jueves, 14 de mayo de 2020

Noam Chomsky, Yannis Varoufakis y Naomi Klein impulsan la creación de una Internacional Progresista // Resistencia - La disciplina social y el cuidado de lo común: “Solo el pueblo salva al pueblo”// Chalecos negros de Francia: una llamada a la autodefensa migrante // La pandemia: ¿Qué hay después del diluvio? Por: Stella Calloni // Noam Chomsky: “El único país que ha demostrado un internacionalismo genuino ha sido Cuba”// Expresa Pérez Esquivel solidaridad con Cuba tras acto terrorista contra su embajada en EE.UU.// URUGUAY: Marcha del Silencio: “Son memoria. Son presente. ¿Dónde están?, será la consigna de la Marcha del Silencio virtual // Sindicatos: «Se terminó el recreo»: trabajadores preparan paros y movilizaciones // Curtiembre París: la primera ocupación obrera del período Lacalle // Jorge Zabalza, el último tupamaro rebelde por Lucia Sabini Fraga // Deuda y más Deuda por José A. Rocca

Noam Chomsky, Yannis Varoufakis y Naomi Klein impulsan la creación de una Internacional Progresista

La nueva organización nace con la vocación de "fomentar la unión, coordinación y movilización de activistas, asociaciones, sindicatos, movimientos sociales y partidos en defensa de la democracia, la solidaridad, la igualdad y la sostenibilidad".

"Syriza asestó un golpe más duro a la izquierda que Thatcher"
Yannnis Varoufakis en una imagen de archivo.
madrid
11/05/2020 12:06 - Público
DiEM25, un movimiento democrático paneuropeo transfronterizo, y el Instituto Sanders, fundado en 2017 por Jane Sanders, esposa del senador demócrata Bernie Sanders, dan a luz este lunes a la Internacional Progresista, una organización avalada por más de 40 intelectuales de todo el mundo, entre los que destacan Noam Chomsky, Naomi Klein, Yanis Varoufakis o Fernando Haddad entre otros.
El objetivo de esta iniciativa, según adelanta el diario El País, es "fomentar la unión, coordinación y movilización de activistas, asociaciones, sindicatos, movimientos sociales y partidos en defensa de la democracia, la solidaridad, la igualdad y la sostenibilidad".
DiEM25 el Instituto Sanders, han decidido así unir fuerzas ante "el avance del autoritarismo". Los impulsores de la Internacional Progresista afirman que la crisis sanitaria provocada por el coronavirus y la subsiguiente crisis económica hacen obligatorio que las fuerzas progresistas del mundo se unan para defender y sostener un Estado de bienestar, los derechos laborales y la cooperación entre países, además de consolidar un mundo más democrático, igualitario, ecologista, pacífico y en el que prime la economía colaborativa.
El proyecto arranca este lunes con el lanzamiento de su web, donde cualquiera puede inscribirse como miembro, y cuenta con el apoyo y el soporte formado por más de 40 intelectuales de toda índole y condición, desde escritores hasta políticos. 
Financiado exclusivamente con aportaciones individuales de sus miembros y donaciones, la Internacional Progresista tiene previsto celebrar un congreso en Reikiavik organizado por el partido de Jakobsdóttir, el Movimiento de Izquierda-Verde. En esta cita se planificará toda la actividad de la organización del próximo año.

Un grupo de intelectuales y políticos promueve la Internacional Progresista

Noam Chomsky, Naomi Klein, Yanis Varoufakis, Fernando Haddad y la primera ministra islandesa, entre otros, instan a la defensa de la democracia, la solidaridad, la igualdad y la sostenibilidad

El País
Madrid - 11 may 2020 - 08:22 CEST

Yanis Varoufakis, tras visitar a Julian Assange en prisión, el pasado febrero en Londres.
Yanis Varoufakis, tras visitar a Julian Assange en prisión, el pasado febrero en Londres.PETER NICHOLLS / ReutersEl movimiento prodemocrático y paneuropeísta DiEM25 y The Sanders Institute han lanzado este lunes la Internacional Progresista. Más de 40 políticos e intelectuales de todos los continentes —Noam Chomsky, Yanis Varoufakis y Fernando Haddad, entre otros— secundan la iniciativa, que tiene como objetivo fomentar la unión, coordinación y movilización de activistas, asociaciones, sindicatos, movimientos sociales y partidos en defensa de la democracia, la solidaridad, la igualdad y la sostenibilidad.
DiEM25 y The Sanders Institute —fundado en 2017 por Jane Sanders, esposa del senador demócrata Bernie Sanders— apelaron en 2018 a la formación de un frente común ante el avance del autoritarismo. El año pasado, numerosos países vivieron manifestaciones que sumaron a decenas de millones de personas que defendían sus democracias, exigían unas condiciones de vida decentes o reclamaban la protección inminente del planeta. Los organizadores sostienen que la crisis sanitaria y económica derivada de la pandemia ha revelado la necesidad de que todos los actores progresistas remen juntos para defender la asistencia médica universal, la protección de los derechos laborales y la cooperación internacional.
La Internacional Progresista cuenta con el respaldo de un consejo formado por más de 40 asesores, entre los que destacan escritores y activistas como el estadounidense Noam Chomsky o la canadiense Naomi Klein, políticos en activo como el parlamentario griego y exministro de Finanzas Yanis Varoufakis; la primera ministra islandesa, Katrín Jakobsdóttir, o la ministra argentina de Mujeres, Género y Diversidad, Elizabeth Gómez Alcorta. A ellos se suman dirigentes latinoamericanos como el exmandatario ecuatoriano Rafael Correa o el brasileño Fernando Haddad, candidato del Partido de los Trabajadores (PT) en las elecciones de 2018 que ganó el ultraderechista Jair Bolsonaro. Otros firmantes conocidos son el exministro brasileño de Exteriores Celso Amorim, el exvicepresidente boliviano Álvaro García Linera, el actor mexicano Gael García Bernal, la escritora Arundhati Roy, el filósofo Srecko Horvat o la alemana Carola Rackete, capitana de barco y símbolo del rescate de migrantes en el Mediterráneo.
El proyecto se ha iniciado este lunes con el lanzamiento de su web, en la que cualquier persona u organización podrá registrarse para convertirse en miembro de la Internacional Progresista. La organización aboga por un mundo democrático, igualitario, solidario, ecologista, pacífico, poscapitalista (de economía colaborativa), próspero y plural. La plataforma contará con una secretaría que se encargará de organizar la actividad diaria, asistir a los miembros, interconectar a las organizaciones y poner en marcha acciones conjuntas de alcance global. Estará compuesta por traductores, desarrolladores web, diseñadores gráficos y coordinadores.
En septiembre —si la pandemia lo permite— se celebrará un congreso en Reikiavik, la capital islandesa, que estará organizado por el partido de Jakobsdóttir, el Movimiento de Izquierda-Verde. En él se planificará la agenda del siguiente año de la Internacional Progresista.
La plataforma estará financiada exclusivamente con donaciones y las aportaciones de sus miembros. La organización no permite la financiación —ni la participación— de lobbies, ejecutivos de empresas de combustibles fósiles, aseguradoras de salud, compañías farmacéuticas, multinacionales tecnológicas, la banca (con alguna excepción), empresas de capital inversión, fondos de cobertura o compañías agroalimentarias.

Movilización, pensamiento y medios

La Internacional Progresista pretende actuar en tres planos: fomentar la movilización social, espolear la reflexión intelectual y promover la difusión de nuevas ideas progresistas a través de una red de medios de comunicación. En este último apartado, la idea es potenciar el impacto de las informaciones creando un nexo entre diferentes Redacciones. Entre las cabeceras que se adhieren al proyecto, figuran el estadounidense The Nation, la italiana Internazionale, la francesa Mediapart, la polaca Krytyka Polityczna, Africa Is a Country, Brasil Wire, Lausan Collective y The Wire India.

Teresa Forcades - Nuevo orden

13 maj 2013
Intervención de la monja benedictina y doctora en Salud Pública, Teresa Forcades, en el foro Enciende La Tierra, organizado por la Fundación CajaCanarias. Cautivos de un tiempo en el que sistemáticamente se pierden las energías solidarias, ¿cómo debemos reescribir nuestro papel de ciudadanos? ¿Sobre qué valores debemos refundar una sociedad en donde el bien común sea también una causa común? Y sobre todo, ¿es posibe construir un nuevo orden económico con, por y para las personas? Estos aspectos y otros más, son tratados por Teresa en su intervención.

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Resistencia

La disciplina social y el cuidado de lo común: “Solo el pueblo salva al pueblo”

