Argentina: a 48 años del estallido popular que cambió la historiaCarta sobre el Cordobazo de Agustín Tosco
Martes 29 de mayo de 2012, por Redacción ACTA
- Equipo de Comunicación de la CTA NacionalSe me ha pedido que escriba un artículo sobre el Cordobazo. Creo que lo que hay que escribir sobre este hecho de real trascendencia histórica, especialmente para Argentina y América Latina, es un libro. Porque son muchas, variadas y complejas, distantes e inmediatas, las causas que produjeron la circunstancia sociológica - política del Cordobazo.
Durante los meses de prisión en Rawson llené cinco cuadernos sobre el Particular. La transcripción de cuatro hojas en un reportaje de la revista "Inédito", motivó, según difusión pública, que la misma fuera clausurada. Aún así, con el tiempo, ese trabajo ha de aparecer, sin la pretensión de ser una visión totalmente objetiva, pero si al menos una interpretación personal sobre la base de la militancia sindical y de las propias posiciones adoptadas por nuestro gremio el Sindicato de Luz y Fuerza de Córdoba, la Regional Córdoba de la CGT, el conjunto de gremios encabezados por SMATA (Sindicato de Mecánicos y Afines de la Industria Automotriz) y el permanente contacto con las agrupaciones estudiantiles, tanto de la Universidad Nacional como de la universidad Católica. Asimismo con los Sacerdotes del Tercer Mundo y distintas personas de los grupos profesionales y políticos.
Con esta previa aclaración y en el entendimiento de contribuir en modesto alcance a la reafirmación de las reivindicaciones populares, redacto estas líneas ligadas a este acontecimiento fundamental de las clases populares sucedido el 29 y 30 de Mayo de 1969.
¿Por qué se ha producido el Cordobazo?
Esta es una pregunta que no por repetida, deja de plantearse y de promover la investigación, la imaginación y particularmente el interés de todos los argentinos, desde el más humilde trabajador, hasta el sociólogo desentrañador de los fenómenos sociales, o de los políticos desde conservadores hasta revolucionarios.En el penal de Rawson nos visitaron a los trece condenados que procedíamos de Córdoba, una Comisión de Solidaridad, compuesta por Compañeros de distintos gremios de esa ciudad, de Trelew y de otras localidades de la Provincia de Chubut. Nos preguntaron qué necesitábamos para nuestra salud, desde alimentos hasta indumentaria.
Respondimos que necesitábamos solidaridad militante. Pronunciamientos. Lucha contra la Dictadura. Les hablamos de nuestros trabajadores, de sus aspiraciones, de sus desvelos, de sus sacrificios. Les dijimos que las fogatas que alumbraban las calles de Córdoba surgían desde el centro de la tierra impulsadas y encendidas por nuestra juventud estudiosa y trabajadora y que jamás se apagarían porque se nutren de la vida y de los ideales de un pueblo rebelado contra la opresión que se ejercía sobre él y estaba dispuesto a romperla, pasara el tiempo que pasara. Dijimos la verdad, la verdad de todo lo que queríamos. Los trece condenados de Rawson éramos de extracción, situación y condición heterogénea. Pero todos coincidíamos. No exagero al manifestar que varios de los miembros de la Comisión de Solidaridad y ellos están para testimoniarlo, sintieron correr lágrimas sobre sus mejillas. Al fin y en esta tensa conversación, plantearon la pregunta: ¿Por qué se ha producido el Cordobazo? Respondimos, con lo que creo es la esencia de la respuesta a tanto interrogante y a tantas elucubraciones que andan dando vuelta como conclusiones: el Cordobazo es la expresión militante, del más alto nivel cuantitativo y cualitativo de la toma de conciencia de un pueblo, en relación a que se encuentra oprimido y a que quiere liberarse para construir una vida mejor, porque sabe que puede vivirla y se lo impiden quienes especulan y se benefician con su postergación y su frustración de todos los días.
¿Y por qué Córdoba precisamente? Por que Córdoba no fue engañada por la denominada Revolución Argentina. Córdoba no vivió la "expectativa esperanzada" de otras ciudades. Córdoba jamás creyó en los planes de modernización y de transformación que prometió Onganía, Martínez Paz, Salimei y Ferrer Deheza y luego Borda, Krieger Vasena y Caballero. La toma de conciencia de Córdoba, de carácter progresivo pero elocuente, es bastante anterior al régimen de Onganía. Pero se expresa con mayor fuerza a partir de julio de 1966.
La reivindicación de los derechos humanos, proceda de donde proceda, en particular de las Encíclicas Papales desde Juan XXIII, encuentran en nosotros una extraordinaria receptividad y así se divulgan especialmente en la juventud y en los Sindicatos. Si hay receptividad es que hay comprensión, y la comprensión deriva en entusiasmo, en fe y en disposición al trabajo, al esfuerzo e incluso al sacrificio para consumar los ideales que ya tienen vigencia en el ámbito universal.
Para reducir la cuestión a sus aspectos más cercanos, las grandes luchas previas al Cordobazo amanecen antes de los dos meses de la usurpación del poder por parte de Onganía. Y éstas, tanto como las que posteriormente se plantearon ya que siguen en vigencia, bajo distintas características, obedecen a la toma de conciencia de la necesidad de liberación que es el patrimonio principal de Córdoba dentro del panorama nacional.
Los principales e inmediatos antecedentes
A mediados del mes de Agosto de 1966 nuestra Organización Sindical emitió una Declaración en carácter de "Solicitada" cuyo título fue: "Signos negativos". Fue !a primera posición sindical en Córdoba contra la serie de medidas de neto corte represivo que implantaba la Dictadura. Esa declaración tuvo amplia repercusión, no sólo local sino nacional y podríamos decir que prácticamente inauguró la posición rebelde contra la política de Onganía y su equipo.La muerte de Santiago Pampillón a manos del aparato represivo, puso en evidencia la histórica resistencia estudiantil. Nadie podrá olvidar las luchas y manifestaciones de protesta de todas las agrupaciones, las huelgas de hambre y el propio paro de una hora del movimiento obrero cordobés en solidaridad con los compañeros universitarios. Tuve el honor de integrar una Delegación Sindical de la CGT de Córdoba que acudió a Mendoza al sepelio de Santiago Pampillón. Allí discutimos los cordobeses con Gerónimo Izzeta que se encontraba casualmente y le increpamos la pasividad de la CGT Nacional. Al mismo tiempo que se manifestaba el ascenso del espíritu de lucha de las bases sindicales y estudiantiles contra el régimen, los jerarcas del sindicalismo nacional iban justificando —en actitudes— su posterior proclamación a todos los vientos de la "filosofía participacionista".
Tanto como la represión crecía también la resistencia aumentaba. Una manifestación incidental revelaba las distintas formas del repudio al régimen y a sus cómplices. En Córdoba circuló profusamente una hoja impresa que reproducía a Francisco Prado, participando del Festival del Folklore en Cosquin Enero de 1967 -mientras era avasallado el Sindicato de Portuarios, despedazado su convenio colectivo de trabajo y despedidos sus dirigentes y militantes más esforzados. Prado era Secretario General de la CGT Nacional. Esas hojas circularon por todo Córdoba y la gente evidenciaba su condena ante la claudicante actitud.
En el mismo mes de febrero de 1967 y en función del Paro Nacional resuelto para el primero de Marzo de dicho año, en esta ciudad se realizaron grandes manifestaciones obreras.
El diario ’"Córdoba" reprodujo varias fotografías de los actos y una en particular de la represión, donde constó mi detención junto con varios compañeros de la columna de Luz y Fuerza. Fue un plan de lucha de alcance nacional, frustrado por el incipiente participacionismo y dialoguismo que terminó una vez más confiando, según expresiones del propio Francisco Prado, en el nuevo ministro Krieger Vasena, porque según él: "Habría cambiado y su gestión podría ser útil a los trabajadores". Pese a esto, la posición de casi todos los sectores populares, especialmente de Córdoba, conminaba a continuar la lucha.
Quiero transcribir una frase de un documento sindical del 23 de Febrero de 1967, por su carácter premonitorio del "Cordobazo". Decía así: "La historia grande ¡está jalonada de hitos como el que ayer fuera protagonizado por el movimiento obrero de Córdoba, en los talleres y fábricas, en las calles de nuestra ciudad. Porque fue la de ayer una jornada escrita con rasgos vigorosos y expresiones estentóreas que desbordaron los lindes habituales y se prolongaron luego en los grafismos de la prensa y de la televisión, en la retina y en el ánimo de los millares de protagonistas y espectadores que vivieron las secuencias del plan de acción desplegado por la CGT y gremios confederados de Córdoba. Fue una jornada lúcida y comprometida que nos acerca un poco más a la definición crucial que forzosamente tiene que producirse por imperio de la situación a que ha sido arrastrado el pueblo argentino, y sobre la que los trabajadores tenemos adoptada una posición clara, concreta e irreductible".
La represión que siguió al paro del primero de marzo de 1967 y la desastrosa conducción de la CGT Nacional produjo un notorio vacio que estuvo signado fundamentalmente por la oposición cada vez más abierta entre las bases sindicales y dirigentes vinculados a ellas y el participacionismo entreguista anidado en la sede de Azopardo en la Capital Federal.
Las bases demandaban un nuevo Plan de Acción. En Tucumán el ataque a los derechos de los trabajadores iba en aumento. En octubre de 1967 la Delegación de Córdoba en el Congreso de la Federación de Luz y Fuerza reclamaba ese Plan de Acción, inspirada en las propias demandas vigentes en nuestra ciudad y denunciaba los hechos más alarmantes que estaban sucediendo.
La preocupación de los dirigentes nacionales se centraba exclusivamente en normalizar la CGT en ese entonces en manos de la Comisión Delegada. ¿De qué teníamos los cordobeses clara conciencia a fines de 1967?
¿Cuál era nuestra denuncia? ¿Cuál era nuestra posición?
En apretada síntesis expresábamos: Bajo el lema de modernización y transformación el gobierno planteó un plan económico, cuya base filosófico-política se asentó aparentemente en el más ortodoxo y crudo liberalismo, en la resurrección del "dejar hacer, dejar pasar", en la vigencia de un libre empresismo a ultranza, que provocaría la estabilidad y la multiplicación de los bienes económicos del país. Sin embargo esta declamada libertad económica no es sino un esquema destinado sustancialmente a someter al país integrándolo a la crisis del sistema capitalista monopolista como elemento compensador del deterioro cada vez más pronunciado del mismo.
Más adelante señalábamos: "Ya desde hace tiempo en todas las naciones del mundo ha concluido la etapa del liberalismo que aquí se pregona. Las potencias industriales practican un crudo dirigismo económico; en el sistema interno protegiendo su mercado productor e incluso consumidor por vía de las barreras aduaneras y otros dispositivos complementarios; en el aspecto externo creando organismos internacionales supeditados a ellas que imponen la política de la libre penetración y de la libre explotación de los pueblos subdesarrollados por los monopolios que actúan desde las grandes metrópolis. Esta libertad económica impuesta y dirigida desde afuera, especialmente desde las concentraciones monopolistas norteamericanas a la par de favorecer desmesuradamente a las mismas y a su país de origen, provocan en Argentina la agudización de la crisis y la profundización de los efectos recesivos’.
En los pronunciamientos sobre los aspectos económicos se concluía: "Lo que se pretende realmente es quebrar a la industria nacional y dejar el mercado de consumo a merced de los monopolios. Así lo ha expresado genéricamente la Confederación de la Industria al referirse que esta política de transferencia formales y reales es en el más benigno de los juicios, un mal signo. En lo que hace a las empresas del Estado la aprobación de la Ley de Hidrocarburos y la Ley de Sociedades Anónimas, confirma crudamente la programática oficial de entrega del patrimonio estatal y de la conducción básica y fundamental de la economía a los intereses extranjeros. Nadie duda ya que el plan trazado es contrario a un auténtico desarrollo, atenta contra el nivel de vida de la población, sirve a los grupos de la reacción y del privilegio, compromete el porvenir del país y lesiona la soberanía nacional".
En las cuestiones sociales se denunciaba "el aumento de todos los precios de los artículos de uso y de consumo, agotando la capacidad adquisitiva de las remuneraciones. El incremento de la desocupación. La paralización de la Comisión del Salario Vital, Mínimo y Móvil. La imposición del arbitraje obligatorio para los diferendos laborales. La ley de represión de los conflictos sindicales. La intervención a Sindicatos, el retiro o suspensión de personerías gremiales. La eliminación o restricción de las representaciones sindicales en la Empresa del Estado, incluidos los organismos de previsión social. La violación de los contratos colectivos de trabajo. La ley de congelación de salarios. La modificación de la ley de indemnizaciones por despido. El aumento de la edad para acogerse a la jubilación y la eliminación de las compensaciones por años de servicio".
Como últimos detalles de las denuncias contra la reaccionaria política que se llevaba adelante se señalaba: "Simultáneamente el Gobierno pretende tener un consenso tácito de la opinión pública, pero no abre vías de ninguna naturaleza para probar con la expresión del pueblo si ello es cierto o no, mientras justifica tamaño despropósito con la supuestamente perjudicial posibilidad de enfrentar a un debate político al país. Con la lógica perseverancia de sus propósitos retrógrados el Gobierno aprueba la Ley de Defensa Civil que militariza a toda la población a partir de los 14 años de edad, bajo el pretexto de asegurar el frente interno, pero con la finalidad de reprimir toda legitima defensa de los intereses económicos, sociales y políticos de los trabajadores. Más adelante dicta la denominada ley de represión al comunismo, que engloba a todas las personas o instituciones que protesten o lleven adelante una acción para proteger sus derechos. Supera el cuadro represivo macartista dejando al Servicio de Informaciones del Estado la calificación de toda persona que tenga "motivaciones ideológicas comunistas", añadiendo un régimen punitivo que llega hasta los nueve años de prisión. Intervienen las Universidades Nacionales, anula la participación de la juventud estudiosa argentina en la vida de las mismas, proyecta una reglamentación limitacionista y disuelve los Centros de Organización Estudiantiles. Viola el secreto de la correspondencia cual modernos inquisidores celosos de toda opinión adversa a la dogmática oficial. En el ámbito internacional propuso, felizmente rechazada, la institucionalización de la Junta Interamericana de Defensa, cual moderno gendarme de los Pueblos de América Latina que bregan por su emancipación integral, a fin de mantenerlos en el subdesarrollo, en el estancamiento y en la dependencia neocolonial".
Allí se realizaron denuncias que si bien eran conocidas por todos, no todos la realizaban. Eran las delegaciones cordobesas por lo general las que sustentaban estos planteamientos en todos los ámbitos.
En Córdoba se expresó poco tiempo después una resolución de la CGT
local que declaró persona no grata al Presidente Onganía, y eso
trasuntaba el creciente desafío al régimen autocrático, no cuestionado a
nivel masivo con tanto vigor como se daba en Córdoba.
La rebelión de las bases sindicales
La Comisión Delegada de la CGT Nacional, intentó por todos los medios la construcción de un Congreso adicto a las teorías del participacionismo. Que era hacerse eco de toda la política del Gobierno y lograr la participación en el proceso. Una renuncia clara a las reivindicaciones obreras y populares que merecía una repulsa general.El "dirigentismo" de los jerarcas de las organizaciones nacionales, luego de prolijos cortejos de delegados, al estilo de los viejos comités de la política criolla de la Década Infame, resolvió la convocatoria a un Congreso Nacional para la normalización de la Confederación General del Trabajo.
Llegó a tanto la podredumbre de los dirigentes participacionistas, que sostenían que en ese Congreso no podían participar las Organizaciones que estaban intervenidas, entre ellas la de más caudal de afiliados o sea la Unión Ferroviaria, además de los trabajadores portuarios, de prensa, químicos, del azúcar, etc.. Querían hacer un Congreso con los que habían tolerado la Dictadura y sancionar a su vez con tal exclusión a los que habían luchado, habían sido intervenidos y eran perseguidos por los violadores de todos los derechos sindicales.
Todos quienes continuaban fíeles a los principios sindicales, incluso los sindicatos intervenidos designaron delegados a tal Congreso, comprometiendo a quienes estaban con la Dictadura a que en el propio Congreso los inhibieran de actuar. El 28, 29 y 30 de Marzo comenzó el Congreso. Los dirigentes que coincidían con Onganía, no tuvieron el valor de acudir a impugnar a quienes.querían excluir desde la? bambalinas. El Congreso se realizó con todas las organizaciones combativas, incluidas las intervenidas, y con poco más de la mitad de los delegados suficientes para el quórum se proclamó la lucha contra la Dictadura y el desconocimiento a todos lo jerarcas del participacionismo. De allí nació lo que fue denominada CGT de los Argentinos, encabezada por Raimundo Ongaro.
Las bases sindicales repudiaban toda la política de conciliación vergonzosa y una ola de manifestaciones, de actos, todos organizados por los sindicatos de la CGT de los Argentinos, cubrió una verdadera celebración del 1° de Mayo de 1968.
En Córdoba más de cinco mil personas concurrieron al local del Córdoba Sport Club, en el que juntamente con Ongaro hice uso de la palabra denunciando una vez más, ratificando lo que veníamos señalando desde 1966, que la Dictadura hundía al país.
El 28 de Junio de ese mismo año la CGT de Córdoba programó un acto frente al local de la misma, en repudio al Segundo Aniversario de la Dictadura. La represión, como lo hacia repetidas veces descargó todo su aparato y se contabilizaron trescientos veintidós presos entre los manifestantes. El movimiento obrero, el estudiantado, los sectores populares pugnaban por expresar su protesta en la calle y sucesivamente eran reprimidos. Pero no descansábamos. Algunos ya sostenían que no era posible programar actos, ya que la Policía no los permitía y que la gente se cansaba. La mayoría sostuvo que no. No queríamos dejar de lado nuestro derecho a expresamos, a protestar, a exigir soluciones. Una y otra vez nos disolvían encarcelando a trabajadores y estudiantes.
En Septiembre de 1968, la CGT y el Frente Estudiantil en Lucha programó una semana de Protesta en recordación de los Mártires Populares, coincidiendo con el aniversario de la muerte de Santiago Pampillón. Ya el Gobernador Caballero, que había suplantado a Ferrer Deheza, lanzaba la constitución de un Consejo Asesor, como forma perfeccionada del participacionismo como experiencia piloto para todo el país.
La Semana de los Mártires Populares fue violentamente reprimida. Cayó baleado el joven estudiante Aravena, que hoy aún se encuentra impedido físicamente en forma total, como producto de aquel alevoso ataque. Los actos fueron disueltos. Se atacó a una manifestación encabezada por dirigentes sindicales, estudiantiles y Sacerdotes del Tercer Mundo, que provenían de una Misa por Santiago Pampillón. Se disolvieron los actos frente a la CGT. Se encarcelaron a varios militantes y representantes sindicales y estudiantiles que estuvieron casi un mes en Encausados.
A fines del mismo 1968, la CGT organizó otro acto que fue igualmente reprimido. Todos sentíamos una real indignación y la condena al régimen tomaba ribetes de furia. Nada era posible hacer. La represión se manifestaba en todo momento. El gobierno seguía su propaganda para el Consejo Asesor. La Federación de Luz y Fuerza suspendía a nuestro sindicato por estar adherido a la CGT de los Argentinos.
Los jerarcas sindicales habían realizado su propio Congreso, pero no tenían ninguna vigencia en las bases. En Córdoba eran abiertamente repudiados por la Clase Trabajadora. Mientras en todos los órdenes la política de Onganía seguía consolidándose en el sentido de la fuerza y la opresión.
Mientras por otra parte, en el Pueblo crecía la rebelión contra tanto estado de injusticia, de desconocimiento de los Derechos Humanos. A fines de 1968, se cumplió el 20° aniversario de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Luz y Fuerza realizó algunas conferencias sobre el particular. Qué cotejo más dramático se realizaba entre el contenido de esta declaración que coronó el final de la segunda guerra mundial y el régimen que imperaba en Argentina. Parecía que tantos sacrificios, tantas vidas, por el respeto a los derechos del hombre, hubieran sido inútiles.
1969: el año del Cordobazo
Hemos reseñado los males del régimen a escala nacional y hemos particularizado las posiciones de Córdoba por ser las más relevantes contra la Dictadura en el orden nacional.Ya también Hilda Guerrero de Molina, mártir obrera de Tucumán engrosaba las filas de quienes habían caído defendiendo sus ideales, enfrentando al régimen de Onganía.
