- Ivanka Trump llama a los manifestantes “patriotas estadounidenses” en Twitter y luego lo borra
- Biden habla a la nación y dice que la democracia de EE.UU. está bajo un “asalto sin precedentes”
- Trump pide a sus partidarios que se “vayan a casa” pero insiste en que le robaron las elecciones
- Boris Johnson pide que terminen “escenas vergonzosas” en Washington
- The New York Times: El asalto al Capitolio se organizó en las redes sociales
- Muere una mujer tras recibir disparo en el Capitolio
- Nancy Pelosi: Conteo de votos electorales se reanudará esta noche
- Twitter bloquea la cuenta de Trump por 12 horas
- Comité Nacional Republicano condena la violencia del asalto al Capitolio
- Los senadores vuelven al Capitolio para reanudar la sesión
- Piden a Pence que inicie un proceso constitucional para destituir a Trump de su cargo
- Obama: Estaríamos engañándonos si creemos que esto ocurrió de una forma sorpresiva
- Mike Pence reanuda la sesión en el Congreso
- Facebook bloquea la cuenta de Trump durante 24 horas
Según The New York Times, Trump ha logrado hacer por la fuerza de la mafia lo que no pudo hacer en los tribunales: retrasar la certificación de su derrota. Foto: Jason Andrew / The New York Times
El Senado de Estados Unidos entró en un receso de su debate sobre los resultados del Colegio Electoral después de que violentos incidentes con un grupo de manifestantes alrededor del Capitolio obligaran a la Policía a cerrar el edificio. Según informó la agencia AP, a los periodistas presentes en la sesión parlamentaria se les dijo que permanecieran en la sala de prensa mientras se clausuraban las puertas del edificio.
Además, un anuncio especial fue hecho a través de los parlantes dentro del Capitolio cuando los legisladores debatían y se preparaban para votar que afirmaban la victoria del presidente electo Joe Biden. Debido a una “amenaza de seguridad externa”, nadie podía entrar o salir del complejo del Capitolio, según la grabación.
La policía del Capitolio dijo a los legisladores en la Cámara que sacaran máscaras antigases de debajo de sus asientos y se prepararan para ponérselas. Los agentes en la puerta principal de la Cámara baja desenfundaron sus armas cuando alguien intentó ingresar. Posteriormente ordenaron a las personas en el salón que se tiraran al piso por seguridad.
Varios cientos de manifestantes derrumbaron este miércoles las barricadas de metal que rodeaban la parte trasera del Congreso de Estados Unidos en Washington. Según The Washington Post, alrededor de la 01:00 pm un grupo de hombres con banderas de apoyo al presidente Donald Trump ingresaron violentamente a los jardines del Capitolio.
Decenas de policías se encontraban haciendo guardia alrededor del edificio pero no pudieron contener la arremetida de cientos de personas que escalaron y patearon el vallado, gritando “¡Adelante!” mientras corrían hacia la escalinata del Capitolio. Algunos pudieron cruzar la puerta de entrada, pero adentro fueron detenidos por la policía. La prensa local informó varios arrestos.
Han pasado semanas desde que los estados completaron la certificación de que Biden, un demócrata, ganó las elecciones por 306 votos del Colegio Electoral frente a los 232 de Trump. Foto: Jason Andrew / The New York Times
La cadena NBC reveló que alrededor de las 02:00 pm una multitud logró posicionarse en la escalinata, donde no está permitido que haya congregaciones de personas. Las imágenes de la televisión mostraron cómo los manifestantes ondeaban sus banderas y gritaban consignas pero no intentaban atravesar la puerta de entrada al edificio.
Dentro del edificio, el Congreso se encontraba reunido para contar los votos del colegio electoral para el presidente electo Joe Biden. Se esperaba que la certificación en el Congreso, normalmente una formalidad, se prolongara durante varias horas mientras algunos legisladores republicanos se esforzaban por rechazar algunos conteos estatales, comenzando por Arizona.
La Policía local ordenó la evacuación de dos edificios del campus del Capitolio: el James Madison Memorial Building de la Biblioteca del Congreso y el Cannon House Office Building, ambos al otro lado de la Avenida Independencia.
Las autoridades de Washington activaron al menos a 340 soldados de la Guardia Nacional para proteger a la capital federal ante la manifestación convocada para este miércoles por partidarios de Donald Trump que el presidente saliente ha descrito como “salvaje”.
La alcaldesa capitalina, Muriel Bowser, ordenó este miércoles un toque de queda desde las 6:00 pm hasta las 6:00 am del jueves.
Los grupos organizadores han calculado que unas 15 000 personas se congregarían en el centro de la ciudad cuando el Congreso se reuniera para certificar los votos del Colegio Electoral.
Partidarios de Trump escalaron estructuras metálicas frente al Capitolio este miércoles. foto: Julio Cortez / AP
Diferentes facciones que son fieles a Trump se presentaron como organizadoras de la marcha en la capital y una de ellas, March for Trump, ha convocado a sus seguidores indicando que “le toca a la ciudadanía estadounidense” impedir el fraude electoral.
Las caóticas escenas se produjeron después de que Trump se dirigiera a miles de seguidores cerca de la Casa Blanca, repitiendo sus afirmaciones infundadas de que le robaron las elecciones debido a un supuesto fraude generalizado.
Funcionarios electorales de ambos partidos y observadores independientes han dicho que no hubo fraude significativo en la contienda del 3 de noviembre, que Biden ganó por más de 7 millones de sufragios en el voto popular nacional.
Han pasado semanas desde que los estados completaron la certificación de que Biden, un demócrata, ganó las elecciones por 306 votos del Colegio Electoral frente a los 232 de Trump. Los variados desafíos de Trump a la victoria de Biden han sido rechazados por cortes de todo el país.
El Departamento de Justicia y las autoridades electorales de los estados -incluidos los que tienen gobierno republicano- han indicado que no hay evidencias de un fraude electoral generalizado y han reconocido los resultados que dieron a Biden más de 80 millones de votos frente a unos 74 millones de votos de Trump.
“Junto con el presidente Trump haremos cualquier cosa que sea necesaria para garantizar la integridad de esta elección por el bien de la nación”, afirma el grupo en su página web.
Por su parte, Million MAGA March, que se proclama como organizador oficial de la manifestación, ha invitado a sus simpatizantes a “tomar parte en el mayor acto político de Trump en la historia de Estados Unidos, con un mensaje Twitter acompañado de símbolos con la bandera del país, signos de admiración y una explosión.
También han prometido su participación milicias como Three Percentes, Proud Boys y Oath Keepers que movilizaron caravanas con estancias en varias ciudades de todo el país en su marcha hacia Washington DC, donde tendrán prohibido portar armas de fuego, como han hecho en otras demostraciones.
El grupo TheDonaldWin, en su portal de internet, ha invitado a los participantes a que “traigan sus armas” y, en la preparación para la jornada, las autoridades han colocado carteles en las áreas donde se realizará la manifestación recordando la prohibición de armas de fuego en la capital de Estados Unidos.
Enrique Tarrio, líder de Proud Boys, anunció en una declaración en la plataforma de redes sociales Parler, que los miembros de su grupo asistirían a las manifestaciones de este miércoles “con una diferencia”.
”Los Proud Boys saldrán a la calle en número sin precedentes, pero esta vez con una diferencia -explicó-. No usaremos nuestro uniforme tradicional negro y amarillo. Estaremos de incógnito y estaremos dispersos por todo el centro de Washington DC en pelotones más pequeños”.
En Twitter, Trump pidió a los manifestantes que se mantuvieran en paz. Mientras, la alcaldesa de Washington D.C., ordenó un toque de queda en toda la ciudad a partir de las 6 p.m.
La policía con armas en la mano observa cómo los manifestantes intentan irrumpir en la Cámara de la Cámara en el Capitolio de los Estados Unidos el miércoles 6 de enero de 2021 en Washington. Foto: J. Scott Applewhite / AP
The New York Times, por su parte, reportó que un artefacto explosivo fue encontrado en la sede del Comité Nacional Republicano en Washington y la sede del Comité Nacional Demócrata fue evacuada luego del descubrimiento de un paquete sospechoso.
El dispositivo que se encontró en el Comité Nacional Republicano fue una bomba de tubo que fue destruida con éxito por un escuadrón de bombas, según dijo un funcionario. En cambio, el paquete en el Comité Nacional Demócrata aún no ha sido identificado.
Ambos comités tiene su sede a pocas cuadras del Capitolio de los EE. UU.
Según información de CNN, un video grabado mostró a algunos manifestantes rompiendo el vidrio de una ventana y luego trepando por el cristal roto. Múltiples agentes han sido heridos y transportados al hospital.
Ivanka Trump llama a los manifestantes “patriotas estadounidenses” en Twitter y luego lo borra
Ivanka Trump llamó a los manifestantes “patriotas estadounidenses” en Twitter y luego borró su mensaje. Lo hizo al retuitear un contenido de su padre.
Añadió que “la violencia debe cesar de inmediato. Por favor, sean pacíficos”, escribió Ivanka Trump. Minutos después de recibir críticas en Twitter por llamar “patriotas” a los agitadores, eliminó el tuit.
Biden habla a la nación y dice que la democracia de EE.UU. está bajo un “asalto sin precedentes”
Esto no es disenso. Es desorden. Es caos. Limita con la sedición. Y debe terminar ahora, sostuvo Biden. Foto: Susan Walsh / AP
El presidente electo Joseph R. Biden Jr. dijo que la violación del edificio del Capitolio por parte de los partidarios de Trump fue “un asalto al estado de derecho como pocas veces lo hemos visto” y pidió al presidente Trump que denuncie de inmediato a la mafia que había invadido el edificio, destrozó oficinas y obligó a los legisladores a evacuar.
“En este momento, nuestra democracia está bajo un asalto sin precedentes, diferente a todo lo que hemos visto en los tiempos modernos”, dijo Biden en una conferencia de prensa en Delaware. “Un asalto a la ciudadela de la libertad, el propio Capitolio”.
Biden exigió expresamente que Trump, quien en los últimos días había animado a sus seguidores a manifestarse en Washington, saliera a la televisión y “exigiera el fin de este asedio”.
Mientras Biden hablaba, la Guardia Nacional estaba siendo desplegada en la ciudad mientras miles de partidarios de Trump continuaban invadiendo el Capitolio.
Biden dijo que las escenas caóticas “no representan quiénes somos”, y calificó a las personas que habían causado estragos en el Capitolio como “un pequeño número de extremistas dedicados a la anarquía”.
“Rodea la sedición. Y debe terminar, ahora”, dijo.
Poco después de las declaraciones de Biden, Jon Ossoff fue declarado ganador en su carrera por el Senado contra el senador David Perdue en Georgia, dando a los demócratas el control del Senado.
Trump pide a sus partidarios que se “vayan a casa” pero insiste en que le robaron las elecciones
La Cámara de Representantes y el Senado de EEUU, en receso de emergencia ante el ingreso de manifestantes seguidores del presidente Donad Trump al Capitolio, el edificio sede del Congreso federal en Washington. Foto: Saul Loeb / AFP
Después de semanas de promover la manifestación del miércoles en Washington, y permanecer en gran parte en silencio mientras sus partidarios irrumpieron violentamente en el Capitolio, el presidente Trump emitió un video instándolos a “irse a casa en paz” incluso mientras continuaba con su falso argumento de que las elecciones le habían sido robadas.
Cuando una mafia pro-Trump entró en el Capitolio, rompió ventanas y obligó a los legisladores y a otras personas a huir, Trump había evitado aparecer públicamente y, en cambio, instó a sus seguidores dos veces en Twitter a respetar la aplicación de la ley. Solo publicó un video después de que el presidente electo Joseph R. Biden Jr. lo llamara a “exigir públicamente el fin de este asedio”.
En el video publicado en Twitter, Trump les dijo a sus partidarios: “Tienen que irse a casa ahora” y dijo que “tenemos que tener paz”. Pero también pasó una gran parte del video afirmando falsamente que la elección fue fraudulenta.
Según reporta The New York Times, Twitter adjuntó una advertencia al video que decía que sus afirmaciones eran “disputadas” y que el tweet no podía ser compartido o respondido “debido al riesgo de violencia”.
Trump concluyó el video diciendo que sus seguidores deberían ser pacíficos. “Así que vayan a casa”, les dijo. “Te amamos. Eres muy especial”.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) January 6, 2021
Twitter bloqueó la posibilidad de retuitear y dejar respuestas bajo el video publicado por el presidente de EE.UU. La red social precisó que las restricciones impuestas se deben al riesgo de violencia, ya que el presidente saliente no se ha limitado a pedir a sus seguidores que se vayan a casa, sino que vuelve a afirmar que las elecciones presidenciales le fueron robadas.
Simultáneamente, Twitter anunció que limitará el alcance de los tuits que contribuyan a los disturbios en el Capitolio.
Boris Johnson pide que terminen “escenas vergonzosas” en Washington
La policía de Washington confisca 5 armas y arresta al menos a 13 durante una violenta protesta en el Capitolio. Foto: Leah Millis / Reuters
El primer ministro británico Boris Johnson pidió que terminaran las “escenas vergonzosas” en Washington, donde manifestantes irrumpieron el miércoles en el Capitolio de Estados Unidos en un intento de revertir la derrota en las elecciones del presidente Donald Trump.
“Escenas vergonzosas en el Congreso de Estados Unidos”, dijo Johnson en Twitter. “Estados unidos representa la democracia en todo el mundo y ahora es vital que haya un traspaso de poder ordenado y pacífico”, agregó.
Los agentes han recuperado cinco armas y arrestado al menos a 13 personas durante las protestas de esta jornada en el Capitolio, informó el jefe de Policía de Washington D.C., Robert Contee, quien calificó los sucesos como un motín.
