Naomi Klein / Autora de ‘La doctrina del shock’
Naomi Klein: “Las élites aprovechan las crisis para aprobar políticas que profundicen aún más la desigualdad”
Marie Solis (Vice / Sin Permiso) 26/03/2020
Naomi Klein, en Berkeley en 2014.
Moizsyed
Moizsyed
El coronavirus es oficialmente una pandemia mundial y hasta ahora ha
infectado diez veces más personas que el SARS de 2003. En EE.UU.,
escuelas, universidades, museos y teatros, cierran sus puertas; y
pronto, ciudades enteras harán lo mismo. Los expertos advierten de que
algunas personas, sospechosas de estar infectadas por el virus,
prosiguen su rutina cotidiana. Porque su empleo no les permite bajas
remuneradas dadas las deficiencias del sistema privatizado de salud
norteamericano.
La mayoría de nosotros [NT.: ciudadanos norteamericanos] no sabe qué hacer ni a quién escuchar. El presidente Donald Trump ha rechazado las recomendaciones de los centros de control y prevención de enfermedades; y estos mensajes contradictorios han reducido nuestro margen de maniobra para atenuar los daños causados por este virus extremadamente contagioso.
Son las condiciones perfectas para que los gobiernos y la élite mundial desplieguen programas políticos, que, de otra forma, encontrarían gran oposición. Esta cadena de acontecimientos no es exclusiva de la crisis creada por el coronavirus; es el proyecto que los políticos y los gobiernos persiguen desde hace décadas, conocido con el nombre de “doctrina del shock”, término inventado por la activista Naomi Klein en un libro del mismo título de 2007.
La historia es una crónica de “shocks”: las guerras, las catástrofes naturales y las crisis económicas, y sus consecuencias. Estas consecuencias se caracterizan por el “capitalismo catástrofe”: “soluciones” calculadas y de libre mercado para las crisis que estallan y exacerban las desigualdades existentes.
Según Klein, asistimos ya a un capitalismo catastrófico en el terreno nacional; para responder al coronavirus, Trump ha propuesto un plan de estímulo de 700.000 millones de dólares que incluye reducción de las cargas sociales (que devastarán la seguridad social) y proporcionará ayuda a las industrias faltas de oportunidades de negocio causadas por la pandemia: “No lo hacen porque crean que es el medio más eficaz para paliar el sufrimiento causado por la pandemia; formulan tales ideas porque ven una oportunidad para desplegarlas”, ha declarado Klein.
VICE ha preguntado a Klein sobre la forma en la que el “shock” del coronavirus está llevando a la cadena de acontecimientos que describió hace ya más de diez años en La doctrina del shock.
Empecemos por lo esencial. ¿Qué es el capitalismo de catástrofe? ¿Cuál es su relación con la “doctrina del shock”?
La forma en que defino el ‘capitalismo catástrofe’ es muy simple: describe cómo las industrias privadas emergen para beneficiarse directamente de las crisis a gran escala. La especulación sobre las catástrofes y la guerra no es un concepto nuevo, pero se intensificó claramente con la administración Bush a partir del 11 de septiembre, cuando el gobierno declaró este tipo de crisis de seguridad sin plazo, y simultáneamente la privatizó y externalizó; esto incluyó la privatización del Estado de seguridad nacional, así como la invasión y ocupación (privatizada) de Irak y Afganistán.
La “doctrina del shock” es la estrategia política que consiste en emplear las crisis a gran escala para hacer avanzar políticas que profundicen sistemáticamente las desigualdades, enriqueciendo a las élites y debilitando a los demás. En tiempos de crisis, la gente tiende a concentrarse en las urgencias cotidianas para sobrevivir como sea y tiende a contar sobre todo con los que están el poder. En épocas de crisis, desviamos un poco la mirada, lejos del juego real.
¿De dónde viene esta estrategia política? ¿Cómo trazar su historia en la política norteamericana?
La estrategia de la doctrina del shock fue una respuesta de Milton Friedman al programa del New Deal. Este economista neoliberal creía que todo estaba equivocado en el New Deal: para responder a la Gran Depresión y al Dust Bowl [N.del.T: Tormenta de polvo] surgió un gobierno mucho más activo en el país, que se propuso resolver directamente la crisis económica de la época creando empleos públicos y ofreciendo ayudas directas.
Si usted es un economista neoliberal, comprenderá que cuando los mercados quiebran hay preparado un cambio progresivo mucho más orgánico que el tipo de políticas de desregulación que favorecen a las grandes empresas. La doctrina del shock se desarrolló como un medio de evitar que las crisis cedan el lugar a momentos orgánicos en los que surjan políticas progresistas. Las élites políticas y económicas entienden que los momentos de crisis son la ocasión para hacer avanzar su lista de deseos de políticas impopulares que polarizan aún más la riqueza, en este país y en todo el mundo.
Actualmente estamos confrontados con múltiples crisis: una pandemia, falta de infraestructuras para resolverla y hundimiento de la bolsa. ¿Podría explicarnos cómo cada uno de estos elementos se inscribe en el esquema que ha descrito en la doctrina del shock?
El shock en realidad es el mismo virus. Se le ha tratado de manera que maximice la confusión y minimice la protección. No creo que sea una conspiración; es justo la forma en que el Gobierno estadounidense y Trump han gestionado, horriblemente mal, esta crisis. Hasta ahora Trump ha tratado esta situación, no como una crisis de salud pública, sino como una crisis de percepción y un problema potencial para su reelección.
¿Cuándo hemos visto esto antes?
En La doctrina del shock hablo de lo que pasó después del huracán Katrina. Grupos de expertos de Washington como la Heritage Foundation se reunieron creando una lista de soluciones “pro libre mercado” para el Katrina. Podemos estar seguros de que ahora se hará el mismo tipo de reuniones. De hecho, la persona que presidió el grupo Katrina fue Mike Pence [N. del T.: la persona que dirige ahora la gestión del coronavirus]. En 2008, ese movimiento se tradujo en salvar a los bancos, cuando los países les entregaron cheques en blanco, que finalmente se elevaron a varios billones de dólares; pero el coste real de esta situación tomó la forma de amplios programas de austeridad económica (reducciones ulteriores de servicios sociales). Así que no se trata tan solo de lo que pase ahora, sino también de la forma en que lo pagaremos en el futuro, cuando se presente la factura de todo lo que se debe.
Si nuestros gobernantes y la élite mundial van a beneficiarse de esta crisis para sus propios fines, ¿qué puede hacer la gente para apoyarse mutuamente?
“Voy a cuidar de mí y de los míos, podemos adquirir la mejor póliza de seguro privado de enfermedad, y si usted no la tiene, probablemente es su culpa, no es mi problema”. He aquí lo que una economía de vencedor mete en nuestros cerebros. Lo que revela un momento de crisis como el actual es nuestra interrelación de unos con otros. Comprobamos en tiempo real que estamos mucho más interconectados de lo que nuestro brutal sistema económico nos permite creer.
Podemos pensar que estaremos seguros si obtenemos buenos cuidados médicos, pero si la persona que prepara o suministra nuestros alimentos, o que envuelve las cajas, no tiene acceso a cuidados médicos y no puede permitirse los análisis, y aún menos quedarse en casa porque no tiene prestación por enfermedad, no estaremos seguros. Si no nos cuidamos unos a otros, ninguno estará seguro. Estamos atrapados.
Las diferentes formas de organizar la sociedad favorecen o refuerzan diferentes partes de nosotros mismos. Si está en un sistema que, como sabe, no cuida de la gente, y no distribuye los recursos de manera justa, nuestro impulso por la acumulación estará en alerta. Piense esto, y reflexione. En vez de empecinarse en pensar en cómo pueden cuidarse a sí mismos y a su familia, podemos cambiar y reflexionar sobre la forma de compartir con nuestros vecinos, y ayudar a las personas más vulnerables.
––––––––
Este artículo se publicó en Sin Permiso traducido de ZinTV
Traducción de Ramón Sánchez Tabarés.
Autor: Marie Solis (Vice / Sin Permiso)
La mayoría de nosotros [NT.: ciudadanos norteamericanos] no sabe qué hacer ni a quién escuchar. El presidente Donald Trump ha rechazado las recomendaciones de los centros de control y prevención de enfermedades; y estos mensajes contradictorios han reducido nuestro margen de maniobra para atenuar los daños causados por este virus extremadamente contagioso.
Son las condiciones perfectas para que los gobiernos y la élite mundial desplieguen programas políticos, que, de otra forma, encontrarían gran oposición. Esta cadena de acontecimientos no es exclusiva de la crisis creada por el coronavirus; es el proyecto que los políticos y los gobiernos persiguen desde hace décadas, conocido con el nombre de “doctrina del shock”, término inventado por la activista Naomi Klein en un libro del mismo título de 2007.
La historia es una crónica de “shocks”: las guerras, las catástrofes naturales y las crisis económicas, y sus consecuencias. Estas consecuencias se caracterizan por el “capitalismo catástrofe”: “soluciones” calculadas y de libre mercado para las crisis que estallan y exacerban las desigualdades existentes.
Según Klein, asistimos ya a un capitalismo catastrófico en el terreno nacional; para responder al coronavirus, Trump ha propuesto un plan de estímulo de 700.000 millones de dólares que incluye reducción de las cargas sociales (que devastarán la seguridad social) y proporcionará ayuda a las industrias faltas de oportunidades de negocio causadas por la pandemia: “No lo hacen porque crean que es el medio más eficaz para paliar el sufrimiento causado por la pandemia; formulan tales ideas porque ven una oportunidad para desplegarlas”, ha declarado Klein.
VICE ha preguntado a Klein sobre la forma en la que el “shock” del coronavirus está llevando a la cadena de acontecimientos que describió hace ya más de diez años en La doctrina del shock.
Empecemos por lo esencial. ¿Qué es el capitalismo de catástrofe? ¿Cuál es su relación con la “doctrina del shock”?
La forma en que defino el ‘capitalismo catástrofe’ es muy simple: describe cómo las industrias privadas emergen para beneficiarse directamente de las crisis a gran escala. La especulación sobre las catástrofes y la guerra no es un concepto nuevo, pero se intensificó claramente con la administración Bush a partir del 11 de septiembre, cuando el gobierno declaró este tipo de crisis de seguridad sin plazo, y simultáneamente la privatizó y externalizó; esto incluyó la privatización del Estado de seguridad nacional, así como la invasión y ocupación (privatizada) de Irak y Afganistán.
La “doctrina del shock” es la estrategia política que consiste en emplear las crisis a gran escala para hacer avanzar políticas que profundicen sistemáticamente las desigualdades, enriqueciendo a las élites y debilitando a los demás. En tiempos de crisis, la gente tiende a concentrarse en las urgencias cotidianas para sobrevivir como sea y tiende a contar sobre todo con los que están el poder. En épocas de crisis, desviamos un poco la mirada, lejos del juego real.
¿De dónde viene esta estrategia política? ¿Cómo trazar su historia en la política norteamericana?
La estrategia de la doctrina del shock fue una respuesta de Milton Friedman al programa del New Deal. Este economista neoliberal creía que todo estaba equivocado en el New Deal: para responder a la Gran Depresión y al Dust Bowl [N.del.T: Tormenta de polvo] surgió un gobierno mucho más activo en el país, que se propuso resolver directamente la crisis económica de la época creando empleos públicos y ofreciendo ayudas directas.
Si usted es un economista neoliberal, comprenderá que cuando los mercados quiebran hay preparado un cambio progresivo mucho más orgánico que el tipo de políticas de desregulación que favorecen a las grandes empresas. La doctrina del shock se desarrolló como un medio de evitar que las crisis cedan el lugar a momentos orgánicos en los que surjan políticas progresistas. Las élites políticas y económicas entienden que los momentos de crisis son la ocasión para hacer avanzar su lista de deseos de políticas impopulares que polarizan aún más la riqueza, en este país y en todo el mundo.
Actualmente estamos confrontados con múltiples crisis: una pandemia, falta de infraestructuras para resolverla y hundimiento de la bolsa. ¿Podría explicarnos cómo cada uno de estos elementos se inscribe en el esquema que ha descrito en la doctrina del shock?
El shock en realidad es el mismo virus. Se le ha tratado de manera que maximice la confusión y minimice la protección. No creo que sea una conspiración; es justo la forma en que el Gobierno estadounidense y Trump han gestionado, horriblemente mal, esta crisis. Hasta ahora Trump ha tratado esta situación, no como una crisis de salud pública, sino como una crisis de percepción y un problema potencial para su reelección.
Lo que revela esta crisis es nuestra interrelación. Comprobamos que estamos mucho más interconectados de lo que nuestro brutal sistema económico nos permite creerEs el peor de los escenarios, máxime si se tiene en cuenta el hecho de que Estados Unidos no dispone de un programa nacional de salud y que la protección de la que se benefician los trabajadores es muy mala: por ejemplo, la ley no establece prestaciones por enfermedad. Esta combinación de fuerzas ha provocado un choque máximo. Será explotado para salvar industrias que están en el núcleo de las crisis más extremas a las que hemos de enfrentarnos, como la climática: la industria aérea, la petrolera y gasística, la de los cruceros. Quieren apuntalar todo esto.
¿Cuándo hemos visto esto antes?
En La doctrina del shock hablo de lo que pasó después del huracán Katrina. Grupos de expertos de Washington como la Heritage Foundation se reunieron creando una lista de soluciones “pro libre mercado” para el Katrina. Podemos estar seguros de que ahora se hará el mismo tipo de reuniones. De hecho, la persona que presidió el grupo Katrina fue Mike Pence [N. del T.: la persona que dirige ahora la gestión del coronavirus]. En 2008, ese movimiento se tradujo en salvar a los bancos, cuando los países les entregaron cheques en blanco, que finalmente se elevaron a varios billones de dólares; pero el coste real de esta situación tomó la forma de amplios programas de austeridad económica (reducciones ulteriores de servicios sociales). Así que no se trata tan solo de lo que pase ahora, sino también de la forma en que lo pagaremos en el futuro, cuando se presente la factura de todo lo que se debe.
Si nuestros gobernantes y la élite mundial van a beneficiarse de esta crisis para sus propios fines, ¿qué puede hacer la gente para apoyarse mutuamente?
“Voy a cuidar de mí y de los míos, podemos adquirir la mejor póliza de seguro privado de enfermedad, y si usted no la tiene, probablemente es su culpa, no es mi problema”. He aquí lo que una economía de vencedor mete en nuestros cerebros. Lo que revela un momento de crisis como el actual es nuestra interrelación de unos con otros. Comprobamos en tiempo real que estamos mucho más interconectados de lo que nuestro brutal sistema económico nos permite creer.
Podemos pensar que estaremos seguros si obtenemos buenos cuidados médicos, pero si la persona que prepara o suministra nuestros alimentos, o que envuelve las cajas, no tiene acceso a cuidados médicos y no puede permitirse los análisis, y aún menos quedarse en casa porque no tiene prestación por enfermedad, no estaremos seguros. Si no nos cuidamos unos a otros, ninguno estará seguro. Estamos atrapados.