Una reflexión sobre aquellas expresiones que circulan estos días para documentar los cambios en nuestras vidas y los riesgos e incertidumbres a los que nos enfrentamos, pero también para imaginar otros mundos posibles
MIRCO 7/05/2020
<p>Fuerza y ánimo</p> Fuerza y ánimo
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Nos resistimos a aceptar la advertencia de Camus de que “la peste anula el porvenir” y constantemente nos preguntamos “si volveremos al mismo tipo de vida, al mismo modelo productivo y mercado de trabajo precario, al mismo modelo de sociedad desigual” (Moreno). Nos inquieta si retornaremos a la destrucción del planeta, a la crisis como estado normal (Klein), a las democracias que se vuelven autoritarias (Laval y Dardot), a la austeridad de los recortes y las privatizaciones (Navarro), y al cierre ineficaz de fronteras, o a una poderosa vigilancia digital (Han). O si, en cambio, esta crisis sanitaria y social puede asestar un golpe letal al capitalismo (Žižek), al consumismo acelerado (Harvey), al dualismo cartesiano humano/naturaleza (Lebrón) y a nuestra destructiva movilidad (Han), que actúe como catalizador de luchas sociales existentes (Mezzadra) o para producir nuevos marcos de movilización social (Alba Rico y Herrero). Ante estas preguntas, toda respuesta resulta limitada. Aun así, durante el confinamiento, hemos hecho esta reflexión, asumiendo el reto gramsciano de reunir el pesimismo de la inteligencia con el optimismo de la voluntad para transformar lo que puede parecer un mal sueño en oportunidad.
Este estado de excepción biopolítico, por lo tanto, no solo instala la restricción de libertades, sino que transforma nuestra forma de relacionarnos y actuar
Aquí, reproducimos parte de un Diario discursivo de la cuarentena, una reflexión sobre algunas expresiones que circulan durante la pandemia, antes de que se hicieran cotidianas y perdiéramos la sensibilidad para detectarlas. Esta colección reflexiva e intuitiva, al igual que la que escribió Klemperer sobre la Lengua del Tercer Reich (LTI), refleja una búsqueda colectiva de sentido. Creemos que permite entender el potencial transformador de los discursos, que influyen en nuestra comprensión y acción ante la pandemia, y contribuye a detectar cómo distintos sectores de la sociedad responden con reflexiones y proponen alternativas. El recorrido empieza con el término disciplina social, la medida impuesta institucionalmente ante la emergencia, para desembocar en lo que creemos una vía de salida propuesta desde los movimientos sociales: los cuidados. En el camino iremos desbrozando expresiones que circulan estos días para dar cuenta de los cambios en nuestra forma de vida y los riesgos e incertidumbres a que nos enfrentamos, pero también para imaginar o facilitar el porvenir de otros mundos posibles. 
En el siglo XVII, explica Foucault en Vigilar y Castigar, surgió una forma nueva de afrontar las enfermedades infecciosas. Hasta entonces se había luchado contra la lepra aislando y expulsando de la comunidad al leproso, mientras que para evitar los contagios de la peste negra se confinó a toda la población en casa y se vigilaron sus movimientos. Este cambio “sanitario” dio lugar a otro “político”, el nacimiento de un régimen disciplinario. ¿Podríamos estar viviendo una situación equivalente?, ¿están emergiendo o consolidándose nuevas formas de gobierno, nuevas racionalidades políticas? En realidad, la situación actual no se aleja mucho de esa forma de tratar la peste: confinamiento, compartimentalización, vigilancia absoluta y análisis de la expansión viral en la población. Sin embargo, mientras que en aquella época contravenir la prohibición de salir era castigado con pena de muerte, hoy el confinamiento se presenta por encima de todo como una responsabilidad que, mayoritariamente, se autoimpone; lo que estaría en sintonía con el paso de un régimen disciplinar a otro gubernamental, en el que los sujetos interiorizan los discursos de poder dejando que estos gobiernen su conducta. De hecho, en muchos países, el confinamiento solo ha funcionado al presentarse como un acto de solidaridad, que se autoejerce por el bien común. En el Estado español el eslogan #YoMeQuedoEnCasa se ha viralizado y el lema de la campaña del Ministerio de Sanidad ha sido “Si te proteges tú, proteges a los demás”. El Gobierno apela así a la “disciplina social”, la responsabilidad y la unidad de acción como ingredientes centrales para recuperar la nación. 
En pocos días, este discurso neoliberal de autocontrol, generado desde las instituciones de gobierno, ha impregnado las prácticas ciudadanas y ha trasladado la disciplina tradicionalmente ejercida por fuerzas del orden al ámbito de la responsabilidad individual, activando la autovigilancia y la vigilancia entre iguales. Para evitar que se transgreda la disciplina social nacional, la gente vigila por las redes sociales lo que hacen otras personas y reprende desde los balcones a quien sale de casa. La llamada policía de balcón o los balconazis imponen la cuarentena de una forma más eficiente que las fuerzas de orden público y las sanciones económicas (como las multas aplicando la famosa ley Mordaza). El control se ejerce así a través de una multiplicidad de nodos, y no solo desde arriba, y ahí reside el éxito de esta forma de gobierno: todos estamos realizando medidas de control social. Este estado de excepción biopolítico, por lo tanto, no solo instala la restricción de libertades, sino que transforma nuestra forma de relacionarnos y actuar, y, como nos alerta Giorgio Agamben, puede conllevar una degeneración de las relaciones entre seres humanos y preparar un terreno fértil para que afloren la apatía y el miedo al otro(a), causando un daño irreversible a nuestra capacidad afectiva hacia el prójimo.
Sin embargo, ante el confinamiento, las respuestas no son unívocas, han surgido también prácticas individuales y colectivas de la ciudadanía que han reforzado los vínculos y la autoorganización en pro del común. Las prácticas comunicativas (por teléfono y redes sociales) se han vuelto más afectivas o de acompañamiento, y hemos creado nuevas formas de participación social. Desde la exterioridad de los balcones han aparecido prácticas performativas que canalizan socialmente las emociones de una parte de la población: los aplausos reconocen diariamente la labor de trabajadores esenciales, mientras que las caceroladas vehiculan el descontento ante la gestión institucional de la epidemia. Los recursos culturales se han abierto al común en el confinamiento y todo el mundo comparte listas de sugerencias, juegos para los más pequeños, memes y vídeos para poner humor al aislamiento.
En este escenario, en las redes sociales ha circulado un lema con excepcional poder movilizador: Solo el pueblo salva al pueblo. Los movimientos ciudadanos se han organizado para lanzar iniciativas autónomas de apoyo mutuo o releer en clave de cuidados aquellas que ya existían. De hecho, las iniciativas que están surgiendo nos ayudan a entender cómo los distintos territorios y colectivos experimentan la crisis sanitaria, social y económica derivada de la propagación de la covid-19. Es cierto que el virus invade por igual cuerpos más o menos precarizados, como apunta Butler. Sus efectos, sin embargo, operan de forma específica en cada territorio de acuerdo al acceso desigual a recursos materiales y simbólicos para hacerle frente; y nos atraviesan de forma particular según nuestra clase social, raza, género, sexualidad, edad, condición física y mental. 
Frente a las formas de violencia y desigualdad estructural que se intensifican en momentos de crisis, emergen alianzas interesantes entre trabajadoras, vecinos y organizaciones de base
Frente a las formas de violencia y desigualdad estructural que se intensifican en momentos de crisis (precariedad laboral y habitacional, racismo institucional, violencia machista y del sistema carcelario, feminización de los trabajos reproductivos, etc.), emergen alianzas interesantes entre trabajadoras, vecinos, organizaciones de base y otros actores sociales que, como descubre Mezzadra en el contexto italiano, se articulan en torno al “cuidado de lo común”. Es el caso de la ya existente lucha por la vivienda en el Estado español y las estrategias de sindicalismo social que, ante la emergencia social actual, ha devenido en una Huelga de Alquileres bajo los lemas: “Si no cobramos, no pagamos” y “Que paguen los [fondos] buitres”, llamando a la solidaridad de quien no ha visto sus ingresos reducidos. Esta huelga forma parte  del Plan de Choque Social, en respuesta al escudo social del Gobierno de España, entendido como un conjunto de medidas socioeconómicas insuficientes para paliar la crisis. La metáfora bélica y estática del escudo que protege se desplaza hacia un reconocimiento de la acción colectiva coordinada desde movimientos sociales e instituciones, y de la agencia de las afectadas por la actual crisis. Y lo mismo sucede con los movimientos de trabajadores y trabajadoras del campo, incluidas migrantes, que exigen al estado la regularización y el cumplimiento de sus derechos laborales. Todos estos movimientos convergen, además, en una defensa de una transformación ecosocialista decrecentista (Riechmann) y en impulsar alternativas postcapitalistas hacia formas de vida más sostenibles. Así, frente a la imagen de la ciudadanía que pasivamente recibe medidas asistencialistas, se consolida una imagen colectiva y autoorganizada en redes de apoyo mutuo y cuidados. 
La pandemia aparece no solo como distopía que evidencia las mutaciones del neoliberalismo y de las formas de gubernamentalidad, sino también como “un portal entre este mundo y el que está por venir” (Roy). Los cambios que conducen ineludiblemente hacia la distancia social y a una vida virtual nos reclaman que poner en marcha urgentemente formas de resistencia. Los discursos que están surgiendo abren así la posibilidad de visualizar y realizar en el presente otros mundos posibles. En este contexto, el discurso de los cuidados –pieza clave del debate ecofeminista y anticolonial contra el extractivismo y la desposesión– se expande más allá de la dimensión economicista relacionada con el reparto, la redistribución y el reconocimiento. El sostenimiento de la vida pasa entonces por construir vínculos fuera de la lógica mercantil del consumo (de personas, de cosas, de espacios, etc.), y nos conduce hacia nuevas formas de hacer política y de habitar territorios. Tal vez, como predice Han, “el virus no vencerá al capitalismo”, pero es posible que uno de sus efectos (al menos en nuestro ámbito más cercano) sea el fortalecimiento de los movimientos sociales existentes, el refuerzo de los discursos y prácticas de cuidados, y la reactivación de una parte del tejido social adormecido tras el ciclo de movilizaciones de 2011, que en este caso toman el espacio digital para autoorganizarse. Las preguntas que surgen ahora son: ¿trascenderán la pandemia estas formas de organización social? ¿Podemos extraer claves comunes de estas iniciativas que nos ayuden a pensar cómo enfrentar nuevas (y viejas) luchas sociales? 
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Este texto surge del intercambio de lecturas, vivencias e inquietudes durante el confinamiento en Madrid en un grupo de investigación MIRCO (Multilingüismo, Discurso y Comunicación) de la Universidad Autónoma de Madrid, en el que participaron, Lara Alonso, Marta Castillo, Paloma Elvira, Luisa Martín Rojo, Katrin Ahlgren, Camila Cárdenas, Fleur de Montbel, Noelia Fernández, Héctor Grad, Elisa Hidalgo, Adil Moustaoui, Lucia de la Presa y Anna Tudela.
Autor: MIRCO

Chalecos negros de Francia: una llamada a la autodefensa migrante

  Chalecos negros durante una manifestación en París / Foto: Chalecos Negros
Chalecos negros durante una manifestación en París / Foto: Chalecos Negros 29 abril, 2020 - PÚBLICO
Chalecos Negros (@gilets_noirs)
Nosotros, los chalecos negros, somos inmigrantes que trabajamos en negro o con los papeles de otra persona. Día a día, el Estado francés racista, de la mano de los patrones, nos hace trabajar en la obra, en comedores y limpiando el país. Sin papeles, estamos a merced de la sobrexplotación. En confinamiento, nos quedamos sin nada. Sin paro, sin dinero para pagar el alquiler, mantener a la familia o comer.
Somos inmigrantes que seguimos amenazados por la policía, que nos reprime y nos chantajea en nuestros propios espacios de vida. No hemos acabado con el OQTF (siglas en francés de Obligación de Abandonar el Territorio Francés) que la policía sigue repartiendo durante el confinamiento, los centros de retención siguen abiertos y nuestros compañeros enfermos siguen sufriendo en su interior.
Somos inmigrantes que viven en albergues de trabajadores extranjeros administrados por Adoma, Coallia o Adef (subcontratas del Estado francés) como si fueran cárceles. Al principio del confinamiento, los gerentes cerraron sus oficinas y dejaron de lado sus responsabilidades: nada de consignas, limpieza, apoyo. Pegan carteles en francés en las paredes del vestíbulo y cierran las salas de rezo y reunión. No limpian porque "la lejía es muy cara". Los gerentes solo se dejan ver para recoger los pagos de alquiler. Tras varias semanas, bajo la presión de la administración y de quienes no deberían estar gritando que viene el lobo diciendo que los albergues son "bombas sanitarias", los gestores han vuelvo. Nos amenazan con cortar el agua y la electricidad, simulan hacer pruebas, hacen listas de "ocupantes en exceso" ("sur-occupants"), que es como nos llaman. Desde hace varios años, los administradores quieren destruir la organización de nuestras vidas colectivas de migrantes explotados. Si vuelven hoy, no es para protegernos de la enfermedad, sino para amenazarnos con la expulsión y hacer una caza de 'sin papeles'.
Pero no hemos esperado a la represión sanitaria para organizarnos y defendernos contra el Estado, contra los gerentes, contra los patrones. Nosotros, los chalecos negros, nos apoyamos entre nosotros desde hace tiempo. Los albergues son lugares de organización política. Hemos puesto en marcha una caja de resistencia y organizado una red de suministros en los albergues para protegernos de la enfermedad. Con la ayuda de nuestros compañeros de las Brigadas de Solidaridad Popular, que apoyan esta autoorganización, recorremos los albergues para distribuir material. A los gerentes no les importamos: por tanto, nos protegemos nosotros mismos. En los albergues tenemos cultura de la solidaridad. Nos encargamos nosotros mismos de limpiar y desinfectar. Nuestros hermanos pequeños se organizan para que los de mayor edad no salgan a hacer la compra. Debemos encargarnos de esta tarea por nuestros compañeros, nuestros hermanos y hermanas, nuestros hijos y nuestros ancianos, porque de lo contrario no lo hará nadie.
Al interior, en diversos albergues nos organizamos en una lucha cuerpo a cuerpo contra los gerentes: rechazo al pago de alquileres en estas condiciones de explotación, cartas colectivas, operaciones de "puertas abiertas" para echar al administrador. No pagaremos, para preparar la respuestas contra la destrucción de la vida colectiva en los albergues y seguir nuestra lucha por los papeles y una vida digna.
Luchar para conseguir papeles y por nuestra dignidad
Queremos papeles. Pero no queremos una regularización de unos meses como en Portugal, solo para algunas personas que tienen su expediente en la prefectura o para quienes no tienen expediente judicial o no están amenazados con la deportación. No queremos una regularización como la de Italia, ofreciendo nuestros cuerpos para que los países europeos subsistan a nuestra costa. Trabajo por papeles, es un chantaje esclavista. No queremos papeles por razones de "salud pública" o para más "eficiencia económica".
Los papeles, hasta nueva orden, son la clave de una vida social digna: vivir en familia, libertad de circulación, trabajar, estudiar, cuidarse, tener un techo. Hemos pedido hasta la saciedad a diputados, gerentes, patrones, sindicatos y asociaciones que nos ayuden para ser "regularizados". Ha habido muchas peticiones, tribunas que le piden al Estado "proteger a los sin papeles", demasiados diputados que quieren "regularizar" para que sea más fácil enviarnos a hacer el trabajo sucio que nadie quiere hacer. No queremos papeles para hacer el trabajo que "los franceses no quieren hacer", sino para poder vivir dignamente.
Conseguiremos los papeles por nuestra cuenta, porque no queremos clasificaciones: no queremos que sea necesario demostrar méritos para conseguir papeles ni mendigarlos. Tenemos luchar. Hemos encontrado nuestra libertad en la lucha, porque nuestro miedo se ha acabado.
Desde noviembre de 2018, nosotros los chalecos negros, migrantes con o sin papeles, hijos e hijas de migrantes y personas solidarias, habitantes de albergues y de la calle, nos organizamos contra el Estado y sus cómplices. Exigimos papeles para todos y todas, sin condiciones. Llevemos aquí un día o diez años, hayamos trabajado o no. No solo queremos papeles, sino también romper el sistema que crea 'sin papeles'. Nos hemos manifestado ante el museo de la inmigración, ante el centro de retención de Mesnil-Amelot, hemos ocupado la Comedia Francesa, bloqueado la Prefectura de París, ocupado el aeropuerto de Roissy donde Air France deporta a los migrantes. Hemos atacado la sede de la empresa Elior, que hace dinero a cosat de los sin papeles, y 600 de nosotros nos hemos plantado ante el Panteón. Para exigir papeles y reunirnos con el Primer Ministro, para interpelar a los "grandes hombres", y para honrar a nuestros muertos en el Mediterráneo y en el desierto, sin sepulcro.
Tras el confinamiento, hacemos un llamamiento a todos los migrantes sin papeles y a la gente que comparte nuestras ideas y nuestras formas de actuar para apoyar nuestra lucha, ponerse en contacto con nosotros, volver al combate. Hay que organizar acciones, ocupaciones, manifestaciones, huelgas, bloqueos. No conseguiremos papeles, el fin de los albergues-prisión, viviendas dignas para todos ni la destrucción de los centros de retención si no es por la fuerza. Contra el racismo y la explotación. Por nuestra dignidad y nuestra libertad.
Ni calle ni cárcel, ¡papeles y libertad!
El miedo ha cambiado de bando, aquí estamos los chalecos negros.
Suscriben y apoyan: ACTA, Brigadas de Solidaridad Popular, Collectif Place des Fêtes, Genepi, Act-Up Paris, NPSP (Nagkakaisang Pilipino So Pransya), CREA (Campagne de Réquisition d'Entraide et d'Autogestion), Action Antifasciste Paris-Banlieue, CNT-SO, Observatorio del Estado de Emergencia Sanitaria, Coordinadora Militante Dijon, Ipeh Antifaxista.
Traducción de José Bautista a partir del manifiesto de los Chalecos Negros publicado en el diario francés L'Humanité el 24 de abril de 2020.

