jueves, 21 de abril de 2011

Seguirán. Ayer fue la tercera gran intervención por tierra y aire Malvín Norte: 45 detenidos/OPERATIVOS DE SATURACIÓN Interior busca evitar el fenómeno de las favelas/Párroco de La Cruz de Carrasco cuestiona operativos del Ministerio del Interior.

ES AHORA, POR MUCHO MÁS QUE EL HONOR
Y CONTRA LA IMPUNIDAD

Escribo a unas horas nomás de que la pandilla supuestamente comandada por Bonomí, arremeta sobre el barrio “rojo” en que vivo y sobrevivo con muchos otros que sienten el mismo “llamado de la selva” que yo siento y que no estamos dispuestos a dejar que ningún comemierda se meta puertas adentro de nuestras casas cediéndoles gentilmente el paso o tolerando así nomás que te revienten las puertas a culatazos o a patadas y agarren a tus hijos de los pelos y les metan la pavura del garca que sólo es valiente con un fusil apuntándote.
Sobre todo en momentos de crisis aguda del movimiento popular, la fuerza de la costumbre puede resultar fatal –y de hecho suele serlo, ¿qué duda cabe?-- en la medida que tiende a estimular fuertemente la fijación del sentimiento colectivo de que todo lo que ocurre “está escrito” y nadie ni nada pueden evitarlo, más allá de si la conjunción de los hechos posee significación positiva o regresiva, o si evidencia estancamientos históricos serios y prolongados de peligrosísimas señales respecto al futuro.

La fuerza de la costumbre es esencialmente a-crítica y aletargante.

Actúa habitualmente como auténtica enemiga de los pueblos, como verdadera aliada de todo aquello prolijamente estructurado por los “constructores de costumbre”, para jodernos la vida y abortarnos o aguarnos perspectivas ciertas de avances populares reales, consagrando de hecho --por inercia, digamos, y en cierto modo por autodesidia-- situaciones materiales y coordenadas culturales-espirituales que por supuesto tienen su razón de ser histórica, pero no de una historia inmutable, idéntica a sí misma, insuperable, sumisa, como si ella tuviese un sentido predeterminado por no se sabe qué designios sobrenaturales omnipotentes e incontrolables para los pobres mortales que vivimos del sudor de nuestra frente y que muchas veces sentimos el impulso de juntar las palmas para rogarle al cielo o a la dialéctica un poco de piedad, al menos.

La fuerza de la costumbre se retroalimenta, se potencia a sí misma en el llamado imaginario popular hasta convertirse en algo así como la “fuerza del destino”… Un “destino” que paraliza, que sobreestima todo aquello que sobrevive, precisamente, de resultas de las intermitentes y relativas parálisis del movimiento popular. La fuerza de la costumbre nos niega y nos va convirtiendo en derrotados crónicos sin remedio.

¿Hay algo más claro en este sentido que la misma explotación?. ¿Qué es, si no, el mismo Estado burgués omnipresente en todos los aspectos de nuestras vidas a pesar de su misma decadencia y su agudísima descomposición ética, al punto de habernos convencido de que hasta cuestiones de elemental derecho natural, como el derecho a la vida, justamente, deben ser sometidas a decisiones “democráticas”, consideraciones parlamentarias o fallos de patéticas cortes internacionales que promueven la coerción y la represión planetarias al mismo tiempo que hacen gargarismos con los “derechos humanos” universales amagando con falaces e incumplidas sanciones a quienes no los respeten?.

Hoy, de nuevo, estamos ante los estragos impresionantes de la “fuerza de la costumbre” en la asustada y desmoralizada comarca oriental del Río de La Plata.

Verdaderas hordas armadas asaltan a pleno sol nuestras taperas de chapa y cartón, revuelcan por el piso nuestros trapos miserables, engrillan a nuestros hijos, los humillan haciendo clavar sus caras sobre el barro contaminado de las llamadas “zonas rojas”, los babosean, los meten en los “roperos de la seguridad bordaberryana”, los hunden en los calabozos miliqueros de alguna comisaría (por ahora, sólo por ahora), les hacen conocer una oscuridad y una prepotencia que no es cosa del fascismo de ayer o de la dictadura “cívico-militar”, sino del fascismo de hoy, del “Uruguay productivo con justicia social”, de un país que únicamente produce cada día más miseria y más contraste social y que una vez más se pone el broche de oro denigrante y podrido de la represión y la barbarie sobre los más jodidos como marca de fábrica.

Se nos está metiendo otra que el dedo en el traste descaradamente.

Con “órdenes judiciales genéricas” o no (¡tanto dá!), con papeluchos cínicos y arteros del para nada “independiente” poder judicial o sin ellos, se nos somete al vejamen del poder político-económico ejecutado por los herederos reales del “proceso”, por los que este 14 de abril –con uniforme y sin él-- han vuelto a proclamar “la vigencia absoluta” de la doctrina neo-nazi “a la criolla”, aggiornada pero nada sutil, televisada pero igualmente feroz, rastreramente consagrada por legisladores y ministruchos francamente cagones, y, desdichadamente, puesta en escena ante nuestra irritante y vergonzante pasividad, que hasta se da el lujo de detenerse a calibrar las “connotaciones políticas” de la invitación de un verdugo a sus víctimas “para dialogar y aclarar” juntos, la verdad.

Al terrorismo continuado de los desaparecidos sin tumba, suman el terrorismo de traficar con los sentimientos de los deudos, con la misma frialdad con que antes picanearon y lanzaron gente desde los aviones del “plan Cóndor”.

Nos están violando, y nos dejamos.

Los rumores apocalípticos, los videos terroristas jugando a las escondidas y a la mancha agachadita, las amenazas previas al 14 de abril, no se plasman en atentados disparatados sobre algún sobreviviente rengo, tullido o loco de aquella histórica y trágica jornada en la que --al decir de uno de los más consecuentes y sagaces investigadores denunciantes de las atrocidades fascistas, el periodista Roger Rodríguez-- el “escuadrón de la muerte” se puso un uniforme que lució durante una docena de años y más.

Las verdaderas patoteadas a caballo y a metralleta de estos días, las invasiones a los barrios “rojos” más pobres, el despliegue liso y llano del terrorismo de Estado filmado como se filman los bombardeos criminales sobre Libia e Irak –para verlos mascando cómodamente alguna papita crujiente o queseritos con mate lavado o algún escocés trucho--, no son ningún ensayo facho ni fantasmagoría del futuro.

Son la ofensiva de hoy mismo de un sistema cuyo triunfalismo agónico solamente se detiene ante fuerzas reales que se opongan confrontándolo e impugnándolo hasta las últimas consecuencias, aunque las únicas armas sean la voz, los piés y los puños alzados y apretados.