El régimen comunitario era publicitado desde todos los ángulos del equipo gobernante. Córdoba se había convertido en la experiencia piloto y el Dr. Caballero había constituido su Consejo Asesor que sería convalidado con bombos v platillos en la Reunión de Gobernadores de Alta Gracia. Allí llegó Onganía en el mismo automóvil y en la misma posición ideológica y con los mismos propósitos de Caballero.
Antes habíamos redactado un importante documento. Un documento que se denominaba Declaración de Córdoba y que se dio a publicidad el 21 de Marzo de 1969. Dos meses y días antes del Cordobazo.
En el reseñábamos lo problemas principales de orden local que sumados a los de orden nacional y en función a la toma de conciencia del pueblo de Córdoba sobre la validez de sus derechos, podríamos decir que encuadraron la heroica reacción popular del Cordobazo.
En la introducción se decía; "Nuestra Provincia soporta un descalabro gubernativo, una manifiesta inoperancia en los más altos niveles jerárquicos oficiales, una ineptitud generalizada en la conducción de la cosa pública. Paralelamente a esta ineficacia se destaca un oscuro y torpe manejo de los instrumentos del poder, para favorecer a los círculos del privilegio económico y financiero, para exaccionar los modestos recursos monetarios de la población, para burlar la auténtica representatividad popular mediante el fraude neocorporativista, para manipular desvergonzadamente a algunos miembros de la justicia,intentando abiertamente ponerlos al servicio de la tolerancia cómplice hacia el crimen de algún conspicuo allegado al régimen".
No se recuerda que nuestra provincia haya soportado tamañas iniquidades públicas. Nunca el pueblo cordobés contempló, un ejercicio sensual del poder usurpado con la impunidad que se manifiesta, y con el visto bueno de un Poder Central que en muchos casos lo pone como ejemplo de experiencia a proyectarse en toda la nación.
Esta situación insoportable en todos los órdenes, obliga a la clase trabajadora cordobesa a repudiar públicamente al gobierno local, a corresponsabilizar a la Dictadura de Ongania de todos sus actos y a actuar cada vez más unida y enérgicamente para lograrla instauración del ejercicio pleno de los derechos y garantías que pertenecen inalienablemente a los trabajadores y ciudadanos, y a la práctica de la función gubernativa en un plano de dignidad y de real interpretación de las aspiraciones del Pueblo". Señalábamos y no lo hacíamos nosotros por una elucubración al margen de las posiciones populares, sino como una expresión auténtica que palpitaba en toda la población que: "Consejo Asesor: Durante bastante tiempo el Gobierno de Córdoba trabajó intensa y solapadamente, para implementar el denominado Consejo Asesor Económico Social. Sus fundamentos se basaron en el supuesto interés por consultar sectores representativos de la comunidad y darles participación en el análisis y programa de los actos gubernativos".
Luego se indicaba: "Asimismo se pretende remedar el engendro del Consejo Asesor, con los Consejos Económico-Sociales de vigencia positiva en algunos países del mundo estructurados políticamente sobre la base de la voluntad soberana del Pueblo".
Y por último, luego de otras consideraciones: "El Consejo Asesor procura la domesticación de la sociedad,su estratificación definitiva y si hoy se viste con los ropajes de una aparente inocencia, con el tiempo todos deberán lamentar su consolidación como aparato de poder omnipotente, sin apelaciones, en el que se fundamentará y basará el régimen para implantar un sistema de vida repudiado por la historia y con el cual se identificó con su saludo romano el otrora joven camisa negra, hoy Gobernador de Córdoba, Dr. Carlos Caballero."
Sobre el caso Valinotto, se señalaba, "la opinión pública cordobesa y también la nacional observan con estupor como un Juez de Córdoba, dispuso la libertad de un criminal basándose en el testimonio, denominado "de abono" del Ministro de Gobierno, Dr. Luis E. Martínez Golletti, y del Vocal del Superior Tribunal de Justicia Dr. Pedro Angel Spina".
Y culminaba el análisis sobre este tema: "El Sr. Gobernador de Córdoba, Dr. Carlos Caballero, ante la renuncia verbal de su Ministro de Gobierno, Dr. Martínez Golletti, resolvió, rechazarla ratificándole su confianza".
Sobre los impuestos de orden local recalcábamos: "Los centros vecinales de Córdoba, integrados en su mayoría por trabajadores, han denunciado el asalto fiscal de que son objeto, han protestado, han señalado la ilegalidad de las medidas tributarias, pero el gobierno ha permanecido incólume, ofreciendo una transitoria y demagógica rebaja que no altera la situación de fondo y que ha determinado la resistencia al pago, como único camino para hacerse escuchar, aunque el gobierno sigue y seguirá sordo a los reclamos del pueblo, embebido en su absolutismo y cegado por su tortuoso designio político.
Sobre los problemas laborales se daba el caso de las "quitas zonales" que afectaba fundamentalmente al gremio metalúrgico. La anulación de la Ley del Sábado Inglés, que había sancionado en el año 1932 y que rebajaba en un 9,1 °/o los salarios mensuales de los trabajadores. El Departamento Provincial de Trabajo resultaba totalmente inoperante. Se distinguía que "Córdoba es, a no dudarlo, el paraíso de los recibos en blanco, que sirven para robar de los ya magros salarios de los trabajadores, partes sustanciales y crear la inseguridad en la permanencia de su empleo". Por otra parte se dispuso el cierre de una serie de escuelas nocturnas de capacitación a la que concurrían los trabajadores, con el fundamento de que se habían agotado las instancias para que los mencionados establecimientos pasaran a formar parte del organigrama secundario provincial.
Las tropelías de la denominada "Brigada Fantasma", también enardecieron al pueblo de Córdoba. Decíamos sobre el particular: "Todo el país conoce ya el increíble episodio de la "Brigada Fantasma", denominada así por sus oscuras andanzas no en resguardo de la seguridad pública, sino atentando contra la misma. Intimidando a gente inocente, persiguiendo a supuestos delincuentes y extorsionando a los detenidos". Se concluía sobre este punto: También el episodio de la "Brigada Fantasma", por más que se haya dispuesto su disolución y la detención de los "policías" que la integraban, no fue descubierta por la preocupación o la diligencia de los funcionarios del gobierno. Se conoció y se investigó por las denuncias periodísticas que constituye hoy el único medio que tiene el Pueblo para defenderse de alguna manera de los atropellos a que es sometido por un Gobierno, que inexorablemente "será juzgado como el más nefasto para los derechos de toda la población de Córdoba". Para no extenderse más sobre este extenso documente señalaré una frase mas: "Una ínfima minoría, los dedos de una mano sobran para contarlos, de "dirigentes" sindicales, apoya el régimen cordobés. No es así sin embargo en el orden nacional.
La asistencia de más de cuarenta jerarcas gremiales a una entrevista con Onganía ha demostrado que el espíritu de lucha de los trabajadores y del pueblo, tienen un fuerte contingente de desertores, sumados a la programática del régimen: política de sometimiento económico, de opresión social, de oscurantismo cultural y de mordaza cívica, sojuzgando a todos los argentinos que quieren un país en el cual se operen fundamentales transformaciones que posibiliten un inmediato porvenir donde impere la justicia social; donde se produzca la independencia económica, liberando a la patria de la penetración y dominio monopolice e imperialista; donde se materialice la soberanía política sobre la base de la libre voluntad popular y donde la democracia integral se practique sin ningún tipo de proscripciones e inhabilitaciones para todos los argentinos".
Cubríamos el final exhortando a la unidad, a la acción común reinvindicativa, de todas las Organizaciones Sindicales para la prosecución de la lucha en defensa de nuestros derechos.
Estalla la caldera
Los trabajadores metalúrgicos, los trabajadores del transporte y otros gremios declaran paros para los días 15 y 1° de Mayo, en razón de las quitas zonales y el no reconocimiento de la antigüedad por transferencia de empresas, respectivamente. Los obreros mecánicos realizan una Asamblea y a la salida al ser reprimidos, defienden sus derechos en una verdadera batalla campal en el centro de la ciudad el día 14 de Mayo. Los atropellos, la opresión, el desconocimiento de un sin número de derechos, la vergüenza de todos los actos de gobierno, los problemas del estudiantado y de los centros vecinales se suman. Se paraliza totalmente la ciudad el día 16 de Mayo. Nadie trabaja. Todos protestan. El Gobierno reprime.En otros lugares del país, estallan conflictos estudiantiles por las privatizaciones de los comedores universitarios. En Corrientes es asesinado el estudiante Juan José Cabral y ese hecho tiene honda repercusión en toda la población de Córdoba. Se dispone el cierre de la Universidad. Todas las agrupaciones estudiantiles protestan y preparan actos y manifestaciones. Se trabaja de común acuerdo con la CGT.
El día 18, es asesinado en Rosario el estudiante Adolfo Ramón Bello. Realizamos con los estudiantes y los Sacerdotes del Tercer Mundo una marcha de silencio en homenaje a los caídos.
El día 20 de Mayo, fui detenido e incomunicado en el Departamento de Policía "en averiguación de antecedentes". Recupero la libertad al día siguiente. El día 21, se concreta un paro general de estudiantes. Una serie de comunicados del movimiento obrero lo apoyan. En Rosario cae una víctima más. El estudiante y aprendiz de metalúrgico Norberto Blanco, es asesinado en Rosario. Se instalan Consejos de Guerra.
El día 22 de Mayo, los estudiantes de la Universidad Católica se declaran en estado de asamblea y son apoyados por el resto del movimiento estudiantil. El día 23 de Mayo, es ocupado el Barrio Clínicas por los Estudiantes. Es gravemente herido el estudiante Héctor Crusta de un balazo por la Policía. Se producen fogatas y choques. La Policía es contundente, y los choques se hacen cada vez más graves.
El día 25 de Mayo, hablo en la Universidad Católica de Córdoba y hago una severa crítica y condena a los sangrientos atropellos de la Policía y de los arbitrarios procedimientos del Consejo de Guerra en Rosario.
El día 26 de Mayo, el movimiento obrero de Córdoba, por medio de los dos plenarios realizados, resuelve un paro general de actividades de 37 horas a partir de las 11 horas del 29 de Mayo y con abandono de trabajo y concentraciones públicas de protesta. Los estudiantes adhieren en todo a las resoluciones de ambas CGT.
Todo se prepara para el gran paro. La indignación es pública, notoria y elocuente en todos los estratos de ]a población.
No hay espontaneísmo. Ni improvisación. Ni grupos extraños a las resoluciones adoptadas. Los Sindicatos organizan y los estudiantes también. Se fijan los lugares de concentración. Como se realizaran las marchas. La gran concentración se llevara adelante, frente al local de la CGT en la calle Vélez Sársfieid 137.
Millares y millares de volantes reclamando la vigencia de los derechos conculcados inundan la ciudad en los días previos. Se suceden las Asambleas de los Sindicatos y de los Estudiantes que apoyan el paro y la protesta. El día 29 de Mayo amanece tenso. Algunos sindicatos comienzan a abandonar las fábricas antes de las 11 horas. A esa hora el Gobierno dispone que el transporte abandone el casco céntrico. Los trabajadores de Luz y Fuerza de la Administración Central, pretenden organizar un acto a la altura de Rioja y General Paz y son atacados con bombas de gases. Es una vez más la represión en marcha. La represión indiscriminada. La prohibición violenta del derecho de reunión, de expresión, de protesta.
Mientras tanto, las columnas de los trabajadores de las fábricas de la industria automotriz van llegando a la ciudad. Son todas atacadas y se intenta dispersarlas.
El comercio cierra sus puertas y las calles se van llenando de gente. Corre la noticia de la muerte de un compañero, era Máximo Mena del Sindicato de Mecánicos. Se produce el estallido popular, la rebeldía contra tantas injusticias, contra los asesinatos, contra los atropellos. La policía retrocede. Nadie controla la situación. Es el Pueblo. Son las bases sindicales y estudiantiles, que luchan enardecidas. Todos ayudan. El apoyo total de toda la población se da tanto en el centro como en los barrios.
Es la toma de conciencia de todos evidenciándose en las calles contra tantas prohibiciones que se plantearon. Nada de tutelas, ni de los usurpadores del poder, ni de los cómplices participacionistas. El saldo de la batalla de Córdoba -El Cordobazo- es trágico. Decenas de muertos, cientos de heridos. Pero la dignidad y el coraje de un Pueblo florecen y marcan una página en la historia argentina y latinoamericana que no se borrará jamás.
En las fogatas callejeras arde el entreguismo, con la luz, el calor y la fuerza del trabajo y de la juventud, de jóvenes y viejos, de hombres y mujeres. Ese fuego que es del espíritu, de los principios, de las grandes aspiraciones populares ya no se apagará Jamás.
En medio de esa lucha por la justicia, la libertad y el imperio de la voluntad soberana del pueblo, partimos esposados a bordo de un avión con las injustas condenas sobre nuestras espaldas. Años de prisión que se convierten en poco menos de siete meses, por la continuidad de esa acción que libró nuestro pueblo, especialmente Córdoba, y que nos rescata de las lejanas cárceles del sur, para que todos juntos, trabajadores, estudiantes, hombres de todas las ideologías, de todas las religiones, con nuestras diferencias lógicas, sepamos unirnos para construir una sociedad más justa, donde el hombre no sea lobo del hombre, sino su Compañero y su Hermano.
Agustín Tosco
Cordobazo
Por Rodolfo Walsh*
Los obreros mecánicos realizaban una asamblea y son reprimidos, defienden sus derechos en una verdadera batalla campal en el centro de la ciudad el día 14 de Mayo.
Los atropellos, la opresión, el desconocimiento de un sin números de derechos, la vergüenza de todos los actos de gobierno, los problemas del estudiantado y los centros vecinales se suman.
Se paraliza totalmente la ciudad el 16 de mayo. Nadie trabaja. Todos protestan. El gobierno reprime.
En Corrientes es asesinado el estudiante Juan José Cabral. Se dispone el cierre de la Universidad.
Todas las organizaciones estudiantiles protestan. Se preparan actos y manifestaciones. Se trabaja en común acuerdo con la CGT.
El día 18 es asesinado en Rosario, el estudiante Adolfo Ramón Bello. Se realiza con estudiantes, obreros y sacerdotes tercermundistas una marcha de silencio en homenaje a los caídos.
El 23 de Mayo es ocupado el Barrio Clínicas por los estudiantes y son apoyados por el resto del movimiento estudiantil.
El 26 de Mayo el movimiento obrero de Córdoba resuelve un paro general de las actividades de 37 horas a partir de las 11 horas, para el 29 de Mayo, con abandono de trabajo y concentraciones públicas de protesta.
Los estudiantes adhieren en todo a las resoluciones de la CGT. Los estudiantes organizan y los obreros también. Millares y millares de volantes reclamando la vigencia de los derechos conculcados inundan la ciudad los días previos.
El 29 de Mayo amanece tenso. Los trabajadores de luz y fuerza son atacados con bombas de gases a la altura de Rioja y Gral. Paz. Una vez más la represión está marcha.
Las columnas de los
trabajadores de las fábricas automotrices llegan a la ciudad y son
atacados. El comercio cierra sus puertas y la gente inunda las calles.
Corre la noticia de la muerte de Máximo Mena, obrero mecánico. Se produce un estallido popular, la rebeldía contra tanta injusticia, contra los asesinatos, contra los atropellos. La policía retrocede. Nadie controla la situación.
Es el pueblo. Son las bases sindicales y estudiantes que luchan enardecidas. El apoyo total de la población.
Corre la noticia de la muerte de Máximo Mena, obrero mecánico. Se produce un estallido popular, la rebeldía contra tanta injusticia, contra los asesinatos, contra los atropellos. La policía retrocede. Nadie controla la situación.
Es el pueblo. Son las bases sindicales y estudiantes que luchan enardecidas. El apoyo total de la población.
Es la toma de conciencia
contra tantas prohibiciones. Nada de tutelas ni usurpadores del poder,
ni de cómplices participacionistas.
El saldo de la batalla de Córdoba, "El Cordobazo", es trágico. Decenas de muertos, cientos de heridos. Pero la dignidad y el coraje de un pueblo florecen y marcan una página histórica argentina y latinoamericana que no se borrará jamás.
En medio de esa lucha por la justicia, la libertad y el imperio de la voluntad del pueblo, sepamos unirnos para construir una sociedad más justa, donde el hombre no sea lobo del hombre, sino su hermano.
"Nuestras clases dominantes han procurado siempre que los trabajadores no tengan historia, no tengan doctrina, no tengan héroes ni mártires. Cada lucha debe empezar de nuevo, separada de las luchas anteriores. La experiencia colectiva se pierde, las lecciones se olvidan.
La historia aparece así como propiedad privada cuyos dueños son los dueños de todas las cosas. Esta vez es posible que se quiebre el círculo..."
* Extraído de “Periódico de la CGT de los Argentinos”. Colección Completa. Números 1 al 55. Mayo 1968 – Febrero 1970. www.cgtargentinos.org
El saldo de la batalla de Córdoba, "El Cordobazo", es trágico. Decenas de muertos, cientos de heridos. Pero la dignidad y el coraje de un pueblo florecen y marcan una página histórica argentina y latinoamericana que no se borrará jamás.
En medio de esa lucha por la justicia, la libertad y el imperio de la voluntad del pueblo, sepamos unirnos para construir una sociedad más justa, donde el hombre no sea lobo del hombre, sino su hermano.
"Nuestras clases dominantes han procurado siempre que los trabajadores no tengan historia, no tengan doctrina, no tengan héroes ni mártires. Cada lucha debe empezar de nuevo, separada de las luchas anteriores. La experiencia colectiva se pierde, las lecciones se olvidan.
La historia aparece así como propiedad privada cuyos dueños son los dueños de todas las cosas. Esta vez es posible que se quiebre el círculo..."
* Extraído de “Periódico de la CGT de los Argentinos”. Colección Completa. Números 1 al 55. Mayo 1968 – Febrero 1970. www.cgtargentinos.org
Tomado del Blog El Ortiva
* Secretario de Relaciones Institucionales de la CTA
Una rebelión popular
Lunes 29 de mayo de 2017, por *
El
"Cordobazo" fue una rebelión popular. Como el 17 de octubre de 1945.
Como el 19 y 20 de diciembre de 2001. Un acto de legítima defensa ante
los atropellos del poder, el retiro del sábado inglés, la represión
generalizada. Una acción de masas que, de espontánea no tuvo nada.
Agustín Tosco, Atilio López, Elpidio Torres y otros dirigentes
sindicales -algunos conocidos y muchos anónimos- lideran una gesta
histórica que terminaría por eyectar del poder al dictador Onganía.
Tiempo después, otras puebladas incendian la Patria.
* Secretario de Relaciones Institucionales de la CTA
El 29 de
mayo de 1969 -el día que el pueblo reventó de bronca- se selló la unidad
obrero-estudiantil, que volvería a ganar las calles para ensanchar la
cancha donde se jugaba la resistencia al régimen dos años después -el 15
de marzo de 1971- con el "Viborazo".
El "Cordobazo" fue una insurrección popular, un hecho revolucionario que marcaría a fuego a la clase trabajadora argentina. Un fenómeno de rebeldía colectiva que se inscribe en el proceso de lucha popular iniciado en 1955, cuando la "Revolución Fusiladora" derroca al gobierno de Perón y la clase obrera es proscripta social y políticamente. Esta proscripción fue respondida por los trabajadores a través de múltiples instrumentos de lucha: Desde las huelgas, el trabajo a desgano y las tomas de fábricas, hasta los sabotajes con los "caños" heroicos de la resistencia.
El "Cordobazo" no es un hecho aislado. Se corresponde con un momento histórico de ascenso de los niveles de conciencia y organización del pueblo. La protesta callejera en Córdoba se produce luego de otras rebeliones que van jaqueando al gobierno dictatorial de Juan Carlos Onganía, como lo fueron el "Correntinazo" y el primer "Rosariazo".
En ese tiempo convulsionado el pueblo soporta la dictadura de las botas y los monopolios. La nueva interrupción del orden institucional clausura los canales de participación a los trabajadores y a una juventud hambrienta por expresarse políticamente.
