miércoles, 12 de junio de 2019

BRASIL: ¡Mafiosos!!!!!! Los fiscales de la Lava Jato tramaron en secreto para impedir la entrevista de Lula antes de las elecciones por temor a que ayudara a “elegir a Haddad” // Filtran varios archivos que prueban que Sergio Moro se coordinó con los fiscales para encarcelar a Lula da Silva // MANUAL DE OPERACIONES BRASILGATE // Pruebas falsas y abuso de poder marca Lava Jato: así fue cómo encarcelaron a Lula // Orden de abogados de Brasil pide renuncia de Moro // HAITÍ: Miles de haitianos en las calles exigieron dimisión del presidente Moise // URUGUAY: Gas: La huelga de la dignidad // Gerardo Rodríguez (Fancap): “Quieren demonizar a los sindicatos” // CRYSOL: El Poder judicial: el gran impedimento para la justicia

BRASIL

¡Mafiosos!!!!!! Los fiscales de la Lava Jato tramaron en secreto para impedir la entrevista de Lula antes de las elecciones por temor a que ayudara a “elegir a Haddad”

Por: Glenn Greenwald, Victor Pougy
10 junio 2019 | CUBADEBATE

Un extenso lote de archivos secretos revela que los fiscales de Lava Jato, que pasaron años insistiendo que son apolíticos, tramaron para impedir que el Partido de los Trabajadores, el PT, ganara la elección presidencial de 2018, bloqueando o debilitando una entrevista preelectoral con Lula con el objetivo explícito de afectar el resultado de la elección.
Los archivos, a los que  The Intercept tuvo acceso con exclusividad, contienen, entre otras cosas, mensajes privados y grupales de la fuerza de trabajo en la aplicación Telegram. En ellos, los fiscales de la fuerza de trabajo en Curitiba, liderados por Deltan Dallagnol, discutieron formas de inviabilizar una entrevista del ex presidente Luiz Inacio Lula da Silva a la columnista del Folha de S.Paulo Mônica Bergamo, autorizada por el ministro del Supremo Tribunal Federal Ricardo Lewandowski porque, en sus palabras, ella «puede elegir a Haddad» o permitir la «vuelta del PT» al poder.
Los fiscales, que por años aseguraron no tener motivaciones políticas o partidarias, manifestaron repetidamente en los chats la preocupación de que la entrevista, a realizarse a menos de dos semanas de la primera vuelta de las elecciones, ayudaría al candidato a la presidencia por el PT, Fernando Haddad. Por eso, articularon estrategias para derribar la decisión judicial de 28 de septiembre de 2018, que la liberó -o, si se realizara, para garantizar que se estructurara para reducir su impacto político y, así, los beneficios electorales al candidato del PT.
Estas discusiones ocurrieron el mismo día en que el STF acató la petición de entrevista de Folha de S.Paulo. «En la decisión, el ministro [Ricardo Lewandowski] citó que el Pleno del STF garantizó ‘la’ plena ‘libertad de prensa como categoría jurídica prohibitiva de cualquier tipo de censura previa’.
Los diálogos demuestran que los fiscales no son actores apartidarios y apolíticos, pero sí, parecen motivados por convicciones ideológicas y preocupados por evitar el retorno del PT al poder. Las conversaciones forman parte de un lote de archivos secretos enviados a The Intercept por una fuente anónima hace unas semanas (mucho antes de la noticia de la invasión del celular del ministro Moro, divulgada esta semana, en la que el ministro afirmó que no hubo «captación de contenido» ). El único papel de The Intercept fue recibir el material de la fuente, que nos informó que ya había obtenido toda la información y estaba ansiosa por repasarlas a periodistas. La declaración conjunta de los editores de The Intercept y de Intercept Brasil explica los criterios editoriales usados para publicar estos materiales, incluyendo nuestro método para trabajar con la fuente anónima.