Pensamiento crítico. La pandemia: ¿Qué hay después del diluvio?

Por: Stella Calloni
30 abril 2020 | CUBADEBATE

Basta con mirar los rostros de los presidentes que representan al capitalismo salvaje en tiempos de la decadencia o escuchar sus “discursos”, para entender a algunos analistas que mencionaban cómo los imperios comienzan a suicidarse lentamente y se parecen a un monstruo que aún mantiene sus garras extendidas por diversos lugares del mundo, las que también se van contrayendo, debilitándose paulatinamente hasta el estertor final.
Pero allí no termina todo, porque se necesitan años para cambiar la piel de la serpiente del colonialismo, que nos recubre y nos encubre.
Seríamos ingenuos o excesivamente optimistas, si creyéramos que cuando hayamos superado este momento único en la historia —al menos de los últimos dos siglos— el día después de la pandemia el imperialismo caducará o desaparecerá automáticamente.
Lo que es evidente es la imposibilidad de continuar persistiendo en imponer un neoliberalismo a ultranza, cuyas consecuencias puso en evidencia la pandemia del Sars COVID-19 que asola al mundo, como un temible espejo astillado donde nadie quiere mirarse.
Si los países del llamado Tercer Mundo muestran las huellas dejadas por el depredador neoliberalismo, instrumento básico en este período capitalista, las naciones europeas, salvo raras excepciones, lo aplicaron a fondo y la pandemia puso en evidencia las gravísimas consecuencias del hechizo neoliberal, que además de la destrucción de lo que consideraban avances sociales o estado de bienestar, ahondó la dependencia de Estados Unidos hasta extremos coloniales y ayudó a profundizar las grietas en la Unión Europea, lo que será difícil reconstruir a corto plazo.
Precisamente con el resto que le queda al imperio —que por cierto es bastante, pero ya no tanto como para dominar al mundo entero, especialmente por la presencia en el escenario mundial de la milenaria China y Rusia— puede hacer un daño infinito a la humanidad, si por nuestro lado no estamos preparados, organizados, unidos y conscientes de que no podemos perder esa bisagra histórica que sucederá inevitablemente.
De hecho, presidentes como Donald Trump, en Estados Unidos, Jair Bolsonaro en Brasil, la potencia de América Latina, Boris Johnson en Gran Bretaña, o el mismísimo Primer Ministro de Israel Benjamín Netanyahu, y otros que se les parecen han logrado el milagro del mayor desenmascaramiento espontáneo en la historia del capitalismo.
En el caso de Estados Unidos, y América Latina vivimos el retorno de la Doctrina Monroe (1823) en el siglo XXI, (que resucitaron otros presidentes antes de Trump) así como el Destino Manifiesto (1845), cuya síntesis fue tan bien expresada por el eterno consejero de los mandatarios de Estados Unidos Paul Wolfowitz, cuando en marzo de 1992 publicó junto con el Consejo Nacional de Seguridad estadunidense  bajo el título “Washington debe dominar al mundo”.
Entre otros puntos advierte que la “política exterior americana (EE.UU) debe ponerse como objetivo convencer a sus eventuales rivales de que no necesitan jugar un papel mayor. Nuestro estatuto de única súper potencia debe perpetuarse mediante un comportamiento constructivo y una fuerza militar suficiente para disuadir a no importa qué nación o grupo de naciones que desafíen la supremacía de Estados Unidos. Estos deben tomar en cuenta  los intereses de las naciones industriales avanzadas para desanimarlas por si quieren desafiar el liderazgo norteamericano o intentaran cuestionar el orden económico y político establecido
“Debe mantenerse una potencia militar dominante para disuadir a eventuales rivales no vaya a ser que aspiraran a un mayor papel regional o global.
“En definitiva que el orden internacional está garantizado por los Estados Unidos y estos deben colocarse en situación de poder actuar  independientemente cuando una acción colectiva no pueda encargarse de ellos.
“Debemos actuar para impedir  el surgimiento de un sistema de seguridad exclusivamente europeo que pudiera desestabilizar a la OTAN”. En este caso se refieren también a los desafíos que existen en el Extremo Oriente ante los peligros de desestabilización  que sobrevendrían con un crecimiento  del papel “de nuestros aliados” en esa regiones. (“El juego de la mentira: las grandes potencias, Yogoslavia la OTAN y las próximas guerras” Michel Colon 1999, Ediciones Hiru. España)
Este documento base, como centenares que lo sucedieron,  sirvieron para los diseños de la llamada Guerra antiterrorista (sin precisar bien este término) infinita y sin fronteras destinada supuestamente a combatir el terrorismo, declarada por George W. Bush en 2001 después del atentado (nunca aclarado) contra las Torres Gemelas en septiembre de ese año.
Pero también es básico para entender la decisión estadounidense de lanzar la siniestra aventura de recolonizar América Latina en el siglo XXI, mediante un trazado geopolítico de guerra contrainsurgente donde jugará un papel especial la invasión de las Fundaciones dependientes de las Fundaciones madres de Estados Unidos y especialmente las que están bajo control de la CIA, y sus Organizaciones No Gubernamentales (ONG) en todo el continente, encargadas del trabajo permanente de limar las bases de los gobiernos que “insurgieron” a  lo largo de los primeros años del siglo XXI.
Los gobiernos de Estados Unidos, de ambos signos (republicanos y demócratas) fueron sorprendidos por este surgimiento de gobiernos, por primera vez elegidos por voto popular, después de Chile con el primer gobierno socialista  también elegido por votos en 1970, derrocado por un sangriento golpe dirigido y financiado por Washington en 1973.
Fue a partir de ese momento que EE.UU inició la siembra de dictaduras militares cuando ya tenían Paraguay y Brasil bajo su control desde 1954 y 19064 (respectivamente) en el Cono Sur,
Vale recordar que con esto intentaron nuevas estrategias después de la derrota en Vietnam en 1975 y a lo largo de lo que va del siglo XXI después de sus primeros intentos de someter a nuestra región con golpes “suaves” aunque siempre violentos, pero de otras características, que fracasaron en varios países como en Venezuela (2002), Bolivia (2008), Ecuador (2010) y logrando su objetivo en Haití (2004), Honduras, (2009) Paraguay (2012), Brasil (2016.)., Bolivia (2019)
En otras naciones lograron, a partir de una guerra mediática de características continental, de la infiltración de las estructuras judiciales y del parlamento, la instalación de algunos gobiernos propios vía electoral como sucedió en Argentina en 2015  que junto con Venezuela y Brasil constituían el triángulo básico de la integración regional que pretendía lograr la emancipación definitiva de nuestros países.
En ese cometido de recolonización continental Trump se obsesionó con Cuba, bajo la despiadada acción de sus asesores, un criminal de lesa humanidad, como Elliott Abrams, o el representante republicano Marcos Rubio que encabeza el grupo de sus colegas cubano americanos, protectores de los terroristas que actuaron y actúan contra el gobierno y el pueblo cubano produciendo muertes y daños considerables en la isla caribeña a la que hoy llaman “de la dignidad” por su capacidad de resistir un bloqueo por más de 60 años y profundizado ahora por el “equipo  de la muerte” del presidente de EE.UU.
Pero también contra Nicaragua en Centroamérica y por supuesto Venezuela, que ha soportado desde aquel lejano 2002, un esquema de intentos de  golpes permanentes, sin lograr su objetivo, a pesar del apoyo de la OEA para derrocar el gobierno de Nicolás Maduro que sucedió al gran líder de ese país, Hugo Chávez Frías a partir del 2013 y que se mantuvo por elecciones en todos los casos legales, constitucionales y transparentes. El bloqueo, el saqueo de los fondos venezolanos en estados Unidos y en otros países del mundo (sus asociados) el desabastecimiento, la baja de petróleo el impedir la llegada de alimentos y medicamentos que constituye también un crimen de lesa humanidad contar el pueblo venezolano.
Este rápido recorrido es para ubicarnos en el momento que estaba viviendo América Latina cuando llegó la pandemia, algo así como el diluvio universal, momento en que el gobierno de Trump, desesperado ante los cambios sucedidos en países como Argentina a fines del 2015 y México fines de 2018 y las resistencias de lo que poco se habla en el resto, especialmente en Colombia, su verdadera base de acción donde tiene instaladas nueve bases militares o Perú otro de los países sembrados de bases, como Panamá, Honduras, avanzando también su proyecto de militarización regional hasta Chile y Argentina.
Hay resistencia en Centroamérica y el Caribe y ahora en Bolivia después del golpe de EE.UU contra ese país que estaba a la cabeza del desarrollo y crecimiento social y económico propio, lo que es insostenible para Washington.
Trump no tuvo reparo alguno en duplicar su presencia militar en América Latina y enviar la Flota al Pacífico Sur y el Atlántico (Caribe) amenazando con invadir a Venezuela a principios de abril, cuando ya el corona virus avanzaba sin barreras por la criminal actitud del presidente norteamericano responsable de  que en este final de abril haya casi 800 mil infectados y 55 mil muertos.
Lo más grave es que en uno de los portaviones el Theodore Roosevelt enviado demencialmente para intervenir en Venezuela, con más de cuatro mil tripulantes, estacionado en la isla Guam, Pacífico Sur los marines comenzaron a infectarse con el coronavirus. Esto lo denunció el comandante capitán Brett Crosier, desesperado porque no le permitían descender a los infectados, por lo cual terminó enviando una carta que fue publicada por periódicos en EE.UU. Advertía que se requería una acción decisiva que era dejar bajar a tierra a la mayoría del personal para evitar un contagio mayor.
No estamos en guerra. Los marinos no tienen que morir. Si no actuamos ahora, no estamos cuidando adecuadamente nuestro activo más confiable: nuestros marinos. escribió Crosier.
No sólo le costó la separación de su cargo, sino que la soberbia  actitud de Tump y sus asesores, casi subleva a la marina, cuyo Ministro renunció finalmente. Ahora casi todos los tripulantes del Roosevelt están infectados, por lo que el gobierno decidió prohibir al Pentágono cualquier informe sobre soldados infectados y trascendió que esto está sucediendo en otras naves de la flota enviada para amenazar con invadir Venezuela,
Por otra parte resulta evidente que el virus avanzó en cada uno de los países donde los gobiernos como el de Brasil han acompañado las decisiones de Trump y están llevando a miles de  personas a la muerte. Este 26 de abril  se presentó una denuncia ante la ONU contra Bolsonaro por genocidio al no tomar medidas frente al coronavirus que hasta esta fecha dejó cinco mil muertos y más de 60 000 infectados.
Mientras el secretario general de la ONU, Antonio Guterres, ha pedido que se suspenda todo conflicto bélico, y después de continuar amenazando a  Venezuela, ahora Trump lo ha hecho con Irán advirtiendo que si alguna nave iraní se acerca a los barcos estadounidenses, enviadas provocadoramente a esas regiones, EE.UU hará “lo que debe hacer”.
A grande rasgos estamos asistiendo al salto al vacío, al suicidio lento del imperio, sin señales de tomar otro rumbo ni Estados Unidos ni Israel, Gran Bretaña, donde se preanuncian importantes cambios políticos ni en Francia, cuando el gobierno afronta una severa resistencia popular.
La diferencia en el manejo de la pandemia que ha puesto al mundo patas arriba como lo advertía el ya fallecido escritor uruguayo Eduardo Galeano en el libro Patas arriba: la Escuela del mundo al revés.
En este mundo al revés, donde se cruzan análisis y opiniones importantes  aún nadie puede predecir  cómo será  el reordenamiento mundial  aunque se sabe que la crisis económica no tendrá parangones en la historia, Pero tampoco la crisis social, en condiciones nunca antes previstas. Todos los proyectos del imperio se derrumban. China  se ha colocado en un punto muy alto en el tablero, la pequeña isla de Cuba, que está sometida a una campaña brutal, sigue demostrando su altísimo nivel en cuestiones de salud, de medicamentos, pero esencialmente de solidaridad  a tal punto de que los más importantes países del mundo requieren su ayuda.
Aunque se largan campañas mediáticas y de todo tipo, estas se estrellan con una realidad que los medios en manos del poder hegemónico no pueden encubrir y aunque sus estrategias han zoombificado a una buena parte de nuestras sociedades, ya nada es lo mismo. Nadie escucha cuando la muerte muerde los talones y los desesperados buscan el amparo  de los más estables, los más dignos, los que le dan la respuesta que buscan.
Las propias tecnologías  de las que tanto se ufana el imperialismo, quedan enmohecidas porque no le san servido para prever los sucesos que están fuera  del alcance, mientras los pueblos del mundo están mostrando sus siempre creativas estrategias de insumisos, al ir reencontrando en, pequeñas acciones de resistencia al ser humano que habían olvidado en su alienación capitalista, donde el hombre no cuenta y no se permite aceptarse como tal.
La falta de respuesta de un sistema que resultaba siempre triunfador en sus políticas de dominación, de  saqueo, de muerte, de despojo de la humanidad, los ha dejado desnudos. Lo que todos sabemos es que nada será lo mismo, pero también que sobre el dolor de este momento trágico,  donde se han  producido verdaderas “masacres “especialmente de ancianos. Una admiradora de Trump levantó un cartel donde proponía “sacrificar al débil, salvar la economía” y no fue el único con un contenido similar. Esto nos  muestra el verdadero rostro de un enemigo de grandes pies hundidos hoy por hoy en el lodo. Está en nosotros la posibilidad de encender las llamas en momentos en que las armas más poderosas no sirven para nada ante un invisible virus que sólo se puede ver con la última serie de microscopios y que como los dijimos antes nos ha dejado desnudos y a la intemperie.
Está en nosotros acostumbrados a una eterna resistencia nunca tan necesaria como en estos momentos, deshacer los hechizos brutales del capitalismo, apagar el imperio o al menos comenzar a hacerlo recurriendo a toda la capacidad de imaginación que también hemos visto resurgir en estos tiempos, como ha resurgido nuestras memoria histórica, la creatividad, nuestra memoria cultural y hemos comenzado a identificarnos, a tocarnos sin tocarnos, a llorar juntos a nuestros muertos, pero también a reinventar la vida que es en todos los casos un camino de liberación.

