticas.
De hecho desde el PPD manifestaron su aspiración a incluir a fuerzas como Revolución Democrática en las primarias presidenciales del conglomerado, situación que fue descartada de plano por su presidente, Sebastián Depolo.
“Nuestra política de alianza lo que busca es construir algo nuevo, lo que llamamos Frente Amplio, junto a quienes de verdad quieran transformaciones profundas en el país y no solamente administrar lo existente. Nosotros hoy descartamos ser parte de la Nueva Mayoría, descartamos algún tipo de acuerdo con un conglomerado que en realidad no fue capaz de empujar con profundidad y convicción, los cambios que creemos que el país necesita”.
Asimismo, desde el Frente Amplio reiteraron que mientras el Partido Progresista insista en alzar la candidatura presidencial de Marco Enríquez-Ominami, tampoco entablarán negociaciones con dicha colectividad en orden a integrarla a este nuevo referente, tal como lo expresó Carla Amtmann.
“Hay un límite ético y de forma de construir política en el cual nosotros somos tajantes: si queremos levantar un nuevo proyecto nacional para un Chile distinto, requiere de articularse y conformarse con quienes están construyendo también de una forma distinta, y por lo tanto nosotros no vamos a trabajar con personas que estén siendo procesadas e investigadas en casos de corrupción. Si, eventualmente, no salieran culpables y se demostrara que fue un montaje o cualquier malentendido como han dicho algunos desde el PRO, podríamos volver a conversar”.
En tanto, Felipe Ramírez señaló que si bien buscarán un acercamiento formal con la Coordinadora No+AFP, son cautos a la hora de concretarlo ya que no quieren que se planteen críticas que apunten a una posible cooptación del movimiento por parte de referentes políticos.
Por su parte, el vocero de No+AFP Luis Mesina señaló que si bien tiene buenas relaciones con los partidos y movimientos que conforman el Frente Amplio, “la Coordinadora no ha debatido una política de unidad en un plano diferente al que como movimiento social tenemos”.
“Nosotros recién nos vamos a juntar en una primera conferencia el 14 de enero, quizás ahí discutamos y debatamos cuáles son las políticas de alianzas nuestra y cuáles van a ser los desafíos para 2017, y en ese contexto por supuesto que vamos a tener que tener postura o posición respecto de lo que es el surgimiento de nuevos referentes políticos”, concluyó Mesina.
Una alternativa para revertir el desencanto
Juan Pablo Cárdenas S. | Lunes 12 de diciembre 2016 8:51 hrs.
Algunos
diputados progresistas y otros dirigentes que no se adscriben a la
Nueva Mayoría han manifestado su voluntad de consolidar un nuevo
referente político que compita exitosamente en los próximos desafíos
electorales con el oficialismo y a la Derecha. En el ánimo, como
aseguran, de cerrarle espacio a las expresiones del llamado duopolio
político en los comicios presidenciales y parlamentarios venideros, pero
especialmente para recaudar apoyo electoral entre los millones de
chilenos decepcionados de la posdictadura. Los que, por cierto,
constituyen buena parte de ese 65 por ciento de ciudadanos que ya no
concurre a votar.
Se trata de ex líderes estudiantiles y otras figuras que, habiendo roto sus vínculos con el oficialismo, creen posible consolidarse el Parlamento y llegar a la propia Moneda después de tantos episodios de corrupción de la política. Llegar en andas de malestar social que se expresa cada día más elocuente en paros, protestas, movilizaciones callejeras, como al interior de esos referentes sindicales y gremiales sumidos también en el desprestigio y la falta de credibilidad. Aunque se trata de un mote periodístico, se dice que estos dirigentes constituyen algo así como ese “Podemos” que en poco tiempo en España ha capturado muchas voluntades que ya no le creen en el Partido Socialista Obrero Español; tomando distancia, además, de un antiguo referente como el de Izquierda Unida donde se agruparon muchos excomunistas y militantes de distintas vertientes doctrinarias de pasado.
Sin duda, el momento no puede ser más oportuno para que al país se le ofrezca una nueva alternativa política que se proponga dar la lucha por la prometida y postergada institucionalidad democrática, en contra de la pavorosa concentración de la riqueza e inequidad, así como en beneficio de las demandas educacionales, previsionales, medioambientales y otras que han sido desestimadas por quienes han cogobernado por más de 26 años, y tuvieron en el gobierno de Michelle Bachelet la última oportunidad de cumplir como mandatarias de la voluntad popular.
La oportunidad de un nuevo referente se hace especialmente propicia, asimismo, en la incapacidad de la Nueva Mayoría y de las expresiones derechistas, en cuanto ofrecer candidatos y propuestas viables que encanten a los ciudadanos o, incluso, a sus propios adeptos. Cuando lo más probable es que los partidos tradicionales intenten competir con un Ricardo Lagos o Sebastián Piñera como candidatos presidenciales, ávidos como están por volver al Gobierno y cerrarle espacio a las nuevas generaciones. Dos expresidentes estancados o revenidos ideológicamente, cuanto acosados por la corrupción practicada en sus respectivos mandatos. Exponentes que, hasta aquí, solo concitan el apoyo de algunas cúpulas partidarias, de sus íntimos operadores y, por cierto, son acicateados por el gran empresariado. Un veredicto que se expresa contundentemente en las mismas y manipuladas encuestas cuando la inmensa mayoría de los consultados se mantiene renuente a ambos y sin deseo de revertir la abstención que ha seguido en aumento.
Muy importante sería que esta vez no tengamos que comprobar una nueva disgregación en la Izquierda, el surgimiento de esos desvergonzados candidatos, con cuya división a lo único que han servido es en retener en el Ejecutivo y en el Congreso a los mismos de siempre. Tanto así que ya existe certeza en que éstos son alentados y financiados por las mismas expresiones del duopolio político, cuanto por empresarios como Ponce Lerou y las más repugnantes grupos económicos cuestionados por sus colusiones, fraudes al Fisco y tantos otros delitos. Interesados, por supuesto, en dividir a las expresiones vanguardistas para retener en La Moneda, el Poder Legislativo, como en los municipios a personajes abyectos y digitados por sus intereses económicos.
Se trata de que estos líderes sean capaces, con generosidad y altura de miras, de mantener cohesión y consecuencia política, asegurándonos que aquella fórmula que acaba de ser ganadora en la elección del nuevo Alcalde de Valparaíso pueda ser reproducida efectivamente en todo el país. Para lo cual se hace necesario, también, oponerse con decisión a las pretensiones que, otra vez, manifiestan aquellos ensimismados caudillos y movimientos que ya empezaron a proponerse como candidatos para dividir al progresismo y frustrar nuevamente las expectativas populares.
Es preciso, al mismo tiempo, que estos líderes emergentes renuncien definitivamente al apoyo como a formar alianza con partidos y fracciones cuya voluntad manifiesta es aferrarse al poder, negociar nuevos cupos parlamentarios y alcanzar más cargos y granjerías oficiales. Al precio, incluso, de haberse hecho cómplices del último y bochornoso reajuste de salarios y quedar reducidos a una mínima expresión en sindicatos, colegios profesionales, federaciones estudiantiles y otros referentes de la sociedad civil.
Al mismo tiempo, es de desear que en la consolidación de una alternativa que ciertamente pueda desplazar a las tradicionales, estos jóvenes dirigentes se animen a integrarse con múltiples expresiones sociales surgidas en los últimos tiempos y que vienen demostrando muchísima más gravitación que los partidos. De forma tal que los nuevos representantes y abanderados de la Izquierda surjan de procesos de consulta ciudadana, convenciones y otras que se organicen con limpidez y amplia participación de las bases. En que, además, se tenga en cuenta la trayectoria irreprochable y el ejemplo de vida de quienes sean proclamados como los más aptos e idóneos en recuperar la confianza ciudadana y desplazar de nuestras instituciones públicas a quienes ya no tienen qué ofrecerle al país.
Cuando en Chile y otros países el principal enemigo de la democracia es la corrupción y la traición en el poder de los principios ideológicos y programáticos.