«Puede elegir a Haddad»

Lula, preso por la Lava Jato desde abril de 2018, haría «palanque en la cadena», «un verdadero circo», si fuera entrevistado por la Folha de S. Paulo. «¡¡¡Que chiste!!! ¡Revoltante! «, exclamó una de las fiscales. Foto: Andressa Anholete / AFP
En aquel día, la conmoción comenzó a las 10 de la mañana, cuando el grupo supo de la decisión de Lewandowski. El ministro subrayó que los argumentos usados para impedir la entrevista de Lula en la cárcel eran claramente inválidos, ya que con frecuencia entrevistas son «concedidas por condenados por crímenes de tráfico, homicidio o criminales internacionales, siendo éste un argumento iniduo para fundamentar la denegación de la solicitud de entrevista». Así, teniendo en cuenta que Lula «no [se encuentra] en establecimiento penitenciario, en que puede existir un eventual riesgo de rebelión» y tampoco «se encuentra bajo el régimen de incomunicación», el ministro decidió en favor de la entrevista.
Un clima de revuelta y pánico se extendió entre los fiscales. Creyendo que se trata de una conversación privada que jamás sería divulgada, dejaron explícitas sus motivaciones políticas.
La procuradora Laura Tessler exclamó: «¡Qué chistes! Asco !!! Allí va el chico a hacer palanca en la cárcel. Un verdadero circo. Y después de Mónica Bergamo, por la isonomía, deben venir tantos otros periodistas … y la gente aquí queda sólo haciendo papel de payaso con un Supremo como ese … «.
Otra procuradora, Isabel Groba, respondió con sólo una palabra y varias exclamaciones: «Mafiosos !!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!!».
Después de una hora, Tessler dejó explícito lo que dejaba a los fiscales tan preocupados: «sé allá … pero una conferencia antes de la segunda vuelta puede elegir a Haddad».
Mientras esos mensajes eran intercambiados en el grupo de los fiscales de la Lava Jato, Dallagnol estaba conversando en paralelo con una amiga y confidente identificada en su Telegram apenas como ‘Carol PGR’ (cuya identidad no fue confirmada por The Intercept). Lamentando la posibilidad de que Lula fuera entrevistado antes de las elecciones, los dos estaban expresamente de acuerdo en que el objetivo principal era impedir el retorno del PT a la presidencia y acordaron que rezaban para que eso no ocurriera.

No se trata de una confesión aislada. Toda la discusión, que se extendió por varias horas, parece más una reunión entre estrategas y operadores anti-PT que una conversación entre procuradores supuestamente imparciales.
Descartada la posibillidad de impedir una entrevista, ellos pasaron a debatir cuál formato traería menos beneficios políticos para Lula: una entrevista a sólas con  Mônica Bergamo, o una conferencia de prensa colectiva con varios periodistas. Januário Paludo, por ejemplo, propuso las siguientes medidas: «Plan A: intentar recurso en el propio STF: posibilidad Cero. Plan B: abrir la posibilidad para todos de hacer la entrevista el mismo día. «Va a ser una zona pero disminuye la posibilidad de que la entrevista sea dirigida.»
Otro procurador, Athayde Ribeiro Costa, sugirió expresamente que la Policía Federal maniobrara para que la entrevista fuera hecha después de las elecciones, ya que no había indicación explícita de la fecha en que ella debería ocurrir. De esa forma, sería posible evitar la entrevista sin incumplir la decisión.

Una rueda de prensa, además de diluir el foco de la entrevista, traía la ventaja de posiblemente inviabilizarla operacionalmente, como puntuó el procurador Julio Noronha horas después. También sugirió abrir la entrevista a otros presos para reducir la repercusión:

(Cuando la entrevista fue finalmente autorizada, en abril pasado, la Policía Federal, ahora bajo el mando del ministro de Justicia de Jair Bolsonaro, Sergio Moro, el ex juez que había condenado a Lula a la cárcel, intentó transformarla en una rueda de prensa. Una petición de El País acatada por Lewandowski finalmente echó por tierra el plan.)
En ningún trecho de la conversación Dallagnol, que participó en forma activa de las discusiones, o cualquier otro procurador, indicó incomodidad con las motivaciones políticas explícitas de las estrategias de la acusación. Más que eso, ese grupo de Telegram, activo por meses, sugiere que ese tipo de cálculo político era rutinario en las decisiones de la fuerza de trabajo.
En un momento, uno de los fiscales citó un artículo publicado en el sitio El Antagonista informando que la Fiscal General de la República, Raquel Dodge, no pretendía recurrir la decisión autorizando la entrevista. Los fiscales especularon inmediatamente sobre las causas de la elección de Dodge:

Parte de las discusiones trataba de vaciar una eventual petición para medios de prensa.

