Tres grandes amenazas a la vida en la Tierra que debemos afrontar en 2021: Una nota de Noam Chomsky y Vijay Prashad
Estamos viviendo una emergencia que requiere nuestra acción urgente (una nota escrita con Noam Chomsky) | Boletín 1 (2021)
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Estimados amigos y amigas,
Saludos desde las oficinas del Instituto Tricontinental de Investigación Social.
El primer boletín de este nuevo año está escrito en colaboración con nuestro amigo, el gran lingüista y voz profética, Noam Chomsky. A continuación presentamos una declaración escrita por Noam y yo.
Tres grandes amenazas a la vida en la Tierra que debemos afrontar en 2021: Una nota de Noam Chomsky y Vijay Prashad
Grandes partes del mundo —fuera de China y unos pocos otros países— enfrentan un virus descontrolado, que no ha sido detenido debido a la incompetencia criminal de los gobiernos. El hecho de que estos gobiernos en países ricos dejen de lado hipócritamente los protocolos científicos básicos publicados por la Organización Mundial de la Salud y por organizaciones científicas revela su práctica maliciosa. Cualquier cosa que no sea centrar la atención en manejar el virus mediante el testeo, la trazabilidad de los contactos, y el aislamiento —y si esto no es suficiente, imponer un confinamiento temporal— es imprudente. Es igualmente preocupante que estos países ricos hayan seguido una política de “nacionalismo de la vacuna”, acaparando candidatas a vacuna en vez de alinearse con una política de creación de una “vacuna de los pueblos”. Por el bien de la humanidad, sería prudente suspender las normas de propiedad intelectual y desarrollar un procedimiento para crear vacunas universales para todos los pueblos.
Aunque la pandemia es el principal tema en nuestras mentes, hay otras grandes amenazas a la longevidad de nuestra especie y del planeta. Estas incluyen:
Aniquilación nuclear. En enero de 2020, el Bulletin of the Atomic Scientists [Boletín de científicxs atómicxs] fijó el Reloj del Juicio Final de 2020 a 100 segundos de la medianoche, demasiado cerca para la comodidad. El reloj, creado dos años después de que se desarrollaron las primeras armas atómicas en 1945, es evaluado anualmente por el Consejo de Ciencia y Seguridad del Boletín, consultando a su Consejo de Patrocinadores, quienes deciden si mover el minutero o dejarlo en el mismo lugar. Para cuando vuelvan a fijar la hora, es probable que estemos más cerca de la aniquilación. Los ya limitados tratados de control de armas están siendo destruidos, mientras las principales potencias poseen cerca de 13.500 armas nucleares (más del 90% de las cuales están solamente en manos de Rusia y Estados Unidos). El rendimiento de estas armas podría fácilmente hacer este planeta aún más inhabitable. La Armada de Estados Unidos ya desplegó ojivas nucleares tácticas W76-2 de bajo rendimiento. El Día de Hiroshima, conmemorado cada 6 de agosto, debe convertirse en una jornada más importante de reflexión y protesta.
Catástrofe climática. En 2018 apareció un artículo científico con un título impactante: “La mayoría de los atolones serán inhabitables a mediados del siglo XXI debido a que el alza del nivel del mar aumentará las inundaciones provocadas por marejadas”. Lxs autorxs concluyeron que los atolones desde las Seychelles a las islas Marshall están en peligro de desaparecer. Un informe de 2019 de la ONU estimó que un millón de especies animales y plantas están en peligro de extinción. A esto hay que agregar los catastróficos incendios forestales y el grave blanqueamiento de los arrecifes de coral y resulta claro que ya no necesitamos quedarnos en clichés de que una cosa u otra es el canario en la mina de la catástrofe climática: el peligro no está en el futuro, sino en el presente. Es fundamental que las grandes potencias —que siguen fallando en dejar de usar combustibles fósiles— se comprometan con el enfoque de “responsabilidades comunes pero diferenciadas” de la Declaración de Río de Janeiro sobre Medio Ambiente y Desarrollo de 1992. Es decidor que países como Jamaica y Mongolia hayan actualizado sus planes climáticos frente a las Naciones Unidas antes de que termine 2020, como lo exige el Acuerdo de París, a pesar de que estos países producen una fracción minúscula de las emisiones globales de carbono. Los fondos que fueron prometidos a los países en desarrollo para su participación en el proceso prácticamente se han evaporado, mientras la deuda externa ha aumentado exponencialmente. Esto muestra una falta de seriedad básica de parte de la “comunidad internacional”.
Destrucción neoliberal del contrato social. Los países de América del Norte y Europa han destripado su función pública a medida que el Estado ha sido entregado a los especuladores y la sociedad civil se ha mercantilizado vía fundaciones privadas. Esto significa que los caminos de la transformación social en estas partes del mundo han sido obstaculizados grotescamente. La terrible desigualdad social es el resultado de la relativa debilidad política de la clase trabajadora. Es esta debilidad la que permite que los multimillonarios establezcan políticas que causan que aumenten las tasas de hambre. Los países no deben ser juzgados por las palabras escritas en sus constituciones, sino por sus presupuestos anuales. Estados Unidos, por ejemplo, gasta casi un billón de dólares (si se suma el presupuesto de inteligencia estimado) en su maquinaria de guerra, mientras gasta apenas una fracción en bienes y servicios públicos (como atención sanitaria, algo evidente durante la pandemia). La política exterior de los países occidentales parece estar bien lubricada por acuerdos de armas: los Emiratos Árabes y Marruecos aceptaron reconocer a Israel bajo la condición de que puedan comprar 23.000 millones de dólares y 1.000 millones en armas hechas en EE. UU., respectivamente. Los derechos de las personas palestinas, saharauis y yemeníes no importaron para estos acuerdos. El uso de sanciones ilegales por parte de Estados Unidos contra treinta países, incluyendo Cuba, Irán y Venezuela, se ha vuelto parte de la vida normal, incluso durante esta crisis de salud pública mundial provocada por la pandemia. Es un fracaso del sistema político que las poblaciones en el bloque capitalista sean incapaces de obligar a sus gobiernos —que en muchos casos son democracias solo en el papel— a adoptar una perspectiva global frente a esta emergencia. El aumento de las tasas de hambre revela que la lucha por sobrevivir es el horizonte para miles de millones de personas en el planeta (todo esto mientras China logra erradicar la pobreza absoluta y eliminar en gran medida el hambre).
La aniquilación nuclear y la extinción por la catástrofe climática son amenazas gemelas para el planeta. Mientras tanto, para las víctimas del ataque neoliberal que ha sido una plaga para la última generación, los problemas de corto plazo para sostener su propia existencia desplazan cuestiones fundamentales sobre el destino de nuestrxs hijxs y nietxs.
Los problemas globales de esta escala requieren de la cooperación mundial. Presionados por los países del Tercer Mundo en los años 60, las grandes potencias aceptaron el Tratado sobre la no proliferación de armas nucleares (1968), aunque rechazaron la profundamente importante Declaración sobre el Establecimiento de un Nuevo Orden Económico Internacional (1974). Ya no está la correlación de fuerzas para impulsar ese tipo de agenda de clase en el escenario internacional. Ciertas dinámicas políticas en los países occidentales, en particular, pero también en los grandes Estados del mundo en desarrollo (como Brasil, India, Indonesia y Sudáfrica), son necesarias para cambiar el carácter de sus gobiernos. Se necesita un internacionalismo robusto para prestar una atención adecuada e inmediata a los peligros de la extinción: extinción por la guerra nuclear, por la catástrofe climática, y por el colapso social. Las tareas por delante son abrumadoras y no pueden ser aplazadas.
Esta nota que escribí junto a Noam Chomsky es un llamado a unirnos y luchar contra las fuerzas del dinero, los ejércitos y el moralismo hipócrita. Este año, en el Instituto Tricontinental de Investigación Social nos enfocaremos en estos peligros, con especial énfasis en la amenaza de guerra. Tras el ataque nuclear de Estados Unidos en Hiroshima, Shinoe Shōda comenzó a escribir poesía tanka para no olvidar nunca el ataque. Como la ocupación estadounidense censuró trabajos como los suyos, Shōda logró que un guardia de la prisión de Hiroshima mimeografiara 150 copias de su libro, las que repartió a lxs sobrevivientes de la bomba atómica. Entre esos poemas está esta pieza brillante:
Como
aquí hay reunidos
tantos cráneos pequeños,
estos huesos largos
deben ser del profesor.
El espíritu humano se rebela contra la extinción. Ahora debe rebelarse no sólo para preservar la vida, sino para mejorar la vida, tanto la vida humana como de nuestro planeta.
Cordialmente,
Vijay.
Miles de republicanos cambian de Partido en un “éxodo nacional” tras asalto al Capitolio
Los partidarios del presidente de los Estados Unidos, en el capitolio después de violar la seguridad. Foto: Jim Lo Scalzo / EPA / EFE
Según los informes, un éxodo nacional ha comenzado a tomar forma dentro del Partido Republicano luego de los ataques mortales a favor de Trump en el Capitolio de los Estados Unidos, con decenas de miles de miembros del Partido Republicano oficialmente cambiando de partido después de los disturbios.
El Partido Republicano de Arizona ha perdido más de 9 000 miembros a raíz de la violencia, informó CNN, ya que continuó enfrentando una reacción violenta por promover conspiraciones de derecha y provocar disputas públicas con el gobernador Doug Ducey, el exsenador Jeff Flake y Cindy McCain.
Los republicanos en Arizona también han perdido ambos escaños en el Senado ante los senadores demócratas Kyrsten Sinema y Mark Kelly, mientras que la mayoría de los votantes en el estado votaron por la boleta demócrata en las elecciones presidenciales de 2020, la primera vez desde 1996.
Mientras tanto, en Pensilvania, la oficina del Secretario de Estado informó que casi 10.000 votantes republicanos habían cambiado su afiliación partidaria en enero, y casi un tercio de esos votantes se pasaron al Partido Demócrata.
En total, las estimaciones de los estados que informaron cambios recientes en el registro de votantes indicaron que al menos 30 000 republicanos han abandonado el partido desde que el ex presidente Donald Trump instó a sus partidarios a marchar hacia el Capitolio de Estados Unidos el 6 de enero cuando el Congreso certificó su derrota electoral.
Luego, sus partidarios extremistas atacaron a los agentes de policía y violaron las medidas de seguridad mientras asaltaban el edificio, lo que provocó su segundo juicio político por fomentar una insurrección mortal.
Para muchos, parecía que la violencia en el Capitolio fue la gota que colmó el vaso, con casi 6 000 republicanos cambiando de partido en Carolina del Norte a raíz de los ataques. Otros 4 500 republicanos abandonaron el partido en Colorado, informó The Hill, y también señaló que otros 2 300 exmiembros del Partido Republicano abandonaron sus afiliaciones al partido en Maryland.
No parecía haber señales similares de un éxodo dentro del Partido Demócrata en los estados que experimentaron una alta rotación de exrepublicanos: por ejemplo, en Pensilvania, poco más de 3 000 demócratas cambiaron su afiliación partidaria en el nuevo año.
Aún no está claro a dónde irá el partido republicano nacional, ya que los informes indican que el líder de la minoría del Senado, Mitch McConnell, tenía previsto reunirse con el expresidente Donald Trump en Florida después de perder el control del Senado ante los demócratas.
(Tomado de Independent)
Exclusiva de Público
El fin del trumpismo: Trump indultó a todos sus compinches de la cloaca empresarial, incluido un socio de Villarejo al que desenmascaró 'Público'
Entre los casi 200 personajes a los que el expresidente perdonó sus delitos antes de abandonar la Casa Blanca figura su exjefe de campaña Paul Manafort, de quien De la Joya –multimillonario padrino del comisario Villarejo– decía que era el verdadero mentor de Steve Bannon, estratega ideológico de Trump y también indultado en el frenesí final de perdones presidenciales.
madrid/washington
24/01/2021 22:56 carlos enrique bayo @tableroglobal - PÚBLICO"Los indultos de este presidente son los que se podrían esperar si le dieras el poder de perdón presidencial a un capo de la mafia", escribió Andrew Weissmann –asistente del fiscal especial Robert Mueller que investigó los vínculos de Donald Trump con Rusia–, después de que el hasta hace pocos días inquilino de la Casa Blanca lanzara su segunda tanda de conmutaciones de pena: 29 de sus asociados y colaboradores se libraron de las condenas a las que habían sido sentenciados por los cohechos, fraudes o evasiones fiscales y otras tropelías (como chantajes) que cometieron para enriquecerse.
Era la víspera de la pasada Nochebuena –cuando Trump todavía lanzaba mensajes incendiarios sobre su falsa victoria supuestamente arrebatada por un no menos falso fraude electoral– y la exoneración masiva de delincuentes económicos fue tan descarada que hasta el destacado senador republicano Ben Sasse, de Nebraska, exclamó: "Esto está podrido hasta la médula".
Porque entre los agraciados en esa ronda de indultos presidenciales arbitrarios figuraban dos de los más despreciables traidores del entorno trumpista. Uno fue el padre de su propio yerno y asesor –Jared Kushner–, Charles Kushner, quien años atrás ya se confesó culpable de evasión fiscal y financiación ilegal de campañas electorales.