La Policía utilizó gases lacrimógenos y granadas aturdidoras para dispersar a los manifestantes y sacarlos de los predios aledaños al Capitolio.
El sargento de armas, responsable de la seguridad del Congreso, ha dicho a los legisladores y periodistas que el Capitolio ahora es seguro, aunque los legisladores, el personal y los reporteros continúan refugiándose en gran parte del complejo del Capitolio.
Legisladores de ambos partidos han pedido que se reanude el proceso de certificación de los votos del Colegio Electoral con la seguridad del edificio. Aún no se sabe si y cuándo comenzará.
The New York Times: El asalto al Capitolio se organizó en las redes sociales
El Senado de Estados Unidos entró en un receso de su debate sobre los resultados del Colegio Electoral después de que violentos incidentes con un grupo de manifestantes alrededor del Capitolio obligaran a la Policía a cerrar el edificio. Foto: AFP
Justo después de la 1:00 p.m., cuando el presidente Trump terminó su discurso a los manifestantes en Washington pidiéndoles que marcharan hacia el Congreso, sus partidarios en redes hicieron cientos de llamados a asaltar el edificio.
En los sitios de redes sociales solicitados por la extrema derecha, como Gab y Parler, se intercambiaron comentarios sobre qué calles tomar para evitar a la policía y qué herramientas llevar para ayudar a abrir puertas. Al menos una docena de personas apostaron sobre portar armas en los pasillos del Congreso.
Los llamados a la violencia contra los miembros del Congreso y a los movimientos pro-Trump para retomar el edificio del Capitolio han estado circulando en línea durante meses. Con el apoyo de Trump, que ha cortejado a movimientos marginales como QAnon y los Proud Boys, los grupos se han organizado abiertamente en las redes sociales y han reclutado a otros para su causa.
Este miércoles -explica The New York Times- su activismo en redes se convirtió en violencia en el mundo real, lo que llevó a escenas sin precedentes de turbas que paseaban libremente por los pasillos del Congreso y subían fotografías de celebración de ellos mismos, alentando a otros a unirse a ellos.
En Gab, documentaron haber ingresado a las oficinas de miembros del Congreso, incluida la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi. Docenas publicaron sobre la búsqueda del vicepresidente Mike Pence, quien había sido blanco de la ira de Trump más temprano ese día.
A las 2:24 pm, después de que Trump tuiteó que Pence “no tuvo el coraje de hacer lo que debería haberse hecho”, decenas de mensajes en Gab pedían a los que estaban dentro del edificio del Capitolio que persiguieran al vicepresidente. En los videos subidos al canal, se podía escuchar a los manifestantes gritando “¿Dónde está Pence?”
A medida que Facebook y Twitter comenzaron a tomar medidas enérgicas contra grupos como QAnon y Proud Boys durante el verano, migraron lentamente a otros sitios que les permitieron llamar abiertamente a la violencia, dijo el diario estadounidense.
Renee DiResta, investigadora del Observatorio de Internet de Stanford que estudia los movimientos en línea, dijo que la violencia de este miércoles fue el resultado de movimientos en línea que operan en redes sociales donde la gente creía que las acusaciones de fraude electoral y de robo de las elecciones a Trump.
“Estas personas están actuando porque están convencidas de que se robaron unas elecciones”, dijo DiResta. “Esta es una demostración del impacto en el mundo real de las cámaras de eco”.
Añadió: “Este ha sido un repudio sorprendente de la idea de que hay un mundo en línea y un mundo fuera de este y que lo que se dice en redes se mantiene en línea de alguna manera”.
Muere una mujer tras recibir disparo en el Capitolio
Los partidarios del presidente de los Estados Unidos, en el capitolio después de violar la seguridad. Foto: Jim Lo Scalzo / EPA / EFE
Una mujer que recibió un disparo dentro del edificio del Capitolio después de que fuera invadido por una turba pro-Trump murió, dijeron este miércoles funcionarios de la policía de Washington DC.
La mujer no ha sido identificada y no se ha divulgado información sobre quién pudo haberle disparado. El jefe Robert J. Contee del Departamento de Policía Metropolitana dijo anteriormente que ella era un civil y que sus oficiales estaban dirigiendo la investigación.
La mujer fue declarada muerta en un hospital local, dijo en un correo electrónico Dustin Sternbeck, portavoz del departamento de policía. Sternbeck dijo que aún no sabía quién le disparó ni tenía otros detalles.
Un video publicado en Twitter el miércoles temprano parecía mostrar un tiroteo en el Capitolio. La mujer pareció trepar a una pequeña repisa junto a una puerta dentro del edificio inmediatamente antes de que se escuchase un golpe fuerte. La mujer, envuelta en una bandera, cayó al suelo en lo alto de una escalera. Un hombre con un casco y un rifle de estilo militar se paró junto a ella después de que se cayó, y se escucharon gritos de “policía” cuando un hombre de traje se acercó a la mujer y se agachó junto a ella.
Charles Ramsey, exjefe de la Policía Metropolitana de la ciudad de Washington, calificó el ingreso de manifestantes pro-Trump al Capitolio de Estados Unidos este miércoles como “lo más cercano a un intento de golpe de Estado que este país jamás haya visto”.
Cuando la CNN le preguntó qué debería hacer el presidente Trump, Ramsey respondió: “Lo que me gustaría que hiciera el presidente es que se callara y se apartara del camino”.
Nancy Pelosi: Conteo de votos electorales se reanudará esta noche
Los miembros de la Guardia Nacional llegan para asegurar el área fuera del Capitolio el miércoles por la noche. Foto: Jacquelyn Martin / The New York Times
Los legisladores reanudarán el conteo de los votos del Colegio Electoral este miércoles después de que una turba de leales a Trump irrumpiera en el Capitolio, dijo la presidenta de California Nancy Pelosi, quien prometió que el ataque no podría “disuadirnos de nuestra responsabilidad de validar la elección de Joe Biden”.
Según The New York Times, la Sra. Pelosi, en una carta a sus colegas, dijo que había tomado esa decisión después de consultar con su equipo de liderazgo y una serie de llamadas con el Pentágono, el Departamento de Justicia y el vicepresidente Mike Pence. No mencionó al presidente.
“Siempre supimos que esta responsabilidad nos llevaría a la noche”, escribió Pelosi. “También sabíamos que hoy seríamos parte de la historia de una manera positiva, a pesar de las objeciones infundadas al voto del Colegio Electoral. Ahora seremos parte de la historia, ya que se dio a conocer al mundo una imagen tan vergonzosa de nuestro país, instigada al más alto nivel”.
Alrededor de 2 700 soldados de la Guardia Nacional de DC y 650 de Virginia, cifras más altas de lo anunciado anteriormente, se desplegarán en Washington esta noche.
Twitter bloquea la cuenta de Trump por 12 horas
Después de que el presidente Donald Trump publicara en su cuenta de Twitter varios mensajes en los que insistía en un supuesto fraude electoral que no ha conseguido demostrar en más de dos meses, la red social ha decidido bloquear la cuenta del mandatario por 12 horas y le amenaza con hacerlo de manera permanente si no borra sus mensajes más incendiarios.
"Como resultado de la situación de violencia sin precedentes y en proceso en Washington, DC, hemos requerido a @realDonaldTrump que borre tres tuits que publicó más temprano hoy por violar repetidamente nuestra política de integridad", escribió la red socail en un hilo.
Comité Nacional Republicano condena la violencia del asalto al Capitolio
Foto: Roberto Schmidt/Agence France-Presse — Getty Images
El Comité Nacional Republicano condenó "enfáticamente" en un comunicado la violencia vivida este miércoles en el asalto al Capitolio por parte de los seguidores del presidente Donald Trump., apunta El País.
"Estas escenas violentas de las que hemos sido testigos no representan actos de patriotismo, sino un ataque a nuestro país y sus principios fundamentales", se lee en el comunicado.
Más temprano, la presidenta de ese comité, Ronna McDaniel, dijo que en la política estadounidense no hay lugar para la violencia, independientemente del lado del espectro político de la que venga.
Los senadores vuelven al Capitolio para reanudar la sesión
Foto: Erin Schaff/The New York Times.
Un gran grupo de senadores de ambos partidos abandonó los espacios seguros de los terrenos del Capitolio, y el senador John Hoeven le dijo a CNN que están trabajando "en un proceso acelerado" para considerar las objeciones a los recuentos de votos estatales. Aún no se ha finalizado, dijo.
CNN le preguntó al senador Mitt Romney cuál es su mensaje para el país, y él dijo: "Unirse ante un nuevo presidente".
Cuando se le preguntó sobre los próximos pasos, el senador Lindsey Graham, aliado de Trump, dijo que deben "terminar el trabajo constitucional de confirmar a Biden y Harris".
El senador Josh Hawley no respondió cuando se le preguntó si todavía se opondría a los votos electorales de Pensilvania, y el senador Roger Marshall no respondió si todavía planeaba oponerse a los votos de las elecciones presidenciales de Georgia y Pensilvania.
Piden a Pence que inicie un proceso constitucional para destituir a Trump de su cargo
Mike Pence. Foto: Erin Schaff/Pool, via Reuters
Un grupo de presión para la industria manufacturera, una entidad que alguna vez estuvo alineada con la administración Trump, instó el miércoles al vicepresidente Mike Pence a utilizar los poderes dentro de la constitución para destituir al presidente Trump de su cargo después de que sus partidarios irrumpieron en el Capitolio de Estados Unidos.
En una extensa declaración, la Asociación Nacional de Fabricantes calificó la violenta incursión en el complejo del Capitolio como "regla de la mafia" que, según dijo, fue impulsada por Trump. El grupo de 14.000 miembros, que el año pasado honró a Ivanka Trump, la hija mayor del presidente, dijo que Trump no era apto para el cargo. "Esto es sedición y debe tratarse como tal", dijo el grupo.
"El presidente saliente incitó a la violencia en un intento por retener el poder, y cualquier líder electo que lo defienda está violando su juramento a la Constitución y rechazando la democracia en favor de la anarquía".
La asociación pidió al Sr. Pence que use un mecanismo constitucional que le otorgue al vicepresidente y a la mayoría del gabinete, los funcionarios que dirigen las agencias ejecutivas, la capacidad de declarar que el presidente es “incapaz de cumplir con los poderes y deberes de su oficina."
Tanto el Senado como la Cámara estarían obligados a aprobar tal medida por un voto de dos tercios. “El vicepresidente Pence, que fue evacuado del Capitolio, debería considerar seriamente trabajar con el Gabinete para invocar la Enmienda 25 para preservar la democracia”, dijo el grupo.
La mayoría de los que pidieron la destitución de Trump como presidente 14 días antes de que deje el cargo eran demócratas, pero hubo algunas excepciones. El gobernador Phil Scott, republicano de Vermont, dijo en Twitter que Trump debería ser derrocado.
“El tejido de nuestra democracia y los principios de nuestra república están siendo atacados por el presidente”, dijo. "Suficiente es suficiente. El presidente Trump debería renunciar o ser destituido de su cargo por su gabinete o por el Congreso".
Obama: Estaríamos engañándonos si creemos que esto ocurrió de una forma sorpresiva
"La historia recordará la violencia del día de hoy en el Capitolio, incitada por el presidente en funciones que ha estado mintiendo, sin base alguna, sobre el resultado de las elecciones, como un momento de gran deshonor y vergüenza para nuestro país. Estaríamos engañándonos si creemos que esto ocurrió de una forma sorpresiva".
Mike Pence reanuda la sesión en el Congreso
El vicepresidente de EE UU, Mike Pence, reanuda la sesión en el Congreso pasadas las ocho de la tarde de la costa Este. El vicepresidente garantiza el proceso, condena el asalto al Congreso y asegura que la violencia no es la respuesta a los problemas.
Chuck Schumer, líder de la minoría, describe un Congreso asaltado, con sus miembros en peligro, mientras el mundo observaba a Estados Unidos. "No eran gente que protestaban, eran terroristas que deben de ser llevados ante la ley". Schumer agradece a la policía del Capitolio el trabajo realizado para que "los delincuentes" no lograran su propósito. Dice el demócrata Schumer que la turba ha estado motivada por el presidente Donald Trump. "Esto no hubiera sucedido sin él".
Entre tanto, el senador republicano James Lankford deja claro que el Partido Republicano no aprobará lo que ha sucedido hoy en el Congreso. Con gesto serio, el senador de Oklahoma asegura que esta noche, el Capitolio certificará la victoria de Joe Biden como presidente de EE UU.
Facebook bloquea la cuenta de Trump durante 24 horas
Facebook censura a Trump.
La red social señala que ha detectado que dos de las publicaciones del presidente violaron las políticas de la red social. Mark Zuckerberg ha enviado un mensaje a sus empleados explicando la situación:
"Este es un momento oscuro en la historia de nuestra nación y sé que muchos de ustedes están asustados y preocupados por lo que está sucediendo en Washington, DC. Personalmente, me entristece esta violencia multitudinaria, que es exactamente lo que es"
Según The New York Times, Trump ha logrado hacer por la fuerza lo que no pudo hacer en los tribunales: retrasar la certificación de su derrota.
No obstante, existen sitios alternativos establecidos para que el Congreso se reúna en caso de una crisis, similar a lo que estamos viendo ahora. “Quizás puedan usar uno de esos sitios ahora. Parecería que corresponde a los líderes del Congreso de ambos partidos negarse a permitir que la certificación sea retrasada por una turba enfurecida”, dice el diario estadounidense.
Existe un historial de violencia en el Capitolio. Pero este es el ataque más significativo al edificio como símbolo nacional de la democracia desde que fue quemado por los británicos en 1814, apuntó el diario.