Se trata de ex líderes estudiantiles y otras figuras que, habiendo roto sus vínculos con el oficialismo, creen posible consolidarse el Parlamento y llegar a la propia Moneda después de tantos episodios de corrupción de la política. Llegar en andas de malestar social que se expresa cada día más elocuente en paros, protestas, movilizaciones callejeras, como al interior de esos referentes sindicales y gremiales sumidos también en el desprestigio y la falta de credibilidad. Aunque se trata de un mote periodístico, se dice que estos dirigentes constituyen algo así como ese “Podemos” que en poco tiempo en España ha capturado muchas voluntades que ya no le creen en el Partido Socialista Obrero Español; tomando distancia, además, de un antiguo referente como el de Izquierda Unida donde se agruparon muchos excomunistas y militantes de distintas vertientes doctrinarias de pasado.
Sin duda, el momento no puede ser más oportuno para que al país se le ofrezca una nueva alternativa política que se proponga dar la lucha por la prometida y postergada institucionalidad democrática, en contra de la pavorosa concentración de la riqueza e inequidad, así como en beneficio de las demandas educacionales, previsionales, medioambientales y otras que han sido desestimadas por quienes han cogobernado por más de 26 años, y tuvieron en el gobierno de Michelle Bachelet la última oportunidad de cumplir como mandatarias de la voluntad popular.
La oportunidad de un nuevo referente se hace especialmente propicia, asimismo, en la incapacidad de la Nueva Mayoría y de las expresiones derechistas, en cuanto ofrecer candidatos y propuestas viables que encanten a los ciudadanos o, incluso, a sus propios adeptos. Cuando lo más probable es que los partidos tradicionales intenten competir con un Ricardo Lagos o Sebastián Piñera como candidatos presidenciales, ávidos como están por volver al Gobierno y cerrarle espacio a las nuevas generaciones. Dos expresidentes estancados o revenidos ideológicamente, cuanto acosados por la corrupción practicada en sus respectivos mandatos. Exponentes que, hasta aquí, solo concitan el apoyo de algunas cúpulas partidarias, de sus íntimos operadores y, por cierto, son acicateados por el gran empresariado. Un veredicto que se expresa contundentemente en las mismas y manipuladas encuestas cuando la inmensa mayoría de los consultados se mantiene renuente a ambos y sin deseo de revertir la abstención que ha seguido en aumento.
Muy importante sería que esta vez no tengamos que comprobar una nueva disgregación en la Izquierda, el surgimiento de esos desvergonzados candidatos, con cuya división a lo único que han servido es en retener en el Ejecutivo y en el Congreso a los mismos de siempre. Tanto así que ya existe certeza en que éstos son alentados y financiados por las mismas expresiones del duopolio político, cuanto por empresarios como Ponce Lerou y las más repugnantes grupos económicos cuestionados por sus colusiones, fraudes al Fisco y tantos otros delitos. Interesados, por supuesto, en dividir a las expresiones vanguardistas para retener en La Moneda, el Poder Legislativo, como en los municipios a personajes abyectos y digitados por sus intereses económicos.
Se trata de que estos líderes sean capaces, con generosidad y altura de miras, de mantener cohesión y consecuencia política, asegurándonos que aquella fórmula que acaba de ser ganadora en la elección del nuevo Alcalde de Valparaíso pueda ser reproducida efectivamente en todo el país. Para lo cual se hace necesario, también, oponerse con decisión a las pretensiones que, otra vez, manifiestan aquellos ensimismados caudillos y movimientos que ya empezaron a proponerse como candidatos para dividir al progresismo y frustrar nuevamente las expectativas populares.
Es preciso, al mismo tiempo, que estos líderes emergentes renuncien definitivamente al apoyo como a formar alianza con partidos y fracciones cuya voluntad manifiesta es aferrarse al poder, negociar nuevos cupos parlamentarios y alcanzar más cargos y granjerías oficiales. Al precio, incluso, de haberse hecho cómplices del último y bochornoso reajuste de salarios y quedar reducidos a una mínima expresión en sindicatos, colegios profesionales, federaciones estudiantiles y otros referentes de la sociedad civil.
Al mismo tiempo, es de desear que en la consolidación de una alternativa que ciertamente pueda desplazar a las tradicionales, estos jóvenes dirigentes se animen a integrarse con múltiples expresiones sociales surgidas en los últimos tiempos y que vienen demostrando muchísima más gravitación que los partidos. De forma tal que los nuevos representantes y abanderados de la Izquierda surjan de procesos de consulta ciudadana, convenciones y otras que se organicen con limpidez y amplia participación de las bases. En que, además, se tenga en cuenta la trayectoria irreprochable y el ejemplo de vida de quienes sean proclamados como los más aptos e idóneos en recuperar la confianza ciudadana y desplazar de nuestras instituciones públicas a quienes ya no tienen qué ofrecerle al país.
Cuando en Chile y otros países el principal enemigo de la democracia es la corrupción y la traición en el poder de los principios ideológicos y programáticos.
Editorial 865
Planeta Tierra llamando a la Izquierda chilena
La ocasión política la pintan calva para la Izquierda; la están dando, es el momento de iniciar el camino de retorno a posiciones de poder. Sin embargo corremos el riesgo de que la oportunidad y las condiciones favorables se nos escurra entre los dedos. ¿De qué se trata?
¡De volver a la acción, a la propuesta y al debate de masas!
De ponernos las pilas para levantar una alternativa política, económica, social y cultural. Sin vacilaciones ni más bla, bla, bla. El camino del infierno de los trabajadores está empedrado de palabrería y demagogia. ¡Basta ya!
La Izquierda debe estar presente en la acción política con su propia identidad, que la dan sus objetivos superiores y un programa permanentemente actualizado.
Se ha intentado convencernos que la realidad impone a la Izquierda un repliegue indefinido. Incluso borrar de nuestro pensamiento el socialismo. Sería el precio a pagar por las culpas del “socialismo real” y por el fracaso de la Unidad Popular. Pero esto es un abuso histórico que busca someternos a la voluntad del capitalismo. La atonía de la Izquierda frente a esa embestida ideológica ha provocado la atomización de las fuerzas del pueblo. Chile, sin embargo, necesita una Izquierda que defienda a todo trance los intereses de los trabajadores y trabajadoras, de los niños y ancianos, que ofrezca al país una salida sensata a la crisis generada por las coaliciones burguesas gobernantes. La salida consiste en un proceso de movilización social que cree las condiciones para convocar la Asamblea Constituyente que proponga al pueblo la nueva Constitución, madre de las nuevas instituciones y leyes.
Sin embargo la resignación ante la interminable “transición a la democracia” ha llevado a la despolitización a vastos sectores populares. Han sido víctimas indefensas de una estrategia de dominación implacable que busca estrujar hasta la última gota las energías del pueblo y hasta el último gramo las riquezas de la montaña, del campo y del mar de Chile.
La casta política se ha esmerado en apuntalar la institucionalidad y el sistema capitalista desorbitado que implantó la dictadura. Ese caserón desvencijado amenaza desplomarse y descargar una nueva tragedia sobre el pueblo. Solo la Izquierda -dotada de un proyecto distinto de país- puede orientar el esfuerzo por la democratización que abortaron las coaliciones gobernantes.
Por supuesto la alternativa de Izquierda debe nacer de los movimientos sociales y agrupaciones que defienden diversas demandas de la población. Pero no es cuestión de sentarse a esperar que ese alumbramiento se produzca en forma espontánea y casi milagrosa. Algunos deben tomar la iniciativa y producir los acercamientos entre sectores prejuiciados contra el ejercicio de la política por los vicios mostrados en su práctica.