Las diferentes formas de organizar la sociedad favorecen o refuerzan diferentes partes de nosotros mismos. Si está en un sistema que, como sabe, no cuida de la gente, y no distribuye los recursos de manera justa, nuestro impulso por la acumulación estará en alerta. Piense esto, y reflexione. En vez de empecinarse en pensar en cómo pueden cuidarse a sí mismos y a su familia, podemos cambiar y reflexionar sobre la forma de compartir con nuestros vecinos, y ayudar a las personas más vulnerables.
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Este artículo se publicó en Sin Permiso traducido de ZinTV
Traducción de Ramón Sánchez Tabarés.
The Washington Post: El peor presidente estadounidense de todos los tiempos
Por:
Max Boot
10 abril 2020
| CUBADEBATE
El
presidente de Estados Unidos, Donald Trump, en un conferencia en la
Casa Blanca el 8 de abril de 2020. Foto: Chris
Kleponis/Polaris/Bloomberg
Hasta ahora, había sido reacio a etiquetar a Donald Trump
como el peor presidente en la historia de Estados Unidos. Como
historiador, sé cuán importante es permitir el paso del tiempo para
obtener un sentido de perspectiva. Algunos presidentes que les
parecieron espantosos a sus contemporáneos (Harry S. Truman) o
simplemente mediocres (Dwight D. Eisenhower y George H.W. Bush), lucen
mucho mejor en retrospectiva. Otros, como Thomas Jefferson y Woodrow
Wilson, ya no se ven tan bien como solían hacerlo.Ya había escrito, el 12 de marzo, que Trump es el peor presidente de los tiempos modernos, pero no de todos los tiempos. Eso dejó abierta la posibilidad de que James Buchanan, Andrew Johnson, Franklin Pierce, Warren Harding o algún otro don nadie, pudiera ser juzgado con mayor severidad. Pero en el último mes, ya hemos visto lo suficiente como para eliminar la clasificación “de los tiempos modernos”. Con su catastrófica gestión ante el coronavirus, Trump ya es el peor presidente en la historia de Estados Unidos.
Su único gran competidor por ese dudoso honor sigue siendo Buchanan, cuya indecisión contribuyó a que termináramos en la Guerra de Secesión, el conflicto más letal en la historia de Estados Unidos. Buchanan podría seguir siendo el perdedor más grande. Sin embargo, hay buenas razones para creer que la Guerra Civil se hubiera desatado de cualquier manera. En cambio, no hubo nada inevitable acerca de la magnitud del desastre que enfrentamos actualmente.
La situación es tan crítica que es difícil aceptarla. The Atlantic destaca: “Durante la Gran Recesión de 2007 a 2009, la economía sufrió una pérdida neta de aproximadamente 9 millones de empleos. La recesión de la pandemia ha visto casi 10 millones de solicitudes de prestaciones por desempleo en apenas dos semanas”. The New York Times estima que el índice de desempleo está alrededor de 13%, el más alto desde el fin de la Gran Depresión, hace 80 años.
Mucho peor que eso es la mortandad. Ya tenemos más casos confirmados de coronavirus que cualquier otro país. Trump declaró el 26 de febrero que la epidemia pronto estaría “casi en cero”. Ahora sostiene que si el número de muertos es de 100,000 a 200,000 —una cantidad mayor que todas las muertes estadounidenses en todas nuestras guerras combinadas desde 1945— será una demostración de que ha hecho “un muy buen trabajo”.
No. Será una señal de que él es un miserable fracaso, porque el coronavirus es la catástrofe más previsible en la historia de Estados Unidos. Las advertencias sobre los ataques de Pearl Harbor y el 11 de septiembre fueron evidentes solo en retrospectiva. Esta vez, no se requirió de ninguna inteligencia ultrasecreta para ver lo que se venía. La alarma fue activada en enero en los medios por expertos y por líderes demócratas como el ahora candidato presidencial, Joe Biden.
Algunos funcionarios del gobierno ofrecieron advertencias similares directamente a Trump. Un equipo de reporteros del Post escribió el 4 de abril: “El gobierno de Trump recibió su primera notificación formal sobre la epidemia del coronavirus en China el 3 de enero. En cuestión de días, las agencias de espionaje estadounidenses le confirmaron la seriedad de la amenaza a Trump, incluyendo una advertencia sobre el coronavirus —la primera de muchas— en el informe diario presidencial”. Pero Trump no estaba escuchando.
El artículo del Post es la disección más minuciosa del fracaso de Trump en prepararse para la tormenta inminente. Trump fue informado por primera vez sobre el coronavirus por el secretario de Salud y Servicios Humanos, Alex Azar, el 18 de enero. Sin embargo, de acuerdo con la nota del Post, “Azar le comentó a varios allegados que el presidente creía que estaba siendo ‘alarmista’ y Azar tuvo dificultades para captar la atención de Trump para que se concentrara en el problema”. Cuando se le preguntó públicamente por primera vez a Trump sobre el virus, el 22 de enero, afirmó: “Lo tenemos totalmente bajo control. Es una persona que viene de China”.
En los días y semanas siguientes a que Azar lo alertara sobre el virus, Trump habló en ocho mítines y se fue a jugar golf seis veces, como si no tuviera ninguna preocupación en el mundo.
La incapacidad de Trump en enfocarse en el problema, señala el Post, “sembró una importante confusión en el público y contradijo los mensajes urgentes de los expertos en salud pública”. También permitió que varios errores burocráticos no fueran atendidos como fallas graves, como realizar suficientes pruebas de diagnóstico o almacenar suficientes equipos de protección y respiradores.
Países tan diversos como Taiwán, Singapur, Canadá, Corea del Sur, Georgia y Alemania lo han hecho muchísimo mejor, y sufrirán muchísimo menos. Corea del Sur y Estados Unidos descubrieron sus primeros casos el mismo día. Corea del Sur tenía el 8 de abril 200 fallecidos , cuatro muertes por cada millón de personas. La tasa de mortalidad en Estados Unidos (25 por cada millón de habitantes) es seis veces peor y está aumentando rápidamente.
Este fracaso es tan monumental que hace que nuestros recientes presidentes fallidos —George W. Bush y Jimmy Carter— luzcan dignos del Monte Rushmore en comparación. El anuncio de Trump del 3 de abril sobre el despido del inspector general de los servicios de inteligencia que reveló su intento de extorsión a Ucrania, demuestra que él combina la ineptitud de un George W. Bush o un Carter con la corrupción de Richard Nixon.
Trump, como lo hace característicamente, está trabajando más duro que nunca en culpar a otros —China, los medios, los gobernadores, el expresidente Barack Obama, los gestores del juicio político demócrata, todo el mundo menos su caddie de golf— de sus equivocaciones. Su mantra es: “No asumo ningún tipo de responsabilidad”. Queda por ver si los votantes se creerán sus excusas. Pero pase lo que pase en noviembre, Trump no podrá escapar del implacable juicio de la historia.
En algún lado, un aliviado James Buchanan debe estar sonriendo.
(Tomado de The Washington Post)
Director general de la OMS responde a críticas de Donald Trump: “No politice el virus”
8 abril 2020
|CUBADEBATE
El director general de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus
El director general de la Organización Mundial de la Salud (OMS),
Tedros Adhanom Ghebreyesus, pidió el miércoles al presidente
estadounidense, Donald Trump, que “no politice el virus”, en alusión a
las críticas del mandatario sobre la relación entre la organización y el
gobierno chino.También pidió a Washington y Pekín a “unir fuerzas para combatir a este peligroso enemigo”, en alusión a la pandemia del COVID-19.
Trump acusó en días pasados a la OMS “parece estar muy sesgada hacia China”, tras recordar que en los inicios de la pandemia del coronavirus, la OMS señaló que prohibir los viajes al gigante asiático, epicentro de este nuevo brote viral, no era aconsejable.
“Eso no está bien”, dijo Trump, recordando que una de sus primeras medidas, en enero, fue prohibir la llegada de vuelos procedentes de China.
“La OMS realmente se equivocó”, escribió. “Por alguna razón, está financiada en gran parte por Estados Unidos, pero muy centrada en China. Vamos a analizarlo más de cerca”, agregó.
“No deberíamos perder tiempo echando la culpa a otros”, aseveró Tedros en rueda de prensa telemática en Ginebra.
El Dr. Tedros revela que ha sufrido ataques y amenazas de muerte
El director general de la Organización
Mundial de la Salud (OMS), Tedros Adhanom Ghebreyesus, reveló hoy que en
los últimos tres meses, periodo durante el cual su entidad ha liderado
la lucha global contra el coronavirus, ha recibido amenazas de muertes y
ataques de distintos tipos, entre ellos de carácter racista.
“Hace tres meses que recibo ataques personales, algunos racistas y para ser honesto estoy orgulloso de mi color. He recibido incluso amenazas de muerte, pero no me importa en lo absoluto íPor qué me importaría ser atacado si la gente está muriendo, estamos perdiendo vidas cada minuto”, dijo el responsable de origen etíope.
(Con información de AFP y EFE)“Hace tres meses que recibo ataques personales, algunos racistas y para ser honesto estoy orgulloso de mi color. He recibido incluso amenazas de muerte, pero no me importa en lo absoluto íPor qué me importaría ser atacado si la gente está muriendo, estamos perdiendo vidas cada minuto”, dijo el responsable de origen etíope.
Estados Unidos: El devastador impacto de la COVID-19 entre los afroamericanos
8 abril 2020
| CUBADEBATE
La población afroestadounidense está en mayor riesgo frente a las consecuencias del coronavirus. Foto: Getty Images.
Puede ser que el coronavirus no distinga color de piel ni origen
étnico, pero los datos en Estados Unidos comienzan a mostrar que hay un
sector de la sociedad que está sufriendo un impacto mayor por la
pandemia.“Muchos estadounidenses negros están en mayor riesgo ante la COVID-19”, dijo el cirujano general de EE.UU., Jerome Adams, uno de los portavoces del gobierno en temas de salud pública en entrevista con CBS.
“Me rompe el corazón”, dijo Adams, quien se identifica como afroamericano.
Aunque la información va surgiendo a cuentagotas, varios estados y ciudades de EE.UU. han comenzado a publicar cifras que revelan que la población afro es más vulnerable ante el brote del coronavirus que causa la enfermedad COVID-19.Los expertos, sin embargo, no están sorprendidos, y explican que esta situación es un reflejo de varios factores que ponen a los afroamericanos en desventaja ante una calamidad pública.
Hasta el 8 de abril EE.UU. había reportado 401 166 casos de COVID-19 y 12 936 muertes, según la Universidad Johns Hopkins.
¿Qué dicen los datos?
"Me
rompe el corazón"; dijo el cirujano general Jerome Adams al referirse a
la situación de los afroestadounidenses frente al coronavirus. Foto:
Getty Images.
En la ciudad de Nueva York, el epicentro de la pandemia en EE.UU.,
hasta el 8 de abril el 28% de las 4 009 muertes por COVID-19 eran
personas afro, según datos revelados por el gobernador Andrew Cuomo.En Chicago, la sexta ciudad más poblada del país y una de las pocas que había publicado este tipo de datos, hasta el 5 de abril cerca de la mitad de los casi 5 000 contagiados era personas de origen afro.
Allí habían muerto 1 824 afroamericanos, frente a 847 blancos, 478 hispanos y 126 personas de origen asiático.
Es decir, representaban el 72% de las muertes, aunque solo son el 30% de la población en una ciudad de 2,7 millones de habitantes.
“Esas cifras te dejan sin aliento”, dijo la alcaldesa de Chicago Lori Lightfoot, al diario The New York Times.
“Es de las cosas más impactantes que creo haber visto como alcaldesa”.
En otras partes del país el panorama también es nefasto. En el estado de Michigan, los afroamericanos conforman solo el 14% de la población, pero acumulan el 33% de los casos reportados de COVID-19 y el 41% de las muertes, según datos de las autoridades sanitarias del estado.
En el estado de Lusiana, en el sur del país, cerca del 40% de las muertes por COVID-19 han ocurrido en Nueva Orleans, donde la mayoría de los habitantes son de origen afro. Hasta el 8 de abril, esa ciudad había reportado 4 942 casos y 185 muertes.
La ciudad de Milwaukee, en Wisconsin, es una de las más segregadas del país.
Ahí, hasta el viernes 3 de abril se habían registrado cerca de mil casos de COVID-19, casi la mitad de ellos eran afroamericanos, aunque solo son el 26% de la población de la ciudad, según un estudio de ProPublica.
De las 27 muertes que se habían reportado, 21 fueron de personas afro.
¿A qué se debe?
Muchos afroestadounidenses siguen trabajando en las calles en medio de la pandemia. Foto: Getty Images.
Autoridades y expertos coinciden en que los afro están en peores
condiciones de salud que otros sectores de la población para hacer
frente al contagio de la enfermedad.En Estados Unidos hay una “exacerbación de la disparidad de salud”, como lo llamó en rueda de prensa Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas de EE.UU., quien ha liderado la batalla contra el coronavirus en ese país.
“Siempre hemos sabido que enfermedades como la diabetes, la hipertensión, la obesidad y el asma afectan de manera desproporcionada a las poblaciones minoritarias, particularmente los afroamericanos”.Fauci agregó que esas condiciones previas “conducen a un mal desenlace” al momento en que una persona deba enfrentarse a la COVID-19.
Varias de esas condiciones previas, según los expertos, están relacionadas con que la población afro históricamente ha tenido menos acceso a los servicios de salud.
No es una condición genética lo que hace a los afroamericanos más vulnerables ante el virus, sino una serie de factores sociales que los ponen en desventaja.
“En EE.UU. tenemos un historial de segregación y falta de inversión en las comunidades afroamericanas”, le dice a BBC Mundo Steven Alvarado, profesor en el Departamento de Sociología en la Universidad de Cornell y especialista en inequidad en asuntos de salud.
“Eso no es algo nuevo, lo nuevo es que una pandemia está chocando con esa historia”.
Tyan Parker Dominguez, profesora de trabajo social en la Universidad del Sur de California y experta en temas de racismo y salud, comparte esa visión.
“No es una coincidencia que la salud de la población sea un espejo de las inequidades sociales”, dice Parker Dominguez.
Para Amitabh Chandra, director de investigaciones de políticas de salud en la Escuela de Gobierno de la Universidad de Harvard, además de las condiciones de salud hay otros tres factores que ayudan a explicar por qué la población afro en EE.UU. es más vulnerable ante el coronavirus:
- Tienen menos seguros de salud respecto a otros sectores de la población
- Tienen menos ingresos y menos ahorros
- Son parte de una población que sigue trabajando en las calles durante la pandemia, como policías, empleados de aeropuertos, bodegueros, domiciliarios, etc.
El experto también menciona el riesgo de la pandemia en las cárceles, dónde los afroamericanos tienen cinco veces más posibilidades de ir a prisión que las personas blancas, según datos de The Sentencing Project.
Falta información
En Estados Unidos la población afroamericana ha tenido menor acceso a los servicios de salud. Foto: Getty Images.
