miércoles, 25 de enero de 2017

Teresa Shook, la abuela jubilada que de forma involuntaria prendió la mecha de las 'Marchas de mujeres' // El derrumbe del sistema americano y la victoria de Trump // Trump ordena construir el muro con México y castiga a las ciudades que protegen a los inmigrantes // En horas, Trump anula el ATP, ataca el TLCAN y amaga con impuesto fronterizo // Estado español: Diego Cañamero apoya la lucha de los eventuales de Lipasam // Chile: Luis Mesina, vocero No + AFP: “El movimiento social tiene que seguir impulsando esta demanda” // Argentina: Gran plenario obrero en defensa de AGR y contra la flexibilización // Uruguay: Cómo nos tratan por Samuel Blixen

Teresa Shook, la abuela jubilada que de forma involuntaria prendió la mecha de las 'Marchas de mujeres'

Teresa Shook, residente en Hawai, creó un evento en Facebook que terminó por convertirse en masivo. Tamika D. Mallory, Carmen Pérez, Linda Sarsour y Bob Bland tomaron su testigo y se convirtieron en las caras visibles de un movimiento que ha devenido global.

Un instante de la 'Marcha de las mujeres' a su paso por el centro de Washington.- EFE
MADRID.- Ocurrió al poco de que se conociesen los resultados que le daban la victoria a Donald Trump sobre Hillary Clinton en las elecciones presidenciales de EEUU. Teresa Shook, una abuela jubilada residente en Hawai e indignada con la victoria del multimillonario, tuvo a bien crear un evento en Facebook —no sin antes preguntar a sus amistades cómo hacerlo— convocando a una marcha en Washington D. C para protestar contra el potentado neoyorquino. Invitó a unos 40 amigos y se fue a la cama.
Al despertar, el humilde llamamiento se había convertido en viral: más de 10.000 usuarios se habían mostrado interesados en el evento de la señora Shook. El resto es historia. Horas antes de que las calles de medio mundo se llenaran de pancartas feministas y color fucsia, eran ya más de 100.000 personas las que se habían registrado para asistir a la llamada 'Marcha de las mujeres', movimiento que va camino de convertirse en una de las más importantes movilizaciones en la historia de los Estados Unidos. 
De forma simultanea, la diseñadora de ropa Bob Bland creaba una línea de camisetas que —como le ocurriera a la señora Shook— terminó por superar todas las expectativas. Las camisetas, cuyos lemas eran 'Nasty Women' y 'Bad Hombres', recaudaron en apenas tres días cerca de 20.000 dólares.
Ambos fenómenos terminaron por confluir de la mano de Vanessa Wruble, editora de OkayAfrica y que terminaría por convertirse en jefa de operaciones de la exitosa campaña de la 'Marcha de las mujeres'. Wruble, con buen criterio, pensó que una convocatoria así no podía ser promovida únicamente por mujeres blancas, por lo que contactó con Carmen Pérez, Tamika D. Mallory y Linda Sarsour

Las caras más visibles del movimiento

De izquierda a derecha: Tamika D. Malory, Linda Sarsour, Carmen Perez y Bob Bland
Tamika D. Mallory es reconocida por ser una fervorosa defensora de la justicia social que ha trabajado estrechamente con la Administración Obama. Sus áreas de acción son la defensa de los derechos civiles, la igualdad de derechos para las mujeres, la salud, la violencia armada y el abuso policial. Su labor ha sido públicamente aplaudida hasta el punto de que Valerie B. Jarret, uno de los más importantes asesores del presidente Obama, se refirió a ella como una "líder del mañana".

Linda Sarsour ha estado en la vanguardia de las principales campañas de justicia social tanto a nivel local en Nueva York como a nivel nacional. Madre tres hijos, Sarsour es la Directora Ejecutiva de la Asociación Árabe Americana de Nueva York, cofundadora de los musulmanes de Ferguson y miembro de la Liga de la Justicia de Nueva York.

Carmen Perez ha dedicado 20 años a luchar por derechos civiles como la igualdad de género, la sanidad para inmigrantes y las políticas comunitarias. Es directora ejecutiva de The Gathering for Justice, una organización sin ánimo de lucro fundada por Harry Belafonte. Su trabajo dentro de los centros de detención juvenil y prisiones en California y Nueva York ha orientado y promovido la puesta en marcha de políticas estatales y federales.

Bob Bland dirige una empresa que está repensando el ecosistema de la moda (diseño, desarrollo y distribución) y creando un nuevo modelo de negocio que trata de transformar la producción de textil para la industria. Su objetivo es hacer despertar a la industria de la moda de Estados Unidos creando una cadena de suministro global que sea más transparente y sostenible.

A todo esto, la señora Shook, precursora involuntaria de la "turbamulta" sobre Washington, declinó la propuesta de liderar el movimiento y dio un paso atrás a la vista del cariz que habían tomado los acontecimientos. "No tenía un plan ni una idea de lo que pasaría", dijo Shook a Reuters por teléfono desde la isla de Maui. "Simplemente mantengo lo dicho, creo que debemos ponernos en marcha".



El colapso del Partido Republicano, como con mucha perspicacia supo ver William Saletan en Slate Magazine, se asemeja a un Estado fallido, y Trump es su señor de la guerra. Los Estados fallidos son aquellos en donde la autoridad central y legítima es incapaz de asegurar la integridad y bienestar de sus ciudadanos, así como el cumplimiento de la ley y de las prerrogativas gubernamentales. Un Estado que no puede comportarse como tal, y que por tanto ve aparecer en su seno una multitud de poderes menores oportunistas que arrebatan trozos de poder al Estado, gobernándolos como sus reinos de taifas.

Donald J. Trump es ahora presidente de la primera potencia mundial en decadencia, ¿exportará con su victoria también una nueva revolución conservadora?

‘Paper’

El derrumbe del sistema americano y la victoria de Trump

Obama fue en 2008 el triunfo moral y simbólico de la América progresista. El nuevo presidente de EEUU es el Obama de la otra América, la América conservadora. Pero los dos grandes partidos, Demócrata y Republicano, han implosionado
Marcos Reguera