Asimismo, debemos ser realistas a la hora de levantar la alternativa de Izquierda, sin duda. Pero esa alternativa siempre tendrá una carga revolucionaria, o no será. Su contenido la distingue de la demagogia de conservadores y reformistas. Nuestro realismo no se contenta con las migajas del “mal menor”. Por eso siempre será rebelde. No obstante, nuestra tarea consiste en articular y dar sentido a miles de experiencias que nacen del pueblo. Chile acumula valiosos ejemplos que hablan del valor e inteligencia de las masas. Lo demuestran más de un siglo de luchas sindicales, de pobladores y estudiantes, de resistencia del pueblo mapuche, de las mujeres, del movimiento gay, etc. El realismo de la Izquierda -a diferencia del “sentido común” de los lobos del hombre- siempre propondrá el cambio para abolir la explotación y la injusticia y para fortalecer las libertades y garantías del ciudadano. La Izquierda existe para luchar por libertad, justicia e igualdad. No anda con santos tapados. Proclama francamente sus objetivos y propone un camino y un método para alcanzar la victoria. Esa será siempre una conducta diáfana, porque el motivo fundamental de la Izquierda consiste en construir conciencia y la organización de millones.
Nuestro desafío consiste en retomar la iniciativa que la violencia reaccionaria aplastó hace 43 años. No se trata de repetir una historia cuyo término todos conocemos. Tenemos que escribir nuestra propia historia y en la práctica corregir los errores del pasado y los de ahora.
Hay que poner manos a la obra para construir la fuerza social y política que permita reorganizar la Izquierda. Aprovechemos la coyuntura político-electoral que se abre. No dejemos el campo libre a los demagogos de siempre, a los que han hecho del engaño una profesión. Los inicios de esta nueva etapa de construcción de Izquierda serán difíciles, pero servirán para echar bases firmes de la alternativa popular. No dejemos pasar esta oportunidad.
Las instituciones y partidos del neoliberalismo están agotados por la corrupción y por su distanciamiento del pueblo. Es el tiempo del renacer de la Izquierda.
MANUEL CABIESES DONOSO
(Editorial de “Punto Final”, edición Nº 865, 25 de noviembre 2016).
La Dirección del Partido Comunista en su laberinto
pausadamente bajo los salares
de Antofagasta, o bien
al sur, de Osorno
o hacia la cordillera, en Melipilla,
o en Temuco, en la noche
de astros mojados y laurel sonoro,
pones sobre la tierra tus oídos,
escucharás que corro
sumergido, cantando.
CUT: dialéctica de una bancarrota
La irrupción en la escena nacional del Movimiento No+AFP y la negociación del reajuste salarial del sector público, han terminado por llevar a la bancarrota a las cúpulas del sindicalismo tradicional, expresadas en la dirección de la Central Unitaria de Trabajadores (CUT).
La obsecuencia para con las representaciones “democráticas y progresistas” de la burguesía por parte de la dirección de la CUT la hicieron -y la hacen- incapaz de enfrentar firme y decididamente los dramas que aquejan a miles de trabajadores, tal como quedó de manifiesto en su decisión de no plegarse al paro del 4 de noviembre convocado por la Coordinadora de Trabajadores No+AFP y su tibio apoyo al mismo. A lo más que había llegado la Central sindical fue a levantar la demanda de una AFP estatal como solución a las míseras pensiones que entrega el sistema. Así, la exigencia de suprimir el sistema de AFP tuvo que ser levantada e impulsada desde fuera de la CUT.
El entreguismo impulsado por el Partido Comunista desde la presidencia de la CUT le hacía declarar a los trabajadores que el gobierno de la Nueva Mayoría era un decidido impulsor de las “más profundas transformaciones sociales” (sic) hechas desde la vuelta a las administraciones civiles del capitalismo, cosa que generaba la airada reacción de la derecha y el gran empresariado, razón por la cual había que cerrar filas en torno a este gobierno.
Bajo cualquier análisis serio eso era a todas luces un sinsentido. Basta tener en consideración el comportamiento histórico y reciente de los partidos que sostienen al gobierno, además del rol que juegan sus símiles en otros rincones de América Latina (Venezuela, Brasil, etc.), para darse cuenta de que el “relato” levantado por la dirigencia comunista en el seno de la organización de trabajadores no pasaba de ser una justificación del más burdo oportunismo político, sin asidero alguno en la realidad.
En el tema específico de la previsión de los trabajadores, son vanas ilusiones creer que la Nueva Mayoría pueda emprender un cambio de fondo del sistema, cuando sus ministros, altos funcionarios y cuadros pensantes van y vienen desde los directorios de las grandes empresas, AFP incluidas. Sin ir más lejos, la ex ministra del Trabajo, Ximena Rincón, formó parte del directorio de la AFP Provida después de su participación en el gobierno de Ricardo Lagos.
LA ESTRUCTURA BUROCRATICA
Ahora bien, el desprestigio de la cúpula sindical no es consecuencia exclusiva de su entreguismo a los representantes políticos de la patronal, sino también de la anquilosada y antidemocrática estructura de la CUT que impide que los reales intereses de los trabajadores se vean expresados en ella.
La bochornosa elección de la mesa directiva en septiembre pasado cobró la forma de una pugna inter burocrática de ribetes mafiosos, terminando por sepultar la credibilidad de la Central ante los ojos de los sectores populares.(1)
La estructura burocrática de la CUT es una de las razones por las que el entreguismo de su dirección puede sostenerse, sin que dicha línea le signifique perder la conducción. En otros sectores del movimiento de masas, cuyos órganos de lucha se estructuran sobre bases cualitativamente más democráticas, la implementación de dicha línea le significó al reformismo tradicional la pérdida de conducción. Este fue el caso del movimiento estudiantil, donde una vez que el PC iniciara su viraje hacia la Concertación, las Juventudes Comunistas dejaron de estar a la cabeza de las principales federaciones universitarias. Las recientes elecciones de la Fech confirman esta tendencia, relegando a la lista encabezada por las JJ.CC. al tercer lugar, por debajo de expresiones de Izquierda no necesariamente más radicales, pero si claramente desmarcadas del bloque gobernante.
Sin embargo el burocratismo de la CUT no es una barrera que inmunice completamente a la dirección sindical. Poco a poco se comienzan a evidenciar desbandes paralelos y por abajo de franjas de trabajadores cada vez más amplias, y sobre las cuales la CUT tiene poco o ningún control. El Movimiento No+AFP es uno de ellos, pero también están los casos de los trabajadores portuarios, las convocatorias paralelas del 1° de mayo con igual o más convocatoria que las del acto oficial de la CUT, y la rebelión desde las bases que sufrió la conducción de Jaime Gajardo en el Colegio de Profesores.
Dicha situación ha sido acusada por la burocracia sindical. El round con el ministro de Hacienda Rodrigo Valdés en el Congreso protagonizado por Bárbara Figueroa a propósito de la discusión del reajuste salarial del sector público se explicaría, en parte, como un intento de reposicionamiento entre los trabajadores.(2)
Sin embargo lo demagógico de la escena no basta para esconder la realidad. Al observar los datos resulta que el gobierno de la Nueva Mayoría promedia en su gestión un 0,3% de reajuste real por año, mientras que en el pro empresarial y derechista gobierno de Piñera el reajuste salarial del sector público promedió 2,1%.
La respuesta de la presidenta de la CUT fue personalizar esa responsabilidad en el ministro Valdés. Pero la verdad es que los bajos reajustes salariales del sector público han sido una constante del actual gobierno, no una excepción. De hecho un patrón similar se repite también en los reajustes del salario mínimo (ver cuadro).
LA BASE SOCIAL
Finalmente, la pérdida de protagonismo y capacidad de conducción de la CUT frente a las nuevas demandas y frentes de lucha abiertos por los trabajadores se explica también por las limitaciones de la propia base social sobre la que descansa la sindical. Parte importante de sus afiliados y sectores más activos provienen del sector público y municipal. Las organizaciones pilares de la CUT son hoy la Anef y el Colegio de Profesores.
Se trata de una base en la que tiene gran predominio el funcionariado público de planta y/o contrata del estrato administrativo, el cual está sujeto a estatutos particulares, y que por su perfil etario está parcialmente ajeno a los nuevos dramas que aquejan a los trabajadores.
A pesar de toda la capacidad de lucha mostrada en esta última negociación esta base no es del todo representativa de la fuerza de trabajo en Chile, e incluso en el mismo sector público deja fuera una parte importante de trabajadores, tales como los funcionarios a honorarios. En este último segmento se han ido constituyendo paulatinamente sindicatos independientes en paralelo a las asociaciones tradicionales de funcionarios.
