lunes, 18 de enero de 2021

Un cuartel militar llamado Washington DC // Asaltantes al Capitolio en Washington pretendían capturar y asesinar a funcionarios, según fiscales de EEUU // Un policía recuerda el asalto al Capitolio, cuando fue atacado con un táser y la multitud gritaba "¡mátenlo con su propia arma!" // EEUU: capitalismo salvaje y golpe fascista // El FBI y el Pentágono alertan de nuevas revueltas para la investidura de Biden // El racismo, la COVID-19 y el golpe de Estado // Se hunde la Sodoma y Gomorra de la política // Una crisis de larga gestación por Atilio Boron // Biden por Trump… ¿qué significa? // URUGUAY: Martín Pereira (FFSP): En Uruguay "la pandemia avanza a pasos agigantados" // Cuesta Duarte advierte posible aumento de pobreza y desigualdad // #YoFirmo: Hoy que existe un mañana también

 

Un cuartel militar llamado Washington DC

A cuatro días de la proclamación de Joe Biden como nuevo presidente de EEUU, la capital del país tiene más militares desplazados que Irak y Afganistán.

La 14 con la I, calle de Washington, vallada para evitar disturbios.
La 14 con la I, calle de Washington DC, vallada para evitar disturbios. MANUEL RUIZ RICO

Washington Dc

16/01/2021 12:16 Actualizado: 16/01/2021 18:52  - manuel ruiz rico - PÙBLICO

"¿Haciendo fotos para tenerlas de recuerdo?", grita Malcolm a la salida de una tienda en la calle I a la altura del cruce con la 14, a escasos metros de la Casa Blanca y muy cerca de la sede del Washington Post, en pleno centro neurálgico de la capital. Malcolm, negro y nativo de Distrito de Columbia, sale con un carro de reparto de una tienda, uno de los pocos negocios que han abierto en esa zona de la ciudad que está absolutamente tomada desde el miércoles por el ejército y otros cuerpos de seguridad federales y locales. Hay desplegados hasta 20.000 efectivos, es decir, un agente de seguridad por cada 35 habitantes. Hasta el Día de la Inauguración, el próximo miércoles, cuando Joe Biden tomará el cargo de presidente, habrá cuatro veces más militares en la capital que entre Irak y Afganistán juntos.

Habrá cuatro veces más militares en la capital que entre Irak y Afganistán juntos

El asalto al Congreso del pasado 6 de enero llevó a la alcaldesa de la ciudad, la demócrata Muriel Bowser, ha reclamar ayuda militar federal y a declarar el estado de emergencia hasta el jueves 21, el día después de la toma de posesión, para poder bloquear y blindar desde el pasado miércoles la práctica totalidad del centro administrativo de Washington. Preocupa la seguridad no sólo del miércoles, sino que desde este mismo fin de semana hay convocadas "marchas armadas" por parte de grupos extremistas en la capital y ante los congresos de los 50 estados del país.

"Vivo en Washington de toda la vida", añade Malcolm, "y jamás había visto nada así. Nunca. Y he visto un montón de Días de la Inauguración. Nunca había vallas, uno podía ir hasta el Congreso, la Casa Blanca o el National Mall sin problemas, se podía pasar sin ningún impedimento, estaba todo lleno de gente. Pero este año es diferente. Yo hoy terminaré de trabajar y no pienso venir la semana que viene por aquí, mira lo que pasó con el Congreso. Ni de coña, es muy peligroso".

Malcolm se lleva el carro de reparto, ya vacío, hacia un camión. Delante del mismo, los ocho carriles que tiene la calle I a esa altura están cortados por diez enormes barreras de hormigón. Y aún queda un kilómetro hasta la Casa Blanca y casi tres hasta el Congreso, cuyo perímetro está tan férreamente vallado y militarizado como una base militar.

El área de unos siete u ocho kilómetros que se extiende desde el entorno del Congreso hasta el Monumento a Lincoln, que incluye un extenso perímetro de la Casa Blanca y todo el National Mall (el Parque Nacional, icono nacional y famoso por películas como Forrest Gump o la última secuencia de El planeta de los simios de Tim Burton), era al terminar la semana previa a la toma de posesión de Biden una zona blindada y, por lo tanto, fantasmal. Vacía de tráfico y de transeúntes, todo estaba repleto de barreras de hormigón y un laberinto de elevadas vallas, custodiados por policías o militares armados, a menudo apostados sobre carromatos militares. De tanto en tanto pasan operarios colocando más vallas o barreras, cortando maderas o llevando camiones de un sitio a otro.

Los accesos al Capitolio, totalmente cerrados tras el asalto.
Los accesos al Capitolio, totalmente cerrados tras el asalto. MANUEL RUIZ RICO

Al entorno inmediato de la Casa Blanca ni siquiera se podía pasar ayer viernes. La residencia oficial del presidente sólo podía verse desde lejos y a través de las vallas, como quien contempla una prisión desde el exterior. Aunque la prisión era ayer esa zona de Washington: hoteles y tiendas cerrados, edificios tapiados para protegerse ante posibles disturbios, cadenas de comida o pastelerías cerrados a cal y canto, igual que bares y restaurantes, hasta el emblemático Old Ebbit, en la calle I, en un lateral de la Casa Blanca. Un cartel en la puerta del establecimiento decía: "El Old Ebbit Grill estará cerrado desde el 13 hasta el 22 de enero. ¡Esperamos verlos de nuevo cuando reabramos!".

Siguiendo esa calle hacia abajo, casi en el National Mall, Félix y Ana Villegas regresaban con las manos vacías de su visita turística por esa zona histórica de la ciudad, a menudo poblada por autobuses de turistas nacionales. "Llegamos el jueves para pasar el fin de semana, hasta el domingo, en Washington. Condujimos desde Huston, Texas, donde vivimos. Teníamos visitas organizadas pero nuestra agencia de viajes no nos avisó de que esto podía pasar. Está todo cancelado. Sabíamos que habría seguridad pero no esperábamos esto. No es ya que las visitas guiadas se cancelen a última hora, es que ni siquiera se puede pasear por esta parte de la ciudad para ver nada", dice Felipe. "Ayer cogimos un taxi para volver a nuestro hotel, y ni siquiera pudo dejarnos en la puerta. Lo hizo a dos cuadras porque el hotel queda en el interior de una zona con el tráfico ya cortado por la policía", añade.

Todo el rectángulo central de césped del National Mall estaba cercado, hasta el punto de que los mendigos que lo suelen habitar vagaban desubicados de aquí para allá sorteando vallas con sus pertenencias en un carrito o se apostaban ahora en los espacios libres de las aceras de la Avenida de la Constitución, una enorme vía de ocho carriles que acaba en el Congreso y sobre cuyo asfalto se podría uno echar una siesta sin riesgo alguno a ser atropellado. Poco antes de las diez de la mañana, delante del edificio del Servicio Federal de Impuestos dormitaba un mendigo en un banco al sol, náufrago urbano de un dispositivo de seguridad tan severo como inclemente con quien no sólo no tiene un hogar sino tampoco sitio alguno al que ir si resulta que cierran la parte de la ciudad que habita.

Sandy, argentina, lleva 24 años en Estados Unidos y 16 trabajando en el mismo sitio: el bar Jack's Deli, en la calle Indiana casi en el cruce con la 7, a unos 20 minutos caminando del Congreso y en una zona repleta de edificios oficiales, federales y locales. Es de los poquísimos bares que están abiertos, aunque está vacío, igual que el bar vecino, que también ha decidido abrir hoy. "Nosotros", –dice– hoy es el último día que abrimos. Los fines de semana cerramos y toda la semana que viene cerraremos también para evitar problemas. El asalto al Congreso fue muy grave y tenemos miedo". Sandy cuenta que vive en Maryland, estado vecino de Washington. Suele ir a trabajar en metro "pero hoy estaban cerradas las paradas de toda esta zona. El metro me dejó en Chinatown y tuve que venir caminando, casi un kilómetro ciudad arriba".

"La semana que viene no sabemos qué pasará pero no queremos estar aquí, igual no podremos ni venir a trabajar", dice, mientras contempla la terraza vacía de un bar aledaño, que ha abierto. De haber alguien en la terraza, rodeada de elevadas vallas, daría más la impresión de ser un preso comiendo en un descanso carcelario que el trabajador de un organismo federal poniendo al día su estómago a mitad de la jornada.

A las espaldas del Congreso, a 15 minutos del recinto asaltado hace dos semanas, se encuentra el restaurante de comida española Joselito. David Sierra, su jefe de cocina, dice que el ayuntamiento de la capital no ha dado ninguna consigna obligatoria sobre si cerrar o no. "Las recomendaciones han sido que usemos el sentido común, así que cerraremos el 20 de enero por precaución y estamos valorando cerrar también el domingo", día en que hay convocadas marchas armadas en todo el país.

"Meteremos todo el mobiliario del patio dentro del restaurante para que no haya cosas en la calle que sean susceptibles de que sean lanzada contra los cristales. Aparte de eso y de cruzar los dedos poco más podemos hacer", dice Sierra, que recuerda que el sector de la restauración lleva un año muy delicado por la pandemia, cuya tercera ola en Estados Unidos llevó a la alcaldesa de la capital a ordenar el cierre de los interiores hasta el 22 de enero.

El sector a medio gas se une a la decisión de las cadenas de hoteles y hasta de la compañía AirB&B de cancelar sus reservas para estos días en la ciudad. Las autoridades locales no sólo han reclamado a la población que no acudan a Washington, sino que han pedido a los habitantes de la ciudad que eviten acudir al centro de la misma y que sigan virtualmente la toma de posesión de Joe Biden.

"Es muy posible que la capital sea el sitio más seguro del país en los próximos días"

A pesar de todo, "tras la violencia vivida con el asalto al Congreso y debido al enorme despliegue policial sobre Washington, es muy posible que la capital sea el sitio más seguro del país en los próximos días", dice Christopher, oriundo de Colorado, pero residente en el Distrito de Columbia desde hace 34 años. "Me preocupa más las protestas que puedan producirse este fin de semana o durante la semana que viene ante los Congresos de los estados, sobre todo de algunos muy republicanos, que no estarán tan protegidos como lo está ahora Washington. Ahí es donde realmente puede haber problemas".

El mandato del presidente que llegó al poder al grito de Make America Great Again y de ¡Construid el muro! vivirá sus últimos días con el centro de la capital del país convertido en una base militar y con la Casa Blanca y el Congreso rodeado de barreras e imponentes vallas metálicas custodiadas por militares. Éste es también el balance del trumpismo.


EEUU Detienen a un hombre que intentó entrar en el perímetro de seguridad del Capitolio con una acreditación falsa, un arma y 500 balas

El arma del sospechoso y la munición no estaban registradas, según informa 'The New York Times' y 'CNN'.

Perímetro de seguridad en el Capitolio de Washington.
Perímetro de seguridad en el Capitolio de Washington. REUTERS

Washington

16/01/2021 23:06 - efe - PÚBLICO

La Policía del Capitolio arrestó este viernes a un hombre que intentó entrar en el perímetro de seguridad del Capitolio, en el centro de Washington, con una acreditación falsa, al menos un arma y más de 500 balas de munición, informó este sábado la cadena televisiva CNN.

La noticia del arresto llega en un momento de alta tensión en todo el país, pero especialmente en la capital estadounidense, cuyo centro se ha convertido en una fortaleza blindada ante el riesgo de nuevos ataques armados en los días previos a la investidura el miércoles del presidente electo de EEUU, Joe Biden.

La detención se produjo pasadas las 18:30 del viernes (23.30h GMT), cuando el hombre, identificado como Wesley Allen Beeler, se aproximó a un puntos de control policial situado cerca del Capitolio, uno de los muchos situados en el contorno del perímetro de seguridad que impide entrar en el centro de la capital.

Beeler, residente en Front Royal (Virginia), presentó a los policías una acreditación falsa para acceder al perímetro con motivo de la investidura, aseguró una fuente policial citada por la cadena CNN.

Cuando los agentes le preguntaron si llevaba armas, Beeler respondió que tenía una pistola semiautomática Glock, que resultó estar cargada con 17 balas, de acuerdo con la fuente.

Después del arresto, la Policía se hizo con el arma, con otras 509 balas, 21 cartuchos de escopeta y un cargador para la pistola, indica un informe del Departamento de Policía de Washington al que tuvieron acceso CNN y el diario The New York Times.

Beeler fue arrestado por posesión de un arma no registrada y de munición no registrada, entre otros posibles delitos, añade ese informe.


Asaltantes al Capitolio en Washington pretendían capturar y asesinar a funcionarios, según fiscales de EEUU

15 enero 2021 |CUBADEBATE

Partidarios de Donald Trump se enfrentan a la policía en la entrada oeste del Capitolio el 6 de enero de 2021. Foto: Reuters.

Seguidores de Donald Trump que asaltaron y ocuparon el Capitolio de Washington el pasado 6 de enero mientras transcurría la sesión de certificación de los votos del Colegio Electoral, tenían la intención de “capturar y asesinar a funcionarios electos”, según un documento presentado por fiscales federales de Estados Unidos.

Los fiscales ofrecieron esa opinión en una presentación solicitando a un juez detener a Jacob Chansley, el hombre de Arizona y teórico de la conspiración de QAnon, quien fue fotografiado con cuernos mientras se encontraba en el escritorio del vicepresidente Mike Pence en la cámara del Senado.

El memorando de detención, escrito por abogados del Departamento de Justicia en Arizona, detalla más sobre la investigación del FBI sobre Chansley y revela que dejó una nota para Pence advirtiendo que “es solo cuestión de tiempo, la justicia está llegando”.

“Pruebas sólidas, incluidas las propias palabras y acciones de Chansley en el Capitolio, respaldan que la intención de los alborotadores del Capitolio era capturar y asesinar a funcionarios electos en el Gobierno de los Estados Unidos”, escribieron los fiscales.

Chansley debe comparecer ante un tribunal federal este viernes. La evaluación se produce cuando fiscales y agentes federales han comenzado a presentar cargos más graves relacionados con la violencia en el Capitolio, incluidos datos reveladores el jueves contra un hombre, el bombero retirado Robert Sanford, acusado de arrojar un extintor de incendios a la cabeza de un policía, y otro, Peter Stager, de golpear a un oficial diferente con un poste con una bandera estadounidense.

En el caso de Chansley, los fiscales dijeron que los cargos “involucran participación activa en una insurrección que intenta derrocar violentamente al Gobierno de Estados Unidos” y advirtieron que “la insurrección aún está en curso”, mientras las fuerzas del orden se preparan para más manifestaciones en Washington y las capitales estatales en la medida que se acerca el día de la ceremonia inaugural de Joe Biden.

También sugirieron que sufre de abuso de drogas y una enfermedad mental, y le advirtieron al juez que representa un grave riesgo de fuga.

“Chansley ha hablado abiertamente sobre su creencia de que es un extraterrestre, un ser superior, y que está aquí en la Tierra para ascender a otra realidad”, escribieron.

El Departamento de Justicia ha presentado más de 80 casos penales en relación con los violentos disturbios en el Capitolio de Estados Unidos la semana pasada, en los que los partidarios de Trump irrumpieron en el edificio, saquearon oficinas y, en algunos casos, atacaron a la policía.

Muchas de las personas acusadas hasta ahora fueron rastreadas fácilmente por el FBI, que tiene más de 200 sospechosos, gracias en gran parte a los videos y fotos publicados en las redes sociales.

Michael Sherwin, el fiscal federal interino del Distrito de Columbia, ha dicho que si bien muchos de los cargos iniciales pueden parecer menores, espera que se presenten cargos mucho más graves en la medida en que el Departamento de Justicia continúa su investigación.

Alta presencia militar y policial en Washington y otras ciudades por temor a disturbios pro-Trump

Con 21 000 soldados de la Guardia Nacional desplegados en breve y barrios enteros atrincherados, Washington está bajo una fuerte vigilancia ante las amenazas de nuevas manifestaciones de seguidores de Donald Trump antes de la ceremonia de investidura del presidente electo, Joe Biden, el 20 de enero.