<p>Caricatura de Donald Trump.</p>
Caricatura de Donald Trump.
Luis Grañena
14 de Enero de 2017 - CTXT
En tan solo seis días, el próximo 20 de enero, Donald J. Trump pasará de ser presidente electo a ser presidente de los Estados Unidos. Sin bien está por ver aún cuáles serán las implicaciones reales de su toma de posesión, en un plano simbólico su victoria electoral ha sacudido el mundo abriendo numerosos interrogantes sobre lo que su presidencia puede suponer para la primera potencia global y el resto de países.
Este artículo forma parte de una serie de tres análisis que desgranarán distintos aspectos de la América de Trump, las elecciones, y la futura presidencia. El objetivo es ofrecer herramientas y claves de comprensión para que las lectoras y lectores puedan interpretar las numerosas noticias que se seguirán sucediendo sobre el próximo inquilino de la Casa Blanca.
En este primer capítulo, El derrumbe del sistema americano y la victoria de Trump, se intenta ofrecer una explicación de conjunto de las causas históricas, culturales y políticas que prepararon el terreno para la victoria del magnate neoyorquino.
El precio de la globalización para el American Way & Dream:
Las expresiones “American Dream” y "American Way of Life" juegan en la cultura norteamericana el papel de ideas de consenso sobre el significado de la vida en sociedad. Son el equivalente americano a la idea europea del Estado del bienestar: las condiciones sociales que permiten que un individuo y su colectividad puedan llevar una vida plena desde el nacimiento hasta la tumba. En Europa ese marco de bienestar queda a cargo del Estado, que debe regular y atenuar las injusticias para garantizar una vida digna. En los Estados Unidos, por el contrario, se entiende que son la ausencia del Estado y las oportunidades del mercado lo que provee el bienestar para quien lo persigue. Este consenso genera dos ideas relacionadas:
El American Dream se refiere a la promesa de éxito social y una vida de riqueza para aquel que tenga la voluntad de perseguir su propio engrandecimiento y reúna los suficientes méritos individuales. El American Way of Life son las condiciones concretas que dan cuerpo al American Dream. La sociedad de consumo, la democracia, la libertad económica y de expresión, la cultura popular, los valores morales, etc. No importa que pensemos que estas ideas sean mitos. Lo importante es que rigen la mentalidad de la gente generando realidad social, aunque no siempre sea la realidad que imaginan y desean los actores que viven bajo el American Dream y el American Way.
El American Way & Dream  (como me referiré a ambos a partir de ahora) es, por lo tanto, a grandes rasgos, el contrato social de los estadounidenses.
Desde hace cincuenta años asistimos al desvanecimiento del modelo clásico del American Way & Dream, de una América blanca que progresa en una sociedad de consumo, con la promesa del éxito para el que se esfuerza y una vida en barrios residenciales.
La estampa nunca fue del todo real, aunque sí se corresponde con un momento de crecimiento sostenido y redistribución de la riqueza tras la Segunda Guerra Mundial, en lo que se llamó el consenso de Postguerra entre capital y trabajo. Estos años de crecimiento sostenido desde 1945 hasta 1973 marcaron a fuego en la mentalidad americana una imagen dorada de los Estados Unidos que no sólo se proclamaba como una realidad del momento, sino como una promesa para las generaciones venideras.
Desde hace cincuenta años asistimos al desvanecimiento del modelo clásico del ‘American Way & Dream’, de una América blanca que progresa en una sociedad de consumo
Aun así, no todos formaban parte de ese relato de recompensa al éxito económico y valores tradicionales en barrios residenciales. Los afroamericanos sufrían la segregación, los latinos vivían una marginalidad crónica y las mujeres y minorías sexuales vivían subordinadas y ninguneadas bajo las figuras patriarcales del marido y hombre blanco heteronormativo. El American Way & Dream no sólo era homogéneo, sino que además era terriblemente excluyente.
Desde los años sesenta del siglo XX las minorías raciales y sexuales, las mujeres y muchos progresistas se han aliado en la lucha por los derechos civiles, que ha recuperado la tradición de la lucha contra la esclavitud para construir unos Estados Unidos más inclusivos. Sus reivindicaciones no tienen por objetivo acabar con el American Way & Dream, sino conseguir que se cumpla para toda la población su hipotético punto de partida: la igualdad de oportunidades, es decir, igualdad de acceso a la competición económica.
Con la firma del acta de derechos civiles del presidente Johnson en 1964 se terminaba de cimentar una lucha legal de largo recorrido, y se codificaba el esfuerzo de las protestas por los derechos civiles, saltando estos de las calles a la política institucional en el Partido Demócrata. Éste se convirtió desde ese momento en el partido de los derechos civiles y las minorías. En esa época muchos jóvenes entrarán en el partido atraídos por su mensaje moderno y por los vientos de cambio, incluso muchos republicanos, como Hillary Clinton a finales de los años sesenta.
Pero el American Way & Dream  no sólo se vería alterado por la paulatina (e incompleta) inclusión de los excluidos, sino que además se vería contestado por otro fenómeno distinto pero paralelo (temporalmente hablando) y es el fin de los Estados Unidos como la "Fábrica del Mundo".
Nixon fue el primero en sentenciar el modelo económico de postguerra salido de la conferencia de Bretton Woods. Con sus políticas económicas iniciaría la Era Neoliberal 
Desde el inicio de la Segunda Guerra Mundial los Estados Unidos habían sido el principal productor global de bienes manufactureros orientados al mercado mundial, lo que creó veinte años de bonanza que permitieron cimentar el American Way & Dream como una sociedad industrial y de consumo con posibilidades económicas casi ilimitadas. Pero esto comenzó a cambiar con la recuperación económica de las zonas europeas devastadas por la guerra (el despegue alemán y la configuración de la Comunidad Económica Europea), así como por la industrialización de sociedades agrarias del tercer mundo, en especial las economías asiáticas, que comenzando por Japón, seguido por los Tigres Asiáticos y con la incorporación final de China han configurado un nuevo bloque mundial que ha desplazado el centro económico del océano Atlántico al Pacífico. Dichas sociedades pasaron de ser mercados estadounidenses a competidores económicos de manera simultánea. Si a esto le sumamos que la reforma monetaria de Nixon y la situación de estanflación del momento dispararon la crisis del petróleo de 1973 y la descompensación entre oferta de bienes producidos, muy superior a la capacidad de consumo interno norteamericano, tenemos que a principio de los años setenta se generaron las condiciones para que los Estados Unidos no pudieran sostener el ritmo de crecimiento económico necesario para mantener el American Way & Dream, y de esta manera surgió la necesidad de reformar la economía para sostener el modo de vida americano.
Nixon fue el primero en sentenciar el modelo económico de postguerra salido de la conferencia de Bretton Woods. Con sus políticas económicas iniciaría la Era Neoliberal a través de su reforma monetaria, con la abolición definitiva del patrón oro y su sustitución por el dólar como patrón de referencia para la convertibilidad global, y la apertura de los Estados Unidos a la economía china con su visita a Pekín, preparó la economía norteamericana para una globalización que ya estaba desde hace tiempo en marcha por la propia lógica capitalista.
A corto plazo fue un gran éxito porque recobró para los Estados Unidos el liderazgo económico. A largo plazo liquidó el factor nacional de la economía americana acentuando su dependencia del exterior.
La brecha salarial de los años ochenta llevó a George H. W. Bush a preparar el primer gran tratado de libre comercio para compensar parte de la caída del consumo interno, el NAFTA
Ronald Reagan profundizó el enfoque inaugurado por Nixon con su “Reaganomics” desviando recursos públicos desde el gasto en servicios sociales a los contratos de defensa, iniciando los programas de desregulación económica, así como implementando una bajada selectiva de impuestos que, en teoría, liberaría ingresos para el consumo.
A corto plazo consiguió un crecimiento macroeconómico palpable gracias al desvío de fondos públicos desde el Estado a ciertos sectores privados, así como por la desaparición de regulación laboral, económica y medioambiental que facilitó una mayor flexibilidad y dinamismo para los negocios. A largo plazo el precio que pagó la sociedad norteamericana fue el empobrecimiento de grandes sectores de su población, profundizar en su impacto medioambiental que agravaba el calentamiento global y el inicio de la decadencia de los grandes sectores industriales tradicionales por la desprotección laboral y la imposibilidad de competir con altos salarios en un mercado mundial con economías sin regulación laboral.
La brecha salarial de los años ochenta llevó al presidente George H. W. Bush a preparar el primer gran tratado de libre comercio para compensar parte de la caída del consumo interno. El NAFTA, que amplió el mercado para los productos americanos, abrió a su vez las fronteras a los productos canadienses y mexicanos e inició todo un proceso de deslocalización industrial a México.
Bill Clinton terminó de aplicar el NAFTA y aprobó la Gramm-Leach-Bliley-Act en 1999 que desregularizó el sector bancario, apuntalando la dinámica de financiarización de la economía. El proceso de globalización llegó a su cúspide durante su mandato y el de su sucesor, George W. Bush, bajo cuya presidencia un sector bancario con una regulación menor y distintos objetivos provocó una política crediticia desbocada y especulativa que hinchó la burbuja inmobiliaria. Dicha burbuja explotaría al final de su mandato con la caída de Lehman Brothers y el inicio de la gran crisis global.
Obama, por su parte, ha intentado controlar parte de los efectos más perniciosos de la desregulación financiera mediante una política de rescate y subsidios a la zona industrial clásica de los Grandes Lagos. También ha favorecido a través de Ben Bernanke un enfoque monetario algo más heterodoxo del favorecido por Alan Greenspan en la reserva federal en las décadas precedentes. Pero estos tímidos cambios no rompieron con la dinámica expuesta anteriormente, y prueba de ello ha sido su apuesta por los tratados de libre comercio del TTP en el pacífico o el TTIP (aún inconcluso) con la Unión Europea.
La zona de los Grandes Lagos, la América de las grandes factorías automovilísticas, ha pasado de ser el centro económico estadounidense a una zona empobrecida y en decadencia
Vemos pues que las últimas décadas han supuesto una dinámica constante de auge globalizador de un capitalismo desregularizado, con los Estados Unidos consiguiendo con cada reforma económica mantenerse a la cabeza de las economías mundiales, pero al precio de horadar las bases económicas nacionales que habían hecho posible el American Way & Dream. Esto, por supuesto, no es responsabilidad ni resultado exclusivo de la política norteamericana. Es una dinámica capitalista mundial, pero a la que los distintos presidentes norteamericanos han contribuido de manera decisiva.
Los resultados de esta dinámica son múltiples, pero para la victoria de Trump hay uno que se alza con gran importancia. La zona industrial tradicional de los Estados Unidos, la zona de los Grandes Lagos, la América del motor y de las grandes factorías automovilísticas, ha pasado de ser el centro económico estadounidense a una zona empobrecida y en decadencia.
El mercado ya no podía ofrecer una salida para la población de esa región ya que su estructura productiva no encajaba en la nueva economía globalizada. Las ayudas estatales y los servicios públicos desaparecieron por culpa de los recortes, pero no del todo. Como resultado de las políticas de discriminación positiva las minorías raciales tuvieron aún acceso a unos recursos que la clase trabajadora y parte de la clase media blanca empobrecida dejaron de percibir. El impulso de la lucha por los derechos de las mujeres consiguió que estas accedieran al mundo laboral, doblando el número de competidores en el mercado de trabajo. A lo que hay que añadir una mayor presencia de inmigrantes en zonas que generalmente habían sido blancas, así como el cierre de fábricas y negocios por la deslocalización industrial.
Si ni el Estado ni el mercado ofrecen los medios de reproducción vital, aparecen nuevos competidores para los pocos puestos de trabajo existentes, y los valores sociales y culturales de la época de bonanza se ven cuestionados por las élites culturales de zonas aún económicamente boyantes, el camino a la desunión queda pavimentado.
Aquellos cuyos puestos de trabajo pueden ser deslocalizados se encuentran dislocados. Su realidad es globalizada, pero no sacan ganancia de ello a pesar de estar en un espacio céntrico
La idea fundamental de toda esta explicación es que la globalización no sólo genera ganadores y perdedores en el tablero global, entre el centro y la periferia. Sino que dentro del centro, en los países desarrollados supuestamente ganadores, se genera un desdoblamiento entre una parte de la sociedad integrada en y otra dislocada ante la globalización.
Esta idea es muy importante para mi argumento, pues explica por qué dentro de zonas que debieran ser netamente ganadoras la globalización se comporta como un arma de doble filo, enriqueciendo y generando oportunidades para un segmento de la población y destruyendo las condiciones de vida para muchos otros. Ninguno de estos segmentos sociales está excluido de la globalización, todos forman parte de ella y sus vidas se insertan en la misma a través del trabajo, de su ausencia, y en todos los casos a través del consumo. Esta desigualdad en el disfrute o sufrimiento del proceso globalizador no se debe exclusivamente a que se resida en zonas ganadoras (centro) o perdedoras (periferia) dentro de un país, sino por el lugar que se ocupa o se ha dejado de ocupar en la estructura económica y productiva global.
Aquellos cuyos trabajos pueden insertarse con facilidad en el mercado global, o sus derechos laborales se mantienen con la protección de la época precedente, se encuentran integrados y su conflicto con la globalización es menor. Aquellos cuyos puestos de trabajo pueden ser deslocalizados, o aquellos trabajadores que acceden en una situación de vulnerabilidad al mercado  laboral se encuentran dislocados, porque su realidad es globalizada, pero no sacan ganancia de ello a pesar de estar en un espacio céntrico, y por lo tanto, teóricamente ganador.
Y es entre los dislocados entre los que el mensaje populista ha triunfado, pero para entender las consecuencias de esto antes tenemos que pensar otros problemas.
Road to disunion
Road to disunion” es una expresión acuñada por los historiadores para referirse a la situación que los Estados Unidos vivieron en la década anterior a la Guerra Civil Americana. Lo que subyace a esta frase es la idea de que hubo un momento en la historia de los Estados Unidos donde el país se fracturó en dos mitades, con sociedades y proyectos políticos distintos, irreconciliables y antagónicos, cuya incapacidad de llegar a un acuerdo acabó sumiendo al país en una guerra civil.
Por supuesto, este no es el escenario que se nos plantea en la actualidad, a pesar de las alarmas por la victoria de Trump. Aunque el fenómeno del “road to disunion” sí que se encuentra en marcha.
Al día siguiente de que Trump ganara las elecciones presidenciales numerosos estadounidenses de las costas y de las grandes ciudades acudieron a manifestarse en contra del presidente electo. Esta situación no era nueva. En el año 2009, tras la toma de posesión de Obama, hubo grandes manifestaciones en su contra, en contra de su nueva ley fiscal y un rumor sobre su lugar de nacimiento para intentar desacreditar su legitimidad como presidente. Era el nacimiento del Tea Party. Estas protestas (y las sucedidas tras la elección de Trump), que podrían entenderse como un atentado contra el procedimiento democrático, forman parte de una larga tradición norteamericana de desobediencia civil, que, respetando los cauces institucionales, los impugnan.  
El sentimiento de divorcio con el sistema es muy profundo. Pero no sólo contra él, sino contra la parte de América que se ha erigido en contrincante, y que a ojos de cada una de las dos Américas “ha secuestrado” el American ‘Dream’
En toda campaña presidencial hay siempre muestras de odio y decepción hacia el rival y su victoria, pero siempre se acata el resultado de las urnas, incluso cuando se demuestra que hubo fraude, como ocurrió en el año 2000. ¿Por qué en las últimas elecciones se han dado estos procesos de impugnación y desobediencia civil a ambos lados del espectro político? Porque el sentimiento de divorcio con el sistema es muy profundo. Pero no sólo contra él, sino contra la parte de América que se ha erigido en contrincante, y que a ojos de cada una de las dos Américas “ha secuestrado” el American Dream; ya sea porque excluye de él a los oprimidos, o porque aniquila sus valores tradicionales.
En realidad se trata de un proceso que viene gestándose desde muy atrás, desde los años sesenta, cuando las luchas por los derechos civiles y contra la guerra de Vietnam consiguieron visibilizar las tremendas injusticias que se escondían en la sociedad norteamericana y el dudoso papel que esta jugaba en el mundo.
En el punto siguiente explicaré qué es un sistema de partidos, por el momento sólo diré que la alianza electoral que sostenía al Partido Demócrata como el partido dominante en los Estados Unidos durante la Segunda Guerra Mundial, y tras esta, se resquebrajó cuando los demócratas aceptaron las demandas del movimiento por los derechos civiles y perdieron el Sur de los Estados Unidos; una región que dominaban desde los tiempos de la guerra civil en el siglo XIX. Así como iniciaría la progresiva pérdida de influencia entre los trabajadores de clase obrera blanca, que en Estados Unidos suelen ser católicos y conservadores en temas sociales.
La alianza electoral que sostenía al Partido Demócrata se resquebrajó cuando los demócratas aceptaron las demandas del movimiento por los derechos civiles y perdieron el Sur de los Estados Unidos
De esta manera se iría dibujando a través de las décadas siguientes un antagonismo de una América moderna, inclusiva, progresista, abierta al mundo y radicada en las costas, cuyo proyecto político es construir una sociedad moderna frente a una América tradicional, homogénea, religiosa y obsesionada con “los valores americanos” y el orden, cuya mayor fuerza radicaría en el Sur y el medio Oeste.
Así surgió la división contemporánea del reparto de voto que se conocería como sexto sistema de partidos. Pero esta divisoria era algo más que dos zonas distintas de votantes que constituirían la base para los dos grandes partidos. Con el tiempo cristalizó como dos Américas divididas sobre qué valores deben definir a los Estados Unidos. Dos Américas que no pueden verse, ni dialogar entre sí.
La victoria de Obama en el año 2008 fue la victoria moral y simbólica de una de esas dos Américas. El símbolo de que la lucha por los derechos civiles había conseguido romper el último techo de cristal con la conquista de la Casa Blanca por parte de un afroamericano. Donald Trump, por otra parte, es el Obama de la otra América, de la América conservadora que desea restaurar la paz social que ellos creen perdida por el relativismo y la mano blanda de los liberales de las costas. La América conservadora nunca llegó a aceptar a Obama como el legítimo presidente, y la América liberal-progresista no aceptará tampoco nunca a Trump. Y esto es así porque tanto Obama como Trump representan dos rupturas fundamentales con la tradición política norteamericana. Obama representa la ruptura racial con el hecho de que la presidencia recaiga sobre un varón de raza blanca, mientras que Trump representa la ruptura con la tradición republicano-liberal de respeto a las minorías y la prohibición de que la democracia devenga en tiranía de la mayoría.
Ahora bien, la elección de Trump supone algo más que la victoria de la América conservadora. Si observamos estas elecciones con distancia y dejando al individuo de lado, nos encontraremos que lo que ha operado ha sido la implosión de la América moderna y su proyecto de modernización, así como el colapso del sexto sistema de partidos.
El colapso del sexto sistema de partidos:
En la política norteamericana se llama sistema de partidos al conjunto de elementos recurrentes que, elección tras elección, se repiten haciendo que la contienda electoral se desenvuelva bajo unas reglas de juego específicas: qué partidos compiten y cuál es su programa. Quiénes son sus electores, sus preferencias y preocupaciones.
Resulta evidente que, aunque el Partido Demócrata y el Republicano compitan desde las elecciones de 1856, hoy en día no se tratan en esencia de los mismos partidos que había entonces. El Partido Republicano que llevó a Lincoln al poder no fue el mismo, con la misma ideología y votantes, que el que aupó a Reagan. De la misma manera que el Partido Demócrata que se erigió en defensor de la esclavitud en la antesala de la guerra civil no tiene la misma ideología y votantes que aquel que alzó al primer presidente afroamericano. A lo largo de siglo y medio el Partido Demócrata y el Republicano se han enfrentado defendiendo distintas visiones de la política y apoyados por un electorado distinto. Y cada vez que se ha dado un cambio sustancial en la relación del partido con sus votantes (porque recibió grupos nuevos, o perdió algún grupo de votantes tradicional), así como cada vez que el partido realizaba un cambio en el programa político profundo, decimos que el sistema de partidos ha cambiado, y que su coalición de votantes se ha transformado, porque el partido, aunque se llame igual, ya no representa lo mismo ni a los mismos votantes.
El colapso del Partido Republicano, como con mucha perspicacia supo ver William Saletan en Slate Magazine, se asemeja a un Estado fallido, y Trump es su señor de la guerra
He hablado también sobre la coalición de votantes. Como el lector imaginará, en cada elección ambos partidos tienen que movilizar con un solo mensaje a perfiles de votantes muy diversos. De distinta raza, género, clase social, ideología, rural o urbano, distinta religión, y así un largo etc. Todo eso en un país donde las identidades grupales pesan mucho en la decisión del voto. Pero los distintos grupos no votan al azar, sino que los partidos tienen la habilidad de generar un mensaje que unifica a varios grupos que se vean identificados simultáneamente con el mismo partido. A esto es a lo que se llama coalición de votantes. A un grupo heterogéneo de colectivos que son exitosamente articulados por un partido a través de una idea de sociedad compartida, aunque las reclamaciones concretas y las identidades difieran entre sí.
Esta misma idea es la que está detrás de la teoría moderna del populismo, cuando intelectuales como Ernesto Laclau o políticos como Íñigo Errejón hablan de “significante vacío”, una idea articuladora de demandas plurales de distintos colectivos que los unifica a pesar de sus diferencias en un mismo proyecto. En el fondo los populistas solamente han teorizado, a veces sin saberlo, sobre una realidad práctica de la política estadounidense. Esto además explica por qué la política norteamericana presenta simultáneamente un elevado grado de institucionalismo y de populismo.
Las coaliciones de votantes se rigen por una regla. El partido que consiga construir la coalición más variada, grande, ecléctica y fiel vencerá cuantas elecciones se le presenten. Así ocurrió durante el quinto sistema de partidos, cuando Franklin D. Roosevelt construyó la coalición del New Deal, que agrupaba a la mayoría de los trabajadores, hombres blancos conservadores del Sur y votantes católicos. Con esa coalición de votantes los demócratas gobernaron durante casi treinta años los Estados Unidos sin perder apenas ninguna elección presidencial contra los republicanos (con la excepción de Eisenhower), a la par que construyeron el consenso de postguerra y el American Way of Life sobre el que se asentaría el American Dream.
Ya hemos comentado antes que esa coalición se rompió cuando los demócratas perdieron el Sur por aceptar los derechos civiles y que el Partido Demócrata pasó de ser un partido de clase trabajadora blanca y católica a ser un partido que apuesta por unos Estados Unidos modernos e inclusivos. En la anterior sección presenté cuál ha sido la línea de fractura que ha dividido a demócratas y republicanos en el sexto sistema de partidos, en el que nos encontramos hasta estas elecciones.
Aquí hablo de su colapso, aunque no necesariamente de su desaparición o su sustitución por un séptimo sistema de partidos, aunque creo que existe una posibilidad de que esto pase, y, de ocurrir, sería el legado más duradero e influyente que Donald Trump podría crear.
La razón del colapso del sistema de partidos es que los dos grandes partidos han implosionado. Así como por encontrarnos ante una posible restructuración de las coaliciones de votantes demócrata y republicana. Analicemos primero el deterioro del Partido Republicano.
Puede resultar paradójico que hable de colapso del Partido Republicano cuando éste ha conseguido amasar un poder institucional en estas últimas elecciones con el que no contaba desde el año 1928. Pero el hecho de que un partido conserve un nombre no implica que siga siendo el mismo si el resto de condiciones ha cambiado.
Los neoconservadores, a pesar de que han quedado en nuestra memoria como la quintaesencia del político republicano, han sido una rareza en la historia del partido por su militarismo y excesivo interés en asuntos internacionales
Desde la dimisión de Nixon en 1974 y la retirada de Kissinger el Partido Republicano ha estado dominado por el mismo grupo de personas ininterrumpidamente hasta el final de la segunda Administración Bush en el año 2008. Me refiero a los neoconservadores o republicanos neocon. De entre los políticos neoconservadores las figuras más conocidas eran Dick Cheney, Donald Rumsfeld, George H. W. Bush, John Bolton y Paul Wolfowitz, por citar sólo a los más relevantes. Reagan tuvo algo de neoconservador, aunque era más neoliberal y coqueteó con el paleoconservadurismo. Y aunque tanto Gerald Ford como George W. Bush no eran neoconservadores, los neocon fueron los detentadores reales y efectivos del poder durante sus mandatos, por lo que sus presidencias sí lo fueron (esto es especialmente cierto en el caso de George W. Bush).
Los neoconservadores, a pesar de que han quedado en nuestra memoria como la quintaesencia del político republicano, han sido una rareza en la historia del partido por un motivo: su militarismo y excesivo interés en asuntos internacionales. Los viejos republicanos tendían a abrazar más la otra línea tradicional de la política exterior, el aislacionismo, pues les permitía concentrarse en la vigilancia de los valores tradicionales y el orden en el interior del país, pilares fundamentales de su credo político, mientras que los demócratas suelen ser internacionalistas más destacados, obsesionados por cortar el mundo bajo su particular visión idealizada de América. El hecho de que muchos neoconservadores fueran demócratas, o incluso trotskistas, antes de convertirse en republicanos explica por qué generacionalmente aunaron ambas tendencias.
Pero en lo concerniente a la crisis del Partido Republicano, es importante recordar que, cuando a partir de 2004 las cosas comenzaron a torcerse en Irak, la popularidad de la segunda Administración Bush cayó en picado provocando una oleada de dimisiones. John Ashcroft y John Bolton en 2005, Donald Rumsfeld en 2006, Paul Wolfowitz en 2007. Y aquellas figuras fuertes que no dimitieron durante el segundo mandato, como Karl Rove, Dick Cheney o Condoleezza Rice, abandonaron la política tras la presidencia. Tan sólo quedó George H. W. Bush, como neoconservador fuerte en el partido, y ya era demasiado mayor para poder controlarlo y evitar el hundimiento.
El escenario que se dibujó tras la desaparición de los neoconservadores fue el de un partido con liderazgos frágiles y encontrados. Por un lado surgió una sucesión de líderes institucionales débiles, con un perfil moderado y fuertemente ligados al establishment de Washington DC. Los candidatos a la presidencia John McCain y Mitt Romney, o el expresidente de la Cámara de Representantes John Boehner fueron los principales candidatos del aparato republicano para cerrar la crisis en la que entró el partido durante la Era Obama. Junto a estos candidatos, y muy frecuentemente frente a  ellos, apareció una tropa de demagogos de extrema derecha aupados por el Tea Party que contestaron continuamente a los sucesivos débiles líderes del establishment, forzando a los moderados a tener que acompañarse de los elementos cercanos al Tea Party para no perder a su voto más radical y movilizado.
A pesar de su popularidad entre la derecha más movilizada estos políticos anti-establishment no consiguieron imponerse a los débiles líderes moderados, principalmente por tres motivos:
El primero fue que eran candidatos de minorías, y no de coaliciones de votantes. A estas alturas queda clara la importancia de saber conectar el discurso con grupos heterogéneos y masivos para triunfar en la política americana. Los políticos del Tea Party eran perfectamente capaces de convocar masivas manifestaciones, pero en el área institucional nunca consiguieron imponerse al aparato republicano porque sus seguidores ultramovilizados no eran suficientes para contrarrestar al resto de grupos que miraban con suspicacia a estos líderes populistas.
Trump es ahora presidente de la primera potencia mundial en decadencia, ¿exportará con su victoria también una nueva revolución conservadora?
Por otra parte, el propio Tea Party estuvo siempre dividido entre dos almas complementarias a la hora de organizar la protesta y movilizar a las bases republicanas, pero con preocupaciones y programas políticos que si bien no eran incompatibles, no tenían demasiada relación entre sí más allá del enemigo común.
Anterior al Tea Party pero de gran importancia en su conformación como fenómeno de masas, la derecha cristiana evangélica de numerosas iglesias se presenta unificada a través de un mensaje ultraconservador sobre la supuesta pérdida de los valores cristianos por parte de América, y su mayor foco de protesta residió en las llamadas luchas culturales: la restricción del aborto, la prohibición del matrimonio homosexual, la defensa de la familia tradicional, y toda reivindicación que preservase el núcleo de lo que ellos identificaban como "valores americanos". Sus principales líderes fueron Sarah Palin, Michele Bachmann, Newt Gingrich, Rick Santorum, Ben Carson y Ted Cruz.
Fundamental en la conformación del Tea Party, el ala libertariana de inspiración anarcocapitalista despliega la reivindicación de un Estado mínimo en todos los aspectos de la vida (el minarquismo). Su bestia negra era la política fiscal de Obama y su núcleo de valores giraba alrededor de una defensa a ultranza del individuo y sus derechos: derecho a las armas, defensa extrema de la libre empresa y el libre mercado, defensa de los servicios privados de educación y salud, y en general toda reivindicación que apoyase una independencia del individuo con respecto al Estado. El santo apóstol de este grupo era el veterano congresista Ron Paul, en cuya campaña por la nominación republicana a la presidencia tuvo origen el Tea Party en el año 2008, aunque los libertarianos también encontraron otros paladines para su causa como Paul Ryan, Rand Paul o las ultraconservadoras Sarah Palin y Michele Bachmann, que aunque no son libertarianas estrictas sí han asumido buena parte de su credo antiestatista.
De hecho, la única figura que ha podido aunar ambas familias, además del presentador radiofónico Rush Limbaugh, fue Sarah Palin. Quizás la única política del Tea Party con capacidad presidenciable. Sin embargo, una mezcla de fuerte rechazo de la élite republicana tradicional, junto a su incuestionable enriquecimiento personal por su actividad mediática tras haber sido candidata a vicepresidenta por McCain en las presidenciales de 2008 la disuadieron de continuar su carrera política, prefiriendo adoptar el papel de "suma pontífice" de los radicales en las hondas.
Esta división interna del Tea Party fue otra de las razones que le impidieron cobrar fuerza para llevar a cabo su asalto a un Partido Republicano debilitado. Y aunque las dos familias encontraron en su lucha contra la reforma sanitaria de Obama, el Obamacare, una causa común, no consiguieron rentabilizar su alianza lo suficiente como para generar un líder competitivo, y esto se debe en parte a la otra debilidad de los políticos del Tea Party, que fue lo que yo llamo "la paradoja de los cruzados morales".
Sin importar a qué ala del Tea Party perteneciera, todo político republicano radical compartía un elemento discursivo común: su rechazo a lo que ellos identificaban como una élite política de Washington, corrupta y despilfarradora, los políticos de Washington, el establishment de ambos partidos. En contraste ellos se presentaban como políticos redentores cuyo principal mandato era limpiar la capital de corrupción y hacer que la voz y el cabreo de sus electores se oyera fuerte. Dichos políticos, si conseguían convencer a los electores de su circunscripción con este discurso, llegaban a una ciudad donde efectivamente es común el intercambio de favores entre políticos, así como entre los políticos y los representantes de los lobbies. Pues sin el apoyo de los compañeros y la financiación de los lobbies ningún político puede hacerse oír en el Congreso o en los medios de comunicación. De igual manera les es imposible sacar adelante la legislación necesaria para contentar a sus electores. Por lo que al final siempre acababa ocurriendo la paradoja de que si los representantes de protesta se mantenían puros en su rechazo a las reglas de juego, caían en la irrelevancia, pues en un sistema donde la corrupción es estructural ni se les escuchaba, ni podían presentar resultados concretos y palpables a sus electores. Pero si se "ensuciaban" pactando con otros políticos más poderosos o con los lobbies, entonces eran tachados de traidores por sus electores y veían retirada su confianza en la renovación del mandato. De esta manera, el discurso de cruzada moral y política encerró a los políticos del Tea Party en una paradoja irresoluble que fue acabando con la carrera política de muchos de ellos.
Y de esta manera se acabó consumando el colapso del Partido Republicano. Desaparecida la generación neoconservadora que lo había gobernado por tres décadas, con unos líderes moderados débiles y desacreditados, y unos candidatos radicales divididos, incapaces de generar coaliciones de votantes y de lidiar con sus contradicciones, el partido navegó durante una década a la deriva, descartado como partido de gobierno y transformado en partido de protesta. Ganador de todas las elecciones legislativas y perdedor de todas las presidenciales, fue incapaz de traducir su resistencia en el poder legislativo en poder político real.
Esta situación allanó el camino a que un liderazgo fuerte y ajeno al partido pudiera conquistar la organización superando las resistencias y lógicas inmunitarias del poder orgánico. Esta es también una de las razones que explican por qué Trump fue capaz de conquistar el Partido Republicano mientras que Bernie Sanders acabó siendo derrotado por la maquinaria institucional del Partido Demócrata, a pesar de tratarse de un líder de masas mucho más capacitado que Hillary Clinton. El Partido Demócrata, aunque iba a sufrir una crisis de legitimidad y posterior colapso de igual naturaleza que el Partido Republicano, aún conservaba en funcionamiento a su élite partidista, y, con ello,  los mecanismos inmunitarios para poder manipular el procedimiento democrático a favor de su candidata. Pero el colapso del Partido Demócrata requiere de un análisis pormenorizado que realizaré cuando analice la figura de Clinton y las razones de su derrota.
El colapso del Partido Republicano, como con mucha perspicacia supo ver William Saletan en Slate Magazine, se asemeja a un Estado fallido, y Trump es su señor de la guerra. Los Estados fallidos son aquellos en donde la autoridad central y legítima es incapaz de asegurar la integridad y bienestar de sus ciudadanos, así como el cumplimiento de la ley y de las prerrogativas gubernamentales. Un Estado que no puede comportarse como tal, y que por tanto ve aparecer en su seno una multitud de poderes menores oportunistas que arrebatan trozos de poder al Estado, gobernándolos como sus reinos de taifas. Lo habitual en estas situaciones es que el Estado desaparezca dando lugar a nuevas realidades políticas (como ocurrió en los Balcanes), que el poder central acabe por retomar el control con el tiempo (caso de Colombia), o que uno de los sujetos oportunistas acabe avasallando a los demás y tome el poder central para sí (como hizo Putin en Rusia). Este es el caso también de Trump con el Partido Republicano (quizás por eso él y Putin se entienden tan bien) y lo habitual cuando un señor de la guerra toma un Estado es que repueble el gobierno con sus vasallos leales y adeptos.
Richard B. Spencer, el brillante y peligroso líder intelectual de la facción Radix de la Alt Right, la nueva extrema derecha americana, comparó a Trump con la figura de Napoleón. Napoleón tomó oportunistamente el poder cuando los elementos en conflicto de la Revolución Francesa se destruyeron entre sí, corporeizando en su figura una visión autoritaria de la revolución. Trump se alza de las cenizas del Partido Republicano para corporeizar una visión más autoritaria del American Way & Dream cuando este parece herido de muerte. Napoleón con sus conquistas exportó el modelo de la Revolución Francesa por toda Europa. Donald J. Trump es ahora presidente de la primera potencia mundial en decadencia, ¿exportará con su victoria también una nueva revolución conservadora?
Marcos Reguera. Investigador en la Universidad del País Vasco.