Policías lanzaron gas pimienta para dispersar a los partidarios del presidente de EEUU frente al edificio del Capitolio en Washington. Foto: Stephanie Keith / Reuters
Partidarios del presidente Trump se enfrentan a los oficiales de policía fuera del edificio del Capitolio en Washington este 6 de enero de 2021. Foto: Leah Millis / Reuters
Miembros del grupo de extrema derecha Proud Boys marchando al edificio del Capitolio de los EEUU en Washington el 6 de enero de 2021. Foto: Leah Millis / Reuters
Un policía sostiene la camiseta de un hombre después de un enfrentamiento fuera del edificio del Capitolio. Foto: Leah Millis / Reuters
Cientos de partidarios de Trump frente al vallado que protege al Capitolio. Foto: Leah Millis / Reuters
La policía detiene a una mujer después de los incidentes frente al Capitolio. Foto: Leah Millis / Reuters
En video, partidarios de Trump irrumpen con violencia en el Capitolio
En video, Trump dice que nunca concederá la victoria
(Con información de EFE, CNN, The New York Times y Reuters)
¿Qué pasó en el Capitolio de EE.UU.? Todos los detalles sobre la violenta manifestación de los partidarios de Trump
Partidarios de Donald Trump protagonizaron este miércoles en el Capitolio estadounidense una serie de disturbios que determinaron la suspensión de la sesión bicameral del Congreso para contar y ratificar los votos electorales que darían oficialmente la victoria presidencial a Joe Biden.
Los manifestantes rompieron la barricada protectora alrededor de la sede legislativa y lograron entrar al edificio. Como medida de seguridad, algunos congresistas se pusieron máscaras antigás, dado que los gases lacrimógenos lanzados afuera penetraron en el interior del Capitolio.
Según los reportes, los líderes del Congreso fueron evacuados del edificio y trasladados a la base militar Fort McNair, cerca de Washington. De igual manera, el vicepresidente de EE.UU., Mike Pence, fue evacuado por el Servicio Secreto a través de túneles subterráneos.
Más adelante, Pence condenó los desmanes. "La protesta pacífica es un derecho de todos los estadounidenses, pero este ataque a nuestro Capitolio no será tolerado y los involucrados serán procesados con todo el peso de la ley", aseguró.
El saldo de las protestas
Al menos una persona muerta y varios heridos fueron resultado de las protestas de esta jornada. Medios locales informaron sobre el fallecimiento de una mujer que habría recibido un disparo en el pecho durante los enfrentamientos con la Policía, y en fotos y videos algunos agentes fueron vistos con heridas en la cara.
Además, se reportó un enfrentamiento armado entre la Policía y partidarios de Trump en la puerta de la Cámara de Representantes. Los agentes cerraron los ingresos al recinto y sacaron sus armas, mientras que los manifestantes siguieron golpeando las puertas y, según informes, vandalizando el edificio.
Debido a los disturbios, la alcaldesa del distrito capitalino de Columbia, Muriel Bowser, decretó un toque de queda desde las seis de la tarde de este miércoles hasta las seis de la mañana del jueves 7 de enero.
Reacciones internacionales
La Organización de Estados Americanos (OEA) condenó y repudió los violentos incidentes ocurridos este miércoles en el Capitolio de EE.UU., señalando que se trata de un "atentado contra las instituciones" estadounidenses "por manifestantes que desconocen los recientes resultados electorales".
Por su parte, el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg, calificó de "impactantes" las protestas e instó a respetar los resultados electorales, que darían la victoria al candidato demócrata Joe Biden.
Asimismo, otros miembros de la comunidad internacional manifestaron su rechazo a los hechos de violencia registrados en Washington. "Escenas vergonzosas en el Congreso de Estados Unidos", escribió en Twitter el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson.
El primer ministro de Canadá, Justin Trudeau, manifestó que sus compatriotas están "profundamente perturbados y entristecidos por el ataque a la democracia". Bajo la misma línea se expresaron los mandatarios de Argentina, Colombia, Chile, Turquía y Venezuela, entre otros.
Respuesta de Joe Biden
Ante los violentos enfrentamientos entre partidarios de Trump y la Policía, el presidente electo, Joe Biden, se dirigió a la nación. "En este momento nuestra democracia está bajo un asalto sin precedentes, diferente a todo lo que hemos visto en los tiempos modernos", aseveró el líder demócrata.
Trump llama a la calma
El todavía presidente en ejercicio, Donald Trump, instó a sus partidarios a que abandonaran sus protestas en el Capitolio. "Tenemos que tener paz. Vayan a casa. Los queremos. Son muy especiales", dijo el presidente estadounidense a través de un video publicado en Twitter.
No obstante, el mandatario saliente siguió insistiendo en que hubo fraude electoral. "Tuvimos una elección que nos fue robada, fue una elección aplastante y todos lo saben, especialmente el otro lado", afirmó antes de llamar a sus seguidores a salir de la sede legislativa.
Cuatro horas de tensión
Después de cuatro horas de tensión, el Sargento de Armas de la Cámara de Representantes, Paul Irving, aseguró a los miembros del Congreso que los manifestantes había sido desalojados y el edificio era seguro.
La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, anunció entonces que los líderes del Congreso decidieron reanudar esta misma noche la sesión conjunta para certificar la victoria del presidente electo, Joe Biden.
Los hechos más raros de las protestas
Múltiples usuarios de las redes sociales reaccionaron este miércoles frente a los hechos más insólitos de las protestas escenificadas en Washington. Tras los desmanes, los internautas generaron una ola de memes en los que cuestionan la seguridad de la sede legislativa y el inicio del 2021, un año para el que se esperaba más tranquilidad en comparación con el anterior.
Ciertos manifestantes fueron protagonistas de las protestas debido a su particular vestimenta, que parecía haber salido de una película de ciencia ficción. Entre ellos, Batman y varios vikingos con extraños sombreros y escudos se apoderaron de las instalaciones del Congreso.
Un escándalo mundial promovido por el mandatario saliente
Manifestantes proTrump rompen el cerco de seguridad y se cierra el Congreso
La sesión especial del Congreso de Estados Unidos para validar la victoria electoral de Joe Biden tuvo que ser suspendida luego de que una manifestación de seguidores del presidente saliente Donald Trump se enfrentara con la Policía en las afueras del edificio y varios de ellos lograran ingresar al Capitolio. "Una turba irrumpió en el Capitolio de Estados Unidos para revertir una elección. Un golpe en marcha", denunció un legislador a través de las redes sociales.
En el mismo tono que varios legisladores, el líder de
los demócratas en el Senado, Chuck Schumer, denunciara que los
congresista que aún responden a Trump están respaldando un "intento de
golpe". Rápidamente comenzaron a viralizarse las imágenes de
manifestantes ProTrump enfrentando a las fuerzas de seguridad dentro del
edificio, que ya había sido evacuado por los legisladores.
Minutos después, el presidente electo Joe Biden ofreció una breve conferencia en la que le pidió a Trump que "dé un paso al costado" en su intento de desconocer las elecciones presidenciales de noviembre. "Las escenas de caos en el Capitolio no reprensentan lo que somos", aseguró Biden y calificó a quienes ingresaron al edificio legislativo como "un par de extremistas". "¡Tiene que terminar ahora!", exigió Biden en directa referencia a Trump.
Un demorado llamado a la paz
El presidente saliente Donald Trump había escrito un breve mensaje en su cuenta de Twitter llamando a la paz y pidiéndole a sus seguidores que respentarán "la ley y el orden" poco después de que se vieran las primeras imágenes de la irrupción en el Capitolio.
Pero luego de la conferencia de Biden, el mandatario multimillonario publicó un video de un minuto reiterando el llamado de paz, pero sosteniendo sus denuncias respecto del fraude electoral. "Sé de su dolor. Tuvimos una elección que nos fue robada, todo el mundo lo sabe, sobre todo del otro lado. Pero es tiempo de ir a casa, es tiempo de paz", les dijo Trump a sus seguidores.
Trump mantuvo las denuncias de fraude electoral desde el día en que se reconoció la victoria electoral de Biden e incluso lo había anticipado durante la campaña electoral. Y su discurso incendiario no cesó hasta minutos antes de que se produjeran los incidentes.
De hecho, él fue quien le solicitó a sus seguidores que se manifestaran en contra de la certificación de la victoria de Joe Biden en las elecciones del 3 de noviembre. Y horas antes de los incidentes mantuvo un cruce con su propio vicepresidente Mike Pence.
"Mike Pence no tuvo el coraje de hacer lo que debería haberse hecho para proteger a nuestro país y nuestra Constitución", tuiteó Trump. "¡EEUU exige la verdad!", agregó en repudio a la decisión de Pence de emitir un comunicado en el que adelantaba que no intervendría para detener el procedimiento constitucional de ratificación del triunfo de Biden.
AFP
"Es un intento de golpe y está ocurriendo en Estados Unidos"
Mientras en las afueras del Capitolio se registraban los primeros incidentes con la Policía, las autoridades legislativas declararon un cierre de las instalaciones y los legisladores comenzaron a relatar en vivo, a través de las redes sociales, lo que sucedia en el edificio y las oficinas cercanas.
"Estábamos viendo a manifestantes agredir a la policía del Capitolio", relató la legisladora republicana Nancy Mace en un tuit. "Una turba irrumpió en el Capitolio de Estados Unidos para revertir una elección. Un golpe en marcha", tuiteó la representante Val Demings.
AFP
"Esto es anarquía. Es un intento de golpe. Y está ocurriendo en Estados Unidos a causa de legisladores ilícitos", alertó el congresista Seth Moulton. Otros que también describieron el asalto como un intento golpista, acusaron a Trump de incitar a los manifestantes cuyas protestas detuvieron la confirmación en el Congreso de la victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones de noviembre.
"El presidente está incitando al terrorismo doméstico", dijo el representante Mark Pocan.
Grupos neonazis reivindican su participación en el asalto al Capitolio
Mientras que los congresistas y los analistas de los medios de comunicación conservadores continúan culpando a "grupos antifa" del asalto al Capitolio, los neonazis han estado muy atareados publicando fotos en redes sociales que documentan su participación directa en las acciones del miércoles.
"Yo estaba allí cuando sucedió", publicó una conocida cuenta neonazi estadounidense con cerca de 5.000 seguidores en Telegram, una aplicación de chat encriptada muy conocida entre los racistas organizados. Esta cuenta publicó un video de la violenta asalto al Congreso. "¡Estuve en Washington DC y puedo deciros que este es el principio del comienzo de la Revolución Blanca en los EEUU!",se pudo leer en otra de sus publicaciones. "El Sistema disparó contra los blancos que se acercaban al (Capitolio)", denunciaban, mientras se quejaban por la "traición que ha estado ocurriendo durante demasiado tiempo aquí en EEUU".
Un violento grupo de supremacistas blancos, que se autodenomina el "Club Nacionalsocialista" y está dirigida y fundada por Chris Hood, un ex miembro del grupo terrorista neonazi Base, se jactaba en las redes sociales de que no solo asistió a las protestas del miércoles por la tarde, además estaba allí para "garantizar la seguridad de los blancos".
Tras los disturbios, una de las cuentas de Telegram de este grupo
publicó fotos de un casco antidisturbios de la policía que afirmó haber
adquirido como trofeo de los sucesos del día.
Durante el verano, el mismo grupo intimidó violentamente a los manifestantes de Black Lives Matter.
Asi mismo, una tienda online neonazi publicó una foto de un seguidor con una máscara de calavera frente al Museo Smithsonian de Historia Afroamericana. (símbolo de los seguidores de Siege, un manual de insurgencia escrito en la década de 1980 que se convirtió en el documento fundacional de grupos terroristas como la Base y la División Atomwaffen).
Si bien existe una abrumadora evidencia de que los neonazis, los conspiradores de QAnon y otros ultraderechistas fueron responsables del asalto al Capitolio, los legisladores continúan pregonando narrativas ridículas de una conspiración "antifa". Los congresistas republicanos Matt Gaetz y Mo Brooks, ambos han afirmado sin fundamento que los activistas antifascistas fueron realmente los responsables de la violencia en Capitol Hill.
"Se hacían pasar por partidarios de Trump y, de hecho, eran miembros del violento grupo terrorista antifa", dijo el representante Gaetz en la Cámara.
VICE News.
Del Qanon de Jake Angeli a los seguidores de 'La Rana Pepe': estos son los grupos supremacistas que asaltaron el Capitolio
Estos grupos supremacistas de ultraderecha desfilaron este miércoles por Washington y acabaron irrumpiendo en el Congreso de los EEUU tras ser alentados por el presidente saliente, Donald Trump, de quienes son acérrimos defensores.
washington
07/01/2021 22:25 manuel ruiz rico @ManuelRuizRico - PÚBLICOQanon, The Proud Boys, The Patriots, The Kek Flag, The Three Percenters, el movimiento Stop the Steal, el National Anarchist Movement. Son los principales grupos supremacistas de ultraderecha que desfilaron el miércoles por Washington y que acabaron rodeando y asaltando el Congreso de los Estados Unidos tras ser alentados por el propio presidente saliente, Donald Trump, de quienes son acérrimos defensores.
Al grupo conspiracionista Qanon pertenece, de hecho, el hombre cuya imagen no ha dejado de aparecer en los periódicos y televisiones de todo el mundo, con el torso tatuado descubierto y la cabeza y la espalda protegidos con la piel de un búfalo provisto de una notable cornamenta. Se presenta como el chamán de Qanon, se hace llamar Yellowstone Wolfe (El Lobo de Yellowstone) y dice que su papel en este mundo es revelarnos la verdad al resto de los mortales. Su nombre real es Jake Angeli y procede de Arizona.