Cuando Charles Kushner descubrió que su cuñado estaba cooperando con las autoridades, maquinó un indecente plan de venganza e intimidación: montó una trampa con una prostituta en un motel de Nueva Jersey, filmó la escena y envió la grabación a la esposa... es decir, a su propia hermana.
El exgobernador de Nueva Jersey Chris Christie lo definió como "uno de los crímenes más aborrecibles y repugnantes" que conoció en su carrera como fiscal. Pero como Kushner es consuegro del presidente saliente, se irá de rositas.
El otro era Paul Manafort, quien dirigió el arranque de la campaña electoral que llevó a Trump a la Presidencia en 2016 y tuvo que ser apartado del equipo a causa de sus vínculos inconfesables con las máximas autoridades pro-rusas de Ucrania. Después acabaría siendo condenado a siete años de prisión –tras fingir estar colaborando con los fiscales a los que en realidad engañaba– por fraude bancario y fiscal, manipulación de testigos, cabildeo internacional ilegal y varios delitos más.
En la práctica, Manafort se había aprovechado de su estrechísima relación con el presidente de EEUU para trabajar al servicio de un Gobierno extranjero –el ucraniano de Yanukovich– a cambio de 21 millones de dólares que después blanqueó en compañías offshore e intrincados entramados inmobiliarios.
Manafort cobraba 10 millones al año del oligarca Deripaska para montar el lobby que "beneficiará enormemente al Gobierno de Putin"Además, recibió 10 millones de dólares del oligarca ruso Oleg Deripaska –estrecho aliado del Kremlin– al que dio "briefings privados" sobre la información a la que tuvo acceso como presidente de la campaña de Trump. Una década antes, había estado cobrando de Deripaska esa misma cantidad, pero anualmente, por su trabajo para montar un lobby en EEUU que, prometió, "beneficiará enormemente al Gobierno de Putin". Al final, acabó endeudado con el oligarca ruso por cantidades astronómicas.
Pero este notorio traidor a los intereses de su país era uno de los más íntimos colaboradores y consejeros de Trump, hasta el punto de que muchos lo consideraban incluso más influyente en la Casa Blanca que el propio Steve Bannon, el ideólogo de la doctrina ultrapopulista y la propaganda de desinformación masiva que exportó a Brasil (Bolsonaro), Italia (Salvini) y España (Abascal).
Entre los que descubrieron ese poder en la sombra figura Adrián de la Joya, padrino económico y amigo de fechorías del comisario jubilado José Manuel Villarejo Pérez, quienes fueron a visitar a Manafort en Nueva York –acompañados por el expresidente de Telefónica Juan Villalonga–, en febrero de 2017, como reveló Público hace año y medio. Los tres amigos de las cloacas de Interior se reunieron allí con el que había sido jefe de la campaña de Trump hasta cinco meses antes, cuando fue obligado a dimitir de ese puesto por el escándalo del Russiagate.
Tras planear una operación con Manafort y su socio portorriqueño Héctor Hoyos –el proyecto de Hoyos VSN Corp domiciliado en Puerto Rico con filial en Singapore para fabricar y comercializar móviles antihackeo–, para la que buscaban 55 millones de dólares, De la Joya recapitulaba en conversación con Villarejo que el hombre más influyente con Trump no era Bannon, como todo el mundo creía, sino Manafort. Tal como demuestra este audio del diálogo entre los dos cómplices al que Público ha tenido acceso:
"Estás equivocado; Bannon es un hombre de Manafort"
De la Joya: Creo que estamos con...con las personas más influyentes que se pueden tener, porque además es que ayer, salió en la conversación. En [ininteligible] no se quien le preguntó a… a Héctor el papel que jugaba, o el papel de influencia o quiénes eran las personas…
Villarejo: Juan, Juan [refiriéndose a Villalonga como la persona que preguntó eso a Héctor Hoyos]
De la Joya: ...más influyentes en el presidente.
Villarejo: No, porque hablaba del otro, de éste que ha salido. [Villarejo se refiere a Steve Bannon]
De la Joya: Y... entonces, yo dije que una de las personas que tenía más influencia...
Villarejo: Bannon, Bannon.
De la Joya: ...era
Steve Bannon y Héctor me dijo: "Adrián, estás equivocado, Steve Bannon
es un hombre... de Paul, lo ha formado Paul. Los tipos más influyentes
en el presidente de los Estados Unidos son su hija Ivanka o como se
llame, el marido –nosecuántos Kushner– y Paul Manafort". Bien, y estamos
hablando... dos son familiares y el otro, la única persona que no es familiar, es la persona más influyente de todo Estados Unidos y es nuestro socio. ¡Joder! Claro, ¿eh?
A continuación, De la Joya empezó a hacer castillos en el aire arrogándose la capacidad de convertirse en el gran mediador entre los gobiernos de España y de EEUU. Hasta el punto de que alardeaba de que sería él quien controlase las relaciones directas entre Rajoy y el mismísimo Trump:
"Si el tonto de Rajoy quiere hablar con el Señor Trump, eso lo voy a controlar yo"De la Joya: Vamos a ver, y el tonto de Rajoy… vamos a ver, eso es una jugada, eso es una partida, que la voy a jugar yo,
que la voy a jugar yo y no la va a jugar nadie nada más que yo. Una
partida que... si nos interesa, si nos interesa… jugar con Rajoy [ininteligible] porque no voy a jugar con la polla gratis. Y si quiere hablar con el Señor Trump, eso lo voy a controlar yo con Trump...
Villarejo: Claro, que te coma la polla y ya está.
De la Joya: Lo que Rajoy haga lo que nosotros le digamos.
Cuando al Sr Rajoy le decimos que tiene que quitar a este fulano o
tiene que quitar a este otro, tiene que hacer esto, que lo haga porque si no las relaciones con este país se le van a cortar.
Villarejo: Claro. Y no hay otra.
Ese mismo día final del viaje a Nueva York, De la Joya estaba tan exultante que presumía de que iba a convertir a Villarejo –gracias a Manafort– en "asesor de Trump en terrorismo o X", sugiriendo que de esta forma nadie podría ya ponerle la mano encima al comisario en España.
Así que Villarejo regresó de ese viaje deslumbrado por los neones neoyorquinos de Manafort y se dedicó a contar a todas sus relaciones que ya había llegado al centro del poder mundial, tal como se puede escuchar en los audios que fue grabando tras su llegada a Madrid.
Al mes siguiente, Manafort y Hoyos participaron en el viaje a Pekín de Villarejo con De la Joya y Villalonga porque tenían la licencia de un software de encriptación y seguridad de llamadas de móviles que pretendían vender a la empresa china SAE Electronics, vinculada a los servicios secretos de Pekín. Un viaje que sería desvelado por el periodista Javier Ayuso diez días después del ingreso en prisión del hoy famoso comisario de Las cloacas de Interior, que había destapado Público cuatro meses antes.
Manafort cayó en octubre y Villarejo un mes después
Porque la realidad fue bien distinta de los sueños de grandeza de Villarejo: el fiscal Mueller continuó sus indagaciones con la ayuda de Weissmann y en octubre de ese mismo año (2017) Manafort tuvo que ponerse a disposición del FBI tras ser acusado por un gran jurado federal (a instancias de Mueller) de conspiración contra los EEUU, lavado de dinero, fraude fiscal, falso testimonio y de ser un agente no registrado de capital extranjero.
Al mes siguiente, Villarejo fue detenido por organización criminal, cohecho, blanqueo y muchos otros delitos, y actualmente sigue en prisión. Manafort se declaró culpable en septiembre de 2018 de los delitos menos graves, en un acuerdo con Mueller, y pasó casi dos años en prisión, de donde salió en arresto domiciliario por el riesgo de contraer covid en la cárcel. Ahora quedará en libertad total gracias a su amiguísimo Trump.
En cuanto a Bannon, él sí ha seguido influyendo en Trump hasta el final –a pesar de que atravesaron un periodo de ruptura (en el verano de 2017) durante su gestión como jefe de estrategia de la Casa Blanca– y en los últimos tiempos ha sido quien más ha empujado al ya expresidente a intentar cambiar el resultado de las urnas invalidando votos a través de los tribunales. Una guerra sin cuartel basada en falsas acusaciones de fraude y en una cascada de litigios y demandas que es marca de la casa Bannon y que practican sus seguidores en todo el mundo, como Vox.
Bannon estaba imputado de embolsarse un millón de dólares recaudados para levantar el muro entre EEUU y MéxicoBannon fue detenido el pasado agosto y acusado de haberse embolsado un millón de dólares de los fondos recaudados para construir el muro en la frontera sur de EEUU que Trump siempre juró que pagaría México y que acabó sufragándose en gran parte por cuestación popular. Y su indulto –uno de los 143 que decretó Trump en el último día de su mandato, tras haber ordenado medio centenar más en semanas anteriores– ha sido el más sonado de todos porque no tiene precedentes, ya que no había sido condenado sino únicamente imputado.
La casi totalidad de los indultos concedidos por presidentes de EEUU al final de sus mandatos han beneficiado a reos que ya habían sido juzgados y sentenciados, así que el equipo de Trump –encabezado por su consejero personal, Pat Cipollone– trató de disuadirle hasta el último minuto de que perdonase a Bannon "a futuro", blindándolo de una hipotética condena aún por ocurrir. La difusión del listado de agraciados se postergó y al anochecer de la víspera del 20E sus asesores creyeron haberle convencido.
Pero, a las nueve de la noche, Trump cambió de opinión y ordenó que se agregase a Bannon a la lista de sus amigos, colaboradores o socios condenados por defraudar al Estado (George Gilmore ); estafar al Gobierno (Salomon Melgen); enriquecerse con sobornos y comisiones (Kwame Kilpatrick); hacer espionaje industrial (Anthony Levandowski); cobrar millones de magnates extranjeros para ayudarles a evadir la Justicia en EEUU (Elliott Broidy); sobornar a funcionarios para obtener contratos (Robert Zangrillo); cometer estafas y fraudes a gran escala (Sholam Weiss y Eliyahu Weinstein), y muchos más de la misma calaña.
Nunca un presidente perdonó a tantos delincuentes amigosJamás en la historia norteamericana un presidente había condonado las penas a tantísimos (casi 200) delincuentes de guante blanco, todos ellos amiguetes.
Su consejero Cipollone sólo logró convencerle –con la ayuda de su último fiscal general, William Barr– de que no se concediese a sí mismo un "perdón preventivo" frente a posibles procesos futuros, como pretendía, ni lo hiciese para sus tres hijos mayores, su yerno y su abogado personal, Rudolph Giuliani, ninguno de los cuales ha sido de momento acusado o imputado judicialmente.
Y el motivo de que renunciase a esas intenciones, que según The New York Times mantuvo hasta el último momento, fue que le podían perjudicar gravemente –en vez de protegerle– durante la investigación parlamentaria del segundo procedimiento de impeachment incoado contra él por el Congreso, que este mismo lunes 25 de enero la Cámara de Representantes remitirá al Senado con el objetivo de inhabilitarle para siempre por haber instigado el mortífero asalto al Capitolio.
No cabe duda de que Trump pasará a la historia como un presidente de EEUU sin parangón.
Expresos de Guantánamo instan a Biden a cerrar la prisión militar
Siete hombres que estuvieron encarcelados en Guantánamo están haciendo un llamado al presidente de Estados Unidos, Joe Biden, para que cierre la prisión militar. Los hombres fueron liberados durante las presidencias de Bush y Obama. En una carta abierta publicada la semana pasada, los hombres escribieron lo siguiente: “A muchos de nosotros nos detuvieron ilegalmente por la fuerza de nuestros hogares frente a nuestras familias y naciones a las que no les importa el Estado de derecho nos vendieron a cambio de recompensas a Estados Unidos. (…) Algunos de nosotros tuvimos hijos que nacieron en nuestra ausencia y que crecieron sin padres. Otros han vivido el dolor de saber que nuestros parientes cercanos murieron en casa, esperando en vano noticias de nuestro regreso. Esperando en vano que se hiciera justicia. (…) Usted debe luchar contra esto y cambiarlo”. Esto se produce al tiempo que el periódico The New York Times informa que el Pentágono ha suspendido los planes de administrar vacunas contra el coronavirus a los 40 reclusos que quedan en Guantánamo. En un principio, los reclusos tenían programado recibir la vacuna esta semana.
Trump aprovecha el final de su presidencia para extender a sus cinco hijos la protección del Servicio Secreto
Poco antes de dejar la presidencia de Estados Unidos, Donald Trump firmó un memorando para ampliar por seis meses la protección del Servicio Secreto para todos sus hijos, incluidos aquellos que ya son mayores de 16 años, según informó CNN, que citó a un alto funcionario norteamericano.
Según el Código de Estados Unidos, la protección del Servicio Secreto se aplica "durante toda su vida" a los expresidentes, a sus cónyuges (excepto en el caso de que vuelvan a casarse) y a los hijos menores de 16 años.
El exmandatario tiene cinco hijos de tres matrimonios: Donald Jr., Ivanka y Eric (con Ivana Trump), Tiffany (con Marla Maples) y Barron (con Melania Trump).