Los fiscales de la fuerza de trabajo estaban tan alarmados con la posibilidad de que una entrevista de Lula llevara al PT a la victoria que compartieron un artículo irónico del Antagonista. En ese día, el texto sugería que, en un eventual gobierno Haddad, «Lula sale de la cárcel y los fiscales de la Lava Jato entran en su lugar».
Los temores de los fiscales, sin embargo, fueron luego calmados. A las 22h49 del mismo día, el procurador Julio Noronha compartió otro reportaje del Antagonista, esta vez con una buena noticia: «Partido Nuevo recurre al STF contra entrevista de Lula». Una hora después, el clima era de conmemoración. El ministro del STF Luiz Fux concedió una liminar contra la entrevista, atendiendo a la petición del Partido Nuevo. En la decisión, el ministro dice que «se hace necesaria la relativización excepcional de la libertad de prensa». Januário Paludo fue taxativo: «Debemos agradecer a nuestra PGR: Partido Nuevo !!!».
Los fiscales no mostraron preocupación por el hecho de que un ministro del STF tuviera poder para suspender la libertad de prensa, o de que un partido que se dice liberal entró con una petición en ese sentido. Por el contrario, los fiscales conmemoraron la prohibición.

Por años, la Lava Jato fue acusada de operar con motivaciones políticas, partidistas e ideológicas, y no jurídicas. La fuerza de trabajo viene negándolo de forma vehemente. Ahora que sus conversaciones se están haciendo públicas, la población tendrá la oportunidad de decidir por sí misma. Las discusiones del 28 de septiembre traen indicios significativos de que la fuerza de tarea no es el grupo apolítico y apartidista de lucha anticorrupción que los fiscales y sus aliados en los medios intentan pintar.
Al contrario de lo que tiene como regla, Intercept no solicitó comentarios de fiscales y otros involucrados en los reportajes, para evitar que actuaran para impedir su publicación y porque los documentos hablan por sí mismos. Entramos en contacto con las partes mencionadas inmediatamente después de publicar las materias, que actualizaremos con los comentarios tan pronto como sean recibidos.
(Tomado de The Intercept Brasil / Traducción de RAF para Cubadebate)

Filtran varios archivos que prueban que Sergio Moro se coordinó con los fiscales para encarcelar a Lula da Silva

Publicado: 10 jun 2019 05:13 GMT | Última actualización: 10 jun 2019 05:30 GMT - RT
Se trata de tres reportajes exclusivos del portal The Intercept Brasil, que muestran "discusiones internas y actitudes altamente controvertidas, politizadas y legalmente dudosas del equipo de trabajo de Lava Jato".
El portal de noticias The Intercept Brasil publicó el pasado domingo 9 de junio tres reportajes exclusivos que revelan que el exjuez de la trama Lava Jato y actual ministro de Justicia de Brasil, Sergio Moro, se coordinó con los fiscales para encarcelar al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Dichos reportajes, que fueron preparados basándose en los archivos inéditos obtenidos por una fuente anónima, muestran "discusiones internas y actitudes altamente controvertidas, politizadas y legalmente dudosas del equipo de trabajo de Lava Jato", señala el portal.
Uno de los reportajes muestra que los fiscales hablaban abiertamente sobre su deseo de impedir la victoria en las elecciones presidenciales del 2018 del Partido de los Trabajadores (PT) y tomaron medidas para alcanzar ese objetivo.
En particular, de los mensajes entre el equipo de trabajo de Lava Jato, enviados a través del servicio de mensajería Telegram, se desprende que los fiscales —liderados por el procurador del Ministerio Público Federal, Deltan Dallagnol— discutieron formas de evitar a toda costa una entrevista de Lula da Silva a la columnista del periódico Folha de S.Paulo, Monica Bergamo, porque, de acuerdo con ellos, esta "puede elegir a [Fernando] Haddad" o permitir la "vuelta del PT" al poder.

Moro dio consejos y pistas

Otro punto denunciado por los reportajes revela la inseguridad del propio Dallagnol en relación con la acusación que llevó a Lula a prisión en abril del año pasado. "Él [Dallagnol] estaba inseguro justamente sobre el punto central de la acusación que sería firmada por él y sus colegas: que Lula había recibido de regalo un apartamento triplex en la playa de Guarujá tras favorecer a la contratista OAS en contratos con Petrobras", se señala.
Asimismo, en varias ocasiones Moro iba más allá de sus funciones, sugiriendo al procurador que cambiara el orden de las fases de Lava Jato, así como dando consejos estratégicos y pistas informales de investigación y anticipando al menos una decisión.