La fuerza de la costumbre nos llevó a esto, a estar sin estar, a ser jodidos, a una cobardía colectiva que tiene explicaciones, sin duda, pero que no deja de serlo. Habernos habituado a tolerar que desde una cárcel simbólica los torturadores y asesinos informatizados hayan propalado así nomás sus manifiestos inmundos y maulas y sus videos amenazantes, nos ha colocado en esta pasividad espantosa de ver en la pantalla chica cómo nos bajan los pantalones y nos suben las polleras y se ensañan con la pobreza, sin chistar y sin siquiera amagar al menos con una buena y merecida puteada a los cornudos que juntan firmas para bajar imputabilidades a la vez que promueven la plantación casera de más droga con la que seguir adomerciéndonos y emputeciéndonos hasta mirar por encima del hombro a los guachos a los que, después de ver y sufrir todo esto, dan ganas de decirles sin temor a ninguna acusación de apología del desclasado:

--¡Estos son los que te meten el caño en las manos; estos son los que te han hecho un delincuente, a estos es a los que vos servís de hecho encausando tu bronca y tu rebeldía rastrillando entre el pobrerío pa curtir la pasta-base con la que te suicidan!… ¡Hacé lo que sientas debés hacer, pero apuntá bien, no apuntes más para abajo, no pierdas los restitos de moral obrera que puedan quedarte, y reclamá de los de abajo lo que los de abajo jamás deben perder: dignidad, amor propio, sentimientos espontáneos que te digan dónde están los tuyos y dónde tus verdaderos enemigos!!!.

En cuanto a nosotros, los acostumbrados, los que a veces nos peleamos con nosotros mismos tratando de tener la postalina en el diagnóstico y el pronóstico político más adecuados, o en tratar de dejar bien plasmado nuestro sello preferido, apelemos a lo único que te saca de los estragos brutales de la fuerza de la costumbre si es que te queda sangre en las venas: el instinto, el olfato de clase que te hace ver sin mucho análisis dónde está el cangrejo y dónde tenés que golpear para no convertirte en tu antítesis y no ser de hecho algo parecido a los mismos que en lugar de recurrir a las reservas populares y la movilización callejera para denunciar y detener la arremetida facha, se someten, se pliegan a ella, se hacen sus cómplices activos y colocan en sus frentes el tatuaje infame de la esvástica vernácula.

¡Esta es la impunidad que hay que enfrentar como sea, ahora! ¡A los gritos, a las puteadas, sin perder la inteligencia pero tampoco el honor, esa cosa no muy intelectualizable pero sí profundamente enraizada en la moral del pueblo trabajador, que a veces parece muerta de impotencia, pero que resucita toda vez que al menos el instinto de clase te dice que sin ella, no hay nada, absolutamente nada más que la resignación y la derrota a manos de una fuerza de la costumbre que es también la fuerza de los déspotas paridos por la peor de las “buenas costumbres”: la de aceptar la realidad como algo inamovible, como algo que efectivamente puede ser inamovible siempre que nosotros no intentemos siquiera la rebeldía más elemental de salir a la calle a protestar, arriesgándonos a los cachiporrazos y las “asociaciones para delinquir” inventadas por algún doctorcito garca que en plena dictadura no fue capaz siquiera de renunciar a su caricatura de “jueces” o por algún ministrito progre que renunciando podría terminar sus días sin que nadie le diga “traidor”, lisa y llanamente.

¡La impunidad es aquí y hoy! ¡La impunidad es capitalismo, imperialismo y terrorismo de Estado de hoy, bien fresquito, bien vigente, bien envalentonado por una fuerza de la costumbre a la que también se le puede arrancar las guampas con coraje y dignidad de los de abajo arracimados!!!.

¿Tremendismo?... Importa un carajo que alguien lo crea así. Importa tanto como la invocación estúpida de estúpidos pactos perdonavidas entre caciquillos renegados y falsos guerreros sin guerra y sin valor.

¿Qué proponer en concreto?... Nada más que salir de las cuevas y entender que aquí está el tema de cualquier plataforma del pueblo trabajador más allá de actos o fechas históricas que por supuesto debemos celebrar, sin olvidar que cuando la represión sistematizada se va adueñando de la situación, la lucha es todos los días, en todas la calles, en todas las plazas, de todas las organizaciones y de todas las des-organizaciones, en una unidad de acción y de espíritu que relega todo lo demás como lo hace cualquier animal salvaje cuando percibe el ojo del francotirador entre la espesura del monte: se defiende atacando, luchando incluso contra el propio miedo, moviéndonos para que el alza de mira se vaya al carajo y el francotirador comprenda que está tan amenazado como la fiera amenazada, y también sienta miedo, al menos miedo.

¿Qué son estas palabras arrebatadas?... Lo que se vé nomás a simple vista: el llamado de los instintos, el clamor que nace de un acoso que hay que sentirlo y enfrentarlo, o sucumbir entre pruritos de que el alerta es “apresurado”, “cortoplacista”, “voluntarista”, “idealista”, etc., etc., etc.. De que hay que “discutirlo muy bien”…

Escribo a unas horas nomás de que la pandilla supuestamente comandada por Bonomí, arremeta sobre el barrio “rojo” en que vivo y sobrevivo con muchos otros que sienten el mismo “llamado de la selva” que yo siento y que no estamos dispuestos a dejar que ningún comemierda se meta puertas adentro de nuestras casas cediéndoles gentilmente el paso o tolerando así nomás que te revienten las puertas a culatazos o a patadas y agarren a tus hijos de los pelos y les metan la pavura del garca que sólo es valiente con un fusil apuntándote.

Lo hago aguardando la invasión  “pro seguridad ciudadana” convencido de que su “comandante” es el mismo que impulsa la baja de la imputabilidad para menores de edad que por supuesto no son los hijos imberbes de la crema pituca, esos pequeños aprendices de los grandes rastrillajes burgueses que canal 4 ni Bonomi mencionan.

Lo hago porque esta es la impunidad a la que hay que romperle el cuello y el codo y la muñeca y los nudillos hasta que sus huesos suenen como sonaron los huesos de nuestras compañeras y nuestros compañeros asesinados por la basura fascista.

Lo hago para no ser un desaparecido más en este presente que nos dice que nuestros desaparecidos desaparecieron por resistirse precisamente a esta misma barbarie que ya asoma sus colmillos para clavarlos donde ya los ha clavado antes, aunque ahora nos digan que están “sirviendo a la sociedad” y que la “seguridad” viene de la mano de los garrotazos, los plantones y toda esa mierda que en los ´70 no supimos rechazar como un solo hombre, por ingenuos y gracias a una fuerza de la costumbre que nos había dicho que aquí al fascismo lo había liquidado el batllismo y que la milicada y sus comandantes civiles, no eran capaces de actuar como lo habíamos visto en “La batalla de Argelia” y como hoy lo vemos en los flashes de las cámaras al servicio del terrorismo de Estado y de los que han perdido hasta la vergüenza, en Uruguay o en el norte africano…

¡O los barrios “rojos” izamos nuestros corazones abrazando la bandera roja de la dignidad de los barrios “rojos” rescatando la dignidad de todos los barrios, o nos quedaremos no sólo sin banderas!.