“Estamos preocupados por los riesgos de violencia durante las numerosas manifestaciones previstas en los próximos días en Washington y frente a los edificios gubernamentales en los estados”, que podrían atraer a individuos armados, explicó el jueves el director del FBI, Christopher Wray.

Durante una reunión con el vicepresidente saliente, Mike Pence, Wray mencionó “una cantidad importante de discusiones inquietantes en internet”.

“Actualmente, vigilamos las llamadas a manifestaciones armadas y acciones de aquí a la investidura”, de las que hay que evaluar cuáles son amenazas serias, afirmó.

La policía y el ejército están siendo muy criticados por su falta de preparación durante la manifestación de los seguidores del presidente saliente, el pasado 6 de enero. Varios centenares acabaron invadiendo el Capitolio. Al menos cinco personas, incluyendo un policía, murieron en los disturbios.

La invasión derivó en la aprobación de un nuevo juicio político a Trump el miércoles en el Congreso por “incitación a la insurrección”. Los diez legisladores republicanos que votaron a favor junto a los demócratas disponen desde entonces de una protección reforzada.

“Los colegas se desplazan ahora con escoltas armados”, contó el jueves uno de ellos, Peter Meijer, en MSNBC. “Pensamos que hay gente que podría intentar matarnos”, añadió.

Según un reciente informe interno del FBI, citado por medios estadounidenses, un “grupo armado identificado” se prepara para “asaltar” edificios gubernamentales en los 50 estados de Estados Unidos y en la capital en los próximos días y hasta la investidura del presidente demócrata.

El FBI menciona especialmente al movimiento de extrema derecha Boogaloo, que aboga por la guerra civil para derrocar al Gobierno, y cita amenazas creíbles en los estados de Michigan y Minnesota.

Varios estados tomaron medidas de precaución movilizando a efectivos adicionales de las fuerzas del orden para proteger las sedes de Gobierno.

En la capital federal, Washington, se movilizarán 21 000 guardias nacionales para la investidura, lo que significa más militares que en Irak y Afganistán juntos, informó el jueves el general Daniel Hokanson, jefe de la oficina de la Guardia Nacional en el Pentágono.

La misión de los reservistas está limitada, sin embargo, a un apoyo logístico a la policía y solo estarán autorizados “en último recurso” a realizar detenciones, según el Departamento de Defensa. No obstante, esos soldados están armados.

Tanto en Washington como en los estados vecinos de Maryland y Virginia, las autoridades hacen todo lo posible para disuadir a la población de que asista a la investidura, que tendrá lugar en las escaleras del Congreso.

Las calles del centro de la ciudad estaban el jueves vigiladas por la policía y protegidas por verjas, en ocasiones rematadas con alambre de púas (como alrededor del Capitolio), y con bloques de hormigón.

El tráfico de autos y los transportes se verán afectados también por el dispositivo de seguridad.

Las autoridades están considerando igualmente cerrar al público el extenso césped del National Mall, donde miles de visitantes suelen aglomerarse para presenciar en vivo la investidura.

La oferta de alojamiento estará limitada debido al probable cierre de ciertos hoteles, estimó el miércoles la alcaldesa demócrata de Washington, Muriel Bowser, que ya había pedido a los estadounidenses no viajar a la capital para la investidura.

La plataforma de alquiler de viviendas de particulares Airbnb anunció el miércoles la anulación y el bloqueo de las reservas en la capital durante la semana de la investidura.

En tanto, la compañía aérea Delta advirtió el jueves que los pasajeros que vuelen con destino a la capital no podrán transportar un arma en su equipaje a partir del sábado.

Exmilitares y policías estuvieron entre quienes asaltaron el Congreso

Cuando partidarios de Donald Trump se congregaban frente al Capitolio la semana pasada y cantaban el himno nacional, se formó una columna de individuos con cascos verde oliva y equipo protector que subió decididamente la escalera de mármol en una sola hilera. Cada hombre asido al cuello de la chaqueta del que iba adelante suyo.

Es una formación típica de los militares cuando se aprestan a tomar por asalto un edificio, que cualquiera que sirvió en Irak o Afganistán reconoce de inmediato. Fue un indicio estremecedor de que muchos integrantes de la vanguardia de esa turba que ocupó la casa de la democracia habían recibido entrenamiento militar, publicó este viernes la agencia Associated Press.

La AP revisó documentos públicos, publicaciones en las redes sociales y videos que indican que al menos 21 miembros de las fuerzas armadas o la policía, activos o retirados, participaron o estuvieron muy cerca de la toma del Capitolio. Y hay decenas más que están siendo investigados y que por ahora no han sido identificados. Quienes ingresaron al edificio parecían emplear tácticas, equipo protector y tecnología muy parecidos a los que usa la policía que trató de contenerlos.

Expertos en extremismo interno llevan años diciendo que organizaciones de extrema derecha y de supremacistas blancos tratan de radicalizar y reclutar a personas con preparación militar. Y afirman que la insurrección del 6 de enero, en la que murieron cinco personas, revela que esos esfuerzos parecen estar rindiendo dividendos.

“ISIS (la organización Estado Islámico) y al-Qaida bien querrían tener gente con el entrenamiento y experiencia de un militar estadounidense”, afirmó Michael German, exagente del FBI que hoy es fellow de Brennan Center for Justice de la Universidad de Nueva York. “Esta gente tiene aptitudes que rebasan por mucho lo que puede hacer un grupo terrorista extranjero. Los grupos terroristas extranjeros no tienen miembros con insignias” militares.

La figura más prominente detectada hasta ahora es un teniente coronel de la Fuerza Aérea retirado de Texas, con condecoraciones, que fue detenido después de ser fotografiado con un casco y equipo protector en la sala del Senado, sosteniendo un par de esposas de cuerdas.

Otra veterana de la Fuerza Aérea de San Diego murió al recibir un tiro de la policía cuando trataba de saltar una barricada cerca de la Cámara de Representantes. Un exmiembro de la unidad SEAL de la Armada, un grupo de combate de élite conocido como Navy SEAL, publicó un video en Facebook con su viaje desde Ohio hasta Washington para participar en la protesta, en el que parecía aprobar la toma de “nuestro edificio, nuestra casa”.

Dos policías de una pequeña localidad de Virginia, ambos exmiembros de la infantería, fueron detenidos por el FBI después de publicar selfies dentro del Capitolio.

También está siendo investigada una capitana en actividad especializada en guerra psicológica de Carolina del Norte que organizó el traslado de tres autobuses llenos de gente a Washington para apoyar las denuncias infundadas de Trump de que le robaron las elecciones.

Si bien el Pentágono desistió de estimar cuántos soldados y policías activos están siendo investigados, la cúpula militar está lo suficientemente alarmada como para hacer una advertencia a todos sus miembros de que el derecho a la libre expresión no da el derecho a cometer actos de violencia.

El jefe de la policía del Capitolio tuvo que renunciar ante la ineptitud de las fuerzas de seguridad para contener a los sublevados y varios otros oficiales fueron suspendidos a la espera del resultado de una investigación de su conducta, incluidos uno que posó para un selfie con un insurrecto y otro que fue visto con gorras de MAGA (Make America Great Again / Hagamos que Estados Unidos Vuelva a Ser Grande).

La AP revisó cientos de videos y fotos de la sublevación, que muestran una cantidad de gente mezclada con la muchedumbre que lucía equipo estilo militar, incluidos cascos, equipo protector, mochilas y radios. Decenas llevaban consigo sprays, bates de béisbol, palos de hockey y banderas de Trump atadas a palos que luego usaron para golpear a la policía.

Muchos de los manifestantes lucían insignias alusivas a agrupaciones ultraderechistas como Proud Boys, Three Percenters, Oath Keepers y otras organizaciones.

Los Oath Keepers, que dicen tener en sus filas a miles de militares activos o retirados, se hacen presentes con frecuencia en manifestaciones en todo el país, a menudo fuertemente armados con fusiles semiautomáticos y revólveres tácticos.

Stewart Rhodes, veterano del ejército que fundó los Oath Keeperes en el 2009 en respuesta a la elección del presidente Barack Obama, viene diciendo desde hace semanas que su organización está preparada para una guerra civil y “armada y preparada para actuar si el presidente lo pide”.

Adam Newbold, miembro del Navy SEAL retirado de Lisbon, Ohio, quien sirvió más de dos décadas y recibió numerosas condecoraciones por su valor en el combate, dijo en un video publicado el 5 de enero en Facebook: “Somos patriotas muy preparados, muy capaces y con muchas aptitudes, listos para un combate”.

Posteriormente publicó un video (que fue retirado tras la toma del Capitolio) en el que decía que se sentía “orgulloso” de la ocupación.

Newbold, de 45 años, no respondió a numerosos mensajes de la AP, pero en una entrevista con el portal Task & Purpose negó haber ingresado al Capitolio.

El teniente coronel retirado de la Fuerza Aérea Rendall Brock Jr., de Texas, quedó bajo arresto domiciliario luego de que un fiscal dijese que este expiloto de combate ingresó a la sala del Senado con cuerdas para usar como esposas porque planeaba tomar rehenes.

“Se proponía secuestrar, capturar, tal vez ejecutar a miembros del gobierno”, afirmó el fiscal Jay Weimer. “Su experiencia previa y su entrenamiento lo hace más peligroso todavía”.

Comandantes de Fort Bragg, en Carolina del Norte, investigan la posible participación de la capitana Emily Rainey, una veterana de Afganistán especializada en guerra psicológica que le dijo a la AP que había viajado con otras 100 personas a Washington para oponerse “al fraude electoral”. Aseguró que no violó norma alguna y que nadie de su grupo ingresó al Capitolio ni violó las leyes.

“Fui una ciudadana privada que hizo todo bien, haciendo valer mis derechos”, manifestó Rainey.

Más de 110 personas han sido detenidas hasta ahora, acusadas de distintas infracciones por la toma del Capitolio.

Brian Harrell, quien fue subsecretario de protección de infraestructuras en el Departamento de Seguridad Interior hasta el año pasado, dijo que resulta “obviamente problemático” cuando “extremistas” tienen antecedentes militares o policiales.

“Muchos recibieron entrenamiento especializado, algunos estuvieron en combate y casi todos consumieron desinformación y propaganda de fuentes ilegítimas”, manifestó. “Consumen teorías conspirativas, sienten que les están quitando algo y no les interesa debatir. Son una bomba de tiempo”.

El FBI teme que haya más episodios sangrientos. En un boletín interno emitido el domingo dijo que se planean protestas con armas en las 50 capitales estatales y en Washington en las próximas semanas.

Los departamentos de policía de varias ciudades están investigando si sus efectivos participaron en las protestas.

“No hay excusas para una actividad delictiva”, dijo el jefe de la policía de Houston, Art Acevedo, quien dio licencia y contempla una audiencia disciplinaria de una agente que estuvo en la protesta del Capitolio.

“No tengo palabras para expresar mi malestar ante la sola idea de que un agente piense que puede ir y tomar el Capitolio”, dijo.

(Con información de Reuters, AP y AFP)


Fiscales de EEUU: el asaltante del Capitolio 'Chamán Q' trató de matar a funcionarios electos

Jake Angeli, conocido como Yellowstone Wolf, en una protesta de Estados Unidos
© AP Photo / Dario Lopez-MIlls
América del Norte
02:00 GMT 16.01.2021URL corto - SPUTNIK NEWS

El autodenominado 'Chamán QAnon', que buscaba el perdón del presidente Donald Trump por asaltar el Capitolio de EEUU, trató de matar a los funcionarios electos durante los disturbios en el edificio y dejó una nota amenazante para el vicepresidente Mike Pence, afirman los fiscales federales.

Jacob Anthony Chansley, conocido como Jake Angeli o el Chamán QAnon, el vecino de Arizona de 33 años que participó en el asedio al Capitolio de EEUU, vestido con un sombrero de piel y cuernos y con la cara pintada de rojo, blanco y azul, fue uno de los rebeldes que conspiraron para capturar a los legisladores dentro del edificio, según el memorando de detención presentado el 14 de enero por la noche.

"Pruebas sólidas, incluidas las propias palabras y acciones de Chansley en el Capitolio, respaldan que la intención de los asaltantes del Capitolio era capturar y asesinar a los funcionarios electos del gobierno de Estados Unidos", escribieron los fiscales federales sobre el asedio del 6 de enero.
El documento de 18 páginas también alega que Jake Angeli, que permanece detenido en una cárcel federal de la ciudad de Phoenix, dejó una nota para Mike Pence en el estrado del Senado, donde el vicepresidente había estado minutos antes.

"Es solo cuestión de tiempo, la justicia está llegando", está escrito en este papel, según los fiscales federales.

Cuando a Chansley se le preguntó sobre la nota, se precipitó a acusar a los funcionarios electos actuales y anteriores de ser infiltrados, incluso Pence, el presidente electo Joe Biden, el expresidente Barack Obama y la exsenadora Hillary Clinton, alegando que estos políticos habían participado en varias irregularidades.

"Aunque declaró que su nota no era una amenaza, el gobierno no está de acuerdo", continuó el documento.

"Chansley actuó de acuerdo con las teorías de conspiración que ha defendido repetidamente al convertirse en uno de los miembros de más alto rango del grupo que atentó contra un procedimiento en el Congreso", se afirma en el memorando.

A pesar de que para el mundo puede ser una figura novedosa, Angeli cosecha cierta popularidad desde el 2019, cuando comenzó a ser identificado como uno de los seguidores de la teoría conspirativa conocida como QAnon en el estado de Arizona. 

Anteriormente, el hombre se negó a alimentarse con comida no orgánica, y su madre explicó que se ponía enfermo al comer alimentos normales. Entonces un juez dictaminó que el Chamán QAnon debe recibir productos orgánicos mientras está tras las rejas en espera del juicio, de acuerdo con su estricta dieta.


Los miembros de las dos cámaras del Congreso tuvieron que ser evacuados

Una turba trumpista invadió el Capitolio para evitar la confirmación de Joe Biden

PÁGINA 12  - 06 de enero de 2021

La certificación de los votos del Colegio Electoral que iba a hacer este miércoles el Congreso de Estados Unidos no pudo llevarse a cabo. Animada por Donald Trump, una turba irrumpió en el Capitolio en Washington para impedir la sesión que reconocería al demócrata Joseph Biden como el próximo presidente del país. El vicepresidente Mike Pence tuvo que ser evacuado y los miembros de las dos cámaras tuvieron que refugiarse mientras el edificio entró en un cierre de emergencia. La alcaldesa de Washington llamó a la Guardia Nacional y ordenó un toque de queda para frenar los disturbios.

“Nuestra democracia está bajo un asalto sin precedentes”, dijo Biden en una conferencia de prensa en la que pidió a Trump que “defienda la Constitución” y demande que se detenga “el asedio” al Capitolio. “Las escenas de caos no reflejan el verdadero Estados Unidos. No representan lo que somos”, sostuvo el presidente electo. “Lo que estamos viendo es un número pequeño de extremistas dedicados a la ilegalidad. Esto no es disenso, es desorden. Roza la sedición y debe terminar. Ahora”, agregó.

Las imágenes de este miércoles no tienen precedente en la capital estadounidense. “Insurrección”, dijo el senador Mitt Romney para referirse al caos. “Violento asalto”, lo llamó el ex presidente George W. Bush. Algunos representantes demócratas directamente lo calificaron de “intento de golpe de Estado”.

Trump en cambio grabó un corto video desde la Casa Blanca que publicó en Twitter. De esa forma les pidió a sus seguidores que se fueran a sus casas, insistió en que le robaron la elección y se despidió diciéndoles: “Los amamos. Son muy especiales”.

El video, lejos de dispersar a los fanáticos, indignó a los opositores y llevó a Twitter y a Facebook a tomar medidas sobre la publicación. “Esta es una situación de emergencia y estamos tomando todas las medidas adecuadas, lo que incluye remover el video del presidente Trump. Lo removimos porque, en general, creemos que contribuye al riesgo de que continúe la violencia en lugar de disminuirlo”, explicó Guy Rosen, el ejecutivo de Facebook encargado de los temas de seguridad e integridad. Twitter al principio se limitó a agregarle una etiqueta de advertencia y eliminar la posibilidad de compartirlo. También lo hizo con el siguiente mensaje del presidente, en el que insistió en una supuesta victoria suya que fue robada. Más tarde Twitter cerró la cuenta de Trump por 12 horas.