Precisamente, Arizona es uno de los estados cuyo resultado electoral ha cuestionado Trump desde el principio; un resultado que ayer seis senadores republicanos trataban con denuedo de impugnar en el Congreso que fue asaltado. En dicha operación trumpiana, liderada por el senador por Texas Ted Cruz, estuvo involucrado, no por casualidad, el senador por Arizona, Tommy Tuberville. No es de extrañar tampoco el origen de los otros cuatro senadores que participaron en esta estratagema: de Misuri es Josh Hawley; de Kansas, Roger Marshall, mientras que Cindy Hyde-Smith y John Kennedy representan a Mississippi. Portavoces de la América profunda y el sur reaccionario.
El grueso de los asaltantes, de esos "terroristas domésticos", como los llamó, entre otros, Hillary Clinton, provenían, no por casualidad, de esos estados del sur y del Medio Oeste además de California, Arizona y Florida, estados también muy demócratas (Biden ha ganado en los dos primeros y Florida es un estado bisagra) pero donde campan grupos extremistas muy sólidos y de tradición.
Dichos grupos son fácilmente reconocibles porque además de portar ostensibles logos y lemas de sus organizaciones suelen exhibir símbolos como la bandera confederada o la bandera de La delgada línea azul (la tradicional del país a la que le añaden una línea de dicho color en medio en apoyo a la policía; muy usada por grupos neonazis) o la soga y la horca: pero no una foto o un dibujo de una soga o una horca, sino como un patíbulo en toda regla que montan ceremoniosamente allá por donde van, como hicieron en el entorno del Congreso antes de asaltarlo. Como declaración de intenciones, un patíbulo no deja muchos huecos en blanco en el que un inocente espectador pueda arriesgar sus toscas cualidades interpretativas.
Entre las consignas que portaron el miércoles en Washington destacó también el We the People (Nosotros, el pueblo) de la Constitución estadounidense, ese pueblo para el que se aprobó en 1791 la segunda enmienda, que es una defensa de la violencia en tanto que afirma el derecho a portar armas. Dice así: "Siendo necesaria una milicia bien ordenada para la seguridad de un estado libre, no se violará el derecho del pueblo a poseer y portar armas". El recurso a emplearlas, por lo tanto, no se aprobó para que uno se defienda de quien atraca su hogar: se aprobó para que el pueblo se defienda de un gobierno o unas instituciones federales corruptas y tiranas.
Por eso asaltaron el Congreso el miércoles.
Estos son los grupos que lo hicieron y sus principales representantes:
Qanon y Jake Angeli
La conspiración Qanon comenzó en 2017 en la web 4chan, una fuente inagotable de historias falsas y amenazas. Q sería el nombre en clave de una persona que habría sido un alto funcionario de inteligencia. El susodicho escribe entradas no muy claras pero intrigantes sobre un presunto evento inminente en el cual las élites pedófilas y dominantes del mundo, pues así son calificadas, serán arrestadas y la verdad nos será revelada. Q llama a ese evento La tormenta o El gran despertar.
Con semejantes mimbres, la cosa fue creciendo hasta el punto de que Trump no tuvo menos que darles pábulo y acabó legitimándolos, aunque sea para el sector más reaccionario del partido republicano y de la sociedad estadounidense. La operación dio sus frutos: dos seguidores de esta conspiración, Marjorie Taylor Greene y Lauren Boebert, lograron obtener sendos escaños en la Cámara de los Representantes en las pasadas elecciones presidenciales.
En cuanto a su chamán preferido, Jake Angeli, El lobo de Yellowstone, procede de Arizona, se unió al movimiento poco después de su nacimiento y suele recorrer Estados Unidos con un cartel que dice: Q me ha enviado. Según contó el medio The Arizona Republic en octubre de 2020, Angeli explica con la misma solvencia con que un físico explica las leyes de la gravedad que Q fue un agente del gobierno que quiere nada menos que "quitar el control del país a pedófilos y globalistas. La bola de nieve", añadió, "no ha parado de rodar y es cada vez más grande. Nosotros somos ahora la corriente oficial".
Angeli admitió a The Arizona Republic
que llevaba esa piel y su cornamenta y el torso tatuado y desnudo para
llamar la atención y así poder atraer a la gente y hablarles de Qanon y
las verdades ocultas de la presunta conspiración. Según dicho
medio, Angeli ha participado activamente durante el último año en
eventos de grupos de la extrema derecha en su estado, Arizona, donde ha
extendido las acusaciones infundadas de fraude electoral promovidas por
Trump en las elecciones de noviembre en dicho territorio.
Proud Boys
Los Chicos Orgullosos fueron creados por el cofundador de Vice Media Gavin McInnes, un activista británico-canadiense de extrema derecha. Alcanzaron relevancia nacional especialmente después de que Trump los nombrara estentóreamente en el primer debate presidencial, alusión que fue muy criticada por la mayoría del Partido Conservador en el Senado. Con todo, Trump los menciona directa o indirectamente en sus mítines, en este caso, con declaraciones de apariencia intachables como: "Nosotros somos gente orgullosa de su país", como hizo el lunes en Georgia.
Se trata de un grupo de extrema derecha, antiinmigrante, compuesto sólo por hombres, en su mayoría armados, y con un amplio historial de violencia urbana fundamentalmente contra grupos de extrema izquierda, sus enemigos declarados. El nombre del grupo hace referencia a una canción del musical Aladino y la lámpara maravillosa y sus miembros suelen llevar un polo Fred Perry negro y amarillo y gorras rojas con el lema Make America Great Again. Según el movimiento, un Proud Boy debe declarar que es "un chovinista occidental que rechaza pedir perdón por haber creado el mundo moderno".
El líder de este
grupo es, ni más ni menos, que Enrique Tarrio, de Florida y descendiente
de cubanos. Fue detenido el lunes por la policía de Washington por
haber arrancado en diciembre un cartel de Black Lives Matter en
una iglesia de la capital, y el martes un juez lo puso en libertad con
cargos, pero bajo la prohibición de que permaneciera en la ciudad, en
previsión de que sucedieran los disturbios y revueltas que acabaron
aconteciendo.
The Patriots
Es un movimiento de extrema derecha relativamente informal y no organizado surgido en los años 90. Está formado por grupúsculos o milicias locales o estatales. Una de las primeras y de las más destacadas es la Milicia de Montana, creada en 1994 por John Trochmann, un supremacista blanco. Son también conspiranoicos: cuando George Bush padre aseguró en 1990, tras la caída del Muro de Berlín, que empezaba un "nuevo orden mundial", el movimiento patriota creyó ver en esto un lapsus que dejaba entrever unos planes secretos para organizar un gobierno mundial en manos de unas élites en la sombra.
En la ideología de Los Patriotas va intrínseca la idea de que el gobierno federal de Estados Unidos concentra demasiados poderes y es corrupto y decadente; de que la América real son ellos. We the People, Nosotros el pueblo, que dice la Constitución de Estados Unidos.
The Kek Flag
Llevan una bandera
que imita la de guerra nazi, con cuatro K escritas en ella, lo que
recuerda al Klu Klux Klan. Se trata de la bandera de un país ficticio al
que llaman Kekistán y que ha sido creado por los nacionalistas y
supremacistas blancos en la web 4chan. La presunta nación está gobernada
por una deidad con cabeza de rana llamada Kek, normalmente representada
por La Rana Pepe; en inglés es literal: Pepe the Frog, escriben. Tal cual. Periodistas del Washington Post y de la CNN
constataron la presencia de al menos una persona que portaba esta
bandera en la protesta del miércoles en la capital del país.
The Three Percenters
Los Tres por
Ciento toman su nombre de una reivindicación histórica controvertida
según la cual se afirma que sólo el 3% de los estadounidenses lucharon
contra los británicos en la Guerra de la Independencia. Es un grupo
extremista dentro del llamado movimiento de las milicias del país.
Aunque es un grupo tradicionalmente antigubernamental, entre sus miembros hay muchos fervorosos seguidores de Donald Trump.
Stop the Steal
El movimiento Parad el robo comenzó el día de las pasadas elecciones presidenciales, el 3 de noviembre de 2020, cuando los partidarios de Trump protestaron para que los funcionarios electorales estatales dejaran de contar las boletas en un esfuerzo por mantener la ventaja del presidente en las primeras horas y primeros días del recuento de votos, cuando aún tenía que contabilizarse, de hecho, el voto anticipado, que se sabía mayoritariamente a favor de Biden.
Desde entonces, el
movimiento se ha convertido en una teoría conspirativa que afirma,
inspirado por Trump y sin la menor base, que el 3 de noviembre de 2020
hubo una operación fraudulenta y masiva que manipuló el resultado
electoral, vertió miles y miles votos demócratas inventados en las urnas
para arrebatarle a Trump la presidencia del país. En noviembre y
diciembre, grupos Stop the Steal ya organizaron mítines y
protestas en el Estado de Washington, Michigan, Las Vegas, Atlanta, Ohio
y la capital del país, Washington.
National Anarchist Movement
A diferencia de los grupos anarquistas tradicionales, que tienen un marcado y esencial carácter antirracista y antifascista, este Movimiento Nacional Anarquista es un grupo antisemita de extrema derecha que aboga por la separación racial dentro de la sociedad americana. Es un grupo de tipo conspiranoico también. La página web del movimiento, de hecho, asegura que "una élite de judíos y sus aliados han manipulado los acontecimientos mundiales para sus propios intereses", una presunta élite a la que se refieren como los "parásitos vampíricos".
EE.UU.: El golpe de Estado fascista fallido de Donald Trump
Las bandas fascistas prácticamente no encontraron resistencia cuando asaltaron el Capitolio
La insurrección fascista en Washington D.C. es un punto de inflexión en la historia política de Estados Unidos. Las viejas glorificaciones de la invencibilidad y la fortaleza de la democracia estadounidense han sido totalmente expuestas y desacreditadas como un mito político vacío. La popular frase «Esto no puede suceder aquí», ha sido superada decisivamente por los acontecimientos. Ahí no solo puede ocurrir un golpe fascista. Ocurrió ayer, en la tarde del 6 de enero de 2021. Además, incluso si el esfuerzo inicial no ha alcanzado su objetivo, volverá a suceder.
Lo que sucedió ayer fue el resultado de una conspiración cuidadosamente planeada. Fue instigada por Donald Trump, quien ha estado trabajando con una pandilla de conspiradores fascistas estratégicamente posicionados dentro de la Casa Blanca y otras poderosas instituciones, departamentos y agencias del Estado. La operación del miércoles lleva consigo el hedor abrumador de los hijos de Trump, colaboradores cercanos y muchos otros que trabajan entre bastidores dentro del ejército, la Guardia Nacional y la policía.
La conspiración utilizó las conocidas técnicas de los golpes de Estado modernos. Los conspiradores identificaron la reunión del Congreso para ratificar la mayoría del Colegio Electoral de Biden como el momento propicio para la acción. El asalto fue preparado por semanas de afirmaciones mentirosas de Trump y sus secuaces de que las elecciones de 2020 habían sido robadas. El líder de la mayoría en el Senado, Mitch McConnell, brindó un servicio crítico al retener el reconocimiento republicano de la elección de Biden durante semanas, brindando así tiempo y legitimidad a los esfuerzos de Trump por desacreditar la elección con afirmaciones totalmente fraudulentas de fraude electoral.
Una mayoría de congresistas republicanos y un número sustancial de senadores republicanos orquestaron el debate político del miércoles en el que se desafió la legitimidad del voto del Colegio Electoral, para proporcionar el pretexto necesario para el planeado levantamiento de derecha. La señal final para el asalto al Capitolio la dio el propio Trump, quien pronunció una arenga insurreccional a sus partidarios, quienes -se puede estar seguro- estaban dirigidos por elementos con entrenamiento policial, militar y paramilitar.
Ya se ha señalado ampliamente que las bandas fascistas prácticamente no encontraron resistencia cuando asaltaron el Capitolio. En las zonas más críticas y vulnerables del edificio, apenas se veía a la policía. Para evaluar políticamente la respuesta policial del miércoles, solo hay que recordar la violencia desplegada el pasado mes de junio contra una manifestación pacífica contra la brutalidad policial en Lafayette Park.
Si se hubiera convocado una protesta de izquierda en Washington para manifestarse por los esfuerzos de Trump por derrocar los resultados de las elecciones, los manifestantes, como todos saben, se habrían encontrado con una demostración masiva de fuerza por parte de la policía y la Guardia Nacional. Habría habido francotiradores de la policía colocados estratégicamente en cada edificio en las cercanías de los manifestantes. Helicópteros militares y drones habrían estado volando en círculos por encima. El más mínimo movimiento no autorizado de la multitud, por pacífico que sea, habría sido respondido con demandas para su inmediata dispersión, seguido en cuestión de minutos por el lanzamiento de bombardeos de gas lacrimógeno. Cientos, si no miles, habrían sido asesinados o arrestados.
La respuesta del Partido Demócrata al golpe ha sido una demostración patética de cobardía política. Las primeras horas de la insurrección transcurrieron sin que un solo líder demócrata prominente emitiera una denuncia clara de la conspiración, ni llamaran a la resistencia popular al golpe. El expresidente Obama y los Clinton, a quienes siguen millones en Twitter, permanecieron en silencio durante todo el día.