Los datos sobre cómo la población afro se ve más afectada por el coronavirus tan solo están empezando a surgir.“La gran pregunta es la calidad de los datos”, dice Parker Dominguez.
“Entender quiénes son los grupos de mayor riesgo, sectores de la sociedad que se están viendo desproporcionadamente afectados, debería ser información crucial para sustentar nuestras decisiones acerca de cómo distribuir los recursos limitados que tenemos para combatir la pandemia”, dice Parker Dominguez.
“Si no hay datos, se multiplica el problema”, dice Alvarado, pero afirma que investigaciones previas ya mostraban que algo así sucedería.
Chandra, está de acuerdo en que "más datos siempre es mejor", pero añade que la falta de información no debe ser una razón para no tomar medidas.
“No necesitas una gran cantidad de datos para darte cuenta de lo que ocurre, lo puedes ver con tus ojos”, dice Chandra.
“Darles seguros a la gente, darles beneficios de desempleo, cupones de alimento, dinero, liberarlos de las prisiones, todas esas son cosas que se pueden hacer sin los datos”.
Latinos en riesgo
En Estados Unidos la población afroamericana ha tenido menor acceso a los servicios de salud. Foto: Getty Images.
Alvarado cree que la situación que se comienza a develar con los
afroamericanos, también puede ser similar a la que pueden estar
enfrentándose los latinos en EE.UU.En la ciudad de Nueva York, por ejemplo, las cifras muestran que el 34% de las muertes son de hispanos, un porcentaje incluso más alto que los afroamericanos.
“Todo hace parte de una cadena histórica que pone a los latinos y a los afroamericanos en mayor riesgo”, dice Alvarado.
“Hay muchos latinos trabajando en las siembras, manejando buses, trabajando en los supermercados, el riesgo que enfrentan en sus barrios se multiplica con el riesgo que enfrentan en sus trabajos”, dice el sociólogo.
Parker Dominguez añade la situación de los migrantes indocumentados.
“Son personas que por miedo no acuden a los servicios de salud y por lo tanto no quedan registradas”, dice.
“Les preocupa cómo los van a tratar o ponerse en riesgo de que los detengan, son miedos legítimos que tienen”.
“Cualquier población vulnerable se puede ver desproporcionalmente afectada por la COVID-19”, concluye Parker Dominguez.
(Tomado de la BBC)
Noticias Internacionales Independientes (EE.UU.)
09 de abril de 2020
Trabajadores de comida rápida en California van a la huelga para exigir pago por trabajo riesgoso y protección contra COVID-19
Image Credit: Youtube: Jason Koebler
En
California, cientos de trabajadores en 30 restaurantes de comida rápida
están en huelga este jueves para exigir equipos de protección personal y
licencia por enfermedad remunerada. Estas son las palabras de Irving
Gaza, un empleado de McDonald’s en la ciudad de San José, quien se unió a
una huelga a principios de esta semana.
Irving Gaza expresó: “Yo soy el que está en mayor riesgo. Soy el tipo que está atendiendo la ventanilla para pedir comida desde el coche. Estoy en contacto muy cercano con la gente. McDonald’s no quiere pagarme a mí o a mis compañeros por trabajo riesgoso. No nos proporcionan mascarillas ni nada por el estilo. Nada”.Mientras tanto, el Sindicato de Trabajadores de Alimentos y Comercio está pidiendo al Gobierno de Donald Trump que emita políticas de seguridad obligatorias para proteger a los trabajadores de supermercados y tiendas de comestibles. El sindicato quiere garantizar que todos los compradores utilicen mascarillas y que se limite la cantidad de personas que pueden ingresar a una tienda en un momento dado, así como la imposición de medidas de distanciamiento social, procedimientos de desinfección y limpieza y la entrega de equipos de protección personal para todos los trabajadores.
Trump promociona tratamientos no aprobados de hidroxicloroquina y zinc para la COVID-19
En
la Casa Blanca, Donald Trump continuó promoviendo el miércoles el
fármaco antipalúdico hidroxicloroquina como remedio para la COVID-19,
a pesar de que ningún ensayo clínico ha demostrado que el medicamento
sea efectivo para tratar el virus. Una revista médica que inicialmente
publicó un estudio francés que sugiere la utilidad terapéutica de este
medicamento para tratar el coronavirus ha aclarado que el estudio no
cumple con los estándares médicos esperados.
Y cardiólogos advierten que la hidroxicloroquina tiene efectos secundarios graves y puede causar un paro cardíaco repentino en algunos pacientes. Mientras tanto, Trump promovió otra sustancia química en su lista de tratamientos no aprobados:
Mientras tanto, los asesores de la Casa Blanca están considerando la posibilidad de reanudar la actividad económica de Estados Unidos a partir del 1º de mayo, a pesar de las advertencias hechas por funcionarios de salud pública, quienes sostienen que el fin de las medidas de distanciamiento social podría conducir a un nuevo aumento de contagios y muertes.
Y cardiólogos advierten que la hidroxicloroquina tiene efectos secundarios graves y puede causar un paro cardíaco repentino en algunos pacientes. Mientras tanto, Trump promovió otra sustancia química en su lista de tratamientos no aprobados:
El presidente Donald Trump dijo: “Zinc. Eso dicen ellos, zinc. Deberíamos incorporar zinc. Bueno, todo tiene que ser recomendado por médicos, doctores. Pero ellos hacen referencia al zinc”.No hay evidencia médica que demuestre que el zinc sea un tratamiento efectivo para COVID-19. El presidente Trump parece estar promoviendo un cóctel de medicamentos que no ha sido sometido a pruebas médicas y que ha sido recetado por el doctor Vladimir Zelenko, un autodenominado “simple médico rural” que trabaja en Nueva York, ampliamente promocionado en el canal de televisión Fox News.
Mientras tanto, los asesores de la Casa Blanca están considerando la posibilidad de reanudar la actividad económica de Estados Unidos a partir del 1º de mayo, a pesar de las advertencias hechas por funcionarios de salud pública, quienes sostienen que el fin de las medidas de distanciamiento social podría conducir a un nuevo aumento de contagios y muertes.
Director general de la Organización Mundial de la Salud: “Por favor, no politicen este virus”
El
director general de la Organización Mundial de la Salud afirmó el
miércoles que ha recibido amenazas de muerte e insultos racistas durante
el tiempo en el que ha liderado la lucha internacional contra la
pandemia del coronavirus. El doctor Tedros Adhanom Ghebreyesus estaba
respondiendo a la pregunta hecha por un periodista sobre si las críticas
de líderes mundiales como el presidente Donald Trump dificultaban su
trabajo.
Tedros Adhanom Ghebreyesus sostuvo: “Por favor, no politicen este virus, porque éste se alimenta de las diferencias que existen a nivel nacional. Si quieren ser explotados [por el virus], y si quieren tener muchas más bolsas de cadáveres, entonces háganlo”.Esta semana, Trump intentó atribuir la culpa de la desastrosa respuesta de su Gobierno ante la pandemia a la Organización Mundial de la Salud, tildando a la agencia de estar demasiado “centrada en China”. Trump, así como republicanos de alto rango entre los que se incluyen el senador Lindsey Graham y el secretario de Estado Mike Pompeo, han dicho que es posible que suspendan financiación estadounidense destinada a la Organización Mundial de la Salud.
Italia cerrará puertos a buques de ayuda a migrantes; los asilados en Grecia tendrán que permanecer en los campamentos
En
noticias de inmigración, Italia ha cerrado sus puertos a embarcaciones
que brindan ayuda humanitaria a los migrantes que intentan cruzar el mar
Mediterráneo. Las autoridades del Gobierno dicen que sus puertos ya no
son seguros debido al brote de coronavirus.
En Grecia están aumentando los temores de que el coronavirus se propague de forma descontrolada en los superpoblados e insalubres campos de refugiados.
El Gobierno griego dice que no revisará nuevas solicitudes de asilo hasta que termine la crisis, dejando a miles de personas varadas en los campamentos.
En Grecia están aumentando los temores de que el coronavirus se propague de forma descontrolada en los superpoblados e insalubres campos de refugiados.
El Gobierno griego dice que no revisará nuevas solicitudes de asilo hasta que termine la crisis, dejando a miles de personas varadas en los campamentos.
Cientos de bolivianos quedan atrapados en cuarentena en Chile ante el cierre de fronteras
En
Bolivia, cientos de personas quedaron varadas en un campamento de
cuarentena militar después de que intentaron cruzar la frontera chilena
de regreso a Bolivia en medio del cierre de fronteras y una cuarentena
obligatoria en ambos países. El campamento fue construido la semana
pasada para albergar a los bolivianos que no estaban en el país cuando
comenzó el brote de coronavirus.
La Unión Estadounidense por las Libertades Civiles exige una investigación luego de que una migrante se vio obligada a dar a luz en custodia de la Patrulla Fronteriza
La
Unión Estadounidense por las Libertades Civiles exige que se investigue
el trato abusivo de la Patrulla Fronteriza contra las migrantes
embarazadas que están bajo su custodia. La queja presentada el miércoles
detalla cómo una mujer guatemalteca dio a luz en la estación de la
Patrulla Fronteriza de Chula Vista, cerca de la ciudad de San Diego, de
pie, agarrada a un bote de basura y con los pantalones puestos. Ella
había pedido ayuda a los agentes de la Patrulla Fronteriza, pero según
se informó le dijeron que se sentara y esperar a que fuera registrada.
Había sido detenida con su esposo y sus dos hijas pequeñas en febrero,
ya que esperaban solicitar asilo en Estados Unidos.
En noticias relacionadas, el Gobierno de Donald Trump ha cerrado de manera inadvertida el sistema de asilo del país por primera vez en décadas, utilizando una ambigua ley de salud pública para justificar lo que se puede considerar como una de las medidas más severas contra la inmigración en la frontera entre Estados Unidos y México en medio de la pandemia.
En noticias relacionadas, el Gobierno de Donald Trump ha cerrado de manera inadvertida el sistema de asilo del país por primera vez en décadas, utilizando una ambigua ley de salud pública para justificar lo que se puede considerar como una de las medidas más severas contra la inmigración en la frontera entre Estados Unidos y México en medio de la pandemia.
Principal infectólogo de EE.UU.: "La vuelta a la época precoronavirus podría no suceder nunca"
Publicado:
7 abr 2020 11:45 GMT - RT
El miembro del grupo de trabajo sobre el covid-19 en
EE.UU. destacó que no hay que "pensar en reclamar la victoria
prematuramente".
Anthony
Fauci, director del Instituto Nacional de Alergia y Enfermedades
Infecciosas de EE.UU. (NIAID, por sus siglas en inglés), afirmó
en una rueda de prensa este lunes que el país norteamericano podría no
volver nunca a su estado anterior al brote del covid-19, especialmente
sin una vacuna y tratamientos efectivos.
"Si se quiere volver a [la época] precoronavirus, eso podría no suceder en el sentido de que la amenaza está ahí", sostuvo Fauci, quien al mismo tiempo expresó optimismo sobre que las nuevas terapias y una vacuna ayudarían al país a recuperarse.
Fauci, que es un reconocido epidemiólogo y un importante miembro del grupo de trabajo sobre el coronavirus del presidente Donald Trump, señaló que "en un período de tiempo obtendremos una buena vacuna, y nunca tendremos que volver a donde estamos ahora".
"Si volver a la normalidad significa actuar como si nunca hubiera un problema de coronavirus, no creo que eso suceda hasta que tengamos una situación en la que se pueda proteger completamente a la población. Pero cuando decimos volver a la normalidad, queremos decir algo muy diferente de lo que estamos pasando en este momento. Porque en este momento estamos en una mitigación muy intensa", señaló.
El infectólogo advirtió que no se puede "pensar en reclamar la victoria prematuramente". Sin embargo, sostuvo que las medidas de mitigación tomadas en Nueva York están funcionando e instó a otros estados a "mantener el ritmo".
"Si se quiere volver a [la época] precoronavirus, eso podría no suceder en el sentido de que la amenaza está ahí", sostuvo Fauci, quien al mismo tiempo expresó optimismo sobre que las nuevas terapias y una vacuna ayudarían al país a recuperarse.
Fauci, que es un reconocido epidemiólogo y un importante miembro del grupo de trabajo sobre el coronavirus del presidente Donald Trump, señaló que "en un período de tiempo obtendremos una buena vacuna, y nunca tendremos que volver a donde estamos ahora".
"Si volver a la normalidad significa actuar como si nunca hubiera un problema de coronavirus, no creo que eso suceda hasta que tengamos una situación en la que se pueda proteger completamente a la población. Pero cuando decimos volver a la normalidad, queremos decir algo muy diferente de lo que estamos pasando en este momento. Porque en este momento estamos en una mitigación muy intensa", señaló.
El infectólogo advirtió que no se puede "pensar en reclamar la victoria prematuramente". Sin embargo, sostuvo que las medidas de mitigación tomadas en Nueva York están funcionando e instó a otros estados a "mantener el ritmo".
El número de muertes por el covid-19 en el mundo supera las 80.000
Publicado:
7 abr 2020 20:00 GMT - RT
El total de casos detectados se ha elevado a más de 1,4 millones a nivel global.
El
total de muertes provocadas por el covid-19 a nivel mundial ha superado
las 80.000 este martes, llegando a 80.759, de acuerdo con los datos proporcionados por la Universidad Johns Hopkins.
Además, el número de casos detectados en el mundo desde que empezó la epidemia ha llegado a 1.407.123.
El país más afectado en cuanto a la tasa de mortalidad sigue siendo Italia, donde el número de fallecidos por covid-19 ha alcanzado los 17.127, después de que este martes se informara de que en las últimas 24 horas murieron otras 604 personas.
Además, el número de casos detectados en el mundo desde que empezó la epidemia ha llegado a 1.407.123.
El país más afectado en cuanto a la tasa de mortalidad sigue siendo Italia, donde el número de fallecidos por covid-19 ha alcanzado los 17.127, después de que este martes se informara de que en las últimas 24 horas murieron otras 604 personas.
Estos cuatro países también tienen el mayor número de los casos detectados, pero el orden es diferente: EE.UU. (más de 383.000 infectados), España (más de 140.000), Italia (más de 135.000) y Francia (más de 110.000).
Hasta el momento, casi 298.000 pacientes han logrado recuperarse.
El total de contagios por coronavirus supera los 1,6 millones en el mundo
Publicado:
10 abr 2020 05:45 GMT - RT
La Universidad Johns Hopkins señala que hasta la fecha
más de 95.000 muertes por covid-19 se han registrado a nivel mundial.
El
número de infecciones por coronavirus en el mundo ha ascendido a
1.601.984 este 10 de abril, mientras que el total de fallecimientos por
covid-19 se ha elevado a 95.735.
Al mismo tiempo, más de 355.000 personas han logrado recuperarse a nivel mundial, según los datos proporcionados por la Universidad Johns Hopkins.
El mayor número de casos de infección por coronavirus es el registrado en EE.UU. (466.033), seguido por España (153.222), Italia (143.626) y Francia (118.783).