Un trámite que se convirtió en un caos

Los extremistas llegaron durante la tarde al edificio del Congreso después de escuchar a Trump en un acto en la zona de la Casa Blanca. “Nunca vamos a reconocer la derrota”, había dicho el magnate frente a quienes se habían convocado en Washington para protestar contra el conteo de votos del Colegio Electoral que iban a comenzar los legisladores.

En ese mismo discurso, deslizó la posibilidad de caminar hasta el Capitolio para presionar a representantes y senadores para que rechacen el triunfo de Biden. Sus seguidores le hicieron caso y hacia allí se dirigieron, mientras Trump volvía a la Casa Blanca.

En el Congreso, la sesión acababa de empezar. Pence ya había anunciado oficialmente que él no planeaba desempeñar otro papel más que el simbólico que le reserva la Constitución: habilitar el debate, contar los votos del Colegio Electoral y preguntar si existía alguna objeción por parte de los legisladores.

En primer lugar llegó la certificación de los nueve votos de Alabama. Todos para Trump, no recibieron ninguna objeción. Senadores y representantes también aprobaron los tres electores de Alaska, otro estado en el que ganó el Partido Republicano. Pero con el tercero, Arizona, llegó el primer rechazo de integrantes republicanos de las dos cámaras.

Pence pidió entonces que cada cuerpo se retirara a debatir si aceptaba o no las objeciones a los votos de Arizona. “Si esta elección fuera revocada por apenas acusaciones de parte del lado que perdió, nuestra democracia entraría en una espiral mortal. No veríamos a toda la nación aceptar una elección nunca más”, dijo en su intervención el líder de los republicanos en el Senado, Mitch McConnell. Pero otro grupo de su propio partido decidió avanzar con el rechazo tanto en la Cámara de Representantes como en el Senado.

Según el procedimiento, cada cámara tiene hasta dos horas para debatir esta clase de objeciones, pero ninguna llegó a definir la suerte de los votos de Arizona. En cuanto los extremistas pro-Trump lograron entrar al Capitolio, Pence fue evacuado. La policía también hizo vaciar oficinas de congresistas cercanas al edificio.

Los fanáticos del presidente atravesaron el escaso cordón policial que custodiaba el edificio, rompieron las ventanas e ingresaron al edificio. Es la primera vez desde 1814 que hay una irrupción así en el Congreso. “No vamos a retroceder”, le escribieron a la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, en un mensaje que dejaron en su oficina. Estuvieron en los recintos de la Cámara baja y del Senado. Llevaron con la bandera confederada, que ni siquiera había estado en el Congreso durante los años de la Guerra Civil del país.

La alcaldesa de la ciudad de Washington, Muriel Bowser, declaró un toque de queda a partir de las 18 hora local (20 de Argentina). Tuvo que pedir asistencia al estado vecino de Virginia, que envió los miembros de su Guardia Nacional, a efectivos de la policía estatal y se sumó a la medida de emergencia.

Solo cuando anochecía y habían pasado más de tres horas desde el caos, la multitud que permanecía fuera del edificio empezó a dispersarse. Quienes se quedaron en la zona antes de que empezara el toque de queda destruyeron los equipos de medios como la Associated Press y muchos se mantuvieron en la zona a pesar de que la media entrará en efecto.

Los medios estadounidenses reportaron que una mujer recibió un disparo durante la tarde y que fue atendida por médicos, pero falleció en el hospital. Las circunstancias en las que eso sucedió todavía no están claras. Durante la tarde, la policía arrestó solamente a 13 personas. También se informó que la policía encontró y removió al menos un artefcto explosivo dejado por los manifestantes en la oficina de un congresista.

Cuatro horas después de la irrupción, el jefe de seguridad del Capitolio declaró que el edificio era seguro. Los legisladores, cuya ubicación no se dio a conocer mientras duró el caos, se preparaban para continuar con el conteo de los votos del Colegio Electoral. “Nos vamos a quedar, cueste lo que cueste. Estos matones no nos van a correr”, dijo el senador demócrata Joe Manchin a un grupo de periodistas que seguían dentro del Congreso.


Un policía recuerda el asalto al Capitolio, cuando fue atacado con un táser y la multitud gritaba "¡mátenlo con su propia arma!"

Publicado: 16 ene 2021 13:42 GMT - RT
Relató que pensaba usar su pistola, pero opinó que la multitud lo sometería y el uso del arma le daría un pretexto para abrir fuego contra él.

Un policía recuerda el asalto al Capitolio, cuando fue atacado con un táser y la multitud gritaba "¡mátenlo con su propia arma!"
Enfrentamiento entre manifestantes y el policía Michael Fanone cerca del Capitolio de EE.UU. en Washington, el 6 de enero de 2021Shannon Stapleton / Reuters

Un policía de Washington D.C., que enfrentó a la multitud durante el asalto al Capitolio de EE.UU., afirmó que los alborotadores lo atacaron con un táser, mientras que algunos incluso gritaban: "¡Mátenlo con su propia arma!".

El momento del enfrentamiento quedó grabado.

Michael Fanone, que lleva en la Policía casi 20 años, relató durante una entrevista con la CNN que los manifestantes agresivos se apoderaron de sus pertenencias, como municiones, radio policial e incluso su placa, y lo atacaron varias veces con un táser. "Algunos chicos empezaron a apropiarse de mi arma y estaban gritando: '¡Mátenlo con su propia arma!'", afirmó.

El uniformado dijo que prefería ser baleado, antes que arrastrado por la multitud, donde no tendría control de la situación. En el momento del ataque, pensaba usar su arma, pero opinó que la multitud lo sometería y el uso de la pistola les daría un pretexto para que abrieran fuego contra él.

Shannon Stapleton / Reuters

"La otra opción en que pensé era tratar de apelar a la humanidad de alguien. Y solo me recuerdo gritando que tengo hijos. Y esto pareció funcionar", señaló, agregando que entonces un grupo de manifestantes lo protegió de otros hasta el momento en que llegó la ayuda.

El 6 de enero, partidarios de Donald Trump irrumpieron a la fuerza en el edificio del Capitolio de EE.UU. en Washington, lo que llevó a la suspensión de la sesión bicameral del Congreso para contar y ratificar los votos electorales que debían dar oficialmente la victoria presidencial a Joe Biden. Los líderes del Congreso fueron evacuados a consecuencia de los disturbios. Como resultado del asalto murieron cinco personas, incluido un oficial de Policía.


Al menos cuatro muertos tras el asalto al Capitolio de EEUU

Las autoridades han detenido al menos a 52 personas tanto en el Capitolio como en otros rincones de la capital estadounidense.

seguidores de Trump asaltan el Congreso de EEUU
seguidores de Trump asaltan el Congreso de EEUU. Stephanie Keith / REUTERS

Washington

06/01/2021 22:52 agencias - PÙBLICO

Cuatro personas murieron este miércoles y al menos 14 policías resultaron heridos durante el asalto al Capitolio de EEUU, aseguraron a última hora de la jornada las autoridades locales, que informaron además de por lo menos 52 arrestos.

Las autoridades de Washington habían informado inicialmente de la muerte de una mujer, que falleció como consecuencia del disparo de la Policía del Capitolio, pero después actualizaron esa cifra.

Otras tres personas, que no identificaron, fallecieron como consecuencia de "urgencias médicas" que sufrieron en las instalaciones del Capitolio, dijo el jefe de la Policía Metropolitana de Washington, Robert Contee, en una rueda de prensa nocturna.

Contee no dio más detalles sobre esas muertes y agregó que 14 agentes de policía resultaron heridos durante los incidentes en el Capitolio, dos de ellos de forma "grave".

Las autoridades han detenido al menos a 52 personas tanto en el Capitolio como en otros rincones de la capital estadounidense, de las cuales unas 30 fueron arrestadas por violaciones del toque de queda que impuso la Alcaldía de Washington a partir de las 18.00 horas (23.00 GMT).

La alcaldesa de Washington, Muriel Bowser, extendió durante quince días más el estado de emergencia pública en la capital, hasta después de la investidura del presidente electo, Joe Biden, prevista para el 20 de enero.

Contee aseguró además que las autoridades encontraron y desactivaron dos bombas caseras en las inmediaciones de las sedes de los comités nacionales (secretariados) de los partidos demócrata y republicano (DNC y RNC, respectivamente).

También hallaron un vehículo en el terreno del Capitolio donde había un rifle y hasta diez cócteles molotov, informó la cadena CNN. El asalto al Congreso se produjo cuando ambas cámaras celebraban una sesión para corroborar la victoria electoral de Biden en las elecciones de noviembre pasado.

El presidente saliente Donald Trump había instado a sus aliados a interferir en ese proceso y a su vicepresidente, Mike Pence, a arrogarse un poder que no le otorga la Constitución, y arengó a sus simpatizantes a que siguieran luchando durante un mitin por la mañana en Washington.

Los seguidores del presidente se dirigieron luego al Capitolio y entraron por la fuerza en el edificio, hasta que las autoridades consiguieron desalojarlos más de tres horas después, en las que vandalizaron el lugar.


EEUU: capitalismo salvaje y golpe fascista

por Ángel Guerra Cabrera
LA HAINE - 15/01/2021

El 6 de enero una turba armada de fanáticos del presidente Donal Trump asaltó el capitolio de Washington, llamado el templo de la democracia estadounidense. Una democracia nacida esclavista y cada vez más elitista, donde los cabilderos de las corporaciones, con sus bolsas repletas de dinero, ejercen tal influencia que según un estudio académico las opiniones de un ciudadano medio no tienen posibilidad de influir en la agenda legislativa.

Los asaltantes llevaban el objetivo político definido de impedir la llegada a la presidencia de Joe Biden, el candidato que ganó 7 millones de votos populares más que Trump y se impuso cómodamente en el Colegio Electoral. De resultar, hubiera implicado la permanencia en la silla ejecutiva del candidato perdedor, la supresión del orden constitucional y de las formas democráticas elementales. En ese sentido cabe la acusación de insurrección sobre las que se ha estado discutiendo pero se aplica perfectamente la de golpe de Estado, usada, no sólo por medios de izquierda, sino también liberales y congresistas del Partido Demócrata. Los asaltantes fueron a Washington convocados por Trump con antelación, quien, además, el día 6 los animó a trasladarse al Congreso.

No eran necesarias más instruciones. Había llamado a una movilización salvaje esa mañana a personas marginadas, en muchos casos, por el capitalismo estadunidense e indignadas por las acusaciones que repetía desde hacía meses de que el voto electoral es intrínsecamente fraudulento para beneficiar a los demócratas y después de las elecciones de noviembre, que se las habían robado; coreado, como no, por una mayoría de legisladores republicanos federales y locales, así como por líderes de opinión conservadores. Todo ello sin aportar pruebas. Debe añadirse que la del 6 de enero fue la manifestación con más débil dispositivo de control de todas las efectuadas en Washington desde el brutal asesinato de George Floyd.

Cuando la turba trumpista llegó a las inmediaciones del Capitolio, no había apenas policía del Distrito de Columbia, mucho menos fuerzas federales y no se había iniciado siquiera la movilización de la Guardia Nacional (GN), pese a las solicitudes formuladas por la alcaldesa demócrata de Washington. Fue cuando ya el saqueo y persecución de legisladores estaba en curso que el Pentágono dio su aprobación para movilizar a la GN. Hay también evidencia de la complicidad de oficiales de policía del Capitolio con los vándalos, a quienes les indicaron, por ejemplo, cómo llegar a la oficina del, por ahora, líder senatorial republicano Chuck Schumer, caído en desgracia con Trump una vez reconoció la victoria de Biden. La FBI había advertido sobre la amenaza de la acción armada. Demasiadas coincidencias.

Resulta inseparable de este análisis la casi total ausencia gubernamental en el enfrentamiento al Covid-19, que habrá producido más de 405 mil muertos en el país en la primera quincena de febrero, más que sus caídos en la Segunda Guerra Mundial, la monumental crisis económica y social que se asocia a la pandemia. Pero lo que le ha dado enorme magnitud es la política seguida por Obama al no rescatar a la clase trabajadora de la gran recesión de 2008, pero sí generosamente al Big Oil, el Big farma, las corporaciones tecnológicas y, obvio, a los grandes bancos.

Un país en un proceso de exacerbación sin piedad de la desigualdad social desde la revolución neoconservadora de Reagan (1980), que lo desindustrializó, arremetió contra las regulaciones al capitalismo salvaje establecidas por el New Deal de Roosevelt, socializó las pérdidas y privatizó las ganancias, eximió de impuestos a los ricos y las corporaciones convirtiendo a la hoy decaída superpotencia en un vector del neoliberalismo y, por consiguiente, de la degradación medioambiental a escala global. Pero ésta ha sido una empresa bipartidista en la cual Clinton y Obama se destacaron tanto como sus homólogos republicanos. Condiciones ideales para el florecimiento de líderes demagógicos, cuando el Partido Demócrata ha vuelto la espalda a la clase obrera blanca y da por hecho, a saber por qué, a los negros, latinos, jóvenes y mujeres como sus votantes, hicieron posible el ascenso imparable de Trump con la promesa de drenar el pantano de Washington.

Trump encarna al fascismo y no es dato menor que 71 millones lo hayan votado y muchos lo sigan ciegamente, pero ésta es una coyuntura que el ala progresista del Partido Demócrata, sin la cual Biden-Harris no habrían alcanzado su resonante victoria ni hubieran ganado los dos cargos senatoriales por Georgia, debe aprovechar para tirar de Biden-Harris al centro y empujarlos a hacer justicia social, ecológica, un sistema de salud universal, a impulsar la paz y la cooperación internacional y a enterrar el monroísmo. Si no, el fascismo podría volver fácilmente a la Casa Blanca en 2024, con Trump u otro demagogo.

@aguerraguerra


El republicano abandonará Washington el miércoles

¿Cuáles son los planes de Donald Trump para la asunción de Joe Biden?

El líder republicano anunció la semana pasada que no estará presente en la ceremonia de jura de Joe Biden.
PÁGINA 12 - 16 de enero de 2021

Imagen: AFP

El mandatario saliente de Estados Unidos, Donald Trump, prepara su mudanza. El próximo miércoles por la mañana se irá de Washington, unas horas antes de la asunción de su sucesor, el demócrata Joe Biden.

En el itinerario del líder republicano está agendado que volará a su club Mar-a-Lago en Palm Beach, Florida, donde tiene la intención de instalarse. Trump anunció hace días que no estará en la ceremonia de jura de Biden. "A todos los que me han preguntado, no iré a la Inauguración el 20 de enero", expresó la semana pasada a través de Twitter.

Los preparativos para abandonar la Casa Blanca ya comenzaron, al punto que en las últimas horas se viralizaron en las redes sociales distintas imágenes de camiones en la puerta de la residencia gubernamental, cajas apiladas en los jardines y hasta empleados trasladando cuadros y bustos.

Dos de esas imágenes son emblemáticas: en una, un empleado carga un busto del exmandatario Abraham Lincoln, y en otra otro trabajador, de traje, lleva una fotografía enmarcada de lo que parece una cumbre internacional.

Cada presidente de EEUU utiliza fondos de los museos federales para decorar la Casa Blanca según su gusto, y la prensa publicó en su momento que el mismo Trump había elegido el busto de Lincoln. Con el recambio de jefe del Ejecutivo, todos los objetos vuelven a sus respectivos museos.

La asunción de Biden

El Departamento de Estado informó que el demócrata pasará la noche del martes en la Blair House, una mansión ubicada muy cerca de la Casa Blanca y destinada a hospedar a jefes de Estado en sus visitas oficiales a Washington. Esa invitación es una tradición entre los presidentes salientes y entrantes. 

Biden recibirá el mando de la potencia norteamericana el miércoles, en una ceremonia tradicional, aunque con un desfile virtual con la presencia de mil asistentes presupuestados. La vicepresidenta Kamala Harris también asumirá el mismo día.

La ausencia de Trump lo convierte en el cuarto mandatario que no está en la jura de su sucesor, después de que hicieran lo mismo John Adams en 1801; John Quincy Adams -hijo del expresidente John Adams- en 1829; y Andrew Johnson, en 1869.