En cuanto al presidente electo, Biden esperó horas antes de aparecer finalmente ante el público. Luego de calificar el ataque al Capitolio como sedición, Biden hizo este llamamiento extraordinario al líder de la conspiración: “Hago un llamado al presidente Trump para que salga ahora a la televisión nacional, cumpla su juramento y defienda la Constitución y exija el fin de este asedio. »
Normalmente, cuando se enfrenta a un intento de derrocamiento del régimen constitucional, el líder político amenazado por la conspiración debe buscar inmediatamente privar a los traidores de todo acceso a los medios de comunicación y una audiencia nacional. Pero Biden, en cambio, pidió a Trump que apareciera en la televisión nacional, ¡para detener la insurrección que él mismo había organizado!
Biden concluyó sus comentarios con la siguiente llamada de atención. «Entonces, presidente Trump, dé un paso al frente». Esta apelación fallida al posible dictador fascista pasará a la historia como el discurso de Biden diciendo: «Hitler, haz lo correcto».
Los demócratas, y mucho menos los medios de comunicación no tienen la intención de exponer toda la profundidad de la conspiración y responsabilizar a sus conspiradores y organizadores. El esfuerzo por encubrir el crimen ya ha comenzado, y los medios de comunicación ya se han expresado sobre la necesidad de que demócratas y republicanos «se unan en unidad bipartidista».
La decisión del Senado, en horas de la tarde, de defender la elección de Biden no es el final de la crisis. Los llamamientos a la «unidad» con los conspiradores abren el camino para el próximo esfuerzo por llevar a cabo un golpe de Estado fascista. Esta es la lección de la invasión del Capitolio estatal en abril pasado por matones fascistas armados en Lansing, Michigan y la posterior conspiración en el otoño de 2020 para secuestrar y asesinar a la gobernadora demócrata del estado, Gretchen Whitmer. El Partido Demócrata y los medios rápidamente suprimieron la cobertura de estos crímenes y apenas defendieron a Whitmer contra el ataque. Los conspiradores, hasta ahora, han recibido poco más que una palmada en la muñeca.
La respuesta de los demócratas a la conspiración fascista no está dictada por mera cobardía o estupidez. Más bien, como representantes de la oligarquía financiera-corporativa, tienen miedo de que la exposición de la conspiración criminal y sus objetivos políticos encienda una respuesta masiva dentro de la clase trabajadora que se convierta en un movimiento contra el Estado capitalista y los intereses a los que sirve.
Hay que oponerse al esfuerzo por ocultar la conspiración. Los trabajadores deben exigir la destitución y arresto inmediatos de Trump. No se le puede permitir permanecer en el poder, utilizando el inmenso poder de la presidencia para continuar su conspiración. Su retención de la Casa Blanca representa una enorme amenaza para la gente de Estados Unidos y el mundo. Trump todavía tiene el poder de declarar una emergencia nacional e incluso lanzar la guerra. Su dedo permanece en el gatillo nuclear.
Tampoco se debe dejar en el cargo a sus co-conspiradores. Asimismo, los senadores y congresistas republicanos involucrados en la conspiración deben ser removidos del Senado y del Congreso, arrestados, juzgados y enviados a prisión.
La continua referencia de los demócratas a sus «colegas republicanos» es en sí misma una burla de la democracia.
Se debe plantear la demanda de una investigación pública con audiencias abiertas, con el objetivo de identificar a todos los involucrados en la conspiración, que conduzca a su arresto y encarcelamiento.
No se debe depositar absolutamente ninguna confianza en la administración entrante de Biden —suponiendo que su toma de posesión no se vea bloqueada por un nuevo levantamiento— para pedir cuentas a los conspiradores y defender la democracia.
No se debe olvidar nunca que Biden y los demócratas no representan más que otra facción política de la misma clase dominante. Como declaró Obama inmediatamente después de la elección de Trump, el conflicto entre demócratas y republicanos no es más que una «lucha intramuros», es decir, una pelea amistosa entre miembros del mismo equipo. En una declaración emitida el miércoles por la noche, Obama destacó a los republicanos para elogiarlos, escribiendo obsequiosamente: «Me ha alentado ver a muchos miembros del partido del presidente hablar enérgicamente hoy». El único propósito de tal declaración es ocultar la verdad sobre el alcance del golpe fascista.
Los hechos del 6 de enero de 2021 deben tomarse como una advertencia. La clase trabajadora debe elaborar una estrategia política y un plan de acción para derrotar los esfuerzos futuros por imponer una dictadura. La dinámica política y económica de la reacción capitalista y la contrarrevolución continuará, incluso con Trump fuera del cargo. Esta dinámica no disminuirá después del 20 de enero. El Partido Demócrata, cuya delegación en el Congreso y el Senado está repleta de millonarios y personas con los vínculos más estrechos con la CIA y el ejército, no es menos capaz que los republicanos de organizar una conspiración para suprimir los derechos democráticos.
En cualquier caso, las políticas de la administración Biden, que seguirá las políticas establecidas por Wall Street y el ejército, perpetuarán y aumentarán la ira y las frustraciones explotadas por los fascistas.
A lo largo del año pasado, mientras la clase dominante ha seguido con su estrategia de la inmunidad colectiva frente a la pandemia y el asalto de la administración Trump a los derechos democráticos. Nos indica que el peligro no ha pasado. Es esencial construir una red de comités de base en las fábricas y lugares de trabajo capaces de organizar una resistencia popular de base amplia a través de la movilización de todos los sectores de la clase trabajadora.
Sobre todo, los trabajadores deben comprender que la desintegración de la democracia estadounidense tiene sus raíces en la crisis del capitalismo. En una sociedad dividida por niveles asombrosos de desigualdad social, es imposible preservar la democracia.
La defensa de los derechos democráticos solo es posible mediante la movilización política de la clase trabajadora. Las conspiraciones de los matones fascistas deben ser contrarrestadas mediante la creación de comités de base en las fábricas, lugares de trabajo y barrios para organizar huelgas y otras formas de resistencia popular a los esfuerzos por establecer una dictadura de derecha.
"Todas las opciones sobre la mesa": La Justicia de EE.UU. podría acusar de sedición e insurrección a los atacantes del Capitolio
Más de 90 personas han sido arrestadas en relación con los desmanes producidos este miércoles en el Capitolio de EE.UU., y algunas podrían enfrentar cargos por disturbios, insurrección y conspiración sediciosa, según dijeron este jueves funcionarios del Departamento de Justicia.
Por ahora, los cargos contra los involucrados apuntan a "acceso no autorizado y robo de propiedad", pero "todas las opciones están sobre la mesa", incluyendo acusaciones por disturbios, conspiración sediciosa e insurrección, señaló el fiscal federal interino del Distrito de Columbia, Michael Sherwin, durante una rueda de prensa.
Hasta el momento se han presentado cargos contra unas 40 personas. Uno de los detenidos portaba "un arma automática de estilo militar y 11 cócteles molotov".
Sherwin añadió que durante los actos de violencia fueron robados algunos dispositivos electrónicos de las oficinas de los senadores, lo que podría poner en peligro la seguridad nacional, recoge Reuters.
"Eso podría tener implicaciones potenciales para la seguridad nacional", aseguró, aunque admitió que, si hubo un daño, de momento "no sabemos el alcance".
Por su parte, el fiscal general interino, Jeffrey Rosen, calificó en un comunicado el asalto al Capitolio como un "ataque al Gobierno y al Estado de derecho", y prometió que cada uno de los involucrados "enfrentará todas las consecuencias de sus acciones".
Cientos de partidarios del presidente saliente, Donald Trump, traspasaron el miércoles el perímetro exterior del Capitolio y algunos de ellos lograron irrumpir en el edificio.
El asalto a la sede legislativa tuvo como objetivo interrumpir el conteo de votos electorales para certificar el triunfo de Joe Biden en los comicios presidenciales de noviembre, e insistir en un presunto fraude en esas elecciones. Los disturbios han dejado cuatro personas fallecidas.
Hasta dónde será capaz de llegar Donald Trump y lo que eso significa para Estados Unidos
Este 6 de enero, se ha llamado a una movilización en Washington a favor de Donald Trump ante la inminente toma de posesión del demócrata Joe Biden.
En una sociedad altamente polarizada y con una crisis social agravada, más la emergencia sanitaria provocada por el COVID-19, la renuencia de Trump de no aceptar su derrota en las elecciones altera el orden constitucional estadounidense, el acuerdo bipartidista tácito entre demócratas y republicanos y genera una ola de descrédito sobre el sistema electoral de Estados Unidos.
Aunque no cuenta con suficiente apoyo institucional, Trump es un líder que moviliza a la base republicana y esto lo hace una figura beligerante dentro de ese partido aunque cuente con férrea oposición.
El actual mandatario estadounidense puede resquebrajar las bases de los acuerdos políticos de las élites estadounidense, movilizar a las clases marginadas, confundir y agravar la actual crisis política, social y económica que según algunos analistas puede erosionar a la unión generando guerra civil y secesiones.
La brecha
En Latinoamérica se suele decir a modo de chiste que la única razón por la que no hay un golpe de Estado en Estados Unidos es porque no hay Embajada de Estados Unidos allí. Sin embargo, Trump está dando claras señales de que está dispuesto a tensar la sociedad hacia su límite y convertir meras bromas en realidades.
Daniel Kovalic, profesor de Derechos Humanos internacionales de la Universidad de Pittsburgh, en diálogo para Sputnik afirma, ante la posibilidad de que Trump sea capaz de tomar acciones drásticas ante la pérdida definitiva de todas sus opciones electorales, que "no existe un mecanismo legal para que Trump se declare ganador de las elecciones y continúe ocupando el cargo y ningún otro presidente ha intentado hacerlo en tales circunstancias. Que Trump intente hacerlo equivaldría a un golpe de Estado".Para el académico, el llamado que hace Trump para inundar las calles con sus partidarios y publicar tuits en los que insta a su vicepresidente a tener "valentía" y hacerse cargo de las irregularidades en las elecciones, está generando no sólo más polarización, sino que la brecha de legitimidad entre los electores y sus autoridades se haga cada vez más insalvable.
"Las continuas afirmaciones de Trump de que las elecciones fueron manipuladas en su contra solo polarizarán más a este país. Para que una democracia perdure, debe tener una legitimidad basada en el consentimiento popular. Si un gran porcentaje de personas ya no reconoce la legitimidad del gobierno, ese gobierno no puede gobernar por mucho tiempo. Como Trump cuenta con el apoyo de aproximadamente el 40% de la población, está amenazando la legitimidad misma del Gobierno de Estados Unidos", afirma Kovalic.
Se acortan los tiempos
Se tiene previsto que el Colegio Electoral estadounidense inicie un proceso donde ambas Cámaras, en una sesión conjunta, deben certificar los votos de los diferentes estados del país. Georgia es el principal territorio en disputa. A pesar de que Joe Biden cuenta con 306 votos electorales, frente a los 232 de Trump, la sesión del Congreso y su destino no parece estar muy clara. La fecha de la toma de posesión aún se mantiene para este 20 de enero.
Frederick B. Mills, profesor de filosofía del Departamento de Historia y Gobierno de la Universidad Bowie State y codirector del Consejo de Asuntos Hemisféricos (Council on Hemispheric Affairs, Washington DC), no cree que Trump esté dispuesto a ir más allá de lo que le permita el apoyo de su propio sector político "sin el respaldo de la mayoría del Partido Republicano en el Congreso y del líder de la mayoría del Senado, Mitch McConnell, y sin el apoyo de la rama judicial del gobierno, que ha rechazado más de 50 denuncias legales de fraude electoral".Mills destaca que existen más de una docena de legisladores republicanos que planean oponerse a la certificación de Biden como presidente y por tanto están solicitando una comisión federal para investigar las acusaciones de fraude electoral.
"Esto planteará la cuestión jurídica de si dicha comisión puede invalidar la certificación de Estados individuales. En cualquier caso, será difícil para los defensores republicanos de los derechos del Estado mantener esta posición, ya que algunos gobernadores republicanos objetan tal intromisión en sus procesos de certificación", subraya.
No obstante, el investigador deja para la reflexión que, a pesar de la pugna entre partidos y los propios liderazgos visibles, no existe sino un baile de disfraces para ocultar lo que es realmente el fondo de la cuestión y que se resume en que ambos coinciden en promover los intereses corporativos y la agenda del Estado Profundo por encima del bienestar y las expectativas de los electores y movimiento sociales.
"La respuesta inadecuada del Poder Ejecutivo y del Congreso para abordar la urgente crisis de salud pública durante una pandemia ha dejado muy en claro esta prioridad, ya que acabamos de sufrir el mes más mortífero del COVID-19. Los republicanos, que ahora están divididos en lo que respecta a disputar las elecciones, están unificados en lo que respecta a limitar la inversión social mientras se mantienen las exenciones fiscales para los ricos y un presupuesto militar sólido. Incluso un cheque de 2.000 dólares para los electores que sufrían dificultades se consideró demasiado extravagante", señala.
Por último, Kovalic argumenta que la negativa de Trump a reconocer su derrota deja preparado el camino para que los próximos cuatro años el Congreso se convierta en un campo minado para Biden, pero sobre todo deja tras de sí un país sembrado de dudas ante la naturaleza democrática de Estados Unidos, lo cual "es un juego muy peligroso" de consecuencias imprevisibles.
Líderes demócratas piden la destitución de Donald Trump
Imagen: AFP
Estados Unidos intenta procesar lo que sucedió este miércoles en el Congreso, cuando una horda de fanáticos trumpistas irrumpió para evitar la confirmación de Joseph Biden como próximo presidente. Como primera reacción política, los líderes demócratas en la Cámara de Representantes y en el Senado pidieron la destitución de Donald Trump, a quien le quedan menos de dos semanas de mandato. En un corto video, el magnate reconoció que habrá una nueva administración. Hubo duras críticas a la Policía del Capitolio, a quien se cuestiona por la terrible falla de seguridad durante la sesión de conteo de votos.