El gobierno se asienta en las ballonetas. Es tiempo de piedra y barricada, de caño y fusil. Explota la furia que viene de la larga Resistencia Peronista. La Revolución Cubana es la luz que persiste. Camilo Torres en Colombia y la heroica muerte del Che en Bolivia dejan una estela de compromiso en el firmamento de Latinoamérica.
En ese entonces a los que no militaban se los miraba como sapo de otro pozo. Obturados los caminos institucionales por el accionar de la oligarquía a través de las Fuerzas Armadas que una y otra vez usurparían la soberanía popular, buena parte de la juventud optará por la militancia resistente y el camino de la lucha armada. En ese contexto, no es casual que exactamente un año después del "Cordobazo", el 29 de mayo de 1970, irrumpa públicamente Montoneros con el "Aramburazo".
En los ’60 y los ’70 se naturalizó la violencia como una metología apropiada para restituir la soberanía en manos del pueblo. El encuadramiento en la militancia revolucionaria fue un fenómeno masivo. Se compartía un proyecto colectivo de Nación que terminó ahogado en sangre y fuego por el terrorismo de Estado.
Los genocidas borraron cualquier perspectiva de redención social. Hubo que masacrar a 30 mil militantes para aniquilar el Estado de bienestar e implantar el modelo neoliberal.
El terror se metió en lo más profundo de la sociedad. Se abandonaron los proyectos comunes. Se sobrevivió en el individualismo del sálvese quien pueda.
El nuevo rostro del capitalismo provocó una hemorragia de desplazados del sistema de producción y consumo. Masas de desheredados que perdieron el trabajo, la educación, la salud, la familia, la esperanza.
A la violencia libertaria, sofocada por la tiranía oligárquico-militar, le sucedió la violencia de la sobrevivencia.
El desprecio por la vida del otro se generalizó en el desmadre. La degradación provocada por la brutal desigualdad social es el caldo de cultivo de la violencia urbana, amplificada hasta el infinito por los medios de comunicación del régimen que se regodean exhibiendo la fragmentación, la insolidaridad, el naufragio colectivo.
El crimen organizado es posible gracias al maridaje de las mafias con la corrupción política y policial. La plata sucia envenenó la superestructura de una democracia tutelada por el Imperio.
La violencia doméstica anida en una sociedad enferma, infectada por la ideología dominante. La desaparición de Jorge Julio López y los asesinatos de Carlos Fuentealba, Mariano Ferreyra y tantos otros militantes populares confirma, por si hacía falta, la existencia de nichos intocables de la estructura represiva de la dictadura en las fuerzas de seguridad y la cloaca de los servicios, grupos envalentonados por la cobertura institucional que le prestan la ideología del Macrismo e instrumentos tales como la Ley Antiterrorista, el Proyecto X y el Protocolo Antipiquetes.
La justicia social es el único camino para que no haya más pibes chorros ni ladrones de guantes blancos. Para que deje de haber una justicia para ricos y otra para pobres. Para que se construyan más viviendas, escuelas y hospitales y menos cárceles. Para desterrar la impunidad y el desamparo.
A 48 años del "Cordobazo", a casi 34 años de la recuperación de esta democracia colonial, que mantiene -como en tiempos de la dictadura- un 30 por ciento de pobres, los pibes perseguidos y con hambre, y una deuda pública sideral; que aquí y ahora enarbola desde la cima del Gobierno sus banderas neoliberales, anti-populares y anti-obreras, es estratégico construir una nueva mayoría que encarne un Proyecto de Emancipación, haga caso omiso de los discursos posibilistas, ignore los atajos dictados por el oportunismo político, y se vuelva a plantear como norte el Bien Común: La felicidad del pueblo y la grandeza de la Nación.
Fue la clase trabajadora, hombres y mujeres de la mano de líderes sindicales como Agustín Tosco (Luz y Fuerza), Atilio López (UTA), Elpidio Torres y René Salamanca (SMATA), entre tantos otros, la que inundó las calles en columnas organizadas que partían desde las fábricas y de los distintos puestos de trabajo. Fue el enorme protagonismo del movimiento estudiantil universitario, sensibilizado por el asesinato de Juanjo Cabral en la represión policial en el puente correntino aquel 15 de mayo del ‘69 cuando marchaban junto a los docentes en protesta contra la privatización del comedor universitario de la UNNE, y que derivó en el Correntinazo. Fueron también las y los estudiantes que marcharon con trabajadores en lucha cuando asesinaron a los jóvenes Adolfo Bello (universitario) y a Luis Blanco (metalúrgico) y que explotó en el Rosariazo. Y así en tantas manifestaciones populares que precedieron al Cordobazo, cuyo saldo trágico fueron decenas de muertos y centenares de heridos, pero que pusieron en el lugar más alto de la historia argentina y latinoamericana la inquebrantable voluntad de lucha de nuestro pueblo contra las políticas antiobreras y represivas de la dictadura militar, que no escatimaría balas y garrotes para sostener un modelo económico de exclusión, entrega y saqueo de nuestras riquezas en beneficio de unos pocos.
Hoy, como entonces, levantamos las mismas banderas de libertad, de justicia social, de soberanía, de defensa de los derechos conquistados, contra todo tipo de represión y autoritarismo.
Hoy, lunes 29 de mayo de 2017, es un día de Paro Nacional de la Docencia Universitaria y Preuniversitaria organizada en nuestra CONADU HISTÓRICA. Es el mejor homenaje que podemos ofrendar a aquellos enormes estallidos populares. Con la memoria y los ideales intactos. Con el compromiso de que nuestra lucha no es solamente por un salario digno – frente al tope salarial del 20% que pretende imponer el Gobierno Nacional – sino que es en defensa de la Educación pública, gratuita, laica, popular y de calidad.
Seguiremos firmes en nuestra vocación de construir lazos de unidad con el movimiento estudiantil, con los gremios docentes que estén dispuestos a enfrentar las políticas de ajuste, los tarifazos, los despidos, los topes salariales, los convenios a la baja que impulsan el gobierno y sus aliados, las persecuciones y toda forma de represión.
“El criterio de la clase obrera es que no haya analfabetismo, que todos puedan trabajar y tener su salario para atender las necesidades de su familia; que todos tengan una vivienda; que todos puedan acceder a la Universidad, un nivel de vida digno, decente, que haga al respeto de la personalidad humana. Ese es el ‘Ser Nacional’ que nosotros defendemos”. Agustín Tosco.
En mayo de 1969, el descontento popular contra el régimen militar, instaurado hacía tres años, cuando derrocó al presidente constitucional Arturo Illia, comenzó a manifestarse con huelgas y marchas en las ciudades más importantes del país.
Buenos Aires, Rosario, Tucumán y Corrientes eran los escenarios de movilizaciones obreras y estudiantiles que se suceden contra un gobierno que, además de conculcar las libertades públicas y ejercer una férrea censura, imponía una política de congelamiento de salarios de la mano de Adalbert Krieger Vasena, un ministro de Economía ligado a las corporaciones.
En respuesta al pedido de las cámaras empresariales, que se quejaban de "los altos costos laborales", Krieger Vasena resuelve derogar la Ley del "sábado inglés", una medida que establecía que cada hora trabajada después de las 13 de ese día debía pagarse doble.
En Córdoba, que por esos años era el centro de la industria automotriz y metalmecánica, el rechazó a la medida fue generalizado entre los 150 mil trabajadores sindicalizados.
Desde 1967, la CGT se encontraba dividida en dos: la Azopardo, liderada por el metalúrgico Augusto Vandor, de una tendencia dialogista, y la de los Argentinos, conducida por el gráfico Raimundo Ongaro, opuesta abiertamente al régimen.
No obstante, en Córdoba, donde también persistía la división del movimiento obrero, se alcanzó rápidamente un acuerdo entre las dos centrales frente a la necesidad de oponerse a la eliminación del "sábado inglés".
De esta forma, Agustín Tosco -dirigente de Luz y Fuerza enrolado en la izquierda clasista y referente de la CGT de los Argentinos- acordó junto con Elpidio Torres (Smata) y Atilio López (UTA) -ambos de extracción peronista- la realización de un plan de lucha.
El viernes 16 de mayo, los trabajadores realizaron un paro por 24 horas con alto acatamiento, y la respuesta del gobernador de facto, Carlos Caballero, consistió en decretar un aumento para la Policía.
Mientras tanto, en el barrio cordobés de Clínicas, donde residían buena parte de los estudiantes que cursaban en la Universidad Nacional de Córdoba, se realizaban asambleas y manifestaciones en respaldo a las reivindicaciones obreras.
En un plenario, celebrado el miércoles 21, los dirigentes gremiales redoblaron la apuesta y convocaron a un paro activo de 37 horas que se iniciaría a las 11 del jueves 29.
La idea era desafiar al gobierno con una gran demostración de fuerza; una manifestación numerosa que surgiera desde el cordón industrial y llegara al centro de la capital cordobesa.
Esa mañana de jueves, Córdoba capital amaneció sitiada por la Policía, que se apostó sobre los puentes ubicados sobre el Río Suquía con la intención de evitar que la movilización llegara al corazón administrativo y político de la provincia.
A las 11, la ciudad estaba llena de manifestantes que llegaban desde los barrios de Santa Isabel, Villa Revol, Ferreyra, La Calera, Alta Córdoba y Alberdi, en tanto que, desde Clínicas, marchaban los estudiantes.
Los primeros choques se dieron en torno a los puentes sobre la cañada del Suquía, y, cerca de las 13, la policía no pudo contener a los movilizados, que a pesar de los gases lacrimógenos y las ráfagas de FAL, rebasaron los bloqueos.
La Policía quedó desbordada, sin municiones, se replegó en medio de una ciudad que quedaba literalmente en manos de una movilización obrera que comenzaba a ejercer un espontáneo control popular con barricadas y piquetes sobre las principales calles.
El gobernador, desesperado, llamó a Buenos Aires para pedir ayuda y Onganía le ordenó al Tercer Cuerpo de Ejército retomar el control de una capital mediterránea que era sobrevolada por aviones de la Fuerza Aérea.
"Soldado, no tirés contra el pueblo", podía leerse en algunos carteles armados de forma improvisada ante el avance de los efectivos militares que se desplegaban en el atardecer.
Si bien el Ejército evitó el combate nocturno, retomó barrio por barrio el control de Córdoba en las primeras horas de la mañana del 30, mientras dispersaba a los últimos grupos de manifestantes.
Tosco fue detenido en la sede de Luz y Fuerza y se lo sometió a un Consejo de Guerra que lo condenó a 8 años de prisión, al igual que Torres, López y otros dirigentes.
Sin embargo, tras 17 meses de prisión, todos los dirigentes detenidos recuperaron la libertad y volvieron a Córdoba para retomar la actividad sindical.
El líder de Luz y Fuerza, en cambio, retornaría a la cárcel dos años después como consecuencia de `El Vivorazo`, otra multitudinaria protesta obrera que conmovió a la provincia.
Aunque nunca se supo con certeza, se estima que el "Cordobazo" dejó más de 30 muertos y varios centenares de heridos.
En términos políticos, la consecuencia inmediata significó la pérdida de legitimidad de Onganía, que se manifestó con la renuncia de Krieger Vasena el 4 de junio.
Un año después del "Cordobazo", la organización Montoneros secuestraba y ejecutaba al ex dictador Pedro Eugenio Aramburu, quien en 1956 había ordenado los fusilamientos de los generales Juan José Valle y Raúl Tanco, y el asesinato de militantes peronistas en José León Suárez.
Ese hecho desencadenó, en junio de 1970, la caída de Onganía en el contexto de un golpe propiciado por el entonces jefe del Ejército, Alejandro Lanusse, que designaba como presidente al general Roberto Levingston.
"El Cordobazo" constituyó el comienzo de una etapa de movilización popular que se prolongó hasta mediados de la década de los `70, y que determinó que muchos jóvenes abrazaran la causa de la revolución, en un tiempo en el que parecía que el cielo podía tomarse por asalto.
¿Qué fue el Cordobazo?
LC: Fue uno de los mayores avances de la lucha de la clase obrera y el pueblo en los años 60 y 70. Se reaccionó contra la opresión política, económica y social.
No fue un alzamiento popular espontáneo, fue organizado por los sindicatos cordobeses, que contaron con el apoyo de los universitarios, de una variedad de partidos políticos y del pueblo.
Se rompió la tradición del “paro matero”, fue una huelga con abandono de tareas y movilización, con planteamientos económicos, políticos y gremiales. Se fue a trabajar y desde las grandes plantas industriales, las columnas obreras, compactas, llenas de bronca, arrastraron a los obreros de las pequeñas fábricas.
Las barricadas se levantaron por toda la ciudad, el pueblo fue tomando uno a uno cada barrio, se enfrentó a las fuerzas policiales, que se replegaron a sus cuarteles, dejando la ciudad en manos de los trabajadores y estudiantes. Se ejerció el derecho a la autodefensa. Porque en esas jornadas, la clase obrera, respondió con sus métodos de acción directa. Se recurrió a la movilización, los piquetes, las barricadas, y se conformaron grupos especiales de defensa.
Desde 1966 hasta el Cordobazo, todo intento de resistencia a la dictadura, tenía que descontar la violencia de la dictadura, a partir de ese 29 de mayo, se supo cómo hacer retroceder a las fuerzas que salieron a reprimir a los trabajadores. Fueron jornadas de Solidaridad de clase, que se vio desde la convocatoria hasta la organización, pasando a los momentos de compartir las barricadas, las asambleas espontáneas, etc.
Se demostró una vez más la importancia decisiva del protagonismo de los obreros industriales. La prolongada movilización de otros asalariados, la persistencia y audacia de la lucha de los universitarios, no había logrado lo que consiguieron los trabajadores cordobeses en dos días. El movimiento obrero industrial se hizo cargo de ese liderazgo social y arrastró al pueblo todo a la lucha antidictatorial. Se retomó la vieja tradición, que cuando fueron agredidos los trabajadores en todo el mundo han respondido tomando en sus propias manos, y organizando su defensa.
La pregunta que se extendió de una fábrica a otra fue ¿la clase obrera en sus luchas debe ofrecer las dos mejillas o debe defenderse de los brutales ataques de distinto tipo a los que nos hemos referido? Se llevó a la práctica lo que se consideró un derecho que les permitió luchar. La autodefensa se planteó como disuasiva, defensiva, y sometida a los trabajadores. Una de las enseñanzas fue que la autodefensa de los trabajadores no es, ni debe ser independiente de la voluntad y decisión de los trabajadores, sino que debe ser debatida y aprobada por los propios trabajadores. No deben ser en ningún momento grupos independientes de la clase ni operar por fuera de un sistema democrático de control como son las asambleas. La autodefensa la deciden, la organizan y la llevan adelante los trabajadores.
Además, las Asambleas obreras populares que se realizaron reuniendo en su seno a los obreros y a gran parte de la población pobre de los barrios tomados y rodeados de barricadas, y en algunos lugares con la población ejerciendo el poder de policía, por ejemplo, el de permitir la salida de los bomberos tomados para sofocar incendios, controlar la entrada y salida de los barrios, también constituyeron una forma embrionaria de los órganos de poder, con democracia directa abarcando ya a toda una ciudad, pero su insipiencia y en gran medida la ausencia de una verdadera organización, no permitió la unificación de las asambleas barriales entre sí, a través de delegados electos, en un consejo único de la ciudad.
¿Qué consecuencias tuvo?
LC: Constituyó un punto decisivo en la evolución de la lucha de clases, porque puso de manifiesto el estado que había alcanzado la radicalización de la conciencia política de importantes sectores del proletariado, de la pequeña burguesía y el profundo rechazo antidictatorial existente, acumulado en varios años de deterioro económico-social y de opresión política.
El país no volvió a ser el mismo, se incorporaron a la lucha cientos de jóvenes obreros y estudiantes. Estallaron todas las instituciones. Se abrió un profundo debate, que se expresó abiertamente en toda la sociedad. El tema central de la polémica, era como debía seguir la lucha contra la dictadura y para qué.
Las posturas fueron desde la recuperación de la democracia hasta que tipo de “revolución” o de transformaciones que eran necesarias para la Argentina. En el movimiento obrero adoptó una forma más encubierta, más en grupos que en asambleas masivas. Entre los universitarios nadie discutía que era necesario una revolución: lo que se polemizaba era qué tipo de revolución y la forma de concretarla.
Algunas agrupaciones políticas, estrechamente relacionadas con el radicalismo popular (UCRP), o el Partido Comunista (PC) y sectores del nacionalismo popular (Mura, MNR, MOR, AUN, FEN, etc.), se expresaban por la lucha contra la dictadura, por su derrocamiento, por la resistencia a la misma y forma de reemplazarla. Los sectores de la izquierda con raíz marxista, con mayores o menores variantes mantuvieron, en el proceso político posterior al Cordobazo, la consigna “ni golpe, ni elección, revolución”, línea política que preconizaba el derrocamiento de la dictadura o la lucha contra ella, en el camino de reemplazarla por un gobierno o un poder que realizara la revolución de liberación social y nacional en “marcha hacia el socialismo”.
Las expresiones del peronismo en el movimiento estudiantil mantuvieron también lo esencial de su línea de unir a los estudiantes con el llamado “peronismo revolucionario”, expresión real del movimiento obrero, según ellos, en el camino de la liberación nacional y social. Pero, el debate abierto produjo profundas fisuras en la izquierda tradicional o institucional, y determinó la aparición de grupos políticos, entre los cuales se contaban entre otros el Socialismo Revolucionario (SR), Tendencia Comunista (TC), Espartaco, Orientación Socialista, El Obrero, Lucha Socialista, Poder Obrero, Movimiento de Izquierda Revolucionaria, etc.
Todos ellos pasaron a impugnar en forma frontal la estrategia de una Revolución que presuponía la “tarea” de la Liberación Nacional. Ese cuestionamiento abarcó lógicamente la caracterización del Estado, del país como semicolonial, las alianzas de clase, el tipo de poder. Se pronunciaron contra la dictadura, los golpes y las salidas electorales. De la consiga, “ni golpe, ni elección, revolución”, se pasó a la proclamada “ni golpe, ni elección, revolución proletaria”, dando de esa manera una salida real fuera del sistema.
Un sector importante de la izquierda, pasó a definirse por la acción directa. Esto se vio favorecido, no solo por las condiciones nacionales, sino además por un proceso dado en América Latina y el mundo. Producto de la propia experiencia vivida en la Argentina (golpes, elecciones, proscripciones, etc.) y de la percepción de fenómenos como la crisis del parlamentarismo a nivel mundial, de tristes experiencias como la del Partido Comunista Francés con su traición en Mayo del 68 (producto de sus tesis de acceso al poder por vía pacífica y por mayoría parlamentaria), producto de todo eso por un lado y su contrapartida por el otro, por ejemplo el triunfo de la revolución cubana por la acción de las armas y el desarrollo de la lucha vietnamita, resultado de éstas y de múltiples experiencias más, el conjunto de organizaciones políticas a que nos estamos refiriendo llegaron a varias conclusiones de las que destacamos dos, muy relacionadas con su actitud frente a la lucha democrática:
*.-Que la vía de acceso al poder sólo puede ser armada. Había tesis que iban desde la guerra popular hasta “el acto insurreccional” pasando por la guerra prolongada.
*.-La segunda conclusión, es que el parlamento es un engaño a las masas, que no puede constituir una vía de acceso al poder y que por lo tanto no sirve para nada en cuanto a la lucha revolucionaria se refiere.
Por otra parte, algunos grupos que pasaron a proclamar la revolución socialista, definieron a la vez que la única forma de acceso al poder era por la acción revolucionaria del proletariado, como una conclusión irrefutable, sobre todo en un país capitalista y más aún en la Argentina, dejando aclarado que “no cabría pensar siquiera en la posibilidad de otra forma de definir el problema del poder que no sea por la acción de las armas”, y que en base a eso justamente, coincidían también en que el parlamento no puede ser nunca una vía de acceso al poder.
O sea, la situación social y política del país cambiaría radicalmente y la lucha de clases iría in crescendo, con la clase obrera ocupando el centro de la escena, enfrentando a la dictadura, al capital y marcando el camino a distintos sectores populares y al estudiantado universitario.