La administración de Biden prevé una limpieza a fondo de la Casa Blanca antes de la toma de posesión. Según la cadena NBC, el nuevo gabinete estimó un presupuesto de casi medio millón de dólares para esa tarea, que incluyen partidas para limpiar alfombras y cortinas.


Más ecos del asalto al Capitolio: el secretario interino de Seguridad Nacional de Trump dimite y varios policías quedan inhabilitados

Chad Wolf da la espalda a Trump a ocho días de su salida, mientras se procede a la investigación de los hechos del pasado miércoles, en la que se ha decidido suspender a varios policías del Capitolio. 

Manifestantes pro-Trump ondean pancartas durante los enfrentamientos con la policía del Capitolio.
Manifestantes pro-Trump ondean pancartas durante los enfrentamientos con la policía del Capitolio. Shannon Stapleton / REUTERS

madrid

12/01/2021 12:10 público | efe

Los sucesos ocurridos el pasado miércoles en Washington siguen dando titulares. A la larga lista de altos cargos de la Administración de Donald Trump que han dado la espalda al presidente saliente a ocho días de su recambio, se suma Chad Wold, el secretario interino del Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos. La investigación que se ha abierto ha decretado suspender a varios policías del Capitolio por alentar a los manifestantes y no impedir su entrada. 

Lo último que ha hecho Wolf antes de su salida ha sido adelantar una semana, desde el 13 de febrero, el operativo especial de seguridad que se va a disponer para la toma de posesión del presidente electo Joe Biden, fijada para el 20 de enero. 

"No habrá acceso público a los terrenos del Capitolio durante la inauguración presidencial, y el evento continuará según lo programado", anticipó Pittman, la nueva jefa de seguridad del Capitolio, quien apuntó que varios oficiales de la Policía del Capitolio "ya han sido suspendidos en espera del resultado de sus investigaciones".

Entre ellos, está un oficial que al parecer posó junto a un manifestante para una foto. Otro policía también está inhabilitado por aparecer en un vídeo colocándose un sombrero con un lema de Trump y empezar a dirigir a las personas hacia la entrada  del Capitolio.

Otro integrante del dispositivo policial del Capitolio, Howard Liebengood, murió el pasado sábado en un aparente suicidio, según medios locales.

Este lunes, Biden aseguró que no tiene miedo de jurar su cargo en el exterior del Capitolio, como es tradición, a pesar de las manifestaciones que se prevén y el clima de efervescencia que está gestándose en redes como Twitter.

El Buró Federal de Investigaciones (FBI) alertó en un boletín interno sobre la amenaza de "protestas armadas" en todo el país desde el sábado, de un "levantamiento" a nivel nacional y de un nuevo intento de asalto al Capitolio desde el domingo y hasta la toma de posesión de Biden. Washington se reforzará con más de 10.000 miembros de la Guardia Nacional para garantizar la seguridad. 


El FBI y el Pentágono alertan de nuevas revueltas para la investidura de Biden

El buró federal detecta planes para «atacar todos los 50 capitolios estatales» y el Congreso de Washington entre el 16 y el 20 de enero

Fecha de publicación Ene 12, 2021 - LA REPÚBLICA uy

Mientras Estados Unidos trata de digerir la sublevación del 6 de enero, se multiplica la evidencia de cómo el asalto al Capitolio se planeó abiertamente en las redes sociales. En paralelo al pasmo por el fracaso en la prevención, crece la preocupación por un segundo ataque cuyos indicios son igual de claros. Los foros de ultraderecha planean nuevas acciones que culminen en la llamada «Marcha del Millón de Milicias» el 20 de enero, día de la investidura de Joe Biden. El FBI, el Pentágono y Twitter advierten de que se planean más revueltas, y las autoridades de Washington piden más seguridad.

«Luchad como en el infierno», les animó el presidente Trump. «Tengamos un juicio por combate», les dijo su abogado Rudy Giuliani. «Es hora de apuntar nombres y patear culos», proclamó el congresista Mo Brooks. Y el senador Josh Hawley saludó con el puño levantado a las masas mientras avanzaban hacia el Capitolio. Pero los ánimos de los manifestantes venían caldeados desde casa. Y numerosas pruebas halladas en el Capitolio y en las redes sociales indican que al menos una parte de la turba asaltante seguía un plan relativamente bien definido.

En foros digitales de extrema derecha hubo conversaciones explícitas sobre cómo irrumpir en el Capitolio, por ejemplo, y maniatar a los congresistas con bridas para impedir la certificación de la victoria electoral de Joe Biden. Se ofrecían huecos en los coches para marchar hacia Washington, y se discutía si había sitio en las rancheras para transportar las armas que querían llevar. Los mismos movimientos se han detectado para planear movilizaciones en los próximos días, que culminen en una gran marcha en Washington el 20 de enero, fecha de la toma de posesión del presidente electo Joe Biden y la vicepresidenta electa Kamala Harris.

El FBI, según un informe interno al que tuvo acceso la cadena ABC, «ha recibido información de un grupo armado identificado que pretende viajar a Washington el 16 de enero». «Han advertido», añade el informe del buró, «de que si el Congreso intenta apartar al presidente a través de la enmienda 25 habrá una enorme revuelta». «Se están planeando protestas armadas en todos los 50 capitolios estatales desde el 16 hasta el 20 de enero, y en el Capitolio de Washington del 17 al 20 de enero», concluye el boletín.

El Pentágono también «está al tanto de más amenazas posibles por parte de potenciales terroristas» en los próximos días, incluido el 20 de enero. Así se lo expresó el secretario del Ejército, Ryan McCarthy, al congresista Jason Crow en una conversación telefónica cuya transcripción ha hecho pública el legislador demócrata, miembro del Comité de Servicios Armados de la Cámara de Representantes.

Las fuerzas de seguridad, según le dijo McCarthy al congresista, se incautaron en las inmediaciones del Capitolio de armas de fuego, cócteles molotov, artefactos explosivos y bridas, «lo que indica que se evitó por poco un desastre mayor». El congresista le expresó a McCarthy su «profunda preocupación» por las informaciones que aseguran que «miembros del Ejército en activo y en la reserva estuvieron implicados en la insurrección».

La posibilidad de un segundo ataque también fue mencionada el viernes por Twitter, en el comunicado en que anunciaba la suspensión de la cuenta del presidente Trump. «Ya han empezado a proliferar en y fuera de Twitter planes para futuras protestas armadas, incluida la propuesta de un segundo ataque al Capitolio de Estados Unidos y a los Capitolios estatales el 17 de enero», dice el comunicado. La compañía considera que los dos tuits del presidente el viernes que llevaron a la «suspensión permanente» de su cuenta, aunque el tenor no era explícito en su incitación a la violencia, «pueden inspirar a otros para replicar los actos violentos que tuvieron lugar el 6 de enero».

En los mismos foros donde se planeó el asalto se ha hablado también durante semanas de organizar protestas masivas que culminen en lo que se ha bautizado como la «Marcha del Millón de Milicias», el 20 de enero, en la explanada del Capitolio donde tendrá lugar la ceremonia de investidura. En conversaciones en Parler, red social sin apenas moderación y popular entre la extrema derecha, censurada ya por diversos servidores, se debate abiertamente sobre el armamento adecuado para llevar a la marcha, desde bates de béisbol hasta rifles de asalto.

La alcaldesa de Washington, la demócrata Muriel Browser, envió una carta el sábado al Departamento de Seguridad Nacional, en la que pide que se ponga en marcha ya el refuerzo de la seguridad en la capital de cara a la toma de posesión de Biden, que inicialmente estaba planeado iniciar el 19 de enero, solo un día antes de la ceremonia. El senador republicano Roy Blunt, encargado de supervisar la planificación de la jura de Biden y Harris, se sumó a la exigencia de Browser.

A nueve días de que se celebre el acto solemne y habitualmente multitudinario ante el Capitolio, el complejo amanecía este lunes aislado del exterior, acordonado por una imponente valla de más de dos metros de alto y un despliegue de fuerzas de seguridad. Los legisladores, aún en estado de shock, aceleraban los preparativos para el impeachment de un presidente más silencioso que nunca, que se ha mantenido al margen de la conversación sobre la amenaza a la seguridad nacional, despojado de su vía de comunicación habitual por el cierre de sus perfiles en redes sociales.


Dimite el jefe de la Policía del Capitolio tras el asalto y el discutido trabajo policial

El FBI ha ofrecido una recompensa de 50.000 dólares para quien pueda ofrecer información que conduzca a la ubicación, arresto y condena de las personas responsables de las bombas caseras encontradas en Washington.

El ya exjefe de la Policía del Capitolio, que ha dimitido tras el asalto.
El ya exjefe de la Policía del Capitolio, que ha dimitido tras el asalto. WEB DE LA POLICÍA DEL CAPITOLIO

madrid

08/01/2021 11:59 EUROPA PRESS - PÙBLICO

El jefe del departamento de Policía del Capitolio, Steven Sund, ha dimitido este jueves, un día después de que una turba de manifestantes irrumpiera en el emblemático edifico para impedir la certificación de los votos y la ratificación de Joe Biden como próximo presidente de Estados Unidos, poniendo así en entredicho la labor de las fuerzas de seguridad.

La renuncia se produce después de que la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, pidiera la dimisión de Sund, que también recibió críticas por parte del líder de la mayoría republicana en el Senado, Mitch McConnell, así como de otros legisladores que criticaron el actuar de las fuerzas de seguridad durante el asalto al Capitolio.

Los incidentes se saldaron con cinco muertos y decenas de detenidos, y han levantado preocupación ente los líderes políticos y congresistas que han alertado de la poca seguridad desplegada en torno al Capitolio en una jornada especialmente relevante y en la que ya se anticipaban disturbios debido al aliento por parte del presidente, Donald Trump, a sus seguidores para impedir la certificación de los resultados electorales.

Durante la toma, más de 50 policías del Capitolio y de la Policía metropolitana resultaron heridos y varios han sido hospitalizados con "heridas graves", según Sund.

Recompensa económica por información

Por su parte, el FBI ha ofrecido una recompensa de 50.000 dólares (unos 40.700 euros) para quien pueda ofrecer información que conduzca a la ubicación, arresto y condena de las personas responsables de las bombas caseras encontradas en Washington el miércoles, coincidiendo con la irrupción de manifestantes en el Capitolio.

Las fuerzas de seguridad recibieron dos alertas por bombas, una en cada una de las sedes de los dos partidos estadounidenses, el Republicano y el Demócrata.

Asimismo, ha pedido la colaboración ciudadana para identificar a quienes "entraron ilegalmente en el edificio del Capitolio", tal y como han transmitido a través de su cuenta de Twitter. La agencia ha difundido 40 fotos del momento del asalto.


Detienen en Florida al seguidor de Trump que cargaba el atril de Pelosi durante el asalto al Capitolio de EEUU

Sobre Adam Johnson, de 36 años, pesaba una orden federal de captura y fue detenido el viernes. Se encuentra a la espera de juicio, aunque no se han especificado los cargos que se le imputan.

Johnson atril Pelosi
Adam Johnson, el seguidor de Trump detenido por participar en el asalto al Capitolio de EEUU. AFP / REUTERS

miami

09/01/2021 16:37 efe - PÙBLICO

Adam Johnson, el seguidor Donald Trump que fue fotografiado cuando cargaba el atril de la presidenta de la Cámara de Representantes de EEUU, Nancy Pelosi, durante el asalto al Capitolio del pasado miércoles, ha sido detenido en Florida.

La Oficina del Alguacil del condado Pinellas, en la costa del centro-oeste de Florida, ha indicado este sábado que sobre Johnson pesaba una orden federal de captura.

En la foto policial de su detención aparece sin la enorme sonrisa que lucía cuando fue retratado el 6 de enero durante la toma del Capitolio por parte de partidarios del presidente el funciones de EEUU, Donald Trump, que habían asistido poco antes a un mitin del mandatario, desde donde les instigó a marchar hasta el edificio que alberga las dos cámaras del Congreso.

Entre otras cosas, Trump dijo a sus seguidores que si no luchaban con fuerza, no iban a tener más "un país" y que había que dejar fuera a los débiles porque había llegado "la hora de la fuerza" después de insistir nuevamente en el fraude electoral que lleva denunciando sin pruebas desde que Joe Biden se impuso en los comicios presidenciales de hace aproximadamente un mes.

Johnson, según la ficha policial, tiene 36 años, reside en Tampa, fue detenido el 8 de enero y está a la "espera de juicio". En la ficha no se especifican los cargos que se le imputan.

Trump, incitador de la insurrección

La fotografía de Johnson con el atrio de Pelosi es una de las más publicadas de los sucesos ocurridos en el Capitolio, donde murieron cinco personas, una de ellas un policía, y numerosas resultaron heridas.

Los asaltantes causaron destrozos en la sede del Congreso y se enfrentaron a las fuerzas del orden en un episodio que algunos legisladores han definido como un intento de golpe de estado y otros como una "insurrección".

La condena ha sido prácticamente unánime y Trump ha sido responsabilizado directamente de los hechos como instigador no sólo por los demócratas, que han pedido su destitución, sino por algunos republicanos.

Trump corre el riesgo de ser sometido a un juicio político, el segundo de su mandato, antes de que el demócrata Biden asuma el 20 de enero la Presidencia de EEUU como ganador de las elecciones del 3 de noviembre.

Sigue sin aceptar su derrota electoral

El actual presidente no acepta los resultados electorales y afirma sin pruebas haber sido víctima de un fraude masivo, razón por la cual el 6 de enero instó a sus partidarios a marchar al Capitolio.

Ese día en las cámaras legislativas se realizaba la certificación de la victoria de Biden, que Trump califica como un "robo".

Una vez controlada la situación, el Congreso reanudó la sesión interrumpida por el asalto y certificó a Biden como presidente electo en la madrugada del 7 de enero.

Trump, cuyas cuentas en Facebook y Twitter han sido bloqueadas para evitar incitaciones a la violencia, no asistirá a la investidura de Biden.


Noticias Internacionales Independientes (EE.UU.)

El racismo, la COVID-19 y el golpe de Estado

15 de enero de 2021

Amy Goodman y Denis Moynihan

El proceso para llevar a cabo un segundo juicio político contra el presidente Donald Trump fue rápido y enérgico. Se produjo solo una semana después de que Trump incitara un violento ataque de supremacistas blancos contra el Capitolio de Estados Unidos, que dejó cinco muertos, incluido un oficial de policía del Capitolio. Los relatos de varias congresistas de color reflejan el caos del momento y los muchos peligros que enfrentaron. Norma Torres, representante demócrata por el distrito sur de Los Ángeles, brindó su testimonio en una reunión del Comité de Reglas de la Cámara de Representantes esta semana: “Yo fui una de las doce personas que quedaron atrapadas en la galería de la Cámara de Representantes. Escuché el disparo. Vi el humo del gas lacrimógeno que había sido lanzado y a un oficial sin equipo de protección enfrentarse a una multitud furiosa justo afuera de la Cámara. Respondí la llamada telefónica de mi hijo, Christopher. La llamada duró 27 segundos. Todo lo que pude decirle fue: 'Cariño, estoy bien; estoy tratando de salvar mi vida'. Y colgué”.

También atrapada en la galería superior de la Cámara de Representantes estaba Pramila Jayapal, congresista demócrata por el estado de Washington, que escribió en un comunicado: “Los insurrectos eran terroristas domésticos. Muchos estaban armados y muchos estaban relacionados con grupos nacionalistas blancos. La policía lanzó gas lacrimógeno y tuvimos que arrojarnos al suelo para cubrirnos. Los oficiales de policía del Capitolio bloquearon las puertas con muebles y desenfundaron sus armas”.

La congresista Alexandria Ocasio-Cortéz, quien ocupa un escaño en la Cámara de Representantes por el estado de Nueva York, dijo en una transmisión en vivo la noche previa a la votación que dio inicio al proceso de destitución: “Pensé que iba a morir. Ni siquiera me sentí segura cuando me refugié en una habitación junto a otros congresistas para protegernos de la turba, porque, para ser honesta, también en ese lugar se refugiaban colegas que son partidarios de QAnon y de la supremacía blanca, miembros del Congreso que son defensores de la supremacía blanca, a quienes conozco y quienes yo sentía que podrían revelar mi ubicación o que podrían crear oportunidades para que me hirieran o me secuestraran”.