¡Hagamos una cadena humana de barrios resueltos a defender la dignidad del pueblo trabajador, para cerrarle el paso a cualquier asonada fascista y para cederle el paso a una vergüenza colectiva que es el único escudo contra la impunidad del presente, esta impunidad de oligarcas decadentes que recogen firmas para legislar el crimen antes de cometerlo, mientras nos van mostrando cómo será esta vez la cacería humana en defensa de las “buenas costumbres”, “la constitución” y “la democracia”!.

Que ¡arriba los que luchan! sea mucho más que una consigna y que ella hermane a todos los que no queremos perder hasta la vergüenza de ser. Que ¡arriba los que luchan! sean las palabras de la unidad real de los de abajo, amasada entre miedos, sí, y entre desmoralizaciones también, pero no abandonada por creer que ella es una utopía inalcanzable o solamente alcanzable cuando hayamos dado con unas “condiciones subjetivas” que en definitiva se crean en la lucha diaria y en el entrelazamiento estrecho de nuestras debilidades individuales, deponiendo cualquier sentimiento de que la revolución es cuestión de entendidos y no de simples y sencillos vecinos que se transforman en revolucionarios sin más trámite cuando sienten en su piel y en sus entrañas que el odio y la sed de justicia se avivan al unísono y en todos y cada uno, ante la presencia del atropello que no deja de serlo por más que venga con firma del juez o con orden ministerial.

¡Arriba los que luchan!. ¡Juntemos todos los cortafuegos para frenar el incendio de la prepotencia filmada!!!. ¡Abajo la represión y la criminalización de la pobreza!. ¡Ni un solo milico invadiendo nuestros hogares!. ¡Ni un solo botón baboseando a nuestros hijos!!!. ¡Nada que aliente la “argelización” irresponsable del Uruguay!. ¡Frenar ya toda provocación fascista craneada para volver a colocarnos en una falsa guerra de falsos demonios, que nos conduzca al derrotismo y la desmoralización generalizada del movimiento popular!.


Gabriel Carbajales, Montevideo, 20 de abril de 2011

El oficialista "La Republica" festeja:mano dura contra los pobres,razzias para sembrar la inseguridad en la poblacion,igual que antes

Seguirán. Ayer fue la tercera gran intervención por tierra y aire

Malvín Norte estuvo en el ojo de la tormenta: 45 detenidos

Incautaron armas blancas, motos robadas y droga; un arrestado es menor.

Seguirán. Ayer fue la tercera gran intervención por tierra y 
aire.
Seguirán. Ayer fue la tercera gran intervención por tierra y aire.
Ayer, la zona de Malvín Norte estuvo en el ojo de la tormenta, ante una tercera intervención policial a gran escala. Nuevamente, más de medio centenar de efectivos, apoyados por aire por un helicóptero de la Fuerza Aérea, cumplieron en dos etapas, otro operativo como los ya concretados, el primero en La Chacarita de los Padres y el segundo en la Cruz de Carrasco.
El balance final del procedimiento fue de 45 personas detenidas para ser indagadas. Una de ellas fue aprehendida por la tarde, es decir, en la segunda parte de la intervención.
En horas de la mañana, precisamente a las 7.30, jugando con el factor sorpresa, 70 policías de distintas dependencias, se desplegaron por toda la zona de Malvín Norte.
En el desarrollo del procedimiento, en un inmueble abandonado, fueron localizados y detenidos, 20 jóvenes, todos ellos consumidores de drogas. Les fueron incautados alucinógenos y armas blancas. Asimismo fueron concretados varios allanamientos en fincas previamente establecidas. También fue incautada droga para su comercializacion. Los moradores fueron detenidos.
Dos motos robadas también fueron localizadas y recuperadas.
En resumen, fueron capturados 40 hombres, tres mujeres y un menor.
Todos ellos vienen siendo indagados y sometidos a reconocimientos con la finalidad de establecer si se encuentran involucrados en acciones delictivas.
El jefe de la Oficina de Prensa de la jefatura capitalina, inspector Juan Carlos Duré, indicó a LA REPUBLICA que de acuerdo al plan de operaciones previsto, la vigilancia policial continuará en esa zona, hasta que el titular de la Seccional 15ª así lo entienda.
El jerarca expresó además que la intervencíón fue considerada exitosa y que este tipo de acciones continuarán siendo llevadas a cabo, donde, el factor sorpresa jugará siempre un rol preponderante para que el procedimiento tenga mayor éxito.

El vocero de la derecha,el diario "El Pais" contribuye a la "seguridad ciudadana"
Se califica de IMPUNIDAD la situacion en los barrios marginales y se miente diciendo
que la situacion esta "bajo control" en las favelas.Bonomi dice que los detenidos
fueron denunciados por sus vecinos (como en las epocas de Pacheco y Bordaberry)
A pesar de eso mas del 90% de los detenidos fueron liberados por los jueces.Estan
en un juego muy peligroso pretendiendo asi contrarrestar la juntada de firmas de los
colorados y los blancos.
El ministro del Interior Eduardo Bonomi dijo:

"Evitaremos los procesos de feudalización", afirmó y dijo que los procedimientos seguirán en "decenas" de barrios de la zona Metropolitana.


Último Momento

OPERATIVOS DE SATURACIÓN

Interior busca evitar impunidad criminal y que se copie el fenómeno de las favelas



El ministro del Interior Eduardo Bonomi dijo hoy a radio Carve que no se permitirá la existencia de zonas donde los delincuentes puedan actuar libremente y sin pudor. "Evitaremos los procesos de feudalización", afirmó y dijo que los procedimientos seguirán en "decenas" de barrios de la zona Metropolitana.
Más tarde, afirmó en Radio Sarandí que si bien no se compara la situación actual con lo que ocurre dentro de las favelas brasileñas, algunas zonas de la capital están en la etapa inicial de este fenómeno norteño donde los criminales y organizaciones mafiosas actúan con libertad, por lo que dijo debe ser prevenido.
"Si uno no lo corta ahora puede llegar a mayores". puntualizó.
DELITOS. Bonomi señaló que la jurisdicción de la Seccional 16º, en donde se realizó ayer el operativo, es la que presenta mayor número de rapiñas y hurtos.
El secretario de Estado explicó que muchas veces esas zonas sirven como base para la protección de los propios delincuentes. "Roban y van hacia un lugar concreto y se quedan ahí impunemente esperando que pase el temporal y luego salen y roban de nuevo", dijo.
Bonomi pidió además que se establezca un acuerdo de cómo encarar la delincuencia y reclamó a los jueces mayor rapidez en la coordinación con las autoridades. Puntualizó que generalmente, cuando se solicitan órdenes de allanamiento, los magistrados no las brindan tan ágilmente como se necesitaría.
Bonomi aclaró que los operativos de saturación realizados este mes están muy lejos de ser "razias", y agregó que la mitad de los detenidos fueron denunciados por los propios vecinos.
A nivel ministerial hay satisfacción con los resultados de los operativos y no se descarta que se incremente su frecuencia, además de combinarlos a otros procedimientos. Otro de los objetivos de la cartera es la recuperación de espacios públicos, al momento tomados por la delincuencia.
El País Digital

Sacerdote por la "impunidad" de los pobres:
“No entiendo qué sentido tiene este clima bélico”, se lamenta Bonavía, un admirador del jesuita Juan Luis Segundo (referente de la Teología de la Liberación) y continuador de la línea de Luis Perico Pérez Aguirre.