Noam Chomsky: “El único país que ha demostrado un internacionalismo genuino ha sido Cuba”

22 abril 2020 | CUBADEBATE

Noam Chomsky. Foto: Apu Gomez.
Para el filósofo y lingüista Noam Chomsky, la primera gran lección de la actual pandemia es que estamos ante otro fallo masivo y colosal de la versión neoliberal del capitalismo, que en el caso de Estados Unidos está agravado por la naturaleza de los bufones sociópatas que manejan el Gobierno liderado por Donald Trump.
Desde su casa de Tucson (Arizona) y lejos de su despacho en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), desde el que cambió para siempre el campo de la lingüística, Chomsky repasa en una entrevista con Efe las consecuencias de un virus que deja claro que los gobiernos están siendo el problema y no la solución.
¿Qué lecciones positivas podemos extraer de la pandemia?
La primera lección es que estamos ante otro fallo masivo y colosal de la versión neoliberal del capitalismo. Si no aprendemos eso, la próxima vez que pase algo parecido va a ser peor. Es obvio después de lo que ocurrió tras la epidemia del SARS en 2003. Los científicos sabían que vendrían otras pandemias, probablemente de la variedad del coronavirus. Hubiese sido posible prepararse en aquel punto y abordarlo como se hace con la gripe. Pero no se ha hecho.
Las farmacéuticas tenían recursos y son superricas, pero no lo hacen porque los mercados dicen que no hay beneficios en prepararse para una catástrofe a la vuelta de la esquina. Y luego viene el martillo neoliberal. Los Gobiernos no pueden hacer nada. Están siendo el problema y no la solución.
Estados Unidos es una catástrofe por el juego que se traen en Washington. Saben cómo culpar a todo el mundo excepto a ellos mismos, a pesar de que son los responsables. Somos ahora el epicentro, en un país que es tan disfuncional que ni siquiera puede proveer de información sobre la infección a la Organización Mundial de la Salud (OMS).
¿Qué opina de la gestión de la administración Trump?
La manera en la que esto se ha desarrollado es surrealista. En febrero la pandemia estaba ya haciendo estragos, todo el mundo en Estados Unidos lo reconocía. Justo en febrero, Trump presenta unos presupuestos que merece la pena mirar. Recortes en el Centro de Prevención y Control de Enfermedades y en otras partes relacionadas con la salud. Hizo recortes en medio de una pandemia e incrementó la financiación de las industrias de energía fósil, el gasto militar, el famoso muro…
Todo eso te dice algo de la naturaleza de los bufones sociópatas que manejan el Gobierno y que el país está sufriendo. Ahora buscan desesperadamente culpar a alguien. Culpan a China, a la OMS… y lo que han hecho con la OMS es realmente criminal. ¿Dejar de financiarla? ¿Qué significa eso? La OMS trabaja en todo el mundo, principalmente en países pobres, con temas relacionados con la diarrea, la maternidad… ¿Entonces qué están diciendo? “Vale, matemos a un montón de gente en el sur porque quizás eso nos ayude con nuestras perspectivas electorales”. Eso es un mundo de sociópatas.
Trump empezó negando la crisis, dijo incluso que era un bulo demócrata... ¿Puede ser esta la primera vez que a Trump le han vencido los hechos?
A Trump hay que concederle un mérito... Es probablemente el hombre más seguro de sí mismo que ha existido nunca. Es capaz de sostener un cartel que dice “os amo, soy vuestro salvador, confiad en mí porque trabajo día y noche para vosotros” y con la otra mano apuñalarte en la espalda. Es así cómo se relaciona con sus votantes, que lo adoran independientemente de lo que haga. Y recibe ayuda por un fenómeno mediático conformado por Fox News, Rush Limbaugh, Breitbart… que son los únicos medios que miran los republicanos.
Si Trump dice un día “es solo una gripe, olvidaos de ella”, ellos dirán que sí, que es una gripe y que hay que olvidarse. Si al día siguiente dice que es una pandemia terrible y que él fue el primero en darse cuenta, lo gritarán al unísono y dirán que es la mejor persona de la historia.
A la vez, él mismo mira Fox News por las mañanas y decide qué se supone que tiene que decir. Es un fenómeno asombroso. Rupert Murdoch, Limbaugh y los sociópatas de la Casa Blanca están llevando el país a la destrucción.
¿Puede esta pandemia cambiar la manera en la que nos relacionamos con la naturaleza?
Eso depende de la gente joven. Depende de cómo la población mundial reaccione. Esto nos podría llevar a estados altamente autoritarios y represivos que expandan el manual neoliberal incluso más que ahora. Recuerde: la clase capitalista no cede. Piden más financiación para los combustibles fósiles, destruyen las regulaciones que ofrecen algo de protección… En medio de la pandemia en EE.UU. se han eliminado normas que restringían la emisión de mercurio y otros contaminantes… Eso significa matar a más niños estadounidenses, destruir el medio ambiente. No paran. Y si no hay contrafuerzas, es el mundo que nos quedará.
¿Cómo queda el mapa de poder en términos geopolíticos despúes de la pandemia?
Lo que está pasando a nivel internacional es bastante chocante. Está eso que llaman la Unión Europea. Escuchamos la palabra “unión”. Vale, mira Alemania, que está gestionando la crisis muy bien… En Italia la crisis es aguda… ¿Están recibiendo ayuda de Alemania? Afortunadamente están recibiendo ayuda, pero de una superpotencia como Cuba, que está mandando médicos. O China, que envía material y ayuda. Pero no reciben asistencia de los países ricos de la Unión Europea. Eso dice algo…
El único país que ha demostrado un internacionalismo genuino ha sido Cuba, que ha estado siempre bajo estrangulación económica por parte de EE.UU. y por algún milagro han sobrevivido para seguir mostrándole al mundo lo que es el internacionalismo. Pero esto no lo puedes decir en EE.UU. porque lo que has de hacer es culparles de violaciones de los derechos humanos. De hecho, las peores violaciones de derechos humanos tienen lugar al sudeste de Cuba, en un lugar llamado Guantánamo que Estados Unidos tomó a punta de pistola y se niega a devolver.
Una persona educada y obediente se supone que tiene que culpar a China, invocar el “peligro amarillo” y decir que los chinos vienen a destruirnos, nosotros somos maravillosos.
Hay una llamada al internacionalismo progresista con la coalición que empezó Bernie Sanders en Estados Unidos o Varoufakis en Europa. Traen elementos progresistas para contrarrestar el movimiento reaccionario que se ha forjado desde la Casa Blanca (…) de la mano de estados brutales de Oriente Medio, Israel (…) o con gente como Orban o Salvini, cuyo disfrute en la vida es asegurarse de que la gente que huye desesperadamente de África se ahoga en el Mediterráneo.
Pones todo ese reaccionarismo internacional en un lado y la pregunta es… ¿serán contrarrestados? Y solo veo esperanza en lo que ha construido Bernie Sanders.
Que ha perdido…
Se dice comúnmente que la campaña de Sanders fue un fracaso. Pero eso es un error total. Ha sido un enorme éxito. Sanders ha conseguido cambiar el ámbito de la discusión y la política y cosas muy importantes que no se podían mencionar hace un par de años ahora están en el centro de discusión, como el Green New Deal, esencial para la supervivencia.
No le han financiado los ricos, no ha tenido apoyo de los medios… El aparato del partido ha tenido que manipular para evitar que ganase la nominación. De la misma manera que en Reino Unido el ala derecha del Partido Laborista ha destruido a Corbyn, que estaba democratizando el partido en una manera que no podían soportar.
Estaban dispuestos hasta a perder las elecciones. Hemos visto mucho de eso en EE.UU., pero el movimiento permanece. Es popular. Está creciendo, son nuevos... Hay movimientos comparables en Europa, pueden marcar la diferencia.
¿Qué cree que pasará con la globalización tal y como la conocemos?
No hay nada malo con la globalización. Está bien ir de viaje a España, por ejemplo. La pregunta es qué forma de globalización. La que se ha desarrollado ha sido bajo el neoliberalismo. Es la que han diseñado. Ha enriquecido a los más ricos y existe un enorme poder en manos de corporaciones y monopolios. También ha llevado a una forma muy frágil de economía, basada en un modelo de negocio de la eficiencia, haciendo las cosas al menor coste posible. Ese razonamiento te lleva a que los hospitales no tengan ciertas cosas porque no son eficientes, por ejemplo.
Ahora el frágil sistema construido está colapsando porque no puede lidiar con algo que ha salido mal. Cuando diseñas un sistema frágil y centralizas la manufacturación y la producción solo en un lugar como China… Mira Apple. Hace enormes beneficios, de los que pocos se quedan en China o en Taiwán. La mayor parte de su negocio va a parar a donde probablemente han puesto una oficina del tamaño de mi estudio, en Irlanda, para pagar pocos impuestos en un paraíso fiscal.
¿Cómo es que pueden esconder dinero en paraísos fiscales? ¿Es eso parte de la ley natural? No. De hecho en Estados Unidos, hasta Reagan, era algo ilegal. Igual que las compraventas de acciones. (...) ¿Eran necesarias? Lo legalizó Reagan.
Todo ha sido diseñado, son decisiones… que tienen consecuencias que hemos visto a lo largo de los años y una de las razones por las que encuentras lo que se ha mal llamado “populismo”. Mucha gente estaba enfadada, resentida y odiaba al gobierno de forma justificada. Eso ha sido un terreno fértil para demagogos que podían decir: soy tu salvador y los inmigrantes esto y lo otro.
¿Cree que, tras la pandemia, Estados Unidos estará más cerca de una sanidad universal y gratuita?
Es muy interesante ver esa discusión. Los programas de Sanders, por ejemplo, sanidad universal, tasas universitarias gratuitas… Lo critican en todo el espectro -ideológico-. Las críticas más interesantes vienen de la izquierda. Los columnistas más liberales del New York Times, CNN y todos ellos… Dicen que son buenas ideas, pero no para los estadounidenses.
La sanidad universal está en todas partes. En toda Europa de una forma u otra. En países pobres como Brasil, México… ¿Y la educación universitaria gratuita? En todas partes… Finlandia, Alemania, México… en todos lados. Así que lo que dicen los críticos en la izquierda es que Estados Unidos es una sociedad tan atrasada que no se puede poner a la altura del resto del mundo. Y te dice bastante de la naturaleza, la cultura y de la sociedad.