La
Araucanía se ha convertido en debate político obligado. Los ataques
incendiarios de los que se responsabiliza a comunidades mapuche generan
división en los discursos: hay quienes piden más fuerza en la
persecución de estos delitos; mientras otros sostienen que sin la mirada
histórica es imposible solucionar un problema que data de siglos.
En esa espera, la relación entre el Estado y pueblo mapuche se vuelve más tensa; más cuando las autoridades insisten en aplicar la Ley Antiterrorista para investigar a los responsables.
De todo ello conversó Aucán Huilcaman. El líder mapuche y vocero del Consejo de Todas las Tierras se refirió a la presidencialización del debate. En Diario y Radio Universidad de Chile dijo que “los anuncios de los candidatos a presidente de Chile Vamos son discriminatorias y exageradas”.
En su conversación con el periodista Patricio López se refirió puntualmente a las intervenciones del expresidente Sebastián Piñera, a quien acusó de “hablar deliberadamente” del conflicto sin recordar que en 2013 invitó a un relator de Naciones Unidas a La Araucanía, quien concluyó que en la zona no existe el terrorismo, recomendando medidas que no fueron tomadas ni por ese gobierno, ni por el de Michelle Bachelet: “Me parece grave que no se tome en cuenta ese informe basado en estándares del concepto de terrorismo, y no de la idea deliberada que en Chile y en La Araucanía se usan para referirse a la situación”.
El líder mapuche también criticó a la precandidata del Frente Amplio, Beatriz Sánchez, quien se mostró dispuesta a invocar la Ley Antiterrorista: “Me llama la atención, porque su afirmación es muy prematura. Además, ella no tiene en cuenta cuáles son los estándares internacionales para entender el terrorismo y para calificarlo como tal”, sin moverse de la lógica actual, desconociendo que “el Estado es el único causante de todos y cada uno de los conflictos que existen en la zona”.
Para Aucán Huilcaman estas intervenciones solo demuestran el desconocimiento profundo de los aspirantes a La Moneda sobre el concepto usual del terrorismo: “Yo entiendo que muchos candidatos a presidente usen de forma deliberada el concepto de terrorismo, porque de esa forma ocultan la responsabilidad que tiene el Estado de Chile en la denominada Pacificación de La Araucanía en los crímenes de lesa humanidad y en despojo de la tierra, del territorio y sus recursos, que son el tema de fondo del cual subyacen los hechos y controversias que hay en la región”.
El llamado de los pueblos, explicó el entrevistado, es que se deje de lado la línea represiva con la que se ha actuado en las últimas décadas. “La Ley Antiterrorista tiene por objeto criminalizar la lucha del pueblo mapuche por la restitución de sus derechos legítimos y, a la vez, tratar de anular los procesos de autodeterminación que las comunidades mapuches llevan en el sur”. Así criticó a la actual administración de gobierno por “no haber tenido nunca la intención de cumplir con sus promesas para zona”, mencionando por ejemplo, el proyecto de Ley Araucanía “que se impulsa al margen de la participación de los mapuche”, también la comisión asesora presidencial liderada por el Obispo Vargas: “Nosotros le hemos pedido que no anuncie el proyecto de ley para la zona. En él se contiene un capítulo perverso, porque va a incluir un presupuesto para la violencia en la región, el que es un buen incentivo para los atentados y autoatentados, el que se va a sumar al que ya existe para la violencia rural. Estamos en un contexto de perversidad para La Araucanía”.
Con su planteamiento, el werkén acusó a la autoridad de generar las condiciones para que se realicen atentados para cobrar esos dineros: “El gobierno de La Araucanía dispone de 3 mil 600 millones de pesos para cualquier acto de violencia. Por lo tanto, pueden operar organizaciones ilegales para cometer hechos de cualquier naturaleza, porque hay un presupuesto político disponible”.
El rol del PC y el anclaje social del Frente Amplio
Publicado el 29 Mayo 2017 Escrito por Izquierda Autónoma - EL CLARÌN DE CHILE
Hace tres años, el Partido Comunista decidió ingresar a la Nueva Mayoría, coalición que proponía un programa ciudadano, con el objetivo de impulsar reformas desde el gobierno, a la vez que continuaba en el movimiento social. “Nuestra decisión de entrar fue buena, porque este Gobierno inició un proceso de reformas necesarias para el país”, dice Guillermo Teillier.
Pero, ¿ayudó la estrategia del PC a dar una salida al neoliberalismo? Para Izquierda Autónoma, una de las 12 fuerzas del Frente Amplio, ese objetivo no se cumplió. Giorgio Boccardo recuerda que el comunista Marcos Barraza, ministro de Desarrollo Social, ha aplicado en esa cartera la misma focalización de políticas que utilizaron los dirigentes UDI en el ex Mideplan de Pinochet.
“¿En qué se distingue esta gestión de otras protagonizadas por gobiernos neoliberales? En casi nada. Mantener el gasto social focalizado de un Estado que subsidia la acumulación empresarial sólo atenúa los efectos más nocivos de la concentración de la riqueza”, dice, a la vez que advierte que el Frente Amplio “también corre el riesgo de terminar gestionando la política social de la dictadura. De ahí que resulte fundamental debatir sobre cómo enfrentar a los grupos empresariales forjados en el capitalismo de servicio público criollo”.
Y Víctor Orellana, de Nodo XXI, critica que el PC acuse al Frente Amplio en vez de ver ahí una opción transformadora que no existe en la Nueva Mayoría. “¿Cuánta fuerza tendríamos si estuviéramos juntos? Ese es el polo al que temen los dueños del país, y también la fuerza que nos permitiría, de manera más eficaz, sumar fuerza con los sectores democráticos que todavía existen en la política oficial”, plantea.
En esa línea, el historiador Luis Thielemann explica que “sin masas movilizadas imponiendo su interés al Frente Amplio, este corre el riesgo de ser absorbido por la transición”, y que sin una estrategia de salida del neoliberalismo, como le ocurre al PS y PC, el grupo de fuerzas emergentes “deja de ser una fuerza política de perspectiva histórica, y al igual que el resto de la izquierda del siglo XX, se convierte en una oferta más en el mercado electoral”.
El retroceso de la autonomía de las mujeres
En los próximos días, continuará la discusión legislativa del proyecto de despenalización del aborto en tres causales. En la última votación, la Comisión de Salud del Senado estableció que las niñas menores de 14 años deban contar con la autorización de un Juzgado de Familia para interrumpir su embarazo, y próximamente se votará la idea de si las clínicas pueden obligar a sus médicos a no asistir abortos. En ese contexto, Daniela López, del Frente Feminista de Izquierda Autónoma, acusa que cada etapa que ha enfrentado el proyecto “constituye retrocesos a la posibilidad de avanzar en la autonomía de la mujer y cuyo cuestionamiento ha sido mayoritario desde las organizaciones feministas”.
“Estas ambivalencias ponen en riesgo las mismas iniciativas de leyes, ya que terminan siendo expresión de una transacción a favor de una política patriarcal y anti-derechos”, añade López y recuerda que Beatriz Sánchez, la precandidata del partido, se comprometió a avanzar en el derecho a decidir de las mujeres sobre sus vidas y el aborto legal.
El Colegio Médico se mueve a la izquierda
En un resultado histórico, la lista de izquierda “Oxigenando al Colmed” se impuso con el 53% de los votos en las elecciones del Colegio Médico, colocando a Izkia Siches en la presidencia, siendo la primera mujer que ocupará el cargo. La lista también era integrada por miembros de Izquierda Autónoma, entre ellos los dirigentes Natalia Henríquez y Camilo Bass, quienes fueron la segunda y tercera mayoría en el Regional Santiago, respectivamente, y Gonzalo Rubio, que fue electo consejero con la primera mayoría nacional.
AFUSEC
Este martes se cumplirá el primero de los paros regionales de docentes de Secundaria decidido por la Federación Nacional de Profesores de la Enseñanza Secundaria (Fenapes) en el marco de los reclamos del sindicato por mayor presupuesto para la educación en la próxima Rendición de Cuentas.
Tal como había definido Fenapes, el paro de este martes afectará a los docentes agremiados de Montevideo, Canelones, Rocha, Maldonado, Treinta y Tres, Lavalleja y Durazno.
En el marco del paro, la dirigencia de Fenapes brindará una conferencia de prensa en la que planteará su postura con respecto al próximo presupuesto. La plataforma de los docentes incluye el reclamo de un salario “igual a media canasta básica al ingreso”, además del “pago total de las horas trabajadas” de docencia indirecta.
La plataforma reivindicativa se basa en el 6% del PBI para la educación pero también incluye el rechazo a los proyectos de Participación Público Privada para la construcción de edificios, tanto en la ANEP como en el Hospital de Clínicas. A su vez, los docentes reclaman la construcción y mantenimiento de centros educativos y la aplicación de “políticas educativas integrales”.
El sábado, el secretario general de Fenapes José Olivera dijo a Radio Montecarlo que el gobierno “está tratando de dilatar los procesos de negociación”, para que cuando llegue la fecha del vencimiento del plazo para entregar la Rendición al Parlamento, “el Ejecutivo pueda imponer y no negociar”.
“Estamos ante una situación que se agrava día a día”, apuntó en la víspera del ciclo de medidas zonales que continuará el miércoles 31 de mayo con paro de 24 horas en Artigas, Salto, Paysandú, Tacuarembó, Rivera y Cerro Largo y finalizará el jueves 1° con paro en San José, Flores, Florida, Colonia, Soriano y Río Negro.
Montevideo Portal
AFUSEC
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AFUSEC
Fernando Pesce, Ivonne Passada y Raúl Sendic, durante la
presentación del libro: “Uruguay, una visión desde la geografía, el
jueves, en la Biblioteca Nacional. Foto: Federico Gutiérrez
El "Cordobazo" fue una insurrección popular, un hecho revolucionario que marcaría a fuego a la clase trabajadora argentina. Un fenómeno de rebeldía colectiva que se inscribe en el proceso de lucha popular iniciado en 1955, cuando la "Revolución Fusiladora" derroca al gobierno de Perón y la clase obrera es proscripta social y políticamente. Esta proscripción fue respondida por los trabajadores a través de múltiples instrumentos de lucha: Desde las huelgas, el trabajo a desgano y las tomas de fábricas, hasta los sabotajes con los "caños" heroicos de la resistencia.
El "Cordobazo" no es un hecho aislado. Se corresponde con un momento histórico de ascenso de los niveles de conciencia y organización del pueblo. La protesta callejera en Córdoba se produce luego de otras rebeliones que van jaqueando al gobierno dictatorial de Juan Carlos Onganía, como lo fueron el "Correntinazo" y el primer "Rosariazo".
En ese tiempo convulsionado el pueblo soporta la dictadura de las botas y los monopolios. La nueva interrupción del orden institucional clausura los canales de participación a los trabajadores y a una juventud hambrienta por expresarse políticamente.
El gobierno se asienta en las ballonetas. Es tiempo de piedra y barricada, de caño y fusil. Explota la furia que viene de la larga Resistencia Peronista. La Revolución Cubana es la luz que persiste. Camilo Torres en Colombia y la heroica muerte del Che en Bolivia dejan una estela de compromiso en el firmamento de Latinoamérica.
En ese entonces a los que no militaban se los miraba como sapo de otro pozo. Obturados los caminos institucionales por el accionar de la oligarquía a través de las Fuerzas Armadas que una y otra vez usurparían la soberanía popular, buena parte de la juventud optará por la militancia resistente y el camino de la lucha armada. En ese contexto, no es casual que exactamente un año después del "Cordobazo", el 29 de mayo de 1970, irrumpa públicamente Montoneros con el "Aramburazo".
En los ’60 y los ’70 se naturalizó la violencia como una metología apropiada para restituir la soberanía en manos del pueblo. El encuadramiento en la militancia revolucionaria fue un fenómeno masivo. Se compartía un proyecto colectivo de Nación que terminó ahogado en sangre y fuego por el terrorismo de Estado.
Los genocidas borraron cualquier perspectiva de redención social. Hubo que masacrar a 30 mil militantes para aniquilar el Estado de bienestar e implantar el modelo neoliberal.
El terror se metió en lo más profundo de la sociedad. Se abandonaron los proyectos comunes. Se sobrevivió en el individualismo del sálvese quien pueda.
El nuevo rostro del capitalismo provocó una hemorragia de desplazados del sistema de producción y consumo. Masas de desheredados que perdieron el trabajo, la educación, la salud, la familia, la esperanza.
A la violencia libertaria, sofocada por la tiranía oligárquico-militar, le sucedió la violencia de la sobrevivencia.
El desprecio por la vida del otro se generalizó en el desmadre. La degradación provocada por la brutal desigualdad social es el caldo de cultivo de la violencia urbana, amplificada hasta el infinito por los medios de comunicación del régimen que se regodean exhibiendo la fragmentación, la insolidaridad, el naufragio colectivo.
El crimen organizado es posible gracias al maridaje de las mafias con la corrupción política y policial. La plata sucia envenenó la superestructura de una democracia tutelada por el Imperio.
La violencia doméstica anida en una sociedad enferma, infectada por la ideología dominante. La desaparición de Jorge Julio López y los asesinatos de Carlos Fuentealba, Mariano Ferreyra y tantos otros militantes populares confirma, por si hacía falta, la existencia de nichos intocables de la estructura represiva de la dictadura en las fuerzas de seguridad y la cloaca de los servicios, grupos envalentonados por la cobertura institucional que le prestan la ideología del Macrismo e instrumentos tales como la Ley Antiterrorista, el Proyecto X y el Protocolo Antipiquetes.
La justicia social es el único camino para que no haya más pibes chorros ni ladrones de guantes blancos. Para que deje de haber una justicia para ricos y otra para pobres. Para que se construyan más viviendas, escuelas y hospitales y menos cárceles. Para desterrar la impunidad y el desamparo.
A 48 años del "Cordobazo", a casi 34 años de la recuperación de esta democracia colonial, que mantiene -como en tiempos de la dictadura- un 30 por ciento de pobres, los pibes perseguidos y con hambre, y una deuda pública sideral; que aquí y ahora enarbola desde la cima del Gobierno sus banderas neoliberales, anti-populares y anti-obreras, es estratégico construir una nueva mayoría que encarne un Proyecto de Emancipación, haga caso omiso de los discursos posibilistas, ignore los atajos dictados por el oportunismo político, y se vuelva a plantear como norte el Bien Común: La felicidad del pueblo y la grandeza de la Nación.
1969 – 29 de Mayo – 2017: A 48 años del Cordobazo
A 48 años de las gloriosas gestas obrero-estudiantiles que dieron origen al Cordobazo, desde CONADU HISTÓRICA rendimos homenaje a la enorme rebelión popular que se alzó contra las injusticias y opresiones de la dictadura de Juan Carlos Onganía.Fue la clase trabajadora, hombres y mujeres de la mano de líderes sindicales como Agustín Tosco (Luz y Fuerza), Atilio López (UTA), Elpidio Torres y René Salamanca (SMATA), entre tantos otros, la que inundó las calles en columnas organizadas que partían desde las fábricas y de los distintos puestos de trabajo. Fue el enorme protagonismo del movimiento estudiantil universitario, sensibilizado por el asesinato de Juanjo Cabral en la represión policial en el puente correntino aquel 15 de mayo del ‘69 cuando marchaban junto a los docentes en protesta contra la privatización del comedor universitario de la UNNE, y que derivó en el Correntinazo. Fueron también las y los estudiantes que marcharon con trabajadores en lucha cuando asesinaron a los jóvenes Adolfo Bello (universitario) y a Luis Blanco (metalúrgico) y que explotó en el Rosariazo. Y así en tantas manifestaciones populares que precedieron al Cordobazo, cuyo saldo trágico fueron decenas de muertos y centenares de heridos, pero que pusieron en el lugar más alto de la historia argentina y latinoamericana la inquebrantable voluntad de lucha de nuestro pueblo contra las políticas antiobreras y represivas de la dictadura militar, que no escatimaría balas y garrotes para sostener un modelo económico de exclusión, entrega y saqueo de nuestras riquezas en beneficio de unos pocos.
Hoy, como entonces, levantamos las mismas banderas de libertad, de justicia social, de soberanía, de defensa de los derechos conquistados, contra todo tipo de represión y autoritarismo.
Hoy, lunes 29 de mayo de 2017, es un día de Paro Nacional de la Docencia Universitaria y Preuniversitaria organizada en nuestra CONADU HISTÓRICA. Es el mejor homenaje que podemos ofrendar a aquellos enormes estallidos populares. Con la memoria y los ideales intactos. Con el compromiso de que nuestra lucha no es solamente por un salario digno – frente al tope salarial del 20% que pretende imponer el Gobierno Nacional – sino que es en defensa de la Educación pública, gratuita, laica, popular y de calidad.
Seguiremos firmes en nuestra vocación de construir lazos de unidad con el movimiento estudiantil, con los gremios docentes que estén dispuestos a enfrentar las políticas de ajuste, los tarifazos, los despidos, los topes salariales, los convenios a la baja que impulsan el gobierno y sus aliados, las persecuciones y toda forma de represión.
“El criterio de la clase obrera es que no haya analfabetismo, que todos puedan trabajar y tener su salario para atender las necesidades de su familia; que todos tengan una vivienda; que todos puedan acceder a la Universidad, un nivel de vida digno, decente, que haga al respeto de la personalidad humana. Ese es el ‘Ser Nacional’ que nosotros defendemos”. Agustín Tosco.
Luis Tiscornia, secretario general CONADUH
Claudia Baigorria, secretaria de formación CONADUH
Partido Revolucionario de los Trabajadores
PRT – Argentina. Por la Revolución Socialista
El Cordobazo: un legado para las necesidades de hoy
Este
29 de mayo se conmemora el 48° aniversario de El Cordobazo. Muchas
cosas extraordinarias se han dicho y escrito a lo largo de los años
sobre aquellos sucesos protagonizados por la clase obrera y el pueblo.
En esos hechos, como narráramos en el artículo “A 47 años del Cordobazo, la vigencia de la Revolución Socialista”
(22/5/2016) tuvieron la impronta del surgimiento de nuevas ideas
revolucionarias que surcaban la tenaz y enérgica lucha de nuestra clase
obrera y el pueblo. Nacía la lucha por el poder y el socialismo.
Hoy a 48 años, las causas de opresión y
explotación que llevaron al destino que tomó la lucha de clases
protagonizada en aquellos años, no solo siguen intactas sino que se han
vuelto más descarnadas y crueles, encontrándonos en una etapa terminal
del capitalismo que ha llegado a un estado putrefacto y degradado, que
lo único que le ofrece a nuestro pueblo es una vida indigna plagada de
sufrimientos.
Aquellas gestas tuvieron como actores
protagónicos a la clase obrera y dirigentes políticos y sindicales que
estuvieron a la altura de sus intereses de clase, donde los más notables
fueron Agustín Tosco y Atilio López, rodeados de una enorme vanguardia,
dirigentes de base combativos y revolucionarios que expresaban y
adelantaban la necesidad de una revolución que lleve a todo el pueblo
argentino a su emancipación.
Mucha agua ha corrido bajo el puente
desde aquellos años, y en una espiral ascendente de la lucha de clases,
como diría Santucho, hoy emerge la necesidad imperiosa de la irrupción
de la clase obrera como actor principal en el escenario político donde
desde su independencia política se hace necesario romper con el statu
quo de un sindicalismo asociado a los monopolios, y un sindicalismo
oportunista y reformista, que se desviven por aportarles salidas a la
crisis política de la burguesía con un lenguaje revolucionarista pero
que aleje lo más posible al proletariado de la lucha revolucionaria.
Hoy no hay espacios para homenajes
vacíos de contenido, con propuestas que sacan del centro de la escena el
verdadero rol histórico de la clase obrera y sus organizaciones. Por
ello es una responsabilidad esencial de los revolucionarios empujar con
propuestas que hagan emerger las luchas por las conquistas económicas y
reivindicativas en una propuesta política emancipadora de todo el pueblo
de carácter nacional, recuperando así las viejas tradiciones donde la
clase obrera supo acaudillar la lucha de todo el pueblo.
Cuando afirmamos que ES LA HORA DE LA
REBELIÓN DE LAS BASES lo hacemos asentado en miles de experiencias que
se vienen desarrollando en los más diversos lugares del país, pero donde
la dispersión es muy grande y solo puede unificarse a través de una
propuesta política revolucionaria que despoje a los trabajadores del
concepto que su lucha solo es por sus mejoras económicas divorciados de
una política independiente que se plantee la destrucción del Estado
burgués.