Pablo Bonavía. Foto:
Pablo Bonavía. Foto: Nicolás Celaya

La carga de la cruz

Párroco de La Cruz de Carrasco cuestiona operativos del Ministerio del Interior.
Ayer de mañana hubo otro operativo sorpresa del Ministerio del Interior. Fue en Malvín Norte y terminó con 44 detenidos, de los cuales 42 fueron liberados. A pocas cuadras de allí, el párroco de la iglesia de La Cruz de Carrasco, Pablo Bonavía, miraba asombrado el movimiento de vehículos policiales y el helicóptero que sobrevolaba el lugar. “No entiendo qué sentido tiene este clima bélico”, se lamenta Bonavía, un admirador del jesuita Juan Luis Segundo (referente de la Teología de la Liberación) y continuador de la línea de Luis Perico Pérez Aguirre.

Bonavía por cuatro

Proyecto intepretativo: Me parece un error político, da la impresión de que el FA no se toma en serio los resultados de un recurso que es de los más democráticos. No me gusta esa imagen de una izquierda más iluminada que el resto.
Emergencia carcelaria: No sé hasta qué punto está en la sensibilidad de la gente de la izquierda que los presos tienen derechos y que necesitan recuperarse. No todos los izquierdistas piensan que quienes delinquen se hacen más daño a sí mismos que a las víctimas del momento. La izquierda necesita ampliar su concepto de derechos humanos.
Baja de la edad de la imputabilidad: No sirve para nada. Es una forma de estigmatizar y cae sobre la juventud, uno de los sectores más vulnerables de la sociedad, una responsabilidad que no les corresponde. Es evidente que la intencionalidad política es el factor desencadenante de todo esto.
Iglesia y dictadura: Algunos historiadores afirman que después del Partido Comunista la institución que más resistió la dictadura fue la Iglesia. Las parroquias albergaron a muchos perseguidos y hubo gente que se la jugó de verdad.
-Las denuncias por abusos sexuales contra menores reflejaron una postura de falta de autocrítica de la Iglesia Católica. ¿Cuál es su evaluación?
-Es un caso interesante, porque estas denuncias llamaron tanto la atención, dentro y fuera de la Iglesia, que por un tiempo provocó que la institución quedara paralizada. Hubo intentos por minimizar los hechos y después la realidad nos mostró que habían pasado cosas. El problema es que la respuesta, durante mucho tiempo, estuvo más preocupada en no desprestigiar a la Iglesia que en defender los derechos de las víctimas. Los cristianos que adoramos a una víctima, que fue Jesús, deberíamos ser capaces de asumir la perspectiva de la víctima antes que cualquier otra. No en vano, algunos teólogos hablan de la autoridad de las víctimas, que no tiene que ver con sus valores morales, sino con el simple hecho de ser víctimas, que les da una autoridad moral especial. Los estadounidenses hablan de accountability, que es la responsabilidad de dar cuentas de lo que hago y que esas víctimas tienen derecho a que yo les dé cuenta de lo que hago, sobre todo si tengo cierta autoridad.
- ¿La Iglesia Católica ha asumido efectivamente posiciones más conservadoras en los últimos años o es una sensación instalada justamente por estar en el ojo de la tormenta?
-Las dos cosas. A mucha gente le interesa que la Iglesia aparezca como conservadora y la Iglesia está en un momento en el que toda la perspectiva del Concilio del Vaticano (en la década del 60) está un poco diluida, por cierto desconcierto frente a los cambios que vive el mundo. Hay que decir que, independientemente de nuestras posiciones, temas como el matrimonio igualitario no se planteaban hace 20 años. No hay que olvidar que la Iglesia es una institución con 2.000 años y tarda en dar respuestas lo suficientemente discernidas frente a cosas que pasan muy rápido. La Iglesia debería, manteniendo incluso sus concepciones de la “cultura de la vida” en cualquiera de sus hipótesis, tener una postura más dialogante y menos enjuiciadora de la otra parte; de esa manera lograría ser más aceptada. El problema es cuando sólo se intenta adjudicarles intencionalidades o antivalores a los otros.
-Usted señalaba en un artículo que Jesús siempre se colocó del lado de los excluidos del sistema. ¿La Iglesia Católica hoy puede definirse a sí misma como escudo de los débiles?
-Muchas veces sí. Lo que pasa es que la imagen hacia afuera de la Iglesia coincide con las intervenciones puntuales de sus autoridades, pero es muy diferente a lo que pasa en muchos barrios. Y no hablo de un monopolio de nada, sino de gente que está todos los días en las cárceles, en las policlínicas y que tiene sensibilidad con los más castigados. Una cosa es decir que la Iglesia comparte el sudor del día a día con la gente, y otra diferente es cuando una autoridad determinada habla a través del poderío de los medios de comunicación.
-¿Cuáles son los actores más vulnerables en la sociedad uruguaya de hoy?
-Podría sintetizarse en todos los que tienen problemas de ingresar al mercado del trabajo. Pienso en alguien que tiene 18 años, que es adicto a la pasta base, que no terminó la escuela y que viene de una tercera generación de personas sin hábitos de trabajo.
-¿Cómo vivió La Cruz de Carrasco los procedimientos de hace una semana?
-A la parroquia llegaba gente aterrada de sus casas. Muchos niños llegaban a sus casas y se enteraban de que a papá lo habían mandado preso, de repente porque no tenía documentos. No creo que sean las formas más eficaces, hay que instrumentar mecanismos de inteligencia y no estos procedimientos. Estigmatizan un barrio entero, se llevan a gente que no tiene nada que ver. La conclusión que saco tras los resultados es que vivo en el mejor barrio del mundo: desplegaron 300 policías entrando a todas las casas y encontraron un arma en dos días. Otra cosa, después de un operativo como éste es muy difícil ir a pedir un trabajo y decir que sos de La Cruz de Carrasco.
-¿Qué opina del rol de los medios televisivos en episodios como éste?
-Más allá de las filtraciones, hoy el tema es que los informativos te muestran la última parte de la película, pero antes de eso hay una cadena de hechos que no vemos. En la película La Pasión, de Mel Gibson, uno ve dos horas de tortura, sangre y sufrimiento, y termina diciendo “pobre Jesús, que está ahí”. Eso me hace acordar a los noticieros de la televisión, que te muestran la sangre corriendo pero nunca te cuentan qué hay detrás de esos episodios. En la lógica de los informativos, Jesús fue asesinado por dos soldados romanos malísimos y no por una cadena de intereses.
-¿Qué opina del proyecto de matrimonio igualitario?
-Derechos tiene que haber para todos los que se comprometen a vivir establemente como pareja, y estoy en contra de la estigmatización de las opciones que se toman. Tengo dudas respecto a si llamarlo “matrimonio”, por el riesgo de igualar situaciones que son diferentes. No es lo mismo una pareja que puede llegar a engendrar hijos que una que no puede hacerlo. En el caso de la adopción, también tengo mis preguntas: no es lo mismo tener dos padres del mismo sexo que padres de sexos distintos. Algunos afirman que no tiene ningún efecto sobre el niño, estoy dispuesto a conversarlo, pero hoy no lo sé. La realidad siempre es más compleja, pero a veces para dar un salto se pone en igualdad de condiciones dos realidades que no son idénticas, aunque ambas me merecen total respeto.
-¿Y sobre el de despenalización del aborto?
-No me gusta cuando la Iglesia les adjudica a los partidarios de la despenalización que estén a favor del aborto. El aborto siempre es una tragedia. Para mí el énfasis de esto tiene que ser no estigmatizar a la mujer, teniendo en cuenta las situaciones de desigualdad sanitaria y económica que existen. Y acompañar a la mujer que tiene intenciones de abortar, ofreciéndole las herramientas posibles a nivel social para que no lo haga. Pondría más énfasis en eso que en la penalización, pero también creo en los derecho del niño no nacido, que resulta ser el actor más débil en esto. En ningún caso estoy de acuerdo en que caiga toda la culpabilidad en una madre que en un momento de desesperación hace algo que no hubiera querido hacer, y que lo hace en circunstancias muy jorobadas. Pero cuando se dice que la eliminación de un niño en el vientre de la madre no es delito se está tocando un punto complicado. Todo es discutible y me parece legítimo que haya gente que considera que la mejor forma de defender la vida sea la despenalización.
- La Iglesia argentina expulsó a un sacerdote por avalar el matrimonio igualitario. ¿Qué opina al respecto?
- Es fruto del no diálogo al que me refería. No me convence esa expulsión, era su forma de pensar. A mí ese tipo de medidas no me gusta.
-¿En algún momento sus diferencias con la Iglesia hicieron que se sintiera fuera del colectivo?
-Puede ser que sí. Me pasó algo parecido con la postura frente a los casos de pedofilia, también con la situación de la comunidad Jerusalén [vinculada al sacerdote Adolfo Antelo]. Con la Iglesia pasa lo mismo que con una pareja, querer a alguien es también asumirlo con sus limitaciones y sus errores. Y uno termina siempre poniendo cosas en la balanza, y las veces que lo hice decidí seguir. Para mí criticar a la Iglesia también es una forma de quererla.
Lucas Silva
La Diaria