De ellos, solo Barron, que ahora tiene 14 años, tiene derecho a la protección del Servicio Secreto de EE.UU. Pero gracias al memorando adicional, la agencia federal protegerá a los cinco hijos de Trump durante los próximos seis meses.
La republicana Liz Cheney es fuertemente criticada por votar a favor del impeachment a Trump
Foto: Getty Images.
La congresista republicana por Wyoming, Liz Cheney, ha debido enfrentar fuertes críticas tras anunciar su voto a favor del impeachment a Donald Trump.
Una decena de republicanos ha manifestado al menos su oposición a la línea asumida por el partido, reconociendo el impacto de los lamentables sucesos del Capitolio azuzados por el expresidente, quien se empeñó en deslegitimar los resultados de las pasadas elecciones presidenciales en la nación norteamericana que lo hicieron abandonar este mes la Casa Blanca.
Entre los que criticaron a la Cheney está el congresista de la Florida, Matt Gaetz, quien el jueves se pronunció en Wyoming contra la número tres de los líderes republicanos en la Cámara Baja de Estados Unidos.
La también presidenta de la Conferencia Republicana había anunciado el jueves, 12 de enero, su decisión a votar sí por el impeachment a Trump.
Un comunicado de la conocida congresista suscribía antes respecto a la fuerte amenaza que sufrió el modelo “de democracia estadounidense” el pasado 6 de enero en el Capitolio de Washington: Trump “convocó a la turba, la reunió y encendió la llama del ataque. (…) Nunca ha habido mayor traición de un presidente de Estados Unidos a su cargo y a su juramento a la Constitución”. Razón por la cual, dijo, votaría de cara a promover la acusación del derrotado exmandatario.
(Con información de agencias)
Varios abogados de la defensa en el caso del juicio político abandonan el equipo de Trump
Dos abogados de Carolina del Sur, Butch Bowers y Deborah Barberi, que trabajaron en la estrategia de defensa de Donald Trump en el caso del juicio político en el Senado ya no están en el equipo del expresidente estadounidense, informa Reuters, citando una fuente familiarizada con el asunto. La fuente lo describió como una "decisión mutua".
Otros tres abogados asociados al equipo, Josh Howard, de Carolina del Norte, y Johnny Gasser y Greg Harris, de Carolina del Sur, también abandonaron el equipo de defensa de Trump, según otra fuente citada por la agencia.
El equipo de defensa de Trump se prepara para el proceso que comenzará el 8 de febrero para considerar la iniciativa aprobada por la Cámara de Representantes y que acusa al exmandatario de incitar "a la insurrección".
Trump nombra a nuevos abogados para liderar su defensa en el caso del juicio político
La
oficina de Donald Trump anunció el domingo que los abogados David
Schoen y Bruce L. Castor dirigirán su equipo legal en el proceso por el
juicio político del expresidente en el Senado. El anuncio llega un día
después de que varios abogados de la defensa de Trump abandonaran el equipo.
El proceso comenzará el 8 de febrero para considerar la iniciativa aprobada por la Cámara de Representantes, que acusa al exmandatario estadounidense de incitar "a la insurrección".
El abogado de Donald Trump enfrenta una demanda de 1.300 millones de dólares por sus afirmaciones sobre fraude electoral en EE.UU.
Dominion Voting Systems Inc, el mayor fabricante estadounidense de máquinas de votación, con sede en Denver (Colorado), presentó una demanda de 1.300 millones de dólares contra Rudy Giuliani, el abogado del expresidente estadounidense, Donald Trump, acusándolo de difamación, por sus comentarios sobre la campaña de la "gran mentira" y el fraude generalizado en las elecciones presidenciales de noviembre del 2020, informa Reuters.
La acusación estipula que Giuliani y sus aliados fabricaron y difundieron "la gran mentira", que se volvió viral y engañó a millones de personas haciéndoles creer que Dominion les robó votos, al fijar el resultado de la elección. Aparte de eso, la compañía declara en su demanda que gastó 565.000 dólares en seguridad privada para sus empleados, quienes enfrentan acoso y amenazas de muerte. "Las declaraciones de Giuliani [...] estaban destinadas para crear y de hecho provocaron indignación y causaron un daño enorme a Dominion", señala el documento. Eric Coomer, uno de los empleados ejecutivos de la empresa, también presentó una demanda por difamación contra la campaña de Trump, explicando que tuvo que esconderse debido a las amenazas de muerte de los partidarios del expresidente de EE.UU.
La semana pasada, un grupo de abogados solicitó a las autoridades judiciales de Nueva York que suspendan la licencia de Giuliani, debido a sus afirmaciones posteriores a las elecciones de noviembre pasado, y por instar a los partidarios de Trump a participar en un 'juicio por combate' poco antes de irrumpir en el Capitolio de EE.UU. el pasado 6 de enero.
Partido Republicano se enfrenta a posible quiebre al tener que decidir si expulsa a Trump
MONTEVIDEO (Sputnik) — El Partido Republicano está ante una gran disyuntiva porque tiene que decidir si expulsa o no al presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dijo a Sputnik el doctor en Ciencia Política e investigador del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas de Argentina, Luis Karamaneff.
"¿Qué va a pasar en el Partido Republicano? Porque se está enfrentando a un posible quiebre producto de las políticas de Donald Trump, el partido se enfrenta al dilema de decir qué hacemos con este señor", dijo a Sputnik Karamaneff.Varios diputados del Partido Demócrata de Estados Unidos presentaron el 11 de enero un artículo de juicio político contra Trump, a quien acusan de incitar una insurrección en el Capitolio.
Ante esta situación, varios legisladores del Partido Republicano apoyaron la iniciativa, que pasó al Senado.
Sin embargo, Tom Reed, miembro de la Cámara de Representantes por el estado de Nueva York (noreste), dijo el 12 de enero que varios congresistas republicanos planean presentar una resolución de censura contra Trump como alternativa a un juicio político tras el reciente asalto al Capitolio, sede del Congreso.
Problemas
Por su parte, Karamaneff señaló que las bases del partido responden de "manera significativa" a Trump, quien está "radicalizando aún más" a la fuerza política.
Asimismo, expresó que el mandatario tiene "mucha fuerza" en la Cámara de Representantes.
"¿Qué pasa con el partido? ¿Lo expulsan? ¿Qué va a pasar con el juicio político? Muchos representantes republicanos apoyaron el proceso de juicio, ahí hay un posible quiebre que hay que ver cómo se resuelve", apuntó.También se cuestionó "en caso de que los republicanos lo expulsen, ¿qué va a hacer Trump? ¿Va a generar un tercer partido si lo expulsan? ¿El Partido Republicano se convierte en una cáscara vacía?".
El Senado, que tendría que iniciar el juicio político contra Trump con efecto inmediato, retomará sus funciones el martes 19 de enero, un día antes de la toma de posesión del presidente electo Joe Biden.
La situación actual en Estados Unidos trae a colación una situación inédita, teniendo en cuenta el vacío legal que alberga la ley al no existir una norma que diga de manera expresa que el presidente tiene que ser juzgado en su mandato, dicen algunos especialistas.
No obstante, la figura de juicio político contra Donald Trump podría convertirse en un proceso simbólico cuyo único resultado podría ser la muerte política en caso de obtener los 67 votos necesarios para que este se apruebe en el Senado.
Financiado por donante de campaña de Trump mitin que precedió asalto al Capitolio
Los involucrados exhibieron diferentes símbolos que representaban su pertenencia a los grupos que irrumpieron en el Capitolio. Foto: Contexto Latinoamericano.
Una heredera de la cadena Publix Super Markets donó 300.000 dólares para financiar una manifestación que precedió al asalto al Capitolio de Estados Unidos que realizaron este mes partidarios del expresidente Donald Trump, informó el sábado el Wall Street Journal.
El Journal dijo que la financiación de Julie Jenkins Fancelli, una prominente donante de la campaña de Trump por las elecciones del 2020, fue facilitada por el presentador de programas de extrema derecha Alex Jones.
El medio indicó que el dinero de Fancelli cubrió el grueso de los cerca de 500 000 dólares usados en el mitin realizado en el parque Ellipse donde Trump habló e instó a sus seguidores a “luchar”.
Más de 135 personas han sido arrestadas en relación con el ataque del 6 de enero al Capitolio cuando el Congreso se reunió para certificar la victoria del demócrata Joe Biden en las elecciones de noviembre. Murieron cinco personas, incluido un oficial de policía del Capitolio.
Según el Journal, Jones prometió personalmente más de 50 000 dólares en capital inicial para el mitin a cambio de un espacio para hablar.
El reporte afirma que Jones, quien ha publicitado teorías conspirativas, ha recibido en sus populares programas de video por radio e Internet a líderes de Proud Boys y Oath Keepers, dos grupos extremistas que fueron prominentes en el motín.
Jones no respondió de inmediato a una solicitud de comentarios. Fancelli no pudo ser contactada de inmediato para hacer comentarios.
En una publicación de Twitter, Publix Super Markets dijo que la violencia en el Capitolio el 6 de enero fue una tragedia nacional. “Las deplorables acciones que ocurrieron ese día no representan los valores, el trabajo ni las opiniones de Publix Super Markets.
“La señora Fancelli no es empleada de Publix Super Markets, y no está involucrada en nuestras operaciones comerciales ni representa a la compañía de ninguna manera. No podemos comentar sobre las acciones de la señora Fancelli”.
(Con información de Reuters)
Informe: Activistas de extrema derecha recibieron poco antes de asalto al Capitolio más de 500.000 dólares en bitcoines de un donante que se suicidó
Varios activistas de extrema derecha y personalidades de Internet recibieron donaciones en bitcoines por valor de más de 500.000 dólares un mes antes del asalto al Capitolio de EE.UU. del 6 de enero, según informó este jueves la empresa Chainalysis, especializada en la lucha contra el blanqueo de capitales y el fraude en el espacio de la moneda digital.
La compañía encontró que el pasado 8 de diciembre un donante envió a través de una sola transacción 28,15 bitcoines —lo que equivale a unos 522.000 dólares en el momento de la transferencia— a 22 billeteras virtuales diferentes.
El mayor beneficiario de la donación fue el activista Nick Fuentes, que recibió 13,5 bitcoines, o unos 250.000 dólares en el momento de la transferencia. Fuentes, que negó que hubiera irrumpido a la fuerza en el Capitolio, fue visto fuera del edificio cuando comenzaron los disturbios.
Previamente, el activista había alentado a su audiencia a actuar con un comportamiento extremo para evitar que la victoria de Joe Biden fuera certificada, incluso implicando que deberían matar a los legisladores estatales. Su canal de YouTube fue suspendido por incitación al odio, incluida la negación del Holocausto y la promoción de otras teorías de la conspiración.
Otros receptores de la donación son la organización antiinmigración VDARE y el 'streamer' de extrema derecha Ethan Ralph. Los propietarios de algunas de las otras billeteras aún no han sido identificados.
¿Quién donó los bitcoines?
Según Chainalysis, las donaciones fueron realizadas por un programador informático actualmente fallecido que residía en Francia. La empresa no reveló su nombre.
El donante tenía un blog que había estado inactivo desde 2014. Sin embargo, el pasado 9 de diciembre, un día después de que se hicieran las donaciones, apareció una nueva publicación que parece ser una nota de suicidio.
En la mayor parte de la nota el autor detalló los problemas de salud, que, según él, lo llevaron a suicidarse, pero también mencionó que "legó [su] fortuna a ciertas causas y ciertas personas" y citó varias creencias comunes de la extrema derecha, como que "la civilización occidental está en declive". Además, "aparentemente aludió" a que George Floyd murió de una sobredosis de drogas y no por las acciones violentas de la Policía, señaló Chainalysis.
Un segundo policía de Washington se suicida tras los disturbios en el Capitolio de EE.UU.
Un agente de Policía de Washington D.C. se suicidó unos días después de participar en las acciones contra los disturbios que el pasado 6 de enero tuvieron lugar en el Capitolio de EE.UU., informa The Washington Post.
Durante la sesión del Comité de Asignaciones de la Cámara de Representantes celebrada este martes, el jefe interino del Departamento de la Policía Metropolitana, Robert J. Contee III, identificó al oficial fallecido como Jeffery Smith, quien sirvió en el segundo distrito de la ciudad durante 12 años.
Smith, que murió el 15 de enero, es el segundo agente que se quita la vida tras los disturbios. Anteriormente, Howard Liebengood, un miembro de la Policía del Capitolio, se suicidó el 9 de enero. Otro integrante de ese cuerpo, Brian Sicknick, murió como consecuencia de las heridas sufridas durante las protestas encabezadas por partidarios del expresidente Donald Trump en el Congreso.
"Honramos el servicio y los sacrificios de los oficiales Brian Sicknick, Howard Liebengood y Jeffery Smith, y ofrecemos nuestras condolencias a todas las familias en duelo", afirmó Contee. "Los costes de esta insurrección –tanto humanos como económicos– serán elevados", subrayó.
Contee detalló también que el día de los disturbios la Policía de Washington D.C. envió 850 oficiales al Capitolio, una cifra que supone casi una cuarta parte de sus efectivos, y 250 adicionales al área alrededor del complejo. Agregó que garantizar la seguridad en el centro de la capital durante aquella semana tuvo un coste de 8,8 millones de dólares.