Para la presidenta de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, Trump tiene que ser removido de su cargo “por incitar a la sedición” el miércoles. “Aunque queden 13 días solamente, cualquier día puede ser una película de terror para Estados Unidos”, sostuvo en una conferencia de prensa. A ella se sumó el líder de la bancada demócrata en el Senado, Charles Schumer. Ambos le pidieron al vicepresidente, Mike Pence, que aplique “inmediatamente” la Enmienda 25 de la Constitución.
Según esa norma, un presidente puede ser removido cuando no está en condiciones de ejercer su cargo. Le corresponde al vicepresidente tomar esa decisión, apoyado por la mayoría del gabinete. Por eso, tanto los líderes demócratas como otros legisladores del partido en la Cámara baja ya instaron a Pence a ampararse bajo la Enmienda 25. Aunque algunos medios estadounidenses reportaron que hubo conversaciones entre funcionarios para aplicar esta medida después del asalto al Congreso, no se conoció ningún plan concreto para hacerlo.
“Si el vicepresidente y el gabinete no actúan, el Congreso se podría preparar para avanzar con un juicio político. Ese es el abrumador sentimiento de mi bloque”, dijo Pelosi. Durante el día, se conoció que un grupo de congresistas demócratas del ala más progresista ya empezaron a trabajar en ese pedido. “Los artículos para pedir el juicio político ya están en un borrador y están listos para ser presentados”, afirmó la representante Alexandria Ocasio-Cortez como advertencia en el caso de que no se aplique la Enmienda 25.
Trump ya enfrentó un juicio político el año pasado, pero el Senado de mayoría republicana lo absolvió. Esta vez, su partido tampoco parece acompañar el pedido de remoción del cargo basado en esa enmienda. “No creo que sea adecuado en este momento. Espero una transición pacífica del poder”, rechazó el senador Lindsey Graham, uno de los republicanos más influyentes en la Cámara alta y uno de los principales aliados de Trump durante su mandato. “Si algo más pasa, todas las opciones van a estar sobre la mesa”, agregó.
Graham fue uno de los senadores que durante la madrugada del jueves aceptaron los resultados del Colegio Electoral a favor de Biden. Reunidas después de la interrupción por el asalto, las dos cámaras del Congreso estadounidense volvieron a sesionar y poco después de las 4 horas (6 en Argentina) validaron los electores de los 50 estados y del Distrito de Columbia. De esa forma, Biden quedó confirmado como presidente electo y asumirá el próximo 20 de enero junto a la vicepresidenta Kamala Harris.
Ya ratificado, Biden anunció quiénes serán sus candidatos para encabezar los departamentos de Comercio y Justicia. Los nombres tienen que ser aprobados por el Senado, pero con la nueva composición de la cámara, el presidente electo confía en poder avanzar con su agenda.
Aislado políticamente
Tras conocerse el resultado de la sesión, Trump emitió un comunicado en el que prometió una “transición pacífica”. “Aunque estoy en total desacuerdo con el resultado de la elección y los hechos están de mi lado, habrá una transición ordenada el 20 de enero”, dijo. Lo difundió a través de la cuenta de Twitter de uno de sus funcionarios, porque la suya estaba bloqueada.
También está suspendida su actividad en Facebook y lo estará de forma indefinida, por lo menos por las próximas dos semanas, según anunció la red social. “Creemos que los riesgos de permitirle al presidente Trump continuar con el uso de nuestro servicio durante este período es enorme, así que estamos extendiendo el bloqueo que existe en sus cuentas de Facebook e Instagram”, anunció Mark Zuckerberg en un comunicado.
Las decisiones de Twitter y de las redes sociales de Zuckerberg causaron un debate en torno a la capacidad que tienen estas plataformas para censurar a un presidente. “A mí no se me escapa que el día en el que las empresas de redes sociales deciden que en realidad pueden hacer algo para controlar el comportamiento destructivo de Trump es el mismo día en el que se enteraron de que los demócratas van a encabezar todas las comisiones legislativas que tienen que controlarlas”, cuestionó la ex directora de Comunicaciones de la Casa Blanca de Barack Obama, Jennifer Palmieri.
Trump fue el principal blanco de las críticas de este jueves, pero no apareció en público. Hasta Fox News, uno de los medios que más apoyó al presidente durante su mandato, sostuvo que el magnate estaba aislado políticamente y que sus aliados le habían retirado el apoyo. Recién por la noche, cuando recuperó la posibilidad de publicar en Twitter, difundió un video.
El tono de Trump, quien no nombró a Biden pero finalmente reconoció que habrá una nueva administración, fue distinto al que normalmente tiene. Criticó a quienes atacaron el Congreso, a pesar de que el miércoles les había dicho que los amaba, e insistió en querer una transición ordenada.
Desde el Gobierno, la única voz oficial durante el día había sido la de la secretaria de Prensa, Kayleigh McEnany, quien habló durante apenas dos minutos. “Los que ayer asaltaron violentamente nuestro capitolio son lo opuesto de todo lo que defiende esta administración”, dijo por la tarde “en nombre de toda la Casa Blanca”.
McEnany sostuvo que “ahora es tiempo de que Estados Unidos se una, se junte y rechace la violencia”, antes de retirarse rápidamente sin responder preguntas de los periodistas acreditados.
La Administración Trump sufrió este jueves las primeras bajas después del caos en el Capitolio. Renunció uno de los asesores de seguridad de la Casa Blanca, la subsecretaria de Prensa y la jefa de Personal de la primera dama. La secretaria de Transporte, Elaine Chao, esposa del líder del bloque republicano en el Senado, abandonará el gabinete a partir del próximo lunes.
Desde el Congreso, Pelosi anunció también la renuncia del encargado de seguridad de la Cámara de Representantes y reclamó que el jefe de la Policía del Capitolio, Steven Sund, hiciera lo mismo después de las fallas en el operativo del miércoles. Según la Associated Press, renunciará en los próximos días.
Sund también se defendió en un comunicado y dijo que la Policía del Capitolio tenía “un plan robusto establecido” para encarar las manifestaciones. Las imágenes que se conocieron del miércoles muestran, en algunos casos, a unos efectivos desbordados por los miles de fanáticos de Trump. En otros, a policías casi inmóviles ante la horda.
“Nadie puede decirme que si se hubiese tratado de un grupo de manifestantes de Black Lives Matter (Las vidas negras importan, en inglés), lo habrían tratado de una forma muy distinta que a la turba que se metió en el Capitolio”, sostuvo Biden a través de Twitter. “Todos sabemos que es cierto y es inaceptable”, agregó.
Sund reconoció que, durante el operativo, un efectivo de la Policía del Capitolio disparó contra una mujer. Identificada como Ashli Babbitt, veterana de la Fuerza Aérea estadounidense, falleció en el hospital. Fue una de las cuatro personas que murieron en el marco de la insurrección.
Para la derecha estadounidense, una de las teorías conspirativas es la de que hubo infiltrados de “Antifa” y “extremistas de izquierda” en los desmanes del miércoles. No solo no hay ninguna prueba, sino que entre las primeras identidades que se conocen de quienes invadieron el Capitolio aparecen solo extremistas pro Trump.
Los demócratas logran el control del Senado pese al asalto del Capitolio
Los congresistas han tenido que ser evacuados y se han vivido horas de tensión. Ha habido tiros e, incluso, una manifestante ha fallecido.
madrid
07/01/2021 01:58 efe - PÚBLICOLos demócratas se alzaron este miércoles con el control del Senado de Estados Unidos gracias a las victorias de sus dos candidatos en la segunda vuelta de las elecciones en Georgia, que el presidente Donald Trump había planteado como un referéndum a su gestión.
Esta victorias del partido azul se confirmaron el mismo día en que partidarios del republicano Trump asaltaron el Capitolio en Washington mientras se llevaba a cabo la sesión conjunta para ratificar los votos del Colegio Electoral en las pasadas elecciones presidenciales.
Después de que anoche se confirmase la victoria del reverendo Raphael Warnock, que se convierte así en el primer senador afroamericano de Georgia, las proyecciones de los medios dieron hoy ganador al también demócrata Jon Ossoff, sobre su rival republicano, David Perdue.
La segunda ronda electoral en Georgia, que habitualmente hubiese sido un asunto de importancia para el estado, se tornó en una disputa de consecuencias nacionales en la que participaron tanto el mismo Trump como el presidente electo, Joe Biden.
Gracias a estas victorias, ambas por un resultado muy ajustado, Biden podrá contar con el control de las dos cámaras del Congreso al menos durante los primeros dos años de gestión, con lo que podrá avanzar sus políticas sin la obstrucción del Partido Republicano.
Warnock, de 51 años, es un pastor bautista en la Iglesia Abenezer, de Atlanta, en la que otrora fuese pastor adjunto el líder de los derechos civiles Martin Luther King, asesinado en 1968.
En su elección, Warnock obtuvo el 50,6% de los votos y derrotó a la senadora republicana Kelly Loeffler, quien recibió el 49,4% de los sufragios, mientras que Ossoff logró un 50,32% de los votos frente a un 49,68 de su rival.
Hasta esta segunda vuelta electoral, a la que se llegó porque ninguno de los candidatos logró el 50 % de los votos en la primera, en el Senado de Estados Unidos los demócratas contaban con 49 escaños y los republicanos con 50.
Con la victoria de Ossoff, que con 33 años será el senador más joven desde que Biden llegó al Senado, en 1972, los demócratas quedan empatados en curules con los republicanos en la Cámara Alta, de forma que el voto decisivo corresponderá a la vice presidenta Kamala Harris, en su calidad de presidenta del Senado.
Ninguno de los dos candidatos republicanos ha admitido la derrota con el argumento de que están por contarse todavía miles de votos enviados por miembros de las Fuerzas Armadas apostados en el exterior.
Pese a que los dos demócratas ya se han declarado también ganadores, quedan por contar votos de sectores en las ciudades de Atlanta y Savannah que son más favorables a los demócratas.
Al proclamar su victoria, Ossoff agradeció "con humildad al pueblo de Georgia" por haberlo elegido al Senado. Perdue, cuyo mandato en el Senado expiró el domingo pasado, agradeció la participaron de "todos quienes votaron, todos quienes han puesto su fe y su confianza en nuestra democracia para obtener la representación que merecemos, ya sea votando por mí o contra mí".
Antes de confirmarse la victoria de Ossoff, el presidente electo, Joe Biden, felicitó a Warnock y expresó su optimismo ante el posible triunfo del otro candidato.
Biden, de 77 años y quien asumirá el Gobierno el 20 de enero, felicitó también "al pueblo de Georgia, que salió a votar otra vez en número sin precedentes, tal como lo hizo en noviembre, para elegir dos nuevos senadores, exigir acción y demandar que los líderes elegidos salgan del estancamiento".
El presidente electo afirmó que está "tan decido hoy como ayer a hacer el esfuerzo de trabajar con gente de los dos partidos, al nivel federal, estatal y local, para realizar grandes cosas para nuestra nación".
Trump, por su parte, llevó a Georgia sus reclamos de que en la elección presidencial del 3 de noviembre fue víctima de un fraude, una denuncia, sin pruebas, que reiteró en un mitin previo a las elecciones.
El gobernante saliente obtuvo 74,2 millones de votos frente a los 81,2 millones del candidato demócrata. "Después de los últimos cuatro años, después de la elección y después del proceso de certificación electoral hoy en el Congreso, ha llegado el momento de pasar la página", aseguró Biden al respecto. "Los estadounidenses demandan acción y quieren unidad", agregó.
Casi 100 congresistas demócratas apoyan la destitución de Trump vía impeachment tras la violencia de sus partidarios
Casi un centenar de congresistas demócratas han mostrado a favor de la destitución mediante un proceso de impeachment del presidente de EE.UU., Donald Trump, tras la violencia demostrada por sus partidarios durante su acoso al Capitolio, informa NBC News.
Numerosas fuentes familiarizadas con el asunto dijeron que también se han mantenido discusiones informales sobre la invocación de la Enmienda XXV a la Constitución, que trata sobre la sucesión del presidente de EE.UU.
Miles de partidarios de Trump se congregaron este miércoles frente al Capitolio, durante la celebración del debate del Colegio Electoral en el Senado previo a la confirmación de la victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones presidenciales de noviembre.
Los manifestantes enardecidos se enfrentaron con la Policía e intentaron saltar las vallas de seguridad, provocando el cierre del Capitolio, así como la suspensión de la sesión en el Senado. Posteriormente, algunos manifestantes irrumpieron en el Capitolio.
Cuatro personas murieron cuando partidarios del presidente Donald Trump irrumpieron violentamente en la sede legislativa de EE.UU. El jefe de la Policía de Washington D.C., Robert Contee, informó que entre las víctimas se encuentra una mujer que fue alcanzada por un disparo de la Policía del Capitolio, así como otras tres personas que fallecieron en "emergencias médicas".
"Es una persona muy peligrosa que no debería continuar en el cargo", dijo Nancy Pelosi
Estados Unidos: tras los disturbios en el Capitolio, líderes demócratas del Congreso piden destituir a Trump
Imagen: EFE
La presidenta de la Cámara de Representantes de Estados Unidos, Nancy Pelosi, pidió este jueves la destitución inmediata del mandatario Donald Trump, describiéndolo como "una persona muy peligrosa que no debería continuar en el cargo".
"Esta es una urgencia de suma importancia", dijo la demócrata de mayor rango en el Congreso, al instar al vicepresidente Mike Pence y al gabinete de Trump a invocar la 25ª Enmienda de la Constitución y destituir al mandatario, un día después de que sus partidarios del presidente irrumpieran en el Capitolio alentados por el magnate.