Opinion de "La Diaria": la izquierda y su relacion con la violencia ( a proposito de las razzias)

Una cosa y la otra

La izquierda uruguaya no tiene bien resuelta su relación con la violencia. En un marco general de debilitamiento de la teoría, que devalúa el requisito de un pensamiento consistente, se echa mano de argumentos a medida para enfrentar cada cuestión concreta, y a menudo se entreveran los cables. Veamos qué pasa si comparamos la aplicación de premisas similares en dos polémicas del momento: las relacionadas con el proyecto interpretativo de la Ley de Caducidad y con los recientes operativos policiales.
1) “La violencia debe considerarse en su contexto, atendiendo a sus causas de fondo”. Algo así sostiene el senador renunciante Eleuterio Fernández Huidobro para descalificar la línea de trabajo de la Corte Interamericana de Derechos Humanos en relación con el terrorismo de Estado. Señala que las violaciones de los derechos humanos por parte de las dictaduras latinoamericanas no deben recortarse como si hubieran sido sólo una serie de hechos criminales, sino que hay que comprenderlas como consecuencia de la voluntad de imponer políticas antipopulares. Por ese camino, desestima el valor de castigar a los autores directos de delitos, alegando que así queda desdibujada la responsabilidad principal de quienes los instigaron.
Muchos sonríen complacidos con ese razonamiento, pero no lo aceptan si se aplica a la violencia causante de inseguridad ciudadana. En los tiempos que corren, quien diga que hay que considerar el contexto de esa violencia y sus causas profundas, en vez de priorizar la represión a quienes delinquen, será tildado de lírico incurable.
2) “Hay que actuar en consonancia con el sentir de las mayorías”. Como no hubo, en las consultas populares de 1989 y 2009, expresiones mayoritarias de la ciudadanía contra la Ley de Caducidad, se considera ilegítimo que una decisión parlamentaria deje sin efecto esa norma. Si hay mayorías ciudadanas a favor de la rebaja de la edad de imputabilidad o de otras formas de la “mano dura”, ¿se aplicará el mismo criterio o se sostendrá, como lo ha hecho el ex presidente Tabaré Vázquez, que las mayorías pueden equivocarse y que no siempre corresponde que ellas decidan cuando están en juego los derechos humanos?
3) “Mejorar las tareas de inteligencia es un requisito previo para la represión eficaz del delito y para su prevención”. Lo hemos escuchado en boca de las autoridades como lineamiento básico para mejorar la seguridad ciudadana, aunque no sabemos si se aplicó ese protocolo para realizar los recientes operativos. En todo caso, esta orientación de trabajo puede ser válida también para abordar la cuestión del terrorismo de Estado, pero, ¿dispone el gobierno de servicios de inteligencia capaces de horadar el pacto de silencio que aún protege a los responsables de violaciones de los derechos humanos? En esta materia el escepticismo es razonable, porque la comunidad de inteligencia fue, en su momento, parte fundamental de la organización delictiva. La cuestión es en qué medida se ha podido o se podrá transformar esos aparatos para que operen al servicio de su mando constitucional.
4) “Lo importante es el efecto simbólico, dejar claro que no hay territorios sin ley, reinstalar el poder del Estado para reprimir las conductas ilícitas”. Esto se dice para justificar los operativos policiales. Pero muchos de quienes asienten no admiten la misma línea de pensamiento en apoyo a la anulación de la caducidad. Sin embargo, es cierto que las Fuerzas Armadas seguirán pareciéndose a una "zona roja" mientras funcionen como refugio seguro para el crimen organizado.
La Diaria


Organizaciones cristianas en contra de juzgar como adultos a menores


EN LA ULTIMA SEMANA varias instituciones religiosas se posicionaron en torno al debate promovido por el Partido Colorado para que los adolescentes de entre 16 y 18 años sean juzgados como adultos. La Iglesia Metodista difundió su posición bajo el título “No cortemos el hilo por lo más delgado”, reconociendo que es “legítima” la preocupación “cada vez mayor en nuestra sociedad” por la seguridad.