Un atacante del Capitolio, acusado de amenazar de muerte a la congresista Alexandria Ocasio-Cortez
El Departamento de Justicia de EE.UU. reveló nuevos cargos contra Garret Miller, residente en Dallas (Texas), quien supuestamente participó en el ataque al Capitolio y publicó amenazas de muerte en línea contra Alexandria Ocasio-Cortez, miembro de la Cámara de Representantes del Partido Demócrata, informa la CNN.
De acuerdo con documentos judiciales, el sospechoso enfrenta cinco cargos criminales, incluidos delitos de allanamiento de morada y amenazas de muerte. Supuestamente tuiteó "asesinar a AOC" [las iniciales por las que también es conocida la congresista]. Al mismo tiempo, dijo que el agente que mató a tiros a un partidario de Donald Trump en medio de los disturbios "merece morir" y no "sobrevivirá mucho", porque es "temporada de caza". Aparte de eso, sus mensajes, publicados en las redes sociales antes y durante el asalto, contenían frases tales como "podría comenzar una guerra civil" y "la próxima vez vamos a traer armas".
Miller fue detenido el pasado miércoles, y los fiscales federales han solicitado al juez que lo mantenga en prisión preventiva, mientras que la audiencia por la detención está programada para este lunes. Clint Broden, el abogado de Miller, declaró que su cliente "lo hizo en apoyo al expresidente [Donald] Trump, pero lamenta sus acciones, [...] muchos de sus comentarios, vistos en el contexto [de la división política], son en realidad una especie de hipérbole política equivocada", explicó.
El expresidente Trump había sido empático y poco activo contra la alzada de la extrema derecha estadounidense, un segmento que más bien le favoreció electoralmente. Ahora, estos colectivos buscan qué hacer con su militancia.
La extrema derecha estadounidense busca cómo reorganizarse para seguir respirando después de quedar atrapados en medio de la nada política: la elección del Joe Biden, que tiene una visión absolutamente opuesta a la de su antecesor, Donald Trump, les dio un golpe de realidad.
Después de la violenta invasión al Capitolio de Washington del 6 de enero pasado, los grupos de odio como la guerrilla urbana Proud Boys, o los seguidores de la teoría conspirativa QAnon, esperaron que el 20 de enero Trump se quedara por la fuerza en la Casa Blanca y arrestara con la connivencia del Ejército a todos los demócratas. Esto último, claro está, no sucedió.
Trump se encargó por años de echarle leña al fuego de las conspiraciones subiendo su tono desde la campaña por su fracasada reelección: aducía de antemano que las elecciones iban a ser amañadas por los demócratas y una vez que se certificaron los resultados a favor de Biden la cosa fue para peor: la tarde del 6 de enero, Trump convocó a sus fanáticos afuera del Capitolio y les pidió que marcharan hacia el edificio. El resto de la historia ya se ha contado muchas veces.
En busca de nuevos guerrilleros
Los Boogaloo Boys, los Proud Boys, células del Ku Klux Klan, grupos por el supremacismo blanco y neonazis tuvieron que refugiarse en la clandestinidad luego de haber pasado ocho años reivindicados por un presidente que les decía que eran «buenas personas» y que «los amaba».
«La retórica sigue siendo acalorada, la gente no se está enfriando. No se están adaptando bien a Biden”, advierte Michael Edison Hayden, reportero principal del Southern Poverty Law Center (SPLC), que investiga el extremismo en Estados Unidos.
«La infraestructura realmente todavía existe» para que la extrema derecha se reúna», dijo Hayden, pero esto podría cambiar en el corto plazo.
En esta posición concuerda Colin P. Clarke, director de Política e Investigación de la organización Soufan Group, quien cree que «la energía el impulso que tiene la extrema derecha es más fuerte que en cualquier otro momento reciente», y alerta: «La pregunta es, ¿qué pasará después?».
Estos peligrosos colectivos están «más unidos en lo que rechazan que en lo que preguntan», añade Clarke, y cree que la eliminación de sus perfiles, cuentas y fanpages de las principales redes sociales más bien es «un factor unificador» ya que se agrupan en redes sociales marginales como la conocida Parler, en donde no se les impide predicar sus discursos de violencia y odio. Se comunican además por Telegram, un sistema de mensajería alternativo a WhatsApp ya que esta última es propiedad de Facebook, de donde han sido echados también.
Por medio de las plataformas alternativas convocan a nuevos integrantes y reclutas para que «luchen» contra el gobierno de Biden que, a su gusto, es demasiado socialista.
Los amigos de Trump
El SPLC define a los grupos de extrema derecha como organizaciones lideradas por supremacistas y ultranacionalistas blancos que defienden la idea de que los blancos son «la raza superior» e insisten en la supuesta inferioridad de personas de otras ascendencias étnicas o cuyo color de piel sea distinto al blanco.
Se entrecruzan y se entienden muy bien con otros grupúsculos como extremistas antigubernamentales, teóricos de la conspiración, partidarios de Donald Trump, el Ku Klux Klan, neoconfederados, neonazis e incluso integristas cristianos.
No solamente los no blancos están en las miras de las armas de los terroristas domésticos -como los ha calificado el presidente Joe Biden-: también apuntan contra personas LGBTIQ+, ateos, políticos de izquierda y todo aquello que consideren «enemigo» de lo blanco.
Esta gran masa de odio es clasificado en tres grupos, según la organización Proyecto de Datos de Eventos y Ubicación de Conflictos Armados (ACLED, por sus siglas en inglés), con sede en EE.UU.: milicias mainstream, como los conocidos Oath Keepers; extrema derecha urbana, como los Proud Boys; y los grupos libertarios de ultraderecha descentralizados, como los Boogaloo Bois.
Los Proud Boys tomaron relevancia cuando Trump los mencionó en el primer debate electoral contra Biden. «Proud Boys, den un paso atrás y manténganse preparados», dijo el entonces presidente. Es un grupo conformado en su totalidad por hombres blancos y fue fundado en 2016; sus integrantes fueron protagonistas de los eventos de Charlottesville en 2017 cuando un neonazis arremetió con su auto a decenas de manifestantes del movimiento antirracista Black Lives Matter matando a uno e hiriendo a 20 más.
Los Oath Keepers fue creada en 2009 por Stewart Rhodes, exmilitar y graduado de Derecho de la Universidad de Yale. Tiene una milicia fuertemente armada que se amparan en el derecho de pertenencia y portación de armas escrito en la Constitución Política de EE.UU., y habían prometido a Trump a iniciar una nueva guerra civil en su nombre.
Los más nuevos son los Boogaloo Boys, que se articularon en 2019 en el apogeo de la campaña electoral por la reelección de Trump. Su posición es antigubernamental y tienen como objetivo intensificar el conflicto y la grieta en la sociedad civil apostando por una «inveitable segunda Guerra Civil». Se les investiga por sus nexos con potenciales asesinatos y ataques racistas: se les considera responsables de planear el secuestro del gobernador de Michigan, Gretchen Whitmer, y de matar a dos policías en California.
Purga en el Pentágono: el secretario de Defensa destituye a cientos de asesores militares designados por Trump
El secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, ha despedido a cientos de miembros de 42 juntas asesoras del Pentágono, varios de los cuales asumieron el cargo en los últimos días de la Administración del presidente Donald Trump.
Austin ordenó una revisión a fondo de las juntas asesoras, suspendiendo sus operaciones y destituyendo a todos sus miembros, según un memorando obtenido por The Wall Street Journal. Programada para completarse en junio, la revisión volvería a enfocar los esfuerzos de los comités para "alinearse con nuestras prioridades estratégicas más urgentes y la Estrategia de Defensa Nacional", según el nuevo jefe del Pentágono.
"Como paso provisional, ordeno la suspensión inmediata de todas las operaciones del comité asesor hasta que se complete la revisión", escribió Austin en el memorando, fechado el sábado, y agregó: "También ordeno, a más tardar el 16 de febrero de 2021, la conclusión de servicio para todos los miembros del comité asesor y subcomité del Departamento de Defensa".
El jefe del Pentágono agregó que "ningún miembro de comité o subcomité realizará ningún trabajo hasta que sea debidamente designado, a menos que tenga un nombramiento activo".
Los asesores del Pentágono ofrecen experiencia en varias áreas, incluidas prácticas comerciales, políticas y cuestiones de personal. Aunque muchos sirven sin paga, un funcionario de defensa le dijo a USA Today que el funcionamiento de las juntas cuesta "varios millones de dólares" al año.
La medida se produce después de que el expresidente se apresurara a realizar una serie de nombramientos de último minuto en las juntas antes de que terminara su mandato el 20 de enero, incluidas personas leales a la Administración Trump. Entre ellas están los exfuncionarios de su campaña, Corey Lewandowski y David Bossie, así como al expiloto de la Fuerza Aérea, Scott O’Grady, quien se ha hecho eco de las repetidas afirmaciones de Trump de fraude generalizado en la carrera de 2020.
Al depurar las juntas asesoras en masa, Austin evitó señalar a funcionarios específicos, lo que podría dar la apariencia de que la decisión fue motivada políticamente, según algunos expertos. No obstante, el portavoz del Pentágono, John Kirby, reconoció abiertamente que la medida fue motivada por los últimos nombramientos de Trump.
"No hay duda de que la actividad frenética que se produjo con la composición de tantas juntas en el período de noviembre a enero preocupó profundamente al secretario y ciertamente le ayudó a tomar esta decisión", aseveró Kirby.
La Casa Blanca baraja cortarle a Trump el acceso a los informes de inteligencia
La portavoz de la Casa Blanca, Jen Psaki, ha confirmado este lunes que la Casa Blanca baraja la posibilidad de revocarle a Donald Trump el privilegio de acceso a los informes de inteligencia de EE.UU. en medio de las suposiciones de los demócratas de que el exmandatario republicano podría abusar de estos datos y aprovecharlos a su favor.
Cuando los periodistas le preguntaron si la nueva Administración de la Casa Blanca ya decidió si va a seguir extendiendo el privilegio de las sesiones informativas de inteligencia a Trump por ser expresidente, Psaki contestó que la cuestión se planteó ante el equipo de seguridad nacional.
"Obviamente, es algo que se está revisando, pero no hubo una conclusión la última vez que les pregunté al respecto", dijo la portavoz de la Casa Blanca, que prometió mantenerse al tanto de la situación por si surge más información que compartir.
Según la tradición, en Estados Unidos los expresidentes tienen acceso a la información clasificada y a las sesiones informativas de inteligencia.
Sin embargo, tras el asalto al Capitolio en Washington D. C. el 6 de enero, protagonizado por partidarios de Trump que trataron de impedir la certificación de los votos electorales que confirmarían la victoria del demócrata Joe Biden, muchos demócratas cuestionaron si el exmandatario debería gozar de este privilegio.
Locos y cuerdos
Reflexiones sobre el final de la presidencia de Donald Trump
La obstinación en negar no es la seña distintiva de las mentes atrasadas, sino una variante de la racionalidad dominante. La cultura del odio no es el efecto de capas sociales desheredadas, sino un producto del funcionamiento de nuestras instituciones
Jacques Rancière 22/01/2021
Derrota de Trump.
J. R. MoraTras el asalto al Capitolio, puede resultar sorprendente ver cómo los seguidores de Trump se empeñan en negar los hechos hasta el punto de sumirse en una violencia fanática. Algunos los perciben como mentes crédulas engañadas por fake news. Pero ¿cómo es posible seguir creyendo en esta fábula cuando vivimos en un mundo en el que sobreabundan la información y los comentarios que ‘desencriptan’ la información? En realidad, nadie rechaza la evidencia porque sea estúpido, sino para demostrar que es inteligente. Es el signo de una perversión inscrita en la estructura misma de nuestra razón.
Es fácil burlarse de los extravíos de Donald Trump e indignarse con la violencia de sus seguidores fanáticos. Sin embargo, la irracionalidad extrema que se ha desatado en el corazón del proceso electoral del país mejor preparado para administrar las alternancias del sistema representativo nos plantea también algunas preguntas sobre el mundo que compartimos con él: un mundo que creíamos poder identificar con el pensamiento racional y la democracia sosegada. Y la primera pregunta es obvia: ¿cómo es posible tanta obstinación en negar los hechos mejor acreditados y cómo puede ocurrir que esta obstinación encuentre un acuerdo o un apoyo tan amplios?
Algunos querrían seguir aferrados a la vieja tabla de salvación: quienes no quieren reconocer los hechos serían ignorantes mal informados o mentes crédulas engañadas por fake news. Es la visión idílica clásica de un pueblo cándido que se dejaría engañar por simpleza intelectual y al que solamente habría que enseñar a informarse sobre los hechos y a juzgarlos con espíritu crítico. Pero ¿cómo es posible seguir creyendo en esta fábula de la ingenuidad popular cuando vivimos en un mundo en el que abundan y sobreabundan, al alcance de cualquiera, los medios de información, los medios para verificar la información y los comentarios que ‘desencriptan’ la información?
Conviene, pues, invertir el argumento: nadie rechaza la evidencia porque sea estúpido, sino para demostrar que es inteligente. Y la inteligencia, como se sabe, consiste en desconfiar de los hechos y en preguntarse para qué sirve esa enorme masa de información que cada día se descarga sobre nosotros. A lo que se responde diciendo que sirve evidentemente para engañar a la gente, pues lo que se muestra a la vista de todo el mundo suele estar ahí para encubrir la verdad, que hay que saber descubrir oculta bajo la apariencia falaz de los hechos dados.