SEBASTIAN ZARRICUETA CABIESES
Notas
(1) Ver Punto Final N° 860.
(2) Este “exabrupto izquierdista” de Figueroa tendría su raíz también en la necesidad de la dirigencia comunista por conservar su argumento de negociación al interior de la coalición gobernante, que es precisamente su capacidad de garantizar cierta estabilidad en la base social para el proyecto de la Nueva Mayoría a través de su ascendencia sobre el movimiento de masas. Influencia que precisamente habría salido bastante mermada en la última pasada (elecciones municipales, elecciones universitarias, etc.), y con signos de seguir deteriorándose. De hecho, el episodio no fue un simple exabrupto de la presidenta de la CUT, sino toda una línea de acción implementada desde la alta dirección del PC con el fin de medir fuerzas con los sectores conservadores de la coalición, especialmente con la DC, y determinar así las influencias relativas en vista a la próxima elección presidencial.
Reajuste real por año de las remuneraciones del sector público y del salario mínimo
Piñera Bachelet
Reajuste salarial del sector público
Año Var.% Año Var%
2010 1,7 2014 0,5
2011 1,1 2015 0,2
2012 2,9 2016 0,3*
2013 2,6 2017 --
Reajustes salario mínimo
Año Var.% Año Var%
2010 3,1 2014 2,7
2011 2,4 2015 2,7
2012 3,4 2016 2,6
2013 6,6 2017 1,9**
Fuente: Construcción propia a partir de datos del INE.
* Considera una inflación esperada para noviembre de 0%.
** Dado que el monto del salario mínimo para el próximo año ya está establecido en 270 mil pesos, se consideró una inflación anual esperada del 3%.
(Publicado en “Punto Final”, edición Nº 865, 25 de noviembre 2016).
El efecto Trump sobre el modelo chileno
Sólo con estas transformaciones en la esfera económica, porque las restantes, como la geopolítica y armamentista están todavía en la trastienda y oscuridad -aunque ya conocemos algo de su pensamiento sobre “la mentira” del cambio climático y el islamismo-, los efectos sobre el modelo global serán extensos y también profundos. La globalización financiera y comercial, la desregulación de los mercados, los tratados de libre comercio y, en especial, la profundización de ellos, tendrían sus días contados.
Trump es el resultado, la consecuencia, el fantasma que emerge luego del colapso bajo su propio peso del proceso de integración y globalización neoliberal, que ya había fracasado de manera rotunda y perversa con la insoportable continuidad de los anteriores gobiernos estadounidenses, tanto republicanos como demócratas. Ese proyecto, infinitamente hipócrita y cruel, de falsa inclusión y respeto por los derechos humanos de los pueblos y las minorías ha saltado en miles de pedazos como las bombas sobre las ciudades sirias que dejan decenas de miles de muertos y millones de refugiados que huyen desesperados a Europa. La crisis humanitaria no pudo haber llegado con Barack Obama a peores niveles en épocas de guerras no declaradas.
Un parangón similar hallamos en los efectos sociales y laborales del modelo neoliberal global. El proyecto de apertura comercial, de eliminación de aranceles, de consumo de masas, de desregulación económica en todas sus facetas, ha conducido a uno de los momentos del capitalismo contemporáneo con mayores niveles de contradicción. Las décadas neoliberales, que de paso se han caracterizado por un aumento sin precedentes de la producción industrial y sus nefastos efectos climáticos, ha llevado a las sociedades a desequilibrios inéditos en la distribución de la riqueza, con niveles de concentración propios de sociedades feudales. Un uno por ciento multimillonario se apropia de la generación de riquezas del resto de la población, que pierde día a día poder adquisitivo como otrora derechos sociales y laborales.
Este fracaso en la inclusión y en el desarrollo ha conducido al actual desastre. Un fenómeno global, perceptible con claridad por quienes tienen la voluntad y honestidad de observar y escuchar, aunque esté minimizado y rechazado por las elites políticas y económicas. Un fenómeno que en Chile no sólo ha lanzado potentes imágenes y señales, sino que ha creado abiertas tensiones entre la ciudadanía y las elites controladoras, expresadas desde un repudio generalizado a la política hasta protestas periódicas y multitudes indignadas en las calles.
DEMOCRATAS Y SOCIALDEMOCRATAS EN LA PICOTA
Tras el triunfo de Trump en Estados Unidos numerosos analistas, como Naomi Klein o Noam Chomsky, han apuntado hacia las políticas neoliberales de los últimos gobiernos demócratas como causa de la derrota de Hillary Clinton. Se generó un descontento en su momento alertado por el senador Bernie Sanders, pero finalmente absorbido por la campaña de Donald Trump. El malestar, la indignación contra el modelo neoliberal, escribió Klein en The Guardian la segunda semana de noviembre, ha sido la causa que ha dado inicio a un proceso que necesariamente tendrá que apuntar hacia otro rumbo. Aun cuando la magnitud de este cambio no lo conocemos, sí podemos afirmar que al ser impulsado desde el corazón del imperio, tendrá sensibles efectos en el resto del mundo. Klein, junto con lamentar el apoyo del Partido Demócrata a Clinton para bajar a Sanders, deplora doblemente el triunfo de Trump y llama a la creación, con carácter de urgencia, de organizaciones sociales y políticas sobre la base de un verdadero ideario de Izquierda.
Lo que tenemos ante nosotros es la instalación de un nuevo escenario que altera las reglas del juego neoliberal instalado desde los años 80 del siglo XX. La cantidad de perdedores de este paradigma han sido tantos y sus pérdidas tan grandes, que es difícil que vuelva a levantarse.
Los cambios serán mundiales y caerán con especial fuerza en Chile, una de las naciones en el mundo que desde sus orígenes desarrolló de manera extrema y totalitaria, con sesgos cuasi sacros, el modelo neoliberal. Chile es una ejemplo, incluso extremado, del paradigma de mercado levantado por los neoliberales desde la década de los 80. Bien sabemos que es el gran experimento de los discípulos de Milton Friedman, el que fue desarrollado con características extremistas y con pasmosa continuidad y profundidad durante las décadas siguientes.
El electorado estadounidense ha votado a Trump por sus propuestas para cambiar este modelo que tantas vidas e ilusiones ha dejado en el camino. Si así es en Estados Unidos, con un sistema de mercado incluso menos extremo que en Chile, no existe por estas latitudes ningún motivo de peso para razonar que aquí los efectos del modelo neoliberal han sido diferentes. Las consecuencias no sólo se expresan en las ascendentes protestas callejeras desde mediados de la década pasada, sino desde la década actual en un rechazo inédito e histórico hacia toda la clase política y las elites.
Resulta una enorme paradoja ver que hoy, en plena crisis de representatividad, y a menos de un año de las próximas elecciones presidenciales, no exista un discurso serio que relacione el profundo trance político, social y económico con la institucionalidad de mercado instalada durante la dictadura y profundizada por los gobiernos de las elites. De manera opuesta, y pese a la fuerza que han adquirido los movimientos sociales y laborales, el gran torrente discursivo, por cierto amplificado por el duopolio de la prensa escrita y los otros medios funcionales al establishment, no hace otra cosa que mirar hacia las políticas de las décadas pasadas como insumo que proyectar hacia el futuro. Un error de proporciones, que conlleva el riesgo no sólo de convertir en crónica la crisis, sino conducir al país a un colapso institucional mayor.
CHILE, EN CURSO DE COLISION
El sociólogo Carlos Huneeus escribió una columna en El Mostrador en la que da cuenta de la fractura entre la actual institucionalidad globalizadora y la ciudadanía. “Los terremotos políticos no son imprevistos y no vienen de fuerzas externas; hay indicadores que los anticipan, pero los dirigentes desconocen los problemas e ignoran los estudios que dan cuenta de fracturas existentes en la sociedad”, afirma en un texto titulado “Trump, el Brexit y los nostálgicos de los 90 en Chile”.