Ayanna Pressley es la primera congresista afroestadounidense en representación del estado de Massachusetts. Pressley se refugió inicialmente en una habitación segura junto a otras personas, donde estaban todos aglomerados. El martes publicó en Twitter: “Salí de esa 'habitación segura' que supuestamente nos protegía de la turba supremacista blanca tan pronto como me di cuenta de que en esa habitación también se encontraban miembros del Congreso traidores, que son supremacistas blancos y negacionistas de las mascarillas, y que fueron los que incitaron la insurrección en primer lugar”. Y agregó en su publicación: “Estoy furiosa porque muchos de mis colegas están dando positivo por COVID-19”. El esposo de Pressley, que estaba con ella en el Capitolio, también contrajo la enfermedad.

La congresista demócrata Pramila Jayapal también contrajo coronavirus, probablemente por permanecer encerrada durante varias de las horas que duró el asedio en ese mismo cuarto abarrotado junto a congresistas republicanos que no usan mascarilla. En su comunicado, Jayapal manifestó: “Solo horas después de que el presidente Trump incitara a que se lleve a cabo un asalto mortal contra nuestro Congreso, nuestro país y nuestra democracia, muchos republicanos aún se negaban a tomar precauciones mínimas contra la COVID-19 y usar una simple mascarilla en una habitación abarrotada en medio de una pandemia. Esto provocó un evento supercontagiador en medio del ataque terrorista doméstico”. Su esposo, que no estaba en el Capitolio, también dio positivo.

El Dr. Brian Monahan, médico del Congreso, dijo en un correo electrónico cuatro días después del ataque, sobre esa habitación segura: “El tiempo en esa habitación fue de varias horas para algunos y más breve para otros. […] Las personas que allí se resguardaron pueden haber estado expuestas a otras ya contagiadas con la enfermedad”.

La congresista demócrata por el estado de Nueva Jersey Bonnie Watson Coleman, también estaba en la habitación segura y luego dio positivo por COVID-19. Watson Coleman es una afroestadounidense de 75 años que recién acaba de superar un cáncer. Esta semana, en un artículo de opinión en el periódico The Washington Post escribió: “Estoy enojada porque después de ser muy cuidadosa y pasar meses aislada, un solo día caótico provocó probablemente mi contagio. Me enoja que el ataque al Capitolio y mi enfermedad posterior tengan la misma causa: la incapacidad de mis colegas republicanos para aceptar los hechos”. Su caso muestra los riesgos potencialmente letales que los negacionistas de las mascarillas plantean en forma egoísta a quienes los rodean.

La congresista demócrata Rashida Tlaib, quien ocupa un escaño de la Cámara de Representantes en representación de la ciudad de Detroit, no estaba en las instalaciones del Capitolio durante el asalto, ya que acababa de recibir su primera dosis de la vacuna contra la COVID-19 y no se sentía muy bien. Luego de que se implementaran nuevas medidas de seguridad en el Capitolio, la congresista Tlaib publicó en Twitter: “Tuve que pasar por un detector de metales antes de ingresar al hemiciclo de la Cámara de Representantes. Algunos colegas están molestos (adivinen quiénes) por este requisito. Ahora saben cómo se sienten los estudiantes de secundaria de mi distrito. Lo tienen merecido. Ustedes provocaron todo esto”. La presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, ha establecido multas de hasta 10.000 dólares para los congresistas que se nieguen a pasar por los detectores de metales.

Las personas de color en Estados Unidos tienen más probabilidades de morir a causa de la violencia con armas de fuego. También son más propensas a contraer la COVID-19 y, cuando se contagian, tienen más probabilidades de sufrir consecuencias más graves, incluida la muerte. La violenta insurrección de los defensores de la supremacía blanca en el Capitolio del 6 de enero desnudó la cruel realidad del racismo y la desigualdad en Estados Unidos. Asumir esa realidad y luchar contra ella sigue siendo uno de los desafíos más urgentes de nuestro tiempo. La salida de Trump del Despacho Oval es solo el primer paso.


© 2021 Amy Goodman

Traducción al español de la columna original en inglés. Edición: Democracy Now! en español, spanish@democracynow.org

Amy Goodman es la conductora de Democracy Now!, un noticiero internacional que se emite diariamente en más de 800 emisoras de radio y televisión en inglés y en más de 450 en español. Es co-autora del libro “Los que luchan contra el sistema: Héroes ordinarios en tiempos extraordinarios en Estados Unidos”, editado por Le Monde Diplomatique Cono Sur.


Disfraces

Por Sandra Russo
PÁGINA 12 - 16 de enero de 2021

La imagen de Jake Angeli, con su gorro de piel con cuernos, su cara pintada de rojo, azul y blanco, y su torso tatuado, no fue casualmente la más difundida del intento de copamiento del Capitolio por parte de miembros de Qanon, uno de los grupos que alimentó y fogoneó el odio trumpista.

Hubo debate sobre a qué remitían los símbolos elegidos por esos descentrados cuya irrupción violenta provocó cuatro muertos. Este último número, cuatro, es el primer dato a destacar, porque los asaltantes eran blancos supremacistas. Si hubieran sido los negros que Trump estuvo instando a aplastar en todas las protestas que se vinieron desatando en los últimos años, después de cada asesinato a mansalva de ciudadanos negros por parte de la policía, los hubieran matado a todos.

Mucha gente aventuraba si esos supremacistas habían elegido evocar a Daniel Boom, si apelaban a disfraces para ser “neo-originarios”, si tomaban símbolos vikingos para adelantarse incluso a la primera colonización. Entre los disfrazados, posaban también los que llevaban remeras que decían que “6 millones no fue suficiente”: neonazismo explícito.

Roberto Pagani, un historiador italiano que se especializa, en una universidad de Islandia, en los estudios sobre la Edad Media nórdica, publicó esta semana en un sitio especializado en historia, un artículo en el que desmenuza los símbolos dispersos en las imágenes del Capitolio. Cuenta allí que los estudios filológicos germánicos comenzaron a tener auge en el siglo XIX, ya entonces motivados por la búsqueda ideológica en sentido racial: los propios nazis no ubicaron su supremacía aria en el territorio de lo que entonces era Alemania, sino precisamente en Islandia. Alemania era ya un entramado de sucesivas migraciones desde la Edad Media. El ideal lo colocaron en una prehistoria antojadiza pero como era desconocida, pasible de imaginerías: la supremacía blanca tenía su origen en el supremacismo nórdico, especialmente el islandés. Sólo allí existían viejos documentos sobre la mitología pagana germánica.

De allí sacaron el biotipo étnico que propulsaron y que estos nuevos grupos como Quanon retoman: hombres y mujeres altos, de piel transparente y ojos celestes muy claros, resistentes a los climas adversos y ansiosos por más conquistas. Ya entonces esos antecedentes eran viscosos: esos primeros documentos sobre los germánicos habían sido escritos doscientos años después por autores nórdicos convertidos al cristianismo. Pero el rigor histórico nunca fue un obstáculo para los nazis, ni los de antes ni los de ahora.

En esa mitología construida al servicio de una ideología supremacista, se encuentra el casco con cuernos. Muchos de los tatuajes de los Quanon, afirma el historiador, como el símbolo vegvisir y leyendas en alfabeto rúnico, también surgen de ese pasado que no existió tal como lo relatan.

De hecho, señala Pagani, a fines del año pasado la revista Science publicó un trabajo inconveniente para estos nuevos supremacistas que reivindican el medievalismo nórdico: se probó que ni siquiera entonces había ninguna “pureza”, y que los habitantes de las tierras heladas no eran una mayoría rubia, sino una mixtura con muchos habitantes castaños de tez mate.

Volviendo al Capitolio, Angeli volvió luego a ser noticia: se negó a comer nada que no sea vegano. Pura banalidad. Pura comedia. Disfraces. Ese eje es importante.

Las ultraderechas, como los nazis en su momento, no tienen argumentos ni pueden dar los debates para dar a conocer un proyecto político. Son pura antipolítica y lo dicen con sus disfraces. Son antidemocráticos, naturalmente, aunque su líder se sirvió de la política para ayudar a destruir el sistema político más hipócrita del mundo, y generar pseudomilicias armadas. No conciben nada que no implique la eliminación de otros.

Se disfrazan porque el disfraz es el uniforme de estos soldaditos que el plomo no lo llevan puesto sino listo para disparar sobre otros cuerpos. Se disfrazan como algunos que vemos por acá. El disfraz de lo primero que habla es de neoliberalismo, desde un baño de inmersión con patitos, o desde abajo de peinados que laboriosamente son pelucas bizarras.

A ninguno de estos exponentes en todo el mundo les importan tres balines las cosas públicas, aunque quienes los alentaron a juntarse y armarse sí están interesados en quedarse con todo. El líder inspirador de estos mamarrachos los habilitó como fuerza de choque. Los ubicó en un borde desde donde tarde o temprano saldría la violencia, aunque los demócratas pongan caras de asombro.

¿Y Trump, con su jopo de canario y su mujer barbie-florero no era un disfraz de político que se puso un hombre de negocios con otras intenciones? ¿Y Bolsonaro no es él mismo un disfraz de energúmeno que todos podríamos imitar, impostando la voz hasta la disfonía para decir cosas como que los brasileños no sirven para nada? ¿Carrió no es un disfraz de lo que fue ella misma, cuando usaba otros disfraces, como el de la mística de la cruz exagerada? ¿Su republiquita no es un disfraz de la república que ayuda a destruir? ¿Y Macri? ¿No era un disfraz de presidente ése que despreció a destajo a docentes y a alumnos pero ahora pide que se vuelvan ya, en un pico pandémico, las clases presenciales?

La ultraderecha no vendrá nunca a decirnos que tiene pensado copar el poder para alzarse con lo poco que queda, cueste las vidas que cueste. Con la ultraderecha no se puede pensar en debate, diálogo o intercambios armónicos. Su fuerte es el cinismo y su capacidad para atraer hacia su propia arena toda la luz mediática posible. La tienen.

No quieren nada parecido a la razón, porque su lógica es la del disfraz y no tienen idea de cómo contestarle a un argumento. Ahora mismo los vemos escupir sobre vacunas que la enorme mayoría del mundo espera ansiosamente.

Es mentira que descreen de la vacuna rusa o de la china. Puede que sus acólitos lo hagan pero los ideólogos de esas corrientes se podrían una de Corea del Norte si la hubiera porque también saben que la pandemia existe. Lo saben abajo del disfraz. Tampoco creen en lo que dicen. Repiten cualquier cosa que les convenga, sin pruritos por la verdad. Quieren inyectar todo el veneno posible, toda la confusión y el desequilibrio posible, porque es su llave del éxito.

Las ultraderechas apuestan por el disfraz, que es fotogénico. Muy pronto Jake Angeli tendrá un club de fans. Así funciona la sociedad occidental que brotó al calor de la brutalidad neoliberal, como un circo en el que a veces parece que hay payasos, pero se trata de otro circo: casi siempre hay esclavos a los que ellos les sueltan los leones.


Crisis en un país acostumbrado a organizar, patrocinar, dirigir y llevar a cabo golpes de Estado, agresiones e invasiones

Se hunde la Sodoma y Gomorra de la política

Por Pablo Jofré Leal | 08/01/2021 | REBELIÓN

Fuentes: Segundo Paso / Rebelión

A diferencia de lo que dice Joe Biden, lo que hemos visto en el Capitolio expresa exactamente lo que es Estados Unidos. Está en crisis una democracia putrefacta.

Estados Unidos, el país del norte de América, o «Gringolandia», se muestra como aquello de lo que siempre ha tratado de huir: un país bananero. Este miércoles 6 de enero una insurrección de los sectores supremacistas – para nada sorpresivo pues se venía anunciando urbi et orbe – impulsados por republicanos y su líder radical Donald Trump ha conmocionado al país del norte. Esto, el mismo día que se debía ratificar el triunfo del mandatario electo Joe Biden, a la presidencia de Estados Unidos, mediante una certificación que incluso contó con la presencia del vicepresidente Mike Pence, que ha sido catalogado de traidor en las filas republicanas al sostener que constitucionalmente no podía impedir la mencionada certificación.

El faro de «justicia y democracia», como se nos ha vendido Estados Unidos, poco a poco va apagando la luz de este reflector que ya no es capaz de iluminar camino alguno, con la misma intensidad con que una mujer asaltante muere de un disparo en el interior del Capitolio y surgen las voces tratando de dilucidar si fue asesinada, si fue parte de un enfrentamiento, si es el costo que se paga por la defensa de los intereses que mueven a ese país.

En el plano externo, tiemblan sionistas y wahabitas pues su padre putativo está en crisis. Tiemblan los Guaidos y los Duque. Aumentan los tic y gestos poco armónicos de los Piñera y los Moreno en Sudamérica. Su referente político muestra sus grietas. A quién acudir? Y ahora quien podrá defendernos claman los políticos más vociferantes pero también los políticos chapulines (1) de nuestro continente. Pero ojo, el mundo en peligro porque la casta política-militar de este país, sus grupos de presión, suelen «salir hacia adelante» que es hablar de agredir o tratar de calmar las aguas internas sacudiendo las externas.

Hemos sido testigos de la expresión de sorpresa de periodistas, analistas, amantes del estilo de vida estadounidense, aquellos que transmitían desde las entrañas del monstruo con el pecho hinchado de mostrar a la «mayor democracia» el pasado mes de noviembre del año 2020, transmitir lo que está sucediendo ahora, con incredulidad. Y, no se cree porque no se ha analizado en profundidad la podredumbre que corroe las entrañas de esta sociedad o en verdad simplemente se ha banalizado el hecho que su modelo político está afincado sobre pies de barro.

Un periodista de la cadena pro-Partido Demócrata CNN con sede en Chile dice sentirse triste al ver «como no se respetan ninguna de las instituciones por parte de algunos extremistas trumpistas». Indudablemente para esta pléyade de periodistas formados en el formato gringo esto debe ser el acabose, ya la crisis total pues si sucede en Estados Unidos qué podemos esperar para el resto del mundo. Se acaban los referentes y los paradigmas.

Se lamentan los profesionales de la prensa, que la «pobre» Nancy Pelossi, líder demócrata y «feminista» sufra este atropello, en que desconocidos entran en su oficina como congresista violando con ello un sacrosanto lugar ¡¡¡ horror profanos ¡¡¡ Siempre con la superficialidad con lo menos importante. Lloren analistas, yanaconas y otros gringos lovers, periodistas chilenos de canales televisivos y medios radiales destinados a mantener la desinformación y la manipulación a la orden del día. Derramen lágrimas frente a aquellas imágenes que les hace recordar la enorme admiración que sienten por el mayor de los opresores del planeta y justifiquen lo que pasa asignándole la responsabilidad a un mandatario agónico y no a un sistema electoral caduco, una democracia restringida y los poderes y grupos de presión que permiten este malsano vínculo entre política y dinero.

Les recuerdo a cada uno de esos analistas, periodistas, investigadores, que su territorio natural es la patria grande pero los yanaconas suelen olvidarlo. El día martes 5 de enero se instaló la Asamblea Nacional en Venezuela como prueba de tranquilidad y los análisis sobre este hecho democrático estuvieron destinados a seguir desestabilizando el gobierno de Nicolás Maduro. Ninguna palabra a la oposición que cese ya sus ataques desestabilizadores, golpistas y destructivos. Lamentos por la muerte de una de las asaltantes al Capitolio que no recuerdo haber escuchado frente a las decenas de muertes en las protestas en Chile o las muertes diarias contra el pueblo palestino a manos del sionismo, de miles de yemenies a manos de la casa la saud. De miles de sirios, iraquies invadidos, agredidos por bandas militares apoyados por estos mismos «demócratas que » que hoy sufren el asalto de su capitolio. Bien por lamentar el sacrifico de una vida, pero el doble rasero no es aceptable.