Reacciones

Ante estas revelaciones, la defensa del expresidente declaró que es evidente que el proceso en su contra es corrupto y exigió su libertad inmediata. Distintas figuras políticas de Brasil, como la exmandataria Dilma Rouseff, aseguran que estas informaciones prueban que la operación Lava Jato urdió una trama en contra de Lula y del PT.
Por su parte, el integrante de la secretaria operativa de ALBA Movimientos, Manuel Bertoldi, opina que la publicación de dichos reportajes aumenta la presión sobre el actual gobierno para lograr la liberación de Lula da Silva.

Filtraciones revelan 'el juego sucio' a nivel judicial para sacar a Lula de la carrera electoral

Luiz Inácio Lula da Silva, expresidente brasileño
© AFP 2019 / Miguel Schincariol
06:22 10.06.2019(actualizada a las 06:27 10.06.2019) SPUTNIK NEWS
El medio The Intercept Brasil hizo públicos los mensajes secretos que revelan la complicidad del actual ministro de Justicia y el Fiscal de Brasil para sacar a Luiz Inácio Lula da Silva de la carrera electoral en 2018.
De acuerdo con la información revelada por el medio, Sergio Moro, el actual ministro de Justicia, colaboró con los fiscales de la operación Lava Jato con el fin de fabricar las acusaciones contra Lula.
Moro, exmagistrado, y Deltan Dallagnol, fiscal, se intercambiaban de mensajes de texto para impedir la posible victoria electoral del Partido de los Trabajadores (PT), subraya The Intercept Brasil
Las conversaciones filtradas demuestran que Moro dirigió a Dallagnol para elaborar el orden en el que se debía realizar la operación Lava Jato y dio pistas a los fiscales encargados del caso. Los fiscales de Lava Jato, según The Intercept Brasil, discutían la manera de frenar una entrevista que Lula había concedido al diario Folha de Sao Paulo porque podría ayudar al PT en las elecciones del pasado octubre.
The Intercept subrayó que una fuente no identificada les compartió el material secreto y que desconocen su origen.
La investigación del caso Lava Jato llevó a la detención y condena del expresidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011) y le impidió presentarse a las presidenciales de 2018, cuando lideraba la carrera electoral, las que ganó el entonces candidato de ultraderecha  y actual presidente de Brasil, Jair Bolsonaro.
Lula está preso en la Superintendencia de la Policía Federal de Curitiba (sur de Brasil) desde el 7 de abril de 2018, por delitos de corrupción y lavado de dinero en una condena en segunda instancia.
Más: El expresidente brasileño Lula, imputado en un caso de coimas de Odebrecht


MANUAL DE OPERACIONES
BRASILGATE

Un prestigioso investigador norteamericano ganador del Premio Pulitzer difundió intercambios comprometedores por Telegram entre Sergio Moro, el juez que condenó a Lula y actual ministro de Bolsonaro, y los fiscales de la fuerza de tareas que diseñaron las falsedades que llevaron a prisión al ex presidente.
PÁGINA 12 - 10 de junio de 2019