En caso de que no se invoque este mecanismo, que permite que una mayoría del gabinete destituya a un presidente considerado incapaz de cumplir con sus funciones, "el Congreso está preparado para avanzar con un proceso de juicio político", advirtió Pelosi.
"Creo que no tardaremos mucho en obtener una respuesta del vicepresidente", sostuvo y añadió que el líder de los demócratas en el Senado, Chuck Schumer, se había manifestado en este mismo sentido.
Pelosi, además, acusó directamente a Trump de lo que describió como un "intento de golpe de Estado". Por su parte, Schumer aseguró que el asalto al Capitolio "fue una insurrección contra Estados Unidos, incitada por el presidente Trump", por lo que "este presidente no debe ocupar el cargo ni un día más".
Otros progresistas que pidieron la destitución de Trump fueron el
senador Ed Markey y 17 de los miembros del Comité Judicial de la Cámara
de Representantes, entre otros.
Si bien los pedidos provienen principalmente de círculos demócratas, hay republicanos como el gobernador de Vermont, Phil Scott, o el congresista por el estado de Illinois, Adam Kinzinger, que están comenzando a exigir que Trump deje el cargo, cuando faltan dos semanas para la entrega de poder.
“Con gran pesar, pido por el bien de nuestra democracia que se invoque la enmienda 25”, publicó Kinzinger a través de su cuenta de Twitter.
Pelosi habló con jefe militar para evitar que Trump acceda a códigos nucleares
WASHINGTON (Sputnik) — La presidenta de la Cámara de Representantes de EEUU, Nancy Pelosi, dijo en una carta que habló con el presidente del Estado Mayor Conjunto, Mark Milley, para discutir cómo evitar que el presidente Donald Trump tenga acceso a los códigos de lanzamiento nuclear y del inicio de cualquier hostilidad militar.
"Esta mañana, hablé con el presidente del Estado Mayor Conjunto, Mark Milley, para discutir las precauciones disponibles para evitar que un presidente inestable inicie hostilidades militares o acceda a los códigos de lanzamiento y ordene un ataque nuclear", dijo Pelosi.
Pelosi también dijo que ella y el senador Chuck Schumer llamaron al vicepresidente Mike Pence para discutir la invocación de la Enmienda 25 para destituir a Trump de su cargo, y agregó que están esperando su respuesta.
Pelosi explicó que si Trump no es destituido de su cargo de inmediato, el Congreso procederá con la acción legislativa para destituirlo.
La carta del orador a Miley se produce después de que un grupo de partidarios de Trump irrumpiera el miércoles 6 de enero en el Capitolio de Estados Unidos para protestar contra los legisladores que cuentan a los electores en las elecciones de 2020.Los manifestantes se enfrentaron con la Policía, tomaron el púlpito del recinto y ocuparon la rotonda dentro del edificio del Capitolio.
La ocupación tuvo lugar después de que Trump instó a sus partidarios durante un discurso promulgado más temprano a mantener el apoyo para rectificar los resultados de las elecciones presidenciales de 2020.
Trump afirmó que ganó las elecciones, pero la victoria le fue robada a través de un fraude electoral masivo y actos indebidos.
Los tribunales estatales y federales de Estados Undios rechazaron más de 60 impugnaciones legales que la campaña de Trump y el partido republicano presentaron en un intento de revertir el resultado de las elecciones.
Filtran el borrador de la acusación para destituir a Trump por "incitar a la insurrección"
Un borrador del proyecto de destitución del presidente de EE.UU., Donald Trump, se filtró a la prensa este viernes. El documento acusa al mandatario de participar tanto en altos crímenes como en delitos menores al incitar a la insurrección, informa MSNBC.
Los demócratas de la Cámara de Representantes buscan someter nuevamente al presidente estadounidense a un juicio político, cuando faltan menos de dos semanas para finalizar su mandato.
Según los reportes, el borrador señala que Trump hizo voluntariamente declaraciones que alentaron las acciones ilegales registradas el miércoles en el Capitolio, donde cientos de sus partidarios irrumpieron y vandalizaron las instalaciones durante la sesión bicameral del Congreso para contar y ratificar los votos electorales que darían oficialmente la victoria presidencial a Joe Biden.
El medio norteamericano precisó, sin embargo, que el contenido del documento filtrado aún no contaba con el respaldo de la presidenta de la Cámara, Nancy Pelosi.
Recientemente, la portavoz asistente de la cámara baja del Congreso, Katherine Clark, advirtió en declaraciones a CNN que si el vicepresidente Mike Pence y el Gabinete no invocan la 25.ª Enmienda de la Constitución para destituir a Trump de su cargo, los legisladores demócratas "seguirán adelante" con el juicio político.
"Donald Trump tiene que ser destituido de su cargo. Y vamos a proceder con todas las herramientas que tenemos para asegurarnos de que eso suceda para proteger nuestra democracia", agregó la vocera.
Según la cuarta sección de dicha enmienda, la destitución es posible si el vicepresidente y la mayoría de los secretarios del Gabinete concluyen que Trump es "incapaz de cumplir con los poderes y deberes de su cargo". Entonces, las funciones presidenciales se delegarían automáticamente en Pence, hasta que el presidente electo Joe Biden asuma el cargo el 20 de enero.
Trump anuncia que no asistirá a la toma de posesión de Biden el 20 de enero
El presidente de EE.UU., Donald Trump, dijo este viernes que no asistirá a la toma de posesión del mandatario electo de su país, Joe Biden, que se llevará a cabo el próximo 20 de enero.
"A todos los que me han preguntado, no iré a la Inauguración el 20 de enero", escribió el mandatario saliente en su cuenta en Twitter.
To all of those who have asked, I will not be going to the Inauguration on January 20th.
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) January 8, 2021
Trump se ha negado a reconocer la victoria de Biden en los comicios de noviembre; sin embargo, este jueves dijo que garantizaría "una transición ordenada" a la nueva Administración.
El triunfo de Biden fue certificado por el Congreso estadounidense este jueves. El demócrata obtuvo 306 de los 538 votos de los electores designados para elegir al nuevo mandatario; por su parte, Trump alcanzó 232.
La sesión para la certificación de la victoria del demócrata fue interrumpida durante varias horas, luego que simpatizantes de Trump irrumpieran violentamente en el Capitolio. El asalto dejó cuatro personas fallecidas, entre ellas Ashli Babbitt, una veterana de la Fuerza Aérea estadounidense con 14 años de servicio, que recibió un disparo en el pecho dentro del recinto legislativo.
"Una voz gigante en el futuro"
En otro trino, publicado minutos antes, Trump envió un mensaje a sus seguidores.
The 75,000,000 great American Patriots who voted for me, AMERICA FIRST, and MAKE AMERICA GREAT AGAIN, will have a GIANT VOICE long into the future. They will not be disrespected or treated unfairly in any way, shape or form!!!
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) January 8, 2021
"Los 75.000.000 de grandes patriotas estadounidenses que votaron por mí, 'EE.UU. Primero' y 'Hacer EE.UU. Grande Otra Vez', tendrán una voz gigante en el futuro. ¡No serán irrespetados ni tratados injustamente de ninguna manera, condición o forma!", recalcó el mandatario.
Trump no ha hecho a América grande
Trump es un desmesurado y como le ocurre a los millonarios, tiene algo de demente. El trumpismo es delirante, pero su demencia es buena para el negocio porque no es sino la negación del sentido común democrático. La locura no es ajena a esta fase del capitalismo camino de hacer del Rey Midas un aficionado. Es una locura porque instala la guerra de todos contra todos, pero hace más ricos a los ricos. Locura, la justa. Nadie invierte tanto dinero en un proyecto sin algunas garantías. Todo regresa como farsa. Pero con las trazas de la tragedia de la historia aún calientes.
Las primeras impresiones de las imágenes de unos tipos de extrema derecha asaltando el Capitolio invitaban a la broma. Hombres blancos con atuendos regionales y actitudes llenas de soberbia. Un colgado con una piel de búfalo en la cabeza, con el torso desnudo rodeado de banderas confederales le daba en la distancia al golpe de Tejero de 1981 cierta majestuosidad y respeto escénico. Al Congreso no se entra a hacer el payaso. Entre el tricornio y la cabeza de búfalo con dos cuernos no hay color.
Se ha dicho siempre que en EEUU no había golpes de Estado porque allí no hay Embajada norteamericana. Pero ahora hay whatsapp y Facebook.
Puestos a divertirnos, nos hubiera gustado escuchar a Maduro decir que reconocía al de la cabeza con cuernitos como Presidente encargado de EEUU en tanto en cuanto se convocaran unas elecciones libres y transparentes que fueran reconocidas por las partes. Se ha dicho siempre que en EEUU no había golpes de Estado porque allí no hay Embajada norteamericana. Pero ahora hay whatsapp y Facebook, que son las embajadas donde se refugian los golpistas, ahora que los grandes medios han sacado a Bernie Sanders de juego y prefieren a Biden al impredecible Trump.
Los seguidores de Trump que han entrado en el Capitolio no tenían intenciones divertidas. De hecho, este tipo de cosas no son sino invitaciones a lo que pueda venir después. Es verdad que en las películas sobre la toma del Capitolio hay más dramatismo que en esa foto donde se ve a un tipo que se está llevando un atril. Estas cosas, se sabe cómo empiezan pero no se sabe cómo terminan. Los EEUU han articulado estas jugadas constantemente en muchos lugares. Las llamaban "revoluciones de colores". Con gran colaboración casi siempre de telepredicadores deslizados a la extrema derecha y ruido de "militares comprometidos con la democracia". Como la carta de los militares golpistas españoles al Rey Felipe VI. Son disparos de salida. Todos empiezan diciendo que el Gobierno que ha ganado las elecciones por la izquierda no es legítimo. Y a ver qué pasa.
Los seguidores de Trump le habían escuchado horas antes desconocer los resultados electorales. Y le hicieron caso. En la crisis del sistema, económica, moral, política, sanitaria, hay audiencia para saltarse las reglas básicas de la democracia.
" ¿Qué hubiera pasado si esa gente encuentra en uno de esos pasillos a Ocasio-Cortez? ¿Sería igual de divertido?"
Es escalofriante ver a los policías retirar las vallas para que entren los extremistas. ¿Están con la ley o con los supremacistas blancos? A un negro, los policías le ponen la rodilla en el cuello hasta que se asfixia. A los supremacistas blancos, les brindan alfombra roja. En las manifestaciones contra el asesinato de George Floyd, la policía hizo 14.000 detenciones. ¿No debiera estar detenido hoy mismo Donald Trump como instigador de los desórdenes?
Lo que ha pasado no es divertido. ¿Qué hubiera pasado si esa gente encuentra en uno de esos pasillos a Ocasio-Cortez? ¿Sería igual de divertido? Han muerto , desgraciadamente, cuatro de las asaltantes. La foto de un tipo con los pies encima de la Mesa de la Presidenta del Congreso, la demócrata Nancy Pelossi da miedo. La gente de Black Lives Matter no habría pasado el primer cordón.
Es fácil culpar a Trump. Pero se lleva señalando desde hace mucho tiempo que la democracia en EEUU ya había quebrado muchas de las líneas rojas. No votan 76 millones de personas a un demente si el sistema político no está podrido. La democracia norteamericana se ha podrido cuando no ha sido capaz de frenar las enormes desigualdades que siguen creciendo. Cuando es prácticamente imposible hacer carrera política si no tienes financistas millonarios. Cuando el sistema electoral es del siglo XIX y puede ser Presidente el que pierda en votos. La democracia está podrida cuando no se facilita que la gente humilde vote, cuando las elecciones son una carrera de obstáculos para que todos y cada uno de los ciudadanos puedan ejercer, en igualdad de condiciones, el derecho al voto. La democracia está podrida cuando ser negro o latino o pobre es una condición de riesgo. La democracia está podrida cuando has dejado que se hunda la educación pública y la sanidad pública y no se dan las condiciones mínimas para ejercer la ciudadanía. Y Biden no va a avanzar mucho para solventar estos problemas (ni siquiera al haber conseguido mayoría en el Senado y en el Congreso). Por eso los que auparon a Trump y ahora le han dejado caer han apostado por Biden.
Si los medios de comunicación y las redes sociales pueden mentir sin pudor, si se demoniza a una parte importante de la población a base de mentiras, tertulias amañadas, sentimentalismo vacío y creación constante de frustración y odio, entonces la Constitución deja de expresar el contrato social que asumen todos los ciudadanos de un territorio.
La culpa de que entren unos energúmenos en el Capitolio es, obviamente, de Trump, que les ha jaleado. Pero si 76 millones de personas piensan que las elecciones han sido amañadas, algo se ha hecho mal. Si millones piensan que alguien puede mover los hilos para favorecer o castigar a un candidato –por ejemplo, jugando con los plazos de la vacuna-, el sistema ya ha fracasado como agregador de preferencias. Si los medios de comunicación y las redes sociales pueden mentir sin pudor, si forma parte del juego la descalificación del adversario, si se demoniza a una parte importante de la población a base de mentiras, tertulias amañadas, sentimentalismo vacío y creación constante de frustración y odio, la Constitución deja de expresar el contrato social que asumen todos los ciudadanos de un territorio.
La democracia está podrida cuando EEUU irrespeta la democracia en tantos lugares del mundo. Porque lo que ha hecho con Bolivia, con Honduras, con Brasil, con Cuba, con Venezuela, con Siria, Yemen, Egipto, Irak, Palestina, Sahara termina, necesariamente, volviéndose en contra. La actitud tradicional de los Estados Unidos de dar golpes de Estado en cualquier país del mundo del que necesite algo, funcionaba solo con altas dosis de hipocresía. Lo podías hacer fuera con discreción, en "nombre de la libertad", pero adentro eso no pasaba. Trump, que es muy bocazas, ha desvelado esa trampa y ha terminado haciendo lo mismo pero dentro de las propias fronteras.