“¿Está Chile libre de recibir esta ola mundial, con una rebelión de los ‘perdedores’ de la globalización?” se pregunta. “En Chile, políticos y economistas de la Concertación vieron con entusiasmo la política ‘progresista’ de los demócratas y optaron más por la continuidad que por la reforma del ‘modelo’ neoliberal impuesto por la dictadura. Esta definición estratégica fue reafirmada por el presidente Lagos, que tuvo una cercana vinculación con los grandes empresarios, especialmente a través del CEP, y desarrolló -con un empuje similar al del Blair- ‘la asociación público-privada’”.
Estudios y señales han venido advirtiendo, ya desde la época del gobierno de Ricardo Lagos, que el modelo neoliberal y aquella relación público-privada vía concesiones y entrega de la economía a las grandes corporaciones, estaba haciendo agua desde varios rincones. Un fenómeno creciente que tuvo su quiebre al saltar a la luz pública las redes entre la casta política y los controladores de la economía.
El “progresismo” del que habla Huneeus está muerto. Y ni hablar de los puristas neoliberales representados en Chile por la ultraderecha de Chile Vamos. Ha quedado demostrado de manera palmaria con las políticas reformistas de la Nueva Mayoría, todas incapaces en su afán conciliador con los centros de dominación del poder económico de modificar la raíz de unas instituciones que tienen la base en el mismo Estado bajo la Constitución Política de la dictadura.
POLITICA Y NEGOCIOS
El proceso de liberalización económica ha acumulado demasiados errores para que pueda ser recompuesto. Chile tiene una distribución de la riqueza más bestial, incluso, que Estados Unidos, un desequilibrio destacado por el economista Thomas Piketty cuando estuvo aquí en 2015 y que puso a Chile -donde el uno por ciento se apropia del 35 por ciento de la riqueza-, como la nación más desigual del mundo.
El regreso a la arena política de los ex presidentes Ricardo Lagos y Sebastián Piñera atenta contra el curso de la historia. Ambas presencias se levantan como representantes del modelo de mercado globalizador en un país que clama precisamente por su erradicación. Ambas, también con agravantes, son expresiones de los aspectos más oscuros del modelo, aquellos que están en el filo de la legalidad. Por un lado Piñera, que ha hecho desde los inicios en los años 80 su fortuna con estas prácticas; en tanto Lagos, empantanado durante su gobierno en concesiones turbias y en pagos ilegales a funcionarios de su administración.
El caso Bancard, que vincula a la principal empresa financiera de Piñera con inversiones en una pesquera peruana durante los años de su presidencia, confirma al ex presidente no sólo como un representante y un gran beneficiado del modelo neoliberal globalizador, sino como uno de sus expresiones más corruptas. Con esta inversión Piñera demuestra su incontinencia ante la ambición mercantil durante sus años como presidente, se salta por encima los compromisos del fideicomiso ciego y le suma el agravante de hacerlo durante un litigio con el país vecino en la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
Lagos sigue en su misma tendencia, aquella que vincula negocios turbios bajo la lógica pública-privada. El Líbero ha denunciado que el Minsal quiere adjudicar la construcción del hospital de Marga Marga, que cobra un sobreprecio de 22 mil millones de pesos, a la empresa española OHL, cuyo presidente en Chile es Roberto Durán, cuñado de Ricardo Lagos Escobar.
En ambos casos no sólo podemos ver un evidente retroceso ante las señales que levanta el curso actual de la historia, sino que esta defensa es también una burda manera de mantener los privilegios propios y de sus redes.
PAUL WALDER
(Publicado en “Punto Final”, edición Nº 865, 25 de noviembre 2016).
No+AFP pide nueva cita con Presidenta para entregar propuesta previsional
Documento que apunta a mejorar sustancialmente las jubilaciones tanto de los trabajadores activos, como quienes ya se jubilaron a través de un sistema tripartito, público de reparto, el que aseguran, no significaría más recursos para el Estado.
Sobre este punto el vocero de la organización, Luis Mesina manifestó su desconfianza y su preocupación respecto a la forma en que el Gobierno ha abordado el debate previsional, sin tomar en cuenta la opinión de la ciudadanía y apostando por realizar cambios menores a un sistema que ha fracasado.
“A nosotros lo que nos preocupa es que el Gobierno de una vez más la espalda a la propuesta de la ciudadanía, la propuesta de los trabajadores. Son cientos de miles los que se han movilizado tras la demanda de NO+AFP, los datos son muy elocuentes, las cifras son evidentes, aquí este sistema no va a mejorar las pensiones”
En esa línea, la dirigenta de NO + AFP Carolina Espinoza enfatizó que la proposición de la Coordinadora posee fundamentos técnicos sólidos. Junto con esto, criticó al Ejecutivo apuntando a que no se está haciendo cargo de la demanda levantada por la ciudadanía.
“Estamos en un proceso de difusión de la propuesta para apropiárnosla, para defenderla, porque claramente más allá de los contenidos técnicos que son muy sólidos, muy fuertes, aquí tenemos todos y todas que dar una tremenda batalla. Claramente este Gobierno no se está haciendo cargo de la demanda, estamos viendo cómo este gobierno está siendo cómplice de un sistema absolutamente injusto”
Los dirigentes manifestaron que no tienen grandes expectativas en torno a una eventual reunión con la Mandataria, tomando en cuenta que la jefa de Estado no cumplió su compromiso de entregar información solicitada por la organización para elaborar su propuesta previsional.
Además indicaron que tienen pocas esperanzas de que sea a partir de las instituciones tradicionales desde donde emanen las respuestas y las soluciones a su demanda, la que señalan, va a ser escuchada por las instituciones del Estado en la medida en que la ciudadanía se empodere y haga sentir su voz y su presión.
En ese sentido, subrayaron que una de las estrategias y medidas concretas que ha generado éxito es el llamado a salirse de las AFP Cuprum y Provida, asegurando que esta última, ya está sintiendo los efectos de esta campaña, en donde más de 100 mil personas se han sumado al llamado.
Este lunes los dirigentes de la Coordinadora No + AFP acudirán al ex Congreso para solicitar a los presidentes de ambas cámaras que los reciban para hacer entrega de su propuesta previsional.
BRASIL
Resistencia
Más de 70 manifestantes son detenidos en Brasília en protestas
Represión ocurrió durante la votación de la Propuesta de Enmienda Constitucional que congela gastos públicos por 20 años
Represión hoy
"La última vez que la policía invadió una iglesia en Brasil fue en la dictadura"
PM de Río de Janeiro usó los balcones de la Iglesia San José como trinchera para disparar balas de goma a trabajadores
“La tropa de la PM invadió la iglesia por la puerta del fondo, para acceso de los empleados y, subiendo a los balcones, en el 2º piso, de ahí encima lanzaban bombas de gas lacrimógeno y de efecto moral y de gas pimienta. Los manifestantes se amotinaron y comenzaron a apedrear nuestro santuario de 410 años”, informó la Hermandad del Glorioso Patriarca San José, a través de una nota.
Brasil de Fato habló con la Arquidiócesis de Río de Janeiro, pero también con otros religiosos, como el monje benedictino, Marcelo Barros, escritor y teólogo, así como el historiador André Leonardo Chevitarese, profesor de la Universidad Federal de Río de Janeiro (UFRJ) y uno de los investigadores más respetados sobre religión. El objetivo es entender que representa la acción de la PM.
Según el monje Marcelo Barros, la última vez que una iglesia fue invadida por fuerzas de seguridad del Estado aconteció en 1968, durante la dictadura militar, en Salvador. “Eso ocurrió cuando un grupo de jóvenes manifestantes se refugió dentro del Monasterio de San Bento, corriendo de la represión, y los policías invadieron el local con la intención de disparar o capturar a los jóvenes que protestaban contra el régimen”, afirma el teólogo.
Mientras tanto, de acuerdo con informaciones del asesor de prensa de la Arquidiócesis, Adionel Carlos de la Cunha, en el estado de Río de Janeiro no hay noticia de ataques o de uso de la iglesia como aparato militar, ni en la época de la dictadura. “Este hecho, en los años que estoy aquí (desde 1967), fue único en la Arquidiócesis”, garantiza el asesor.