El presidente Jair Bolsonaro y su ministro y ex juez Sergio Moro.
El presidente Jair Bolsonaro y su ministro y ex juez Sergio Moro. 
La rama brasileña de la revista web The Intercept dijo haber recibido material desclasificado con escuchas que probarían el comportamiento ilegal de las autoridades judiciales en la Operación Lava Jato, que sirvió como coartada para el golpe de Michel Temer contra Dilma Rousseff en 2016, justificó la prisión de Luiz Inácio Lula da Silva en 2018 y creó las condiciones para el triunfo del ultraderechista Jair Bolsonaro y su asunción como presidente el 1ª de enero de 2019.
Las conversaciones fueron mantenidas por el actual ministro de Justicia, Sergio Moro, que entonces era el juez instructor contra Lula, y el fiscal Deltan Dallagnol, jefe de la llamada fuerza de tareas del Ministerio Público Fiscal. 
El artículo fue escrito por Glenn Greenwald, un columnista y experto en derecho constitucional norteamericano que trabajó para el diario inglés The Guardian y posibilitó que un equipo de ese diario y del The Washington Post ganaran un premio Pulitzer en 2014 por una investigación sobre el espionaje de la Agencia Nacional de Seguridad de los Estados Unidos. Fue uno de los temas que reveló el ex miembro de la NSA Edward Snowden. Greenwald vive en los Estados Unidos y en Brasil, donde reside su pareja. 
The Intercept dijo que sus textos se basan en chats privados, grabaciones de audio, videos, fotos y documentación judicial provistos por lo que definió como “una fuente anónima”. También el caso más famoso de revelaciones que llevaron a la caída de un presidente, Richard Nixon en los Estados Unidos, tuvo una única fuente, y también anónima, que la historia conoció como “Garganta profunda”. Su identidad se supo recién a su muerte: era Mark Felt, fallecido en 2008 después de una larga carrera en el FBI, la Agencia Federal de Investigaciones de los Estados Unidos. Sus informaciones fueron claves para que los periodistas Bob Woodward y Carl Bernstein, de The Washington Post, pudieran develar la trama que se escondía detrás del espionaje a Watergate, el edificio que albergaba la sede del Partido Demócrata, de oposición a Nixon. 
The Intercept Brasil publicó tres artículos con el material en portugués y elaboró una traducción al inglés para la difusión global del escándalo que sacude a Brasil y al mundo entero: anoche los tuits sobre este verdadero Moro Gate estaban entre las primeras cuatro tendencias mundiales de Twitter. 
La web decidió publicar el material porque entendió que la significación de las revelaciones “podría tener consecuencias enormes sobre los indicios y supuestas pruebas de la Operación Lava Jato”. Recuerda The Intercept que Lava Jato no fue solo una de las llaves de la demolición del Partido de los Trabajadores de Lula y Dilma sino también el argumento para que Bolsonaro le fabricara a Moro un superministerio de Justicia con poderes de vigilancia y espionaje sin precedentes en la historia brasileña. 
Si hasta ahora Moro y Dallagnol pudieron mantener el secreto sobre cómo armaron el complot judicial, ese secreto comienza a agrietarse con los datos revelados por The Intercept.
“Los procesos judiciales viciados por el fraude en el Lava Jato deben implicar la libertad inmediata de Lula”, escribió anoche a las 21.30 Dilma Rousseff.  

Anti PT

Dallagnol es el funcionario judicial al que Lula acusó de haber armado un Power Point sin pruebas para incriminarlo. Sobre Moro, Lula suele recordar que el juez dijo haber actuado sobre la base de su convicción íntima. 
Los materiales contienen pistas de que los fiscales de la fuerza de tareas hablaban abiertamente de su objetivo de frenar un triunfo del PT en las elecciones de octubre de 2018. 
The Intercept aclaró que no incluyó en la difusión cuestiones de la vida privada de los protagonistas sino solo las informaciones que tuvieran relación con el interés público. También explicaron que, como es de práctica en otros países, “no requerimos el comentario de las altas autoridades mencionadas antes de publicar porque no quisimos advertirles por anticipado sobre nuestra tarea y porque los documentos hablan por sí mismos”. Sin embargo, la web difundió que en la noche de ayer una comunicación pública de la fuerza de tareas no desmintió el contenido. Solo dijo que había actuado con respeto de la legalidad. 
Antes de acusar a Lula por la supuesta posesión de un triplex en el balneario de Guarujá, que según la fuerza de tareas fue producto de un soborno empresario, Dallagnol se franqueó de esta manera: “Van a decir que estamos acusando sobre la base de una noticia de un diario y con indicios débiles… Entonces hay que atar el tema a algo bien fuerte. La ligazón entre Petrobrás y el enriquecimiento. Tenemos que preparar las respuestas correspondientes y tenerlas listas en la punta de la lengua”. 
Se refería a un artículo publicado por el diario O Globo en 2010, que atribuía el triplex en un balneario popular a Lula. 
Cuando Dallagnol fue criticado, Moro lo confortó: “Definitivamente las críticas a la exposición de ustedes son desproporcionadas. Siga firme”. 
Después de la decisión de la Corte Suprema de otorgarle la libertad a Alexandrino Alencar, que ocupaba la dirección de relaciones institucionales de Odebrecht, Dallagnol le preguntó a Moro que resolviera el tema en el mismo día y pusiera al directivo de la constructora otra vez en prisión. En sus mensajes con los fiscales, Dallagnol llamaba “russo” a Moro. 
En otro momento, el 21 de febrero de 2016, Moro sugirió invertir el orden de las operaciones planificadas por los fiscales. 
Dallagnol y su fuerza de tareas de 13 fiscales con sede en Curitiba, donde Moro era juez, parecía tener dudas de la solidez de la prueba. La gran duda era, justamente, si Lula había recibido como regalo el departamento en la playa para favorecer a la constructora OAS en sus contratos con Petrobrás. 
En los intercambios con sus funcionarios no aparece ninguna prueba concreta aportada por ninguno de ellos. Era importante porque, de otro modo, el caso no podría ser sustanciado en Curitiba, donde las acciones de OAS ya estaban bajo la lupa. Los fiscales de San Pablo reclamaban la competencia sobre el tema. Los paulistas ya investigaban el caso Bancoop. El grupo de fiscales de San Pablo había establecido, sin embargo, que el caso Bancoop había comenzado cuando nadie hablaba de una presunta corrupción en Petrobrás, conocido en Brasil como “petrolao”. Pero si la causa viajaba hasta San Pablo quedaría fuera de la órbita de Moro. Por eso era necesario relacionarlo con OAS y con los escándalos de Petrobras. 
En uno de los mensajes de Telegram Dallagnol dio instrucciones de cómo debía ser presentada la denuncia: “Las imágenes tienen que ser claras. Un circulo central y otros círculos alrededor, o sea evidencias de que Lula era el dueño”. Ese fue el origen del famoso Power Point que pocos días después presentaría a los periodistas.