Sin embargo, recomienda “estar muy atentos para que ese afán por conseguir mayor seguridad no se nos vuelva en contra y acabe generando un círculo perverso de violencia que nos lleve a armarnos para defendernos, que nos enfrente a unos contra otros bajo la lógica del temor, la sospecha y el prejuicio, o que escoja ‘chivos expiatorios’ que indefectiblemente se encuentran en los lugares de mayor vulnerabilidad social”.

Por tanto, considera “fundamental reafirmar la Convención de los Derechos del Niño que nuestro país suscribiera hace ya más de una década, la cual establece que ningún menor de 18 años puede ser juzgado por la misma justicia que rige para los adultos”. Este último punto es compartido y ampliado por la Asociación Uruguaya de Educación Católica (Audec), al señalar que “la modificación de la legislación existente, pasando a los adolescentes comprendidos entre los 16 y 18 años a la justicia de adultos, nos lleva a violar los compromisos asumidos por el Estado Uruguayo ante la comunidad internacional”.

La agrupación expresó en su declaración “Los adolescentes: un tesoro confiado” que “como parte de la sociedad constatamos, y en algunas oportunidades vivimos en carne propia, el problema de la inseguridad. Particularmente tanto cuando nuestros niños/as y adolescentes y sus familias participan de los proyectos socio educativos de los barrios más humildes como de los alumnos de nuestros colegios, son víctimas de violencia y de arrebatos”, para luego criticar que “quisiera hacérsenos pensar que el problema de la inseguridad radica en los adolescentes, cuando es dato de la realidad que los menores de 18 años actualmente privados de libertad por infringir la ley no llegan a 400, mientras que los adultos encarcelados superan los 9.000”.

Audec -que nuclea 175 colegios y lleva adelante 120 proyectos sociales -prioriza "los acuerdos alcanzados en la Comisión Bicameral, integrada por los cuatro partidos políticos, cuyo documento fue aprobado por unanimidad en la Asamblea General”, a la campaña de recolección de firmas para plebiscitar la edad penal.

Por su parte, la Federación de Iglesias Evangélicas del Uruguay se pregunta “a qué costo” se pretende ampliar la ley penal y se interroga
si se trata de “una solución sensata para salir al encuentro a las cada vez más numerosas situaciones de violencia protagonizadas por menores de edad”. “No es justo afirmar que en relación a los menores que han cometido delitos en nuestro país exista una total impunidad.
Sí percibimos que el sistema y los mecanismos de contención de los infractores no están siendo lo suficientemente eficaces y necesitan una urgente adecuación para dar respuestas socialmente más integrales”.

Entre otras opiniones, la federación apunta a que “los medios de difusión masiva, por el contenido y las formas que dan a la información que gestionan, tienen una seria responsabilidad en el ocultamiento o la socialización de las razones profundas que producen y reproducen la violencia y la delincuencia”. ■

Publicado por Pelusa en Otro Uruguay es Posible

Zarpazos de los demonios

"Ellos solo creen en la lucha de clases"

Bordaberry. El líder colorado se sorprendió por la "violencia" de las críticas de Larrañaga


PABLO MELGAR
Para el senador colorado Pedro Bordaberry (Vamos Uruguay), su propuesta de plebiscitar la baja de la edad de imputabilidad hizo que al gobierno le entrara "la urgencia" de mostrar que está haciendo algo por la seguridad pública, como el operativo del jueves en Chacarita de los Padres. "Ellos están pensando en la lucha de clases y nosotros en darle seguridad a la ciudadanía. Los que no creemos en la lucha de clases ahora nos explicamos por qué no hay seguridad, ellos creen que esa lucha es la única forma de lograr la seguridad", dijo Bordaberry en entrevista con El País.
-Mujica afirmó: "ninguna ley o plebiscito hará milagros sobre la inseguridad". ¿Qué conclusiones saca de esto?
-Si no creemos que una ley pueda hacer un aporte, no vamos por el buen camino. Una ley no soluciona todo pero si se aplica y se cumple esa normativa hace un buen aporte.
-¿Le sorprende que el propio Presidente haya realizado ese comentario?
-No, no me sorprende. El Presidente ha dicho muchas cosas de las leyes, la Justicia, del Estado. Parece que siendo el Presidente él no cree en que él no pueda cumplir su función, eso es muy grave.
-¿Considera que esta iniciativa parlamentaria para abordar los problemas de la minoridad infractora surgió con más urgencia como consecuencia de su iniciativa de recolectar firmas?
-Muchas de las iniciativas ya estaban. Se encontró el mecanismo de recolectar firmas y resulta obvio que al oficialismo, y en especial al Frente Amplio, le entró la urgencia por dar respuestas que no estaban dando. Se dio cuenta que toda la sociedad empieza a exigir resultados y trabajo. Tras el planteo de las firmas, el Ministerio del Interior sale a exhibir acciones concretas, como la operación del jueves (en Chacarita de los Padres, en la zona de Punta de Rieles). Cabe preguntarse cómo es que una acción sorpresa estaba siendo filmada en directo por la televisión; es evidente que hubo algún tipo de información a la prensa para que se filmara lo que finalmente había resuelto el gobierno.
-¿Cree que el gobierno está utilizando a la Policía para hacer campaña en contra de la recolección de firmas?
-No, el gobierno, a partir de la recolección de firmas comenzó a dar respuestas, está utilizando a la Policía para dar las respuestas que los uruguayos estamos pidiendo.
-Si hay, como parece, bastante unanimidad respecto a las medidas que deben aplicarse, ¿a qué atribuye que su iniciativa haya despertado una reacción tan alarmante, no sólo en el gobierno sino entre los propios partidos de oposición?
-No hay acuerdo. Se acordó el instituto de rehabilitación, no hay acuerdo en el mantenimiento de los antecedentes, blancos y colorados estamos a favor y el Frente Amplio no lo acepta, está buscando la forma de decir que se mantienen y no hacerlo. Solo los colorados y Unidad Nacional estamos de acuerdo con la baja de la edad de imputabilidad.
-Larrañaga ha salido con mucha firmeza a criticar su iniciativa. ¿Cree que hay alguna intención en esa postura?
-Esa es una pregunta para Larrañaga. Me llama la atención la violencia, podrá estar a favor o en contra, pero adjudicarnos otras intenciones que la de mejorar la política de seguridad no esperábamos eso de él.
-En relación con el plebiscito, el politólogo Adolfo Garcé comentó que "se van perfilando dos mini-coaliciones: por un lado el Partido Colorado y el Herrerismo en su mayoría; por otro lado, Alianza Nacional, el Partido Independiente y el FA". ¿Coincide?
-No coincido, no todo es blanco o negro. Lo que se está visualizando es lo que dijo el representante del Frente Amplio en la comisión (el diputado socialista Julio Bagno), que explica todo: la seguridad no se puede lograr hasta que no se termine con la dominación de una clase sobre otra. Ellos están pensando en la lucha de clases y nosotros en darle seguridad a la ciudadanía. Los que no creemos en la lucha de clases ahora nos explicamos por qué no hay seguridad, ellos creen que esa lucha es la única forma de lograr la seguridad.
-¿Cree que el gobierno y sus eventuales aliados defienden a los delincuentes?
-Ellos creen que la existencia de delincuentes es producto de la sociedad burguesa. Evidentemente están tan dogmatizados que no pueden aplicar soluciones o acciones concretas para hacer algo tan sencillo como proteger a los ciudadanos de la delincuencia. Llama la atención porque el Presidente de la República en su mensaje al Parlamento del 1° de marzo dijo que el Frente Amplio había aprendido muchas cosas, entre otras que las reglas de la macroeconomía son ingratas pero inexorables. Creí que se habían dado cuenta de cómo es la realidad cuando se gobierna.
-¿El Instituto de Responsabilidad Penal Adolescente puede terminar convirtiéndose en un INAU, con otro nombre? ¿Qué diferencias va a tener, o debería tener, para ser un centro de reclusión eficaz?
-El 80% o 90% de la tarea del INAU es con menores que no son infractores, creo que eso está muy bien. Tendría que dedicarse a eso que hace bien y que los 350 menores infractores que cometen delitos muy graves tienen que estar en un instituto especializado, tienen que ser tratados de distinta forma. Hay que mandar un mensaje, el adolescente que se pasa de los límites sabe que al rato está de vuelta en la calle. Se necesita un instituto para que ese menor sepa que hay límites y ahí va a estar encerrado y reeducado por la sociedad. Hoy esos adolescentes se ríen de los límites.
-¿Qué diferencias va a tener ese instituto con una cárcel de adultos?
-Va a ser distinto, no van a convivir con los adultos, el trabajo de reeducación va a ser muy diferente porque el sujeto de trabajo tiene otras características.
-Usted reprochó a Pablo Mieres (Partido Independiente) que hubiera cambiado de forma de pensar sobre la baja de edad de imputabilidad, pero usted mismo aprobó en 2004 el Código de la Niñez, que ahora pretende reformar. ¿A qué se debe ese cambio?
-Yo no era legislador, era Ministro de Turismo. Lo que hice fue que cuando el Parlamento aprobó una ley que el Presidente no vetó, firmé el cúmplase. Yo no tenía potestad para vetarla, me parece que asignarme a mí la facultad de haber hecho la ley es un exceso. Tampoco le dije eso a Mieres, en 2009 le recordé eso en un debate y nunca más hablé. Una cosa es poner el cúmplase a una ley y otra cosa es decir en Trinidad durante la campaña electoral, después de un problema muy serio de seguridad, que hay que bajar la edad de imputabilidad y ahora decir otra cosa.
El País Digital