Al mismo tiempo, más de 355.000 personas han logrado recuperarse a nivel mundial, según los datos proporcionados por la Universidad Johns Hopkins.
El mayor número de casos de infección por coronavirus es el registrado en EE.UU. (466.033), seguido por España (153.222), Italia (143.626) y Francia (118.783).
Más de 3.380 millones de personas en todo el mundo se encuentran confinadas debido al coronavirus
Publicado:
30 mar 2020 14:09 GMT - RT
Esta cifra representa alrededor del 43 % de la población mundial.
De acuerdo a la base de datos de AFP, hasta este domingo más de 3.380 millones de personas en todo el mundo se encuentran cumpliendo alguna medida de confinamiento debido a la pandemia de coronavirus.
Esta cifra representa alrededor del 43 % de la población mundial, estimada en 7.790 millones de personas, según un recuento de las Naciones Unidas en 2020.
Las medidas de confinamiento en todo el mundo han sido puestas en práctica en 78 países y territorios.
Médicos y un paciente en un hospital de Nueva York, EE.UU., el 6 de abril de 2020Brendan Mcdermid / Reuters
Esta cifra representa alrededor del 43 % de la población mundial, estimada en 7.790 millones de personas, según un recuento de las Naciones Unidas en 2020.
Las medidas de confinamiento en todo el mundo han sido puestas en práctica en 78 países y territorios.
Características de las medidas
- Para alrededor de 2.450 millones de personas de 42 países, estas restricciones son obligatorias.
- En la mayoría de los casos, a las personas se les permite abandonar sus hogares para trabajar, comprar bienes esenciales o recibir tratamiento médico.
- Al menos nueve países han instado a sus poblaciones a quedarse en casa sin imponer amenazas de castigo.
- Alrededor de 21 países o territorios han impuesto toques de queda.
- Al menos siete países han puesto sus principales ciudades en cuarentena, impidiendo que las poblaciones entren y salgan.
EE.UU. registra un nuevo récord de muertes por covid-19, tras confirmarse casi 2.000 fallecimientos durante las últimas 24 horas
Publicado:
8 abr 2020 01:17 GMT - RT
La cifra total de muertes provocadas por covid-19 en
EE.UU. ha superado las 12.000 este martes, llegando a las 12.844.
EE.UU. ha reportado este martes 1.939 muertes por covid-19 durante las últimas 24 horas y de esta manera ha registrado un nuevo récord trágico.
Al mismo tiempo, la cifra total de muertes provocadas por covid-19 en EE.UU. ha superado las 12.000 este 7 de abril, llegando a las 12.844, según los últimos datos proporcionados por la Universidad Johns Hopkins.
Hasta la fecha en territorio estadounidense se han registrado 398.185
contagios de coronavirus, con lo que el país se encuentra en el primer
lugar en términos de personas infectadas, seguido por España (141.942) e
Italia (135.586).
Mientras tanto, 21.849 personas han logrado superar la enfermedad en EE.UU.
El estado de Nueva York ha registrado el mayor número de fallecimientos en el país desde el comienzo del brote. Este martes, el gobernador Andrew Cuomo informó de que 731 personas han muerto por el coronavirus desde ayer, aumentando el saldo mortal de la epidemia en este estado a 5.489.
Al mismo tiempo, la cifra total de muertes provocadas por covid-19 en EE.UU. ha superado las 12.000 este 7 de abril, llegando a las 12.844, según los últimos datos proporcionados por la Universidad Johns Hopkins.
Mientras tanto, 21.849 personas han logrado superar la enfermedad en EE.UU.
El estado de Nueva York ha registrado el mayor número de fallecimientos en el país desde el comienzo del brote. Este martes, el gobernador Andrew Cuomo informó de que 731 personas han muerto por el coronavirus desde ayer, aumentando el saldo mortal de la epidemia en este estado a 5.489.
Coronavirus: Más de 150.000 personas morirán en Europa en la primera ola de la pandemia por covid-19
La Universidad de Washington ha publicado nuevas estimaciones para Europa sobre el coronavirus: 151.680 residentes fallecerán y habrá una significativa escasez de camas de hospital y respiradores. El nuevo estudio afirma que, mientras Italia y España han superado el pico de sus epidemias, Reino Unido, aún al comienzo, enfrenta un número creciente de muertes.
madrid
08/04/2020 11:21 - Verónica Fuentes (SINC) - PÚBLICO
08/04/2020 11:21 - Verónica Fuentes (SINC) - PÚBLICO
En Europa, la tasa de mortalidad diaria máxima por la COVID-19 ocurrirá durante la tercera semana de abril. Además, la pandemia se extenderá desde
el sur del continente, según apunta un nuevo estudio liderado por el
Instituto para la Métrica y Evaluación de la Salud (IHME) de la Universidad de Washington en Seattle (EE UU).
El análisis
se basa en una amplia gama de fuentes de información, como los gobiernos
locales y nacionales, la Organización Mundial de la Salud (OMS),
declaraciones oficiales sobre la implementación de políticas de distanciamiento social y datos de tasas de mortalidad específicas por edad de China, Italia, Corea del Sur y EE UU.
El IHME comenzó a hacer proyecciones del impacto de la pandemia en EE UU el 26 de marzo. Las nuevas estimaciones
son el primer conjunto de previsiones para Europa y se basan en modelar
el pico en las tasas de mortalidad y el uso de hospitales en Wuhan, la
ciudad china donde se descubrió el virus, así como en siete ubicaciones
europeas que han alcanzado su punto máximo de muertes diarias: Madrid y Castilla-La Mancha
(España); y Toscana, Emilia-Romaña, Liguria, Piamonte y Lombardía
(Italia). De estos ocho lugares que han alcanzado el pico, solo uno,
Wuhan, ha llevado los casos nuevos a casi cero.
En Europa, la tasa de mortalidad diaria máxima por la covid-19 ocurrirá durante la tercera semana de abril
El nuevo anuncio sostiene que aproximadamente 151.680 personas fallecerán
durante lo que los investigadores llaman la primera ola de la
enfermedad. En comparación, se espera que EE UU sufra 81.766 muertes.
"Parece probable
que el número de muertes en Europa supere nuestras proyecciones para EE
UU", afirma Christopher Murray, el director del IHME. "Esto a pesar de
la disminución de las muertes que ahora están ocurriendo en Italia y
España".
El número de
víctimas mortales en muchos países se ve agravado por la demanda de
recursos hospitalarios "muy por encima de la disponibilidad". El trabajo
registra, por ejemplo, que en Reino Unido se espera una demanda máxima
de 102.794 camas de hospital necesarias en comparación con las 17.765
disponibles; 24.544 camas de UCI en comparación con las 799 disponibles y
20.862 ventiladores –actualmente sin cifras sobre los disponibles–.
El número de víctimas mortales se ha visto agravado por la demanda de recursos hospitalarios
Los actuales datos revelan que la mayoría de las regiones de Italia y España han superado sus picos
en la cantidad de muertes, mientras que otros territorios se están
acercando a sus crestas y otras aún enfrentan una mortalidad máxima a
finales de abril.
Así, los países que
están a punto de alcanzar su punto máximo o se acercan rápidamente al
pico en esta ola de la epidemia incluyen los Países Bajos, Irlanda,
Austria y Luxemburgo. La República Checa y Rumania están a la mitad de
sus trayectorias esperadas. Otras naciones, como Reino Unido, Alemania, Noruega y Grecia,
todavía están en una etapa temprana de su trayectoria y se enfrentan a
un rápido aumento de la tasa de muertes cuando alcancen el pico entre la
segunda y tercera semana de abril.
El caso de España
Según las estimaciones de los expertos,
casi todas las regiones de nuestro país están en el pico o más allá.
Así, la demanda excesiva de camas en las UCI es particularmente alta en
España en comparación con muchos otros países de Europa. Es más, los
datos predicen 19.209 muertes totales por covid-19 para el 4 de agosto.
"Hemos visto
claras evidencias de que el virus está alcanzando su máximo en algunas
regiones. Parece que el confinamiento ha estado funcionando y, mientras
se mantengan las medidas de distanciamiento social, disminuirá el uso de los hospitales y las muertes", explica Murray.
Según los expertos, el pico del
virus en España parece haber quedado atrás y hay una gran tentación de
relajar el distanciamiento social "demasiado pronto"
"El
pico del virus en España parece haber quedado atrás. Ahora hay una gran
tentación de relajar el distanciamiento social demasiado pronto. Si eso
sucede, el virus podría rebotar muy rápidamente"
"Hay buenas razones para el optimismo en el país", continúa, "pero el distanciamiento debe mantenerse. La presión sobre los servicios de salud debería
comenzar a disminuir a nivel nacional, pero este alivio de la presión
se producirá en diferentes momentos en las regiones".
"El pico nacional
del virus parece haber quedado atrás. Ahora hay una gran tentación de
relajar el distanciamiento social demasiado pronto. Si eso sucede, el
virus podría rebotar muy rápidamente", declara el experto.
Sobre por qué el número de muertes en España es muy superior al de Portugal,
Murray puntualiza que allí los servicios no esenciales cerraron en
febrero, las escuelas cerraron el 16 de marzo y se emitió una orden de
permanencia en el hogar el 19 de marzo, cuando solo se había producido
una muerte.
"Debido a que
Portugal comenzó a distanciarse socialmente cuando el volumen de
transmisión era bajo, tienen un pico mucho menor y muchas menos muertes
por día que España", confirma.
Italia supera los 18.000 fallecidos por coronavirus y se prepara para prolongar el confinamiento
Se han registrado 610 muertos con covid-19 más en las últimas 24 horas. Los casos actualmente positivos son 96.877, con 1.615 nuevos contagios desde este miércoles.
09/04/2020 19:57 - Virginia Hebrero (EFE) - PÚBLICO
Los fallecidos en Italia con coronavirus alcanzaron este jueves el número de 18.279, al registrarse 610 más en las últimas 24 horas, una cifra superior a los dos últimos días, en una jornada en la que también crecieron los contagios.
Según los
datos de Protección Civil, los casos actualmente positivos son 96.877,
con 1.615 nuevos contagios desde el miércoles, un incremento
considerable respecto al miércoles (1.195) y que supone casi el doble
que los 880 del día anterior.
Los casos totales
desde que se detectó el virus el 20 de febrero son 143.626, 4.204 más
que el miércoles, y de ellos 28.470 personas ya se han curado. La parte
más favorable de este boletín diario ofrecido por el jefe de Protección
Civil, Angelo Borrelli, es que una vez más, una gran mayoría de los positivos
(64.873, el 67 %) están en aislamiento domiciliario, y se siguen
reduciendo los hospitalizados con síntomas y los que están en cuidados
intensivos.
Con estos datos, que
si bien hoy subieron parecen mantener la tendencia de contención de la
propagación, y sobre todo permiten descongestionar algo los hospitales,
el Gobierno de Giuseppe Conte se dispone a prolongar el
confinamiento de los ciudadanos y la paralización de las actividades más
allá del 13 de abril, cuando finaliza el actual decreto.
Con el país ya de lleno en la Semana Santa, el Ministerio del Interior ha anunciado que incrementará los controles para evitar desplazamientos de personas que intenten viajar a sus segundas residencias o salir a las playas.
Se espera que el
nuevo decreto esté listo ya mañana o pasado y, aparte de prolongar otras
dos semanas como mínimo el confinamiento, el Ejecutivo se está
planteando la posibilidad de reabrir algunas actividades económicas.
Tanto el primer ministro Conte como el gobierno regional de Lombardía,
la región más afectada por la pandemia y uno de los motores económicos
del país, son presionados por los sectores industriales para permitir la
reapertura.
El Gobierno se dispone a alargar el confinamiento
"El Gobierno tiene las ideas claras: debemos garantizar la salud de los italianos",
zanjó el ministro de Asuntos Regionales, Francesco Boccia, quien hoy
acudió a Milán, donde ofreció una conferencia de prensa con el jefe de
Protección Civil, Angelo Borrelli, y el alcalde de la ciudad, Giuseppe
Sala.
Respondía a una
pregunta sobre la solicitud de la Confindustria de las cuatro regiones
del norte -Lombardía, Véneto, Emilia-Romaña y Piamonte- para poder
reanudar el trabajo. Conte concedió este jueves que Italia puede
comenzar a aliviar gradualmente el bloqueo y permitir el regreso a la actividad a algunos sectores a fines de este mes.
Conte: "Si los científicos lo confirman, podríamos comenzar a relajar algunas medidas ya para fines de este mes"
"Si
los científicos lo confirman, podríamos comenzar a relajar algunas
medidas ya para fines de este mes. Necesitamos elegir sectores que
puedan reiniciar su actividad", dijo el premier en una entrevista con la
cadena británica BBC.
El primer ministro
ha mantenido hoy una reunión por vídeoconferencia con los agentes
sociales precisamente para estudiar esta cuestión, aunque la decisión
final se la dictará el Consejo Técnico Científico que asesora al
Gobierno. Mientras, el Senado aprobó hoy el decreto del Gobierno con
25.000 millones de euros de ayudas para los afectados por la pandemia
del coronavirus, pero lo hizo con el rechazo de la oposición, que
critica ciertas limitaciones de las medidas.
Mejora la situación, pero Lombardía no baja la guardia
Lombardía, la
región más afectada del país que ha superado hoy los 10.000 muertos, no
quiere bajar la guardia. "Todavía estamos en medio de la batalla" contra
el coronavirus, destacó el presidente regional, Attilio Fontana.
"La gente debe entender que aún no hemos logrado ningún resultado aparte de frenar esta epidemia
y hacer que la presión sobre el sistema de salud sea menos opresiva.
Esto lo estamos haciendo gracias al compromiso de todos, de las personas
que desean salir a divertirse y en su lugar deben quedarse en casa. Es
la única forma, lo dicen los números", señaló.
"Hasta hace unas
semanas estábamos en una situación en la que nuestros hospitales ya casi
no podían recibir a los enfermos. Ahora la situación es más tranquila,
pero debemos terminar esta fase, debemos llegar a los 'contagios cero'",
añadió Fontana. Lombardía recibió hoy a un nuevo contingente de 73
médicos llegados de otros puntos del país para ayudar en esta fase de
"frenazo" de la pandemia.
Más de cien médicos muertos por coronaviurs
Y entretanto, la
lista de médicos fallecidos con el coronavirus en Italia se alarga y ya
son 105. En las últimas 24 horas han muerto nueve "batas blancas", entre
ellos una doctora de Mira (provincia de Venecia), de 62 años y madre
también de un médico.
La gran mayoría de
los fallecidos son médicos de familia, una de las especialidades más
golpeadas, según la lista que actualiza a diario la Federación Nacional
de Órdenes Médicas, Fnomceo, en su página web.
La gran mayoría de los fallecidos son médicos de familia, una de las especialidades más golpeadas
Su presidente, Filippo Anelli,
recuerda que en la lista "se decidió incluir a todos los médicos, tanto
retirados como activos", dado que muchos de los jubilados regresaron al
trabajo para colaborar en esta emergencia sanitaria. "Nunca dejas de
ser médico", señaló.