“Chiste” 

Los fiscales llegaron a discutir formas de disminuir el impacto de una entrevista del ex presidente Lula a la columnista de la Folha de Sao Paulo Mónica Bergamo. La entrevista había sido autorizada por el ministro de la Corte Suprema (el Supremo Tribunal Federal) Ricardo Lewandowski porque esa entrevista podría “hacer que elijan a Haddad” y “permitir la vuelta del PT” al gobierno. 
Haddad es Fernando Haddad, ex ministro de Educación y candidato del PT contra Bolsonaro. Perdió en segunda vuelta a pesar de haber obtenido 47 millones de votos. 
La entrevista a Lula se realizaría menos de dos semanas antes de la primera vuelta de las elecciones.
En los diálogos entre los fiscales queda en evidencia, según The Intercept, que “los procuradores no son actores apartidarios y apolíticos sino que más bien parecen motivados por convicciones ideológicas y originados en el deseo de que el PT no vuelva al poder”. 
Convencida, en apariencia, de que los diálogos entre los fiscales se mantendrían privados para siempre, la fiscal Laura Tessler dijo el año pasado: “Parece un chiste. La entrevista se va a convertir en una cadena. Y después de Mónica Bergamo otros periodistas repetirán lo mismo. Y nosotros acá nos quedamos haciendo el papel de payasos”.
Otra fiscal, Isabel Groba, puso esto en la conversación: “Mafiosos!!!!!!!!!!!!!!!!!!”. 
Tessler dijo que una rueda de prensa de Lula “antes de la segunda vuelta puede hacer que lo elijan a Haddad”.
En paralelo, según The Intercept, Dallagnol hablaba con una amiga que en Telegram se identificaba como “Carol PGR”. PGR significa Procuración General de la República, el organismo supremo de los fiscales. 
Alarmada por la entrevista y la eventual rueda de prensa de Lula, Carol PGR envió varios mensajes a Dallagnol:
  • “Estamos en un tren sin mando y no sé qué nos espera”.
  • “La única certeza es que estaremos juntos”.
  • “Me preocupa mucho una vuelta del PT, pero le recé mucho a Dios para que ilumine a nuestra población para que un milagro nos salve”.
Cuando era evidente que la entrevista se haría igual, los fiscales hasta discutieron qué le ofrecería menos ventajas a Lula. Si una entrevista con Bergamo o una rueda con varios periodistas. 
El magistrado Januário Paludo incluso sugirió un plan: “Abrir la posibilidad de que todos hagan una entrevista el mismo día disminuiría la chance de que sea direccionada”.
Otro fiscal, Athayde Ribeiro Costa, sugirió que la Policía Federal actuase para que la entrevista se realizara después de las elecciones. La interpretación amañada sería que el permiso de la Corte Suprema se estaría cumpliendo de ese modo pero que a la Policía Federal le correspondía agendar la entrevista. “Que la agende para después”, dijo.
En ningún momento Dallagnol se mostró molesto con el tono de las opiniones de los integrantes de su fuerza de tareas que se comunicaba dentro de un grupo de Telegram. 
En alusión a Raquel Dodge, procuradora general de la República, que no quería apelar la autorización de la entrevista, dijeron: “Ella piensa que si Haddad gana la va a nombrar en el Supremo Tribunal Federal”. Y otro comentario fue éste: “Qué payasada... Adora jugar para la platea. Quiere ganar el apoyo de la prensa”. 
Los indicios sobre el complot recién empiezan. La sombra de Nixon parece proyectarse sobre Moro y Bolsonaro.
martin.granovsky@pagina12.com.ar

Publican documentos inéditos que revelan el papel político de Lava Jato contra Lula

"El restablecimiento de la libertad plena de Lula es urgente", afirmó la defensa del exmandatario tras la divulgación de los documentos inéditos que revelan que Sérgio Moro coordinó con los fiscales la prisión de Lula.