Colegios católicos están en contra de bajar la edad de imputabilidad

Blancos. Sector de UNA se suma a campaña de recolección de firmas


La Asociación Uruguaya de Educación Católica se pronunció en contra de bajar la edad de imputabilidad, en tanto en el Partido Nacional se están conformando dos bloques en torno a este tema.
El senador Luis Alberto Lacalle definirá esta semana su apoyo a la campaña de recolección de firmas para plebiscitar la baja de la edad de imputabilidad de 18 a 16 años en las elecciones nacionales de 2014, dijeron fuentes de Unidad Nacional (UNA), el sector que lidera el ex presidente.
Ayer martes, Aire Fresco (el grupo que dentro de UNA forman los diputados Luis Lacalle Pou, Álvaro Delgado, Amin Niffouri y Nelson Rodríguez, anunció su apoyo a la recolección de firmas. Antes, manifestó su apoyo a la iniciativa Soplan Vientos Nuevos, el grupo de UNA liderado por el diputado y exintendente de Durazno Carmelo Vidalín.
Correntada Wilsonista, el otro sector de UNA, es contrario a la recolección de firmas impulsada por el Partido Colorado, y así lo manifestó su líder, el senador Francisco Gallinal.
En tanto, Alianza Nacional se pronunció también contra la recolección de firmas, si bien algunos dirigentes del interior están apoyando la iniciativa. El líder de este sector nacionalista, el senador Jorge Larrañaga, fue muy crítico con el senador colorado Pedro Bordaberry, promotor del plebiscito.
Aire Fresco. En una declaración emitida en la pasada jornada, Aire Fresco señala que el Partido Nacional viene presentando propuestas sobre seguridad desde hace años. Agrega que entre los proyectos presentados, se encuentran mantener los antecedentes de los menores, crear el Instituto de Rehabilitación del Adolescente Infractor, penalizar la tentativa de hurto y elevar la pena máxima de los adolescentes infractores.
Rememora además que en octubre de 2006 "y ante la negativa del Frente Amplio (FA), ante todas y cada una de las iniciativas presentadas, más de 130.000 ciudadanos, a través del derecho de petición consagrado en la Constitución de la República, acompañaron con sus firmas una batería de medidas propuestas por el Partido Nacional", y que en el año 2007 el FA votó en contra de estos proyectos.
A esto Aire Fresco suma que en la legislatura que comenzó en el año 2010, el Partido Nacional volvió a presentar estos proyectos en cuestión, "creándose a iniciativa de nuestro propio Partido una comisión especial de la Asamblea General para tratar específicamente el tema seguridad".
"Las conclusiones a las cuales arribó la mencionada comisión, en el día de hoy, son en su gran mayoría, propuestas y planteamientos del Partido Nacional", destaca.
Luego indican que si bien la reforma constitucional que se promueve a través de la recolección de firmas no es forma "adecuada, ni la aconsejable, el contenido del proyecto coincide con muchas de las iniciativas presentadas por nuestro Partido".
"Teniendo en cuenta la actitud del gobierno, y ante la gravedad del tema, creemos que la solución de promover una reforma constitucional, debe ser apoyada", expresa la declaración. La misma concluye que esto es sin perjuicio de seguir presentando proyectos en el Parlamento, "para tratar íntegramente a la juventud, creando no sólo obligaciones a partir de los 16 años, sino también derechos".
Por otra parte, la Asociación Uruguaya de Educación Católica (Audec) emitió un comunicado en que afirma que bajar la edad de imputabilidad viola compromisos internacionales asumidos por Uruguay.
Expresa que comparten en líneas generales "los acuerdos alcanzados en la Comisión Bicameral, integrada por los cuatro partidos políticos, cuyo documento fue aprobado por unanimidad en la Asamblea General".
"Creemos que el mejor abordaje para los adolescentes infractores y para la ciudadanía que experimentamos la inseguridad pasa por el fortalecimiento y el eficaz funcionamiento de los distintos organismos públicos y la colaboración de toda la sociedad", añade Audec.
Señala que es importante recordar que el Código de la Niñez y la Adolescencia "está en consonancia con la Convención sobre los Derechos del Niño de Naciones Unidas, que nuestro país ratificó en 1990".
"La modificación de la legislación existente, pasando a los adolescentes comprendidos entre los 16-18 años a la justicia de adultos, nos lleva a violar los compromisos asumidos por el Estado uruguayo ante la comunidad internacional", concluye la declaración de la asociación de colegios católicos.
INAU. El presidente del INAU, Javier Salsamendi, se pronunció en contra de bajar la edad de imputabilidad de 16 a 18 años.
El directorio y los jefes departamentales del organismo se reunieron ayer en Tacuarembó. Durante el encuentro, Salsamendi sostuvo que el Partido Colorado está realizando lo "contrario" a lo que la ciudadanía reclama. "Porque entre los 13 y los 18 años de edad en Uruguay cualquiera que comete un delito es responsable por el ilícito que realiza y no desde los 16 como plantea el Partido Colorado; estarían haciendo algo al revés a las condiciones que el pueblo uruguayo exige", sostuvo el jerarca.
Salsamendi destacó que tiene como objetivo crear tres institutos para adolescentes infractores en el interior del país. Dichos centros serían para los casos de jóvenes que tienen que estar internados hasta 90 días, aunque destacó que han constatado dificultades para que los ciudadanos acepten centros de menores infractores en sus departamentos. (José Estéves, Tacuarembó)