Entre los
trabajadores sanitarios, 28 enfermeros han muerto y hay 6.500
infectados. "Nunca habíamos pensado llegar a esto... La seguridad en el
trabajo es un derecho de los ciudadanos, pero también de los médicos",
agregó Anelli.
Los líderes están aterrorizados pero no del virus, sino de nosotros
por Jonathan Cook
29/03/2020 - LA HAINE
La historia que nos han estado contando
durante 40 años o más sobre las duras realidades económicas está a punto
de ser expuesta como un cuento de hadas interesado'
Casi se puede oler el sudor cargado de miedo que rezuma por los poros de las emisoras de televisión y los posteos en las redes sociales, a medida que finalmente el establishment político
y mediático advierte lo que el coronavirus realmente significa. Y no
estoy hablando de la amenaza que supone para nuestra salud.
Una visión del mundo que durante casi dos generaciones ha desplazado a todas las otras se está derrumbando. No tiene respuestas para el actual atolladero. Hay una especie de karma trágico en el hecho de que tantos países "importantes", es decir, economías importantes, están hoy en día dirigidos por los hombres menos capacitados ideológica, emocional y espiritualmente para hacer frente al virus.
Esto está quedando expuesto con claridad en todo Occidente, pero el Reino Unido es un caso de estudio particularmente revelador.
Arrastrando los pies
El fin de semana se supo que Dominic Cummings, el poder ideológico que está detrás de Boris Johnson, el primer ministro bufón, fue clave para retrasar la respuesta del gobierno británico al coronavirus, lo que llevó a Gran Bretaña por el camino italiano (malo) de contagio, en lugar del chino (bueno).
Según los informes de los medios de comunicación de este fin de semana, Cummings inicialmente paralizó la acción del gobierno, argumentando sobre la plaga que se avecinaba que “si eso significa que algunos pensionistas mueran, mala suerte”. Ese enfoque explica el arrastre de pies durante muchos días, y los días posteriores de vacilación, que sólo ahora está llegando a una resolución.
Cummings, por supuesto, niega haber hecho esa declaración, calificando la acusación de “difamatoria”. Pero prescindamos de las formalidades. ¿Alguien realmente −realmente− cree que ese no fue el primer pensamiento de Cummings y de la mitad del gabinete, al enfrentarse a un inminente contagio que −percibieron− estaba a punto de desenmascarar la teoría social y económica que durante toda su carrera política se han dedicado a convertir en un culto de masas? Una teoría económica de la cual −por feliz coincidencia− derivan su poder político y sus privilegios de clase.
Y por supuesto, estos monetaristas duros ya se están convirtiendo en socialistas de mentira para enfrentar las primeras semanas de la crisis. Y hay muchos meses más por delante.
Desechar la austeridad
El gobierno del Reino Unido la semana pasada dejó de lado las políticas de austeridad, que fueron el punto de referencia de la ortodoxia del partido conservador durante más de una década, y anunció un derroche de gastos para salvar a las empresas paralizadas, y en lejano segundo lugar a las personas que ya no están en condiciones de ganarse la vida.
Desde el colapso financiero de 2008, los conservadores han recortado hasta la médula los gastos sociales y de bienestar, creando una enorme clase marginada en Gran Bretaña, y han dejado a las autoridades locales sin dinero e incapaces de cubrir el déficit. Durante la última década, el gobierno conservador excusó su enfoque brutal con el mantra de que no había un “árbol mágico del dinero” para ayudar en tiempos de dificultades.
El libre mercado, argumentaban, era el único camino fiscalmente responsable. Y en su infinita sabiduría, el mercado había decidido que el 1% −los millonarios y multimillonarios que habían hundido la economía en la crisis de 2008− se haría aún más rico de lo que ya era.
Mientras tanto, el resto de nosotros/as veríamos cómo se desviaban nuestros salarios y expectativas para que el 1% pudiera acumular aún más riqueza en las islas de ultramar, donde nosotros y el gobierno nunca podríamos alcanzarla.
El “neoliberalismo” se convirtió en un término mistificador, usado para reformular el insostenible capitalismo corporativo de la última etapa no sólo como un sistema racional y justo, sino como el único sistema que no implicaba gulags o colas por el pan (pero sí colas por el subsidio de desempleo).
No sólo los políticos británicos (incluyendo la mayoría del partido laborista) lo suscribieron, sino que también lo hicieron todos los medios de comunicación corporativos, aun cuando el ‘liberal’ The Guardian se estrujara las manos muy ocasionalmente y de forma totalmente ineficaz respecto a si no sería el momento de hacer que este capitalismo exacerbado fuera un poco más cuidadoso.
Sólo los ilusos y peligrosos devotos de Corbyn pensaban de otra manera.
Un cuento de hadas interesado
Pero de repente, parece que los conservadores han encontrado ese árbol mágico del dinero después de todo. Estuvo ahí todo el tiempo, y aparentemente tiene muchas frutas de baja altura a las que el resto de nosotros/as podemos acceder.
No hace falta ser un genio como Dominic Cummings para ver lo políticamente aterrador que es este momento para el sistema. La historia que nos han estado contando durante 40 años o más sobre las duras realidades económicas está a punto de ser expuesta como un cuento de hadas interesado. Nos han mentido, y pronto vamos a entender eso muy claramente.
Prepárense. En las próximas semanas, más y más periodistas van a sonar como el cuerpo de prensa de la Casa Blanca, con himnos al “querido líder” y exigencias de que confiemos en que él sabe mejor lo que debe hacerse en esta hora de necesidad.
Salvados por los rescates
La actual desesperación de la clase política y de los medios de comunicación tiene una causa sustancial −y una que debería preocuparnos tanto como el propio virus−.
Hace doce años el capitalismo se tambaleó al borde del abismo, exponiendo sus fallas estructurales ante cualquiera que se preocupara por mirar. El colapso de 2008 casi rompió el sistema financiero mundial. Fue salvado (en contra de nuestra voluntad) por nosotros, la gente. El gobierno metió la mano a fondo en nuestros bolsillos y transfirió nuestro dinero a los bancos. O más bien a los banqueros.
Salvamos a los banqueros −y a los políticos− de su incompetencia económica a través de rescates que fueron de nuevo mistificados llamándoles “alivio cuantitativo”.
Pero nosotros no fuimos los recompensados. No éramos dueños de los bancos ni teníamos una participación significativa en ellos. Ni siquiera obtuvimos supervisión a cambio de nuestra enorme inversión pública. Una vez que los salvamos, los banqueros volvieron a enriquecerse y a enriquecer a sus amigos de la misma manera que estancó la economía en 2008.
Al contrario, esos rescates produjeron más desempleo y más recortes socialers. Los rescates no arreglaron el capitalismo; simplemente retrasaron un poco más su inevitable colapso.
El capitalismo sigue siendo estructuralmente defectuoso. Su dependencia de un consumo en constante expansión no puede responder a las crisis ambientales que necesariamente conlleva dicho consumo. Y las economías que están “creciendo” artificialmente, al mismo tiempo que se agotan los recursos, crean en última instancia burbujas infladas de nada; burbujas que pronto volverán a estallar.
En modo supervivencia
En efecto, el virus es ilustrativo de uno de esos fallos estructurales: una alerta temprana de la emergencia ambiental más general, y un recordatorio de que el capitalismo, al entrelazar la codicia económica con la codicia ambiental, ha asegurado el colapso en tándem de las dos esferas.
Pandemias como ésta son el resultado de nuestra destrucción de los hábitats naturales −por criar ganado para hamburguesas, por plantar palmas para pasteles y galletas, por talar bosques para hacer muebles empaquetados, por meter 20 pollos en un metro cuadrado. Los animales son forzados a una proximidad cada vez mayor, haciendo que las enfermedades crucen la barrera de las especies. Y luego, en un mundo de vuelos de bajo costo y alta contaminación, la enfermedad encuentra un fácil y rápido tránsito hacia cada rincón del planeta.
La verdad es que en una época de colapso como la actual, al capitalismo sólo le quedan “árboles mágicos del dinero”. El primero, después del 2008, estuvo reservado para los bancos y las grandes corporaciones: la élite rica que ahora gestiona a los gobiernos como plutocracias.
El segundo “árbol mágico del dinero”, necesario para hacer frente a lo que se convertirá en la crisis económica aún más desastrosa causada por el virus, ha tenido que ampliarse para incluirnos a nosotros. Pero no se equivoquen. El círculo de la beneficencia se ha ampliado no porque el capitalismo de repente se preocupe por los sin techo y los que dependen de los bancos de alimentos. El capitalismo es un sistema económico amoral impulsado por la acumulación de beneficios para los dueños del capital. Y esos no somos ni tú ni yo.
No, el capitalismo está ahora en modo de supervivencia. Es por eso que los gobiernos occidentales, por un tiempo, tratarán de “rescatar” también a algunos sectores de su sociedad, devolviéndoles parte de la riqueza común que ha sido extraída durante muchas décadas. Estos gobiernos tratarán de ocultar por un tiempo más el hecho de que el capitalismo es totalmente incapaz de resolver las mismas crisis que ha creado. Tratarán de comprar nuestra continua deferencia hacia un sistema que ha destruido nuestro planeta y el futuro de nuestros hijos.
No funcionará indefinidamente, como Dominic Cummings sabe muy bien. Por eso el gobierno de Johnson, así como la administración Trump y sus calcos de Brasil, Hungría, Israel, India y otros lugares, están en proceso de redactar una legislación de emergencia draconiana que tendrá un objetivo de más largo plazo que el inmediato de prevenir el contagio.
Los gobiernos occidentales llegarán a la conclusión de que ha llegado el momento de reforzar el sistema inmunológico del capitalismo contra su propia gente. El riesgo es que, cuando tengan la oportunidad, empezarán a tratarnos a nosotros, no al virus, como la verdadera plaga.
jonathan-cook.net
Una visión del mundo que durante casi dos generaciones ha desplazado a todas las otras se está derrumbando. No tiene respuestas para el actual atolladero. Hay una especie de karma trágico en el hecho de que tantos países "importantes", es decir, economías importantes, están hoy en día dirigidos por los hombres menos capacitados ideológica, emocional y espiritualmente para hacer frente al virus.
Esto está quedando expuesto con claridad en todo Occidente, pero el Reino Unido es un caso de estudio particularmente revelador.
Arrastrando los pies
El fin de semana se supo que Dominic Cummings, el poder ideológico que está detrás de Boris Johnson, el primer ministro bufón, fue clave para retrasar la respuesta del gobierno británico al coronavirus, lo que llevó a Gran Bretaña por el camino italiano (malo) de contagio, en lugar del chino (bueno).
Según los informes de los medios de comunicación de este fin de semana, Cummings inicialmente paralizó la acción del gobierno, argumentando sobre la plaga que se avecinaba que “si eso significa que algunos pensionistas mueran, mala suerte”. Ese enfoque explica el arrastre de pies durante muchos días, y los días posteriores de vacilación, que sólo ahora está llegando a una resolución.
Cummings, por supuesto, niega haber hecho esa declaración, calificando la acusación de “difamatoria”. Pero prescindamos de las formalidades. ¿Alguien realmente −realmente− cree que ese no fue el primer pensamiento de Cummings y de la mitad del gabinete, al enfrentarse a un inminente contagio que −percibieron− estaba a punto de desenmascarar la teoría social y económica que durante toda su carrera política se han dedicado a convertir en un culto de masas? Una teoría económica de la cual −por feliz coincidencia− derivan su poder político y sus privilegios de clase.
Y por supuesto, estos monetaristas duros ya se están convirtiendo en socialistas de mentira para enfrentar las primeras semanas de la crisis. Y hay muchos meses más por delante.
Desechar la austeridad
El gobierno del Reino Unido la semana pasada dejó de lado las políticas de austeridad, que fueron el punto de referencia de la ortodoxia del partido conservador durante más de una década, y anunció un derroche de gastos para salvar a las empresas paralizadas, y en lejano segundo lugar a las personas que ya no están en condiciones de ganarse la vida.
Desde el colapso financiero de 2008, los conservadores han recortado hasta la médula los gastos sociales y de bienestar, creando una enorme clase marginada en Gran Bretaña, y han dejado a las autoridades locales sin dinero e incapaces de cubrir el déficit. Durante la última década, el gobierno conservador excusó su enfoque brutal con el mantra de que no había un “árbol mágico del dinero” para ayudar en tiempos de dificultades.
El libre mercado, argumentaban, era el único camino fiscalmente responsable. Y en su infinita sabiduría, el mercado había decidido que el 1% −los millonarios y multimillonarios que habían hundido la economía en la crisis de 2008− se haría aún más rico de lo que ya era.
Mientras tanto, el resto de nosotros/as veríamos cómo se desviaban nuestros salarios y expectativas para que el 1% pudiera acumular aún más riqueza en las islas de ultramar, donde nosotros y el gobierno nunca podríamos alcanzarla.
El “neoliberalismo” se convirtió en un término mistificador, usado para reformular el insostenible capitalismo corporativo de la última etapa no sólo como un sistema racional y justo, sino como el único sistema que no implicaba gulags o colas por el pan (pero sí colas por el subsidio de desempleo).
No sólo los políticos británicos (incluyendo la mayoría del partido laborista) lo suscribieron, sino que también lo hicieron todos los medios de comunicación corporativos, aun cuando el ‘liberal’ The Guardian se estrujara las manos muy ocasionalmente y de forma totalmente ineficaz respecto a si no sería el momento de hacer que este capitalismo exacerbado fuera un poco más cuidadoso.
Sólo los ilusos y peligrosos devotos de Corbyn pensaban de otra manera.
Un cuento de hadas interesado
Pero de repente, parece que los conservadores han encontrado ese árbol mágico del dinero después de todo. Estuvo ahí todo el tiempo, y aparentemente tiene muchas frutas de baja altura a las que el resto de nosotros/as podemos acceder.
No hace falta ser un genio como Dominic Cummings para ver lo políticamente aterrador que es este momento para el sistema. La historia que nos han estado contando durante 40 años o más sobre las duras realidades económicas está a punto de ser expuesta como un cuento de hadas interesado. Nos han mentido, y pronto vamos a entender eso muy claramente.
Prepárense. En las próximas semanas, más y más periodistas van a sonar como el cuerpo de prensa de la Casa Blanca, con himnos al “querido líder” y exigencias de que confiemos en que él sabe mejor lo que debe hacerse en esta hora de necesidad.
Salvados por los rescates
La actual desesperación de la clase política y de los medios de comunicación tiene una causa sustancial −y una que debería preocuparnos tanto como el propio virus−.
Hace doce años el capitalismo se tambaleó al borde del abismo, exponiendo sus fallas estructurales ante cualquiera que se preocupara por mirar. El colapso de 2008 casi rompió el sistema financiero mundial. Fue salvado (en contra de nuestra voluntad) por nosotros, la gente. El gobierno metió la mano a fondo en nuestros bolsillos y transfirió nuestro dinero a los bancos. O más bien a los banqueros.