Autor: Marcos Reguera



Trump ordena construir el muro con México y castiga a las ciudades que protegen a los inmigrantes

El presidente de EEUU firma la orden para iniciar las obras de la valla, que comenzarán "en meses", y asegura que el país vecino asumirá los costes "al cien por cien". 

El presidente de EEUU, Donald J. Trump, enseña la firma de la orden ejecutiva para destinar fondos federales a la construcción del muro con México. - EFE
MADRID.- Tal y como prometió, Donald Trump ha sacado el látigo contra la inmigración. El magnate ha firmado este miércoles la orden ejecutiva para iniciar la construcción del muro con México. De esta forma, el recién nombrado presidente de Estados Unidos aprueba comenzar a destinar los fondos federales necesarios para levantar el polémico proyecto. El republicano, cuya mano dura contra los inmigrantes le valió el favor del electorado estadounidense, no se ha quedado ahí y ha ordenado además suprimir la financiación a las llamadas "ciudades santuario" que protegían de la deportación a las personas indocumentadas detenidas.
"Hemos estado hablando de esto desde el principio", aseguró al firmar el documento junto al recién confirmado secretario de Seguridad Nacional, el general retirado John Kelly. "A partir de hoy, EEUU va a recuperar sus fronteras", se congratuló el mandatario, que defendió que la relación con México "va a ser mucho mejor". Anteriormente, había anunciado que su objetivo es que las obras del muro se inicien en cuestión de "meses" y que su planificación ocurrirá "de inmediato". "Tan pronto como podamos, tan pronto como podamos hacerlo físicamente", afirmó al ser preguntado al respecto en su primera entrevista como presidente en la cadena ABC.
El mandatario anunció que el Gobierno federal adelantará el dinero para iniciar la construcción, pero insistió que el país vecino reembolsará "al cien por cien" los costes de la obra, cuyos detalles sigue sin aclarar. "Todo se nos reembolsará en una fecha posterior con cualquier transacción que hagamos con México. Sólo le digo que habrá un pago, que sucederá de alguna forma, quizás una forma complicada, lo que estoy haciendo es bueno para Estados Unidos, también va a ser bueno para México. Un México muy estable y muy sólido", dijo.
Preguntado por la negativa del presidente mexicano, Enrique Peña Nieto, a pagar la factura del muro, Trump respondió que no puede decir otra cosa. "Él tiene que decir eso, tiene que decir eso", justificó el magnate neoyorquino. Tras firmar la orden ejecutiva, sólo falta que el Congreso estadounidense apruebe el presupuesto.
Trump anunció en la noche del martes en Twitter que este miércoles tomaría diferentes medidas relativas a la "seguridad nacional", incluida la construcción del muro. "Mañana (por el miércoles) será un gran día para la seguridad nacional. Entre muchas otras cosas, ¡construiremos el muro!", adelantó el magnate a través de su cuenta en la red social, una vez los medios locales habían desvelado ya sus planes.
Entre esas medidas está otra orden ejecutiva firmada también este miércoles con la que el mandatario suprimirá fondos a las ciudades que trataban de librar de la deportación a los inmigrantes detenidos. Era el caso de Chicago, Nueva York o Los Ángeles, que se negaban a proporcionar a las autoridades federales información sobre el estatus migratorio de las personas que detienen. A partir de ahora serán castigadas por ello.
Poco antes, en su rueda de prensa diaria, el portavoz de la Casa Blanca, Sean Spicer, adelantó que dentro del plan para reforzar la frontera con México se aumentará el número de agentes y crearán nuevos centros de detención para los inmigrantes arrestados en la frontera. Durante la campaña electoral, Trump ya prometió que actuaría contra estas urbes, llamadas "ciudades santuario", cifradas en unas 300 en Estados Unidos.