El día miércoles 6 de enero del año 2020 Estados Unidos y su capitolio es asaltado por extremistas y sin embargo el lenguaje de estos analistas es tan medido, tan cauteloso que genera mi más profundo desprecio frente a su doble rasero, su hipocresía cuando se trata de uno u otro. No he escuchado a nadie sostener que Trump está incitando claramente un Golpe de Estado, que provoca esta situación llamando a sus partidarios para que interrumpan el proceso de traspaso del poder. Decenas de militares en el interior del Capitolio miles de proud boys (estos chicos orgullosos) en las afueras son la prueba de la suciedad que inunda esta democracia.

Congresistas de Estados Unidos instaron a Mike Pence a invocar la 25° Enmienda de la constitución estadounidense (2) para destituir a Donald Trump. Otros, analistas, líderes de opinión y legisladores han propuesto, que se inicie un juicio político contra el mandatario por incitar a la protesta a los manifestantes que irrumpieron en el Capitolio. “No podemos permitir que permanezca en el cargo”, escribió la parlamentaria Ilhan Omar. Ideas improbables por las tensiones que se podrían genera y que acrecienten la violencia política y social, que es muestra de lo incontrolable que es este todavía mandatario y la inquietud que genera su presencia que se hace eterna.

A diferencia de lo que dice Joe Biden, el presidente electo, lo que hemos visto en el Capitolio expresa exactamente lo que es Estados Unidos. Aquí está en crisis esta democracia putrefacta, que no da el ancho, que no satisface sus propias necesidades de cambios medulares. De mi parte, que se hunda la Sodoma y Gomorra de la política internacional y que se hundan todos aquellos periodistas y analistas impresentables, que avalan esta limpieza de imagen para el partido republicano (gran responsable de esta situación) direccionado los dardos a lo que llaman el TRUMPISMO pero, recuerden que desde las elecciones los republicanos no han tenido una postura clara de defensa de su débil democracia. Trump es el nombre principal pero senadores como Ted Cruz; Ron Johnson, Josh Hawley, Kelly Loeffler y un centenar de congresistas han llamado abiertamente a la insurrección y a desconocer el triunfo demócrata.

CNN trata de imponer una línea de análisis, Atlanta así lo ha definido en conjunto con el partido demócrata que le tiene la mano así a aquellos republicanos que se han distanciado de Trump. La orden es “hay que hablar de trumpistas no de republicanos, hay que salvar a la casta política estadounidense”. El concepto de análisis usando el término de Trumpistas, para salvar a un partido republicano que desde el inicio se alineó con Trump y que con este asalto al capitolio sólo muestra su cara fascista. Sobre todo ahora que los demócratas han empatado en número de senadores.

Crisis en un Estados Unidos acostumbrado a organizar, patrocinar, dirigir y llevar a cabo, permanentemente: Golpes de Estado, agresiones e invasiones, el país del destino manifiesto de los “valores democráticos que el mundo debería asumir” tiene hoy a las hordas bárbaras y supremacistas atacando el símbolo de esa democracia putrefacta. El problema para los demócratas y para aquellos que los apoyan es que el agónico Trump tienen sus fuerzas de apoyo intactas, tiene toda la intención de volver a postular en cuatro años más y desde la vereda de enfrente se dedicará a lanzar morteros, misiles, la artillería pesada para minar un gobierno al cual desconoce.

¿Cuántos morirán al final de la jornada? ¿Cuántos heridos? ¿Cuántas voces se levantarán pidiendo sanciones al gobierno bárbaro y antidemocrático que pretende dar un auto golpe? ¿Cuantas sesiones del Consejo de Seguridad habrá que llevar a cabo? Que se hunda la Sodoma y Gomorra de la política mundial. Necesitamos depurarnos que sufran los efectos de un golpe que sacuda sus cimientos y experimenten en carne propia lo que le han hecho a gran parte del mundo.

Notas:

  1. Chapulin. Referencia a un héroe ficticio de la televisión mexicana representado por un personaje delgado, pequeño, de buen corazón con más ingenuidad que agudeza, que se enfrentaba al mal dotado de un martillo plástico llamado chipote chillón y con la capacidad de reducir su tamaño.
  2. La enmienda 25 fue aprobada por el Congreso como un mecanismo para asegurar la sucesión en el poder tras el asesinato en 1963 del presidente John F. Kennedy. La norma contiene cuatro disposiciones:
  • El vicepresidente se hará cargo del gobierno si el jefe de Estado muere, renuncia o es destituido.
  • Si se produce una vacante en la vicepresidencia, el presidente debe nombrar un reemplazo que debe ser confirmado por una mayoría en ambas cámaras del Congreso: la Cámara de Representantes y el Senado.
  • El presidente puede delegar sus funciones en el vicepresidente, de forma temporal.
  • E vicepresidente y la mayoría de los miembros del gabinete pueden declarar que el presidente no es capaz de «desempeñar las funciones y obligaciones de su cargo», lo que puede llevar a que el mandatario sea sustituido por su número dos.

Artículo publicado originalmente en: www.segundopaso.es


Una crisis de larga gestación

por Atilio Boron
LA HAINE - 07/01/2021


Hechos sin precedentes en la historia del régimen de EEUU, aunque ya Bush cuando estaba perdiendo la elección del 2000 contra Gore amenazó con lo mismo

Lo ocurrido no tiene precedentes en la historia de EEUU. Todo un vetusto y enorme entramado institucional concebido por los padres fundadores para evitar los riesgos de la oclocracia –el temido gobierno del populacho- se derrumbó como un castillo de naipes cuando respondiendo a las incesantes arengas de Donald Trump una turba de trumpistas arrolló a las fuerzas de seguridad y tomó por asalto al Capitolio. El resultado: el Senado tuvo que entrar en receso mientras el vicepresidente Mike Pence era prestamente evacuado por el Servicio Secreto mientras una banda de fascinerosos con ropas de fajina y algunos de ellos armados sentaban sus reales en las salas del Senado y la Cámara de Representantes. El objetivo: impedir que el Congreso certificara la victoria de Joe Biden en la elección presidencial del 3 de noviembre.

La responsabilidad de Trump en estos incidentes es indiscutible. Una parte de los republicanos aportaron lo suyo.Más de cien estaban dispuestos a proponer la anulación de la victoria de Biden, y deben también ser considerados como instigadores del tumulto. Pero sería un error creer que lo ocurrido es responsabilidad exclusiva de Trump y sus secuaces. Este episodio marca la gravedad de la crisis de legitimidad que hace mucho tiempo está carcomiendo al sistema político norteamericano. El ausentismo electoral es un lastre crónico para un sistema que se autoproclama como una democracia cuando no lo es.
Abraham Lincoln la definió como el “gobierno del pueblo, por el pueblo y para el pueblo”. Hoy no sólo intelectuales de izquierda como Noam Chomsky sino hasta académicos del mainstream como Jeffrey Sachs y, antes que él, Sheldon Wolin sostienen en sus intervenciones orales y escritas que el sistema político de EEUU es una plutocracia y no una democracia en la medida en que es el gobierno de los ricos, por los ricos y para los ricos. Esto es lo que explica la quejumbrosa reflexión que hiciera hace unos meses un editorial colectivo del The New York Times al constatar que el 1% más rico acumula más riqueza que el 80% más pobre del país. Es decir, una pseudo-democracia que aplicando las políticas neoliberales decretó las exequias del “sueño americano” y convirtió a ese país en el más desigual del mundo desarrollado. 


En los gravísimos sucesos del miércoles, propios de las “anarquías populistas” que Washington ve –y vitupera- por doquier en los países de la periferia hay una indudable corresponsabilidad de los dos partidos. 

Los exabruptos de Trump y sus criminales políticas, dentro y fuera de EEUU, se nutrieron durante cuatro años de la falta de voluntad de los demócratas para poner fin a las políticas que beneficiaban al 10% más rico (y sobre todo al 1% de los supermillonarios) del país y para hacer siquiera mínimo esfuerzo para democratizar de verdad al sistema político. No es ocioso recordar ante los violentos incidentes de este miércoles que jamás estuvo en la mente de los padres fundadores crear un sistema democrático: la elección indirecta vía colegios electorales, el carácter optativo del voto, el sufragio en día laborable son las rémoras de un sistema que se constituyó como una república pero no como una democracia. 

No es casual que la propia Constitución de EEUU no mencione en un solo lugar la palabra mágica: “democracia”. Y ante una sociedad que ha cambiado tanto como EEUU en los últimos cincuenta años, pasando de ser una sociedad bastante homogénea a una multicultural y desigual, y ante la estolidez de un sistema partidario que no refleja para nada estos cambios la aparición de un demagogo como Trump y su incendiaria retórica podía terminar abriendo las puertas del infierno y soltar a todos los demonios. Eso fue lo que ocurrió ahora. Y esto va para largo y no se solucionará sin reformas sociales, económicas y políticas de fondo, cosa que difícilmente Joe Biden estará dispuesto a impulsar. 

La Haine


Biden por Trump… ¿qué significa?

por Narciso Isa Conde
LA HAINE - 18/11/2020

De Biden se dice con fundamento que es un racista encubierto, acompañado de una vice 'negra' que responde a la línea de Barak Obama

Todavía pendiente de algunas obstrucciones a ser auspiciadas por Donald Trump y los suyos, cuyas magnitudes están por verse, la decadente superpotencia estadounidense está de cara a la posibilidad de un cambio de Administración: Biden-PD por Trump-PR y su nefasta comparsa.

La historia de la mal llamada democracia “americana” -condicionada de mala manera por el bipartidismo y, sobre todo, por el férreo control de las diferentes facciones del capital imperialista- ha evidenciado que las alternancias entre “demócratas” y “republicanos” no implican cambios sustanciales. Más bien se reducen a cambios de rostros en las funciones públicas, estilos variados, envolturas distintas, discursos no coincidentes y énfasis más o menos diferentes.

 La diferenciación -más aparente que real en las cuestiones cardinales- se centra fundamentalmente en poses o iniciativas relativamente particulares, con limitados impactos en temas cruciales como el racismo estructural, la grave situación ambiental a nivel nacional y global, la relación entre guerra y paz, los grados de neoconservadurismo o neoliberalismo, el poder de los monopolios y oligopolios, las migraciones del Sur hacia el Norte, los vínculos con América Latina y el Caribe, y las actitudes respecto a determinados programas económico y sociales, especialmente en materia de seguridad social, salud y educación; agregándose ahora las diferencias sobre la manera de abordar la COVID 19 en relación con la reactivación de la economía, y los impactos en la política tanto del “chauvinismo” seudo-nacionalista como del “globalismo” , ambos imperialistas, asumidos por las dos principales corrientes empresariales en pugna.

LO COMÚN A LAS FACCIONES QUE COMPITEN.

En esas dos opciones político-partidistas, tanto de cara a la situación interna como a la internacional, predomina la variante neoliberal del capitalismo; hegemónica en este periodo de su fase imperialista. Varían tonalidades, pero no la esencia.

-Domina lo conservador, en un caso bien camuflajeado y encubierto; en el otro, descarado y desbocado hacia variantes fundamentalistas; incluido su componente racista, matizado en el caso del Partido Demócrata y del propio Biden, por el rol del voto “latino” y “tercermundista” a su favor; y en el caso del Partido Republicano, por la preeminencia del voto “blanco-supremacista”; siendo común a los dos tipos de gobiernos la continuidad de la cruel represión a cargo de los órganos coercitivos de los Estados y muy especial de una buena parte de sus entidades policiales, más allá de las críticas al racismo que puedan hacerse desde la Casa Blanca.

-Domina el guerrerismo a cargo del Pentágono y de la OTAN, CÍA, agencias de de seguridad, contratación de mercenarios, intereses del complejo militar-industrial-financiero; así como a causa de viejos y nuevos acuerdos bipartidistas, de las determinaciones de los grandes negociantes de la guerra y de las corporaciones mineras, y desde los fuertes intereses geoestratégicos relacionados con la conquista y reconquista de territorio en el contexto de la competencia por el control del planeta y sus riquezas.

-Domina aquello de “América (EE.UU) para los americanos” y de considerar la subregión latino-caribeña como un “patio trasero” apto para el saqueo sin límites, dentro de un mutuo interés de impedir su segunda independencia y la reconquista de la soberanía en cada uno de nuestros países.

Esto así, aunque los demócratas prometan un “trato entre iguales”, o nuevas “alianzas para el progreso” y los republicanos se la pasan recordando la posibilidad de la opción militar; aunque los “ultranacionalistas” a lo Trump y Pompeo no desistan de acciones típicamente imperialistas y los “globalistas” a lo Elon Musk (muchos de ellos “pro-demócratas”) proclamen su determinación de dar golpes de Estado donde lo entiendan necesario para preservar y expandir los intereses de sus corporaciones

CASOS, COSAS Y COMPARACIONES PUNTUALES.

Clinton invadió y bombardeó, al igual que los Bush.

De las fechorías de Johnson, Nixon y Kissinger, ni hablar.

Obama no dejó de deportar en masa a migrantes latino-caribeños, ni de construir jaulas para encerrar a sus hijos e hijas menores de edad. Tampoco de hacer la guerra y practicar el terrorismo de Estado mientras ostentaba el Premio Nobel de la Paz.

¡Ni la policía dejó de matar negros y negras durante su mandato!

Obama esgrimió la “Carta Democrática” de la OEA para intentar desestabilizar y eventualmente invadir a la Venezuela bolivariana y chavista; y si optó por comenzar a normalizar las relaciones con Cuba, algo positivo, fue porque su indudable talento le permitió superar el odio y entender que el cerco había fracasado, y que en caso de invasión gringa, los cohetes cubanos llegan a la Florida.

Los dos partidos y sus gobernantes no dejan de exhibir sus amores con el sionismo y el terrorismo de Estado de Israel.

Todas las Administraciones estadounidenses, ya demócratas, ya republicanas, sostienen y procuran ampliar las cadenas de bases militares en las diferentes regiones del planeta y no precisamente para jugar al Béisbol.

Trump y Biden apoyan el Tratado de Asistencia Recíproca (TIAR) como instrumento para sus eventuales invasiones militares contra países soberanos de la región.

Biden pudo visitar Nuestra América muchas veces más que Trump, pero con sus visitas nada cambió en cuanto la estrategia de dominación de EE.UU diseñada para el continente.

De Biden se dice con fundamento que es un racista encubierto, acompañado de una vice 'negra' que responde a la línea de Barak Obama y que asume con más vigor la condena al racismo.

Trump es un racista sincero, confeso y orgulloso de sus fechorías en ese plano, merecedor de un rechazo mayor.

De todas, por lo que es el neofascismo, que no es simple locura, se explica el alivio nacional y mundial que provoca su derrota, aunque es necesario ir más al fondo para captar el real significado de su desplazamiento por Biden.

Trump es un traficante y estafador de bienes raíces, un gran evasor de impuestos y una expresión, junto a Bolsonaro y otros del mismo Club, de una de las variantes del fascismo de estos tiempos; y de eso no se ruboriza.

Los Clinton eran corruptos y terroristas de Estado encubiertos, que han sido descubiertos.

Diferencia de estilos ético-morales, o más bien amorales.

 Esos antivalores dominan las inconductas de ambas cúpulas políticas norteamericanas y de sus respectivas bases empresariales, solo que la del PD ama las simulaciones porque le dan muy buenos resultados; y el PR y los Trumpistas son fervorosos del descaro y la desfachatez, porque también les resultan sumamente útiles a sus fines políticos. Es cuestión de las características manipulables de sus respectivas bases electorales y sociales. En todo caso: mercadología política-electoral de baja estofa.

Gore, como Biden, se presentaba como un gran ecologista, enemigo a muerte del calentamiento global; mientras las industrias gringas siguieron contaminando y calentando el planeta durante la gestiones del binomio Clinton-Gore.

Obama subordinó y usó a Biden, y ahora Biden subordina y usa a la pupila de Obama, que es más popular y atractiva que Biden, que habla bonito como Obama y representa su opción presidencial del futuro relevo demócrata frente a un Trump, que en caso de ser definitivamente desplazado, queda con posibilidades de optar en las próximas elecciones… Esto, si todo sigue linealmente, a pesar de la gran crisis que afecta esa sociedad, en tanto siga vigente la actual institucionalidad, evidentemente afectada por un proceso progresivo, pero lento, de degradación.