El padre Luís Corrêa Lima, profesor de Teología de la Pontificia Universidad Católica de Río (PUC-Río), afirma que los templos religiosos son lugares de amnistía política y militar. Incluso en los años duros de la dictadura, en la década de 1970, en São Paulo, hubo episodios en que el régimen no atacaba dentro de las iglesias. “Hubo un caso que ocurrió en 1978. Don Mauro Morelli, obispo auxiliar de São Paulo, substituía a don Paulo Evaristo Arns (Arzobispo de São Paulo), que estaba viajando. Hubo, en la Plaza de Sé, una protesta de amas de casa del movimiento contra el alza del costo de la vida. La policía reprimió con violencia, y don Mauro abrió las puertas de la catedral para recibir a los manifestantes. Y la policía no invadió”, relata el padre Luís Corrêa Lima.
En tiempos democráticos, esta es la primera vez que algo así ocurre en Brasil, según el historiador de la UFRJ, Andre Leonardo Chevitarese. “Nunca vi nada parecido. Estamos viviendo un Estado de represión. Esto es un escándalo. La iglesia se demoró mucho en reaccionar, el párroco debería haber exigido al comandante de la operación de la PM que los policías se retirasen de la iglesia”, argumentó el historiador.
Según relatos de los manifestantes los policías habrían permanecido largas horas dentro de la iglesia, usando las ventanas como trinchera y posición militar. “Desde las 12h30 ya había policías en la ventana de la iglesia, no me acuerdo hasta que horas se quedaron, pero fue mucho tiempo”, revela un comunicador de Mídia Ninja, que acompañó toda la protesta. En total fueron más de 6h de confrontaciones entre la PM y los manifestantes, que se extendió por varias calles del centro de la ciudad de Río de Janeiro.
El monje Marcelo Barros argumentó que la acción de la PM dentro de la iglesia representa una señal de los tiempos actuales. “Estamos en una época en que ya no se respetan más las instituciones. Una presidente electa democráticamente sufrió impeachment sin crimen. Y el presidente del Senado no cumple un orden judicial. Para que sirven entonces las instituciones?”, cuestiona.
El religioso también resalta que condena la invasión militar de cualquier templo religioso. “Existen convenciones internacionales que resguardan los templos religiosos como lugares de paz. Además de eso, en el mundo esa directriz se respeta desde la Edad Media. Pero peor que violar una iglesia, es atacar a la persona humana, a los manifestantes que están protestando por sus derechos”, resalta el religioso.
Violencia extrema
El fuerte aparato militar usado por la PM para reprimir el acto impresionó a los trabajadores. “Usaron la caballería, motos de diversos tipos, carros de choque con hombres en la parte trasera disparando, por lo menos un blindado, muchas bombas de gas lacrimógeno, de gas pimienta, de efecto moral, con fragmentos que queman la piel, incluso me quemé levemente en el brazo”, contó el integrante de Mídia Ninja entrevistado por Brasil de Fato. El profesor Leon Diniz dice que también quedó impresionado con la violencia de la PM. “El grado de violencia que vimos sólo se compara a las represiones de 2013”, afirma el profesor.
Respuesta de la PM y de la Arquidiócesis
En una primera versión sobre el episodio, el comando de la PM del Río de Janeiro informó a través de sus redes sociales que “fue necesario que policías de choque entraran en la iglesia vecina a Alerj para frenar acciones violentas en el interior y en el entorno”. Mientras, no hay relatos, imágenes o vídeos de manifestantes dentro de la iglesia, que estaba con las puertas cerradas.
Entretanto, según nota de la Arquidiócesis de Río de Janeiro, en la mañana del último día 7, el Coronel Wolney Dias Ferreira, comandante general de la PMERJ, se reunió con el cardenal arzobispo Don Orani Tempesta, pidió disculpas y se comprometió a garantizar que esta conducta no vuelva a suceder. “El comandante general de la PMERJ, con sus asesores, llegó a presentar aclaraciones y pedir una disculpa formal por lo desafortunado que pasó”, informó la Arquidiócesis, que considera que el tema superado y cerrado.
La Iglesia Católica también repudió el uso de la violencia aplicada por la PM. “El recurso a la violencia nunca es solución. Las soluciones efectivas surgen de la solidaridad, del diálogo y del sacrificio. Si grandes son los problemas, mayores deben ser nuestra capacidad de dialogar incansablemente, la fuerza de nuestra solidaridad y el cuidado, para que los más pobres no sufran una carga aun mayor con una dosis desproporcionada de sacrificio”, decía la nota de la Arquidiócesis, comandada por el arzobispo don Orani Tempesta.
Edición: Vivian Virissimo
Traducción: Pilar Troya
Unidad
Frente Brasil Popular actualiza plataforma política y convoca jornadas para 2017
Plenaria nacional del frente ocurrió en Belo Horizonte, los días 7 y 8 de diciembre
La economía y la crisis política e institucional fueron los puntos principales de discusión, que produjeron, entre otros resultados, el consenso alrededor de defender “Directas Ya” para la presidencia. Manifestaciones ya están programadas para 2017.
En el análisis económico, el FBP alerta sobre una perspectiva de depresión económica en el país. Según el economista Marcio Pochmann, que participó de la plenaria, el país está en estado de recesión. Sin embargo, las medidas adoptadas por el gobierno no electo de Michel Temer apuntan hacia una destrucción de derechos y no hacia la recuperación del país, lo que llevaría a una depresión económica.
“Hoy la industria representa sólo el 8% del PIB. En pocos años, el estado de São Paulo, polo industrial del país, perdió 400 mil empleos y más de 150 mil deben desaparecer el año que viene. Eso no se llama más recesión, sino depresión”, explica el economista.
Resultados
En la plenaria nacional se actualizaron las banderas políticas y la plataforma de propuestas para salidas de la crisis. Dentro de la plataforma constan la lucha contra el golpe y contra el gobierno de Temer, y la elección directa de presidente de la República; en defensa de los derechos de los trabajadores en la educación, salud, laborales, de la Seguridad Social, de las mujeres, negros y LGBTs; en defensa de las libertades democráticas; la defensa de una reforma política; y de la soberanía del país, contra las privatizaciones y protección de los recursos naturales.
Para 2017, serán marcadas manifestaciones contra la Reforma de la Seguridad Social, contra la Propuesta de Enmienda Constitucional 55 y demás medidas de retirada de derechos de los trabajadores. En abril debe acontecer una jornada de protestas, reforzando el calendario de luchas del Abril Rojo, ya establecido por el Movimiento de los Trabajadores Rurales Sin Terra (MST).
A partir de enero el Frente propone una serie de ocupaciones de órganos municipales con la intención de presionarlos para que se posicionen contra la Reforma de la Seguridad Social. Fue reafirmada también la convocatoria de la II Conferencia del Frente Brasil Popular para el segundo semestre de 2017.
Carta de Belo Horizonte
Como la plenaria tuvo lugar en la capital minera, la síntesis del encuentro tuvo su nombre. La “Carta de Belo Horizonte” trae los principales asuntos tratados en esos días y las banderas políticas actualizadas.
Mire la Carta íntegra:
Carta de Belo Horizonte - Primera Plenaria Nacional del Frente Brasil Popular
Pasados seis meses del acto de violencia que consumó la destitución de la presidenta Dilma Rousseff y dio paso a un presidente sin voto, el país ve agravados todos los problemas económicos y sociales, y camina al caos y la convulsión, están deteriorados, comenzando por el sector industrial, el más sensible a las crisis económicas, que, entre nosotros, ya transita de la recesión a la depresión.
El PIB se redujo en un 2,9%, en una secuencia de diez meses consecutivos de caída, y cerraremos el año con una retracción económica de 3,4%. La inversión cayó 29% y el BNDES redujo sus desembolsos en 35%. Ningún sector de la economía está respondiendo a los paliativos gubernamentales. Según la PNAD (Encuesta Nacional por muestra de Hogares, del IBGE), el desempleo en diciembre es de 12%, y tiende a continuar alto. Hoy están desempleadas 12 millones de personas y la industria paulista sumará 150 mil desempleados más en 2017.
Paralelamente, el gobierno apuesta por la desnacionalización de la economía e invierte de forma criminal en la desestructuración de la industria petrolera brasileña, uno de sus objetivos es la Petrobras, patrimonio de nuestra nacionalidad.