En horas, Trump anula el ATP, ataca el TLCAN y amaga con impuesto fronterizo

por David Brooks, corresponsal
| martes, 24 ene 2017 07:39 - La JornadaDespués de que entre 3 y 4.5 millones participaron en las Marchas de Mujeres en decenas de ciudades de este país en repudio al nuevo mandatario, 24 horas después de su toma de posesión (incluyendo una concurrencia tres veces mas grande, según expertos, que la de su toma de posesión en Washington), Trump descartó la importancia de estas expresiones y emitió una serie de órdenes ejecutivas relacionadas con algunos de los temas principales de su campaña, entre ellas contra los derechos reproductivos de las mujeres.
Trump firmó una orden ejecutiva en que Estados Unidos se retira del Acuerdo Transpacífico (ATP), declarando al firmar que es una gran cosa para el trabajador estadunidense lo que acabamos de hacer. La decisión no sólo cumple con una promesa central de campaña y enviar un mensaje a países de la cuenca del Pacífico de que eso, después de casi siete años de negociación, se acabó, sino fue –por lo menos simbólicamente– un golpe al consenso de la cúpula política y económica de Estados Unidos que ha guiado la política económica internacional durante más de tres décadas, basada en la promoción del llamado libre comercio.
El gran reto de la política exterior
Foto

David Brooks - Corresponsal - Periódico La Jornada
Martes 24 de enero de 2017, p. 4
Nueva York.
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, inició su primera semana en la Casa Blanca cumpliendo con sus promesas de anular acuerdos de libre comercio, retirar apoyo a los que ofrecen servicios de salud a mujeres, reducir la burocracia federal reiterar su amenaza de un impuesto fronterizo contra empresas que trasladen empleos al extranjero. A la vez, prosiguen investigaciones oficiales sobre las relaciones de su equipo con rusos y se presentaron demandas legales en su contra que –esperan algunos– podrían llevar a su destitución.
Después de que entre 3 y 4.5 millones participaron en las Marchas de Mujeres en decenas de ciudades de este país en repudio al nuevo mandatario, 24 horas después de su toma de posesión (incluyendo una concurrencia tres veces mas grande, según expertos, que la de su toma de posesión en Washington), Trump descartó la importancia de estas expresiones y emitió una serie de órdenes ejecutivas relacionadas con algunos de los temas principales de su campaña, entre ellas contra los derechos reproductivos de las mujeres.
Trump firmó una orden ejecutiva en que Estados Unidos se retira del Acuerdo Transpacífico (ATP), declarando al firmar que es una gran cosa para el trabajador estadunidense lo que acabamos de hacer. La decisión no sólo cumple con una promesa central de campaña y enviar un mensaje a países de la cuenca del Pacífico de que eso, después de casi siete años de negociación, se acabó, sino fue –por lo menos simbólicamente– un golpe al consenso de la cúpula política y económica de Estados Unidos que ha guiado la política económica internacional durante más de tres décadas, basada en la promoción del llamado libre comercio.
La orden también anuló una pieza clave del legado de su antecesor Barack Obama, quien invirtió enorme capital político en promover el ATP en coordinación con la cúpula republicana del Congreso (y en contra de tal vez la mayoría de los legisladores demócratas, los sindicatos, ambientalistas, pequeños granjeros, defensores de consumidores y otros que se oponían).
Pero en torno a migración, otro gran tema de la campaña, sobre el cual se esperaba acción ejecutiva inmediata, hoy el gobierno de Trump pareció echarse para atrás, sobre todo en torno al delicado asunto de qué hacer con los llamados Dreamers, los jóvenes indocumentados que llegaron como niños con sus padres al país. Trump había prometido, repetidamente, anular todas las órdenes ejecutivas de Obama sobre migración en su primer día de gobierno, incluyendo el programa conocido como DACA, bajo el cual aproximadamente 700 mil dreamers están protegidos, por ahora, de la deportación y se les permite estudiar o trabajar temporalmente.
Hoy, mientras defensores de derechos de los inmigrantes esperaban en suspenso una declaración u orden, Trump no abordó el tema. Más aún, en la primera conferencia de la Casa Blanca, el secretario de prensa, Sean Spicer, preguntado repetidamente sobre el tema, indicó que la prioridad sería la deportación de indocumentado con antecedentes penales. Esto nutre lo que Trump había dicho recientemente de que vamos a desarrollar algo para los beneficiados del DACA. El domingo, el nuevo jefe de gabinete, Reince Priebus, comentó que estarán trabajando con el Congreso para encontrar una solución de largo plazo a ese tema. Todo esto implica que, por ahora, se continuará con la misma política migratoria de Obama.
El Departamento de Seguridad Interior continúa aceptando y procesando solicitudes para el programa DACA a falta de una orden de Trump, reportó CQ Roll Call.
En un día de actividad incesante en la Casa Blanca, Trump firmó otras dos órdenes ejecutivas, además de la del ATP: una congelando contratación de personal de toda la burocracia federal, con la excepción del sector militar, y la anulación de asistencia extranjera estadunidense a cualquier grupo u organización que ofrezca abortos o informe sobre ellos en el mundo.
El presidente tampoco emitió una orden sobre el Tratado de Libre Comercio de América del Norte un día después de que se anunciaron reuniones con sus contrapartes de México y Canadá en los próximos días. Sobre el tema, Spicer sólo reiteró que había hablado con los mandatarios de los países socios sobre la renegociación dentro del esquema del acuerdo, pero que si eso no procedía, entonces habría cambios impulsados fuera de ese marco.
Trump sostuvo un par de reuniones, la primera con líderes empresariales, en la que reiteró su advertencia de que impondrá un impuesto fronterizo sustancial a cualquier empresa que traslade la manufactura y empleo de este país a otros. Vale subrayar que el Ejecutivo no tiene el poder de crear impuestos, sería algo que tendría que ser promovido por acción del Legislativo, y aunque el partido de Trump goza de la mayoría en ambas cámaras, no hay consenso sobre este tipo de medidas entre los republicanos.
A la vez, Trump dijo que las empresas que mantengan sus operaciones en Estados Unidos serían beneficiadas por su intención de reducir regulaciones de todo tipo y la disminución de impuestos empresariales, y todo lo que tienen que hacer es quedarse.
Poco después, el presidente se reunió con líderes sindicales, en su mayoría del sector de la construcción, quienes serán beneficiados con los proyectos de infraestructura que ha prometido.
Mientras tanto, continuaron los procesos de ratificación de su gabinete; representante federal Mike Pompeo, fue aprobado como director de la Agencia Central de Inteligencia (CIA), y todo indica que Rex Tillerson, ex ejecutivo en jefe de ExxonMobil, será aprobado como secretario de Estado.
Pero, a la vez, se reportó que continúan las investigaciones oficiales sobre otros integrantes de su nuevo gobierno, incluyendo a su muy influyente asesor de Seguridad Nacional, el general retirado Michael Flynn, por sus relaciones y comunicación con el gobierno ruso, entre otras indagaciones, según el Wall Street Journal y CBS News.
Demandan al presidente
Por otro lado, una agrupación de abogados y expertos presentó una demanda legal acusando que Trump viola una cláusula constitucional que prohíbe que un presidente o cualquier funcionario acepte pagos de gobiernos extranjeros. La demanda, interpuesta por Ciudadanos por la Responsabilidad y la Ética (que incluye abogados prominentes como Laurence Tribe, de Harvard, y otros que anteriormente trabajaron en la Casa Blanca bajo ambos partidos), afirma que los negocios de Trump están recibiendo pagos de potencias extranjeras cuando diplomáticos usan sus hoteles o con representaciones de otros gobiernos rentan oficinas en sus edificios.
Otra iniciativa para buscar el impeachment por esta misma violación fue lanzada desde el viernes (www.impeachdonaldtrumpnow.org). Estas son las primeras iniciativas de varias de este tipo que serán impulsadas en las próximas semanas.
A la vez, la desaparición de la página en español del sitio digital de la Casa Blanca inmediatamente después de la toma de posesión fue interpretada como un mensaje ominoso del nuevo régimen y ampliamente comentada por medios y agrupaciones latinas, pero hoy Spicer aclaró que es solo temporal. Vale recordar que durante la campaña Trump repitió que este es un país donde hablamos inglés, no español, y que su sitio de campaña y su propaganda nunca tuvieron versión en español y tampoco compró publicidad en ningún medio en español.
Finalmente, los medios seguramente quedaron más tranquilos hoy cuando el vocero Spicer en su primera conferencia de prensa diaria aseguró a los que cubren la fuente: nuestra intención es nunca mentirles.

Trump firmó la salida de EEUU del Acuerdo Transpacífico

El novel presidente de Estados Unidos también decretó la renegociación del NAFTA.
trump
Lunes 23 de enero de 2017 CARAS Y CARETAS
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, comenzó su mandato con un nivel de controversia similar al que mantuvo durante su campaña, ya que este lunes firmó en la Casa Blanca un decreto para retirar a su país del Acuerdo Transpacífico de Cooperación Económica (TPP, por sus siglas en inglés). Además, el domingo anunció que el próximo 31 de enero, día en el que mantendrá una reunión con su par mexicano, Enrique Peña Nieto, comenzará a renegociar el Tratado de Libre Comercio de América del Norte.
Con el decreto firmado este lunes, Trump puso en marcha el proceso para que Estados Unidos salga del TPP, acuerdo estratégico que compartía con Japón, Australia, Nueva Zelanda, Malasia, Brunei, Singapur, Vietnam, Canadá, México, Perú y Chile. EEUU había firmado el acuerdo el pasado 4 de febrero de 2016.
Según informó El Economista, en el equipo negociador que abordará las modificaciones al NAFTA y la salida del TPP estará el futuro secretario de Comercio y director del recién creado Consejo de Comercio de la Casa Blanco, Wilbur Ross, el representante de Comercio de EEUU, Robert Lighthizer, y uno de los economistas más críticos con China, Peter Navarro.
Las medidas de Trump están alineadas con el discurso proteccionista que mantuvo durante la campaña electoral, en la cual ya había planteado una plataforma antiglobalización para su mandato y había hecho un fuerte hincapié en fomentar el trabajo estadounidense.

Estado español 

Sindicato Andaluz de Trabajadores/as

Diego Cañamero apoya la lucha de los eventuales de Lipasam

16 enero 2017
Los eventuales de LIPASAM, la empresa municipal de limpieza pública de Sevilla, continúan en la brecha reivindicando sus derechos. Hoy, al inicio de una nueva semana de movilizaciones, han recibido la visita y el apoyo de Diego Cañamero, activista social y diputado.
El colectivo de trabajadores eventuales de LIPASAM está formado por unas 60 personas que accedieron al empleo a través del SAE. Prestaron servicios a esta empresa municipal desde 2013, principalmente en fiestas primaverales, navidades y verano cubriendo los picos de trabajo. Sin embargo, en octubre de 2016, la empresa les comunicó que no volverían a trabajar en futuras campañas, sin que mediara ninguna explicación.
Sin embargo, lejos de rendirse, el colectivo de eventuales comenzaron una campaña de movilizaciones que aún continúa. Se reclama la incorporación inmediata y el mantenimiento del empleo. Se amparan en el convenio colectivo de LIPASAM y en una resolución de julio de 2016, que establece la conversión de los contratos eventuales en indefinidos.
Lo que está reflejado en el SERCLA (Publicado en el BOP. 1 de Julio 2016) y en el actual Convenio Colectivo de LIPASAM (Publicado en el BOP. 18 de Julio 2016). Este convenio con carácter retroactivo, entró en vigor el día 1 de Enero del año 2016. Ese día que entra en vigor dicho Convenio Colectivo los 60 eventuales estaban trabajando en LIPASAM.
Desde el SAT entendemos que este colectivo de trabajadores y trabajadoras tienen la categoría de eventuales al ser llamados por la empresa LIPASAM en varias ocasiones, creándose de esta forma el derecho adquirido de personal eventual. Dicha categoría de eventual les da el derecho al reconocimiento de trabajadores indefinidos no fijos por tiempo discontinuo.
Evidentemente, este colectivo no quiere quitarle el derecho al trabajo a nadie, solo pretende que se les reconozca como empleados de LIPASAM, tal y como consta en lo firmado entre el Comité de Empresa y LIPASAM. De ningún modo quiere desbancar a aquellos compañeros/as que lleven más tiempo. “Estos compañeros no deben de temer por su empleo, ya que tienen más puntuación que nosotros amparados por el número de contratos firmados” informan desde el colectivo de eventuales.



La verdad sobre la detención de Spitou Mendi

16 enero 2017
El pasado viernes 13, a las 11 de la mañana, eran detenidos en Tíjola, a 94,8 km de Almería, Spitou Mendi, José Manuel Martínez González, Francisco David Lázaro y Jaime Segura Ruiz, los cuatro afiliados al SAT. Estaban reunidos en la puerta de la casa de Francisco David cuando fueron interpelados por Estanislao Berruezo García, conocido terrateniente de la comarca del Valle del Almanzora, quien llamó a la Guardia Civil. Tras personarse, la Guardia Civil detuvo a los tres sindicalistas y al propietario de la finca,  también afiliado al SAT, Francisco David Lázaro, denunciándolos por allanamiento de morada, pese a estar David en el momento de la detención en su finca y los demás compañeros en la vía pública. Curiosamente se persona el mismo sargento de la Guardia Civil involucrado con Estanislao Berruezo García en el caso Tres Reyes en Almería, julio de 2013.
Entre los cuatro detenidos, como hemos dicho anteriormente,  estaba Spitou Mendi, portavoz territorial del Sindicato Andaluz de Trabajadores/as en Almería y miembro de la Permanente Nacional del SAT. Spitou es senegalés-andaluz, licenciado en Filología Hispanoamericana por la Universidad Cheikh Anta Diop de Dakar, conocido en toda Andalucía y en los circuitos de activismo sindical europeos por su dilatada trayectoria de lucha, que lleva a cabo desde el SAT y asociaciones de las que este sindicato forma parte, como La Vía Campesina, de la que es Delegado de Inmigración para toda Europa. Además padece diabetes, por lo que es liberado junto a los otros tres compañeros del sindicato dos agricultores José Manuel y Jaime, y David, propietario de la finca en litigio, tras ser detenidos en Tíjola y trasladados a la localidad de Huercal Overa, donde pasaron 28 horas privados de libertad en un calabozo. La juez del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Purchena, los ha citado a declarar el próximo jueves 19, a las 9:30 de la mañana.
Nada más conocerse la noticia, el diario Ideal saca la noticia de la detención publicando únicamente la versión de la Subdelegación del Gobierno, que desde nuestro punto de vista y siendo muy amables sólo se puede calificar de tendenciosa. Dicha versión afirma que Spitou fue detenido “debido a una orden judicial que pesaba sobre él”. El diario continúa explicando que “fuentes oficiales aseguraron que el caso se debe a una investigación delincuencial”. Desde el SAT nos hemos puesto en contacto con el periódico para negar esta versión y que se informe de la verdad.