Los y las vetados dentro del partidismo tradicional, que no son pocos movimientos sociales contestatarios y corrientes políticas transformadoras, son aquellos/as que representan cambios reales y profundos. Ellos, ellas, no tienen espacios en esa ruta electoralista viciada, pero si en calles y plazas, y en muchos escenarios extra-institucionales.

Esas fuerzas político-sociales emergentes no caben en los sacos y mochilas electorales del PD y el PR. El imperialismo las bloquea, porque presiente que ellas encarnan un ajuste de cuenta trascendente y una esperanza para el pueblo estadounidense no alienado y la humanidad que aspira a un mundo justo y solidario.

10-11-2020, Santo Domingo, RD
La Haine



URUGUAY

Martín Pereira (FFSP): En Uruguay "la pandemia avanza a pasos agigantados"

Lunes, 11 Enero 2021 19:21 - PORTAL PIT-CNT

Martín Pereira (FFSP): En Uruguay "la pandemia avanza a pasos agigantados"

El presidente de la Federación de Funcionarios de Salud Pública hizo un llamado al sistema político para que "abandonen el barro" y "eleven" el nivel de la discusión sanitaria para encontrar caminos de diálogo y solución a la emergencia sanitaria, en clave de políticas de Estado. Martín Pereira dijo al Portal del PIT-CNT que es imprescindible que tanto el gobierno como la oposición piensen y actúen "en grande" en beneficio de la población en el marco de una situación sanitaria que considera preocupante. En relación a la adquisición de alguna vacuna contra el COVID-19 para el Uruguay, señaló que si bien está al tanto que el MSP está trabajando en la materia, "algunos actores relevantes del gobierno han estado más atentos y preocupados por votar la LUC y el Presupuesto que en abocarse a la negociación de las vacunas" para la población. Asimismo, recordó que el gobierno no contempló en la Ley de Presupuesto fondos para recursos humanos en la salud.  

El presidente de la FFSP y de la Confederación de Organizaciones de Funcionarios del Estado (COFE), aseguró al Portal de la central sindical que "la situación es preocupante" y "si seguimos así, rápidamente se va a saturar el sistema de salud" ya que en Uruguay "la pandemia avanza a pasos agigantados".

Pereira informó que hay aproximadamente unos 300 trabajadores y trabajadoras de la salud que están cursando la enfermedad COVID-19 y una cifra también importante en situación de aislamiento. "El gobierno tiene que tomar cartas en el asunto ante esta situación, de lo contrario, rápidamente puede colapsar el sistema de salud", remarcó. Pereira apuntó que si bien en Montevideo hay mayores posibilidades de respuesta, en el interior del país la situación es más compleja debido -entre otras razones- al multiempleo del personal de la salud. "Si se llega a producir un brote importante en el interior, tanto a nivel de la salud pública como privada, se podrían llegar a saturar los servicios de salud en un departamento entero", advirtió.

El presidente de la FFSP también se refirió al cansancio acumulado y el estrés del personal de la salud que ha estado en la primera línea de contención de la pandemia. "Hay compañeros que han estado en aislamiento en más de una oportunidad, hay mucho cansancio, todo esto agota, cuando un trabajador queda aislado el equipo lo siente, y todo este estrés no se ve en los números, no sale en las estadísticas". En este sentido, Pereira reclamó una urgente solución a los descuentos que se le han realizado al personal de la salud. "Estamos dialogando con el secretario de Presidencia, Álvaro Delgado y el con el presidente de ASSE, Leonardo Cipriani, pero hasta el momento no lo han solucionado. En salarios de 25 mil pesos, perder 5 o 7 mil pesos cada vez que un trabajador de la salud está en aislamiento es mucha plata ".

Política mayor

Consultado sobre la discusión pública por el origen de las vacunas y los posibles planes de vacunación, Pereira dijo que "primero tiene que haber una vacuna, esa es la prioridad; sabemos que el ministerio está trabajando, que  tiene varios borradores, pero Uruguay tiene que tener la vacuna. Sabemos que está previsto que los trabajadores y las trabajadoras de la salud seremos incluidos en la primera etapa de la vacunación, pero el problema es que el gobierno ha estado más atento y preocupado por votar la LUC y el Presupuesto que en abocarse a la negociación de las vacunas". Al respecto, agregó que ya se está vacunando en varios países y que esos gobiernos han priorizado la salud de su población mientras que en Uruguay el gobierno "perdió tiempo" que debió enfocar en lo sanitario y en cambio lo dedicó a impulsar la LUC en plena pandemia. "Creo que hay que sacarle el tema ideológico a la vacuna, que si es rusa o del país que sea. Se debe ponderar la logística de nuestro país para su aplicación y lo demás tiene que quedar fuera de la discusión. Hay una vacuna que requiere una cadena de frío que -conociendo los hospitales de ASSE- va a ser difícil poder contar con una cadena de frío como la que requiere. Pero insisto, que llegue la vacuna que tenga que llegar y que se haga de manera rápida", subrayó.

"Yo creo que se perdió tiempo y también entiendo que Uruguay no es un mercado atractivo para nadie en cuanto a las dosis que podrá adquirir nuestro país. De todos modos, creo que hay que cambiar el enfoque porque esta discusión entre la oposición y el gobierno lo que hace es generar dudas en la gente sobre si la vacunación es necesaria o no. Y en esa discusión política los que perdemos somos los trabajadores porque genera desconfianza  en la vacuna. Nunca discutimos ni preguntamos en nuestro país de dónde venían las vacunas. Creo que hay que sacar la discusión del barro en el que está políticamente hablando y elevarla a otro nivel mayor de política de Estado y que coloque la prioridad en el tratamiento de la pandemia y en la protección de los trabajadores de la salud".

Según su visión, hay responsabilidades compartidas tanto del gobierno como de la oposición política de haber llevado la discusión a nivel del «barro», pero insistió que todos deberían hacer un esfuerzo por reenfocar rápidamente al diálogo en términos sanitarios y en este sentido, aseguró que el gobierno debería escuchar los aportes que voces calificadas de la oposición pueden ofrecer. Pereira cree que "los políticos deberían dar el ejemplo a la población" y mostrar un nuevo posicionamiento que le brinde soluciones al país sin mirar réditos partidarios.

Así no, ministro

Consultado sobre las declaraciones del ministro de Salud Pública, Daniel Salinas, quien en la Comisión de Salud del Senado responsabilizó a las organizaciones sociales por los recientes brotes de coronavirus como consecuencia de marchas y movilizaciones, el presidente de la FFSP dijo que el ministro "entró en un juego" del que hasta ahora "se venía manteniendo al margen" y "por fuera". Pereira destacó el buen relacionamiento y diálogo permanente que ha tenido el ministro con las y los trabajadores de la FFSP y de COFE pero consideró que con estos dichos "infelices", el jerarca "ingresó en ese barro del que hablábamos". De todos modos, aclaró que "para nosotros el relacionamiento sigue siendo muy bueno aunque en este caso puntual, tenemos que denunciar que eso que dijo no se ajusta a la evidencia científica". Asimismo, Pereira recordó que cuando COFE se movilizó hubo un espacio de trabajo en conjunto para garantizar todas las medidas de cuidados sanitarios y eso se cumplió "a rajatabla", con el esfuerzo de recursos humanos y económicos destinados para las movilizaciones. "Todos pudieron ver el estupendo trabajo de nuestras compañeras y compañeros con los chalecos de color naranja que extremaron los cuidados y se ocuparon de cuidarnos y que nos cuidáramos entre todos y todas en cada una de las movilizaciones. Y está más que claro que el movimiento sindical se ha portado de manera extraordinaria con su accionar en cada una de las movilizaciones que realizó en respuesta de la LUC y el Presupuesto. Por eso nos sorprendieron las declaraciones del ministro pero supongo que se debieron a que ingresó en ese otro terreno de la disputa política menor y creo que eso le jugó una mala pasada. Estoy seguro que ya tendremos tiempo de hablar de estas cosas con el ministro",  sentenció.


«No entendemos por qué no se avanza en medidas que son de abrumador sentido común»

El «Boca» Andrade cargó contra el gobierno, con el que «tenemos una diferencia sustantiva a cómo se atiende desde el punto de vista social la pandemia».

Última actualización Ene 16, 2021 LA REPÚBLICA uy


Foto: Gastón Britos / FocoUy

Óscar Andrade no pierde oportunidad para expresar su descontento con el modo en que el gobierno está lidiando con los efectos sociales de la pandemia, que ha castigado a miles de uruguayos.

Como ejemplo, el senador frenteamplista mencionó en conferencia de prensa: «Hace meses que colocamos una iniciativa respecto a que en medio de la circunstancia actual no parece sensato que no se licencie a la población con mayor comorbilidad. Las personas con diabetes, las embarazadas, los trasplantados, están hoy obligados a ir a trabajar, y no se los certifica en términos médicos.

Hay decenas de enfermedades que, una vez que se contrae el virus, se genera una condición de mayor posibilidad de riesgo de vida. Lo presentamos como minuta de comunicación en abril, como proyecto de ley en diciembre, lo discutimos con el ministerio de Trabajo; hasta ahora no hemos recibido ni siquiera una explicación de por qué no se avanza en medidas que son de abrumador sentido común», comentó.

Otra visión

«En segundo lugar, nos parece muy importante que las áreas en el trabajo deben tener un mayor nivel de fiscalización y control, también ampliando la fiscalización social y los controles, que las sanciones deben ser mayores», agregó el frenteamplista.

Todo esto lo lleva a afirmar que la visión del gobierno se parece bien poco a la del Frente Amplio en cuanto al modo de reducir los efectos del golpe social del coronavirus.

«No hay dudas que tenemos una diferencia sustantiva a cómo se atiende desde el punto de vista social la pandemia. Mientras nosotros estamos reclamando que se subsidien los alquileres y se eviten los desalojos, en la Ley de Urgente Consideración se habilitaron los desalojos exprés. Mientras estamos reclamando la necesidad de generar condiciones que protejan los ingresos de los uruguayos, tenemos un ajuste que rebajó el salario a trabajadores y jubilados en medio de la pandemia», dijo.


Cuesta Duarte advierte posible aumento de pobreza y desigualdad

Martes, 15 Diciembre 2020 21:12 - PORTAL PIT-CNT

Cuesta Duarte advierte posible aumento de pobreza y desigualdad

En el marco de un encuentro sobre Empleo, Salario y Actividad Económica. Actualidad y Perspectivas 2021, el Instituto Cuesta Duarte presentó este martes indicadores, datos y análisis sobre el panorama actual y los posibles escenarios futuros.  

La actividad desarrollada en el anfiteatro del PIT-CNT contó con la apertura del director del Instituto Cuesta Duarte, Milton Castellano, la economista Alejandra Picco por el equipo de investigación del Instituto y la economista Gabriela Mordecki del Instituto de Economía de la UdelaR.

De lo considerado durante la presentación y en clave de perspectiva, se desprende que es posible anticipar un incremento de la desigualdad de ingresos salariales así como de la desigualdad de ingresos general. Según advierte el Cuesta Duarte, "sin políticas que  contrarresten", el panorama actual, no solamente habrá un fuerte aumento de la pobreza sino que también aumentará la desigualdad.

"Al igual que en el resto del mundo, en Uruguay la paralización de diversas actividades para frenar el avance de la pandemia tuvo serias consecuencias sobre la actividad económica durante el año 2020. Esto, conjuntamente con la insuficiencia de las medidas adoptadas para paliar la crisis, condujo a un empeoramiento claro de los principales indicadores laborales y sociales. Si bien para 2021 se espera que la actividad económica vuelve a crecer, todavía no se alcanzarían los niveles previos a la pandemia".

Para el ICD, la dinámica del mercado laboral será particularmente difícil; "a los problemas que venía arrastrando desde 2015, se suma el deterioro provocado por la pandemia y la poca disposición de la política económica a aplicar medidas para contrarrestar esta situación. De esta manera, las estimaciones en este plano no son nada alentadoras y aún cuando la actividad pueda irse recuperando, el proceso de mejora en el mercado laboral será mucho más lento, muy desigual y con efectos duraderos. En el análisis del mercado de trabajo es imposible dejar de lado el impacto que el proceso de cambio tecnológico ha tenido en el mismo, que en algunos aspectos se aceleró producto de la pandemia, y que genera fuertes amenazas hacia ciertos tipos de empleos y características de los trabajadores más precarios. A esto se suma que durante la crisis se ha verificado una fuerte reestructura de empresas, afectando particularmente los sectores más empleadores de mano de obra. Además del empeoramiento de los indicadores generales, hay que tener presente la persistencia de problemas estructurales como la calidad del empleo y las brechas existentes, donde a pesar de los avances registrados, todavía se observan importantes rezagos".

En materia de ingresos laborales, "las perspectivas tampoco son alentadoras, y en 2021 se procesaría una nueva caída de los ingresos salariales". Según prosigue el informe, "todo lo anterior, permite anticipar que tanto en 2020 como en 2021 se procesará un retroceso en materia de desigualdad. La caída en los ingresos de los hogares, como resultado de la disminución del empleo y los menores ingresos laborales, sin políticas que lo contrarresten, no solamente provocará un fuerte aumento de la pobreza sino que también desatará procesos de incremento en la desigualdad de ingresos personal y funcional. En este sentido, en los próximos años es esperable una caída de la participación de la masa salarial en el producto en la medida en que la disminución conjunta de empleo y salarios sería superior a la del producto bruto interno. Contrarrestar estos efectos requiere de políticas activas en distintos planos, que según los énfasis de la actual política económica, consideramos que muy difícilmente se desplieguen".


#YoFirmo: Hoy que existe un mañana también

Viernes, 08 Enero 2021 12:17 - PORTAL PIT-CNT

#YoFirmo: Hoy que existe un mañana también

La campaña de recolección de firmas para interponer el recurso de referéndum contra 135 artículos de la LUC viene transitando una primera etapa de despliegue organizativo y militancia barrial a lo largo y ancho en todo el país. Día tras día, se van instalando mesas con papeletas prontas para firmar en plazas, sindicatos o ferias. Por el momento, se han elegido puntos estratégicos de las distintas capitales departamentales pero también hay innumerables puestos callejeros, toldos o gazebos que se pueden ver en esquinas de barrio, boliches, almacenes o casas de familia. 

Son los puntos de contacto directo con la población, donde los militantes sociales, sindicales, estudiantiles o directamente vecinos y vecinas dialogan y explican a sus pares, a la gente del barrio, sobre la iniciativa popular para interponer el recurso de referéndum contra 135 artículos de la Ley 19889, que promulgó el Poder Ejecutivo el día 9 de julio de 2020. ⁣

En este marco, el sindicato de trabajadores y trabajadoras de ANTEL, instaló una mesa en la vereda de la sede sindical en la calle Miguelete. Asimismo, en la propia sede de SUTEL también se puede firmar el recurso durante todo el día. El puesto callejero, está pensado para atender y evacuar las consultas de quienes pasan por allí, así como también a las familias que llegan con sus hijos e hijas que asisten a la Colonia de Vacaciones de SUTEL.

La mesita de la comunicación

En una tarde agobiante de enero, Diego y Agustín charlan con el barrio. Ellos son militantes de SUTEL y la mesita instalada en la calle Miguelete es un punto de encuentro en el que confluyen compañeras  y compañeros de su propio sindicato así como también de otros para coordinar aspectos organizativos y de logística. Dicen que por ahora los que se arriman a firmar son "los convencidos" que ya saben que quieren ir contra la LUC. 

"En esta primera etapa están viniendo esos que no te preguntan nada, solo te dicen «¿dónde firmo?» y listo". Según Diego Ramos, el puesto instalado en la calle lo ven como "una oportunidad" para charlar sobre la situación actual del país "y especialmente el futuro, tenemos la chance de hablar de los temas importantes para la gente, de la educación, del futuro de las empresas públicas, de la lógica represiva de esta ley, de todo eso queremos conversar y ahora podremos hacerlo, porque cuando la LUC se aprobó fue casi sin discusión y sin chance que ni los sindicatos ni la ciudadanía opinara ni manifestara sus puntos de vista".