La fuerza de esta respuesta estriba en que satisface al mismo tiempo a los más fanáticos y a los más escépticos. Uno de los rasgos destacables de la nueva extrema derecha es el lugar que ocupan en ella las teorías conspiratorias y negacionistas, que presentan aspectos delirantes, como la teoría del gran complot internacional de pedófilos. Pero, en última instancia, este delirio no es sino la forma extrema de un tipo de racionalidad generalmente valorado en nuestras sociedades: aquel que exhorta a ver en cada hecho particular la consecuencia de un orden global y a resituarlo en la red causal de conjunto que lo explica y lo acaba revelando como algo muy diferente de lo que parecía ser en un principio.
Como se sabe, este principio de explicación de cualquier hecho por el conjunto de sus conexiones puede leerse también al revés: siempre es posible negar un hecho aduciendo la ausencia de vínculo causal en la serie de condiciones que lo hacen posible. Este fue, como se recordará, el principio que condujo a algunos intelectuales marxistas radicales a negar la existencia de las cámaras de gas durante el período nazi porque era imposible deducir su necesidad de la lógica de conjunto del sistema capitalista. Y, aún hoy en día, hay intelectuales sutiles que ven en el coronavirus una fábula inventada por nuestros gobiernos para controlarnos con mayor eficacia.
Las teorías conspiratorias y negacionistas dependen de una lógica que no está reservada a las mentes simples y a los cerebros enfermos
Las teorías conspiratorias y negacionistas dependen de una lógica que no está reservada a las mentes simples y a los cerebros enfermos. Sus formas extremas ponen de manifiesto la parte de sinrazón y de superstición que está presente en el corazón de la forma de racionalidad dominante en nuestras sociedades y en los modos de pensamiento que interpretan su funcionamiento. La posibilidad de negarlo todo no es exclusiva del “relativismo” criticado por las mentes circunspectas que se consideran guardianas de la universalidad racional. Es una perversión inscrita en la estructura misma de nuestra razón.
Se dirá que no basta con disponer de las armas intelectuales que permiten negarlo todo. Que también es necesario querer hacerlo. Es cierto. Pero conviene dilucidar en qué consiste esta voluntad o, mejor dicho, este afecto que conduce a creer o a no creer.
Es poco probable que los setenta y cinco millones de votantes que han dado su apoyo a Trump sean en su totalidad intelectos débiles convencidos por sus discursos y por las informaciones falsas que estos discursos difunden. Estos votantes no creen en el sentido de que tengan por verdadero lo que dice Trump. Creen en el sentido de que son felices escuchando lo que escuchan: un placer que, cada cuatro años, se puede expresar a través del voto, pero que todos los días se expresa de forma mucho más sencilla por medio de un simple like. Y quienes difunden informaciones falsas no son ingenuos que las consideren verdaderas ni cínicos que las sepan falsas. Es simplemente gente que tiene el deseo de que las cosas sean así, el deseo de ver, pensar, sentir y vivir en la comunidad sensible que tejen esas palabras.
¿Cómo cabe pensar esta comunidad y este deseo? Es aquí donde interviene otra de las nociones producidas por la pereza autocomplaciente: el populismo. Esta noción no evoca ya un pueblo bondadoso e ingenuo, sino, por el contrario, un pueblo frustrado y lleno de envidia que está dispuesto a seguir a aquel que sepa encarnar sus rencores e identificar su causa.
Escuchamos a mucha gente decir que Trump es el representante de la población blanca indignada y en situación de desamparo: aquellos que han sido apartados de las transformaciones económicas y sociales, que han perdido su trabajo con la desindustrialización y sus anclajes identitarios con las nuevas formas de vida y cultura, que se sienten abandonados por élites políticas distantes y despreciados por las élites diplomadas. La cantinela no es nueva: de forma semejante, el paro ya servía en los años 1930 como explicación del nazismo y sigue sirviendo en la actualidad para explicar el auge de la extrema derecha en nuestras sociedades. Pero ¿cómo se puede creer seriamente que los setenta y cinco millones de votantes de Trump responden a este perfil de víctimas de la crisis, el paro y el desclasamiento? Es necesario renunciar, por lo tanto, a la segunda tabla de salvación de la comodidad intelectual, a la segunda figura del pueblo tradicionalmente investida del rol de actor irracional: ese pueblo frustrado y brutal que constituye la contrapartida del pueblo bondadoso e ingenuo.
La pasión a la que apela Trump no tiene nada de misterioso: es la pasión de la desigualdad, que permite a ricos y pobres encontrar una multitud de inferiores sobre los que afirmar su superioridad
Más aún, es preciso poner en cuestión esa forma de racionalidad pseudo-erudita que se afana en asimilar las formas políticas de expresión del sujeto-pueblo con ciertos rasgos pertenecientes a tal o cual capa de la sociedad en ascenso o en declive. El pueblo político no es la expresión de un pueblo sociológico preexistente. Es una creación específica: el producto de un cierto número de instituciones, procedimientos, formas de acción, pero también palabras, frases, imágenes y representaciones que no expresan los sentimientos del pueblo, sino que crean un cierto pueblo atribuyéndole un régimen específico de afectos.
El pueblo de Trump no es la expresión de capas sociales en situación de dificultad y en busca de un protector. Es, ante todo, el pueblo producido por una institución específica en la que muchos se empeñan en ver la expresión suprema de la democracia: esa institución que establece una relación inmediata y recíproca entre un individuo que supuestamente encarna el poder de todos y un colectivo de individuos que supuestamente se reconoce en él. En segundo lugar, el pueblo de Trump es el pueblo construido por medio de una forma particular de interpelación, esa interpelación personalizada que hacen posible las nuevas tecnologías de comunicación, mediante las que el líder habla cada día a todos y cada uno de sus seguidores, simultáneamente como hombre público y privado, empleando las mismas formas de comunicación que permiten a cada cual decir diariamente lo que piensa o lo que siente.
Por último, es el pueblo construido por el sistema específico de afectos que Donald Trump ha alimentado a través de este sistema de comunicación: un sistema de afectos que no está dirigido a ninguna clase en particular y que no juega con la frustración, sino, por el contrario, con la satisfacción de la propia condición; no tanto con un sentimiento de desigualdad que tenga que ser reparado cuanto con un sentimiento de privilegio que debe ser conservado frente a todos aquellos que desean atentar contra él.
La pasión a la que apela Trump no tiene nada de misterioso: es la pasión de la desigualdad, que permite tanto a los ricos como a los pobres encontrar una multitud de inferiores sobre los que afirmar su superioridad a cualquier precio. En efecto, siempre existe una superioridad de la que participar: la superioridad de los hombres sobre las mujeres, de las mujeres blancas sobre las mujeres negras, de los trabajadores sobre los parados, de aquellos que trabajan en los empleos del futuro sobre los demás, de quienes tienen un buen seguro sobre quienes dependen de la solidaridad pública, de los autóctonos sobre los migrantes, de los nacionales sobre los extranjeros y de los ciudadanos de la nación-madre de la democracia sobre el resto de la humanidad.
La presencia simultánea, en el Capitolio ocupado por los esbirros de Trump, de la bandera de los trece Estados fundadores y la bandera del Sur esclavista ilustra bastante bien este montaje singular que convierte la igualdad en la prueba suprema de la desigualdad y la pursuit of happiness en un afecto de odio. Pero esta identificación del poder de todos con la colección innombrable de las superioridades y los odios no se puede asimilar con el ethos de una nación en particular, como tampoco con una capa social específica. Todos conocemos el rol que ha desempeñado en Francia la oposición entre la Francia trabajadora y la Francia asistida, entre quienes miran hacia el futuro y quienes siguen atrapados en los sistemas arcaicos de protección social, o entre los ciudadanos del país de la Ilustración y los derechos del hombre y las poblaciones atrasadas y fanáticas que amenazan su integridad. Y podemos ver todos los días en internet el odio contra cualquier forma de igualdad repetido hasta la saciedad en los comentarios de los lectores de los periódicos.
Del mismo modo que la obstinación en negar no es la seña distintiva de las mentes atrasadas, sino una variante de la racionalidad dominante, la cultura del odio no es el efecto de capas sociales desheredadas, sino un producto del funcionamiento de nuestras instituciones. Es una manera de hacer pueblo, una manera de crear un pueblo que corresponde a la lógica desigualitaria. Hace casi doscientos años que el pensador de la emancipación intelectual, Joseph Jacotot, explicó el modo en que la sinrazón desigualitaria hacía funcionar una sociedad en la que cada inferior era capaz de encontrar otro inferior y disfrutar de su superioridad sobre él. Hace solo un cuarto de siglo, yo mismo sugerí, por mi parte, que la identificación de la democracia con el consenso producía un pueblo fundado sobre los afectos del odio y la exclusión, un pueblo mucho más arcaico que el pueblo supuestamente arcaico de la división social al que reemplazaba.
Más que a la comodidad de la indignación o de la burla, los acontecimientos que han marcado el fin de la presidencia de Donald Trump deberían conducirnos a un examen un poco más profundo de las formas de pensamiento que denominamos racionales y de las formas de comunidad que denominamos democráticas.
Este artículo se publicó originalmente en francés en AOC.
Traducción de Alfredo Sánchez Santiago.
Autor > Jacques Rancière
El futuro ya no será lo que era, ni el pasado va a volver
Los medios mundiales anuncian la “buena nueva” de las vacunas contra el covid-19 y la victoria del candidato demócrata en las elecciones presidenciales de Estados Unidos como la vuelta a la normalidad del mundo, ese maravilloso mundo que prevaleció antes de la elección de Trump, cargado de crisis financieras, deterioro económico, invasiones en Asia, golpes de Estado “de colores” (o su intento) en casi todos los continentes, grandes éxodos de población causados por las imposiciones económicas, las políticas neocoloniales y las guerras desatadas por el “mundo libre”, autodenominado “occidental”.
WikiLeaks parece dispuesta a hacer público el conjunto de sus informaciones sobre la suciedad de ese mundo. Por eso se lleva persiguiendo y torturado a Assange durante años, por la misma razón que nuestra “prensa libre” y la mayor parte de sus profesionales, tan celosos cuando se trata de represiones en los “países malos”, miran para otro lado sin mostrar el más mínimo atisbo no ya de solidaridad y justicia, sino ni siquiera de corporativismo y apoyo a un colega.
Se olvidan nuestros media, además, de que Trump es un engendro político posibilitado por las propias políticas demócratas que han financiarizado la economía, deslocalizado la producción disparando el desempleo y arruinando a medianos productores, granjeros, agricultores y comerciantes, endeudado a su población a cotas insostenibles, sembrado de bombas el mundo (Obama invadió o bombardeó 7 países) y siendo las primeras en alzar el muro de México. De manera que si Trump es ese engendro apoyado por mucha gente que no podía aguantar más las políticas aberrantes del Imperio en decadencia, sus réplicas mundiales (los Bolsonaro, Johnson, Orbán, Duque, Duterte, Le Pen, y los pequeñitos como Abascal…) son síntomas de procesos similares, de un capitalismo decididamente antisocial. Ante todo es así con ese paradigma del neoliberalismo-financiero global que es la UE y cuyo desmoronamiento sólo se ha detenido de momento porque nadie sabe bien hacia dónde ir.
Christine Lagarde y Ursula von der Leyen se esfuerzan por proporcionar recetas salvadoras: dar a la UE un nuevo significado a través de un “Green Deal”, relanzar la economía mediante la puesta en marcha del euro digital, completar la Unión Bancaria y lanzar una Unión de Mercados de Capitales, crear una «ventanilla única» para la Unión Aduanera…, pero la verdad es que su suicida subordinación a la potencia estadounidense en decadencia, lleva a la UE a carecer dramáticamente de estrategia propia, rodeada de fuerzas continentales que sí la tienen. Tres ejemplos:
- La estrategia de EE.UU. es apartar a toda costa las economías europeas del mercado asiático y del gigantesco desarrollo potencial de una Eurasia articulada. Por una parte, les hace seguir bloqueos y agresiones comerciales contra Rusia que sólo perjudican los intereses económicos europeos, impidiéndoles el acceso a la inmensa riqueza del mayor territorio del mundo. Por otra, intenta abortar cualquier conexión de Europa con la Ruta de la Seda china (“un cinturón una ruta”). Mientras, EE.UU. se procura, golpe a golpe, tres corredores con acceso a Europa occidental y oriental, así como a la Eurasia occidental (Bielorrusia, Ucrania, Moldavia y los Balcanes), constituyendo el particular “cinturón y ruta” estadounidense, con el dólar, petróleo, gas, armas y tropas circulando cada vez más a sus anchas bajo la mirada entre ladina y servil de la UE, con su Alto Representante para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad Común, el sr. Borrell, dispuesto a servir de felpudo a quien quiera que ocupe la Casa Blanca. Y claro, EE.UU. se beneficia para sí de las inversiones dadas por Europa al conjunto de esa vasta región: “ayudas” económicas, inclusión en su mercado interno, protección financiera…
- Turquía, Arabia Saudí e Israel se proponen reconfigurar toda Asia occidental, cada uno con su propio proyecto de expansión y de conexión con los planes de EE.UU. Y todos con el obstáculo de Irán enfrente. Entre los tres (más USA) están generando un auténtico caos de destrucción y barbarie en toda la zona, yihadistas y paramilitares por medio, cuyas principales consecuencias salpican directamente a Europa en forma de éxodos masivos y afectación de futuros abastecimientos energéticos.