2017/01/21
EGUNEKO GAIAK
Kronika

IZQUIERDA EN EUROPA: RETOS Y FUTURO
DEBATES EN CURSO Y UNA AGENDA CONTINENTAL MÁS POTENTE
A LA MISMA HORA A LA QUE EN WASHINGTON EL IMPERIO ENTREGABA A UN DECADENTE NERÓN UNA ANTORCHA A JUEGO CON SU MELENA, EN IRUñEA REPRESENTANTES DE LA IZQUIERDA EUROPEA HABLABAN SOBRE SU SITUACIÓN, SUS PERSPECTIVAS Y SUS AMBICIONES. ES DECIR, SOBRE POLÍTICA Y PODER, AQUÍ Y AHORA.
Iñaki SOTO

0121_eg_sortuhitzaldia
Los representantes de la izquierda europea tienen claro que el desequilibrio de poder actual obliga a lograr mayor apoyo social y a activarlo
De la mano de Iratzar Fundazioa, en el contexto del congreso de refundación de Sortu y, tal y como recordó la conductora del acto, Elena Beloki, en el centenario de la Revolución soviética, representantes de la izquierda radical alemana, portuguesa y vasca analizaron en la librería Katakrak los retos a los que se enfrentan los movimientos políticos emancipadores en este continente.
Los invitados, que hoy participarán en el acto del Euskalduna, eran Nelson Peralta, en representación del Bloco de Esquerda portugués, y Andreas Günther, del aparato de internacionales de Die Linke, el partido alemán de la izquierda. Dos casos extremos en muchos sentidos.
Por un lado, Portugal, uno de los estados denominados PIGS, intervenido, en quiebra, tutelado, pero con un Gobierno «progresista» gracias al apoyo de la izquierda y que tiene el mandato de revertir las políticas de austeridad. Por lo tanto, un partido, el Bloco, que pese a no estar en ese Gobierno, de alguna manera lo condiciona.
Por otro lado, Alemania, «uno de los países más neoliberales» de Europa tal y como señaló Günther, con un Gobierno de gran coalición liderado por Merkel, al mando de la UE y con unas políticas de austeridad que han llevado los países del Sur a la ruina. «Nuestro déficit forzado es el superavit de Alemania», resumía Peralta. Es decir, un partido, Die Linke, que ha logrado posicionarse como la única alternativa real de izquierdas en el corazón de la bestia, pero que se enfrenta al auge del populismo de derechas, azuzado por la crisis de los refugiados.
«Lost in translation»
El político portugués había traducido automáticamente algunos términos para poder utilizarlos ayer. Según explicó, al meter «governo de direita» lo traducía como «gobierno justo». Precisamente es para combatir las políticas del anterior Gobierno de derechas para lo que el Bloco, junto a los comunistas, decidieron dar un apoyo crítico al Gobierno del PS. Eso no hace a este un Gobierno justo, pero Peralta defiende que ha alterado el debate político y ha servido para revertir algunas políticas de austeridad, lo que para los portugueses era prioritario. «Antes el debate era cuánto se van a reducir los salarios o las pensiones; ahora es cuánto se van a incrementar», sentenció. Günther no dudó en defender que «a veces hay que evitar ‘lo peor’, aunque no se logre ‘lo mejor’».
Ambos pusieron en valor los esfuerzos que se están haciendo a nivel continental y defendieron que «todos los espacios son importantes, hay que estar en ellos». Se está trabajando para tener una política común europea, lo cual es complicado pero crucial. También recordaron que cuando se logra entrar en los gobiernos, que no es sinónimo de poder real, no termina nada, que se debe mantener la presión social para mantener la ambición transformadora. Tienen claro que el desequilibrio de poder actual obliga a lograr mayor apoyo social. La gestión de las discrepancias internas fue otro de los temas recurrentes. Günther subrayó la necesidad de compatibilizar la pluralidad con decisiones que prioricen lo que les une.
En la charla quedaron en evidencia las dimensiones de los retos y bastantes debates pendientes. Por ejemplo, si la UE es reformable. Pero se vio un lenguaje común en el que «justicia social» y «democracia» fueron dos de los términos más usados. También una agenda cada vez más explícita y potente.

LAB presenta las dos ponencias para su congreso de mayo
El IX proceso congresual de LAB, en el que el sindicato afronta el relevo al frente de su dirección y la actualización de su modelo organizativo, ha arrancado hoy oficialmente y culminará los próximos días 25 y 26 de mayo en Gasteiz, en un cónclave en el que participarán 500 congresistas.
Naiz|Bilbo|2017/01/19 14:45
Lab
Presentación de las dos ponencias de LAB de cara al congreso de mayo. (ARGAZKI PRESS)
Hasta el próximo 19 de marzo, los afiliados de LAB pueden presentar enmiendas a las ponencias político-sindical y de organización elaboradas para la cita congresual y que han sido presentadas, entre otras personas, por Garbiñe Aranburu, a quien la actual dirección propondrá para sustituir a Ainhoa Etxaide al frente de la secretaría general.

El próximo 3 de abril la actual dirección realizará la propuesta oficial para la nueva dirección y a partir de esa fecha la afiliación podrá presentar candidaturas alternativas, que requerirán el aval de 75 personas. Bajo el lema «LAB 4.0 Gure Garaia», la central afronta su congreso con más de 40.000 afiliados.

En la ponencia político-sindical, coordinada por la propia Aranburu y Bea Martxueta, se aboga por cambiar de raíz el actual modelo socioeconómico y se apuesta por la construcción del «socialismo vasco».

El instrumento para lograrlo sería «un Estado vasco soberano», según Aranburu, quien ha considerado que «es hora» de poner en marcha un proceso soberanista de manera «unilateral», ya que «no hay bilateralidad posible con el Estado».

Apelar a ella es una forma de «negar» la puesta en marcha de ese proceso, ha opinado la sindicalista, quien ha señalado que un nuevo Estatuto que modificase el marco autonómico con alguna competencia adicional «sería un nuevo fraude».

Según la ponencia, LAB centrará su trabajo en lograr un marco vasco de relaciones laborales y protección social y un espacio socioeconómico propio.

El sindicato defiende impulsar alianzas entre quienes comparten el objetivo de «profundizar en la ofensiva contra el capital» y están a favor del proceso soberanista.

Aboga también por adecuar y renovar su discurso y práctica sindical para integrar a diferentes colectivos dentro del conjunto de trabajadores y aboga por ofrecer nuevas fórmulas de movilización y nuevas decisiones organizativas con dicho fin.
Ponencia organizativa
La ponencia organizativa del Congreso, coordinada por Igor Arroyo e Izazkun García, introduce novedades al plantear una «actualización» de los valores del sindicato, manteniendo la fidelidad a su historia y preservando su autonomía y la diversidad en su seno.

En ese contexto se sitúa el salto en la «práctica feminista», que se plantea mediante el refuerzo de su secretaría de la Mujer –que pasará a llamarse secretaría Feminista– y la creación de una «Escuela Feminista».

El sindicato también plantea una oferta organizativa a colectivos distintos como pensionistas, desempleados, becarios, falsos autónomos, personas que trabajan ‘en negro’ o trabajadoras domésticas.

Según la ponencia, las federaciones seguirán siendo fundamentales para diseñar y canalizar la acción sindical, pero LAB creará un nuevo instrumento, una «estructura de acción sindical» concebida como una red social de actuación de militantes que «pueblo por pueblo, barrio por barrio o comarca por comarca» trabajen por cambiar el modelo actual.

LAB también apuesta por poner en valor la afiliación e impulsar la participación de sus miembros en la vida interna del sindicato con mecanismos de consulta y se propone reforzar las vías de comunicación con los trabajadores.

Los responsables del sindicato quieren que la afiliación sea protagonista del proceso congresual y han puesto en marcha una aplicación telemática en la que los afiliados podrán efectuar propuestas.



CHILE

Mario Aguilar, nuevo presidente de los profesores : Nuevos aires en el Colegio

Publicado el 18 Diciembre 2016 Escrito por Ricardo Candia Cares - EL CLARÌN DE CHILE
Mario Aguilar Arévalo es el nuevo presidente del Colegio de Profesores de Chile. Militante del Partido Humanista, este profesor de educación física con magister en educación nació el 7 de agosto de 1961, está casado y tiene tres hijos. A poco de su elección, conversó con PF.
Así fue el temporal disidente:
Listad C: “Disidentes Unidos: Somos fuerza, seremos cambio”: 16.582 votos, 67.78%. Lista E: “Un Solo Magisterio, Vamos por más”. (Nueva Mayoría): 3.951 votos, 16.15%. Lista A: “Movimiento de Izquierda Revolucionaria + Movimiento Docente Autónomo”. (Mir): 2.138 votos, 8,73%. Lista B: “Nueva Alternativa Gremial”. (Renovación Nacional): 1.255 votos, 5.12%. Lista D: “Recuperemos el Colegio de Profesores desde y para las bases”: 538 votos, 2,19%.
El Directorio Nacional quedará conformado por: Presidente: Mario Aguilar A. (Disidentes). Secretario general: Darío Vásquez S. (Disidentes). Tesorero: Habnel Castillo O. (Disidentes). Primer vicepresidente: Guido Reyes B. (Disidentes). Segundo vicepresidente: Jaime Gajardo O. (PC). Prosecretario: Magdalena Reyes V. (Disidentes).. Protesorero: Eduardo González N. (Disidentes). Primer director: Eliana Rojas B. (Disidentes). Segundo director: Ligia Gallegos R. (Mir, Mov. Docente Autónomo). Tercer director: Hugo Gerter J. (Disidentes). Cuarto director: Bárbara Figueroa S. (PC).
La lista de la disidencia obtuvo un resultado inédito del 67,78% de los votos. ¿A qué atribuye esa respuesta?
“Se conjugan dos cosas. El rechazo a una forma de conducir el gremio que corresponde a un viejo formato vertical, que concentra la atención en una cúpula. Esta idea de que la base participa electoralmente y luego entrega un cheque en blanco para que la dirigencia decida se agotó. Se juntó con eso que hubo una propuesta, un programa consistente de nuestra lista. Hago un símil con la elección para alcalde de Sharp, en Valparaíso. Normalmente al haber descontento y no hay oferta, eso se traduce en apatía y en restarse a la participación. Pero cuando hay descontento pero surge una oferta y una alternativa, la gente responde, se interesa, participa y se compromete, como en Valparaíso. Creo que en el Colegio nos pasó lo mismo”.
Voceros del PC explicaron su derrota con la existencia de una conspiración anticomunista en contra de Gajardo. ¿Qué opinión le merece tal acusación?
“Creo que es una lectura equivocada, que no les sirve para evaluar e interpretar lo que ha ocurrido. Nosotros no estuvimos en ninguna postura anti. Lo que planteamos es el tipo de gremio que queremos, una forma en que se debe llevar adelante, una postura frente a la falsa reforma educacional del gobierno, una postura frente a la carrera docente. Tenemos una postura progremio, más democrático, más crítico. No anti algo”.
Y en ese diseño “pro”, ¿cuál será el sello distinto de su gestión?
“Nosotros tenemos un programa y nos vamos a regir por él. Hace un tiempo los políticos de la NM decían ‘el Programa no puede ser una camisa de fuerza’, para justificar la traición de lo que habían prometido a la ciudadanía. Para nosotros el programa sí es una camisa de fuerza, porque es lo que comprometimos y es lo que la gente respalda y apoya y por lo tanto, vamos a realizar ese programa que contempla varios ejes, como la democratización del gremio, nuevos estatutos vía congreso estatutario que apunten a democratizar y a dar mayor participación a la base, a establecer revocatoria de cargos, que la toma de decisiones venga desde abajo hacia arriba y no al revés”.
¿Cuáles serían las primeras medidas de su gestión?
“Vamos a llamar a ese congreso estatutario que tiene que desarrollarse en un tiempo que permita la efectiva participación de la base. Una suerte de Asamblea Constituyente interna es lo que nosotros queremos hacer. Y necesitamos hacer un símil de lo que sucede en Chile. Nuestros estatutos fueron hechos en dictadura y después han tenido parches, tal como la Constitución Política que fue hecha en dictadura y después ha tenido parches”.
La Nueva Mayoría se propuso, por lo menos a nivel discursivo, un cambio en el paradigma en educación. Algunos de sus parlamentarios afirman que eso es un hecho. ¿Hay un cambio de paradigma educacional en la actual administración?
“Yo me voy a permitir dar un consejo a la gente de la Nueva Mayoría: que lean el libro La estructura de las revoluciones científicas de Thomas Khun. Cuando se habla de cambio de paradigma se trata de modificar las bases estructurales de un modelo, y eso significaría por lo tanto, modificar las estructuras economicistas y de mercado de la educación chilena, y eso no lo han hecho. Por lo tanto, ni cercanamente han cambiado el paradigma de la educación. Creo que eso refleja un profundo desconocimiento de lo que significa el concepto de paradigma”.
La agenda legislativa educacional ha tenido un fuerte impulso en la segunda gestión Bachelet. De hecho, la ley de la llamada carrera profesional. ¿Cómo se proponen su modificación?
“Evidentemente esta es una ley recién promulgada lo que pone un elemento de dificultad, pero una ley se cambia con otra ley. Nosotros vamos a hacer el itinerario que nos corresponde. Aquí ha quedado claro que el discurso oficial del gremio hasta ahora apoyaba esta carrera, y que hacía creer o suponer que el profesorado estaba conforme con ella. Ha quedado en evidencia que es un error: el profesorado no está conforme con esta carrera docente y si el gobierno, el Mineduc, quiere y tiene la voluntad de escuchar al profesorado, va a tener que escuchar nuestros planteamientos principales: esta no es nuestra carrera y vamos a bogar por cambiarla. Esperamos ser escuchados, esperamos que haya un diálogo y no un monólogo como ha habido hasta ahora.
Yo creo que a esta altura el Mineduc estará haciendo sus evaluaciones. Se equivocó respecto al diagnóstico sobre el profesorado, creyendo que estaba conforme. Ahora supongo que reflexionarán que hay disconformidad con la carrera docente, y espero que estén dispuestos a escuchar nuestros planteamientos. Si no son escuchados, tendremos que pasar a movilizaciones con un itinerario que nos permita hacernos escuchar. Pero quisiera ser optimista, espero que habrá una apertura del Mineduc a escucharnos y nosotros vamos a conversar con ellos. Si no somos escuchados, si persiste la postura del monólogo y no del diálogo, entonces habrá que pasar a la fase siguiente”.
Se infiere que el gran apoyo que tuvo su lista, abiertamente contraria a las propuestas gubernamentales, ¿es también en contra de este gobierno?
“Yo al menos estoy en condiciones de decir que los profesores no están de acuerdo con la reforma educacional y que no están de acuerdo con la carrera docente ni con el proyecto de desmunicipalización, que son los temas específicos que nos competen a nosotros”.
En el caso de la desmunicipalización, el proyecto está aún en discusión en el Congreso. ¿Van a buscar la manera de incidir con una opinión gremial?
“Por supuesto. Es nuestra obligación como gremio, y como representante de los profesores. Vamos a hacer ver nuestra postura claramente crítica respecto de ese proyecto. Nosotros tampoco fuimos escuchados en el proyecto de desmunicipalización. No hubo diálogo verdadero. No hubo trabajo prelegislativo. Y por lo tanto, el gobierno y la sociedad chilena tienen que enterarse que los profesores no estamos de acuerdo con ese proyecto y esperamos que se nos escuche en el gobierno y en el Congreso. Tenemos razones fundadas, un análisis crítico con sustento, y eso lo vamos a expresar y dar a conocer. Y por supuesto, llegado el momento si no se nos escucha, habrá que preparar formas de hacernos escuchar”.
La legislación educacional ha estado centrada en modificaciones al sistema educacional que no ha tomado en cuenta cuestiones como el currículum. ¿Cuál será su iniciativa al respecto?
“Nosotros queremos entrar con mucha fuerza en el tema del currículum chileno, altamente estandarizado, con una lógica economicista y empresarial. Todas categorías emanadas de los grandes centros financieros, Banco Mundial, FMI, que han bajado líneas respecto de las políticas educacionales en Latinoamérica en los últimos veinte años, y que están en una profunda crisis. Gran parte de los problemas que hay al interior del aula, para la desmotivación de los jóvenes hacia el estudio, etc., tienen que ver con una concepción de una educación estandarizada, sesgada, meramente instrumental al aparato productivo. Nosotros queremos recuperar la noción de educación integral, que apunta a un desarrollo humano integral, a una educación transformadora, liberadora. Una educación cuyo objetivo principal sea desarrollar buenas personas. Y a partir de eso, viene todo lo demás por añadidura. Eso no existe hoy en Chile. Nosotros queremos reponer esa discusión en el centro del debate educativo”.
Recién se refería al movimiento que llevó a Jorge Sharp a ser alcalde de Valparaíso. Usted ha dicho que habrá un acercamiento mayor con el movimiento social. ¿Cómo se vinculará el Colegio de Profesores en la dinámica de la sociopolítica del país?
“Nosotros estamos profundamente convencidos que la alianza primera que tiene que tener nuestro gremio es con el movimiento social. Con el movimiento social por la educación, pero también con todos los movimientos ciudadanos que apuntan a cuestionar las bases y esencia de este modelo. El movimiento No+AFP también nos toca directamente. Me parece insólito que el Colegio oficialmente no haya sido parte hasta ahora de un movimiento que toca un tema que a nosotros los profesores nos afecta de manera absolutamente directa. El profesorado puede ser el ejemplo más concreto del fracaso del sistema previsional chileno. Se dice mañosamente que la explicación de las malas pensiones son la baja densidad de cotización, las lagunas previsionales. No es el caso de los profesores. No tenemos grandes rentas, pero en general nuestro trabajo es bastante estable. Y tenemos gente que ha cotizado por cuarenta años ininterrumpidamente y tiene igualmente pensiones de miseria. Somos el ejemplo de que las explicaciones que se dan del porqué el sistema entrega bajas pensiones son falsas. Nos vamos a vincular al movimiento social, sin duda. Ahora el gremio oficialmente va a participar de ese movimiento”.
La CUT tampoco ha estado muy cerca del movimiento No+AFP. De hecho su presidenta es dirigenta nacional del gremio y también fue a estas elecciones. ¿Se reeligió Bárbara Figueroa en el Colegio?
“Está muy al filo. En un cómputo queda dentro y luego en otro queda afuera. Está en un margen de votación en el cual una pequeña variación hace la diferencia. Habrá que esperar hasta el último cómputo para saber”. (N de PF. Finalmente la actual presidenta de la CUT fue electa con 842 votos).
Usted fue elegido en una elección donde participaron aproximadamente 25 mil profesores. En la CUT las elecciones son indirectas. Siendo el Colegio miembro de la Central, ¿hará saber la necesidad por lo menos de revisar el sistema que permite la renovación de sus dirigentes?
“Ciertamente. Le voy a contar una anécdota. En la última elección de la CUT no fui a votar como me correspondía como dirigente -porque en la CUT votan solo los dirigentes-, porque no estoy de acuerdo con ese sistema. No estuve disponible para avalar un sistema que es una apariencia de democracia. Y creo que es la postura del profesorado. Lo vamos a revisar en el nuevo directorio y en la asamblea, pero en principio me parece que debemos exigirle a la CUT que en el más breve plazo se implementen elecciones directas”.
¿Algún plazo definitivo?
“Ese plazo tendría que ser a más tardar durante el año 2017. La directiva de la CUT está deslegitimada porque su forma de elección estuvo llena de irregularidades y finalmente se llegó a una componenda para dar una apariencia de solución, pero que no tiene legitimidad alguna. La única forma en que la CUT recupere algo de legitimidad, es que en el más breve plazo implemente elecciones directas y nosotros se lo vamos a exigir”.
¿Y si no fuera así, qué hará su conducción?
“Lo tendríamos que conversar colectivamente en el directorio y en la asamblea nacional. Pero en principio deberíamos congelar nuestra participación en la CUT”
RICARDO CANDIA CARES
Publicado en “Punto Final”, edición Nº 866, 9 de diciembre 2016.