Salvamos a los banqueros −y a los políticos− de su incompetencia económica a través de rescates que fueron de nuevo mistificados llamándoles “alivio cuantitativo”.
Pero nosotros no fuimos los recompensados. No éramos dueños de los bancos ni teníamos una participación significativa en ellos. Ni siquiera obtuvimos supervisión a cambio de nuestra enorme inversión pública. Una vez que los salvamos, los banqueros volvieron a enriquecerse y a enriquecer a sus amigos de la misma manera que estancó la economía en 2008.
Al contrario, esos rescates produjeron más desempleo y más recortes socialers. Los rescates no arreglaron el capitalismo; simplemente retrasaron un poco más su inevitable colapso.
El capitalismo sigue siendo estructuralmente defectuoso. Su dependencia de un consumo en constante expansión no puede responder a las crisis ambientales que necesariamente conlleva dicho consumo. Y las economías que están “creciendo” artificialmente, al mismo tiempo que se agotan los recursos, crean en última instancia burbujas infladas de nada; burbujas que pronto volverán a estallar.
En modo supervivencia
En efecto, el virus es ilustrativo de uno de esos fallos estructurales: una alerta temprana de la emergencia ambiental más general, y un recordatorio de que el capitalismo, al entrelazar la codicia económica con la codicia ambiental, ha asegurado el colapso en tándem de las dos esferas.
Pandemias como ésta son el resultado de nuestra destrucción de los hábitats naturales −por criar ganado para hamburguesas, por plantar palmas para pasteles y galletas, por talar bosques para hacer muebles empaquetados, por meter 20 pollos en un metro cuadrado. Los animales son forzados a una proximidad cada vez mayor, haciendo que las enfermedades crucen la barrera de las especies. Y luego, en un mundo de vuelos de bajo costo y alta contaminación, la enfermedad encuentra un fácil y rápido tránsito hacia cada rincón del planeta.
La verdad es que en una época de colapso como la actual, al capitalismo sólo le quedan “árboles mágicos del dinero”. El primero, después del 2008, estuvo reservado para los bancos y las grandes corporaciones: la élite rica que ahora gestiona a los gobiernos como plutocracias.
El segundo “árbol mágico del dinero”, necesario para hacer frente a lo que se convertirá en la crisis económica aún más desastrosa causada por el virus, ha tenido que ampliarse para incluirnos a nosotros. Pero no se equivoquen. El círculo de la beneficencia se ha ampliado no porque el capitalismo de repente se preocupe por los sin techo y los que dependen de los bancos de alimentos. El capitalismo es un sistema económico amoral impulsado por la acumulación de beneficios para los dueños del capital. Y esos no somos ni tú ni yo.
No, el capitalismo está ahora en modo de supervivencia. Es por eso que los gobiernos occidentales, por un tiempo, tratarán de “rescatar” también a algunos sectores de su sociedad, devolviéndoles parte de la riqueza común que ha sido extraída durante muchas décadas. Estos gobiernos tratarán de ocultar por un tiempo más el hecho de que el capitalismo es totalmente incapaz de resolver las mismas crisis que ha creado. Tratarán de comprar nuestra continua deferencia hacia un sistema que ha destruido nuestro planeta y el futuro de nuestros hijos.
No funcionará indefinidamente, como Dominic Cummings sabe muy bien. Por eso el gobierno de Johnson, así como la administración Trump y sus calcos de Brasil, Hungría, Israel, India y otros lugares, están en proceso de redactar una legislación de emergencia draconiana que tendrá un objetivo de más largo plazo que el inmediato de prevenir el contagio.
Los gobiernos occidentales llegarán a la conclusión de que ha llegado el momento de reforzar el sistema inmunológico del capitalismo contra su propia gente. El riesgo es que, cuando tengan la oportunidad, empezarán a tratarnos a nosotros, no al virus, como la verdadera plaga.
jonathan-cook.net
Banco de Inglaterra imprimirá billetes «sin límite» mientras dure la crisis
El Banco de Inglaterra financiará el gasto de crisis del gobierno británico durante la pandemia del coronavirus.
Sede del Banco de Inglaterra en Londres. Foto: Flickr / Images George Rex
BILLETES
09 de abril de 2020, 13:04hs LR21El Banco de Inglaterra comenzará a imprimir billetes «sin límite» a
fin de poder financiar el gasto que el gobierno tenga que hacer durante
la crisis del coronavirus.
El Tesoro de Su Majestad ha anunciado que extenderá su permisividad de sobregiro al Banco de Inglaterra en una nueva señal de la creciente presión financiera sobre el gobierno causada por el bloqueo de la economía impuesto por COVID-19.
Mientras en las calles del Reino Unido se especula que la cuarentena se extenderá por un tiempo más, el Tesoro dijo que necesitaba potencia adicional para respaldar su flujo de caja y garantizar que los mercados financieros funcionen sin problemas.
«El Banco de Inglaterra y el Tesoro han acordado extender temporalmente el uso de la línea de crédito del Gobierno. Como una medida temporal, esto proporcionará una fuente adicional de liquidez a corto plazo en caso de que sea necesaria para manejar su flujo de caja y apoyar el funcionamiento ordenado de los mercados durante el tiempo de interrupción provocada por el Covid-19″, explicaron en un comunicado conjunto.
El cierre repentino de empresas en el reino y el paro de los trabajadores ha provocado que se agoten los ingresos fiscales, lo que obligó al Tesoro a recurrir a este servicio.
“El gobierno recaudará el financiamiento a través de los mercados de deuda y continúa utilizando los mercados como fuente de financiamiento. Por ejemplo, ha habido cuatro subastas de deuda esta semana y todas han tenido éxito”, dijo un portavoz de la oficina del primer ministro.
Según publica el diario británico The Guardian, algunos analistas creen que el costo del bloqueo por la pandemia, que probablemente implique un mínimo de £200 mil millones de préstamos en el año financiero actual, eventualmente obligará al gobierno a adoptar el financiamiento monetario.
“Es bienvenido que el Banco de Inglaterra esté usando su poder para crear dinero para financiar directamente el gasto del gobierno, después de negar que tal herramienta estaba sobre la mesa. El financiamiento monetario directo le permite al gobierno hacer los gastos necesarios para salvar vidas, al tiempo que asegura al público que no se verán sobrecargados con futuros pagos de la deuda», dijo Fran Boait, director ejecutivo de la organización de investigación financiera Positive Money.
«Esta es otra indicación de la escala sin precedentes de lo que está sucediendo», comentó por su parte el economista europeo en jefe de la gerencia de inversiones del Jefferies Investment Bank.
URUGUAY
Olla popular en Villa Garcia,
El Tesoro de Su Majestad ha anunciado que extenderá su permisividad de sobregiro al Banco de Inglaterra en una nueva señal de la creciente presión financiera sobre el gobierno causada por el bloqueo de la economía impuesto por COVID-19.
Mientras en las calles del Reino Unido se especula que la cuarentena se extenderá por un tiempo más, el Tesoro dijo que necesitaba potencia adicional para respaldar su flujo de caja y garantizar que los mercados financieros funcionen sin problemas.
«El Banco de Inglaterra y el Tesoro han acordado extender temporalmente el uso de la línea de crédito del Gobierno. Como una medida temporal, esto proporcionará una fuente adicional de liquidez a corto plazo en caso de que sea necesaria para manejar su flujo de caja y apoyar el funcionamiento ordenado de los mercados durante el tiempo de interrupción provocada por el Covid-19″, explicaron en un comunicado conjunto.
Dinero a la calle
En condiciones usuales, esta capacidad de sobregiro es de £400 millones, pero en tiempos de crisis el directorio puede aumentarlo a demanda. Por ejemplo, durante la recesión de 2008 este aumentó a £19 mil 800 millones.El cierre repentino de empresas en el reino y el paro de los trabajadores ha provocado que se agoten los ingresos fiscales, lo que obligó al Tesoro a recurrir a este servicio.
“El gobierno recaudará el financiamiento a través de los mercados de deuda y continúa utilizando los mercados como fuente de financiamiento. Por ejemplo, ha habido cuatro subastas de deuda esta semana y todas han tenido éxito”, dijo un portavoz de la oficina del primer ministro.
Según publica el diario británico The Guardian, algunos analistas creen que el costo del bloqueo por la pandemia, que probablemente implique un mínimo de £200 mil millones de préstamos en el año financiero actual, eventualmente obligará al gobierno a adoptar el financiamiento monetario.
“Es bienvenido que el Banco de Inglaterra esté usando su poder para crear dinero para financiar directamente el gasto del gobierno, después de negar que tal herramienta estaba sobre la mesa. El financiamiento monetario directo le permite al gobierno hacer los gastos necesarios para salvar vidas, al tiempo que asegura al público que no se verán sobrecargados con futuros pagos de la deuda», dijo Fran Boait, director ejecutivo de la organización de investigación financiera Positive Money.
«Esta es otra indicación de la escala sin precedentes de lo que está sucediendo», comentó por su parte el economista europeo en jefe de la gerencia de inversiones del Jefferies Investment Bank.
URUGUAY
Plataformas colaborativas: Dos sitios conectan información sobre ollas populares con sus eventuales donantes
9 de abril de 2020 |
En casa
| Foto:
Mariana Greif - LA DIARIA
Desde el sector tecnológico, dos equipos de desarrolladores
decidieron tomar de forma independiente la iniciativa de facilitar el
acceso a las ollas populares que se van multiplicando por todo el país.
Con mayor o menor organización, estas comidas solidarias recurren a los medios de comunicación para que difundan su tarea, pero por medio de estas herramientas pueden sistematizar el trabajo.
“Encontramos una iniciativa muy buena por parte de #ParandoLaOlla, quienes crearon un mapa con la ubicación en todo Uruguay. Lo que queremos con ollaspopulares.com es potenciar esta idea”, explican tres emprendedores que prefieren mantener sus nombres al margen. “Vimos que tenían un mapa estático, donde te tenías que poner en contacto con el administrador. Nuestra intención fue dar acceso público al registro de ollas o centros que reciben donaciones y también a los que quieran gestionar directamente con ellos. O sea, queremos lograr que tengan independencia para ingresar los datos, de manera de hacer algo más colaborativo para obtener más visibilidad. El objetivo es dar una mano. Hicimos todo esto de forma anónima porque no nos interesa obtener ningún rédito; sólo queremos ayudar a organizar un poco mejor. Salimos con esto hace dos fines de semana: todo surgió un viernes de tarde, escuchando en la radio la lista de ollas, y en la noche, en el informativo, de nuevo, pero era todo con base en la buena fe. Entre sábado y domingo generamos la plataforma y la publicamos de madrugada”.
Dicen que lo ideal sería potenciar esfuerzos con otras plataformas del estilo. Desde que empezaron reciben entre cinco y diez correos semanales con solicitudes de apoyo o para saber cómo donar. Incluso les han ofrecido mano de obra y desarrollo de software para el sitio. El flujo es continuo, aseguran, y para Semana de Turismo se ubica por encima de lo esperado.
El proyecto es de alcance nacional, y por el momento tienen tres ollas registradas fuera de Montevideo: en Toledo (Canelones), una familia en Quebracho (Maldonado) y en Paysandú. En el sitio figura la opción de indicar los días y horarios de servicio que ofrecen.
Por el momento no han recibido notificaciones de bajas. En cambio, hubo agregados, como en el barrio Casavalle, donde un comedor se encargaba de servir la leche de tarde y este mes empezó a dar la cena. “Alguna gente que hace donaciones nos ha escrito para balancear y ser equitativos con lo que recibe cada olla”, cuentan.
Se presentan como “un sitio web responsivo y una plataforma modificada de ecommerce para poder sumarle donaciones”. Por eso la zona de precios de los productos está en cero.
“Lo que estaba pasando con las ollas populares es que dicen las cosas que precisan, en la tele, en los diarios, pero después quedan medio solos. La idea era facilitarles otro canal, donde pusimos los productos que se pueden precisar para que puedan elegirlos y que termine en una interconexión. Hace poco me llamó una muchacha de Rivera que quería donar y no sabía qué ollas había en su departamento. Falta eso, el nexo. La idea es que vos elijas los ingredientes, veas a qué olla popular querés que vayan y les mandes un mensaje de texto (para eso nos dan los teléfonos)”.
Como es imposible que la plataforma resuelva la logística, donante y receptor deben coordinar la forma de entrega. “La mayoría de las ollas populares hacen comidas similares, y ahora sumamos productos que también precisan, como alcohol en gel. Queremos tener feedback de ellos. Los que más comúnmente se dona son cosas accesibles, como fideos, y conseguir carne es lo más complicado. Si no, terminan haciendo la olla con lo que pueden o, como anoche, que miraba el informativo y en algunas partes había filas de gente esperando, no tenían con qué hacerla y se iban llorando para la casa”.
Entre interesados en registrar sus ollas y comedores con ganas de recibir donaciones, les están llegando pedidos desde Fray Bentos hasta Montevideo, sumando unos 170 contactos que todavía trabajan para cargar en la página.
Con mayor o menor organización, estas comidas solidarias recurren a los medios de comunicación para que difundan su tarea, pero por medio de estas herramientas pueden sistematizar el trabajo.
“Encontramos una iniciativa muy buena por parte de #ParandoLaOlla, quienes crearon un mapa con la ubicación en todo Uruguay. Lo que queremos con ollaspopulares.com es potenciar esta idea”, explican tres emprendedores que prefieren mantener sus nombres al margen. “Vimos que tenían un mapa estático, donde te tenías que poner en contacto con el administrador. Nuestra intención fue dar acceso público al registro de ollas o centros que reciben donaciones y también a los que quieran gestionar directamente con ellos. O sea, queremos lograr que tengan independencia para ingresar los datos, de manera de hacer algo más colaborativo para obtener más visibilidad. El objetivo es dar una mano. Hicimos todo esto de forma anónima porque no nos interesa obtener ningún rédito; sólo queremos ayudar a organizar un poco mejor. Salimos con esto hace dos fines de semana: todo surgió un viernes de tarde, escuchando en la radio la lista de ollas, y en la noche, en el informativo, de nuevo, pero era todo con base en la buena fe. Entre sábado y domingo generamos la plataforma y la publicamos de madrugada”.
Dicen que lo ideal sería potenciar esfuerzos con otras plataformas del estilo. Desde que empezaron reciben entre cinco y diez correos semanales con solicitudes de apoyo o para saber cómo donar. Incluso les han ofrecido mano de obra y desarrollo de software para el sitio. El flujo es continuo, aseguran, y para Semana de Turismo se ubica por encima de lo esperado.
El proyecto es de alcance nacional, y por el momento tienen tres ollas registradas fuera de Montevideo: en Toledo (Canelones), una familia en Quebracho (Maldonado) y en Paysandú. En el sitio figura la opción de indicar los días y horarios de servicio que ofrecen.