La federación se desmorona con la quiebra de estados y municipios, con todas sus consecuencias como el mayor deterioro de los servicios públicos, notablemente de salud, educación y seguridad pública, además del atraso de los salarios de sus servidores. Minas Gerais, Rio Grande de Sul y Río de Janeiro, tres de los estados más ricos de la federación, ya declararon ‘situación de calamidad financiera’.
En vez de enfrentar los problemas encontrados – resultado de siglos de depredación capitalista – el gobierno ilegítimo los profundiza y lleva el país a una grave crisis política, al punto mismo de la degradación institucional y de la quiebra administrativa. En medio de un estado de acefalía, está instalada una crisis de Poderes, que prenuncia el agotamiento del orden político fundado con la Constitución de 1988. Avanza un estado de excepción, antipopular, antinacional y antidemocrático, que restringe derechos de defensa, amenaza líderes políticos, dirigentes de movimientos populares y al presidente Lula. El proceso democrático, conquistado con tanta lucha por la resistencia popular a la dictadura militar, está amenazado. Nos corresponde prepararnos para la construcción del nuevo orden, democrático y popular.
Parte de nuestra lucha debe estar volcada para la formulación de un Proyecto de Brasil que se contraponga al cuadro actual, retomando el desarrollo, la distribución de la renta, el combate a las desigualdades sociales, la defensa de la economía nacional y la defensa de la democracia. Ese Proyecto de Brasil debe ser el resultado de un amplio debate en las bases sociales, de suerte que del mismo pueda participa el mayor número de brasileños.
Confiamos en la capacidad de lucha de la clase trabajadora brasileña, para, por medio de sus centrales sindicales, organizar la resistencia frente a los ataques a los derechos laborales y a la seguridad social, construyendo la huelga general.
Bajo cualquier hipótesis, la alternativa que se coloca frente al pueblo brasileño es su presencia en las calles. Fue la movilización popular la que en plena dictadura, conquistó la Amnistía; fue la presencia de nuestro pueblo en las calles la que construyó la campaña de las “Directas Ya” y aseguró la convocatoria de la Constituyente.
Solamente la unidad de las fuerzas progresistas y populares puede resistir los ataques a la democracia y al mismo tempo construir fuerza política para implementar un programa de desarrollo económico, social y político; solamente nuestra unidad puede enfrentar y derrotar al actual gobierno y a las fuerzas económicas reaccionarias que lo controlan. Solo el voto popular puede superar esta crisis político-institucional y apuntar hacia un nuevo orden político social en el interés de la Nación, del pueblo y de la democracia, viabilizando las reformas estructurales en el país.
El FBP evalúa, en un balance de sus actividades, que cumplió el papel a que se destinara en su creación, reuniendo reflexión y praxis, pero se destacó en su papel de aglutinación de las fuerzas de resistencia al golpe y ahora al gobierno Temer. Frente a los desafíos interpuestos por la coyuntura, el FPB invita a todos los brasileños a integrarse en el proceso de construcción de la II Conferencia Nacional a realizarse el próximo año.
Banderas Políticas:
1) Contra el Golpe, Fuera Temer y Directas Ya;
2) Ningún derecho menos:
- En defensa del empleo, salud, educación, de los salarios;
- En defensa de los derechos sociales (con protagonismo: LGBT, mujeres, negros y negras);
- Contra: PEC 55, Reforma de la Seguridad Social y Tercerizaciones;
3) En defensa de las libertades democráticas y contra el Estado de Excepción;
- Derecho de Lula a ser candidato;
- Contra los abusos del Poder Judicial y del Ministerio Público;
- Contra la criminalización de los movimientos y de la lucha popular;
- Contra el genocidio de la juventud negra;
- Contra el avance del conservadurismo;
4) Por una Reforma Política que amplíe la participación y la democracia popular y promover la Constituyente como un horizonte estratégico;
5) Defensa de la soberanía;
- Defensa de las estatales y bancos públicos, contra la privatizaciones;
- Defensa de las riquezas nacionales en especial la tierra, petróleo, energía eléctrica, minerales, agua y biodiversidad;
Belo Horizonte, 7 y 8 de diciembre de 2016.
Crisis política
Movimientos Populares ingresan con pedido de impeachment de Temer
Entidades y juristas argumentan que el presidente no electo cometió crimen de responsabilidad
Movimento dos Trabalhadores Rurais Sem Terra (MST)
Central Única dos Trabalhadores (CUT)
União Nacional dos Estudantes (UNE)
Movimento dos Trabalhadores Sem Teto (MTST)
Mídia Ninja
Fora do Eixo
Intersindical
União de Negros e Negras pela Igualdade (Unegro)
União Brasileira de Mulheres (UBM)
Central de Movimentos Populares (CMP)
Articulação dos Povos Indígenas do Brasil (Apib)
Confederação Nacional das Associações de Moradores (Conam)
Associação Nacional dos Pós-Graduandos (ANPG)
Comunidades Negras Rurais Quilombolas
Levante Popular da Juventude
Juristas
URUGUAY
Documentos desclasificados de la CIA señalan que los militares uruguayos planificaban quedarse en el poder hasta 1986
En los documentos elaborados por la CIA se registra la molestia de los gobiernos del Cono Sur con las políticas “de respeto a los derechos humanos” que impulsaba Estados Unidos en 1977. Estos países “tienen la percepción de que las políticas de Estados Unidos en la región” son “inconsistentes, incoherentes y punitivas”, indica uno de los documentos.
Un informe sobre Uruguay indica que “el gobierno uruguayo considera que la legislación estadounidense que penaliza a los países que violan los derechos humanos es injusta y no tiene razón”, y que los gobiernos de la región consideran que Estados Unidos ha sido “superado por los soviéticos y está perdiendo su habilidad para liderar en Occidente”. “Los líderes militares de la región creen que la seguridad contra los terroristas de izquierda y el comunismo internacional es prioritaria frente al bienestar personal y la libertad individual”, sostiene otro documento de la CIA.
Los informes de 1978 señalan que Uruguay “ha dado algunos pasos” para “mejorar la situación” en materia de derechos humanos, aunque esta “sigue siendo compleja”. “Aunque el sistema judicial está estrangulado por los controles del Ejecutivo y está lejos de ser independiente, los tribunales militares han reducido los casos políticos y de subversivos y están ordenando liberar a cada vez más detenidos. La prensa local está empezando a reclamar con mayor libertad -aunque con cautela- un pronto retorno del gobierno civil”, detalla un informe de ese año.
En un documento se sostiene que Uruguay en un momento fue “la mayor democracia liberal de América del Sur, y ahora es la sociedad más controlada de la región”. “Para explicar esto, los líderes uruguayos sostienen que Washington no puede entender la intensidad de la lucha contra la guerrilla tupamara. Los militares uruguayos conciben esta batalla como una defensa de los valores morales nacionales, del patriotismo y del honor”, agrega el texto.
La CIA define a Gregorio Álvarez en 1978 como “el comandante en jefe del Ejército que aspira a ser presidente un día” -finalmente fue dictador en 1981-, y sostiene que hacía “esfuerzos para moverse hacia un mayor respeto” de los derechos humanos, pero un informe acota que no se sabe si los militares calificados por la CIA como “de derecha” lo dejarán. “Además, incluso si el general Álvarez es exitoso en su campaña, los militares uruguayos no tienen intención de dejar el gobierno hasta 1986. [...]. Los uruguayos esperan que una actitud nueva y positiva respecto de los derechos humanos dé como resultado mejores relaciones con Estados Unidos, pero insisten en que Washington no debería ilusionarse con proyectos de un pronto retorno a un gobierno civil”, señala el mismo documento.
Los textos también consignan la opinión -a juicio de la CIA- de la población y de los medios uruguayos sobre la dictadura. “La mayoría de la población parece apoyar a los gobiernos militares”, considera el autor del informe. “A juzgar por los comentarios en los periódicos y las conversaciones personales, la política de Estados Unidos en materia de derechos humanos ha tenido poco impacto en la población [de Uruguay] en general”, agrega. Y se lamenta de que algunos grupos políticos y organizaciones de derechos humanos hayan utilizado las nuevas políticas de Estados Unidos en esta materia para hacer “sus propias quejas”.