- Rusia y China cada vez fortalecen más vínculos para una posible Eurasia que estará a la cabeza del mundo, con su Banco de Desarrollo, su petro–yuan–oro, su Banco Asiático de Inversiones en Infraestructuras, su Asociación Económica Integral Regional que representa el 30% PIB mundial, su Fondo de Fomento, su sistema propio de compensación de intercambio, su Bolsa Internacional de Energía o su plan de infraestructura y desarrollo intercontinental, que lleva llamando a las puertas de Europa desde hace largos años.
Pero en lugar de abrirse al mismo, la UE acompaña como obediente subordinada a EE.UU. en sus guerras económicas, políticas y militares contra ese proyecto. Cavando con ello su propia fosa. Actualmente, ya hemos visto, se ha mostrado patéticamente incapaz de albergar ni siquiera una política sanitaria común ni de enfrentar la pandemia colectivamente. Desde que la elite capitalista se negara a pagar impuestos, los Estados han ido enflaqueciendo en sus funciones públicas, las cuales han ido siendo traspasadas al capital privado (otras dos de las razones para las que se constituye la UE). El impacto de la pandemia está poniendo a todos de acuerdo en la activación del cajero automático europeo. Nadie quiere pagar impuestos, casi todo el mundo mira indiferente a la destrucción del Estado social en manos de empresas privadas, pero ahora todos quieren ayudas del Estado (hasta Burger King y Mac Donalds nos piden solidaridad). Sin ingresos, con cada vez menos porciones de la economía en sus manos, ¿cómo pueden los Estados hacer ese milagro? Sólo hay una manera: a través de grandes millonadas de “dinero mágico”, sin valor alguno asociado a la producción, del mismo calibre que el que se han venido inventando para salvar a las Grandes Empresas y Bancos “demasiado grandes para caer” (alrededor de 15 billones de dólares sólo entre las principales economías mundiales) y hacer creer que el sistema capitalista sigue funcionando. Pero en lugar de ayudar a las sociedades, demasiadas de las enormes sumas de ese “dinero mágico” distribuidas por la UE van directamente a los bolsillos de las mafias. Comida basura, actividades contaminantes, grandes organizaciones criminales, gigantes tecnológicos, son los principales beneficiarios de la crisis, aparte de la Gran Empresa y la Gran Banca, con actividades a menudo difíciles de separar de las anteriores.
Mientras, desde principios de 2020 la pandemia ha empeorado trágicamente las condiciones de vida de la mayoría de la población mundial, ya seriamente golpeada por el último estallido de la Larga Crisis, en 2007-2008. Hoy que la economía se va descosiendo, ningún bombardeo de propaganda de los grandes media puede esconder el colapso práctico e ideológico de esa excrecencia del capitalismo degenerativo que es el neoliberalismo. Su escandaloso fracaso al lidiar con el covid-19 es manifiesto y refleja el declive de todo “Occidente”.
¿Alguien se ha parado a sacar conclusiones de porqué en China y Vietnam sí han intervenido bien frente al virus, y en Cuba, a pesar del incesante asedio que sufre desde hace más de medio siglo, se le tiene altamente controlado, al tiempo que exporta atención contra el covid-19 al resto del mundo? ¿Alguien ha reflexionado sobre el lío que se ha montado en Gran Bretaña ante el Breixit y el “bloqueo comercial” de unos días, y cómo estaría si llevara alrededor de 60 años totalmente bloqueada por el mundo “occidental”, como Cuba, o como Venezuela durante ya dos décadas, países que, entre otros, siguen asediados en plena emergencia sanitaria mundial por nuestras “democracias”?
Aquí, tras meses de sufrimiento de la pandemia, atravesamos una segunda ola y según nos dicen estamos a las puertas de una tercera. Los casi únicos mecanismos para combatirla han sido de nuevo los cerrojazos de negocios, el encierro de la población y los toques de queda (tácticas de guerra aplicadas a la sociedad). Todos estos meses desde la primera ola no se han aprovechado para aumentar significativamente las unidades de emergencia, que siempre nos dicen que “corren el riesgo de saturarse”. Ninguna inversión estructural seria en mejorar los servicios de salud pública, en revertir su obscena privatización, en mejorar las condiciones de trabajo de sus profesionales ni en reforzar permanentemente sus plantillas. En el maravilloso mundo del capital la medicina preventiva no tiene cabida (ya que no da beneficios a las grandes compañías farmacéuticas). Como circula por eso que llaman “redes sociales”, “pensar que las grandes farmacéuticas estén interesadas en la salud es como creer que las empresas fabricantes de armas están interesadas en la paz”.
Hay
ya una sensación generalizada de abatimiento. Ya no circulan las
bromas en “whatsapp”, ya no hay aplausos desde los balcones, el
calor y la solidaridad vecinal se esfuman, la ciudadanía hace lo que
puede por protegerse y a la vez no deprimirse del todo, pero los
casos no dejan de multiplicarse. Buscamos cierta “libertad”,
“contacto” y “capacidad de hacer” a través de mecanismos
como los “Zoom meetings”, pero al final son estos últimos los
que nos han engullido y multiplicado nuestra ansiedad y nuestro
esfuerzo. Las elites y sus
poderosos medios de difusión están empeñados en hacernos soñar
con una recuperación venidera. Pero el pasado no va a volver. Esta
pandemia es sólo un paso más de la decadencia de un sistema que se
muestra crecientemente incapaz de mantener su economía a flote ni de
preservar la salud de sus poblaciones, como ya expliqué al comienzo
de 2020
(https://blogs.publico.es/
No, el futuro no va a ser lo que era, viene un mundo diferente, con cada vez menos empleo en una economía digitalizada y automatizada, y con cada vez más riqueza concentrada en menos manos, Grandes Grupos que se fusionan, ministros y ministras que después de servir sus intereses ocupan altos cargos en ellos… Sin Banca ni Farmacéuticas públicas, con pensiones, coberturas y servicios menguantes, pero con cada vez más sofisticados sistemas de vigilancia, control y creación de “realidad”, la ciudadanía queda desamparada.
Y no, el pasado tampoco va a volver, ni el «viajero masa global» (desempleado) va a reaparecer, a pesar de que nuestras “izquierdas integradas” se empeñen en querer regresar al keynesianismo y en prometernos que en adelante el capitalismo se hará bueno estando ellas, aunque sea de forma subordinada, en el gobierno (qué triste ironía, la mayoría de los PC europeos tiraron la toalla justo en la fase de derrumbe del capital. Hoy vemos a algunos de ellos intentando levantar la economía capitalista y dar imposibles recetas socialdemócratas, animándonos a “vencer juntos al virus” y a convencernos que “de esto sólo salimos juntos”, como si la sociedad no estuviera dividida en fuertes intereses de clase, y unos no se estuvieran forrando a costa de la desgracia de los más. Por supuesto que mientras dicen esas frases bonitas, y no arredrados por sus propias contradicciones, practican el seguidismo de las directrices de la OTAN, de la UE y del orbe gran-empresarial).
Con
los demócratas estadounidenses el mundo no será mejor. Tampoco con
un capitalismo en caída libre que nos deja con cada vez menos medios
de vida. ¿A nadie le parece que en vez de intentar desesperadamente
reanimarle o blanquearle no es hora ya de emprender políticas
valientes de ruptura, de movilización y lucha social, al estilo de
lo que proponen Amaia Pérez y Gonzalo Fernández en
https://www.eldiario.es/
Andrés Piqueras. Sociólogo Universitat Jaume I.
URUGUAY
Trabajadores del Hospital Maciel denuncian "desinterés y falta de conducción" de autoridades en la pandemia
“Mayor contralor y apoyo al personal, mejor aplicación de la burbuja sanitaria al personal de salud y la destercerización del personal del resonador recientemente instalado”, son algunos de los reclamos que en estas horas realizan los trabajadores del Hospital Maciel, movilizados por lo que entienden como “un mal manejo de los recursos en plena pandemia por parte de las autoridades”, afirmó al Portal del PIT-CNT la Secretaría de Presupuesto y Salud de la Federación de Funcionarios de Salud Pública (FFSP), Silvia Machado.
Al término de una asamblea, el gremio resolvió un paquete de medidas: declararse en asamblea permanente y medidas para las próximas horas, entre ellas, que cada turno saldrá una hora para la realización de asambleas y que no se trasladarán pacientes al resonador “debido a la falta de respuesta hacia los trabajadores y de respaldo sanitario institucional, sin interés de solucionar los conflictos internos del hospital”.
Entre las cosas que más preocupa por estas horas, está la ausencia de un plan que organice un régimen de contingencia para el personal asistencial, con guardias del tipo rotativas, que asegure el funcionamiento inmediato y en caso que surja algún brote contar con nuevos recursos humanos aislados para poder continuar la atención sin exponer innecesariamente al 100% del personal disponible.
“Vemos un desinterés por parte de la institución hacia el personal sanitario del centro. Tenemos casi 40 compañeros y compañeras con resultados positivos de COVID-19 cursando la enfermedad y más de 150 compañeros aislados por contactos directos. Más allá del lineamiento de la Junta Nacional de Salud (JUNASA) de Administración de los Servicios de Salud del Estado (ASSE) y del Comité de Infecciones del Hospital, no se ha procedido de la mejor manera con el personal, sobre todo, con aquellos que tienen contacto directo con el paciente, que es la enfermería, auxiliares de servicio y camilleros, en cómo y cuándo se autoriza la aplicación de la bruja sanitaria de mejor del régimen de libres”, afirmó la dirigente de la FFSP.
Según manifiestan en las asambleas, se repite la sensación de “ausencia de conducción y desinterés por parte de la institución por la seguridad física y psicoemocional de sus funcionarios”.
Se denuncia, además, la privatización de servicios que funcionan en el Hospital.
Hace apenas una semana el Hospital inauguró un servicio de resonancia magnética tras lograr un acuerdo entre ASSE, el Ministerio de Salud Pública (MSP), y el Centro de Imagenología Molecular (CUDIM), pero su funcionamiento y atención se realiza con personal contratado tercerizado, que por parte de los trabajadores ven como “una clara intencionalidad de privatizar los servicios y desestatizar sistemáticamente los servicios que brinda el Hospital”.
“Marcamos nuestro descontento por la forma de contratación y funcionamiento que adoptaron para la atención del resonador, ya que se encuentra instalado en un hospital público, por lo tanto, consideramos que los auxiliares de servicio, camilleros, auxiliares de enfermería, licenciados en enfermería y los radiólogos deben ser personal público de ASSE, con llamado abierto como corresponde”, manifestó la dirigente.
“Ellos tienen una forma de manejarse sin interesarse en quien atiende a los pacientes, como queda de manifiesto en la formación online de funcionarios para trabajar en los CTI, lo cual estamos totalmente en desacuerdo con las formas y sumado a los dichos de Cipriani hace unos días resulta agraviante y desestimulante a la hora de atender a los pacientes.”
Días atrás el presidente de ASSE, Leonardo Cipriani, aseguró que “hay problemas de ausentismo” y que este problema “es mucho más grande que el sector privado”.
“En medio de una pandemia donde el personal médico le puso el hombro a la lucha contra el COVID, desde la gestión de la ASSE se agrede y cuestiona a los trabajadores, cuando en realidad debería impulsar, motivar, garantizar y mejorar las condiciones de trabajo. Ausentes en realidad son los cinco directores de ASSE, que no recorren los centros para ver las condiciones en las que se trabaja y solo salen a cortar cintas en inauguraciones fantasmas sin prever los recursos. Hoy el personal está totalmente desmotivado, agotado e inseguro”, sentenció Machado.
“Visto que a una semana que nos declaramos en conflicto por todos estos temas y no hemos tenido respuestas, ni de ASSE, ni de la dirección del centro, solicitamos se instale una mesa de negociación en el Ministerio de Trabajo para buscar un camino de diálogo y poder solucionar estos temas, para mejorar la atención de los usuarios y las condiciones laborales del personal. A partir del lunes de no tener respuestas, comenzaremos a anular camas para asegurar una atención digna y segura para los usuarios que estén ingresados”.
Como ejemplo, la puerta de emergencia del hospital, que cuenta con
personal aislado y también otros cursando la enfermedad, advierten que
de no contar con la dotación de personal necesaria comenzaran a afectar
el ingreso cerrando 2 camas de aislamiento, 2 camas con monitores y 2
sillones hasta llegar a contener los pacientes que ya estén ingresados,
como medida de cuidado y de protección tanto al personal como al propio
usuario y evitar de esta manera las largas esperas de las ambulancias en
la puerta de emergencias, como ocurre en la actualidad.
“Estamos en
asamblea permanente y está estipulado reunirnos en asamblea en cada
turno valorando el día a día, más allá de la represión que tenemos de
nuestros jefes directos por las medidas que estamos llevando adelante”
concluyó.