El Cordobazo es el claro ejemplo
(salvando el marco histórico y los nuevos fenómenos) de que ese es el
camino que debemos retomar donde los nuevos tiempos de revolución deben
crear sus propios contextos condicionando la gobernabilidad de la
burguesía; desde el desarrollo del poder localen la lucha por el poder,
con la unidad de la clase obrera y el pueblo. El Cordobazo fue un hito
en la Historia, pero que estuvo de la mano del Rosariazo, Mendozazo,
Tucumanazo; es decir, fue una detonación en cadena porque en la
profundidad de la lucha de clases se encontraba explícita la cuestión
política nacional.
Hoy el mar de fondo de las necesidades
de un cambio en la lucha que quiebren la correlación de fuerzas a favor
de la clase obrera y el pueblo, está impregnada en todo el país. Por
eso, cuando se analiza el presente, no podemos verlo compartimentado con
la Historia, pues parados sobre los hombros de las más ricas
experiencias de lucha de nuestra clase obrera y el pueblo, es desde
donde surgirán nuevos y extraordinarios sucesos que demostrarán que los
grandes hechos de la Historia aún están por venir gracias a legados como
el Cordobazo.
29/05/2014 aniversario
El Cordobazo: "El mayo cordobés" que jaqueó la dictadura de Onganía
Agustín Tosco, Atilio López y Elpidio Torres son los nombres de los dirigentes sindicales de la izquierda clasista y el peronismo que hace 45 años encabezaron "el Cordobazo", una protesta obrero-estudiantil originada en la capital de la provincia mediterránea, y que devino en un estallido social que jaqueó a la dictadura cívico militar de Juan Carlos Onganía.En mayo de 1969, el descontento popular contra el régimen militar, instaurado hacía tres años, cuando derrocó al presidente constitucional Arturo Illia, comenzó a manifestarse con huelgas y marchas en las ciudades más importantes del país.
Buenos Aires, Rosario, Tucumán y Corrientes eran los escenarios de movilizaciones obreras y estudiantiles que se suceden contra un gobierno que, además de conculcar las libertades públicas y ejercer una férrea censura, imponía una política de congelamiento de salarios de la mano de Adalbert Krieger Vasena, un ministro de Economía ligado a las corporaciones.
En respuesta al pedido de las cámaras empresariales, que se quejaban de "los altos costos laborales", Krieger Vasena resuelve derogar la Ley del "sábado inglés", una medida que establecía que cada hora trabajada después de las 13 de ese día debía pagarse doble.
"El Cordobazo" constituyó el comienzo de una etapa de movilización popular que se prolongó hasta mediados de la década de los `70, y que determinó que muchos jóvenes abrazaran la causa de la revolución”El gobierno de Onganía tildó ese benefició de "inconstitucional" y lo suprimió.
En Córdoba, que por esos años era el centro de la industria automotriz y metalmecánica, el rechazó a la medida fue generalizado entre los 150 mil trabajadores sindicalizados.
Desde 1967, la CGT se encontraba dividida en dos: la Azopardo, liderada por el metalúrgico Augusto Vandor, de una tendencia dialogista, y la de los Argentinos, conducida por el gráfico Raimundo Ongaro, opuesta abiertamente al régimen.
No obstante, en Córdoba, donde también persistía la división del movimiento obrero, se alcanzó rápidamente un acuerdo entre las dos centrales frente a la necesidad de oponerse a la eliminación del "sábado inglés".
De esta forma, Agustín Tosco -dirigente de Luz y Fuerza enrolado en la izquierda clasista y referente de la CGT de los Argentinos- acordó junto con Elpidio Torres (Smata) y Atilio López (UTA) -ambos de extracción peronista- la realización de un plan de lucha.
El viernes 16 de mayo, los trabajadores realizaron un paro por 24 horas con alto acatamiento, y la respuesta del gobernador de facto, Carlos Caballero, consistió en decretar un aumento para la Policía.
Mientras tanto, en el barrio cordobés de Clínicas, donde residían buena parte de los estudiantes que cursaban en la Universidad Nacional de Córdoba, se realizaban asambleas y manifestaciones en respaldo a las reivindicaciones obreras.
En un plenario, celebrado el miércoles 21, los dirigentes gremiales redoblaron la apuesta y convocaron a un paro activo de 37 horas que se iniciaría a las 11 del jueves 29.
La idea era desafiar al gobierno con una gran demostración de fuerza; una manifestación numerosa que surgiera desde el cordón industrial y llegara al centro de la capital cordobesa.
Esa mañana de jueves, Córdoba capital amaneció sitiada por la Policía, que se apostó sobre los puentes ubicados sobre el Río Suquía con la intención de evitar que la movilización llegara al corazón administrativo y político de la provincia.
A las 11, la ciudad estaba llena de manifestantes que llegaban desde los barrios de Santa Isabel, Villa Revol, Ferreyra, La Calera, Alta Córdoba y Alberdi, en tanto que, desde Clínicas, marchaban los estudiantes.
Los primeros choques se dieron en torno a los puentes sobre la cañada del Suquía, y, cerca de las 13, la policía no pudo contener a los movilizados, que a pesar de los gases lacrimógenos y las ráfagas de FAL, rebasaron los bloqueos.
La Policía quedó desbordada, sin municiones, se replegó en medio de una ciudad que quedaba literalmente en manos de una movilización obrera que comenzaba a ejercer un espontáneo control popular con barricadas y piquetes sobre las principales calles.
El gobernador, desesperado, llamó a Buenos Aires para pedir ayuda y Onganía le ordenó al Tercer Cuerpo de Ejército retomar el control de una capital mediterránea que era sobrevolada por aviones de la Fuerza Aérea.
"Soldado, no tirés contra el pueblo", podía leerse en algunos carteles armados de forma improvisada ante el avance de los efectivos militares que se desplegaban en el atardecer.
Si bien el Ejército evitó el combate nocturno, retomó barrio por barrio el control de Córdoba en las primeras horas de la mañana del 30, mientras dispersaba a los últimos grupos de manifestantes.
Tosco fue detenido en la sede de Luz y Fuerza y se lo sometió a un Consejo de Guerra que lo condenó a 8 años de prisión, al igual que Torres, López y otros dirigentes.
Sin embargo, tras 17 meses de prisión, todos los dirigentes detenidos recuperaron la libertad y volvieron a Córdoba para retomar la actividad sindical.
El líder de Luz y Fuerza, en cambio, retornaría a la cárcel dos años después como consecuencia de `El Vivorazo`, otra multitudinaria protesta obrera que conmovió a la provincia.
Aunque nunca se supo con certeza, se estima que el "Cordobazo" dejó más de 30 muertos y varios centenares de heridos.
En términos políticos, la consecuencia inmediata significó la pérdida de legitimidad de Onganía, que se manifestó con la renuncia de Krieger Vasena el 4 de junio.
Un año después del "Cordobazo", la organización Montoneros secuestraba y ejecutaba al ex dictador Pedro Eugenio Aramburu, quien en 1956 había ordenado los fusilamientos de los generales Juan José Valle y Raúl Tanco, y el asesinato de militantes peronistas en José León Suárez.
Ese hecho desencadenó, en junio de 1970, la caída de Onganía en el contexto de un golpe propiciado por el entonces jefe del Ejército, Alejandro Lanusse, que designaba como presidente al general Roberto Levingston.
"El Cordobazo" constituyó el comienzo de una etapa de movilización popular que se prolongó hasta mediados de la década de los `70, y que determinó que muchos jóvenes abrazaran la causa de la revolución, en un tiempo en el que parecía que el cielo podía tomarse por asalto.
Qué fue el Cordobazo y cuáles fueron sus consecuencias
Entrevista realizada al historiador Leonidas "Noni" Ceruti acerca de su visión del Cordobazo.
Lunes 29 de mayo | 00:00
LC: Fue uno de los mayores avances de la lucha de la clase obrera y el pueblo en los años 60 y 70. Se reaccionó contra la opresión política, económica y social.
No fue un alzamiento popular espontáneo, fue organizado por los sindicatos cordobeses, que contaron con el apoyo de los universitarios, de una variedad de partidos políticos y del pueblo.
Se rompió la tradición del “paro matero”, fue una huelga con abandono de tareas y movilización, con planteamientos económicos, políticos y gremiales. Se fue a trabajar y desde las grandes plantas industriales, las columnas obreras, compactas, llenas de bronca, arrastraron a los obreros de las pequeñas fábricas.
Las barricadas se levantaron por toda la ciudad, el pueblo fue tomando uno a uno cada barrio, se enfrentó a las fuerzas policiales, que se replegaron a sus cuarteles, dejando la ciudad en manos de los trabajadores y estudiantes. Se ejerció el derecho a la autodefensa. Porque en esas jornadas, la clase obrera, respondió con sus métodos de acción directa. Se recurrió a la movilización, los piquetes, las barricadas, y se conformaron grupos especiales de defensa.
Desde 1966 hasta el Cordobazo, todo intento de resistencia a la dictadura, tenía que descontar la violencia de la dictadura, a partir de ese 29 de mayo, se supo cómo hacer retroceder a las fuerzas que salieron a reprimir a los trabajadores. Fueron jornadas de Solidaridad de clase, que se vio desde la convocatoria hasta la organización, pasando a los momentos de compartir las barricadas, las asambleas espontáneas, etc.
Se demostró una vez más la importancia decisiva del protagonismo de los obreros industriales. La prolongada movilización de otros asalariados, la persistencia y audacia de la lucha de los universitarios, no había logrado lo que consiguieron los trabajadores cordobeses en dos días. El movimiento obrero industrial se hizo cargo de ese liderazgo social y arrastró al pueblo todo a la lucha antidictatorial. Se retomó la vieja tradición, que cuando fueron agredidos los trabajadores en todo el mundo han respondido tomando en sus propias manos, y organizando su defensa.
La pregunta que se extendió de una fábrica a otra fue ¿la clase obrera en sus luchas debe ofrecer las dos mejillas o debe defenderse de los brutales ataques de distinto tipo a los que nos hemos referido? Se llevó a la práctica lo que se consideró un derecho que les permitió luchar. La autodefensa se planteó como disuasiva, defensiva, y sometida a los trabajadores. Una de las enseñanzas fue que la autodefensa de los trabajadores no es, ni debe ser independiente de la voluntad y decisión de los trabajadores, sino que debe ser debatida y aprobada por los propios trabajadores. No deben ser en ningún momento grupos independientes de la clase ni operar por fuera de un sistema democrático de control como son las asambleas. La autodefensa la deciden, la organizan y la llevan adelante los trabajadores.
Además, las Asambleas obreras populares que se realizaron reuniendo en su seno a los obreros y a gran parte de la población pobre de los barrios tomados y rodeados de barricadas, y en algunos lugares con la población ejerciendo el poder de policía, por ejemplo, el de permitir la salida de los bomberos tomados para sofocar incendios, controlar la entrada y salida de los barrios, también constituyeron una forma embrionaria de los órganos de poder, con democracia directa abarcando ya a toda una ciudad, pero su insipiencia y en gran medida la ausencia de una verdadera organización, no permitió la unificación de las asambleas barriales entre sí, a través de delegados electos, en un consejo único de la ciudad.
¿Qué consecuencias tuvo?
LC: Constituyó un punto decisivo en la evolución de la lucha de clases, porque puso de manifiesto el estado que había alcanzado la radicalización de la conciencia política de importantes sectores del proletariado, de la pequeña burguesía y el profundo rechazo antidictatorial existente, acumulado en varios años de deterioro económico-social y de opresión política.
El país no volvió a ser el mismo, se incorporaron a la lucha cientos de jóvenes obreros y estudiantes. Estallaron todas las instituciones. Se abrió un profundo debate, que se expresó abiertamente en toda la sociedad. El tema central de la polémica, era como debía seguir la lucha contra la dictadura y para qué.
Las posturas fueron desde la recuperación de la democracia hasta que tipo de “revolución” o de transformaciones que eran necesarias para la Argentina. En el movimiento obrero adoptó una forma más encubierta, más en grupos que en asambleas masivas. Entre los universitarios nadie discutía que era necesario una revolución: lo que se polemizaba era qué tipo de revolución y la forma de concretarla.
Algunas agrupaciones políticas, estrechamente relacionadas con el radicalismo popular (UCRP), o el Partido Comunista (PC) y sectores del nacionalismo popular (Mura, MNR, MOR, AUN, FEN, etc.), se expresaban por la lucha contra la dictadura, por su derrocamiento, por la resistencia a la misma y forma de reemplazarla. Los sectores de la izquierda con raíz marxista, con mayores o menores variantes mantuvieron, en el proceso político posterior al Cordobazo, la consigna “ni golpe, ni elección, revolución”, línea política que preconizaba el derrocamiento de la dictadura o la lucha contra ella, en el camino de reemplazarla por un gobierno o un poder que realizara la revolución de liberación social y nacional en “marcha hacia el socialismo”.
Las expresiones del peronismo en el movimiento estudiantil mantuvieron también lo esencial de su línea de unir a los estudiantes con el llamado “peronismo revolucionario”, expresión real del movimiento obrero, según ellos, en el camino de la liberación nacional y social. Pero, el debate abierto produjo profundas fisuras en la izquierda tradicional o institucional, y determinó la aparición de grupos políticos, entre los cuales se contaban entre otros el Socialismo Revolucionario (SR), Tendencia Comunista (TC), Espartaco, Orientación Socialista, El Obrero, Lucha Socialista, Poder Obrero, Movimiento de Izquierda Revolucionaria, etc.
Todos ellos pasaron a impugnar en forma frontal la estrategia de una Revolución que presuponía la “tarea” de la Liberación Nacional. Ese cuestionamiento abarcó lógicamente la caracterización del Estado, del país como semicolonial, las alianzas de clase, el tipo de poder. Se pronunciaron contra la dictadura, los golpes y las salidas electorales. De la consiga, “ni golpe, ni elección, revolución”, se pasó a la proclamada “ni golpe, ni elección, revolución proletaria”, dando de esa manera una salida real fuera del sistema.
Un sector importante de la izquierda, pasó a definirse por la acción directa. Esto se vio favorecido, no solo por las condiciones nacionales, sino además por un proceso dado en América Latina y el mundo. Producto de la propia experiencia vivida en la Argentina (golpes, elecciones, proscripciones, etc.) y de la percepción de fenómenos como la crisis del parlamentarismo a nivel mundial, de tristes experiencias como la del Partido Comunista Francés con su traición en Mayo del 68 (producto de sus tesis de acceso al poder por vía pacífica y por mayoría parlamentaria), producto de todo eso por un lado y su contrapartida por el otro, por ejemplo el triunfo de la revolución cubana por la acción de las armas y el desarrollo de la lucha vietnamita, resultado de éstas y de múltiples experiencias más, el conjunto de organizaciones políticas a que nos estamos refiriendo llegaron a varias conclusiones de las que destacamos dos, muy relacionadas con su actitud frente a la lucha democrática:
*.-Que la vía de acceso al poder sólo puede ser armada. Había tesis que iban desde la guerra popular hasta “el acto insurreccional” pasando por la guerra prolongada.
*.-La segunda conclusión, es que el parlamento es un engaño a las masas, que no puede constituir una vía de acceso al poder y que por lo tanto no sirve para nada en cuanto a la lucha revolucionaria se refiere.
Por otra parte, algunos grupos que pasaron a proclamar la revolución socialista, definieron a la vez que la única forma de acceso al poder era por la acción revolucionaria del proletariado, como una conclusión irrefutable, sobre todo en un país capitalista y más aún en la Argentina, dejando aclarado que “no cabría pensar siquiera en la posibilidad de otra forma de definir el problema del poder que no sea por la acción de las armas”, y que en base a eso justamente, coincidían también en que el parlamento no puede ser nunca una vía de acceso al poder.
O sea, la situación social y política del país cambiaría radicalmente y la lucha de clases iría in crescendo, con la clase obrera ocupando el centro de la escena, enfrentando a la dictadura, al capital y marcando el camino a distintos sectores populares y al estudiantado universitario.
CHILE
Estudiantes dan ultimátum al Gobierno y convocan a marcha nacional
Karina Palma |Viernes 26 de mayo 2017 16:36 hrs.
Este
viernes la Confech junto a organizaciones sociales y gremiales,
convocaron a una movilización para el primero de junio. Los dirigentes,
enfatizaron en que durante los cuatro años de este Gobierno no se ha
considerado las propuestas de la ciudadanía.
En
el marco de la última cuenta pública de Michelle Bachelet, la
Confederación de Estudiantes de Chile (Confech), junto al Colegio de
Profesores, la Federación de Trabajadores Contratistas Anglo American y
organizaciones sociales, como la Coordinadora No+AFP, agrupaciones
feministas y el Movimiento de Pobladores Ukamau, convocaron a una marcha
nacional para el 1 de junio.
Desde de las organizaciones de trabajadores criticaron la actual reforma laboral, acusando que se ha retrocedido en políticas de seguridad y negociaciones sindicales. Mientras que desde las agrupaciones feministas, advirtieron que ninguna de proyectos de educación que se discuten en el Congreso contienen artículos que promuevan una enseñanza no sexista.
Por su parte, representantes de la Coordinadora No+AFP manifestaron la necesidad de un cambio al sistema de pensiones, acusando a los dirigente de la CUT de representar intereses partidistas y no respaldar las demandas de los trabajadores.
Daniel Andrade, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (Fech) y vocero de la Confech, señaló que deben ser los movimientos sociales los que marquen la agenda de los cambios políticos, en ese sentido agregó que esta movilización será un ultimátum para que el Gobierno considere las demandas de la ciudadanía.
“El Mineduc y la Ministra de Educación, incluyendo a Bachelet, han sido intransigentes, porque no han recibido nuestras propuestas, pero sí lo han hecho con las de la Universidad Católica, para que de un momento a otro se cambiara el AFI (Aporte Fiscal Indirecto), y con Pilar Armanet (rectora de la Universidad de Las Américas) para no cambiar el Crédito con Aval del Estado”.
Erick Muñoz, coordinador nacional de la Cones y estudiante del Instituto Nacional, indicó que esta vez se suman a la marcha no solo por las demandas del movimiento estudiantil, sino también como un acto de denuncia por la represión que ha afectado a los estudiantes secundarios.
En este punto, se refirió principalmente a lo acontecido el día de ayer en su colegio, donde un carro lanza gases de Carabineros derribó el portón del establecimiento en medio de manifestaciones en rechazo a la administración del alcalde de Santiago, Felipe Alessandri, así como al proyecto de desmunicipalización. También mencionó las denuncias de acoso del Liceo 7 de Providencia.
Por su parte, Hugo Gerter, representante del Colegio de Profesores, acusó que ninguno de los puntos propuestos por el Magisterio ha sido considerado en el proyecto de educación pública. “Nosotros adherimos a esta marcha para que se implementen reformas en beneficio de los estudiantes y no de otros grupos políticos y sociales que no tienen mucho que ver con la educación. Hoy no sabemos para quien se está legislando”.
Además, adelantó que realizarán una consulta el próximo 14 de junio, por lo que enfatizó en la necesidad de que los docentes se reúnan el primero de junio para discutir la reforma y participar informados en la consulta programada.
En tanto, Sandra Beltrami, presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad Arcis (FeuArcis), se refirió a la revocación del reconocimiento oficial de la institución, confirmada por el Consejo Nacional de Educación el pasado miércoles, acusando al Ministerio de Educación de cerrar la Universidad por fines políticos.
“Hemos tenido un Ministerios irresponsable, intransigente y deficiente, que puso un administrador provisional sin capacidades técnicas, sino que por tener un cargo político, con la intención de cerrar una universidad emblemática. Nosotros esperamos que ante esta situación los estudiantes quedemos resguardados. No queremos más ofertas del Mineduc para reubicarnos en otras instituciones, lo que buscamos es finalizar nuestros estudios en la Arcis dignamente”.
De acuerdo a lo señalado por los dirigentes, la autorización a la Intendencia fue realizada para marchar desde plaza Italia hasta Echaurren el próximo jueves a las 11 de la mañana.
Los estudiantes agregaron que no descartan iniciar paralizaciones más continuas en los distintos establecimientos, si es que no obtienen una respuesta de las autoridades, adelantando que este punto será discutido en la próxima reunión de la Confech.