(Tomado de EFE)

Expresa Pérez Esquivel solidaridad con Cuba tras acto terrorista contra su embajada en EE.UU.

3 mayo 2020 | CUBADEBATE

Adolfo Pérez Esquivel. Foto: HispanTV.
Respuesta de Adolfo Pérez Esquivel a la Declaración del Comité Internacional Paz, Justicia y Dignidad a los Pueblos
Toda la solidaridad y apoyo al querido Pueblo cubano. Repudiamos la barbara agresión del gobierno de los EE.UU. contra la Embajada de Cuba en Washington.
Reclamamos poner fin al bloqueo impuesto por los EE.UU. a Cuba.  Los médicos y medicas cubanos están trabajando y llevando la solidaridad  por la vida en diversos países en momentos difíciles para la humanidad que deben enfrentar la Pandemia del Coronavirus que está provocando miles de muertos e infestados, incluso en los EE.UU. , que tiene actualmente más víctimas que en la guerra de Vietnam.
El Congreso de los EE.UU- tiene que tener el coraje y la decisión de levantar el bloqueo a Cuba.
Adolfo Pérez Esquivel
Premio Nobel de la Paz

(Tomado del Capítulo Cubano de Red en Defensa de la Humanidad)
URUGUAY
Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos

Marcha del Silencio – Verdad, Memoria y Justicia

05/05/2020 familiares


Marcha del Silencio: Son Memoria. Son Presente ¿Dónde Están?



Caras y Caretas

“Son memoria. Son presente. ¿Dónde están?, será la consigna de la Marcha del Silencio virtual

La organización Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos, emitió un comunicado con detalles sobre cómo se realizará la «movilización virtual» e instó a que mayo sea considerado «el mes de la Memoria».
marcha del silencio será virtual
6 mayo, 2020 - CARAS Y CARETAS
La organización ya había comunicado anteriormente que este año, y debido a la emergencia sanitaria decretada por el coronavirus, la tradicional Marcha del Silencio no sería presencial sino que se realizaría de forma virtual y desde los hogares.
Este miércoles, emitieron un comunicado que brinda algunos detalles sobre la dinámica de esta iniciativa que se realizará bajo la consigna “Son memoria. Son presente. ¿Dónde están?”. La convocatoria tiene varias consignas: el día 20 de mayo a las 19 hs se realizará una transmisión en vivo, en la cual se emitirá el video con las fotos de cada compañero y compañera detenido/a desaparecido/a. Invitan a la población a conectarse a esta actividad e informan que luego de cada nombre gritaran «presente» al unísono.
«Buscamos reflejar en estas acciones que la desaparición forzada, delito de lesa humanidad cometido por el terrorismo de estado, perdura hasta la actualidad. Y que restablecer la VERDAD y hacer JUSTICIA son tareas inseparables para que esos atroces crímenes del pasado no se vuelvan a cometer. Es en este sentido que los desparecidos son el centro y el eje de nuestro reclamo y denuncia», relata el comunicado.
«En este momento, donde los voceros de la impunidad provienen no sólo desde el Centro o Círculo Militar sino desde su nuevo partido político, hoy más que nunca, debemos unir todas las fuerzas para que nuestros reclamos sean una fuerza arrolladora que nadie pueda ignorar ni dejar de lado», agregan.
La marcha virtual
Por otro lado, invitan a colocar en cada hogar, espacio, lugar de trabajo, distintivos de esta lucha como lo son la margarita, las fotos de las personas detenidas desaparecidas, o frases vinculadas a la verdad, justicia, memoria y nunca más; así como de la 25ª Marcha del Silencio o cualquier objeto alusivo a la temática.
La tercer invitación consiste en utilizar los hashtags #marchadelsilencio2020 y #marchadelsilenciopresente al momento de compartir en redes sociales todas aquellas iniciativas relacionadas a esta fecha.
Además, el comunicado insta a que mayo sea el “Mes de la Memoria” y agradece la cantidad de propuestas y sugerencias que personas y colectivos les enviaron para intentar sustituir la tradicional marcha que se realiza por 18 de julio año tras año.
 
Sindicatos

«Se terminó el recreo»: trabajadores preparan paros y movilizaciones

Sunca, Sutel y otros sindicatos, comenzarán en los próximos días a desplegarse. La LUC y los Consejos de Salarios en el ojo de la tormenta.
Sunca para este miércoles de 9 a 13 horas por muerte de un trabajador
14 mayo, 2020 CARAS Y CARETAS
Mientras se discute en el parlamento la Ley de Urgente Consideración y más 70 grupos de actividad terminan sus convenios colectivos, los sindicatos se prepara para entrar en acción a partir de la próxima semana.
El Sindicato Único de la Construcción y Anexos (Sunca) se prepara para realizar, entre el 18 y 22 de mayo, 23 paros. Será un paro por cada departamento, más otros cuatro por cada rama anexa: extracción cerámica, hormigón y peajes. Las medidas serán acompañadas por asambleas en espacios públicos abiertos.
El sindicato exige al gobierno la convocatoria a los Consejos de Salarios ya que el convenio del Sunca venció en abril.
Otro que se mostró muy activo en los últimos días fue el Sindicato de Antel (Sutel). El lunes 18 una delegación de Sutel será recibida por la comisión del Senado que estudia la ley de urgencia. Para ese día, el sindicato convocó a sus afiliados a concentrarse en el entorno del edificio anexo del Palacio Legislativo a partir de las 15:30.
En otro orden, el Departamento de Trabajadores Públicos del Pit-Cnt pidió al gobierno la «convocatoria en carácter urgente» del Consejo Superior de Negociación Colectiva para el Sector Público y la Mesa Sindical Coordinadora de Entes propuso impulsar una canas básica de servicios públicos que se le otorgue de manera gratuita a la población vulnerable por los próximos tres meses.
Todas estas acciones de esta primera etapa tendrán su punto más alto con la realización de un acto con paro parcial convocado por el Pit-Cnt, el próximo jueves 4 de junio en el Palacio Legislativo.

Mesa Representativa ajusta plan de acción "en favor de los más desposeídos"

Martes, 12 Mayo 2020 19:34  PORTAL PIT-CNT

Mesa Representativa ajusta plan de acción "en favor de los más desposeídos"
La Mesa Representativa del PIT-CNT analizó la coyuntura nacional actual, evaluó distintos escenarios posibles de acción en defensa del trabajo y de las propuestas incluidas en la plataforma de la Intersocial y también realizó una evaluación "altamente positiva" del 1° de mayo.
Según informó el secretario general del PIT-CNT, Marcelo Abdala al término del encuentro desarrollado esta mañana en la sede de SUTEL, para el movimiento sindical las acciones desplegadas el 1° de mayo en todo el país, las caravanas realizadas en Montevideo y la participación de miles de familias desde sus casas, fueron un acontecimiento considerado "único en el planeta" como forma de conmemoración del Día Internacional de los Trabajadores y las Trabajadoras en tiempo de pandemia.
Por otra parte, la Mesa Representativa analizó los distintos aspectos estratégicos vinculados a la defensa del trabajo, la renta de transición en la emergencia, los ingresos y la salud de la población, todos temas incorporados en la plataforma de la Intersocial.
Abdala informó que se abordaron otros tópicos de la agenda del movimiento sindical como el rechazo frontal a la Ley de Urgente Consideración (LUC) "porque incluye muchos aspectos que consideramos negativos para la población y para la democracia". En este sentido, el secretario general del movimiento sindical adelantó que se comenzó a discutir el programa de acción y participación de los trabajadores y las trabajadoras en estos temas relevantes para el país y su gente. "Queremos defender el trabajo y a la gente. Estamos analizando qué va a suceder con la ronda de Consejos de Salario que está muy próxima y allí nuestra postura será defender el trabajo".
En el plano de la acción, Abdala sostuvo que los sindicatos y gremios están evaluando la posibilidad de la realización de una movilización en el entorno del Parlamento, "con la debida distancia social personal, con el respeto de todos los protocolos sanitarios y el uso de tapabocas", entre otras medidas. Una de las fechas posibles para dicha movilización es el 4 de junio. También se piensa en clave de actos, marchas en moto, bicicletas, caravanas con recaudos y cuidados.
Abdala aseguró que el movimiento sindical comenzó a mirar la perspectiva de realizar una gran acción cívica nacional en la que el PIT-CNT levante su plataforma reivindicativa.  
La Mesa Representativa pasó a cuarto intermedio para el día 27 de mayo donde los sindicatos se pronunciarán sobre todos estos asuntos debatidos en la presente jornada.

Consejos de Salarios

Consultado sobre la postura del PIT-CNT en relación a la convocatoria o no de los Consejos de Salarios en la actual coyuntura nacional, Abdala explicó que "la única propuesta que hay es muy concreta: si se quiere evitar la convocatoria -que podría ser entendido de sentido común- a una ronda masiva generalizada de Consejos de Salarios este año, lo que hay que hacer es prolongar los convenios que están vigentes hasta el 30 de junio del año que viene. Dichos convenios, que están vigentes lo que garantizan es la inflación y que en algún punto, los salarios no se deterioren. Hasta ahora no han habido otras propuestas". Al respecto, consideró que hay quienes intentan colocar en este punto la oposición entre el trabajo y el salario, pero "para nosotros  van las dos cosas juntas".

LUC

En relación a la decisión del gobierno de eliminar los artículos 268 y 269, que pertenecen al capítulo 18 de la LUC, llamado "Modificación del régimen jurídico de la Unidad Reguladora de Servicios de Comunicaciones (Ursec)", Abdala dijo que esos artículos aparecen en otros formatos en otras leyes. "Yo creo que es una buena señal que indica que en los temas estratégicos debemos tener el debido tiempo para conversarlos. Si es por nuestra opinión, toda la LUC -que es una ley ferrocarril, que tiene más de 500 artículos- debería ser descompuesta en leyes normales con cada uno de los capítulos que están allí establecidos y darle además a la democracia nacional el debido tiempo para abordar un debate serio, en tiempos de pandemia, para analizar de qué manera podemos generar políticas públicas en las distintas materias que ésta tiene. No debería ser considerada una régimen de urgente consideración. Esto no lo decimos  para demorar el debate, si no para abordarlo con la debida seriedad. Yo creo que es absolutamente transcendente que se permita el debate democrático porque de estos problemas salimos todos juntos y eso requiere trabajo y discusión", concluyó.