Repudio
En las últimas horas, la Comisión Interna del hospital Maciel denunció en un comunicado, la decisión arbitraria de descontar a los funcionarios tercerizados que participen de la asamblea, hecho que causó indignación en los dirigentes.
En un comunicado divulgado, el Presidente de la Comisión Interna, Claudio Hoaguy junto a la Secretaría de Presupuesto y Salud de la FFSP, Silvia Machado, expresan su “enfático repudio a la decisión tomada por la Dirección del Hospital Maciel de descontarle a los trabajadores tercerizados la hora de participación en la asamblea”.
Agregan que “los trabajadores del hospital nos declaramos en asamblea permanente el 20 de enero y la participación de los trabajadores en las asambleas es un derecho”.
Incumplimientos, deudas y peligro de cierre
Los trabajadores de la Panificadora de La Aguada consideran que los errores graves de la gestión empresarial han llevado a la emblemática firma a la situación crítica actual.
Según explicó al Portal del PIT-CNT el dirigente del Sindicato de Trabajadores de la Panificadora de la Aguada, Emanuel Leal, la mala gestión empresarial generó un importante déficit "que alertamos, advertimos que había que atender a tiempo y nunca nos escucharon".
Leal quien además es integrante de la Mesa Coordinadora del Pan, dijo que en el año 2018 se llegó a negociar y encontrar un punto de acuerdo en el Ministerio de Trabajo pero la empresa no modificó sus políticas de gestión tal como aconsejó el MTSS en su momento y la pandemia terminó de impactar en la economía de la reconocida panificadora.
"Acá hubo sueldos gerenciales y cargos de confianza que ganaban casi lo mismo que cobra un Diputado en el Parlamento. Eso para una panificadora es una locura", subrayó.
Leal agregó que con la pandemia la empresa perdió clientes y eso causó un impacto directo en la firma que, según explicó el dirigente, "acumulaba deudas con el Estado", así como también con los trabajadores.
"El dinero que nos descontaban a los trabajadores para el BPS llegaba a destino, pero el que iba a las AFAP no, nunca llegó. Por ejemplo hay un compañero que desde el año 2017 en República AFAP no recibieron sus aportes".
La Panificadora de La Aguada llegó a contar con unos 70 empleados a fines de 2019 y al día de hoy quedan menos de 30 en la plantilla.
Asimismo, Leal reveló que con la empresa viene incumpliendo el pago de los despidos acordados.
"En determinado momento llegamos a priorizar la fuente de trabajo, mantener los puestos y hasta llegamos a manejar propuestas de reducción de beneficios e incluso salarios para afrontar la deuda y darle viabilidad a la empresa. Pasó el tiempo y nos enteramos que la empresa rechazó nuestros planteos y al parecer comenzará el cierre paulatino de sus actividades hasta llegar al cierre total a fines de este año".
El sindicato asesorado por profesionales del Instituto Cuesta Duarte y de la Mesa Coordinadora del Pan comenzó entonces a negociar las deudas y pararse firme en la defensa de sus derechos y prever los escenarios futuros. "Después de haber intentado por todas las vías que la empresa rectificara su rumbo y sus errores gerenciales, ahora estamos abocados de manera vital a que la salida sea la mejor para los trabajadores. Las malas gestiones arrastran a las empresas y los que más perdemos somos los trabajadores".
FeNaPES: Eliminación de Consejos de Educación es un “profundo retroceso democrático”
La Federación Nacional de Profesores de Educación Secundaria (FeNaPES) rechazó la eliminación de los Consejos de Educación, sostuvo que se trata de una decisión que va “contra la democracia” y aseguró que la ANEP “no tiene un plan que dé garantías para el retorno presencial a clases a partir del 1° de marzo”.
La FeNaPES convocó a una conferencia de prensa en la presente jornada para marcar su postura ente lo que consideró “un día triste para la educación pública” en el que las autoridades dieron un paso más en el “desmantelamiento del sistema nacional de educación pública”. En este sentido, manifestaron la “profunda preocupación por los pasos que se están dando en contra de la democracia en nuestro país" y contra la autonomía del sistema de educación consagrada en la Constitución de la República. Según explicó la dirigente Alejandra Vespa, las medidas adoptadas por las nuevas autoridades, implican el desmantelamiento del sistema nacional de educación pública y el control político del sistema de educación “con una visión empresarial que es coincidente con la época que supo tener este país cuando el CONAE, en la época de la dictadura”. Según Vespa, el gobierno actual tiene “temor de ampliar la democracia y la participación de los docentes, esto es un ataque a la educación pública y su autonomía”, subrayó.
En este marco, FeNaPES reiteró su llamado a firmar las papeletas para habilitar un referéndum que derogue 135 artículos de la LUC y de esta forma, poder revertir estos “retrocesos democráticos” impulsados por las nuevas autoridades.
En tanto el secretario general de la FeNaPES, José Olivera, señaló este jueves que los anuncios recientes del CODICEN previo al inicio de clases a través de un documento de trabajo, “son una cáscara vacía” que no contiene “ninguna medida concreta que pueda ser considerada parte de un plan para generar mejores condiciones para el retorno a clases”. Olivera dijo que el pasado año el CODICEN “cometió un error gravísimo que lo pagó caro el conjunto de la sociedad uruguaya” al tocar un pilar básico de la educación pública uruguaya que era la obligatoriedad. Según el dirigente, las consecuencias de dicha decisión política “las van a pagar las nuevas generaciones”. Olivera recordó que los sindicatos y la Federación “siempre hemos defendido la presencialidad”, pero “no cualquier presencialidad” en tiempos de pandemia. En este sentido, subrayó la importancia de poner a resguardo la salud de estudiantes así como también la de trabajadoras y trabajadores del sistema educativo.
Inicio de clases
“A escasos 25 días del inicio de los cursos, la ANEP no tiene un plan que dé garantías para el retorno presencial a clases a partir del 1° de marzo”, enfatizó Olivera. Por otra parte y en relación al proceso de elección de horas docentes en Secundaria, dijo que se está viviendo una situación “compleja” y de “incertidumbre”. En este sentido, el secretario general de la FeNaPES reclamó que las autoridades asuman su responsabilidad ante la sociedad y brinden las respuestas necesarias “no desconcentrando esa responsabilidad que tienen” y exigió espacios colectivos de diálogo y negociación.
Datos
De 325.000 horas que se eligieron en 2020 la cifra se redujo a 275.000 en 2021.
Son 50 mil horas docentes menos.
A las calles por 100 mil firmas
El presidente de la UNTMRA nunca jamás imaginó que se iba a transformar en un experto de huellas dactilares. Luis Vega, ahora sabe de verticilos, arcos piramidales, presillas internas y externas y analiza las huellas con o sin lupa. En uno de los salones especialmente acondicionados para la revisión, clasificación y empaque de las papeletas de la Campaña Pro Referéndum para derogar 135 artículos de la LUC, un equipo de militantes pasa horas tratando de detectar y anticiparse a los eventuales reparos que establezca la Corte Electoral cuando finalmente se entreguen las 700 mil firmas.
El próximo fin de semana, sábado 6 y domingo 7, el PIT-CNT, FUCVAM,
el Frente Amplio, y el conjunto de organizaciones sociales que impulsan
la campaña, realizarán dos jornadas masivas para alcanzar las primeras
100 mil firmas.
En el bunker de Vega y su equipo, ya hay unas 30 mil.
"Acá estamos haciendo el trabajo fino con miles de papeletas. Lo grueso está. Si falta algún dato, una firma, eso lo ve el que recolecta las firmas, nosotros nos ocupamos de las huellas".
El equipo trabaja desde las 14 horas hasta las 22 o 23 dependiendo del ritmo y el cansancio. La vista se cansa y la revisión de cada huella es meticulosa. Parecen un equipo de CSI pero de América del Sur y sin policías.
"El ánimo anda por las nubes, si fuera por el ánimo las firmas las juntamos en tres meses pero esto es más complejo, para que el pueblo interponga un recurso de referéndum contra la ley se exige una huella que es algo muy meticuloso y técnico. Cuando un chorro roba un auto, no se le mira la huella con el detenimiento que se va a observar las huellas de la gente que quiere interponer este recurso. Pero son las reglas de juego, y el pueblo se transforma en experto en huellas la democracia y en eso estamos".
Vega contó al Portal de la central sindical que los días 6 y 7 todos los sindicatos, las organizaciones sociales y el Frente Amplio saldrán a las calles a recolectar firmas en los locales sindicales o en puestos callejeros.
"Será con todas las medias de cuidados sanitarios y todas las precauciones necesarias", aseguró.
Por último, Vega recordó que si hay algo clave en esta campaña es cuidar y atender el momento que se coloca la huella en la papeleta. Y en eso habrá que colocar el énfasis. "Yo he juntado firmas desde el plebiscito del voto verde y de ahí en adelante, para muchas causas. Y nunca vi algo como esto. La mayor parte de los compañeros y compañeras que están trabajando en este equipo lo han hecho. Ninguno de nosotros nos cocinamos en el primer hervor, yo recuerdo incluso juntar firmas con las movidas de Germán (Araújo) y nunca vi algo como esto. Pero no importa, eso no nos mueve un pelo. Vamos para adelante".
DEUDAS MIRANDO AL SUR
Al finalizar el tercer trimestre de 2020i la deuda pública contabilizada por el BCU de Uruguay se aproximaban a 40.000 millones de dólares. Cada familia oriental suma a sus deudas particulares, más de 35000ii dólares, vía sector público. Sin considerar, los intereses que paga mediante impuestos, que recaen sobre compras o sus salarios. Y sin registrar deudas ocultas en proyectos público-privados.
Por su parte, durante 2020 Brasil superó los 1100 mil millones de dólares, de deuda pública. Los datos de diferentes fuentes rara vez son coincidentes pero en términos generales ronda el 90% del PBI en los diferentes países del cono sur de América.
“Modelos” liberales y neoliberales gestaron “obligaciones” que operan como verdaderos tributos transferidos a centros financieros. Temer, Bolsonaro, Macri, Piñera, la golpista Añez, conducidos desde los gabinetes económicos por banqueros, grandes importadores y capitales del exterior provocaron saltos en los niveles de deuda.
Privatizaciones, eliminación de derechos sociales, recortes de gastos públicos, no han alcanzado para financiar la magnitud de procesos especulativos, fugas de capitales, consumos sofisticados de origen importado, ampliados a cacunda de políticas de apertura financiera y comercial irrestrictas para satisfacer demanda de sectores de altos ingresos
La pandemia agravó problemas pre existentes. El mismísimo FMI, a través de declaraciones de su directora Kristalina Giorgevna, flexibiliza posturas, admitiendo de hecho las dificultades de países deudores.
Sin embargo, paralelamente calificadoras de riesgo, profundizan presiones para transferir más patrimonio desde los Estados a grandes empresas privadas y recortar sistemas de seguridad social como formas de solventar recursos para afrontar deudas y gestar negocios para fondos buitres.
Los senderos de subordinación a grandes capitales del exterior han demostrado sobradamente nefastas consecuencias para los pueblos. Han afianzado esquemas de extracción de productos primos y alimentos desde el sur y eventualmente atrayendo capitales para actividades despreciadas en el norte por contaminantes, o talleres de armado de bienes de consumo con mano de obra “barata” en fronteras de mercados consumidores.
A las oscilaciones derivadas de la enorme especulación financiera acentuada en las últimas décadas, los flujos de comercio e inversión han sido afectados en el 2020 y 2021, por la incertidumbre de la pandemia del coronavirus y sus secuelas. En estos escenarios las posibilidades reales de captura de inversiones que dinamicen las economías del sur, se tornan progresivamente más complejas.
Los centros dominantes frente a la crisis acentúan la prioridad a sus mercados internos. El nuevo gobierno de Estados Unidos en sus primeras medidas reafirma el sendero de proteccionismo a su actividad local en un marco de contradicciones crecientes con China.
La realidad ha ido deshilachando mentiras y sueños de mundos globalizados con un único centro de
poder y se van creando posibilidades de búsqueda de mayor articulación, solidaridad y autonomía para los pueblos del sur del río Bravo.
Se torna imprescindible el acercamiento productivo, energético, tecnológico, cultural en la aspiración de avanzar en la construcción de una patria grande. Un paso en esa dirección podría ser la búsqueda de caminos en procura de negociaciones conjuntas, ante los acreedores y la realización de auditorías que permitan analizar, orígenes de cada crédito, legalidad, uso de los recursos entre otras condiciones.
GOTITAS DE ECONOMÍA
- El gobierno uruguayo ajustó las denominadas bases de prestaciones, por debajo del índice de precios al consumo. Eso implica rebajar el mínimo no imponible real para el impuesto a los salarios y jubilaciones y recortar prestaciones sociales. En los hechos un aumento de impuestos a los trabajadoresiii. Por si quedaban dudas de que la promesa de no crear tributos, era exclusivamente para el capital.
- Aumentaron los impuestos al consumo de tabaco, bebidas alcohólicas, combustibles, por encima de los ajustes de salarios. Por si continuaban quedando dudas que la promesa de no crear tributos, era exclusivamente para el capital.