Desde de las organizaciones de trabajadores criticaron la actual reforma laboral, acusando que se ha retrocedido en políticas de seguridad y negociaciones sindicales. Mientras que desde las agrupaciones feministas, advirtieron que ninguna de proyectos de educación que se discuten en el Congreso contienen artículos que promuevan una enseñanza no sexista.
Por su parte, representantes de la Coordinadora No+AFP manifestaron la necesidad de un cambio al sistema de pensiones, acusando a los dirigente de la CUT de representar intereses partidistas y no respaldar las demandas de los trabajadores.
Daniel Andrade, presidente de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile (Fech) y vocero de la Confech, señaló que deben ser los movimientos sociales los que marquen la agenda de los cambios políticos, en ese sentido agregó que esta movilización será un ultimátum para que el Gobierno considere las demandas de la ciudadanía.
“El Mineduc y la Ministra de Educación, incluyendo a Bachelet, han sido intransigentes, porque no han recibido nuestras propuestas, pero sí lo han hecho con las de la Universidad Católica, para que de un momento a otro se cambiara el AFI (Aporte Fiscal Indirecto), y con Pilar Armanet (rectora de la Universidad de Las Américas) para no cambiar el Crédito con Aval del Estado”.
Erick Muñoz, coordinador nacional de la Cones y estudiante del Instituto Nacional, indicó que esta vez se suman a la marcha no solo por las demandas del movimiento estudiantil, sino también como un acto de denuncia por la represión que ha afectado a los estudiantes secundarios.
En este punto, se refirió principalmente a lo acontecido el día de ayer en su colegio, donde un carro lanza gases de Carabineros derribó el portón del establecimiento en medio de manifestaciones en rechazo a la administración del alcalde de Santiago, Felipe Alessandri, así como al proyecto de desmunicipalización. También mencionó las denuncias de acoso del Liceo 7 de Providencia.
Por su parte, Hugo Gerter, representante del Colegio de Profesores, acusó que ninguno de los puntos propuestos por el Magisterio ha sido considerado en el proyecto de educación pública. “Nosotros adherimos a esta marcha para que se implementen reformas en beneficio de los estudiantes y no de otros grupos políticos y sociales que no tienen mucho que ver con la educación. Hoy no sabemos para quien se está legislando”.
Además, adelantó que realizarán una consulta el próximo 14 de junio, por lo que enfatizó en la necesidad de que los docentes se reúnan el primero de junio para discutir la reforma y participar informados en la consulta programada.
En tanto, Sandra Beltrami, presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad Arcis (FeuArcis), se refirió a la revocación del reconocimiento oficial de la institución, confirmada por el Consejo Nacional de Educación el pasado miércoles, acusando al Ministerio de Educación de cerrar la Universidad por fines políticos.
“Hemos tenido un Ministerios irresponsable, intransigente y deficiente, que puso un administrador provisional sin capacidades técnicas, sino que por tener un cargo político, con la intención de cerrar una universidad emblemática. Nosotros esperamos que ante esta situación los estudiantes quedemos resguardados. No queremos más ofertas del Mineduc para reubicarnos en otras instituciones, lo que buscamos es finalizar nuestros estudios en la Arcis dignamente”.
De acuerdo a lo señalado por los dirigentes, la autorización a la Intendencia fue realizada para marchar desde plaza Italia hasta Echaurren el próximo jueves a las 11 de la mañana.
Los estudiantes agregaron que no descartan iniciar paralizaciones más continuas en los distintos establecimientos, si es que no obtienen una respuesta de las autoridades, adelantando que este punto será discutido en la próxima reunión de la Confech.
Aucán Huilcaman: “El Estado es el causante del conflicto en La Araucanía”
Diario Uchile |Lunes 29 de mayo 2017 11:54 hrs.
En esa espera, la relación entre el Estado y pueblo mapuche se vuelve más tensa; más cuando las autoridades insisten en aplicar la Ley Antiterrorista para investigar a los responsables.
De todo ello conversó Aucán Huilcaman. El líder mapuche y vocero del Consejo de Todas las Tierras se refirió a la presidencialización del debate. En Diario y Radio Universidad de Chile dijo que “los anuncios de los candidatos a presidente de Chile Vamos son discriminatorias y exageradas”.
En su conversación con el periodista Patricio López se refirió puntualmente a las intervenciones del expresidente Sebastián Piñera, a quien acusó de “hablar deliberadamente” del conflicto sin recordar que en 2013 invitó a un relator de Naciones Unidas a La Araucanía, quien concluyó que en la zona no existe el terrorismo, recomendando medidas que no fueron tomadas ni por ese gobierno, ni por el de Michelle Bachelet: “Me parece grave que no se tome en cuenta ese informe basado en estándares del concepto de terrorismo, y no de la idea deliberada que en Chile y en La Araucanía se usan para referirse a la situación”.
El líder mapuche también criticó a la precandidata del Frente Amplio, Beatriz Sánchez, quien se mostró dispuesta a invocar la Ley Antiterrorista: “Me llama la atención, porque su afirmación es muy prematura. Además, ella no tiene en cuenta cuáles son los estándares internacionales para entender el terrorismo y para calificarlo como tal”, sin moverse de la lógica actual, desconociendo que “el Estado es el único causante de todos y cada uno de los conflictos que existen en la zona”.
Para Aucán Huilcaman estas intervenciones solo demuestran el desconocimiento profundo de los aspirantes a La Moneda sobre el concepto usual del terrorismo: “Yo entiendo que muchos candidatos a presidente usen de forma deliberada el concepto de terrorismo, porque de esa forma ocultan la responsabilidad que tiene el Estado de Chile en la denominada Pacificación de La Araucanía en los crímenes de lesa humanidad y en despojo de la tierra, del territorio y sus recursos, que son el tema de fondo del cual subyacen los hechos y controversias que hay en la región”.
El llamado de los pueblos, explicó el entrevistado, es que se deje de lado la línea represiva con la que se ha actuado en las últimas décadas. “La Ley Antiterrorista tiene por objeto criminalizar la lucha del pueblo mapuche por la restitución de sus derechos legítimos y, a la vez, tratar de anular los procesos de autodeterminación que las comunidades mapuches llevan en el sur”. Así criticó a la actual administración de gobierno por “no haber tenido nunca la intención de cumplir con sus promesas para zona”, mencionando por ejemplo, el proyecto de Ley Araucanía “que se impulsa al margen de la participación de los mapuche”, también la comisión asesora presidencial liderada por el Obispo Vargas: “Nosotros le hemos pedido que no anuncie el proyecto de ley para la zona. En él se contiene un capítulo perverso, porque va a incluir un presupuesto para la violencia en la región, el que es un buen incentivo para los atentados y autoatentados, el que se va a sumar al que ya existe para la violencia rural. Estamos en un contexto de perversidad para La Araucanía”.
Con su planteamiento, el werkén acusó a la autoridad de generar las condiciones para que se realicen atentados para cobrar esos dineros: “El gobierno de La Araucanía dispone de 3 mil 600 millones de pesos para cualquier acto de violencia. Por lo tanto, pueden operar organizaciones ilegales para cometer hechos de cualquier naturaleza, porque hay un presupuesto político disponible”.
Justicia, 40 años después
Por el asesinato del periodista y dirigente del MIR, Augusto Carmona Acevedo, cometido por la CNI el 7 de diciembre de 1977 cuando él tenía 38 años, fueron condenados, 40 años después, algunos de los responsables. Augusto, “el Pelao Carmona”, padre de mi hija Eva María, fue mi compañero en los inolvidables años de la Unidad Popular y luego en la lucha antidictatorial. Eva María y Alejandra, su otra hija, crecieron sin él. Sus seis nietos irán conociendo la verdad histórica, aun cuando ello no borrará el dolor de la ausencia.
Alto
dirigente del MIR en la clandestinidad, Augusto había sido ex jefe de
Prensa de Canal 9 de TV de la U de Chile y redactor de la revista Punto
Final. El crimen fue presentado por la dictadura y los medios como un
enfrentamiento.
La
querella interpuesta en 2003 para impugnar la amnistía impuesta en
1993, era contra Augusto Pinochet y todos los que fueran responsables.
Como familia, habíamos vivido con júbilo la detención de Pinochet en
Londres. Era lo más cercano a la justicia y a la reparación. El hecho
había remecido a la justicia chilena. Pero la impunidad persistió, con
trucos judiciales para dilatar los procesos, entre otras movidas que
permitían el avance de la “impunidad biológica”: El año 2006 muere
Pinochet sin pagar por este ni ningun otro crimen. Fue en el Día
Internacional de los Derechos Humanos, que coincide con mi
cumpleaños...No hubo regalos de la justicia para nosotros en estos años.
Iban
muriendo los criminales mientras los padres de los ejecutados detenidos
desaparecidos partían sin conocer verdad ni justicia, tal como ocurrió
con don Augusto y la señora María Acevedo, los padres del “Pelao”. Sin
embargo viva está la constitución pinochetista, al igual que el modelo
económico implantado entonces y perfeccionado por la Concertación/Nueva
Mayoría. Sólo a través de la lucha social de los de abajo, y los
terremotos irrumpe el verdadero rostro del país por el que se jugaron y
entregaron su vida “Oslo” y miles de compañeros y compañeras. La
corrupción y el envilecimiento de la política, la corrupción y el saqueo
de los bienes comunes se nutren de la impunidad y de la tolerancia a
las prácticas de tortura instaladas en distintos ámbitos de la acción
del Estado, sea con los menores, sea en las comunidades mapuche
allanadas y militarizadas o en las cárceles.
Privilegios de criminales
En
este marco llega finalmente la sentencia de la Corte Suprema: a10 años y
1 día a los ex brigadieres de ejército Miguel Krassnoff y Manuel
Provis Carrasco; al mayor (r) de ejército Enrique Sandoval Arancibia y
al coronel (r) Luis Torres Méndez, así como los ex suboficiales del
ejército José Fuentes Torres y Basclay Zapata. Menciono sus grados
porque en Chile ningún criminal ha sido degradado, pero la sentencia
judicial sólo los individualiza por sus nombres. Los criminales reciben
legalmente las generosas pensiones que se autoasignaron las Fuerzas
Armadas mientras condenaban al resto de los chilenos a jubilar con las
miserables pensiones del sistema de las AFPs. Mientras escribo, me
pregunto además si este año Krassnoff podrá gozar en libertad de su
pensión de $ 2.489.658, ya
que otros criminales con condenas por delitos de lesa humanidad ya han
obtenido la libertad condicional. El monto de la pensión se conoció por la lista entregada por el Consejo para la Transparencia al diario La Tercera recientemente.
En
el procesamiento inicial del ministro en visita Leopoldo Llanos (2005)
la lista de criminales era encabezada por Odlanier Mena, director de la
CNI, que estaba con condicional por otro homicidio y se suicidó (2013)
eludiendo su responsabilidad. Los agentes que declararon en el proceso
por el asesinato de Augusto Carmona aseguraron que desde el reemplazo de
la Dina por la CNI, a mediados de 1977, con Odlanier Mena como
director, todos los operativos de exterminio debían contar con su
autorización previa. La Brigada Roja (sucesora
de la Halcón) fue la encargada de llevar a cabo la ejecución de Augusto
Carmona, operación supervisada por Krassnoff - quien dirigió todos los
operativos contra el MIR - bajo el probable mando operativo de Manuel
Provis. Mena llegó al lugar de los hechos pocas horas después.
Periodista de trinchera
Carmona
tuvo una destacada carrera en el periodismo nacional, donde fue jefe de
prensa de Canal 9 de TV –entonces de la Universidad de Chile- elegido
por los trabajadores que ocuparon la estación en agosto de 1972
intentando detener el avance del golpismo. Tras el golpe militar, él
escogió los riesgos de la lucha de resistencia, aunque su salud era
precaria por haber sufrido una compleja operación al corazón. En
esos primeros años en que sólo existía la prensa adicta a la dictadura,
el “Pelao Carmona”, ahora “Oslo”, comenzó a organizar la red de
periodistas que recolectaba noticias sobre los crímenes de la DINA, y
testimonios sobre la existencia de detenidos desaparecidos, enviándolas
al “Correo de la Resistencia”, en México. Carmona era miembro del comité central del MIR en la clandestinidad. Como
encargado de las relaciones políticas, se reunía con dirigentes de la
izquierda y un sector de la Democracia Cristiana para impulsar acuerdos
tendientes a formar un movimiento amplio de resistencia popular.
Las
exigencias de la vida clandestina eran contradictorias con el carácter
del Pelao, que era comunicativo, amistoso, seductor, dado a las
conversas de café y a escuchar y bailar tangos y boleros. Ese amor por
la vida lo transmitió a sus tareas políticas, que arremetía con
vehemencia, pasión y creatividad, cambiando su aspecto físico y
reduciendo sus salidas para eludir la persecución. La forzosa quietud
le permitió asumir el rol de cuidar a Eva María, nacida poco después del
golpe, a quien prodigaba su ternura y atención, superando el machismo
característico de esa época. Eva tenía 3 años cuando lo asesinaron y no
podía ni siquiera llevar su apellido, pues vivíamos en la
clandestinidad.
El Pelao había
estudiado periodismo y bibliotecología tras egresar del Instituto
Nacional. Fue presidente del centro de alumnos de la Escuela de
Periodismo de la Universidad de Chile y más tarde, presidente del
sindicato de trabajadores del Canal 9, donde fue redactor político del
Noticiero “Nueve Diario”. Como redactor de la revista Punto Final viajó
a Cuba junto a un grupo de periodistas que entrevistaron a Fidel Castro
en La Habana. En agosto de 1967, había reporteado el juicio militar en
Camiri, Bolivia, a Régis Debray y otras personas vinculadas a la
guerrilla del Che.
En
1973 fue, además, jefe de prensa de Radio Nacional, emisora del MIR.
Perteneció a una generación de notables periodistas comprometidos con el
pueblo, como Augusto Olivares, Máximo Gedda y José Carrasco Tapia,
grandes amigos suyos. De la promoción 1957 del Instituto Nacional
arranca su estrecha amistad con el poeta Manuel Silva Acevedo, así como con el pintor Raúl Sotomayor y el académico Grinor Rojo.
Delito de lesa humanidad
La sentencia de la Suprema calificó el asesinato del periodista como un delito de lesa humanidad dado que fue “un ataque sistemático o generalizado en contra de bienes jurídicos como la vida de una parte de la población civil con determinada opción ideológica, con la participación del poder político y la intervención de agentes del Estado” y concedió también, a contrapelo del Consejo de Defensa del Estado, y cumpliendo las obligaciones internacionales de Chile, la reparación civil solicitada para las hijas.
La sentencia de la Suprema calificó el asesinato del periodista como un delito de lesa humanidad dado que fue “un ataque sistemático o generalizado en contra de bienes jurídicos como la vida de una parte de la población civil con determinada opción ideológica, con la participación del poder político y la intervención de agentes del Estado” y concedió también, a contrapelo del Consejo de Defensa del Estado, y cumpliendo las obligaciones internacionales de Chile, la reparación civil solicitada para las hijas.
La
acuciosa investigación iniciada por el ministro Alejandro Solís, hoy
jubilado, fue retomada por el juez Llanos. Los ministros Haroldo Brito,
Milton Juica y Jorge Dahm, respaldaron lo obrado por Llanos, en tanto los ministros Carlos Künsemüller y Lamberto Cisternas,
sostuvieron en un voto de minoría que los criminales debían cumplir
sólo la mitad de la pena impuesta. Siguieron así la teoría de la
“media prescripción” respaldada por el Presidente de la Corte Suprema
Hugo Dolmetsch, similar al “2 x 1” aplicada en Chile en varias
oportunidades y rechazado en Argentina recientemente en masivas
movilizaciones.
La trampa mortal
La trampa mortal
El
crimen ocurrió el 7 de diciembre de 1977, bajo estado de sitio pero los
testimonios de los vecinos hicieron resplandecer la verdad. Ante el
tribunal los testigos –entre los que se cuenta el escritor Reinaldo
Marchant que acudió motu proprio a la Comisión Rettig a contar lo que
vivió ese día - declararon lo mismo que Marchant expuso ante la Rettig ,
refutando la mentira del enfrentamiento. También lo había denunciado yo
ante la Comisión Allana de Naciones Unidas, que visitó Chile un año
después. Me protegió para comparecer el querido Padre José Aldunate.
La
tortura fue la clave para detectar al Pelao. No nos enteramos a tiempo
de la detención de un colega y su equipo de apoyo. Paradojalmente el
Pelao había intentado protegerlo y asilarlo para salvar la red
clandestina de periodistas que éste contactaba. Pero era demasiado tarde
y ellos ya habían caído en manos de la CNI. Ese día, una veintena de
vehículos rodearon desde temprano la manzana en que vivía el Pelao, en
la calle Barcelona, de la comuna de San Miguel. Los agentes allanaron su
domicilio y ocuparon además la casa contigua. Luego ordenaron a los
vecinos recogerse en sus casas y permanecieron horas esperándolo en el
interior del inmueble. Cerca de medianoche, cuando él sacaba sus llaves
para ingresar a la casa, dispararon una ráfaga de subametralladora
acribillándolo por la espalda. Los agentes arrastraron el cuerpo al
interior. Un fiscal militar ordenó más tarde un informe a los peritos de
la Brigada de Homicidios de Investigaciones. El informe estableció que
el cuerpo fue arrastrado y que la pistola que portaba Carmona estaba con
seguro, por lo que no pudo hacer uso de ella para defenderse. Al lugar
llegó más tarde el director de la CNI, Odlanier Mena en su vehículo
marca Volvo, según declaró Juan Arancibia López, su chofer.
Este
fue el inicio de la política de la CNI de aniquilamiento de dirigentes,
remplazando el secuestro por la ejecución in situ, enmascarada como un
enfrentamiento. Un mes después, Germán Cortés, también alto dirigente
del MIR fue asesinado en similares circunstancias.
El cartel de la DINA/CNI
Odlanier
Mena Salinas, sobreseído por muerte de su responsabilidad en este
crimen, había sido condenado en 2008 a seis años por los secuestros de
Oscar Ripoll Codoceo, Manuel Donoso y Julio Valenzuela (Caravana de la
Muerte), pero ya estaba en libertad condicional cuando el ministro
Llanos lo procesó, y se suicidó en su propia casa al saberlo. Ello
coincidió con el traslado de los criminales desde el penal de Cordillera
hacia Punta Peuco.
El condenado Miguel Krassnoff Martchenko
tiene la segunda más alta pensión de los 81 criminales actualmente
condenados en Punta Peuco (sólo inferior a la del ex fiscal Torres). El
se especializó en el exterminio del MIR. Según información
del Programa de Derechos Humanos del Ministerio del Interior, está
condenado a firme por los secuestros de 20 resistentes en la llamada
Operación Colombo (María Teresa Bustillos, Manuel Cortez Joo, Julio
Flores, María Elena y Galo González Inostroza, Sergio Lagos, Ofelio
Lazo, M. Cristina López, Mónica Llanca, Sergio Montecinos, Jorge
D’Orival, Jorge Ortiz, Eugenia Martínez, Anselmo Radrigán, Marcelo
Salinas, Fernando y Claudio Silva, Gerardo Silva, Muriel Dockendorff,
Manuel Villalobos), incluidos en la Lista de los 119. Krassnoff también
cumple condena por los secuestros y desapariciones de Diana Aaron, Luis
Arias, Alvaro Barrios, Cecilia Bojanic, Amelia Bruhn, José Calderón,
Carmen Díaz, Mamerto Espinoza, Iván Monti, Antonio Llidó, Luis Muñoz
Rodríguez, Flavio Oyarzún, Sergio Pérez, José Ramírez, Sergio Riffo,
Herbit Ríos, Jaime Robotham, Luis San Martín, Renato Sepúlveda, Claudio
Thauby y Lumi Videla, casi todos militantes del MIR. Además, fue
condenado por el montaje en Rinconada de Maipú en que la DINA ejecutó a
Alberto Gallardo, Catalina Gallardo, Mónica Pacheco, Luis Ganga, Manuel
Reyes y Pedro Cortés. A ello se agregan las condenas por torturar en
Villa Grimaldi a prisioneros y prisioneras que sobrevivieron. En
ausencia, fue condenado en Francia por la desaparición de los ciudadanos
franceses Alfonso Chanfreau, Jean Yves Claudet, George Klein y Etienne
Pesle. En Chile aun está procesado por muchos otros secuestros.