Diego explicó al Portal del PIT-CNT que está convencido que hay que anular la LUC "porque es antidemocrática, porque pasa por encima de muchos derechos que habíamos conquistado, porque es represora -especialmente con los jóvenes- porque retira la presencia del Estado en los ámbitos donde es fundamental que siga estando y porque es un retroceso brutal". Asimismo, se refirió a la falta de información y la poca o nula difusión de los contenidos de la ley aprobada en el Parlamento en tiempo exprés y durante la pandemia. "Mucha gente no está al tanto de la mayoría de los contenidos y tiene que saber, por ejemplo, que ahora por dormir en un espacio público podes terminar haciendo trabajos comunitarios. Y vale decir que dormir en un espacio público no es una opción de alguien elija, es la consecuencia de una situación dramática".

En la mesita de la calle Miguelete, junto a Diego está Agustín Afonso, otro militante de SUTEL que también sostiene que es importante firmar la iniciativa contra 135 artículos de la LUC porque es una ley "represiva y regresiva". Agustín considera que la LUC "quita derechos adquiridos y busca arrasar con conquistas que se han avanzado en estos últimos años. Estamos hablando de conquistas del movimiento sindical y nosotros entendemos que la LUC va en dirección contraria y pretende que el país y la sociedad retroceda en relación a todas esas conquistas. Por eso decimos que la LUC nos retrasa varios años en términos de lucha, de derechos y conquistas alcanzadas y logradas por los trabajadores".

Las banderas de antes y las de ahora   

En las charlas con vecinas y vecinos, surgen distintas miradas y enfoques. Para Agustín queda claro que esta vez, a diferencia de lo que sucedió en otras instancias de referéndum o plebiscitos, ahora no hay una única gran bandera visible con la que la población se vaya a identificar. "Ahora son muchas, porque esa ley espantosa está llena de artículos horribles que ni suman, ni aportan nada a la gente sino que por el contrario, son directamente regresivos y represivos". Pero en los diálogos callejeros, con tapabocas y distancia prudencial, igualmente se genera el espacio para hablar de la defensa de las empresas públicas, y especialmente, la necesidad de conservarlas como patrimonio de las y los uruguayos. "La LUC ataca a las empresas públicas, las debilita, claramente es una ley que no está pensada en apuntalar y fortalecer las empresas que son de los uruguayos y uruguayas. Podrá ser que no esté visible una única gran bandera como en otras instancias, pero acá se firma para defender las empresas del Estado de manera categórica. Esta lucha es en defensa frontal y decidida de las empresas públicas", remarcó.

Para Agustín, los 135 artículos que se pretende derogar afectan en mayor o menor medida a la población. "Algunos afectan a toda la sociedad, como claramente es el caso de las empresas públicas o los artículos que refieren a la educación, a los derechos sindicales y la modalidad represiva que impone esta ley. Otros atacan derechos de algunos colectivos, pero en términos generales, en mayor o menor medida, estos 135 artículos nos afectan a toda la población. Y eso lo tiene que saber la ciudadanía, por ello estamos acá, charlando, intercambiando, dialogando con la gente. Con los convencidos, los que vienen ya decididos a firmar y los que tienen dudas, los que consultan, preguntan y colocan sus propias interrogantes sobre la LUC, antes de firmar".

La playa puede esperar

Mientras el sol caía a pleno con sus casi 30 impiadosos grados sobre el asfalto montevideano y el cielo de un solo color no avizoraba ni rastros de nube alguna, Diego y Agustín charlaban de pie, ubicados bajo el sol, al costado de una mesita con papeletas, lapiceras y almohadillas, con vecinas y vecinos que querían hablar sobre la LUC y sobre el país. Los autos y camiones saludaban con bocinas y puños en alto y hasta retumbó un "arriba los que luchan" desde la ventanilla de una camioneta de carga que pasó y prometió volver a firmar allí.  Cada tanto llega algún auto a buscar papeletas. No hay tiempo, no hay hora, no hay reloj. Y acá en esta cuadra viven mil. Siempre en algún punto de la ciudad se necesitan papeletas y allá saldrán cajas en  autos de militantes o simples vecinos con cientos de hojas que se llenarán de firmas y huellas digitales y de satisfacción por el deber cumplido.  

En Montevideo, a las 14 horas de cualquier día de enero, el calor lo invade todo. Este jueves parecía un poco más que siempre. Tal vez porque el viento no daba señales de nada. Día de playa. Absolutamente estival. Día de arena, mar y gaviotas. Sin embargo, Diego y Agustín, como tantos militantes sociales y sindicales, optaron por dedicar su tiempo a recolectar firmas. Diego ya comenzó su licencia reglamentaria. Tiempo de descansar luego de un año duro. Sin embargo, cambió playa por papeletas y firmas. A pura felicidad y compromiso militante. Tal como lo explica Agustín, ellos sienten y están convencidos que están "en el lugar correcto", "en el camino correcto" y "luchando como nos enseña la historia del movimiento sindical" y como "nos gusta a nosotros, esta es una elección que asumimos convencidos de lo que estamos haciendo y del lugar en el que estamos ahora mismo aquí parados, en plena calle, juntando firmas y charlando con las vecinas y vecinos". Agustín destacó especialmente la actitud de su compañero Diego que, en lugar de estar en la playa o disfrutando una siesta o sobremesa familiar, decidió concurrir a la mesa instalada en la puerta de SUTEL.

Tanto Diego como Agustín consideran que esta primera etapa de la campaña implica el contacto directo con mucha gente "convencida" que directamente concurre a firmar pero que en febrero, cuando retorne una importante cantidad de veraneantes que partieron hacia el este o el interior, comenzará una etapa "más intensa y masiva" de la campaña de recolección de firmas.

Para los dos militantes de SUTEL y del PIT-CNT, no hay dos lecturas posibles. "Se llega, estamos confiados que sí se llega a la cantidad necesaria de firmas y vamos a trabajar hasta el último momento, hasta el último día, hasta la última firma para llegar. Iremos a las ferias, a las plazas, a los barrios, a las inmediaciones del Antel Arena, iremos a cada rincón, que nadie lo dude que vamos a dejar el alma, vamos a dejarlo todo para llegar a las firmas".

 

Caras y Caretas

Nuevo paro general de trabajadores del dulce (Onodra)

La Confederación de Sindicatos Industriales y por su intermedio la Organización Nacional de Obreros del Dulce y Ramas Afines (Onodra) ha hecho llegar a Caras y caretas portal información actualizada sobre el conflicto que se mantiene en el sector con la Cámara de Alimentos.

Nuevo paro general de trabajadores del dulce (Onodra)
Por Rolando Arbesun 29 diciembre, 2020 - CARAS Y CARETAS

La Confederación de Sindicatos Industriales y por su intermedio la Organización Nacional de Obreros del Dulce y Ramas Afines (Onodra) ha hecho llegar a Caras y caretas portal información actualizada sobre el conflicto que se mantiene en el sector con la Cámara de Alimentos.

Como ya hemos informado en otras ocasiones el conflicto afecta a varias empresas del sector y el eje del mismo es la discusión y negociación que llevan adelante los trabajadores para evitar la pérdida de beneficios en algunas empresas del sector, que bajo el argumento de “reestructuras”, pretenden desandar el camino de reconocimientos de beneficios de los trabajadores.

La intransigencia en este sentido, por parte de las empresas, vienen siendo denunciadas desde hace varios meses por los trabajadores y su organización gremial.

Desde la dirección del gremio se nos informa que, ante esta situación crítica por la que atraviesan, se han decidido acciones sindicales de respuesta.

El próximo día miércoles 30 de diciembre, a partir de las 22 horas, se estará realizando un paro general de 24 horas, que culminaría, el jueves 31 a las 22 horas.

“Dicha medida de lucha”, recalcan, “es en reclamo de varios puntos que no han sido atendidos por parte de varias patronales ni por el ministerio de Trabajo” y es una forma de expresar el apoyo y solidaridad con los comités de bases de varias empresas que no otorgaron la extensión del beneficio de reducción de jornada, y en repudio ante la negativa a conceder a las y los trabajadores otro beneficio, de días «especiales» libres pagos que estaban establecidos en convenios colectivos anteriores”.

Desde la Confederación de Sindicatos Industriales, por su parte, se reafirma la solidaridad y el apoyo a estas reivindicaciones exigidas por los trabajadores del dulce.


Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos

Ninguna excusa para la represión policial

02/11/2020 familiares

Durante este fin de semana, la policía desarrolló varios operativos represivos absolutamente desmedidos y de gravedad:

⁃ El viernes de noche un operativo con más de 5 patrulleros y 20 policías armados con escopetas desalojaron el Bar Tundra en Montevideo

⁃ El domingo a la noche en la Plaza Seregni en un fuerte operativo policial con motos, escudos, balas de goma y palazos. Hubo varias personas golpeadas y 12 detenidas (que fueron liberadas en la mañana del lunes).

⁃ El domingo a la noche en el Casino del Parque Rodó, luego de que terminara una cuerda de tambores, un grupo de choque de la Republicana con escudos y escopetas avanzó por Salterain.

⁃ El domingo a la tarde en El Cuadrado de la Rambla, Plaza de los Bomberos y Plaza Varela fueron desalojados con policías.

⁃ Hubo situaciones similares el domingo en San Carlos y Punta del Diablo, y una fuerte represión en Juan Lacaze el sábado.

El Ministerio del Interior está desplegando violentos operativos policiales para desarmar reuniones y demás actividades al aire libre, sin mediar palabra, desplegando y usando la fuerza desmedidamente.

Desde los colectivos abajo firmantes queremos expresar nuestro mayor repudio a estas acciones y los despliegues represivos.

Ni las amenazas, ni los palos, ni las balas de goma, ni las detenciones, son una medida sanitaria.

Nos declaramos en alerta y no vamos a pasar por alto ninguna acción violenta de las fuerzas de seguridad porque NO HAY EXCUSAS para la represión.

Colectivo Catalejo, Pedal Uy, Rebelarte, Madres y Familiares de Detenidos Desaparecidos, Reactiva, SERPAJ, Articulación No a la Reforma, Entre, Cotidiano Mujer, Casa Bertolt Brecht, Intersocial Feminista, Intersocial Cultural, Sociedad Uruguaya de Actores, NITEP, SolidaridadUY, Grupo por la humanización del parto y nacimiento, Jóvenes por la Memoria, Red de Ollas al Sur, PIT CNT.

#NoALaRepresiónUruguay

#NoHayExcusas

#EstamosEnAlerta


Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos

Documentación internacional

– Uruguay :La lucha por Verdad y Justicia en la Encrucijada (Comisión Internacional de Juristas)  pdf
– ONU Resolución 2005/35 sobre tratamiento de víctimas  pdf
– Informe Joinet impunidad (2/10/97) pdf
– Informe Theo van Boven (2/7/93) pdf
– Convención interamericana sobre desaparición forzada de personas (9/6/94) pdf
– ONU Conjunto de principios actualizado para la protección y la promoción de los derechos humanos mediante la lucha contra la impunidad (8/2/05) pdf
– Acuerdo de la OEA sobre desaparición forzada (8/6/10) pdf


La economía de a pie.

CUENTAS Y CUENTOS NACIONALES.

El Banco Central del Uruguay dio a conocer las cifras de evolución del PBI, correspondientes al tercer trimestre de 2020. Incluyendo una nueva base de cálculo. Los precios de 2016, sustituyen a los de 2015 como valores constantes de referenciai y se cambian algunas definiciones y formas de registro.

Las cifras del país continúan oscurecidas por el rol de las zonas francas, jurídicamente internas, pero cuyos ingresos se derraman generalmente hacia el exterior, además de estar exoneradas de la casi totalidad de los tributos. Desde el sistema de registro, resulta díficil discriminar su magnitud.

Los datos globales, del lapso julio-setiembre, exhiben un descenso de 5.9% respecto al mismo período de 2019 y acumulan una caída similar para los primeros nueve meses del año en relación al precedente. El descenso esperado para todo el 2020 va a oscilar entre el 5 y 6%.ii

Si bien una cuota del retroceso se puede atribuir al corona virus y sus secuelas, parece innegable que no es el único factor determinante. El gobierno uruguayo priorizó actividades económica, como las referidas a la producción primaria, o la construcción para UPM, que recomenzaron practicamente de inmediato. Las limitaciones a la movilidad fueron relativamente breves.

La crisis precedió a la pandemia, aunque esta la haya profundizado. Desde 2016 los valores permanecieron prácticamente estancados. La anemia de los sectores productivos se arrastra desde hace varios años. Y el PBI se contrajo en el último trimestre de 2019 y el primero de 2020.

La apuesta al ingreso indiscriminado de grandes capitales del exterior, zonas francas, resignaciones fiscales, subsidios de diversa índole, ha ido agotando su eficacia en términos de crecimiento económico.

Monocultivos primarios, impunidad financiera, han conducido al país a una situación de fragilidad.Y la respuesta de la conducción multicolor es la insistencia e incluso profundización de los mismos caminos.

El turismo receptivo que ha sido otro de los motores del incremento del producto en los últimos treinta años, depende casi en su totalidad de visitantes regionales. Su evolución histórica ha sido muy sensible al entorno y a las paridades monetarias con nuestro vecinos.

La zafra, tiene sus momentos de “pico” en el primer trimestre del año cuando se registran los mayores ingresos. Desde allí derrama su influencia sobre servicios conexos y construcción.

En los finales de 2020 y comienzos del 2021, está siendo directamente afectado por la pandemia y sus efectos sobre la movilidad de las personas.

En síntesis, los motores del crecimiento de la economía uruguaya durante los primeros años del siglo 21, han ido perdiendo vigor.

El cuento neoliberal, emitido desde la conducción económica multicolor, ofrece promesas de crecimiento, mientras promueve transferencia de ingresos desde los trabajadores al capital. La peor de las recetas, contra el pueblo. Más desempleo, menos salario real, más deuda y difícilmente impulse crecimiento futuro sólido del PBI.

GOTITAS DE ECONOMIA.

  • Entre enero y noviembre del 2020 y noviembre, los salarios nominales ajustaron en promedio 7.56% según cifras del INE. El IPC hasta para la misma institución oficial creció en un entorno de 10%.
  • Aumentos de tarifas. Agua potable, energía eléctrica, combustibles, adicionan desde el primero de enero, aproximadamente un nuevo 6% sobre los aumentos del 2020. Los ajustes salariales se ubican en rangos cercanos al 3%. Queda muy claro que los trabajadores pagan los costos de la crisis.
  • UPM y Montes del Plata concentran el 80% de las exportaciones de productos derivados de la forestación en Uruguayiii. Además cada uno de estos grupos posee aproximdamente 250.000 hectáreas de las tierras con monocultivos de eucaliptus. Seis grandes grupos extranjeros ocupan entre el 70% y 80% de las tierras utilizadas en plantaciones del rubro, incluyendo fondos de pensiones, fondos de inversión con raíces en el sistema financieroiv.
  • Tasas crecientes de desocupación se reiteran en Brasil. Los datos oficiales de noviembre difundidos por el IBGE la ubican en 14.2%.
  • El gobierno de Estados Unidos en represalia por subsidios de la Unión europea a la constructora de aviones Airbus, cuestionados por Boeing, anunció aumentos de aranceles contra vinos alemanes y franceses. Los neoliberales del sur, reproducen manuales que trabajan con el supuesto de mercados en competencia perfecta y libre comercio. ¿Creerán los versos?

iSe utilizan valores de un año base, para poder comparar años con precios cambiantes. De todas maneras la estructura de precios del año base incide sobre la contabilización de la producción, en los años subsiguientes. En este caso, ya sea con los valores del 2005 o los de 2016, el estancamiento de los sectores productivos es notorio.

iiConfundir el rebote del PBI del tercer trimestre en relación al segundo con el final de la recesión es de una pobreza conceptual alarmante. La comparación de datos con el lapso de confinamiento debido a la pandemia. muestra la debilidad de algunas definiciones tecnocráticas, como la que pretende ver aumentos o disminuciones de manera independiente de los puntos de comparación, de la estructura, sin contexto, ni análisis cualitativos.

iiiDatos de Uruguay 21.

ivAmestil Diana y Costabel Luciano. Uruguay Extranjerización de las cadenas agrarias.Publicado en semanario Brecha diciembre 2020.