Por el momento no han recibido notificaciones de bajas. En cambio, hubo agregados, como en el barrio Casavalle, donde un comedor se encargaba de servir la leche de tarde y este mes empezó a dar la cena. “Alguna gente que hace donaciones nos ha escrito para balancear y ser equitativos con lo que recibe cada olla”, cuentan.
Comercio electrónico modificado
Fabricio Álvarez, Fabián Delgado y Martín Pérez están “a full” con ollapopular.uy, que empezó a funcionar anteayer. Hace cuestión de cuatro días que estos ingenieros y analistas en informática venían armando el sitio con la idea de poner en valor alguna información que ya circulaba: “vimos algo en Twitter, el Ministerio de Desarrollo Social tenía algún Power Point y algunas intendencias se están organizando. A nosotros se nos ocurrió esto para facilitar las donaciones, pusimos la búsqueda por cercanía y le dimos formato web, no sólo de mapa”, indicó Álvarez.Se presentan como “un sitio web responsivo y una plataforma modificada de ecommerce para poder sumarle donaciones”. Por eso la zona de precios de los productos está en cero.
“Lo que estaba pasando con las ollas populares es que dicen las cosas que precisan, en la tele, en los diarios, pero después quedan medio solos. La idea era facilitarles otro canal, donde pusimos los productos que se pueden precisar para que puedan elegirlos y que termine en una interconexión. Hace poco me llamó una muchacha de Rivera que quería donar y no sabía qué ollas había en su departamento. Falta eso, el nexo. La idea es que vos elijas los ingredientes, veas a qué olla popular querés que vayan y les mandes un mensaje de texto (para eso nos dan los teléfonos)”.
Como es imposible que la plataforma resuelva la logística, donante y receptor deben coordinar la forma de entrega. “La mayoría de las ollas populares hacen comidas similares, y ahora sumamos productos que también precisan, como alcohol en gel. Queremos tener feedback de ellos. Los que más comúnmente se dona son cosas accesibles, como fideos, y conseguir carne es lo más complicado. Si no, terminan haciendo la olla con lo que pueden o, como anoche, que miraba el informativo y en algunas partes había filas de gente esperando, no tenían con qué hacerla y se iban llorando para la casa”.
Entre interesados en registrar sus ollas y comedores con ganas de recibir donaciones, les están llegando pedidos desde Fray Bentos hasta Montevideo, sumando unos 170 contactos que todavía trabajan para cargar en la página.
Alberti: "Hay gente con hambre"
Martes, 31 Marzo 2020 13:13 - PORTAL PIT-CNT
Y un día el planeta volvió a crujir y las personas se encerraron en
sus casas y millones por todas partes se quedaron sin saber qué hacer ni
qué decir. El miedo muchas veces paraliza.
Las rutinas cambiaron, casi todo fue distante, remoto o virtual y hasta los abrazos se quedaron solos.
En nuestro país, decenas de miles -por ahora o vaya saber hasta cuándo- se quedaron sin trabajo. Sin un plato de comida para sus familias. Así de crudo es el tiempo presente para los que viven de su trabajo, casi siempre al día, con facturas impagas que se acumulan porque los vencimientos no saben de empatía.
Inmediatamente que la realidad impactó de lleno en la clase trabajadora, el movimiento sindical hizo lo que hace siempre, ni más ni menos. Y así comenzó a desplegar su tejido solidario a partir del compromiso histórico de sindicatos, federaciones, militantes anónimos, veteranos y veteranas de otros tiempos y otras batallas, en las que la solidaridad -tal como ahora- se ocupó de multiplicar la esperanza.
Cada madrugada, en la sede del PIT-CNT, militantes sindicales, y voluntarios que se ofrecen para dar una mano, ordenan y clasifican los alimentos que se acopian a la espera de ser trasladados a ollas populares, a comedores y distintos puntos en los que la palabra hambre no repara en colores, ni divisas, ni nada.
"No es como en otras crisis, porque por ejemplo allá por el 2002, los militantes sindicales, sociales, nos amontonábamos para dar una mano, éramos miles por todas partes tratando de hacer algo por los que estaban peor, pero ahora estamos viviendo una pandemia y eso nos requiere otros cuidados, y debemos ajustarnos a las recomendaciones sanitarias para cuidar la salud de la población". Así lo explicó al Portal del PIT-CNT, la responsable de organización de la central sindical, Laura Alberti.
De acuerdo a las pautas internacionales y recomendaciones de la OMS, la distancia social es clave para prevenir el avance del coronavirus COVID-19.
Por ello, desde la Secretaría de Organización del PIT-CNT se tomaron los recaudos necesarios para respetar las indicaciones y cuidar la salud de las personas. "En este contexto de pandemia, organizar la solidaridad es mucho más complejo de lo que se puede imaginar", explicó Alberti.
A la sede de la central, llegan camiones cargados de alimentos donados por sindicatos, cooperativas, pequeños y medianos emprendimientos que hacen sus aportes de manera anónima, pero también llegan familias, vecinas y vecinos, con lo que pueden. "Hay quienes vienen con un paquete de fideos y nos dicen 'esto es lo que puedo donar, compañeros, perdón que no tengo más para ayudar' y eso es impresionante, ver cómo hasta la gente que no tiene casi nada y que seguramente la está pasando mal, viene y da algo para ayudar a otro que también la está pasando mal".
Alberti aseguró que jamás se imaginó algo como lo que estamos viviendo a nivel mundial. "Si bien sabíamos que la realidad que nos esperaba a las trabajadoras y trabajadores en nuestro país iba a ser difícil, con escenarios complejos en los Consejos de Salarios, nunca pensamos en esto que está pasando".
La frialdad de las cifras no suele traducir la cruda realidad. "Hay gente que tiene hambre y tenemos que asistirla porque eso el mercado no lo soluciona, ahí tenemos que estar los trabajadores y las trabajadoras organizados".
Según contó Alberti al Portal, son innumerables las muestras de solidaridad de gente que llega durante todo el día a la sede de la central para ofrecer una mano. "Es como dice el Turco (Marcelo Abdala) que la gente no da lo que le sobra sino que lo que le falta, en este sentido es emocionante la respuesta solidaria de la inmensa mayoría. Pero también hay unos pocos, que pasan en auto y te gritan un insulto. Vienen familias caminando de lejos, para traer un paquete de arroz o de fideos, que es todo lo que pueden dar, se ofrecen como voluntarios para ayudar y por otra parte, hay unos poquitos que pasan y gritan un insulto y se ríen". Lejos de amedrentar, Alberti dice que son cosas que tonifican. "Como dice el dicho, hasta una patada te empuja hacia adelante. Nos emociona y nos compromete cada día más, cada gesto solidario por pequeño que sea, pero también nos hace más fuertes cuando nos atacan y nos pretenden callar. Nos enorgullecemos de ser trabajadoras y trabajadores, de ser militantes sindicales".
Las rutinas cambiaron, casi todo fue distante, remoto o virtual y hasta los abrazos se quedaron solos.
En nuestro país, decenas de miles -por ahora o vaya saber hasta cuándo- se quedaron sin trabajo. Sin un plato de comida para sus familias. Así de crudo es el tiempo presente para los que viven de su trabajo, casi siempre al día, con facturas impagas que se acumulan porque los vencimientos no saben de empatía.
Inmediatamente que la realidad impactó de lleno en la clase trabajadora, el movimiento sindical hizo lo que hace siempre, ni más ni menos. Y así comenzó a desplegar su tejido solidario a partir del compromiso histórico de sindicatos, federaciones, militantes anónimos, veteranos y veteranas de otros tiempos y otras batallas, en las que la solidaridad -tal como ahora- se ocupó de multiplicar la esperanza.
Cada madrugada, en la sede del PIT-CNT, militantes sindicales, y voluntarios que se ofrecen para dar una mano, ordenan y clasifican los alimentos que se acopian a la espera de ser trasladados a ollas populares, a comedores y distintos puntos en los que la palabra hambre no repara en colores, ni divisas, ni nada.
"No es como en otras crisis, porque por ejemplo allá por el 2002, los militantes sindicales, sociales, nos amontonábamos para dar una mano, éramos miles por todas partes tratando de hacer algo por los que estaban peor, pero ahora estamos viviendo una pandemia y eso nos requiere otros cuidados, y debemos ajustarnos a las recomendaciones sanitarias para cuidar la salud de la población". Así lo explicó al Portal del PIT-CNT, la responsable de organización de la central sindical, Laura Alberti.
De acuerdo a las pautas internacionales y recomendaciones de la OMS, la distancia social es clave para prevenir el avance del coronavirus COVID-19.
Por ello, desde la Secretaría de Organización del PIT-CNT se tomaron los recaudos necesarios para respetar las indicaciones y cuidar la salud de las personas. "En este contexto de pandemia, organizar la solidaridad es mucho más complejo de lo que se puede imaginar", explicó Alberti.
"Aquí estamos"
La solidaridad ha sido una constante a lo largo de la rica historia del movimiento sindical, como así también de las organizaciones sociales que hoy día se nuclean en la Intersocial.A la sede de la central, llegan camiones cargados de alimentos donados por sindicatos, cooperativas, pequeños y medianos emprendimientos que hacen sus aportes de manera anónima, pero también llegan familias, vecinas y vecinos, con lo que pueden. "Hay quienes vienen con un paquete de fideos y nos dicen 'esto es lo que puedo donar, compañeros, perdón que no tengo más para ayudar' y eso es impresionante, ver cómo hasta la gente que no tiene casi nada y que seguramente la está pasando mal, viene y da algo para ayudar a otro que también la está pasando mal".
Alberti aseguró que jamás se imaginó algo como lo que estamos viviendo a nivel mundial. "Si bien sabíamos que la realidad que nos esperaba a las trabajadoras y trabajadores en nuestro país iba a ser difícil, con escenarios complejos en los Consejos de Salarios, nunca pensamos en esto que está pasando".
La frialdad de las cifras no suele traducir la cruda realidad. "Hay gente que tiene hambre y tenemos que asistirla porque eso el mercado no lo soluciona, ahí tenemos que estar los trabajadores y las trabajadoras organizados".
Odio y veneno puntocom
Tal como lo ha denunciado el presidente del PIT-CNT, Fernando Pereira, el movimiento sindical ha sido objeto de ataques informáticos, algunos dirigentes han sido amenazados de muerte y desde cuentas generalmente anónimas en redes sociales, se ha desplegado una campaña sistemática cargada de odio. Uno de los adjetivos más utilizados es "mugrientos". Pero también se apela a "muertos de hambre", entre decenas de epítetos.Según contó Alberti al Portal, son innumerables las muestras de solidaridad de gente que llega durante todo el día a la sede de la central para ofrecer una mano. "Es como dice el Turco (Marcelo Abdala) que la gente no da lo que le sobra sino que lo que le falta, en este sentido es emocionante la respuesta solidaria de la inmensa mayoría. Pero también hay unos pocos, que pasan en auto y te gritan un insulto. Vienen familias caminando de lejos, para traer un paquete de arroz o de fideos, que es todo lo que pueden dar, se ofrecen como voluntarios para ayudar y por otra parte, hay unos poquitos que pasan y gritan un insulto y se ríen". Lejos de amedrentar, Alberti dice que son cosas que tonifican. "Como dice el dicho, hasta una patada te empuja hacia adelante. Nos emociona y nos compromete cada día más, cada gesto solidario por pequeño que sea, pero también nos hace más fuertes cuando nos atacan y nos pretenden callar. Nos enorgullecemos de ser trabajadoras y trabajadores, de ser militantes sindicales".
Abigail Puig (FUECYS): "No sabemos cómo será el día después pero sí sabemos que hoy miles la están pasando mal"
Martes, 07 Abril 2020 19:31 - PORTAL PIT-CNT
Foto: Carlos Lebrato
Y un día la vida cambió en cuestión de horas. El silencio invadió los
shoppings, las grandes tiendas quedaron sin gente, los estadios vacíos,
las canchas sin gritos, y ya no hubo razón para los cánticos, ni las
banderas, ni los carros con hamburguesas, choripanes o refrescos.
En Uruguay, como en tantas otras partes del mundo, el coronavirus impactó de lleno en el comercio y ya se cuentan por decenas de miles las personas que vieron afectada su fuente de ingreso desde que el COVID-19 fue oficialmente diagnosticado en nuestro país. Desde entonces y en muy pocos días, la fragilidad de muchos vínculos laborales, el informalismo, la precarización del trabajo, la tercerización incluso hasta en el propio Estado, que ya habían sido denunciados por el movimiento sindical en los últimos años, ahora han quedado aún más expuestos como cara brutal del sistema que suele apelar a eufemismos para intentar suavizan lo escabroso.
En este contexto, hay sectores del comercio que se encuentran en situación crítica, sin saber cómo afrontar el día a día, al tiempo que otros han visto incrementadas sus ventas, como notoriamente ha sido el caso de los supermercados, y sus trabajadores han comenzado a tener que enfrentar otro tipo de problemáticas vinculadas a los riesgos sanitarios, exposición a posibles contagios ante la falta de cumplimiento de las normas pactadas para el ingreso y permanencia dentro de los locales, así como también, las dificultades inherentes a la reducción de las frecuencias del transporte colectivo, con sus derivaciones directas en materia de inseguridad y la demora de hasta tres horas para llegar de retorno a casa.
Según informó al Portal del PIT-CNT la integrante del Secretariado Ejecutivo, Abigail Puig, en la actual coyuntura, es imprescindible que las empresas cumplan lo acordado y controlen el ingreso y permanencia del público dentro de los supermercados. "Estamos en una semana especial en la que históricamente los supermercados se llenan de gente". Puig, quien además es secretaria de organización de la Federación Uruguaya de Empleados de Comercio y Servicios (FUECYS) explicó que en muchos casos al día de hoy las empresas no están realizando los controles de ingreso y tampoco se respeta que haya una persona del núcleo familiar por carro. Esto sucede porque la empresas alegan que no quieren tener enfrentamientos ni rispideces con las familias. "Hay cadenas que publicitan en TV sus comerciales con recomendaciones pero luego no controlan sus puertas", enfatizó.
Otra de las particularidades que FUECYS cuestiona es que dentro de los locales se puede ver a muchas familias asistir con niños, niñas y bebes. "Es un problema de actitud de la gente, claramente, pero también es importante que todos los supermercados controlen el ingreso".
Si bien algunas empresas ya disponen de protocolos de ingreso y permanencia, la seguridad laboral y las medidas preventivas para evitar la propagación del virus terminan quedando a consideración y voluntad de cada establecimiento.
En relación a la reducción de las frecuencias de distintas líneas de trasporte, Puig mencionó que algunas empresas aceptaron reducir la carga horaria de su personal para facilitar el retorno a sus hogares. "Hay quienes tardan dos o tres horas más de lo habitual en llegar a sus casas, especialmente la gente que tiene que tomar los ómnibus interdepartamentales. Hay cadenas que redujeron una hora e incluso dos el horario de atención al público pero el problema es que al haber muy poca gente en la calle, las trabajadoras y trabajadores del comercio quedan expuestos a la soledad de la calle y eso implica un mayor riesgo ante la inseguridad". En este aspecto, FUECYS elevó un planteo para que se considere la reducción del horario de funcionamiento de los supermercados, estableciendo como tope de funcionamiento las 19 horas. En este sentido, desde el sector empresarial se rechazó cualquier alternativa que implicara la reducción del horario de atención, así como también, la reducción del horario laboral sin pérdida salarial.