Krassnoff
no ha entregado información alguna que permita encontrar a los
desaparecidos y esclarecer casos, por el contrario reivindica sus
crímenes. Sin embargo, su abogado reivindica ante la Corte el actuar de su defendido contra el “terrorismo”. La
Corte de Apelaciones acogió parcialmente, el 8 de septiembre de 2016,
un recurso de protección interpuesto por Krassnoff para salir en
libertad, abriendo la puerta a la reconsideración de su solicitud por
parte de la Comisión de Libertad Vigilada. El 5 de octubre del año
pasado, esta misma corte concedió la libertad condicional a Raúl
Iturriaga Neumann, revocando así la repetida negativa de la Comisión de
Libertad Condicional respectiva.
Otro condenado, Manuel Provis,
ex jefe del Batallón de Inteligencia tiene dos condenas más por matar a
sus pares: a 10 años y un día por la muerte del ex químico de la DINA
Eugenio Berríos en Uruguay, y a 4 años por asesinato del coronel
Huber. Su pensión es de $2.442.188. Provis está en Punta Peuco desde
agosto de 2015, tras el suicidio del el ex general director del DINE
Hernán Ramírez, al ser notificado de la sentencia en el caso Berríos.
Enrique Sandoval Arancibia (“Pete el Negro”) ya fue condenado
por el asesinato del dirigente del MIR Germán Cortés, y por el montaje
(caso Las Vizcachas) en que se asesinó a Juan Soto Cerda, Luis Araneda,
Luis Pincheira y Jaime Cuevas (1981). Por desaparecer al menor Carlos
Fariña, no cumplió pena alguna de cárcel. Sigue gozando de una pensión
de $1.653.952.
Basclay Zapata (“El Troglo”) está en Punta Peuco, condenado
a 10 años por desaparición de Manuel Cortes Joo, Julio Flores, los
hermanos Galo y María Elena González Inostroza; Sergio Lagos, M.
Cristina López, Mónica Llanca, Jorge D’Orival, Anselmo Radrigán,
Fernando y Claudio Silva Peralta, Manuel Villalobos (todos del caso
Operación Colombo). Además condenado por los secuestros y
desapariciones de Alvaro Barrios, Carmen Díaz, Elsa Leuthner, Antonio
Llidó, Iván Monti, José Ramírez, Herbit Ríos, Ricardo Troncoso, Lumi
Videla.
Luis Torres Méndez (“Negro Mario”) estaba en libertad condicional, al emitirse la sentencia de la corte Suprema, con una sentencia de primera instancia por el secuestro de Miguel Angel Acuña Castillo, (Operación Colombo). También está procesado por casos de la Operación Cóndor y por secuestros de militantes comunistas en calle Conferencia.
José Fuentes Torres, (“Cara de Santo”) también libre al momento de dictarse la sentencia por el homicidio de Augusto Carmona, está procesado por su participación en la Operación Colombo y cumplió en libertad una “condena” por el secuestro y muerte de Mireya Pérez Vargas.
José Fuentes Torres, (“Cara de Santo”) también libre al momento de dictarse la sentencia por el homicidio de Augusto Carmona, está procesado por su participación en la Operación Colombo y cumplió en libertad una “condena” por el secuestro y muerte de Mireya Pérez Vargas.
La
historia de periodistas revolucionarios como Augusto Carmona Acevedo y
tantos otros compañeros y compañeras de su generación, requiere ser
incorporada a la memoria pero también y sobre todo, a la práctica
social y política de los comunicadores de hoy en este Chile donde
quieren reinar para siempre el duopolio y la farándula. ¡Hagámoslo ya!
Frente Amplio y la vieja política que se resiste al cambio
Enrique Villanueva | Martes 30 de mayo 2017 7:18 hrs.
Es
una realidad que incomoda, que para algunos es un peligro y para una
gran parte de chilenos una esperanza, así emerge, después de 37 años,
una nueva fuerza política, el Frente Amplio, desafiando el sistema
político que Jaime Guzmán y los demás cómplices pasivos de la dictadura,
blindaron con tanto cuidado, con una constitución impuesta. Para
prevenir e impedir que un candidato o un partido, que no está en el
juego político controlado, particularmente de la izquierda o una
coalición de izquierda, tuviera posibilidades de acceder al poder, ni
menos intentar un gobierno o un programa como el de Allende,
independientemente de la votación popular.
Pero la irrupción de esta nueva fuerza política es una situación que se venia venir, como una respuesta al momento critico que vive la política chilena, que da cuenta de la crisis de un orden político y económico cuestionado. Por tanto y como sucede en toda sociedad, lo nuevo deberá enfrentar la resistencia de lo que no quiere morir, que se resiste, intentando alternativas desgastadas, como reposicionar a figuras políticas que representan el orden que agoniza, ( Lagos, Insulza).
Pero lo concreto y mas allá de las apreciaciones que se hagan, el Frente Amplio, ya se constituyó en una alternativa política real, proponiéndole a los chilenos y chilenas una propuesta, que aun sin depurarse del todo, encierra valores y propuestas de una izquierda emergente. Evidenciando desde esta óptica y haciéndola suya, la diferencia que distancia a la mayoría nacional de la vieja élite política concertacionista, cuestionando además, los resultados de la política de la transición post dictadura, que nunca se despego de los lineamientos heredados de la dictadura cívico militar.
En este contexto, se invalidó la alternativa de continuar remendando la constitución de la dictadura o, reeditar un nuevo pacto social para sustentar un modelo económico que ha sido perforado por la desigualdad social, la corrupción y el abuso, que excluye y empobrece a la mayoría de los ciudadanos y ciudadanas. El aporte de esta fuerza política emergente, es que rompe con este estilo de hacer política, reclamando la necesidad de un cambio profundo, en lo económico y en lo político, decididos a superar en primer lugar, los enclaves dictatoriales vigentes, cuya esencia y objetivos son controlar o tutelar la democracia, para así poder iniciar un camino de salida del neoliberalismo.
Con ello y por primera vez en años, la voz del pueblo es interpretada, transparentando y dejando en evidencia lo que el modelo neoliberal ha provocado en Chile. Transformándonos, a los chilenos, en un ejemplo para el mundo, de cómo, un puñado de ricos ambiciosos y políticos corruptos, pueden sumir en la pobreza a todo un país.
Con esto, se abre un proceso de cambios, cuyo eje es rescatar la política para el pueblo, entendiendo que esta, la política, no solo tiene que ver con el gobierno, la nación y los asuntos públicos, ni solo con los asuntos sociales, esta involucra el diálogo, hasta hoy ausente, entre personas libres e iguales, no entre el poder y subordinados, como ha sido hasta ahora en una democracia tutelada. Sino que, planteándose la organización del sistema político de forma distinta a la manera que el neoliberalismo la define, desafiándolo y terminando con la subordinación, de la política y lo social, a la racionalidad económica y del mercado.
La política impuesta por la dictadura y luego administrada por los gobiernos de la Concertación, se apoya en el poder y el orden, en relaciones de mando y sometimiento entre gobernantes y gobernados, porque ello impide la posibilidad de acción de los ciudadanos.
El desafió es grande, vivimos una época de cambios profundos, tecnológicos, comunicacionales, que sin lugar a dudas, aportan a la superación del sistema político que nos impusieron hace casi medio siglo. Lo que será posible, arriesgándose a caminar por caminos nuevos, entregando respuestas desafiantes, que unan, asimilando las experiencias políticas del siglo XX, sin sectarismos, superando categorías con las que hemos comprendido la política y que han quedado atrás.
Implica también romper con el individualismo que hoy atraviesa nuestra sociedad, entendiendo la política, como una necesidad para la vida humana y las relaciones entre las personas.
Por todo esto, la aparición del Frente Amplio debiera ser mirado con optimismo y no con recelos, interpretando la frescura del lenguaje de sus dirigentes y partidarios. Son jóvenes que inician un camino duro, enfrentándose a un sistema que no quiere ceder el poder, jóvenes que tienen el mismo derecho a soñar, luchar y a equivocarse, como sucedió con otras generaciones de luchadores sociales al inicio de largos procesos de aprendizaje.
Hacia rato que no se veía entusiasmo y mística constructiva en la política y eso es digno reconocerlo, mas allá de las desconfianzas por lo nuevo que emerge, con una juventud que trae consigo una oleada de optimismo y que renueva la esperanza en que los cambios son posibles.
El tiempo dirá si hay o no consecuencia entre el discurso y la acción, eso lo exigirá el pueblo que les entrego su confianza, lo importante ahora es que hay una generación de jóvenes que han aportado a romper con la indiferencia que nos tuvo estancados por muchos años, motivando la participación. Es un momento que es para organizarse, sea como independientes o como militantes de partido, pero fundamentalmente como ciudadanos activos.
Es una tarea que se debe lograr, en palabras del Che Guevara, “anteponiendo, frente a la mercantilización de la vida, la solidaridad y la ética de la dignidad colectiva”..
Los cambios que necesitamos hoy son de conciencia y no solamente un fenómeno de producción y crecimiento económico, porque se trata, en definitiva, de una transformación social en la que, sin renunciar a la perspectiva individual de cada persona, se piense y se actúe cada día más de forma colectiva.
Pero la irrupción de esta nueva fuerza política es una situación que se venia venir, como una respuesta al momento critico que vive la política chilena, que da cuenta de la crisis de un orden político y económico cuestionado. Por tanto y como sucede en toda sociedad, lo nuevo deberá enfrentar la resistencia de lo que no quiere morir, que se resiste, intentando alternativas desgastadas, como reposicionar a figuras políticas que representan el orden que agoniza, ( Lagos, Insulza).
Pero lo concreto y mas allá de las apreciaciones que se hagan, el Frente Amplio, ya se constituyó en una alternativa política real, proponiéndole a los chilenos y chilenas una propuesta, que aun sin depurarse del todo, encierra valores y propuestas de una izquierda emergente. Evidenciando desde esta óptica y haciéndola suya, la diferencia que distancia a la mayoría nacional de la vieja élite política concertacionista, cuestionando además, los resultados de la política de la transición post dictadura, que nunca se despego de los lineamientos heredados de la dictadura cívico militar.
En este contexto, se invalidó la alternativa de continuar remendando la constitución de la dictadura o, reeditar un nuevo pacto social para sustentar un modelo económico que ha sido perforado por la desigualdad social, la corrupción y el abuso, que excluye y empobrece a la mayoría de los ciudadanos y ciudadanas. El aporte de esta fuerza política emergente, es que rompe con este estilo de hacer política, reclamando la necesidad de un cambio profundo, en lo económico y en lo político, decididos a superar en primer lugar, los enclaves dictatoriales vigentes, cuya esencia y objetivos son controlar o tutelar la democracia, para así poder iniciar un camino de salida del neoliberalismo.
Con ello y por primera vez en años, la voz del pueblo es interpretada, transparentando y dejando en evidencia lo que el modelo neoliberal ha provocado en Chile. Transformándonos, a los chilenos, en un ejemplo para el mundo, de cómo, un puñado de ricos ambiciosos y políticos corruptos, pueden sumir en la pobreza a todo un país.
Con esto, se abre un proceso de cambios, cuyo eje es rescatar la política para el pueblo, entendiendo que esta, la política, no solo tiene que ver con el gobierno, la nación y los asuntos públicos, ni solo con los asuntos sociales, esta involucra el diálogo, hasta hoy ausente, entre personas libres e iguales, no entre el poder y subordinados, como ha sido hasta ahora en una democracia tutelada. Sino que, planteándose la organización del sistema político de forma distinta a la manera que el neoliberalismo la define, desafiándolo y terminando con la subordinación, de la política y lo social, a la racionalidad económica y del mercado.
La política impuesta por la dictadura y luego administrada por los gobiernos de la Concertación, se apoya en el poder y el orden, en relaciones de mando y sometimiento entre gobernantes y gobernados, porque ello impide la posibilidad de acción de los ciudadanos.
El desafió es grande, vivimos una época de cambios profundos, tecnológicos, comunicacionales, que sin lugar a dudas, aportan a la superación del sistema político que nos impusieron hace casi medio siglo. Lo que será posible, arriesgándose a caminar por caminos nuevos, entregando respuestas desafiantes, que unan, asimilando las experiencias políticas del siglo XX, sin sectarismos, superando categorías con las que hemos comprendido la política y que han quedado atrás.
Implica también romper con el individualismo que hoy atraviesa nuestra sociedad, entendiendo la política, como una necesidad para la vida humana y las relaciones entre las personas.
Por todo esto, la aparición del Frente Amplio debiera ser mirado con optimismo y no con recelos, interpretando la frescura del lenguaje de sus dirigentes y partidarios. Son jóvenes que inician un camino duro, enfrentándose a un sistema que no quiere ceder el poder, jóvenes que tienen el mismo derecho a soñar, luchar y a equivocarse, como sucedió con otras generaciones de luchadores sociales al inicio de largos procesos de aprendizaje.
Hacia rato que no se veía entusiasmo y mística constructiva en la política y eso es digno reconocerlo, mas allá de las desconfianzas por lo nuevo que emerge, con una juventud que trae consigo una oleada de optimismo y que renueva la esperanza en que los cambios son posibles.
El tiempo dirá si hay o no consecuencia entre el discurso y la acción, eso lo exigirá el pueblo que les entrego su confianza, lo importante ahora es que hay una generación de jóvenes que han aportado a romper con la indiferencia que nos tuvo estancados por muchos años, motivando la participación. Es un momento que es para organizarse, sea como independientes o como militantes de partido, pero fundamentalmente como ciudadanos activos.
Es una tarea que se debe lograr, en palabras del Che Guevara, “anteponiendo, frente a la mercantilización de la vida, la solidaridad y la ética de la dignidad colectiva”..
Los cambios que necesitamos hoy son de conciencia y no solamente un fenómeno de producción y crecimiento económico, porque se trata, en definitiva, de una transformación social en la que, sin renunciar a la perspectiva individual de cada persona, se piense y se actúe cada día más de forma colectiva.
El rol del PC y el anclaje social del Frente Amplio
Publicado el 29 Mayo 2017 Escrito por Izquierda Autónoma - EL CLARÌN DE CHILE
Hace tres años, el Partido Comunista decidió ingresar a la Nueva Mayoría, coalición que proponía un programa ciudadano, con el objetivo de impulsar reformas desde el gobierno, a la vez que continuaba en el movimiento social. “Nuestra decisión de entrar fue buena, porque este Gobierno inició un proceso de reformas necesarias para el país”, dice Guillermo Teillier.
Pero, ¿ayudó la estrategia del PC a dar una salida al neoliberalismo? Para Izquierda Autónoma, una de las 12 fuerzas del Frente Amplio, ese objetivo no se cumplió. Giorgio Boccardo recuerda que el comunista Marcos Barraza, ministro de Desarrollo Social, ha aplicado en esa cartera la misma focalización de políticas que utilizaron los dirigentes UDI en el ex Mideplan de Pinochet.
“¿En qué se distingue esta gestión de otras protagonizadas por gobiernos neoliberales? En casi nada. Mantener el gasto social focalizado de un Estado que subsidia la acumulación empresarial sólo atenúa los efectos más nocivos de la concentración de la riqueza”, dice, a la vez que advierte que el Frente Amplio “también corre el riesgo de terminar gestionando la política social de la dictadura. De ahí que resulte fundamental debatir sobre cómo enfrentar a los grupos empresariales forjados en el capitalismo de servicio público criollo”.
Y Víctor Orellana, de Nodo XXI, critica que el PC acuse al Frente Amplio en vez de ver ahí una opción transformadora que no existe en la Nueva Mayoría. “¿Cuánta fuerza tendríamos si estuviéramos juntos? Ese es el polo al que temen los dueños del país, y también la fuerza que nos permitiría, de manera más eficaz, sumar fuerza con los sectores democráticos que todavía existen en la política oficial”, plantea.
En esa línea, el historiador Luis Thielemann explica que “sin masas movilizadas imponiendo su interés al Frente Amplio, este corre el riesgo de ser absorbido por la transición”, y que sin una estrategia de salida del neoliberalismo, como le ocurre al PS y PC, el grupo de fuerzas emergentes “deja de ser una fuerza política de perspectiva histórica, y al igual que el resto de la izquierda del siglo XX, se convierte en una oferta más en el mercado electoral”.
El retroceso de la autonomía de las mujeres
En los próximos días, continuará la discusión legislativa del proyecto de despenalización del aborto en tres causales. En la última votación, la Comisión de Salud del Senado estableció que las niñas menores de 14 años deban contar con la autorización de un Juzgado de Familia para interrumpir su embarazo, y próximamente se votará la idea de si las clínicas pueden obligar a sus médicos a no asistir abortos. En ese contexto, Daniela López, del Frente Feminista de Izquierda Autónoma, acusa que cada etapa que ha enfrentado el proyecto “constituye retrocesos a la posibilidad de avanzar en la autonomía de la mujer y cuyo cuestionamiento ha sido mayoritario desde las organizaciones feministas”.
“Estas ambivalencias ponen en riesgo las mismas iniciativas de leyes, ya que terminan siendo expresión de una transacción a favor de una política patriarcal y anti-derechos”, añade López y recuerda que Beatriz Sánchez, la precandidata del partido, se comprometió a avanzar en el derecho a decidir de las mujeres sobre sus vidas y el aborto legal.
El Colegio Médico se mueve a la izquierda
En un resultado histórico, la lista de izquierda “Oxigenando al Colmed” se impuso con el 53% de los votos en las elecciones del Colegio Médico, colocando a Izkia Siches en la presidencia, siendo la primera mujer que ocupará el cargo. La lista también era integrada por miembros de Izquierda Autónoma, entre ellos los dirigentes Natalia Henríquez y Camilo Bass, quienes fueron la segunda y tercera mayoría en el Regional Santiago, respectivamente, y Gonzalo Rubio, que fue electo consejero con la primera mayoría nacional.
URUGUAY
A 38 años de que la CIDH nos recibió y escuchó
“Nunca puede quedar la silla vacía de Uruguay”. Así se instruye
a los jóvenes diplomáticos que cubren organismos, foros multilaterales o
conferencias. Sea donde sea, el lugar de Uruguay debe estar siempre
ocupado.
Setiembre de 1979. Un boliche en Paraná y Tucumán, la esquina donde estaba emplazado el local de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos argentina. Están Violeta Malugani (madre de Miguel Ángel Moreno, desaparecido), Luz Ibarburu (madre de Juan Pablo Recagno, desaparecido), María Esther Gatti (madre de María Emilia Islas, desaparecida, abuela de Mariana Zaffaroni, recuperada), Irma Hernández de Trías (madre de Cecilia Trías y suegra de Washington Cram y de Carlos Rodríguez Mercader, desaparecidos), Milka González (madre de Ruben Prieto, desaparecido). Tomamos un café y conversamos.
Alberto Correa y yo, con el apoyo de Emilio F Mignone y Augusto Conte, que nos cedían un lugar en el Centro de Estudios Legales y Sociales, y con la solidaridad de Graciela Fernández Meijide, Alfredo Bravo y Octavio Carsen, preparábamos los informes que se iban a presentar. Hacía tiempo que conversábamos con esas madres para auspiciar la presentación de una delegación de familiares uruguayos. Era la primera vez que se veían todos los familiares. Así las cosas, era una buena oportunidad para asociarse. Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos: en ese bar porteño, esas madres, usando servilletas como actas, fundaban el grupo.
La recién conformada Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en arriesgada misión, decidía hacer una visita para un informe in loco (es decir, en el lugar) en Argentina. Luego de tanta denuncias, de habeas corpus y búsquedas, la CIDH nos recibiría.
En el gobierno estaban Jorge Videla, Emilio Massera y Orlando Agosti. Larguísimas colas de varias cuadras formadas por mujeres de pañuelos blancos se daban cita para testimoniar. Insólitamente, la dictadura argentina no sólo admitía la visita, sino que comparecía y permitía la visita de los comisionados a varios lugares. Todo esto ocurría en un clima hostil, de presencia de agentes de inteligencia en todos lados, de provocaciones.