Aliancista juntará firmas

El líder de la Lista 3 de Alianza Nacional de Paysandú, Daniel Arcieri, anunció a El País, que se sumará a la campaña de recolección de firmas a favor de bajar la edad de imputabiliad. El excandidato a intendente dijo que la firma es la herramienta que tiene el ciudadano para presionar al sistema político, que hasta el momento ha demostrado su "ineficiencia" y "años de incapacidad para resolver algo fundamental, como es la seguridad del ciudadano". "Soy de Alianza Nacional , pero en esto no estoy de acuerdo con Larrañaga. Esto no tiene colores partidarios, hay que defenderse de la delincuencia y de la inoperancia de los legisladores, que empezaron a hacer algo concreto gracias a la recolección de firmas", dijo.

Proyecto alternativo

Francisco Gallinal en el Senado y Verónica Alonso en Diputados (ambos de Correntada Wilsonista), presentarán esta semana una propuesta alternativa a la baja de la edad de imputabilidad de los menores de 18 años.
Dicha propuesta establece que el juez de Menores que intervenga en cada caso, determinará si un delito cometido por un mayor de 16 pero menor de 18 fue con discernimiento y, en caso afirmativo -por ejemplo si se trata de alguien reincidente-, remitir de oficio el expediente del caso al juez en lo penal que corresponda.
El País Digital

Herrerismo adhiere a campaña para bajar edad imputable

13.04.2011 | 21.01 El Espectador

El Herrerismo decidió sumarse a la campaña de recolección de firmas impulsada por el Partido Colorado para un plebiscito sobre seguridad pública y tratamiento de menores infractores, según aseguraron a El Espectador fuentes de esta corriente del Partido Nacional.
Herrerismo adhiere a campaña para bajar edad imputable

El anuncio oficial está previsto para este jueves en el Senado a las 15 horas y será en conferencia del senador Luis Alberto Lacalle que estará acompañado de legisladores del sector.

Los herreristas están haciendo consultas ante ministros de la Corte Electoral para asegurarse de que pueden identificar sus papeletas y no tener que recoger firmas con las que tienen como apoderados a dirigentes colorados y como sede, a la dirección de la Casa del Partido Colorado. La idea es replicar idéntico texto al usado por los colorados, pero que en la presentación figuren otros representantes con su número de credencial cívica correspondiente y una dirección que sea la de una comisión impulsora de la campaña central.

En tanto, según dijeron a fuentes del Herrerismo y de Vamos Uruguay, dirigentes de los dos sectores han mantenido conversaciones para considerar la conformación de una comisión nacional multipartidaria que tome la responsabilidad organizativa de la campaña. La intención es que se puedan sumar incluso dirigentes de otros grupos.

Dirigentes colorados aseguraron que en Artigas y en Canelones, hay agrupaciones frenteamplistas que pidieron papeletas para recoger firmas.

En tanto, en la tarde del miércoles los dirigentes de Vamos Uruguay del Partido Colorado, el senador Pedro Bordaberry y el diputado por Maldonado Germán Cardoso concurrieron a Florida para recoger la firma del intendente Carlos Enciso.

Este dirigente blanco se distancia así de la postura de la Corriente Wilsonista que rechaza el plebiscito para bajar la edad de imputabilidad penal.

De esta forma, la corriente Unidad Nacional expresará posturas contrapuestas en torno al plebiscito: el Herrerismo de Lacalle se sumará a la campaña y Correntada Wilsonista de Francisco Gaillinal, rechaza la misma.

La enmienda constitucional

El texto que se pretende plebiscitar en octubre de 2014 propone que “las personas mayores de dieciséis y menores de dieciocho años” sean “penalmente responsables” y en caso de aprobarse determinará que estos menores “serán castigados de conformidad con las disposiciones del Código Penal, por la comisión intencional de los delitos de homicidio, homicidio especialmente agravado, homicidio muy especialmente agravado, lesiones graves, lesiones gravísimas, rapiña, rapiña con privación de libertad (copamiento), extorsión, secuestro y violación, así como por los demás delitos que indique la ley”
.
Además, sostiene que “en los procedimientos penales seguidos a menores de dieciocho años, el Tribunal actuante podrá admitir como eximente o atenuante la ausencia de madurez o discernimiento suficientes”.

Sobre “los antecedentes de los adolescentes que hayan estado en conflicto con la ley penal” se aclara que ya “no se destruirán” y que “serán considerados en los procesos penales a los que puedan ser sometidos después de cumplir los dieciséis años”.

También incluye la enmienda constitucional que “la comisión de delitos, valiéndose de la participación de niños y adolescentes, será especialmente castigada”.

En una nueva “disposición transitoria” se indica que “el Estado asegurará la existencia de un Servicio Descentralizado dedicado exclusivamente a la internación y rehabilitación de los delincuentes menores de dieciocho años, debiendo dotar al mismo de los recursos necesarios para su funcionamiento” y que dicho instituto “será objeto de un seguimiento especial en el que se dará participación al Comisionado Parlamentario Penitenciario”.