Entrevista

Luis Mesina, vocero No + AFP: “El movimiento social tiene que seguir impulsando esta demanda”

El año pasado se convirtió en una de las figuras del debate político a partir de la explosión de la demanda de un nuevo sistema de pensiones para Chile. El protagonismo, e incluso voces que lo ponen como candidato presidencial, no le quitan los pies de la tierra y sostiene a El Ciudadano que "el movimiento social tiene que seguir impulsando esta demanda y ahí va encontrarse con otras organizaciones y trazar una política de alianzas que permita luchas cualitativas porque aquí hay que pegar un salto gigante en este tema".

El Ciudadano
Si el 2011 fue el año de la demanda de una Educación Pública, Gratuita y de Calidad, el 2016 fue el año en que se dijo basta al sistema de las Administradoras de Fondos de Pensiones a través de multitudinarias marchas por el centro de Santiago y con una serie de propuestas que La Moneda escuchó pero que, al parecer, hasta ahora no ha considerado.
A través de la Coordinadora No+AFP se encauzaron estas demandas, que a partir de la vocería del secretario general de la Confederación Bancaria, Luis Mesina, logró instalarse en la agenda política nacional poniendo en el tapete la transformación del modelo de pensiones con el objetivo de lograr jubilaciones dignas para las chilenas y chilenos.
En conversación con El Ciudadano Mesina sostiene que las autoridades “no tienen voluntad” de generar los cambios en esta materia y que la tarea del movimiento social es “seguir impulsando esta demanda y ahí va encontrarse con otras organizaciones y trazar una política de alianzas que permita luchas cualitativas porque aquí hay que pegar un salto gigante en este tema”.
Luis Mesina, vocero No + AFP
¿Cómo analizan lo que pasó el año pasado con el tema de las pensiones, colocarlo agenda y su proyección 2017?
Este fin de semana tendremos una conferencia de la Coordinadora Nacional y tendremos que intensificar el trabajo hecho en 2016. Cumplimos con una primera etapa que era instalar el debate en la agenda pública, pero no es suficiente. Nosotros lo que queremos es que se solucione, que se acaben las AFP y las instituciones del Estado lo que hacen es aceptar modificaciones para que se mantenga íntegramente el sistema. Tendremos que intensificar nuestra lucha porque el único objetivo que nos proponemos es acabar nos las AFP y eso es un consenso unánime.
Sobre propuesta presentada por la Coordinadora que no hay respuesta de la autoridad, más allá de aumentar en 5% el pilar solidario.
Hicimos una propuesta a la presidenta Bachelet, que ahora nos derivaron a hacerla al ministro de Hacienda y Trabajo y estamos esperando cuando reciban para revisar sus apreciaciones. Nuestra propuesta no tiene nada que ver con la planteada por el gobierno, que se sustenta con el aumento del 5% en el pilar solidario, por cuya gradualidad se vendría a terminar en 10 años y por tanto los efectos serían en 40 y tantos años más, lo que es una desproporción teniendo en cuenta que demandamos mejoras este año. La propuesta del 5%, si bien el monto es interesante, no tiene nada que ver con la discusión de fondo que es acabar con las AFP e instalemos un sistema público de pensiones que pase por un sistema de reparto con  fondo de reservas técnico que pudiera hacer frente a las distintas 2:50 que se producen en el desarrollo del país.
Nuestra propuesta integral responde de aquí a fin de siglo y permite mejorar  sustancialmente y ahora las pensiones de los trabajadores jubilados tanto los que están pensionados por AFP y compañías de seguros como  los que se pensionaron en el IPS. Esperamos hacer un debate sobre lo que es mejor para el país y no seguir viendo propuestas que están manteniendo a las AFP.
¿No existe voluntad?
No tienen voluntad. La voluntad hay que ponerla desde las calles.
¿Cómo ves el trabajo de la Coordinadora y otras fuerzas fuera del duopolio?
Nos parece importante que se sume gente a este proceso, de hecho hemos participado en el esfuerzo de aglutinar fuerza política para fortalecer esta demanda. Es importante señalar que tenemos un encuentro este fin de semana y allí veremos cómo se va a conciliar con la mirada de otros sectores en vista a lograr nuestros objetivos.
¿Han hecho una evaluación de implicación movimiento social a favor de la lucha contra AFP?
El movimiento social tiene que seguir impulsando esta demanda y ahí va encontrarse con otras organizaciones y trazar una política de alianzas que permita luchas cualitativas porque aquí hay que pegar un salto gigante en este tema y hay que tratar de avanzar.
Este es un año electoral y se hace importante mantener la demanda no más AFP, de hecho tu nombre suena como candidato presidencial ¿Qué reflexión te genera esto?
Eso exigirá mucha fineza en nuestra política y tratar de mantener nuestra autonomía del movimiento y entender que en año electoral es fundamental tener una propuesta y esta es perfectamente compatible con la autonomía. En ese minuto no he recibido aún la carta de propuesta pero hay que entender que toda candidatura presidencial no tiene que emanar de un proyecto personal sino colectivo. Yo soy representante de la Coordinadora y la decisión  tiene que pasar por la Coordinadora.
José Robredo H. 
@joserobredo
El Ciudadano

Los cuatro puntos indispensables en una candidatura presidencial de Frente Amplio

Publicado el 17 Diciembre 2016 Escrito por Ernesto Benado - EL CLARÌN DE CHILE
1.-Reducir la actual jornada semanal de trabajo de 45 horas a sólo 40 horas. Se hará paulatinamente, en 2018 a 42 horas, en 2019 a 40 horas-.Las horas excedentes de trabajo se pagarán con un 50% de recargo y no podrán exceder en total las 50 horas semanales.
2.- Se creará un nuevo sistema de pensiones según normas de reparto, es decir garantizando a sus adherentes pensiones del promedio de sus últimos 36 meses de imposiciones. Se garantizará pensiones equivalentes al ingreso mínimo legal en todos los casos. La pensión en el sistema de reparto  se calculará como el promedio de los últimos tres años de aportes, multiplicado por los años de imposiciones y dividido por 30 años. El porcentaje de imposiciones conjunto entre trabajadores y empleadores se calculará  para financiar  actuarialmente el 80% del gasto en pensiones .El 20% restante será de cargo del Estado,
El actual sistema de pensiones AFP , continuará con el ahorro individual . Los imponentes de cada sistema podrán cambiarse libremente entre uno y otro sistema, una sola vez en su vida laboral, aportando los ahorros acumulados en las respectivas cuentas personales corregidas por los cálculos actuariales.
3.-Se reducirá a 10% el IVA a los alimentos de todo tipo, a los libros y a los medicamentos genéricos. Se aumentará la tasa general del IVA  a los demás productos y servicios al 20%.-
4°Se creará un sistema de inversión y de administración autónomo para las Regiones. En cada Región el Gobernador Regional elegido  presidirá un Consejo de Inversiones  que responderá directamente a las Contralorías Regionales.
El gobierno central  adjudicará a cada región en el presupuesto  nacional, la suma destinada a inversiones, la que se aportará en cuotas mensuales regulares, sin controles adicionales del Ministerio de Hacienda. Hasta un 10% del presupuesto de inversiones  de cada Región podrá destinarse a contratar  expertos en el diseño y ejecución de proyecto


ARGENTINA

Izquierda Revolucionaria -  Hombre Nuevo

Autor
: Izquierda Revolucionaria - Hombre Nuevo

AGR Clarín 22 Enero 2017

Gran plenario obrero en defensa de AGR y contra la flexibilización

Cientos de trabajadores y trabajadoras, representantes gremiales y activistas obreros se congregaron el sábado por la tarde en las puertas de AGR Clarín en donde los anfitriones comunicaron las resoluciones de su Asamblea, se debatió sobre cómo enfrentar la ofensiva patronal y la reforma laboral del macrismo y los empresarios, además de la unámime expresión de apoyo al conflicto.
AGR Clarín | Gran plenario obrero en defensa de AGR y contra la flexibilización
El delegado general de la Comisión Interna de AGR Clarín, Pablo Viñas, abrió el plenario reafirmando la disposición de lucha de los 380 trabajadores despedidos y enumerando las resoluciones de la Asamblea, que el plenario ratificó y a las que se sumaron otras propuestas. En síntesis, se resolvió realizar una jornada de lucha nacional contra Clarín, con epicentro en las oficinas de recursos humanos que el grupo tiene al lado de Canal 13- TN (San Juan y 9 de Julio) en la Ciudad de Buenos Aires y con acciones en diferentes lugares del país (La Voz del Interior de Córdoba, Los Andes de Mendoza, entre otros); exigir al Ministerio de Trabajo que haga cumplir a Clarín con la ley que retrotraiga los despidos ilegales y restablezca la producción; promover el fondo de lucha para que el conflicto no sea quebrado por ahogo económico; gestionar reuniones con la CGT para que se pronuncie sobre el conflicto y llame a un plan de lucha; extender el acampe solidario en las puertas del diario; y masificar el fondo de huelga, histórico método de lucha de la clase trabajadora.
Luego de la apertura del plenario a cargo de Viñas hicieron uso de la palabra organizaciones políticas, así como dirigentes y activistas gremiales de diferentes actividades debatieron el apoyo al conflicto. Se hicieron presentes numerosas comisiones internas de gráficos, SiPreBA, SUTNA, la Unión Ferroviaria Haedo, Comisión Interna del Frigorífico Rioplatense, docentes de diferentes seccionales recuperadas, delegados de Acindar Villa Constitución, entre otros.
Valeria Mustoni, que hizo uso de la palabra por Izquierda Revolucionaria y la Organización Política Hombre Nuevo, destacó que "la lucha de los trabajadores de AGR nos involucra a todos porque es un emblema de lucha contra la flexibilización y la reforma laboral que pretenden llevar adelante el macrismo y los empresarios". Es por eso que el conflicto de AGR es un caso testigo de la etapa que se viene y no sólo es importante para la clase trabajadora sino que también las patronales y el gobierno tienen los ojos puestos encima del conflicto y juegan su partido para tratar de quebrar la resistencia obrera.
Vemos como un avance y producto de la profundidad de la lucha de los compañeros que protagonizan el conflicto, el hecho de que después de 30 años la Federación Gráfica haya llamado a un paro general. Lamentablemente desde la misma no se ha garantizado consecuentemente los mecanismos de presión de los gráficos parando la producción e impidiendo concretamente la salida de los diarios más importantes, cuestión que sería un verdadero golpe a las patronales generando mejores condiciones de que el conflicto triunfe.
Todas las organizaciones combativas del campo popular debemos apostar sin sectarismos ni mezquindades al triunfo de la lucha de los gráficos de AGR Clarín. Para eso, además de las acciones que valientemente vienen desarrollando los obreros de la planta de Pompeya, empezando por la toma de la fábrica y la exigencia del restablecimiento de la producción, es central hacer todos los esfuerzos por ampliar la base social y política del conflicto, para que todos los sectores que repudian la política de Clarín y del gobierno se vean forzados a apoyar activamente a los trabajadores que resisten. En primer lugar el sindicato gráfico que no participó del plenario y con quien no se movilizó de conjunto el día Jueves –un dato que más allá de dónde esté la responsabilidad debe ser balanceado críticamente en una lucha que requiere golpear con un solo puño a la patronal y el gobierno-, pero además todos los sindicatos, comisiones internas, seccionales, organizaciones sociales y políticas y fundamentalmente todos los trabajadores y activistas que comprendan el problema de que una patronal como Clarín avance sobre 380 puestos de trabajo y el convenio colectivo de los gráficos.
Por último, la comisión de mujeres y familiares de los trabajadores de la toma cerraron el plenario y mostraron la fortaleza que le dan a la lucha y a los compañeros que llevan adelante la ocupación. Luego del plenario, un festival que contó con la presencia del Cabra de Las Manos de FIlippi entre otros artistas le puso color a una tarde calurosa llena de lucha y solidaridad.
¡No a los despidos y la flexibilización!
¡Por el triunfo de la lucha de AGR Clarín!