- El nuevo presidente de Estados Unidos Joe Biden aumentó el contenido nacional que deben tener los productos comprados por el gobierno federal. Anunció también la creación de un nuevo cargo para alentar a los organismo del Estado a utilizar mercancías hechas en su país.iv Tu protégés, el protege. El gobierno uruguayo tiene fe en el “dios mercado”.
- Vicente Verez, director general del Instituto Finlay de Cuba anunció que en conjunto con la farmaceútica BIOCEN producirán 100 millones de dosis de vacuna, soberana 2, contra el Covid 19, durante 2021. Ejemplo de soberanía.
- En los primeros días de enero China y la Unión Europea completaron negociaciones de un acuerdo de inversión. La Unión Europea es la tercera fuente y destino de inversiones más importantes de Chinav.
iUltimo dato registrado.
iiAlgo más de un millón de familias.
iiiLos salarios ajustaron por debajo del IPC y cayó el poder de compra de los trabajadores. Al ajustar las bases de prestación por el promedio de salarios, los trabajadores pagan el mismo tributo, pero con menores salarios. Es decir el porcentaje de impuestos que pagan es mayor. Ejemplo si el trabajador disminuyó su poder de compra de 100 a 80 y continúa tributando 20, pasó de pagar 20% al 25%. Su ingreso disponible pasó de 80 a 60.
ivTomado de rt news.
vTomado de agencia Xinhua.
Reportaje de El Descamisado
¿Cuáles fueron las principales limitaciones de esa experiencia, (la del FA)?
La superchería liberal ha terminado por cooptar las mentalidades en el progresismo. Todo su discurso gira alrededor de la acción parlamentaria y sobre la gestión del gobierno. La pérdida del horizonte transformador y la adscripción al liberalismo, anulan su capacidad para la confrontación política e ideológica. Razón de sus anteriores victorias electorales, la moderación terminó siendo la causa de la derrota en 2019. Abrió camino a los poderosos. Es muy grave la responsabilidad política de los que motorizaron la moderación. Por eso mismo, a un año de perder las elecciones, todavía no se ha analizado porqué hubo tantos votantes que le dieron la espalda. Implica derribar los ídolos con pies de barro.
Hoy día el progresismo hace política solamente en el parlamento y los medios de comunicación. Evita cuidadosamente salirse de los carriles prestablecidos por el liberalismo. Ha olvidado la vocación por hacer política en las calles, el punto de encuentro para la participación, donde el pueblo discute y llega a acuerdos políticos por afuera de las instituciones de dominación. Donde en forma activa y directa la masa diseña rumbos. Se ha desistido del debate ideológico de fondo: transformación versus conservación, poder popular versus poder oligárquico. En las campañas electorales solamente se discute gestión y administración del Estado. Sin embargo, como ser buen gestor es independiente de la opción ideológica del gestor, se confunden derecha e izquierda. El Frente abandonó su tarea alfabetizadora y ello ha generado la confusión que se reflejó en las urnas en 2019.
Que diferencias encontrás en la sociedad uruguaya después de 15 años de gobierno del FA?
Sin dudas, desde el 2005 se comenzó a buscar y se encontraron los cuerpos de algunos desaparecidos y, asimismo, fueron procesados los primeros criminales del terrorismo de Estado. También es cierto que se dieron pasos muy importantes en materia de derechos.
Si bien todo eso es cierto, con el respaldo tácito o expreso del Frente Amplio, hoy día es propiedad extranjera el 100% de la producción de celulosa, el 60% de la industria de la madera, el 72% de la producción de arroz, el 64% de la soja cosechada y el 63% de la industria frigorífica. Mientras que, en el año 2000, eran uruguayos el 90% de los propietarios agropecuarios, en el 2011, presidencia de José Mujica, se redujeron al 54%: el 46% eran extranjeros. En el 2018 el 11% del territorio nacional era de ellos. Estas cifras muestran la consolidación del modelo extractivo y expoliador de los recursos que pertenecen al pueblo uruguayo. La apertura irrestricta a las inversiones extranjeras vino de la mano con la moderación política de la izquierda.
Se puede afirmar, sin duda, que durante el progresismo se aceleró el proceso de extranjerización de la economía nacional. Ello significó, nada más ni nada menos, que la consolidación del modelo extractivo y expoliador de los recursos que pertenecen al pueblo uruguayo. Ni hablar de la política de “honrar la deuda” … término acuñado para vestir la dependencia del capital financiero.
La política económica contradijo las expectativas plasmadas en las resoluciones de los congresos frenteamplistas. Por más que se enojen los que se niegan a ver la realidad, las consecuencias sociales fueron rotundas: se sostenía haber sacado a cientos de miles de la pobreza, cuando, simplemente se los había “asistido” con unos pesos, un empujoncito para que pasaran por encima de la “línea”, para hacerlos consumidores de cuarta. La exclusión social, cultural y política no se puede medir respecto a una canasta de consumo. La falsedad implícita en ese método cuantitativo quedó en evidencia apenas comenzó la pandemia y brotaron de la nada familias que corrían a las ollas populares. La mecha sigue encendida.
Luego de la dictadura militar sobrevino una ola de entusiasmo “primaveral”: ¡la democracia burguesa era la pócima que todo lo curaba! La gente creía que era posible disputar el dominio del Estado a la clase dominante, que era posible avanzar en democracia hacia una democracia más avanzada. Sin embargo, a pesar del optimismo, refugiado en sus cuarteles, continuaba al acecho el germen de la “no democracia”. El modo democrático de dominación pacífica necesita de la tutela militar, de una fuerza armada que coaccione el inconsciente colectivo, que induzca el consentimiento necesario al sistema representativo. En Uruguay la amenaza fascista se mantuvo refugiada en los muros cuarteleros, no hubo levantamientos “carapintadas”, pero pudieron haber ocurrido.
Se suponía que los gobiernos progresistas, que tuvieron mayorías parlamentarias durante 15 años, procurarían “democratizar las fuerzas armadas”, un contrasentido mayúsculo: ¿cómo democratizar la verticalidad del ordeno y mando? Hubiera sido posible, en cambio, anular de alguna forma, aunque fuere mínimamente, la influencia política de las fuerzas armadas. Sin embargo, se recorrió el camino inverso y, una vez moderado, el progresismo optó por granjearse las de los uniformados participando en las “misiones de paz” y mejorando su preparación para la represión.
Como es viejo y sabido, los dueños de todo no renunciarán pacíficamente a sus privilegios y cuentan, para ello con las fuerzas armadas, su reserva institucional para defensa de sus privilegios. Es un hecho indiscutible que se mantuvieron intactas las bases materiales del capitalismo, sus consecuencias sociales y la la amenaza cuartelera, el complemento de la democracia burguesa. En definitiva, los 15 años reafirmaron el viejo diseño dual de la dominación, anticipo del regreso del autoritarismo y del terrorismo de Estado. Se contradijo, en la práctica, la consigna/deseo de Nunca Más.
Ahora Lacalle Pou está manejando a su antojo la maquinaria que dejó aceitada el progresismo. Tal cual supo recomendar la doctrina de la seguridad nacional en los ‘50, se está acostumbrando la población a la “acción cívica” de la policía y del ejército, se promueven y festejan sus intervenciones en diversas situaciones sociales y políticas. La presencia uniformada se vuelve habitual. No hay golpe de estado a la vista, pero, de hecho, se nos está advirtiendo que la maquinaria uniformada está viva y activa, y que, si es preciso, vendrá el autoritarismo de nueva generación. Después de todo, Lacalle Pou ya cuenta con su coalición multi reaccionaria.
Se puede afirmar, sin duda, que durante el progresismo se aceleró, al mismo tiempo, el proceso de extranjerización de la economía y el fortalecimiento de las fuerzas armadas. Fue una opción ideológica. En estos 15 años se cambió todo para no cambiar nada. “A lo Lampedusa”.
Vos sabés que nosotros somos militantes Peronistas, y reivindicamos la riqueza de un largo proceso histórico, no exento de serias contradicciones, donde el movimiento obrero organizado sigue siendo en nuestra concepción una herramienta fundamental en el proceso de lucha por la liberación nacional y social. ¿Qué rol le asignás vos al Movimiento Obrero Uruguayo en estos momentos de avanzada del liberalismo rancio y oligárquico que va -entre otras cosas- por profundizar la precarización laboral, y suprimir los derechos adquiridos tras años de lucha de los trabajadores uruguayos?
Los trabajadores del sector público no pueden tener la misma perspectiva que los clasificadores de residuos o los peones rurales. Es claramente imposible. Tampoco es lo mismo sufrir el capitalismo siendo mapuche, quichua o aimara que sufrirlo como asalariado blanco, rubio y de ojos celeste en USA.
Todas y todos forzados a vender su fuerza de trabajo, pero hay formas y grados diferentes en el sometimiento y la explotación. Las relaciones del capital con el trabajo presentan particularidades que no se pueden obviar, son la sal de la vida. El mundo asalariado no es un continuo uniforme.
Los sectores asalariados que están más cerca de la cumbre poseen mayor capacidad de presión y sus reclamos no pueden ser desatendidos. Logran organizar poderosos aparatos sindicales que, por otra parte, y lamentablemente, son caldo de cultivo para burócratas. Al movimiento obrero del Uruguay le llegó la oportunidad deseada con la victoria electoral progresista, a la cuál habían contribuido casi todos sus dirigentes y militantes. La práctica política se redujo al parlamento y la gestión, escamoteando la victoria que legítimamente había logrado la movilización popular. Todo terminó en adscripción del movimiento social a la moderación del Frente Amplio.
La presión sobre ministros y parlamentarios progresistas fue suficiente para restablecer los consejos de salarios y aprobar leyes favorables al movimiento obrero, como la de responsabilidad penal de las patronales, pero, cambió totalmente la puntería de la lucha sindical: quedaron al costado de la cancha la reforma agraria, la nacionalización de la banca, el no pago de la deuda externa y todo lo que significara cambio radical en la estructura social. Se dejó de cultivar el imaginario radical del Congreso del Pueblo, que dio origen a la CNT en los ´60 y, durante décadas, fue el eje de la cultura política de las masas asalariadas. Pese al retroceso general, hubo conflictos como el de los trabajadores del gas por cañería, que parecen indicar que la radicalización es la metodología de lucha más adecuada para defenderse de la ofensiva liberal.
Muy diferentes son las condiciones en los subterráneos de la pirámide. Allí, donde dejan toda esperanza los excluidos, un producto de la reproducción de la especie que el capital considera sobreabundante y no deseado. Groseramente marginados de la seguridad social y de los sistemas públicos de vivienda, salud y educación, sobreviven en sus territorios con salarios y jubilaciones miserables, rebusques no salariales y diversas formas de asistencialismo. Carecen de fuerza suficiente para hacerse oír. Les prometen repartir panes y peces, pero apenas los asisten con algunas migajas. Salvo como clientela electoral, los partidos políticos no los tienen en cuenta y los mantienen en el analfabetismo político, dijera Frei Betto. En Argentina y Chile los asalariados empobrecidos, que nutren la movilización social, elevan el punto de mira de sus plataformas y radicalizan los métodos de lucha. No ocurre lo mismo en Uruguay, donde son arrastrados por la moderación general.
Con mucha habilidad demagógica, el gobierno de Lacalle Pou exige al movimiento obrero sacrificarse para combatir la pandemia. Promete que, en un futuro más o menos lejano, su sacrificio será recompensado con la recuperación del poder adquisitivo y los derechos perdidos. Cabortero, Lacalle hace todo lo contrario y favorece los grandes capitales del campo y la ciudad. Con discurso liberal y látigo en la mano, está logrando neutralizar a quienes postulan la “oposición responsable”, la consigna de la resignación. ¿Responsables frente a quiénes? ¿Frente al gobierno de los dueños del Uruguay? Porque la “responsabilidad” frente a los multi reaccionarios, es “irresponsabilidad” para con el mundo asalariado.
El caso de la ley de urgente consideración sirve de indicador: pese a su inicial oposición frontal a toda ley, en un ataque de “responsabilidad”, la bancada frenteamplista terminó aprobando casi la mitad de sus 500 artículos. Desconcertante la actitud tan timorata. La indignación que provocó resultó en la iniciativa para un referéndum que anulara toda la ley. Sin embargo, la dirección de la central sindical salió al salvataje de la conducción progresista: propuso rechazar solamente los artículos que el Frente no había votado en el parlamento. Es decir, del rechazo a toda la ley, los moderados pasaron abruptamente al rechazo a la mitad de la ley. Al discutir este flagrante contrasentido, 19 de los 50 sindicatos que integran la Mesa Representativa de la central obrera votaron contra la moderación del referéndum. Fue un hecho inesperado: la radicalidad parece estar germinando dentro del movimiento obrero. Puede ser un indicador de los modos de resistencia y lucha que se vienen para el 2021.
La cuestión de fondo emerge, una vez más, a la superficie: ¿a quiénes interesa hacer de este jodido mundo una sociedad sin clases? ¿a quiénes interesa luchar por tal quimera? A los proletarios del mundo unidos, ellos están llamados a sepultar la sociedad de clases, con su Estado y su mercado burgueses, a impulsar la transformación revolucionaria. La consecuencia más trágica de la moderación ha sido el abandono de esa perspectiva revolucionaria.