El fascismo no viene de pronto. Crece con las crisis y funcionan como un plan B de los grandes capitales. Los que permiten, en España, que no haya una sola tertulia donde no haya defensores de la extrema derecha. En Estados Unidos esos grandes capitales alimentaron a Trump igual que en Europa se ha cebado en todos los países a la extrema derecha (es lo que pasó en España cuando Ciudadanos no sirvió para solventar la hemorragia electoral del PP).
El fascismo se construye, sobre todo, con la dejación de responsabilidades de la democracia. Cuando se les permite, poco a poco, mentir sin que ningún periodista les haga ver que mienten, cuando se les permite ser violentos sin que la policía intervenga, cuando se les permite abusar de los débiles sin que se les afee la conducta, cuando pueden mentir sobre los adversarios sin que se les eche de los platós de televisión, cuando se les deja negarles derechos básicos a los políticos de izquierda sin que los jueces les juzguen y encarcelen, cuando se miente sobre la realidad histórica –incluso cuando se premia a los mentirosos- y no hay un consenso académico serio que acalle esas mentiras, en todos y cada uno de esos casos se le están dando alas al fascismo. Igual que cuando dices que el antifascismo es terrorista, como dicen Trump, Abascal, Pablo Casado, Arrimadas, Rivera o el inefable lanzador de huesos de aceituna y portavoz del PP García Egea. Porque el antifascismo es lo que paró los pies a los fascistas y por eso hay democracia en Europa.
"Trump es una consecuencia de la crisis de 2008, del abandono de las mayorías a favor de las grandes corporaciones, de la falta de participación ciudadana en las grandes decisiones, del deterioro de los medios de comunicación y el consiguiente envilecimiento de la esfera pública, de la falta de regulación de las redes sociales, del abuso de la ley"
En España, tanto VOX como el PP han celebrado a Trump y sus vilezas. Steve Bannon, el gran constructor de mentiras, vino a España a apoyar a Abascal y a Casado y aún hoy, cuando los manifestantes han invadido el Capitolio, necesitan desviar la atención para que no se les recuerde su apuesta por ese demente. En la misma línea que alimenta el fascismo, Abascal, Rivera –que parece que no quiere marcharse de la política- o García Egea han comparado las protestas alrededor del Congreso que estaban señalando la pérdida de legitimidad del PP –de hecho, Rajoy terminó perdiendo el apoyo de la Cámara-, que estaban autorizadas por la delegación del gobierno y que eran pacificas, con la entrada en el Capitolio –no rodearlo, entrar- para impedir que se eligiera finalmente a Biden Presidente de los Estados Unidos. La derecha extrema española necesita constantemente decir que todo es lo mismo, para intentar tapar su mucha basura. En realidad, los únicos que rompieron las vallas policiales en el Congreso, fueron algunos policías de extrema derecha con los que VOX tiene excelentes relaciones.
No es verdad que Donald Trump sea "la XXVIII Enmienda a la Constitución de EE.UU", como ha dicho el periodista Isaías Lafuente. Trump es un efecto de problemas estructurales de un sistema político que hace tiempo viene vaciando su contenido democrático. Trump es una consecuencia de la crisis de 2008, del abandono de las mayorías a favor de las grandes corporaciones, de la falta de participación ciudadana en las grandes decisiones, del deterioro de los medios de comunicación y el consiguiente envilecimiento de la esfera pública, de la falta de regulación de las redes sociales, del abuso de la ley convertida en un arma de ataque y destrucción de los adversarios, de la incapacidad de la izquierda norteamericana para superar el bipartidismo, del fin de la hegemonía norteamericana. Todo esto ha generado mucho dolor hacia fuera (aunque, a diferencia de Obama, Trump no ha empezado ninguna guerra), y ahora está amenazando la propia supervivencia de la democracia norteamericana.
El impeachment contra Trump, de producirse, o la puesta en marcha de la Enmienda 25 podrían esgrimirse como el triunfo de la división de poderes sobre la locura personal. Pero no es verdad. Porque esa locura personal es parte del propio sistema que la toleró, alimentó y que hoy anida en el partido republicano y en decenas de millones de norteamericanos. Al fascismo, en EEUU y en España, se le blanquea todos los días porque es funcional a la fase actual del sistema económico. Y solo se le conjura con una "gran conversación" que siente las bases de un nuevo contrato social. En otras palabras, recuperar la política para la gente.
El monólogo de Juan Carlos Monedero #EnLaFrontera468 - Golpe de Estado en USA
Hechos sin precedentes en la historia de Estados Unidos
Una crisis de larga gestación
En los gravísimos sucesos del miércoles, propios de las “anarquías populistas” que Washington ve –y vitupera- por doquier en los países de la periferia hay una indudable corresponsabilidad de los dos partidos.
Lo ocurrido no tiene precedentes en la historia de Estados Unidos.
Todo un vetusto y enorme entramado institucional concebido por los
padres fundadores para evitar los riesgos de la oclocracia –el temido
gobierno del populacho- se derrumbó como un castillo de naipes cuando
respondiendo a las incesantes arengas de Donald Trump una turba de
trumpistas arrolló a las fuerzas de seguridad y tomó por asalto al
Capitolio. El resultado: el Senado tuvo que entrar en receso mientras el
vicepresidente Mike Pence era prestamente evacuado por el Servicio
Secreto mientras una banda de facinerosos con ropas de fajina y algunos
de ellos armados sentaban sus reales en las salas del Senado y la
Cámara de Representantes. El objetivo: impedir que el Congreso
certificara la victoria de Joe Biden en la elección presidencial del 3
de noviembre.
La responsabilidad de Trump en estos incidentes es indiscutible. Una parte de los republicanos aportaron lo suyo.Más de cien estaban dispuestos a proponer la anulación de la victoria de Biden, y deben también ser considerados como instigadores del tumulto. Pero sería un error creer que lo ocurrido es responsabilidad exclusiva de Trump y sus secuaces. Este episodio marca la gravedad de la crisis de legitimidad que hace mucho tiempo está carcomiendo al sistema político norteamericano. El ausentismo electoral es un lastre crónico para un sistema que se autoproclama como una democracia cuando no lo es. Abraham Lincoln la definió como el “gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo”. Hoy no sólo intelectuales de izquierda como Noam Chomsky sino hasta académicos del mainstream como Jeffrey Sachs y, antes que él, Sheldon Wolin sostienen en sus intervenciones orales y escritas que el sistema político de Estados Unidos es una plutocracia y no una democracia en la medida en que es el gobierno de los ricos, por los ricos y para los ricos. Esto es lo que explica la quejumbrosa reflexión que hiciera hace unos meses un editorial colectivo del The New York Times al constatar que el 1% más rico acumula más riqueza que el 80% más pobre del país. Es decir, una pseudo-democracia que aplicando las políticas neoliberales decretó las exequias del “sueño americano” y convirtió a ese país en el más desigual del mundo desarrollado.
En los gravísimos sucesos del miércoles, propios de las “anarquías populistas” que Washington ve –y vitupera- por doquier en los países de la periferia hay una indudable corresponsabilidad de los dos partidos.
Los exabruptos de Trump y sus criminales políticas, dentro y fuera de Estados Unidos, se nutrieron durante cuatro años de la falta de voluntad de los demócratas para poner fin a las políticas que beneficiaban al 10% más rico (y sobre todo al 1% de los supermillonarios) del país y para hacer siquiera mínimo esfuerzo para democratizar de verdad al sistema político. No es ocioso recordar ante los violentos incidentes de este miércoles que jamás estuvo en la mente de los padres fundadores crear un sistema democrático: la elección indirecta vía colegios electorales, el carácter optativo del voto, el sufragio en día laborable son las rémoras de un sistema que se constituyó como una república pero no como una democracia.
No es casual que la propia Constitución de Estados Unidos no mencione en un solo lugar la palabra mágica: “democracia”. Y ante una sociedad que ha cambiado tanto como Estados Unidos en los últimos cincuenta años, pasando de ser una sociedad bastante homogénea a una multicultural y desigual, y ante la estolidez de un sistema partidario que no refleja para nada estos cambios la aparición de un demagogo como Trump y su incendiaria retórica podía terminar abriendo las puertas del infierno y soltar a todos los demonios. Eso fue lo que ocurrió ahora. Y esto va para largo y no se solucionará sin reformas sociales, económicas y políticas de fondo, cosa que difícilmente Joe Biden estará dispuesto a impulsar.
Fuente: https://www.pagina12.com.ar/
El ocaso de Donald Trump
Tras el asalto al Capitolio por los seguidores arengados por un Trump totalmente enervado, se se habría abierto un nuevo frente para intentar declararlo «inestable mental» y aplicar la Enmienda 25 de la Constitución que dispone la sucesión del presidente «si el vicepresidente y la mayoría de su gabinete considera que está mental o físicamente inhabilitado para ejercer su cargo».
El biólogo Lyall Watson en su obra “Lifetide” publicada en 1.979 afirma que “ si un número suficientemente grande de personas (Masa Crítica) adquieren un nuevo conocimiento o forma de ver las cosas, esto se propagará por toda la humanidad”, para lo que es necesario que un determinado número de personas (Masa Crítica), alcance una conciencia más elevada y en ese momento el individuo es capaz ya de realizar un salto evolutivo y lograr un cambio de mentalidad. Dicha tesis es conocida como “Teoría del Centésimo Mono” y tendría su plasmación en la sorpresa electoral de Donald Trump, candidato en principio totalmente refractario a la disciplina de partido y devenido en la “bestia negra” del establishment neocon. Así, tras el inesperado triunfo de Donald Trump en las Presidenciales de EE.UU, asistimos a la irrupción del llamado “escenario teleonómico” (en contraposición al ”escenario teleológico” actualmente vigente) y que estuvo marcado por dosis extremas de volatilidad debido a la personalidad paranoica de Donald Trump.
La paranoia autocrática de Donald Trump
El psiquiatra español Enrique González Duro en su libro La paranoia (1991), afirma que “los factores desencadenantes de esta enfermedad se encuentran muy activos en individuos que presentan un acusado narcisismo y que se han visto expuestos a serias frustraciones, hallándose consecuentemente dotados de una baja autoestima. Esto provoca que se dispare en los mismos el mecanismo natural de Proyección, en virtud del cual tendemos a atribuir a otros aquellos impulsos, fantasías, frustraciones y tensiones que nos resultan inexplicables, inaceptables e insoportables en nosotros mismos”.
La personalidad de Donald Trump encajaría plenamente en la descripción medica del trastorno conocido como psicosis paranoica pues su pensamiento es rígido e incorregible: no tiene en cuenta las razones contrarias, sólo recoge datos o signos que le confirmen el prejuicio para convertirlo en convicción y aunque esté aquejado de dicho trastorno delirante sería bastante funcional y no tiende a mostrar un comportamiento extraño excepto como resultado directo de la idea delirante (léase la construcción del Muro con México). En el caso concreto de Trump, estaríamos ante un caso típico de paranoia megalómana, delirio de grandeza que provoca que “el individuo se crea dotado de un talento y un poder extraordinarios debido a que las deidades le han elegido para una alta misión” (restaurar el White Power en una sociedad en la que la evolución demográfica provocará que la población blanca será minoritaria en el escenario del 2.043). Otro rasgo de su personalidad sería el histrionismo que le impele a “ llamar la atención pública y ser temerario en sus afirmaciones sin importarle la opinión de los demás debido a su evidente falta de moralidad”.
¿Enmienda 25 de la Constitución o Perdón Presidencial para Trump?
La paranoia de Trump se habría agravado al verse afectado por el llamado “sindrome de hydris” citado por el médico y político inglés David Owen en su obra “The Hybris Syndrome: Busch, Blair ant the Intoxication of Power”. Dicho término procede de la palabra griega “hybris” que significa desmesura y que tendría su paradigma en el intento de aplicar la Ley de Insurrección que conllevaría la utilización del Ejército que se enmarcaría en su lema electoral (“The President of Law and Order”). Sin embargo, el intento de militarizar todo el país habría provocó la inquietud en el establishment dominante y tuvo su plasmación en las declaraciones del secretario de Defensa Mark Sper, que se mostró contrario a la aplicación de la Ley de Insurrección tras afirmar que “el racismo es real en el país y debemos hacer lo posible por reconocerlo, plantarle cara y erradicarlo”. Especial relevancia adquirió la irrupción mediática del ex-secretario de Defensa de la Administración Trump, el ex-general de la Marina,James Mattis al acusar a Trump de “intentar dividirnos y de la necesidad de unirnos sin él, aprovechando las fuerzas inherentes a nuestra sociedad civil” .
Sin embargo, tras el asalto al Capitolio por los seguidores arengados por un Trump totalmente enervado, se se habría abierto un nuevo frente para intentar declarar a Trump «inestable mental» y aplicar la Enmienda 25 de la Constitución que dispone la sucesión del presidente «si el vicepresidente y la mayoría de su gabinete considera que está mental o físicamente inhabilitado para ejercer su cargo». Dado que Trump se niega a aceptar los resultados de las Elecciones y continúa alimentando la teoría del fraude electoral, el establishment republicano abandonará a su suerte a un Donald Trump aislado en su Torre de Marfil que quedará a merced de los futuros procesos judiciales que le aguardan, no siendo descartable que Trump esté negociando en secreto con Biden para conseguir el perdón Presidencial que le exonere de posibles cargos judiciales a cambio de reconocer su derrota.
GERMÁN GORRAIZ LÓPEZ-Analista político