Izquierda Revolucionaria -  Hombre Nuevo

Autor
: Izquierda Revolucionaria - Hombre Nuevo

CABA 19 Enero 2017

Masiva movilización al Ministerio de Trabajo contra el lockout en AGR-Clarín

Miles marcharon hasta la cartera laboral en el bajo porteño para reclamar por la reincorporación de todos los despedidos al taller aunque la patronal y el estado siguen sin dar respuestas.
CABA | Masiva movilización al Ministerio de Trabajo contra el lockout en AGR-Clarín
En el marco de un paro general dictado por la Federación Gráfica Bonaerense, se realizó una masiva movilización desde Obelisco al Ministerio de Trabajo para reclamar la reapertura de AGR-Clarín. Sindicatos y seccionales combativas, comisiones internas, organizaciones de DDHH y de izquierda formaron parte de la convocatoria.

Por su parte, la Corriente Federal de Trabajadores, el sindicato gráfico y la AGTSyP, entre otros, marcharon desde la sede de la Federación Gráfica en Paseo Colón hasta la cartera laboral en la calle Alem. La división de la movilización debilitó esta gran jornada que, sin embargo, reflejó el fuerte respaldo popular que tiene la lucha de los compañeros del taller gráfico confluyendo de conjunto frente a las puertas del Ministerio.
El paro impulsado por la dirección de gráficos se sintió con más fuerza allí donde las comisiones internas responden a la oposición de izquierda que garantizó la medida con piquetes en puerta de fábrica.

Sigue una dura batalla

En el ministerio los recibió el segundo de Jorge Triaca pero, como era esperable, no hubo respuesta al reclamo obrero por parte de la patronal y el Estado. Los compañeros reclaman, además de la reincorporación, el pago de la quincena ya trabajada. A pesar que el grupo Clarín jamás realizó los pasos legales requeridos para el cierre del taller, la cartera laboral sigue avalando en los hechos los 380 despidos evidenciando nuevamente la connivencia de intereses entre el estado y los patrones.
La lucha de AGR-Clarín condensa una batalla más general en defensa de los puestos de trabajo y los convenios. Por eso, Magnetto y Macri están jugados a propinarle una derrota que le allane el camino a su tan promocionada reforma laboral.
Hacia adelante, sigue la ocupación de los compañeros que se mantiene firmes, pese a la represión, hostigamiento y el cerco mediático. Están previstas nuevas actividades como un plenario y un festival el sábado en la puerta de la planta.
Como Izquierda Revolucionaria y OP Hombre Nuevo venimos acompañando desde el comienzo esta pelea. Ponemos todas nuestras fuerzas en lograr el triunfo de los compañeros que será de toda la clase trabajadora. Entendemos que en esta etapa de ofensiva patronal, resulta más necesaria que nunca una política de unidad de acción para torcerle el brazo al gobierno y los empresarios.
¡Abajo el lock out! ¡No a los despidos! ¡Basta de flexibilización laboral!


ATE Capital se movilizó contra los despidos

La concentración frente al Palacio San Martín cuando se estaba realizando un encuentro de la UNESCO, exigió la reincoporación de los trabajadores que formaban parte del Programa Nacional de Formación Docente. Fuerte operativo policial.

Martín Piqué - Martes 24 de Enero de 2017

Los trabajadores del Ministerio de Educación afiliados a ATE Capital se movilizaron hoy por la mañana hasta el Palacio San Martín –sede de la Cancillería- para exigir la reincorporación de todos los despedidos que formaban parte del Programa Nacional de Formación Docente “Nuestra Escuela” y de otras áreas de la cartera educativa.Los manifestantes se concentraron en la esquina de Suipacha y Santa Fe porque en el Palacio San Martín se estaba realizando un encuentro de la UNESCO (organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura) con la asistencia de todos los ministros de Educación de América Latina y el Caribe.
Los trabajadores del Ministerio de Educación encuadrados en ATE Capital estuvieron acompañados por el secretario general y el secretario adjunto del gremio, Daniel “Tanito” Catalano y Juan Manuel Sueiro. También participó, como uno de los oradores, el secretario general de Suteba, Roberto “Roby” Baradel. En representación de los empleados del ministerio habló Rodrigo Recalde (ATE Educación), el delegado que fue agredido a principios de enero durante el episodio de represión policial que se vivió dentro de una de las delegaciones del Min isterio de Educación, sobre la avenida Santa Fe.
El encuentro de la UNESCO llevaba como lema “E2030: Educación para Transformar Vidas”. En el foro estaba prevista la participación de la Internacional de Educación de América Latina , organización que agrupa a los docentes de toda Latinoamérica . Cuando esa entidad, de la que forma parte Baradel, solicitó que se invitara también a los sindicatos docentes de Argentina, los organizadores desoyeron el pedido y dieron marcha atrás con la invitación.
El propio Baradel denunció esta situación al momento de hablar desde el micrófono. “Invitaron a diferentes organismos, invitaron a la Internacional de la Educación. ¿Y qué contestó? ‘Claro que queremos ir, vamos a ir a esa reunión, pero tienen que invitar también a las organizaciones de Argentina’. Y cuando les dijeron eso, automáticam ente se negaron y no nos invitaron. Porque lo que está haciendo este gobierno, en la provincia, en la Nación, es una gran puesta en escena. Una escenografía para el Exterior. Diciendo que tienen diálogo. Y lo hacen con protección mediática. Pero para el in terior es todo lo contrario: despidos, agresión sindical, no respeto del fuero de los delegados. Y, permanentemente, una campaña en contra de los trabajadores, de la educación y de los derechos que conquistamos en estos 12 años”, cargó Baradel.
La protesta de los trabajadores del Ministerio de Educación se topó, alrededor del Palacio San Martín, con un operativo policial muy fuerte, con guardia de infantería, hidrantes y vallas. “Intentan disciplinarnos, le pegan a nuestros compañeros, violentan vivienda s, les inventan causas penales, intentan atemorizarnos. Pero tienen que saber que no estamos acá de manera caprichosa. Estamos acá por un gobierno que se niega a discutir con los trabajadores, que quiere desconocer nuestra representación gremial. Con unidad en la acción, con unidad en la calle, vamos a seguir consolidando la fuerza para enfrentar políticas de ajuste, la política represiva”, prometió Sueiro, adjunto de ATE Capital.
El conflicto en el Ministerio de Educación se abrió tras la intención inicial de desactivar todo el programa de actualización docente “Nuestra Escuela”, lo que implicaba dejar sin trabajo a 2600 trabajadores. El rechazo de los sindicatos , la participación y la solidaridad que despertó esa decisión, llevó a que la cartera educativa retrocediera en buena parte de esos despidos . La negociación se encuentra hoy en otro punto: 400 trabajadores del Ministerio revisten en otras áreas, y la continuidad de sus empleos está hoy bajo amenaza.
Un acuerdo de palabra garantizaría el mantenimient o de 200 de ellos. ATE Capital, por lo tanto, está hoy concentrado en presionar por los otros 200 puestos de trabajo. “Vienen a sacarnos la posibilidad de que nuestros pibes estén en las escuelas . Hablan de la baja de la edad de imputabilidad , porque quieren a los pibes en la cárcel en vez de en la escuela. A los pibes los queremos dentro de los establecimientos educativos, porque esa es la alternativa que tenemos las clases populares para pensarnos a nosotros mismos y que no nos vengan a pensa r de alguna empresa extranjera , como Microsoft , o como las que vienen armando con el grupo Clarín” , denunció Recalde, delegado general de ATE Capital en Educación


Partido Revolucionario de los Trabajadores
PRT – Argentina. Por la Revolución Socialista

Un horizonte liberador

19/01/2017
Por PRT
El 2017 inició con una serie de hechos producidos por los trabajadores en un camino ascendente de la confrontación de las clases. Se ve y se siente el malestar que anida en nuestro pueblo, a la vez que se multiplica la idea de luchar por algo más que las conquistas inmediatas.
No faltan los oportunistas diciendo que “no pasa nada”… escondiendo una monumental subestimación a todo el movimiento popular; es la justificación que tienen para “mejorar el capitalismo” y que nada cambie. De revolución, ni hablar…
“Hay que hacer lo que se puede”, “la gente no entiende” y frases por el estilo persiguen reemplazar el papel protagónico que las masas están dando en infinitas luchas y experiencias acumuladas. Sosteniendo esas ideas son funcionales al Estado de los monopolios, planteando que el capitalismo la única posibilidad de “bienestar”. El reformismo y el populismo son ideologías de la burguesía con distinto ropaje.
Las ideas revolucionarias van dando esa batalla, fortalecidas porque comienzan a aparecer desde las luchas muchos sectores de trabajadores decididos a cambiar el rumbo de la historia. Movimientos de todo tipo golpean los intereses del Estado y el gobierno de los monopolios; miles y miles de brazos y gargantas se abren paso en un mar de aspiraciones políticas y de conquistas.
En los próximos meses la lucha de las clases se agudizará; por eso, varios artículos que hemos publicado han centrado en la lucha para frenar el ajuste. Esa agudización abrirá una etapa en la que la debilidad de la burguesía aumentará por la irrupción de la lucha abierta contra el ajuste. Las fuerzas de la clase obrera y el pueblo se potenciarán con la misma lucha.
Pero no será suficiente. Está claro que la obligación de los revolucionarios es desarrollar y construir una alternativa real de poder contra el poder en crisis, más allá de la lucha por las conquistas que presenta y presentará el movimiento de masas. Reafirmamos con toda convicción la necesidad de una fuerza revolucionaria organizada que, con toda la experiencia acumulada por nuestro pueblo, sepa orientar las fuerzas latentes hacia la lucha por el poder político.
La clase obrera y el pueblo tienen muy claro lo que no quieren, pero no así aún hacia dónde ir. Y para avanzar en el proyecto revolucionario hacen falta muchas manos. No es suficiente luchar. Hay que luchar y construir al unísono la organización revolucionaria que dé cabida a miles y miles de hombres y mujeres, que a la vez deben saber y comprender de esta necesidad, ya que sin su concurso la tarea es imposible. En este proceso de luchas que se abre podemos construir poder, y hay que construir todas las herramientas necesarias.
Para pasar a una nueva calidad del proceso revolucionario no alcanza con la intensificación y la generalización de las luchas. Por supuesto que no subestimamos el papel que han venido y seguirán desempañando, pero precisamente por ello, es que planteamos la necesidad de la construcción de una fuerza revolucionaria de masas, como una parte inseparable de la lucha por las conquistas, para que las mismas tengan un horizonte liberador.
Somos parte indeleble de una experiencia histórica que no nos pertenece; es parte de la experiencia de nuestra clase obrera y nuestro pueblo, a disposición de los nuevos luchadores y luchadoras que hoy se están planteando que así no se puede vivir más, que hay que encontrar una salida definitiva para los padecimientos que nos impone el capitalismo.


URUGUAY
por Samuel Blixen
13 enero, 2017

Irineu Riet Correa, uno de los interlocutores políticos con los militares, en el período de gobierno de Luis Alberto Lacalle / Foto: Oscar Bonilla - Archivo

Ajuste fiscal, privatización de las empresas públicas, reglamentación del derecho de huelga: las principales insignias de la política neoliberal que Luis Alberto Lacalle desplegó no bien asumió la presidencia en marzo de 1990 tuvieron coletazos explosivos cuando los recortes presupuestales afectaron a las Fuerzas Armadas, en la rendición de cuentas de 1992. Diez atentados con bomba, detonación de granadas y ametrallamientos, reivindicados por dos grupos paramilitares (la Guardia de Artigas y el Comando Lavalleja), una virtual insubordinación y acuartelamientos en distintos puntos del país, dieron cuenta a lo largo de ese año y el comienzo de 1993, de las profundas divisiones existentes en el Ejército y en la Armada Nacional.

Lacalle pretendió revertir los términos de una ecuación histórica, esto es, la preeminencia de altos mandos identificados con el Partido Colorado, con designación de oficiales “correligionarios”.  Al mediar su primer año de mandato se propuso corregir la correlación heredada de su antecesor Julio María Sanguinetti: de los 12 generales en actividad sólo cuatro podían identificarse como simpatizantes del Partido Nacional. El ascenso a general del coronel Manuel Fernández, destinado a la Casa Militar, supuso pasar por encima de 44 coroneles; y la designación de su amigo James Coates en la comandancia de la Armada, apenas nueve horas después de ascenderlo a vicealmirante, implicó pasar por encima de 46 capitanes de navío. El esquema se completó con el general Yelton Bagnasco en la División de Ejército 1, el general Mario Aguerrondo al frente de la inteligencia militar, y la designación del general Juan Modesto Rebollo como comandante del Ejército, que obligó al general “de la derecha”, Juan Zerpa, a pasar a retiro.

La política militar de Lacalle, que el ex presidente Sanguinetti calificó de “desastre”, profundizó las fracciones en la interna militar, pero no alteró la “rutina” del anexo del Departamento III de la Dirección General de Información del Estado, que se encargaba de la organización del espionaje extendido a toda la sociedad. La siembra de micrófonos en los despachos del ministro de Defensa, Mariano Brito, del comandante de la Armada y del general Fernán Amado, debió ser ejecutada por otra repartición del Departamento III o por la Compañía de Contrainformación. El anexo se centraba por esos días turbulentos en el espionaje al Partido Comunista, al Mln, al Pit-Cnt y particularmente a los sindicatos de las empresas estatales, además de vigilar a las esposas de funcionarios policiales que preparaban las condiciones de la huelga policial de noviembre de 1992.