AUTE solicita al Directorio que suspenda cortes de servicio por falta de pago

Miércoles, 29 Abril 2020 19:54 - PORTAL PIT-CNT

AUTE solicita al Directorio que suspenda cortes de servicio por falta de pago
El sindicato de UTE (AUTE) solicitó al Directorio del ente estatal que suspenda los cortes de luz y garantice el acceso a la energía eléctrica a todas las familias que hoy están atravesando una situación económica complicada.  
Texto del comunicado:
Directorio de UTE
Conocido por todas y todos es la difícil situación económica que están atravesando muchísimas familias uruguayas en el marco de la crisis que transita nuestro país. En este sentido, y en el marco que se está comunicando a los usuarios que se comenzarán los cortes de servicio por impago, desde AUTE estamos solicitando al Directorio de UTE que SUSPENDA LOS CORTES DE SERVICIO a las tarifas domiciliarias en todo el territorio nacional a la espera de analizar y encontrar soluciones específicas para cada caso.
Entendemos que se deben realizar los mayores esfuerzos institucionales para mantener el acceso a la energía eléctrica dentro de la regularidad a todas las familias que hoy están atravesando una situación económica complicada.
Por AUTE
Gabriel Soto
Presidente

Datos del BPS

Más de 11.000 trabajadores perdieron el empleo en dos meses

Desde que comenzó la emergencia sanitaria 176.159 personas fueron enviadas al seguro de paro.
8 mayo, 2020 - CARAS Y CARETAS
Desde el 13 de marzo a la fecha fueron enviados al seguro de paro unas 149.190 personas según los últimos datos del BPS.
La mayoría de los envíos al seguro fueron por reducción de la jornada laboral o por suspensión transitoria del vínculo del trabajador con la empresa.
Pero hay 11.627 trabajadores que fueron al seguro de paro con causal de despido, es decir que perdieron su empleo.
Fueron 6.689 en marzo y 4.938 en abril, de acuerdo a los datos oficiales del BPS.
La emergencia sanitaria fue decretada por el gobierno el 13 de marzo. En marzo, hasta esa fecha, se registraban unas 8.000 solicitudes de envíos al seguro de paro.
Después del viernes 13 se dispararon los envíos al seguro y marzo terminó con un total de 81.779 solicitudes.
En abril siguieron las consecuencias en la economía y el empleo, con un total de envíos al seguro de paro de 67.411.
Tras la declaración de emergencia sanitaria el gobierno creó un seguro de paro especial, que en marzo y abril incluyó a 26.969 trabajadores,
Sumando ambos regímenes de seguro de paro (el tradicional y el especial) fueron en total 176.159 trabajadores enviados al seguro de desempleo.
El sector que más trabajadores envió al seguro fue el comercio al por mayor y menor: 14.413 en abril y 21.715 en marzo.
Le sigue la industria manufacturera, con 12.870 en abril y 12.423 en marzo.

Pit-Cnt evalúa «gran manifestación» para el 4 junio

El objetivo es “defender la salud del pueblo, defender el trabajo, los ingresos, la renta en la emergencia y posicionarse en contra de la ley de urgente consideración». Aclaran que se realizaría con las debidas precauciones y medidas sanitarias.
12 mayo, 2020 CARAS Y CARETAS
Este martes 12 se reunió la Mesa Representativa del Pit-Cnt y se definió evaluar la posibilidad de realizar una movilización. La fecha tentativa sería  el próximo 4 de junio en las inmediaciones del Palacio Legislativo.
Se trata de una iniciativa para “defender la salud del pueblo, defender el trabajo, los ingresos, la renta en la emergencia y posicionarse en contra de la ley de urgente consideración», así lo consignó Radio Uruguay citando las declaraciones del dirigente Marcelo Abdala.
El sindicalista también afirmó que la “gran movilización” se organizaría con el debido mantenimiento de distancias y uso de tapabocas.

Pereira: "La inflación, un impuesto silencioso que se come nuestro ingreso"

Jueves, 07 Mayo 2020 16:22 - PORTAL PIT-CNT

Pereira: "La inflación, un impuesto silencioso que se come nuestro ingreso"
El dato de ayer de la inflación es muy duro para los que vivimos de ingresos fijos, el guarismo llegó al 10,9%.
Ese dato da cuenta del impacto de los precios en la reducción de la capacidad de compra de nuestro salario, y se agrava cuando tomamos nota, por segundo mes consecutivo, de que son los precios de alimentos y las tarifas las que explican esta suba del 2% de la inflación y por lo tanto golpea más fuerte en los sectores más pobres de la población.
Todos vemos cuando vamos a comprar nuestros alimentos o nuestros productos sanitarios, que los remarques son permanente y en algunos casos hirientes. Algunos productos de la canasta sanitaria llegaron a multiplicar por 10 el valor, con niveles de especulación inentendibles, una clara mercantilización de la salud.
Hoy es más vigente que nunca la necesidad del control o el acuerdo de precios para evitar esta sangría en los salarios de los trabajadores, jubilados y pensionistas.
Fernando Pereira
Presidente del PIT-CNT

¿QUE CULPA TIENE EL COVID?

Curtiembre París: la primera ocupación obrera del período Lacalle

Hoy martes 5 de mayo, a las 16.30, se produjo un acontecimiento que deberá ser recordado: la primera ocupación obrera de este período de gobierno; en plena pandemia una plantilla de obreros fabriles fue desmantelada y nada tuvo que ver el coronavirus con esto.
Intervención del sindicato frenó los despidos en la curtiembre Zenda
Por José López Mercao 5 mayo, 2020 - CARAS Y CARETAS
La curtiembre París está ubicada en Santa Lucía e Itapé, en el corazón de Nuevo París, el barrio de los curtidores por excelencia. Propiedad de la familiar Bzurovski, es una de las seis curtiembres que quedan de una industria que en otros tiempos hizo del Paso Molino uno de los mayores centros comerciales de Montevideo. Cinco de las fábricas sobrevivientes están enclavadas en Montevideo, la otra en Paysandú.
Este martes, 5 de mayo, a las 16.30, los operarios ocuparon la curtiembre, en protesta por el despido de 118 trabajadores (110 hombres y ocho mujeres), a quiénes rechazaron extender el seguro de desempleo, condicionando el pago del despido a que el 100% de los afectados por el mismo acepten la medida y se abstengan de efectuar cualquier tipo de reclamo contra la empresa. La medida afecta además a 18 de los 20 delegados sindicales del comité de base París, de la Unión de Obreros Curtidores (UOC).
En diálogo con Carlos Bico, presidente de la UOC, este aclaró que «esto no tiene nada que ver con la pandemia ni cosas por el estilo. La patronal argumenta que un año atrás perdieron un cliente muy importante y que eso les reducía el volumen de ventas».
«La medida la tomaron el 20 de febrero, cuando todavía no había emergencia sanitaria. Desde entonces hicimos todo lo posible por seguir la vía negociadora, pero la empresa fue refractaria a todo acuerdo».
Acerca del total de trabajadores afectados por las medidas, Bico expresa que «son 118 los trabajadores despedidos, entre 100 y 120 a los que se prorrogó el seguro de paro y 20 que hoy están trabajando».
Ante la pregunta de si quiénes estaban trabajando cuestionaban al sindicato, Bico lo negó enfáticamente: «Tenemos un porcentaje de afiliación del 90%, lo que habla a las claras de la unidad que tenemos. Los motivos para esta medida no son económicos. Incluso entre los compañeros que quedaron trabajando está el secretario general del sindicato, una persona respetada por todos. Se trata de una maniobra para desprestigiarlo».
A esta situación de despidos generalizados se agrega la intención de la empresa de pagar las indemnizaciones en diez cuotas: «Algo inconcebible y crítico, más si se toma en cuenta por la situación que atraviesa la sociedad en su conjunto».
La posición del comité de base de la curtiembre fue clara en cuanto a que el sindicato no negociaba despidos. Esa, dice Bico, «es una posición histórica de la que no nos vamos a bajar. Sin embargo, apremiados por la necesidad los compañeros dijeron que accederían a que se pagara en tres cuotas, cosa que nos limitamos a transmitir. Como esperábamos, obtuvimos una negativa».
En cuanto a la medida de ocupación en sí, Bico recuerda que es «la primera ocupación que se da en este período. Y no nos dejaron otra salida. Los sindicatos y el barrio se han portado de manera excelente, pero sabemos que las condiciones no son las mejores. Más allá de la actual coyuntura, en dos años cayó la mitad del empleo del sector y en una década se perdieron mas de ocho mil empleos. Pero no nos dejan otro camino que el de la lucha, aunque la movilización se haga difícil con tapabocas, alcohol en gel, manteniendo la distancia. Pero somos trabajadores y sabremos estar a la altura de las circunstancias».

Entrevista para el períodico digital "Puente Aéreo", que se autodefine como una publicación "para lectores con espíritu cosmopolita".
Divulgo la entrevista de Lucía, porque me parece contiene un buen abordaje de la historia reciente. En ella, el testimonio de un militante individual no sustituye para nada la presencia de las masas en movimiento, el actor fundamental de todo proceso histórico.  Para no consentir con errores de percepción muy extendidos: ingresé al MLN (T) [Movimiento de Liberación Nacion - Tupamaros] en setiembre de 1968, luego no soy miebro fundacional. No es nada sustancial, pero hace a la verdadera historia.
Abrazos fraternosJorge Zabalza