Los textos abundan en detalles sobre el Plan Cóndor, al que la CIA define como un “consorcio internacional de servicios de inteligencia” de Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay. Un documento señala que en Chile está el centro de la operación, y que la inteligencia chilena tiene oficiales en todas las embajadas de ese país en la región. “Los oficiales de inteligencia de Argentina y Chile han llegado a un acuerdo por el cual, si cualquier chileno se involucra en actividades terroristas en Argentina, las autoridades argentinas deben matarlo al capturarlo”, consigna un informe.
La denominada “fase tres” del Plan Cóndor, “altamente secreta”, incluye el viaje de oficiales a cualquier país del mundo para “sancionar” a los “enemigos del Cóndor” o a “terroristas de izquierda”, lo que incluye asesinatos. Se planificó en 1974.
Esta operación no se llevó adelante en su totalidad por la oposición de Brasil, en determinado momento, a actuar en Europa, consignan los informes. Pese a ello, se cometieron varios asesinatos en Europa. Un informe de 1976 indica que Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Paraguay y Uruguay acordaron “liquidar a los terroristas latinoamericanos que viven en Francia”. “Las operaciones del Cóndor en Francia serían simplemente una extensión de la cooperación, que se ha intensificado recientemente, entre gobiernos del Cono Sur para erradicar el terrorismo”, se apunta a continuación. Se aclara que “Brasil ha estado de acuerdo en participar en los aspectos de coordinación de inteligencia del Cóndor en América del Sur, pero no ha acordado participar en acciones conjuntas en Europa”.
Fuecys rechazó propuesta
Navidad con paro y ocupaciones en supermercados del país
@suena_tremendo@nataliauval para#ViruViru - http://bit.ly/2fSuqUFLos detalles se resolverán en una reunión del sindicato este viernes.
La medida responde a que no se logró que los supermercados paguen $20.000 nominales de salario mínimo retroactivos al pasado 1º de julio, que se incremente a $300 el pago anual, actualmente rondan los $180, por antigüedad y que los trabajadores cambien de categoría cada seis meses como ocurre en el Grupo Casino.
La propuesta del gobierno era de un salario mínimo nominal de $20.000 a partir del 1º de julio del año próximo y a partir de la "segunda categoría".
Adeom denuncia que se pretende culpabilizar a los trabajadores cuando existen problemas de gestión
El secretario general de Adeom, Facundo Cladera, señaló al Portal del PIT-CNT el malestar que generó en los trabajadores el hecho que se haya contratado empresas en plena etapa de negociación.
“Planteamos nuestro total descontento y molestia con respecto a ese tema de que se contrataran empresas. Por estas horas estuvimos reunidos tratando de llegar a un acuerdo y en el mismo momento que salimos del Ministerio de Trabajo se plantea el tema de la contratación de empresas que es un mecanismo totalmente violatorio de la ley” enfatizó Cladera.
Para el sindicato, el hecho fue considerado una controversia adicional a la situación que los enfrenta a las autoridades departamentales y la problemática de la gestión sin resolver en la recolección de residuos de la capital.
“Nosotros ya lo planteamos al MTSS que ni siquiera fuimos notificados de esa información en el marco de las negociaciones que estábamos desarrollando”. En términos directos, el secretario general de Adeom sostuvo que para los trabajadores fue una actitud “muy jodida”.
Cladera explicó al Portal que “nuevamente están tratando de culpar a los trabajadores por el problema de la gestión porque de hecho el Intendente está declarando públicamente que la situación de la limpieza tiene que ver con los paros de Adeom y en realidad el único paro que hicimos fue la semana pasada y acá el punto es la no realización de horas extras. La situación (de la basura) está mal, no de ahora, está en estas circunstancias desde hace tiempo, pero de esta manera lo que se pretende es culpabilizar al sindicato de los problemas de gestión que tiene la intendencia”.
Por estas horas, el sindicato analiza el camino a seguir y espera algunos avances a planteamientos en el ámbito de la negociación que se ha venido desarrollando en la Dinatra.
PIT-CNT emitió un comunicado a 24 años del rechazo a la Ley de Empresas Públicas
La economía de a pie.
LA VUELTA AL MUNDO. EN BUSCA DE INVERSORES.
miércoles, 14 de diciembre de 2016
NO ES VERDAD LA MUERTE
por José Luis Perera
El 2016 nos trajo los que todos sabíamos que algún día iba a tener que suceder: la desaparición física de Fidel. Sin duda un hecho triste para quienes lo consideramos símbolo y sinónimo de Revolución, y un icono de toda una época histórica.
La revolución no podía efectuarse, según Lenin, sin la dictadura del proletariado, durante el período de destrucción del poder burgués, y esta concepción era rechazada enérgicamente por la socialdemocracia, que se mantenía fiel a las reglas políticas de la democracia burguesa.
Fidel lo tenía claro, y la revolución cubana no transó con el capitalismo ni se aferró a las reglas políticas de la burguesía, cuestión que aún hoy es incomprendida por buena parte de quienes se consideran de izquierda.
Por aquellos años, la izquierda latinoamericana tenía claro que el camino era la revolución agraria, anti oligárquica y antiimperialista. A partir de estas premisas recién sería posible realizar las transformaciones sociales que reclamaban los pueblos explotados.
Muchos intentos revolucionarios habían fracasado antes, y muchos fracasaron después. Sin embargo, una isla heroica, a pocos pasos del amo del mundo, resistió a todos los avatares de la situación internacional, soportó la guerra fría y cuando quedó sola ante el derrumbe del mal llamado “socialismo real”, siguió resistiendo y siendo ejemplo en el mundo entero por sus avances sociales: 100% de escolarización, la esperanza de vida más alta del continente, ningún niño durmiendo en las calles, todo habitante con derecho a vivienda, el índice de desocupación más bajo, un médico cada 130 habitantes. Todo logrado mientras resistía el infame bloqueo mil veces denunciado y aún vigente.
Más allá de cualquier discurso, los hechos señalan que Fidel y la revolución cubana fueron quienes más se acercaron a los sueños de la izquierda de entonces, con todos sus aciertos y más allá de todos los errores que se le puedan señalar. Se propusieron hacer la revolución y la hicieron, y llevaron adelante el programa que habían prometido a su pueblo, la reforma agraria, la lucha sin piedad contra la oligarquía nativa y extranjera, y una lucha antiimperialista sin treguas.
Por si esto fuera poco, llevaron solidaridad internacional a otros pueblos del mundo, dando la vida en la lucha pero también llevando educación y salud.
Ningún otro grupo, partido o pueblo logró lo que logró Fidel, Cuba y su revolución (perdón por la redundancia, los tres son sinónimos). Más bien la mayoría de ellos han ido dejando prendas por el camino hasta transformarse en algo ya irreconocible en el campo de la práctica revolucionaria.
El antiimperialismo criollo se traduce en proteger las inversiones al propio imperialismo e intentar firmar un TLC con ellos.
El antiimperialismo criollo derivó en ex guerrilleros y líderes sindicales compartiendo asados en un quincho con la embajadora yanqui los primero de mayo.
Su anticapitalismo mutó en la defensa de un capitalismo “bueno”, en el discurso panfletario para los grandes medios de la burguesía mundial que los abrazan justamente por arrepentidos.
La solidaridad internacional se expresa en el envío de tropas de ocupación a Haití para proteger los intereses del imperialismo, o en la connivencia con los gobiernos de derecha para acorralar a los hermanos venezolanos, o peor aún, en el pedido de ayuda a Bush contra los hermanos argentinos.
Cuba hizo lo que tenía que hacer porque tenía un conductor que recurrió a lo mejor de su pueblo, a los principios y la fuerza moral que supera cualquier poderío militar político o económico.
Eso representa Fidel, la fuerza moral de quien confía en su pueblo y por eso está seguro de la victoria. Fidel no muere, porque Fidel y Cuba son ejemplo de dignidad y consecuencia revolucionaria, mal que les pese a quienes despeinará la historia por no haber tenido siquiera el coraje de intentar aproximarse a los sueños.
Publicado por José Luis Perera