Los manipuladores de los infiltrados recomendaban recoger cualquier opinión de dirigentes políticos sobre las Fuerzas Armadas. Así, un oficial identificado con el seudónimo “Adrián”, informaba a fines de noviembre de 1991 las noticias proporcionadas por el agente 836 K-III sobre la interna del Partido Nacional durante una conversación en un café de las inmediaciones de Constituyente y Carlos Roxlo. El espía, a quien Adríán llamaba “Pingüino”, reveló que Enrique Martínez, dirigente juvenil del Herrerismo, había enviado a Libia a Guillermo Aishemberg (“cercano a la 504”) y a Gómez Brasil (“viejo militante del partido”) para sondear posibles transacciones comerciales con los libios. “Pingüino” detalló trascendidos sobre las reuniones que venían manteniendo algunas personalidades, entre ellas Rodolfo Nin Novoa, Irineu Riet y Alberto Zumarán para la formación de un grupo opositor dentro del partido. El senador Zumarán, dos veces candidato wilsonista a la Presidencia, había denunciado el programa económico y social que estaba aplicando Lacalle y había acusado a 14 jerarcas del gobierno por “implicancias” con la dictadura; era, según Pingüino, la cabeza principal de ese movimiento opositor.

Según el espía, Irineu Riet, “una figura bien vista dentro del partido”, era la persona clave para hablar con las Fuerzas Armadas, “siempre que Zumarán o el Ejército lo consideren necesario”. Habitualmente las reuniones con oficiales del Ejército se realizaban en las cabañas militares de Santa Teresa, “siendo muy asiduas y fructíferas”. El manipulador quiso saber los nombres de los oficiales: “la fuente no pudo precisar con qué militares se ha entrevistado Irineo (sic) Riet, pero sí aseveró las excelentes relaciones con el jefe del Batallón de Infantería N° 12 de Rocha y jefes que administran las cabañas militares de Santa Teresa”.
Por entonces, la llamada “agencia” que reclutaba y comandaba a los espías recibía en agosto de 1991 un pormenorizado informe del agente 951 B-I sobre una reunión del grupo de base 6, del Zonal III del Mln con dirigentes, entre los que se contaban José Mujica, Lucía Topolansky, Jorge Manera, Luis Puime y Omar Alaniz. Entre los asistentes que el espía identificó –y que consignó en su informe– estaba el “Zapa”, un ex preso político que el Departamento III tenía a sueldo como infiltrado en el Mln con el seudónimo “Fabricio”, lo que sugiere que el Zonal III albergaba a más de un espía.

El informe del agente 951 consignaba la opinión de José Mujica, quien proponía que el Mln debía dialogar con los militares. “A las Fuerzas Armadas hay que integrarlas ya que con el Mercosur ellos también se quedarán sin trabajo”, habría dicho Mujica según la síntesis del espía.
El documento del Departamento III confeccionado y archivado el 21 de agosto de 1991 afirmaba que según Mujica “en el Ejército hay caraspintadas, que son los menos malos porque son nacionalistas, y a diferencia de los aprovechadores, estos han tomado siempre las armas para defender el nacionalismo contra el imperialismo y con todos ellos tenemos que ir al diálogo”. El dirigente del Mln afirmaba que “en el Ejército hay sectores o grupos que tienen contradicciones entre sí, y que tratan de acomodarse”. El diálogo según Mujica debía tener como objetivo “solucionar todos los problemas y no dejarlos afuera”.

Las contradicciones que apuntaba Mujica se expresaron un año después en la serie de atentados de las bandas paramilitares y en la crisis de la huelga policial, que dejó al Ejército en estado de asamblea. El presidente Lacalle se propuso utilizar al Ejército para reprimir a los policías. Quiso saber si los oficiales del Ejército acatarían la orden: “Supongo”, fue la respuesta del comandante Rebollo; el general Fernández consideró que era posible desalojar a los huelguistas, pero “habrá no menos de 30 muertos”. El presidente optó por encomendar al Ejército y a la Armada el patrullaje de la ciudad. En el momento en que firmaba el decreto respectivo, en una sesión del Consejo de Ministros, alguien cortó la luz y dejó a oscuras el Edificio Libertad porque tampoco funcionó el generador.


Miércoles 25 • Enero • 2017
Movilización de trabajadores del hospital de Clínicas. Foto: Santiago Mazzarovich (archivo, noviembre de 2016)
Movilización de trabajadores del hospital de Clínicas. Foto: Santiago Mazzarovich (archivo, noviembre de 2016)

Conflictos sindicales atendidos por el MTSS crecieron 525% en diez años

Sea por el creciente rol del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social (MTSS), por el incremento de trabajadores sindicalizados o por la presencia del Estado en negociaciones tripartitas, los conflictos colectivos que ha atendido la Dirección Nacional de Trabajo (Dinatra) de esta cartera desde 2005 prácticamente no han parado de subir, con la salvedad de lo ocurrido el año pasado. También lo han hecho la cantidad de reuniones realizadas por cada uno de esos conflictos, el porcentaje de estos que fueron abordados de forma previa a la toma de medidas y la cantidad de acuerdos logrados en las oficinas del ministerio. A continuación, trabajadores, empresarios y funcionarios estatales buscan una explicación a la actividad cada vez más intensa de esta secretaría de Estado.
Los datos pueden obtenerse de las sucesivas memorias anuales que publica el MTSS año a año. Mientras que en 2005 la Dinatra atendió 304 conflictos colectivos, en 2015 alcanzó a 1.902, lo que supone un crecimiento de 525% durante la década. Como puede apreciarse en la gráfica, en 2016 los conflictos atendidos por la Dinatra bajaron a niveles similares a los de los años 2012 y 2013. Pero, a pesar de esto, funcionarios de esta unidad ejecutora aseguraron que el descenso se debió a que los conflictos durante el último año fueron “más prolongados”, y aseguraron que el año llegó a ser más movido que 2014. El director nacional de Trabajo, Juan Castillo, tuvo una impresión similar. “Sin mirar las estadísticas ni los números, es obvio que en estos últimos dos años se ha profundizado la generalización de conflictos”, dijo al respecto.
Así como crecieron los conflictos, también lo hicieron las audiencias que hizo la Dinatra para atenderlos. De 1.538 reuniones realizadas en 2005 se llegó al pico máximo de 4.185 en 2015, un incremento de 172%. Al igual que con los conflictos, la cifra se redujo en 2016: 3.412 audiencias.
Para Castillo, “los conflictos siempre existieron”, pero “lo que no siempre existió es que con el conflicto se llegara al MTSS, porque normalmente esto se arreglaba en forma bipartita entre empresas y trabajadores, pero ahora cada vez más van al ámbito tripartito y golpean las puertas del ministerio”. Además, aseguró que los conflictos “cada vez más arrancan en su expresión más alta de movilización”. Dijo que la cartera todavía no analizó en profundidad estos datos. No obstante, aseguró que “en nuestro cuerpo están las huellas de todo esto”, ya que en la Dinatra ha llegado a trabajar “12, 13 o 14 horas por día”. Las puertas del MTSS, sostuvo, se llegaron a abrir sábados y domingos para atender conflictos durante los últimos dos años.
La plantilla de la Dinatra, de hecho, no ha registrado un aumento considerable en los últimos años, según revelan los informes anuales que la Oficina Nacional de Servicio Civil presenta junto con las rendiciones de cuentas. Esta unidad ejecutora tenía 87 funcionarios en 2008 y en 2015 llegó a 107. El ministro de Trabajo y Seguridad Social, Ernesto Murro, destacó en diálogo con la diaria que “las autoridades de la cartera felizmente han encontrado “un desempeño de los funcionarios superior al que esperábamos hace dos años”, cuando el jerarca fue investido en su cargo. “Reiteradamente los hemos felicitado por su trabajo, sin perjuicio de que todavía se puede mejorar más”, aseguró.
Posibles explicaciones
Para Murro, el aumento de los conflicto atendidos por su cartera se debe al “rol creciente que asume el MTSS en democracia”. Dijo que en épocas de dictadura y autoritarismo, o entre 1990 y 2005, cuando “prácticamente se quiso eliminar la negociación colectiva”, había “menos oportunidades de negociación y libertad sindical”. “Queremos más y mejor negociación en todos los sectores de actividad, pero también hubo gobiernos que querían menos negociación colectiva y menos derechos de los trabajadores. Nosotros, con la misma fuerza, también defendemos los derechos de los empresarios y las empresas”, aseguró.
El presidente del PIT-CNT, Fernando Pereira, atribuye estas cifras a que actualmente hay más sindicatos que en 2005. “Si la afiliación en 2004 era de algo más de 110.000 personas y la actual es de 410.000, esto implica un movimiento capital del movimiento sindical”, lo que significa, además, que ahora existen “empresas y sectores con sindicatos donde antes no había movilización sindical”, con sus respectivas reivindicaciones y búsqueda de mejorar sus circunstancias laborales, “y esto genera conflictividad”, interpretó.
Pereira aseguró que la Dinatra en 2005 era “un cachito de la oficina que ocupa Castillo”. “Este cambio que se podría medir en metros cuadrados se mide también en la construcción de derechos, y si el movimiento sindical logra entrar en más lugares, se va a agrandar más”, afirmó. En estos años, sostuvo el dirigente sindical, la negociación colectiva y el restablecimiento de los Consejos de Salarios significaron que haya “más de 2.000 organizaciones nuevas desde 2005”.
Otras visiones
Como era de esperarse, en el sector empresarial las opiniones son diferentes. Andrés Fostik, integrante del Consejo Directivo de la Cámara de Industrias del Uruguay, se mostró impactado por los números (que “asustan”) y dijo que suponen un “fracaso total de la negociación colectiva”. “De confirmarse esto, lo que estamos viendo es que una mayor y más profunda negociación colectiva y un mayor crecimiento del salario real en un período de una década es sinónimo de mayor conflicto”.
Fostik dijo que si antes, cuando “la gente tenía la mitad de los beneficios para acceder a un salario, había la décima parte de los controles para que los empresarios cumplan con sus obligaciones y no existían las más de 60 normas laborales”, había menos conflictividad que ahora, es porque “algo está mal”.
Para este gremialista, la negociación colectiva debería ofrecer mejores condiciones salariales a los trabajadores y, a cambio, otorgarle el beneficio al empresario de que trabaje en paz. Pero la situación actual no es de extrañar, sostuvo, ya que “las leyes que se hicieron para promover la libertad sindical de alguna forma degeneraron en que eran sólo derechos lo que se adquiría por medio de ellas, y no obligaciones”. Finalmente, reflexionó: “Si a mayor negociación colectiva se genera un aumento disparatado del conflicto, quizá, de haber sido bipartitas [las negociaciones], hubiera sido más fácil que los trabajadores estuvieran más conformes”.
Por su parte, el ex vicepresidente de la Cámara Nacional de Comercio y Servicios y ex asesor de Luis Alberto Lacalle durante la campaña electoral de 2009 Gustavo Licandro dijo, a título personal, que “cuanto más regulado esté el funcionamiento del trabajo, y menos elástico sea, habrá más tensión entre los trabajadores y las empresas”. Aseguró que, al sacarle flexibiliad, “se hace más difícil llegar a acuerdos naturales”. Para Licandro, “gracias a que en 2002 no había negociación tripartita, la situación no fue mucho más crítica de lo que fue”.
Experimentados bomberos
Así como las cifras del MTSS marcan un aumento de los conflictos atendidos por esta cartera, también revelan que la cantidad de acuerdos logrados en su atención fue creciendo en proporción año tras año. En 2005, la Dinatra logró alcanzar acuerdos en 93% de los conflictos que atendió. Esa cifra se incrementó progresivamente con el paso de los años hasta llegar a 98,6% en 2015. En cambio, una cifra que se mantuvo bastante estable con el paso de los años es el porcentaje de los conflictos atendidos por la Dinatra previamente a la adopción de medidas por alguna de las partes. En 2006, 95,4% de los conflictos fue abordado por la Dinatra antes de la existencia de cualquier tipo de medida gremial. En 2013 y 2015, esta cifra se ubicó en 96%.


Logo de la diaria
Miércoles 25 • Enero • 2017

Pescadores artesanales de sábalo en Nueva Palmira, en conflicto

Ayer llegaron a Montevideo pescadores artesanales de Nueva Palmira, Colonia. Se reunieron con la Dirección Nacional de Recursos Acuáticos (Dinara) y con la bancada de diputados del Frente Amplio. Se habían movilizado el viernes, porque no pescan sábalo desde mediados de diciembre, a causa de la baja del precio del pescado y de los desencuentros con la única empresa que compra esta especie y no lo hace desde esa fecha: Evamel SA, ubicada en el departamento de Salto y cuya marca comercial es Latina Comercial de Alimentos.
Eduardo Benítez, delegado del Sindicato Único de Trabajadores del Mar y Afines en Nueva Palmira, contó a la diaria que la baja ha crecido gradualmente en los últimos meses: “En noviembre estaba a 20 pesos el kilo, a fines de noviembre bajó a 17, unos días antes de las fiestas bajó a 15, y desde ahí ya no pescamos por el parate de las fiestas. El 4 de enero, cuando fuimos a arrancar de nuevo, quedaba en 13 pesos” y a ese precio “ya no es rentable, hay que sacar una cantidad brutal de pescado”. Benitez dice: “Si nos quedábamos quietitos y sumisos nos compraban todo a 13, pero como nos organizamos el tipo se recalentó”. Después de la movilización del viernes habían llegado a un acuerdo con el empresario -en el que medió la Dinara-, que regía hasta ayer. Arreglaron el precio en 14,50. Pero los pescadores entendieron como un “castigo” que les hayan fijado un cupo de 150 kilos por pescador por día, que equivale, con suerte, a unos 2.000 pesos. Pero llegaron a acordar que la empresa compraría el pescado suficiente para compensar los días sin pescar. Entre lunes y martes, deberían pescar unos 20.000 kilos, 400 kilos cada pescador, a $14,50 el kilo, pero los pescadores no pudieron completar esa cantidad porque el agua estaba muy alta, y ni el clima ni los peces acompañaron. Ahora el desafío es encontrar una solución. Los trabajadores aceptaron esta propuesta, en principio, “para destrabar y seguir negociando” y también para “oxigenarse un poco”, ya que estaban en una situación complicada. Para Daniel Gilardoni, director de la Dinara, “el principal problema es que el sábalo es un producto que tiene pocos mercados”, y en esos pocos mercados, “los precios están en caída, y la colocación está sumamente lenta”. Según los datos que maneja la Dinara, la única empresa que está comprando y que concentra 75% de las exportaciones de sábalo es Evamel SA. La empresa le manifestó a la Dinara que “tiene stock y está viendo cómo salir a colocarlo”. Los pescadores entienden que “el mercado está complicado”, pero dicen que están buscando, “porque podría haber alguna otra chance; esto es muy coyuntural, de repente hoy está así y en 15 días salen todos desesperados a comprar pescado”. Gilardoni cree que problemas como este responden a la “situación de crisis importante que atraviesa desde hace varios años la pesca”, que tiene problemas con “los mercados de destino, la competitividad y los costos internos”. En las oficinas de Montevideo hoy seguirán las mediaciones y los intentos de destrabar la situación. Mientras tanto, en Nueva Palmira, los pescadores se embarcarán, como todos los días, para ganarse el pan.