Puig informó al Portal que hay empresas por ejemplo del sector informático y call center, que han mutado su realidad y la han adaptado al teletrabajo como forma de seguir adelante y mantener a sus trabajadores en sus casas. Según explicó la secretaria de organización de la Federación, desde la organización sindical se peleó por el reconocimiento de las nuevas condiciones laborales para que quienes ejercen ahora el teletrabajo no se vean perjudicados por los gastos extra de Internet, luz y agua de sus hogares.
"Hasta el momento, una empresa de call center aseguró una partida extra para que sus trabajadores afronten esos gastos, habrá que seguir insistiendo para que otras también lo entiendan".
De todos modos, Puig dijo que muchas de las problemáticas que se están planteando surgen como parte de un fenómeno nuevo, y que hay que analizar los escenarios actuales y futuros. "Todo indica que esto va a ser un proceso largo, que llevará meses, y deberemos comprender eso para analizar qué va a pasar después. Si estos trabajadores van a volver a sus lugares físicos de trabajo anteriores o si seguirán desarrollando el teletrabajo".
Para FUECYS, son muchas las interrogantes y menos las certezas de cómo se saldrá de esta pandemia y emergencia sanitaria, y cuáles serán las consecuencias del impacto en el mundo del trabajo.
"No sabemos cómo será ese día después, lo que sí sabemos es que hoy hay muchos trabajadores y trabajadoras sin poder cubrir sus necesidades básicas elementales, o en seguro de paro, o en condiciones muy precarias. Eso sí lo sabemos y de eso nos tenemos que ocupar como sociedad y como movimiento sindical". En este sentido, mencionó que las empresa deben asegurar el complemento económico salarial para sus trabajadores y trabajadoras enviados al seguro de paro. "Especialmente las grandes tiendas de ropa que en estos últimos quince años se han desarrollado de manera notoria dentro y fuera del país", acotó.
Por último, Puig destacó el rol de quienes desempeñan tareas de atención para la población. "Las compañeras y compañeros de la salud están en la primera línea y la sociedad debe seguir destacando su desempeño cotidiano. En otra línea, hay mucha gente que atiende a la población y que son muy necesarios, en los supermercados, en la alimentación, en el reparto del gas, en muchísimas áreas que no siempre tienen visibilidad y son realmente básicas para la gente".
En Uruguay, como en tantas otras partes del mundo, el coronavirus impactó de lleno en el comercio y ya se cuentan por decenas de miles las personas que vieron afectada su fuente de ingreso desde que el COVID-19 fue oficialmente diagnosticado en nuestro país. Desde entonces y en muy pocos días, la fragilidad de muchos vínculos laborales, el informalismo, la precarización del trabajo, la tercerización incluso hasta en el propio Estado, que ya habían sido denunciados por el movimiento sindical en los últimos años, ahora han quedado aún más expuestos como cara brutal del sistema que suele apelar a eufemismos para intentar suavizan lo escabroso.
En este contexto, hay sectores del comercio que se encuentran en situación crítica, sin saber cómo afrontar el día a día, al tiempo que otros han visto incrementadas sus ventas, como notoriamente ha sido el caso de los supermercados, y sus trabajadores han comenzado a tener que enfrentar otro tipo de problemáticas vinculadas a los riesgos sanitarios, exposición a posibles contagios ante la falta de cumplimiento de las normas pactadas para el ingreso y permanencia dentro de los locales, así como también, las dificultades inherentes a la reducción de las frecuencias del transporte colectivo, con sus derivaciones directas en materia de inseguridad y la demora de hasta tres horas para llegar de retorno a casa.
Según informó al Portal del PIT-CNT la integrante del Secretariado Ejecutivo, Abigail Puig, en la actual coyuntura, es imprescindible que las empresas cumplan lo acordado y controlen el ingreso y permanencia del público dentro de los supermercados. "Estamos en una semana especial en la que históricamente los supermercados se llenan de gente". Puig, quien además es secretaria de organización de la Federación Uruguaya de Empleados de Comercio y Servicios (FUECYS) explicó que en muchos casos al día de hoy las empresas no están realizando los controles de ingreso y tampoco se respeta que haya una persona del núcleo familiar por carro. Esto sucede porque la empresas alegan que no quieren tener enfrentamientos ni rispideces con las familias. "Hay cadenas que publicitan en TV sus comerciales con recomendaciones pero luego no controlan sus puertas", enfatizó.
Otra de las particularidades que FUECYS cuestiona es que dentro de los locales se puede ver a muchas familias asistir con niños, niñas y bebes. "Es un problema de actitud de la gente, claramente, pero también es importante que todos los supermercados controlen el ingreso".
Si bien algunas empresas ya disponen de protocolos de ingreso y permanencia, la seguridad laboral y las medidas preventivas para evitar la propagación del virus terminan quedando a consideración y voluntad de cada establecimiento.
En relación a la reducción de las frecuencias de distintas líneas de trasporte, Puig mencionó que algunas empresas aceptaron reducir la carga horaria de su personal para facilitar el retorno a sus hogares. "Hay quienes tardan dos o tres horas más de lo habitual en llegar a sus casas, especialmente la gente que tiene que tomar los ómnibus interdepartamentales. Hay cadenas que redujeron una hora e incluso dos el horario de atención al público pero el problema es que al haber muy poca gente en la calle, las trabajadoras y trabajadores del comercio quedan expuestos a la soledad de la calle y eso implica un mayor riesgo ante la inseguridad". En este aspecto, FUECYS elevó un planteo para que se considere la reducción del horario de funcionamiento de los supermercados, estableciendo como tope de funcionamiento las 19 horas. En este sentido, desde el sector empresarial se rechazó cualquier alternativa que implicara la reducción del horario de atención, así como también, la reducción del horario laboral sin pérdida salarial.
Ancho y ajeno
El mundo laboral que abarca FUECYS supone un universo de realidades disímiles. En la actualidad, las cortinas de hierro han bajado de manera intempestiva en vastos sectores del comercio y los servicios, tales como peluquerías, free shops de frontera, vendedores ambulantes, cuidacoches, pancheros, talleres, tiendas, shoppings, servicios tercerizados de limpieza, el área vinculada a los deportes y los espectáculos deportivos y eventos. En ese amplio abanico del mundo del trabajo del comercio y los servicios, decenas de miles de trabajadoras y trabajadores o bien han sido enviados al seguro de paro -en los casos que eso era posible- o directamente se quedaron sin nada.Puig informó al Portal que hay empresas por ejemplo del sector informático y call center, que han mutado su realidad y la han adaptado al teletrabajo como forma de seguir adelante y mantener a sus trabajadores en sus casas. Según explicó la secretaria de organización de la Federación, desde la organización sindical se peleó por el reconocimiento de las nuevas condiciones laborales para que quienes ejercen ahora el teletrabajo no se vean perjudicados por los gastos extra de Internet, luz y agua de sus hogares.
"Hasta el momento, una empresa de call center aseguró una partida extra para que sus trabajadores afronten esos gastos, habrá que seguir insistiendo para que otras también lo entiendan".
De todos modos, Puig dijo que muchas de las problemáticas que se están planteando surgen como parte de un fenómeno nuevo, y que hay que analizar los escenarios actuales y futuros. "Todo indica que esto va a ser un proceso largo, que llevará meses, y deberemos comprender eso para analizar qué va a pasar después. Si estos trabajadores van a volver a sus lugares físicos de trabajo anteriores o si seguirán desarrollando el teletrabajo".
Para FUECYS, son muchas las interrogantes y menos las certezas de cómo se saldrá de esta pandemia y emergencia sanitaria, y cuáles serán las consecuencias del impacto en el mundo del trabajo.
"No sabemos cómo será ese día después, lo que sí sabemos es que hoy hay muchos trabajadores y trabajadoras sin poder cubrir sus necesidades básicas elementales, o en seguro de paro, o en condiciones muy precarias. Eso sí lo sabemos y de eso nos tenemos que ocupar como sociedad y como movimiento sindical". En este sentido, mencionó que las empresa deben asegurar el complemento económico salarial para sus trabajadores y trabajadoras enviados al seguro de paro. "Especialmente las grandes tiendas de ropa que en estos últimos quince años se han desarrollado de manera notoria dentro y fuera del país", acotó.
Por último, Puig destacó el rol de quienes desempeñan tareas de atención para la población. "Las compañeras y compañeros de la salud están en la primera línea y la sociedad debe seguir destacando su desempeño cotidiano. En otra línea, hay mucha gente que atiende a la población y que son muy necesarios, en los supermercados, en la alimentación, en el reparto del gas, en muchísimas áreas que no siempre tienen visibilidad y son realmente básicas para la gente".
A Juan
Siola y Alvear Leal
LA TENTACIÓN INSURGENTE
por Jorge Zabalza
Hollywood y Netflix
lo venían anticipando: a la vuelta de la esquina acechaba el apocalipsis de las
pandemias. Ahora, cuando los augurios se volvieron hechos reales, la
parafernalia mediática convirtió el COVID-19 en motor de la histeria colectiva,
otro hecho real. El susto es el combustible que impulsa una nueva concentración
y centralización del capital, instrumento de la recomposición de la
reproducción ampliada. COVID-19 ocupa el lugar del cuco que dejó vacío Bin
Laden.
Como no puede crecer
y desarrollarse sin crear sus propios sepultureros, el capitalismo dio origen a
condiciones que ampararon la pandemia. Una vez instalada la peste, se disparó la
crisis que se venía cocinado hace rato. El COVID-19 es consecuencia del
capitalismo siglo XXI, no es la causa ni el responsable de la recesión y el desastre
financiero.
Aun propulsando la
campaña del miedo, las clases dominantes debieron encender una luz de esperanza:
de la crisis se sale “salvando la cadena de pagos”, consigna que debe leerse “salvar
la cadena de acreedores”, pues el objetivo indirecto del salvataje son los bancos
y los prestamistas de la deuda externa, la aristocracia financiera, en una
palabra. La ensalada la aderezaron con amenazas truculentas: si se deja de
pagar desaparece la humanidad o se cae en el caos o, lo que es peor aún, en
manos de la anarquía y el marxismo.
Esta guerra la
ganaremos entre todas y todos dice la propaganda, unidos los pobres con los
ricos, los explotados y los explotadores, frenteamplistas y fascistas, una
reedición de la fracasada “concertación nacional” de 1985. El carácter patriótico justifica la “economía
de guerra” donde todas y todos se sacrifican para salvar el sistema que los
jode. Es la bandera de la “salvación nacional”, la que arrastró pueblos enteros
a morir en las trincheras de la primera guerra mundial. Sin embargo, mientras sea
capitalista la patria no podrá ser ni para todos ni para todas, pero el anzuelo
brilla en el agua y los peces quedan enganchados.
Mientras muchos
imaginábamos el recurso a la mano dura, pero, sorpresivamente, el gobierno del
Uruguay apela a la consciencia y a exhortar como método. Una línea bien diferente
a las de Macri y Bolsonaro. Los dirigentes frenteamplistas contemplan, azorados,
como Lacalle Pou se apropia del melifluo poema político mujiquista/astorista. En
definitiva, las medidas que se han tomado para enfrentar la pandemia no
difieren demasiado de las que podría haber implementado un gobierno del Frente
Amplio en las mismas circunstancias. El asistencialismo social marcaba la diferencia
entre el neoliberalismo del trío Tabaré-Mujica-Astori y el más crudo y explícito
que propone la coalición multi reaccionaria. El nuevo discurso de Lacalle dejó
muy mal parados a los dirigentes frenteamplistas, cada vez es más difícil encontrar
las siete diferencias. Ser “oposición responsable” equivale a organizar el repliegue.
El gobierno
aprovechó los sentimientos generalizados de solidaridad despertados por la
pandemia y expropió por la fuerza a los funcionarios públicos con mayor nivel
de ingresos. La creación del fondo coronavirus ha conquistado las simpatías de
la población que no confía en los empleados estatales. La medida instala en la
sociedad el concepto de que, con determinados fines y en determinadas
circunstancias, se justifica la “solidaridad forzosa”. Este hecho entraña
cierto peligro, puede ser mal entendido, permite imaginar otras expropiaciones
forzosas y otras formas de cubrir las necesidades de los pobres.
Como su aparato estatal
y partidario hiper centralizado ha sido exitoso, el ejemplo de China se esgrime
para justificar cuarentenas obligatorias, distanciamientos sociales y
detenciones de los transgresores. Los gobiernos liberales de occidente han
sacado policías y soldados a la calle y a las carreteras, para recomendar el
encierro es cierto, pero también para vigilar y castigar a los transgresores y
la gente se va acostumbrando…
Viktor Orban, presidente de extrema derecha de
Hungría, se ha hecho otorgar poderes casi ilimitados para combatir al
coronavirus. Históricamente los períodos de recomposición del capital condujeron
a regímenes autoritarios y dictaduras como las de los años 70. Nadie puede
afirmar cómo será el mundo que dejará la pandemia, pero, sin embargo, no es
descabellado sospechar que florecerán formas e instituciones de control
policial e informático … ¡con consentimiento de la población asustada por su seguridad
sanitaria!
¿Dejaremos que la
aristocracia financiera nos siga arrastrando hacia nuevas catástrofes, llámense
pandemias, guerras al por mayor o desastres ambientales? ¿Permitiremos que se
nos impongan regímenes autoritarios de toda laya? Hay formas muy diferentes al
orden burgués y patriarcal, ¿no será momento de pensar en desarticular lo que
ha fracasado y transformarlo en otro orden, en uno para redimir a las víctimas
del capitalismo?
Un orden con mujeres
y hombres iguales entre sí, portadores de sentimientos e ideas de responsabilidad
social, solidaridad y altruismo; que hayan desechado el paradigma de la
competencia y el escalar a cualquier precio; que sean capaces de construir formas
de producir basadas en la cooperación y la propiedad social.
Un orden con relaciones
políticas basadas en el respeto entre iguales; que asegure la participación de
todas y todos en las decisiones que atañen al conjunto de la sociedad, donde el
pueblo ejerza directamente su poder.
¿No está suficientemente
claro que la democracia liberal no está hecha para transformar la sociedad sino
para perpetuar el reinado del capital? ¿No habrá que escapar del Palacio Legislativo
para dar la batalla de ideas luchando en la calle, por Verdad y Justicia, por
la igualdad de género, por el respeto a la naturaleza? ¿No habrá que salirse del
marco de un Estado de Derecho que creó la burguesía para someter y dominar las fuerzas
populares? ¿No será momento de la insurgencia en las ideas? ¿No habrá que
comenzar a entender mejor los mensajes de Ernesto Guevara y Raúl Sendic
Antonaccio?
Jorge Zabalza