Publican documentos inéditos que revelan el papel político de Lava Jato contra Lula
Publican documentos inéditos que revelan el papel político de Lava Jato contra Lula

NUEVAS REVELACIONES 10 de junio de 2019, 09:10hs - LR21
El portal de noticias The Intercept Brasil publicó este domingo tres reportajes exclusivos que revelan que el exjuez de la trama Lava Jato y actual ministro de Justicia de Brasil, Sergio Moro, se coordinó con los fiscales para encarcelar al expresidente Luiz Inácio Lula da Silva.
Los reportajes, producidos a partir de archivos inéditos obtenidos por una fuente anónima, muestran discusiones internas y actitudes altamente controvertidas, politizadas y legalmente dudosas de la Lava Jato.
En una parte de la publicación se revela que los fiscales del Lava Jato hablaron abiertamente sobre su deseo de impedir la victoria electoral del Partido de los Trabajadores y que habían tomado acciones para alcanzar su objetivo, mientras que el juez Sergio Moro, encargado de la investigación, colaboró en secreto y sin ética con la operación de los fiscales para ayudar a establecer la carga contra Lula.
Por ejemplo también se evidencia cómo los fiscales —liderados por el procurador del Ministerio Público Federal, Deltan Dallagnol— discutieron formas de evitar a toda costa una entrevista de Lula da Silva a la columnista del periódico Folha de S.Paulo, Monica Bergamo previo a las elecciones por el temor que a través de ella Lula pudiera convencer a la gente de elegir a Fernando Haddad o permitir la vuelta del PT al poder.
Los reportajes también revelan la inseguridad del propio Dallagnol en relación a la acusación principal que llevó a Lula a prisión en abril del año pasado. “Él [Dallagnol] estaba inseguro justamente sobre el punto central de la acusación que sería firmada por él y sus colegas: que Lula había recibido de regalo un apartamento triplex en la playa de Guarujá tras favorecer a la contratista OAS en contratos con Petrobras”, se expresa.
Mientras que en varias ocasiones Moro iba más allá de sus funciones, sugiriendo al procurador que cambiara el orden de las fases de Lava Jato, así como dando consejos estratégicos y pistas informales de investigación y anticipando al menos una decisión.

“El restablecimiento de la libertad plena de Lula es urgente”

Tras la divulgación de los documentos la defensa de Lula emitió un comunicado en el que señala que los reportajes confirman las denuncian que vienen haciendo desde la condena del exmandatario.
“La actuación ajustada de los fiscales y del ex juez de la causa, con objetivos políticos, sujetó a Lula y su familia a las más diversas arbitrariedades”, señalan en el texto.
Y agregan que “nadie puede tener duda de que los procesos contra el expresidente Lula están corrompidos” y que se han violado sus garantías fundamentales y le han negado sus derechos.

“El restablecimiento de la libertad plena de Lula es urgente, así como el reconocimiento más pleno y cabal de que él no practicó ningún crimen y que es víctima de ‘lawfare’, que es la manipulación de las leyes y de los procedimientos jurídicos para fines de persecución política”, aseveran.
Por su parte la exmandataria Dilma Rousseff también se pronunció al respecto y coincidió en que la libertad de Lula es urgente.
Dilma se refiere a lo que revela la información publicada como “un fraude legal construido para condenar a Lula sin crimen y sin pruebas y para impedir su elección

Pruebas falsas y abuso de poder marca Lava Jato: así fue cómo encarcelaron a Lula