#PUENTEAEREO

Para lectores con espíritu cosmopolita
  • En­tre­vis­tas

Jor­ge Za­bal­za, el úl­ti­mo tu­pa­ma­ro re­bel­de

por Lu­cia Sa­bi­ni Fra­ga
Jor­ge Za­bal­za apa­re­ce a lo le­jos ca­mi­nan­do con su ove­je­ro ale­mán. Ca­mi­na len­to, tie­ne un ba­lan­ceo ca­rac­te­rís­ti­co que no apu­ra aun­que vea gen­te en la puer­ta de su casa. Lle­va pues­to ojo­tas, short y una re­me­ra roja. Su pelo lar­go y blan­co la cae por los hom­bros, y está fla­co, muy.
Vive en una ca­si­ta fren­te al mar, en el ba­rrio San­ta Ca­ta­li­na des­de hace más de 30 años, una es­pe­cie de ter­cer cor­dón del co­n­ur­bano mon­te­vi­deano. En la es­ca­la de esta ciu­dad eso sig­ni­fi­ca me­nos de 45 mi­nu­tos un do­min­go; hora y pico un día há­bil. Po­cas fre­cuen­cias de co­lec­ti­vos, ca­lles de tie­rra, ba­su­ra acu­mu­la­da, jó­ve­nes con­su­mien­do sus­tan­cias y la­bu­ran­tes de todo tipo que vie­nen y van para la ciu­dad.  
Tie­ne 77 años y está ju­bi­la­do, aun­que par­ti­ci­pa de la vida so­cial y po­lí­ti­ca de su ba­rrio y los ba­rrios lin­de­ros: hay una re­cien­te toma de 500 fa­mi­lias a la que es­tu­vo asis­tien­do de cer­ca en su pro­ce­so. Enoja­do, en­tre otras co­sas, con el Fren­te Am­plio por­que sacó una ley en el año 2006 que ti­pi­fi­ca a las ocu­pa­cio­nes de te­rreno como “usur­pa­ción”, un de­li­to cas­ti­ga­do pe­nal­men­te. Su his­to­ria es bas­tan­te in­tere­san­te: fue miem­bro fun­da­cio­nal del Mo­vi­mien­to de Li­be­ra­ción Na­cio­nal – Tu­pa­ma­ros (MLN-T), y con el tiem­po uno de los prin­ci­pa­les di­ri­gen­tes de esa gue­rri­lla sur­gi­da con fuer­za en la dé­ca­da del 60. 
***
Al ha­blar de la asun­ción del nue­vo go­bierno de cen­tro-de­re­cha, no se mues­tra tan preo­cu­pa­do. Su en­fren­ta­mien­to abier­to con el Fren­te Am­plio y sus ex com­pa­ñe­ros de gue­rri­lla, lo han vuel­to es­cép­ti­co de cuán­to real­men­te pue­de lle­gar a cam­biar la cosa. “Yo no sé qué gran­des cam­bios va a ha­ber. Se van a agu­di­zar al­gu­nas co­sas y va a ha­ber una sen­si­bi­li­dad muy dis­tin­ta fren­te a las ne­ce­si­da­des de los tra­ba­ja­do­res y de los sec­to­res más des­pro­te­gi­dos. Pero el mo­de­lo es el mis­mo”, ase­gu­ra. Cuan­do se re­fie­re al mo­de­lo, es­pe­ci­fi­ca: in­ver­sio­nes ex­tran­je­ras, deu­da ex­ter­na, subor­di­na­ción al ca­pi­tal fi­nan­cie­ro.  
Con­si­de­ra que la es­tra­te­gia del Par­ti­do Na­cio­nal y su fu­tu­ro pre­si­den­te fue in­te­li­gen­te: po­ner a to­dos los es­pa­cios a dis­cu­tir ma­ti­ces del enor­me pa­que­te de me­di­das (la Ley de Ur­gen­te Con­si­de­ra­ción, LUC) que se tra­ta­rá los pri­me­ros días de mar­zo en el Par­la­men­to uru­gua­yo; en­tre las que se en­cuen­tra la po­si­ble pri­va­ti­za­ción de em­pre­sas na­cio­na­les del Es­ta­do. “Esto trae di­vi­sión aden­tro del Fren­te, por­que las reac­cio­nes no son las mis­mas. Den­tro del FA hay gen­te que tam­bién en­tien­de que pue­de ser via­ble la des­mo­no­po­li­za­ción de AN­CAP”. Con el tema de DDHH, re­co­no­ce que el pa­no­ra­ma pue­de cam­biar: “Ahí sí va a ha­ber di­fe­ren­cias: mas allá de que real­men­te los go­bier­nos de Mu­ji­ca y de Ta­ba­ré poco hi­cie­ron en ma­te­ria de De­re­chos Hu­ma­nos, algo hi­cie­ron. Y ha­bía una sen­si­bi­li­dad, es­cu­cha­ban a los fa­mi­lia­res, ha­bía un lu­gar don­de ir a que­jar­se. Bueno, con este hom­bre yo creo que eso está todo per­di­do”.
Para Za­bal­za, el pro­ble­ma si­gue ahí: el la­bu­ran­te “no en­tien­de cuá­les son las cau­sas de que él ten­ga que vi­vir acá y de que ten­ga la obli­ga­ción de le­van­tar­se to­das las ma­ña­nas para ir a tra­ba­jar, no sabe por qué es. No sabe por­que lo que pro­du­ce no va a pa­rar a su bol­si­llo”. Hay una ex­clu­sión de la vida po­lí­ti­ca de las gran­des ma­sas, se­gún ex­pli­ca, se con­vir­tie­ron en “anal­fa­be­tos po­lí­ti­cos”.   
***
Se lo nota algo ner­vio­so. El día des­pués de esta nota re­ci­bi­rá en su casa al hijo de Car­los Bur­gue­ño, un ci­vil que re­sul­tó muer­to por las fuer­zas gue­rri­lle­ras el 8 de oc­tu­bre de 1969, en la ma­lo­gra­da “Toma de Pan­do” que con­sis­tió en un asal­to ar­ma­do y sor­pre­si­vo a la co­mi­sa­ría, el cuar­tel de bom­be­ros, la cen­tral te­le­fó­ni­ca y va­rios ban­cos de esa ciu­dad uru­gua­ya. En esa toma tam­bién mu­rió el her­mano de Za­bal­za, un jo­ven de ape­nas 21 años; y car­gar con las cul­pas no pa­re­ce ta­rea fá­cil.
Ade­más de ser miem­bro fun­da­cio­nal de Tu­pa­ma­ros, for­mó par­te del gru­po de los 9 rehe­nes que los mi­li­ta­res tu­vie­ron pre­sos más de 11 años, como el ex pre­si­den­te uru­gua­yo Pepe Mu­ji­ca, en con­di­cio­nes de ais­la­mien­to. Sin em­bar­go, la his­to­ria re­ta­ceó al­gu­nas fi­gu­ras y enar­bo­ló otras: la fa­mo­sa pe­lí­cu­la de co­pro­duc­ción his­pano-ar­gen­tino-uru­gua­ya “La no­che de 12 años” re­la­ta solo las pe­ri­pe­cias de tres de ellos, in­clu­yen­do al ex pre­si­den­te, pero nada dice de los otros 6.  
La ex­pe­rien­cia nues­tra fue muy dis­tin­ta, no­so­tros no vi­vi­mos en mar­ti­ro­lo­gio”, afir­ma des­en­con­tra­do con la ver­sión ofi­cial. Mien­tras que el gru­po de la pe­lí­cu­la está in­te­gra­do por “Pepe” Mu­ji­ca, Eleute­rio Fer­nán­dez Hui­do­bro y Mau­ri­cio Ro­sen­cof; a él le tocó com­par­tir el edi­fi­cio (aun­que no las cel­das por su­pues­to) con Ju­lio Ma­re­na­les y Raúl Sen­dic, éste úl­ti­mo fun­da­dor del MLN y re­fe­ren­te his­tó­ri­co de la iz­quier­da uru­gua­ya. 
Para lo pri­me­ro que nos or­ga­ni­za­mos fue para una fuga, tu­vi­mos un año y me­dio con esa fuga. Que fra­ca­só por su­pues­to, pero du­ran­te ese año y me­dio no­so­tros clan­des­ti­na­men­te en las na­ri­ces de los mi­li­cos, lo­gra­mos se­rru­char los cla­vos que unían las cha­pas del te­cho, de ma­ne­ra que la cha­pa po­día le­van­tar­se, y aflo­jar to­dos los bu­lo­nes de las re­jas -que no eran de hie­rro, sino de dur­mien­tes de fe­rro­ca­rril abu­lo­na­dos-, de for­ma tal que po­día­mos abrir y sa­lir de la cel­da”. Re­cuer­da cada de­ta­lle de ese in­ten­to de fuga que fra­ca­só por­que arri­ba no sólo ha­bía cha­pa sino tam­bién pa­ne­les de un puen­te mi­li­tar de es­ti­lo Bay­ley: “Para eso hubo que ha­cer una po­lí­ti­ca de con­tac­to con los sol­da­dos, que ga­na­ran en con­fian­za… por­que ha­bía que me­ter­se allí en el sub­te­rrá­neo, los mi­li­cos le dis­pa­ra­ban a es­tar allí aba­jo. No­so­tros apro­ve­chá­ba­mos cuan­do ha­bía mo­men­tos de des­cui­do y hi­ci­mos el tra­ba­jo ése. Fi­já­te que para aflo­jar los bu­lo­nes te­nía­mos que usar las cu­cha­ras que nos da­ban du­ran­te 25, 30 mi­nu­tos para co­mer. Te­nías que co­mer –dice mien­tras hace un ges­to con la mano des­nu­da sin cu­bier­tos– y es­tar tra­ba­jan­do con eso”. 
Si Za­bal­za tu­vie­ra que re­su­mir esa es­ta­día en pri­sión, di­ría que fue una lu­cha. Des­pués del in­ten­to fa­lli­do, los tres sa­bían que les es­pe­ra­ban mu­chos años allí den­tro. “Fue un es­fuer­zo que nos man­tu­vo vi­vos. Y a par­tir de ahí di­ji­mos, du­ran­te diez años va­mos a so­bre­vi­vir como sea, y a los diez años va­mos a lar­gar la lu­cha. Y así lo hi­ci­mos. Pero du­ran­te esos diez años so­bre­vi­vir, im­pli­ca­ba so­bre­vi­vir con dig­ni­dad”.
Como con­tra­par­ti­da, car­ga las tin­tas so­bre el otro gru­po, el de los fa­mo­sos. “A no­so­tros nos in­te­rro­ga­ron tam­bién. Raúl es­tu­vo cua­tro ho­ras, yo es­tu­ve cua­tro ho­ras, y Ma­re­na­les es­tu­vo cin­co. Y des­pués nos tra­je­ron y nos die­ron un pa­pel para que des­cri­bié­ra­mos a los com­pa­ñe­ros. Nos ne­ga­mos y nos man­tu­vi­mos por­que ade­más ha­cía cin­co años que es­tá­ba­mos de rehe­nes y eso era un tan­teo para sa­ber en que po­si­ción es­ta­bas vos. Y lo to­ma­mos como eso: si nos man­te­nía­mos fir­mes, o si des­pués de cin­co años de ais­la­mien­to ya es­tá­ba­mos en­tre­ga­dos. El he­cho es que hay una des­crip­ción de per­fi­les de com­pa­ñe­ros, es­cri­ta por Fer­nán­dez Hui­do­bro, que es de la mano de él, in­du­da­ble­men­te”.
Sos­pe­cha y se en­co­ge de hom­bros para que los de­más sa­quen sus pro­pias con­clu­sio­nes: “Algo hubo, evi­den­te­men­te… y bueno, al­gún día se sa­brá cuan­do se desar­chi­ven los do­cu­men­tos y apa­rez­can”.
***
Pos­te­rior a la cár­cel eter­na, el MLN se de­ba­tió en­tre qué tipo de de­mo­cra­cia cons­truir. A di­fe­ren­cia de Ar­gen­ti­na, la dic­ta­du­ra en Uru­guay no cayó por peso pro­pio, ni por una gue­rra: en 1980 el go­bierno mi­li­tar –con­ven­ci­do de su bue­na ima­gen– lla­mó a una con­sul­ta po­pu­lar don­de pro­po­nía mo­di­fi­car la Cons­ti­tu­ción de 1967, crean­do un ré­gi­men cons­ti­tu­cio­nal pero con los mi­li­ta­res al man­do. Para su sor­pre­sa, la pro­pues­ta fue re­cha­za­da por la po­bla­ción en casi un 57% (que igual­men­te de­mues­tra la gran can­ti­dad de gen­te que voto por el SÍ) y el go­bierno de fac­to de­bió ini­ciar el pro­ce­so de aper­tu­ra de­mo­crá­ti­ca y lla­mar a elec­cio­nes. Allí so­bre­vino otro tris­te ca­pí­tu­lo de esta his­to­ria: en 1984 tras años de frus­tra­das ne­go­cia­cio­nes, se fir­ma el fa­mo­so “Pac­to del Club Na­val”, que con­sis­tió en un acuer­do en­tre la cú­pu­la mi­li­tar por un lado, y el Par­ti­do Co­lo­ra­do, el Fren­te Am­plio y otros es­pa­cios hoy inexis­ten­tes, por el otro. Sig­ni­fi­ca­ti­va­men­te, el Par­ti­do Na­cio­nal (el par­ti­do del ac­tual pre­si­den­te) se negó a par­ti­ci­par en ese mo­men­to de los acuer­dos con la dic­ta­du­ra sa­lien­te.  
Como re­sul­ta­do de las ne­go­cia­cio­nes, el go­bierno con­vo­có a elec­cio­nes el 25 de no­viem­bre de ese mis­mo año, en las cua­les fue ele­gi­do pre­si­den­te Ju­lio Ma­ría San­gui­net­ti, del Par­ti­do Co­lo­ra­do, que asu­mió en mar­zo de 1985. Del otro lado, las con­ce­sio­nes exi­gi­das fue­ron la ga­ran­tía de im­pu­ni­dad que ne­ce­si­ta­ban los mi­li­ta­res para re­ti­rar­se en paz: la apro­ba­ción de la ley de “con­va­li­da­ción de los ac­tos del go­bierno de fac­to” en mar­zo de 1985, o la fa­mo­sa ley 15.848 de “Ca­du­ci­dad de la Pre­ten­sión Pu­ni­ti­va del Es­ta­do” im­pul­sa­da el si­guien­te año (y po­pu­lar­men­te co­no­ci­da como “Ley de Ca­du­ci­dad” o “Ley de Im­pu­ni­dad”) que como su nom­bre in­di­ca, im­pli­ca­ba no dar lu­gar a pro­ce­sos pe­na­les o pu­ni­ti­vos para fun­cio­na­rios mi­li­ta­res y po­li­cia­les res­pec­to a de­li­tos co­me­ti­dos du­ran­te toda la dic­ta­du­ra. Esta ley si­gue vi­gen­te, aun­que tuvo re­cor­tes y mo­di­fi­ca­cio­nes du­ran­te los go­bier­nos fren­team­plis­tas.
Za­bal­za es­tu­vo pre­so 15 años, de los cua­les 11 fue­ron en es­ta­do de ais­la­mien­to: des­de el 7 de se­tiem­bre del 73 –una para nada in­creí­ble coin­ci­den­cia con la pre­via del gol­pe en Chi­le– has­ta sep­tiem­bre del 84, cuan­do lo reúnen con otros pre­sos, de a dos por cel­da rom­pien­do el ais­la­mien­to. Pero re­cién en 1985 sal­drán de­fi­ni­ti­va­men­te en li­ber­tad. “Ten­go dos fu­gas arri­ba del hom­bro y tres ve­ces caí pre­so. Gran vo­ca­ción de pre­so no?”, dice mien­tras se ríe de su pro­pia his­to­ria.  
El ca­rác­ter de esos nue­ve pre­sos no fue alea­to­rio: eran los má­xi­mos di­ri­gen­tes de la gue­rri­lla más im­por­tan­te del Uru­guay. Fue­ron apre­sa­dos uno por uno a me­di­da que ca­ye­ron, y pues­tos en con­di­ción de rehe­nes: los mi­li­ta­res ase­gu­ra­ron que ante cual­quier ata­que de Tu­pa­ma­ros, ellos ma­ta­rían a uno de los di­ri­gen­tes. La gue­rri­lla que­da com­ple­ta­men­te des­ar­ti­cu­la­da, al tiem­po que mu­chos de sus in­te­gran­tes fue­ron sien­do iden­ti­fi­ca­dos y apre­sa­dos por la dic­ta­du­ra. “Fue sim­bó­li­co: tan­to ellos cre­ye­ron que se ha­bía ter­mi­na­do la re­vo­lu­ción en el Uru­guay; como no­so­tros creía­mos que es­tá­ba­mos ha­cien­do la re­vo­lu­ción”.
Su mi­ra­da ac­tual res­pec­to a ese mo­men­to ha sido de una cons­tan­te re­vi­sión: “Te­nía­mos las in­ten­cio­nes de ha­cer la re­vo­lu­ción. Pero es­ta­ba muy le­jos; en pri­mer lu­gar por­que te­nía­mos una con­cep­ción –que se fue desa­rro­llan­do de una for­ma muy equi­vo­ca­da– ha­cia el mi­li­ta­ris­mo, ha­cia la pre­do­mi­nan­cia de un apa­ra­to po­lí­ti­co por so­bre el mo­vi­mien­to de ma­sas. En­ten­día­mos que la in­su­rrec­ción la íba­mos a ha­cer con un apa­ra­to mi­li­tar, y no que la in­su­rrec­ción iba a ser un fe­nó­meno po­pu­lar”. Tie­ne en cla­ro que la ins­pi­ra­ción ve­nía del mo­de­lo cu­bano y la Re­vo­lu­ción del 59, pen­san­do siem­pre a la gue­rri­lla como un fu­tu­ro ejér­ci­to: “Con esa pers­pec­ti­va yo creo que lo que ha­cía­mos era en­te­rrar la re­vo­lu­ción en lu­gar de ha­cer­la. No sólo por­que nos lle­va­ba a una de­rro­ta al que­dar en­fren­ta­dos mano a mano con otro ejér­ci­to mu­cho más po­de­ro­so, sino por­que plan­tear­se con­ver­tir un mo­vi­mien­to po­lí­ti­co en ejér­ci­to, es sui­ci­da. Des­de el pun­to de vis­ta re­vo­lu­cio­na­rio, es sui­ci­da. Y no­so­tros es­tá­ba­mos en eso”.
***
Za­bal­za lle­gó a in­cor­po­rar­se a la vida ins­ti­tu­cio­nal del país: asu­mió como edil (lo que di­ría­mos con­ce­jal) en el de­par­ta­men­to de Mon­te­vi­deo en 1994, y aun­que al poco tiem­po se dis­tan­ció de su es­pa­cio ori­gi­nal (el MLN) con­ti­nuó man­te­nien­do la ban­ca del Fren­te Am­plio por al­gu­nos años más. Las co­sas ya ve­nían des­en­con­tra­das hace rato: en la di­rec­ción de Tu­pa­ma­ros ha­bía dos mi­ra­das muy dis­tin­tas: una, la de Mu­ji­ca y Fer­nán­dez Hui­do­bro; otra la de Za­bal­za y Sen­dic (has­ta su tem­pra­na muer­te en el 89).
En agos­to de 1994 su­ce­dió el úl­ti­mo acon­te­ci­mien­to vio­len­to al que se ex­pu­so el MLN: ma­ni­fes­tan­tes ro­dea­ron el Hos­pi­tal Fil­tro en el ba­rrio de Ja­cin­to Vera en la ca­pi­tal uru­gua­ya, don­de es­ta­ban in­ter­na­dos en huel­ga de ham­bre 3 miem­bros de la ETA, del país Vas­co, para evi­tar la ex­tra­di­ción a Es­pa­ña don­de se­rían juz­ga­dos du­ra­men­te. La po­li­cía re­pri­mió fe­roz­men­te la ma­ni­fes­ta­ción y mató a dos per­so­nas, de­jan­do ade­más cien­tos de he­ri­dos. La lla­ma­da “Ma­sa­cre del Fil­tro” ori­gi­nó tam­bién de­ba­tes in­ter­nos en torno al tipo de de­mo­cra­cia desea­da: lo que él mis­mo de­no­mi­na “de­mo­cra­cia tu­te­la­da o ple­na”.
Mien­tras que pro­po­nía ra­di­ca­li­zar la lu­cha in­cor­po­rán­do­se con más fuer­za en la base so­cial de los sec­to­res tra­ba­ja­do­res y po­pu­la­res, la otra lí­nea pro­po­nía in­te­grar­se or­gá­ni­ca­men­te al Fren­te Am­plio y su­mar­se a la lu­cha elec­to­ral de lleno. “Ahí nos sa­ca­mos to­dos la ropa, unos que­ría­mos se­guir ade­lan­te con la mo­vi­li­za­ción y con la lu­cha para en­fren­tar al apa­ra­to del Es­ta­do; y otras apa­re­cie­ron con­ver­ti­dos en Mahat­ma Gand­hi mo­derno, plan­tean­do la lu­cha sin vio­len­cia; elec­to­ral.” Para Za­bal­za, ése fue el pun­to de no re­torno: “A par­tir de en­ton­ces, Mu­ji­ca y Fer­nán­dez Hui­do­bro se hi­cie­ron due­ños del MLN, del MPP. Y Mu­ji­ca em­pe­zó su as­cen­so a rock star”, dice mien­tras pro­nun­cia el in­glés con cier­ta iro­nía.  
***
Yo real­men­te creo que el Pepe es una per­so­na aus­te­ra y que es ho­nes­to, que no es co­rrup­to”, con­tes­ta ante la pre­gun­ta so­bre la ima­gen in­ter­na­cio­nal que ha co­se­cha­do el Pepe tras su aus­te­ri­dad todo te­rreno. Pero pre­fie­re no de­cir con sus pa­la­bras lo que pien­sa y se lo deja al pro­pio Pepe: “Yo re­co­men­da­ría ver el do­cu­men­tal que le hizo Kus­tu­ri­ca. Por­que él ahí dice dos o tres co­sas que son fun­da­men­ta­les: “éra­mos muy re­vo­lu­cio­na­rios y al­gu­nos se pa­sa­ron al ca­pi­ta­lis­mo, y otros en­tre los que me en­cuen­tro, nos con­ver­ti­mos en ad­mi­nis­tra­do­res; que­re­mos ad­mi­nis­trar el ca­pi­ta­lis­mo” dice. En­ton­ces bueno, ése es un cam­bio ¿no?”, pre­gun­ta mien­tras cru­za las ma­nos y me mira.  
Yo a Pepe lo co­noz­co como la pal­mi­ta de mi mano. Por algo, des­pués de to­dos los dis­pa­ra­tes que he di­cho, él no me dice nada. No me ha di­cho una sola pa­la­bra, no tie­ne nada para de­cir de mi”.
Hace al­gu­nos años le diag­nos­ti­ca­ron cán­cer de esó­fa­go. Pepe Mu­ji­ca era pre­si­den­te y se en­te­ró. Man­dó a ofre­cer­le lo que ne­ce­si­ta­ra, en tér­mi­nos de aten­ción hos­pi­ta­la­ria u otras ne­ce­si­da­des, por me­dio de ter­ce­ros, sin ir a vi­si­tar­lo ni nada.
– ¿Qué le di­jis­te?, pre­gun­té. 
– “Que se lo me­tie­ra en el…” dice mien­tras son­ríe de cos­ta­do, or­gu­llo­so. 
♣♣♣
#PA.
Domingo 23 de febrero de 2020.