El juez Moro es un agente clave en la geopolítica a favor de EEUU
El juez Moro es un agente clave en la geopolítica a favor de EEUU (Foto: Getty Images)
Mediante una fuente anónima, The Intercept Brasil recibió un conjunto conversaciones privadas del equipo de fiscales detrás de la Operación Lava Jato con el actual Ministro de Justicia, Sérgio Moro.
Lava Jato es famoso por ser el instrumento jurídico con el que se forzó la destitución de Dilma Rousseff, se apresó al ex presidente Lula Da Silva y se proyectó a Jair Bolsonaro como un "héroe anticorrupción" en Brasil. La conexión de esta operación política con la estrategia de intervención judicial de EEUU, ha sido evidente y documentada desde el principio. 
Según la ley brasileña, reseña The Intercept, un juez debe ser neutral, imparcial y debe permitir el trabajo de los fiscales. Ese principio ético fue violentado por el juez Sérgio Moro, cabeza del Lava Jato, quien recientemente fue recompensado por apresar a Lula con el Ministerio de Justicia del gobierno de Jair Bolsonaro.
Reseña el medio que, violando la ley, Moro interfirió en la actividad del fiscal principal del Lava Jato Deltan Dallagnol. Según los archivos obtenidos, la fiscalía veía endeble las pruebas para acusar a Lula, al supuestamente recibir un apartamento del Grupo OAS, como soborno a cambio de facilitar millones de dólares en contratos con Petrobras
A falta de una prueba documental sólida, Moro conspiró con el equipo de fiscales para forzar la acusación de Lula para su posterior encarcelamiento. Tomó como prueba un artículo de O Globo de 2010, donde se acusaba (sin pruebas) a Lula de recibir un departamento. "Es bastante relevante desde un punto de vista probatorio", dijo Moro.
Influidos por Moro, los fiscales del Lava Jato utilizaron este artículo como evidencia, pero acusaron y condenaron a Lula por un apartamento en un edificio diferente, lo que demuestra que la investigación fue imprecisa y orientada políticamente para criminalizar al Partido de los Trabajadores.
Esta filtración no sólo confirma el uso político de la Operación Lava Jato, apelando a la narrativa anticorrupción. Igualmente certifica que los nuevos mecanismos de intervención de EEUU en la región, emplean al poder judicial como partido político y agencia de espionaje con el fin de destruir procesos de cambio o deshacerse de élites incómodas a sus intereses estratégicos. 

Escándalo en Brasil: fiscales del Lava Jato conspiraron por Telegram contra Lula

Fiscales del Lava Jato temían que las apariciones públicas de Lula le dieran el triunfo a Haddad sobre Bolsonaro (Foto: Rodolfo Buhrer / Reuters )
The Intercept Brasil ha recibido de una fuente anónima un conjunto de archivos y conversaciones de los fiscales de la Operación Lava Jato, ampliamente reconocida por ser la estrategia político-judicial que derribó al Partido de los Trabajadores del poder político en Brasil y con la que se encarceló (ilegalmente) al ex presidente Lula. 
Aunque sus ejecutores en primer línea, como el ahora Ministro de Justicia, Sérgio Moro, y el fiscal principal del Lava Jato, Deltan Dallagnon, defendieron esta causa judicial como "independiente" y sin "motivaciones políticas", la filtración de The Incercept apunta a todo lo contrario. 
Según la información obtenida, "los fiscales (...) dijeron explícitamente que su motivo para detener la entrevista de Lula era evitar que el PT ganara. Una de las fiscales, Laura Tessler, exclamó al enterarse de la decisión: "¡Qué broma!" Y luego explicó la urgencia de prevenir o socavar la decisión".
Tessler afirmó en sus conversaciones por Telegram que "una conferencia de prensa antes de la segunda ronda de votación podría ayudar a elegir a Haddad"
Esta conspiración se dio a raíz de que, según reseña The Intercept, "un juez de la Corte Suprema concedió una petición del periódico más grande del país, Folha de São Paulo, para entrevistar a Lula, quien estaba en prisión por cargos de corrupción", presentados por los fiscales de Lava Jato. 
Según la filtración, la decisión de la Corte Suprema hizo que cundiera el "pánico entre ellos". Comenta The Intercept que "en repetidas ocasiones se preocuparon de que la entrevista, que se realizaría tan cerca de la primera ronda de votación, ayudaría a que el PT de Haddad ganara las elecciones presidenciales. Basados explícitamente en ese temor, los fiscales (...) pasaron el día trabajando arduamente para desarrollar estrategias para anular el fallo, demorar la entrevista de Lula hasta después de la elección o asegurarse de que estuviera estructurado para minimizar su impacto político y su capacidad de ayudar". 
Esta filtración ha causado revuelo mundial, ya que podría tratarse del escándalo político más importante de la historia contemporánea de Brasil. El rol de los fiscales como actores políticos, operando coordinadamente para favorecer la candidatura de Jair Bolsonaro, nos indica que la "corrupción" nunca fue la verdadera preocupación del aparato judicial brasileño. Era Lula y su casi asegurado retorno al poder en 2018 si se le hubiera dejado presentarse en las elecciones.