La economía de a pie.

DEUDA Y MAS DEUDA

Mayo. Primera quincena.
DEUDA Y MAS DEUDA
La deuda pública contabilizada en Uruguay supera el 80% del PBI, sin incluir los intereses. Por esa vía cada oriental debe algo mas de 10.000 dólares, que se suman a sus deudas personales.
La evolución muestra de manera inapelable que sus grandes saltos se vincularon a rescates al sistema financiero y sus incrementos a la bola de nieve generada por los intereses. Sin olvidar el rol de variados subsidios del sector público a grandes capitales, que incluyen desde costos de infraestructura para “inversores”, renuncias fiscales, hasta quiebras con deudas al BROU, UTE, Antel o ANCAP.
El marco de crisis, corona virus, ha determinado que organismos internacionales de diferente signo reconozcan las enormes dificultades de los países deudores, abriendo condiciones para respuestas conjuntas que permitan aliviar la situación. Sin embargo la “solución” del gobierno oriental frente al déficit fiscal, no es la moratoria de la deuda y sus intereses, ni imponer tributos al gran capital, sino asumir más deuda.
El Banco Central del Uruguay continúa emitiendo títulos de deuda por aproximadamente 300 millones una semana sí y otra también. La ministra Azucena Arbeleche en declaraciones a Bloomberg señaló que ha pedido nuevos créditos por 1400 millones de dólares.
En consecuenica los costos por intereses que agobian el presupuesto continuarán creciendo. Ya representan más del 10% de los gastos del Estado. Cada familia uruguaya paga mediante impuestos un promedio de aproximadamente 2000 dólares por año, para afrontar créditos que nunca recibió.
Paralelamente crece la deuda disfrazada mediante acuerdos de participación público privada. Las obras al servicio de UPM son un claro ejemplo. El nuevo gobierno multicolor pasadas las elecciones dejó de lado ambigüedades. Ni siquiera aprovecho la posibilidad prevista en el propio contrato leonino para reveerlo por situaciones anormales.
Infraestructura y logística para la construcción de una segunda planta de producción de pasta de celulosa y laterales por parte de la empresa finlandesa aumentarán costos que paga el pueblo oriental.
Préstamos del BID, del Banco de Desarrollo de América latina, de Bancos privados como el San Paolo de Italia y el Sumitomo de Japón se destinan a obras ferroviarias para la empresa, con un costo aproximado a los 1000 millones de dólares, que se transforman en obligaciones superiores a los 2200 millones de dólares para el Estado uruguayo merced al contrato público privado realizado con la corporación Vía Central.
A todo eso hay que sumar costos en carreteras, viaducto, obras en puertos, compras de energía subsidiada y un cúmulo de gastos que asume el sector público uruguayo en directo provecho de la empresa. Mientras tanto los monocultivos de eucaliptus desplazan usos alternativos del territorio generando mayor desocupación.
El gobierno insiste en la vieja apuesta a la atracción de grandes capitales extranjeros mediante exoneraciones de impuestos y pretende fundamentarla con el curioso argumento desmentido por la historia y el mundo1 que de otra manera no habría inversión, ni fuentes de trabajo.
El neoliberalismo criollo sigue considerndo que el “mercado” asigna los recursos de manera óptima, cuando las cartas están a la vista hasta en los grandes centros capitalistas en los que la producción de armas, drogas, son las actividadees más rentables.
Para generar fuentes de trabajo y productos esenciales se requiere inversión pública para viviendas dignas, subsidios a alimentos básicos, transporte popular, servicios de educación, salud.
Sin embargo gran Banca, latifundios, grandes capitales son los beneficiados2 y el prespuesto público se utiliza para servir a grandes empresas extranjeras3, asumiendo deudas e intereses cuyos costos recaen en definitiva sobre las billeteras de la población.
Mientras el gobierno dice que de la pandemia salimos juntos.
GOTITAS DE ECONOMÍA
  • Los datos del INE registraban en febrero, antes del corona virus en Uruguay una tasa de empleo de 56.4%. En 2019 fue de 57.2%. La demanda de fuerza de trabajo continúa en caída libre. La desocupación se contabilizó en 10.5%.
  • El índice de volumen físico de la industria a febrero del 2020 descendió 1.5% respecto a 2019, continuando su tendencia recesiva.
  • Las expectativas de los consultores del BCU, que reflejan habitualmente la visión oficial predicen en promedio un déficit fiscal del 6.6% para finales del 2020.
  • Se cumplieron 31 años del fallecimiento de Raúl Sendic. Sus banderas de lucha contra el latifundio, extranjerización de la tierra y de oposición a las zonas francas, continúan más vigentes que nunca. Desde su muerte se han extendido los latifundios y multiplicado las zonas francas.
  • El Ministro de economía argentino Martin Guzman solicita un período de gracia hasta 2023 y quitas para la deuda emitida en el gobierno Macri, bajo legislación extranjera.
  • El PBI de Estados Unidos descendió casi un 4.8 % el primer trimestre de 2020.
  • Salud a la lucha de los trabajadores en un nuevo primero de Mayo.
Frases de la quincena. “Si hubieramos destinado la mitad del presupuesto militar de los últimos 10 años a salud todo estaría mejor”. “ El cambio climático, la desigualdad de ingresos, la extracción de especies en extinción son solo síntomas de un sistema global deficiente” John Perkins arrepentido de sus acciones al frente de grandes transnacionales. Tomado del reportaje realizado por Correa en rt news.
1No existe ninguna correlación entre la magnitud de exoneracioes de impuestos y vólumen de inversión productiva.
2Obviamente aquellos que estaban dispuestos a invertir pagando impuestos, van a exigir exoneraciones.
3Y hay quienes dicen que se terminaron las ideologías.