A la improvisada delegación uruguaya se le concedieron dos entrevistas. Los familiares pudieron dar testimonio, se sintieron escuchados. Fueron conmovedoras las palabras del padre de Sara Méndez (secuestrada y trasladada clandestinamente, en ese momento todavía presa en Uruguay), quien denunció que en la calle Juana Azurduy, domicilio en el que habían sido secuestrados su hija y su nieto desaparecido, Simón, todavía funcionaba un centro de detención. Su testimonio motivó una reacción indignada del comisionado profesor Tom Farer (Estados Unidos), el más apasionado y radical: quería salir en ese mismo momento hacia ese lugar.
Fue recibida especialmente la abuela Angélica, que venía de Chile, donde había reencontrado a sus nietos Anatole y Victoria Julien; un testimonio contundente de la coordinación represiva en todo el Cono Sur. Era un tema difícil de denunciar en aquel momento.
No conozco las razones de la ausencia de representante del Estado uruguayo en el 162º período extraordinario de sesiones de la CIDH, que se hizo acá nomás, en Buenos Aires. No entiendo cómo siquiera se instruyó a la Embajada de Uruguay en Argentina. Una audiencia de la CIDH, como bien dijo el presidente del organismo, Francisco Eguiguren (luego de expresar su sorpresa y dolor por la ausencia uruguaya), es un espacio de diálogo, de escucha, de intercambio.
La silla vacía del Estado uruguayo es un gesto político que parece tener congruencia con una institucionalidad y con diseños impregnados de impunidad, como bien expresó el doctor Pablo Chargoñia, en nombre del Observatorio Luz Ibarburu. Impunidad, responsabilidad del Estado, ayer y hoy. Omisión.
Es una falta de respeto a los comisionados y a los representantes de la sociedad civil que fueron para ser escuchados, para aportar ideas. No es un juicio (de los que no abundan acá). Se trata de un diálogo.
No voy a reiterar aquí los principios que han guiado a Uruguay en todo el período de gobiernos frenteamplistas, que recogen la mejor tradición diplomática del país. Tampoco abundaré en las virtudes y reconocimientos que se han cosechado en este plano tanto en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como en la Organización de Estados Americanos (OEA). Somos un país creíble.
El brillante desempeño del embajador Elbio Rosselli, nada menos que en el Consejo de Seguridad de la ONU, se debe, entre otras cosas, no a las dimensiones de Uruguay, sino a la credibilidad, seriedad, capacidad de articulación y búsqueda de consensos, un arte difícil pero posible. La última decisión de Uruguay de integrar un grupo de países que abran un espacio de diálogo en Venezuela, a pesar de las ofensas, es también un gran mérito.
Fui embajador ante la OEA, y desde la Asamblea General de 2012 en San Salvador, participé en el complejo proceso de Fortalecimiento del Sistema Interamericano de Derechos Humanos. Supuso un debate fuerte, difícil, con varios actores. Mantuve siempre un diálogo abierto y transparente con cada uno de los entonces comisionados. Con países amigos, en el acuerdo y en el disenso. Con todo el amplio marco de organizaciones de la sociedad civil.
Ese proceso culminó y se saldó en la Asamblea General Extraordinaria del 26 de marzo de 2013. Tuve el honor de ser jefe de delegación de Uruguay y de exponer nuestra opinión. Fue un planteo de principios, en polémica con varios actores, entre ellos con el entonces canciller ecuatoriano Ricardo Patiño. Expuse no sólo la posición del Estado, sino mi profunda convicción acerca del significado de la plataforma de derechos humanos. De la coherencia política, humanitaria y diplomática que hay que tener no sólo respecto de los compromisos, sino de una ética que no admite el doble rasero. Que se coloca en el punto de vista de las víctimas. Que cuando el Estado es señalado o acusado no puede hacerse el desentendido y molesto, sino que debe liderar la indignación, investigar y desarmar todo tipo de violaciones que se estén cometiendo.
Nada más alejado de ello que no concurrir a una audiencia de la CIDH, dejando la silla vacía. Es un vaciamiento del alma. No imagino cuáles pueden ser los argumentos para faltar a una cita de tal magnitud. Ahora, la callada por respuesta es más necia e intolerante que cualquier argumento sobre este incalificable suceso.
No se puede hacer política callando y aceptando decisiones erradas que toman los jerarcas. Hay que armarse de coraje y poder decir, con el mayor de los respetos: “Señor presidente, señor ministro, compañeros, en esto se equivocaron feo”.
Setiembre de 1979. Un boliche en Paraná y Tucumán, la esquina donde estaba emplazado el local de la Asamblea Permanente de Derechos Humanos argentina. Están Violeta Malugani (madre de Miguel Ángel Moreno, desaparecido), Luz Ibarburu (madre de Juan Pablo Recagno, desaparecido), María Esther Gatti (madre de María Emilia Islas, desaparecida, abuela de Mariana Zaffaroni, recuperada), Irma Hernández de Trías (madre de Cecilia Trías y suegra de Washington Cram y de Carlos Rodríguez Mercader, desaparecidos), Milka González (madre de Ruben Prieto, desaparecido). Tomamos un café y conversamos.
Alberto Correa y yo, con el apoyo de Emilio F Mignone y Augusto Conte, que nos cedían un lugar en el Centro de Estudios Legales y Sociales, y con la solidaridad de Graciela Fernández Meijide, Alfredo Bravo y Octavio Carsen, preparábamos los informes que se iban a presentar. Hacía tiempo que conversábamos con esas madres para auspiciar la presentación de una delegación de familiares uruguayos. Era la primera vez que se veían todos los familiares. Así las cosas, era una buena oportunidad para asociarse. Madres y Familiares de Uruguayos Detenidos Desaparecidos: en ese bar porteño, esas madres, usando servilletas como actas, fundaban el grupo.
La recién conformada Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), en arriesgada misión, decidía hacer una visita para un informe in loco (es decir, en el lugar) en Argentina. Luego de tanta denuncias, de habeas corpus y búsquedas, la CIDH nos recibiría.
En el gobierno estaban Jorge Videla, Emilio Massera y Orlando Agosti. Larguísimas colas de varias cuadras formadas por mujeres de pañuelos blancos se daban cita para testimoniar. Insólitamente, la dictadura argentina no sólo admitía la visita, sino que comparecía y permitía la visita de los comisionados a varios lugares. Todo esto ocurría en un clima hostil, de presencia de agentes de inteligencia en todos lados, de provocaciones.
A la improvisada delegación uruguaya se le concedieron dos entrevistas. Los familiares pudieron dar testimonio, se sintieron escuchados. Fueron conmovedoras las palabras del padre de Sara Méndez (secuestrada y trasladada clandestinamente, en ese momento todavía presa en Uruguay), quien denunció que en la calle Juana Azurduy, domicilio en el que habían sido secuestrados su hija y su nieto desaparecido, Simón, todavía funcionaba un centro de detención. Su testimonio motivó una reacción indignada del comisionado profesor Tom Farer (Estados Unidos), el más apasionado y radical: quería salir en ese mismo momento hacia ese lugar.
Fue recibida especialmente la abuela Angélica, que venía de Chile, donde había reencontrado a sus nietos Anatole y Victoria Julien; un testimonio contundente de la coordinación represiva en todo el Cono Sur. Era un tema difícil de denunciar en aquel momento.
No conozco las razones de la ausencia de representante del Estado uruguayo en el 162º período extraordinario de sesiones de la CIDH, que se hizo acá nomás, en Buenos Aires. No entiendo cómo siquiera se instruyó a la Embajada de Uruguay en Argentina. Una audiencia de la CIDH, como bien dijo el presidente del organismo, Francisco Eguiguren (luego de expresar su sorpresa y dolor por la ausencia uruguaya), es un espacio de diálogo, de escucha, de intercambio.
La silla vacía del Estado uruguayo es un gesto político que parece tener congruencia con una institucionalidad y con diseños impregnados de impunidad, como bien expresó el doctor Pablo Chargoñia, en nombre del Observatorio Luz Ibarburu. Impunidad, responsabilidad del Estado, ayer y hoy. Omisión.
Es una falta de respeto a los comisionados y a los representantes de la sociedad civil que fueron para ser escuchados, para aportar ideas. No es un juicio (de los que no abundan acá). Se trata de un diálogo.
No voy a reiterar aquí los principios que han guiado a Uruguay en todo el período de gobiernos frenteamplistas, que recogen la mejor tradición diplomática del país. Tampoco abundaré en las virtudes y reconocimientos que se han cosechado en este plano tanto en la Organización de las Naciones Unidas (ONU) como en la Organización de Estados Americanos (OEA). Somos un país creíble.
El brillante desempeño del embajador Elbio Rosselli, nada menos que en el Consejo de Seguridad de la ONU, se debe, entre otras cosas, no a las dimensiones de Uruguay, sino a la credibilidad, seriedad, capacidad de articulación y búsqueda de consensos, un arte difícil pero posible. La última decisión de Uruguay de integrar un grupo de países que abran un espacio de diálogo en Venezuela, a pesar de las ofensas, es también un gran mérito.
Fui embajador ante la OEA, y desde la Asamblea General de 2012 en San Salvador, participé en el complejo proceso de Fortalecimiento del Sistema Interamericano de Derechos Humanos. Supuso un debate fuerte, difícil, con varios actores. Mantuve siempre un diálogo abierto y transparente con cada uno de los entonces comisionados. Con países amigos, en el acuerdo y en el disenso. Con todo el amplio marco de organizaciones de la sociedad civil.
Ese proceso culminó y se saldó en la Asamblea General Extraordinaria del 26 de marzo de 2013. Tuve el honor de ser jefe de delegación de Uruguay y de exponer nuestra opinión. Fue un planteo de principios, en polémica con varios actores, entre ellos con el entonces canciller ecuatoriano Ricardo Patiño. Expuse no sólo la posición del Estado, sino mi profunda convicción acerca del significado de la plataforma de derechos humanos. De la coherencia política, humanitaria y diplomática que hay que tener no sólo respecto de los compromisos, sino de una ética que no admite el doble rasero. Que se coloca en el punto de vista de las víctimas. Que cuando el Estado es señalado o acusado no puede hacerse el desentendido y molesto, sino que debe liderar la indignación, investigar y desarmar todo tipo de violaciones que se estén cometiendo.
Nada más alejado de ello que no concurrir a una audiencia de la CIDH, dejando la silla vacía. Es un vaciamiento del alma. No imagino cuáles pueden ser los argumentos para faltar a una cita de tal magnitud. Ahora, la callada por respuesta es más necia e intolerante que cualquier argumento sobre este incalificable suceso.
No se puede hacer política callando y aceptando decisiones erradas que toman los jerarcas. Hay que armarse de coraje y poder decir, con el mayor de los respetos: “Señor presidente, señor ministro, compañeros, en esto se equivocaron feo”.
MARCAR EN ZONA
Este martes hay paro de docentes de Secundaria en siete departamentos Comienza el ciclo de paros de regionales convocado por Fenapes que seguirá miércoles y jueves en reclamo de más presupuesto.
30
May
Este martes se cumplirá el primero de los paros regionales de docentes de Secundaria decidido por la Federación Nacional de Profesores de la Enseñanza Secundaria (Fenapes) en el marco de los reclamos del sindicato por mayor presupuesto para la educación en la próxima Rendición de Cuentas.
Tal como había definido Fenapes, el paro de este martes afectará a los docentes agremiados de Montevideo, Canelones, Rocha, Maldonado, Treinta y Tres, Lavalleja y Durazno.
En el marco del paro, la dirigencia de Fenapes brindará una conferencia de prensa en la que planteará su postura con respecto al próximo presupuesto. La plataforma de los docentes incluye el reclamo de un salario “igual a media canasta básica al ingreso”, además del “pago total de las horas trabajadas” de docencia indirecta.
La plataforma reivindicativa se basa en el 6% del PBI para la educación pero también incluye el rechazo a los proyectos de Participación Público Privada para la construcción de edificios, tanto en la ANEP como en el Hospital de Clínicas. A su vez, los docentes reclaman la construcción y mantenimiento de centros educativos y la aplicación de “políticas educativas integrales”.
El sábado, el secretario general de Fenapes José Olivera dijo a Radio Montecarlo que el gobierno “está tratando de dilatar los procesos de negociación”, para que cuando llegue la fecha del vencimiento del plazo para entregar la Rendición al Parlamento, “el Ejecutivo pueda imponer y no negociar”.
“Estamos ante una situación que se agrava día a día”, apuntó en la víspera del ciclo de medidas zonales que continuará el miércoles 31 de mayo con paro de 24 horas en Artigas, Salto, Paysandú, Tacuarembó, Rivera y Cerro Largo y finalizará el jueves 1° con paro en San José, Flores, Florida, Colonia, Soriano y Río Negro.
Montevideo Portal
Arrancan paros en los liceos de Montevideo
El gremio de trabajadores que agrupa a los profesores de secundaria, la Federación Nacional de Profesores de Enseñanza Secundaria (Fenapes), inicia hoy una serie de paros de 24 horas. La diferencia con el sindicato de maestros, es que los docentes de secundaria los realizarán de forma regional.
30
May
Hoy pararán todos los liceos de Montevideo, Canelones,
Maldonado, Rocha, Lavalleja, Treinta y Tres y Durazno. La medida de
lucha continuará el miércoles 31 en los departamentos de Artigas, Salto,
Paysandú, Tacuarembó, Rivera y Cerro Largo. Los demás departamentos
—San José, Flores, Florida, Colonia, Soriano y Río Negro— pararán el
jueves 1° de junio.
En el caso de los docentes de primaria, agremiados en
la Federación Uruguaya de Magisterio (FUM), resolvieron hacer dos paros
generales de 24 horas para el 14 y 21 de junio.
El secretario general de Fenapes José Olivera, explicó a
El País que la decisión sindical es la forma de reclamarle al gobierno
que cumpla con su promesa electoral de alcanzar el 6% del PIB para la
educación.
El viernes 26 los representantes sindicales se
reunieron con las autoridades del gobierno para recibir las propuestas
salariales. Sin embargo el ministro de Trabajo, Ernesto Murro, le
informó que deberán esperar el retorno del presidente Vázquez para
conocer la propuesta.
Ante esto los sindicalistas resolvieron tomar las medidas de protesta.
http://www.elpais.com.uy/inforEducación: sindicatos en pie de guerra por negociación salarial
29
May
Maestros definieron dos paros para junio; profesores profundizarán medidas
Los sindicatos de la educación
pusieron el pie en el acelerador y en 48 horas apuraron los detalles
para desplegar cuanto antes una batería de medidas en reclamo de mayor
presupuesto para la educación y de un ámbito real de negociación con el
Poder Ejecutivo.
La falta de una propuesta salarial por parte del gobierno en la
reunión del Consejo Superior Tripartito, desarrollada el viernes 26,
inquietó a los delegados sindicales, ya que les recordó el escenario de
2015, por entender que el Poder Ejecutivo también tardó entonces en
abrir la negociación.
A prácticamente un mes de que el proyecto de Rendición de Cuentas
ingrese en el Parlamento, el 30 de junio, los sindicatos concurrieron al
encuentro con la firme esperanza de que el Ministerio de Economía
planteara, al menos, las líneas principales de la propuesta salarial
para 2018.
Sin embargo, esto no sucedió. Muy por el contrario, los
representantes del Poder Ejecutivo manifestaron que la propuesta se iba a
presentar luego de que el presidente Tabaré Vázquez volviera de la gira
presidencial, que inició el domingo 28 por Austria, Egipto y Suiza. La
fecha de regreso será el miércoles 7 de junio.
Las respuestas sindicales no tardaron en llegar. El sábado 27 de
mañana, la Federación Uruguaya de Magisterio (FUM) resolvió la
realización de dos paros generales para junio. Estos fueron fijados para
el miércoles 14 y miércoles 21.
Elbia Pereira, secretaria general de la FUM, dijo a El Observador
que el sindicato entiende que comenzar a conversar el convenio salarial a
mediados de junio no dará margen para terminar de negociar antes del 30
de junio. “Que quede claro que no es una situación generada por los
sindicatos. Nosotros estamos apostando al diálogo”, dijo Pereira.
Los paros serán nacionales de 24 horas y los maestros trasladarán
la propuesta a la Coordinadora de Sindicatos de la Enseñanza (CESU), que
nuclea a todos los sindicatos de la educación, para que se adhieran a
la medida. El paro del 21 de junio se realizará en el marco del paro
parcial convocado por el PIT – CNT en el marco de la discusión del
Presupuesto.
Profesores
Los paros nacionales decretados por los maestros se suman a los
paros zonales que hace dos semanas atrás resolvió la Federación Nacional
de Profesores de Enseñanza Secundaria (Fenapes).
Estos serán de 24 horas y se realizarán entre el martes 30 de mayo y el jueves 1° de junio.
El sindicato de profesores había resuelto esta medida ante la
demora del Poder Ejecutivo en convocar a un ámbito de negociación. Sin
embargo, la actitud del gobierno el viernes llevó al comité ejecutivo de
Fenapes a tomar la resolución política de profundizar el conflicto y definir nuevas medidas.
El secretario general de Fenapes, José Olivera, dijo a El
Observador que el 2 de junio la asamblea general de delegados del
sindicato definirá qué tipo de acciones se suman al plan de
movilización. De hecho, no descartó que el sindicato se sume a los paros
aprobados por la FUM.
“Este escenario nos recuerda a la situación de 2015, donde el Poder
Ejecutivo tardó en presentar una propuesta y cuando lo hizo, realizó
más un planteo de imposición que de búsqueda de acuerdos”, afirmó el
dirigente sindical. Agregó que si recién a mediados de junio se presenta
la propuesta salarial, como planteó el viernes el gobierno, se van a
tener tres o cuatro días para analizar y negociar. “Para Fenapes aquí
hay una estrategia definida de no negociar”, subrayó.
Por su parte, la Asociación de Funcionarios de UTU analizará el martes el escenario y también definirá medidas.
El texto caracteriza 11 ecorregiones del país, denominadas a partir
del relieve y las principales actividades económicas productivas. Los
autores reseñan que “el espacio agrario uruguayo se ha tornado
progresivamente especializado, con un incremento de la frontera agrícola
en torno a la tríada soja, arroz y forestación”. Señalan que se han
detectado “profundas transformaciones territoriales en el uso de la
tierra, en la matriz productiva y en la tecnología incorporada por
capitales transnacionales que han comenzado a desarrollar una
agricultura de escala y precisión que incluye el uso de agroquímicos y
transgénicos”. Como ejemplo, indican que en el rubro forestal tres
transnacionales manejan 64% del millón de hectáreas de pinos y
eucaliptos que hay en el país. Entre los impactos, los autores mencionan
el desplazamiento de productores familiares y el aumento de la
contaminación, constatable en la erosión de suelos; la pérdida de
diversidad biológica y de ecosistemas como las praderas y monte nativo;
la degradación de humedales y la pérdida de hábitat de fauna autóctona.
Identifican que, además del área sembrada, creció el rendimiento
productivo del arroz, el maíz y la soja. También la cantidad de
agroquímicos: según datos del Ministerio de Ganadería, Agricultura y
Pesca, en 2005 Uruguay consumía poco más de 50 millones de dólares al
año de agroquímicos, y en 2014 la cifra tocaba los 250 millones de
dólares. Para dar una idea del volumen, cuentan los 48 millones de
plaguicidas usados durante 2013 y lo dividen en los 3,2 millones de
habitantes, lo que equivale a 14,7 kilos (o litros) de plaguicidas por
persona al año.Nuevo libro de geografía advierte sobre riesgos de la expansión del agronegocio en Uruguay, tras constatar impactos negativos
Para conmemorar el Día del Libro, la presidencia de la Asamblea General del Poder Legislativo presentó el jueves 25 el libro Uruguay. Una visión desde la geografía,
editado en 2016 por Banda Oriental. El anterior tratado de geografía se
había publicado en 1950; el nuevo texto actualiza la información y
ofrece una mirada amplia de la disciplina: además de considerar los
aspectos físicos del territorio, profundiza en los económicos, sociales y
ambientales, que también son parte de “los paisajes geográficos”. Pero
el libro no se queda sólo en lo descriptivo, sino que identifica
desafíos e invita a la reflexión.
Los autores son cuatro geógrafos, docentes e investigadores en el Laboratorio de Desarrollo Sustentable y Gestión Ambiental del Territorio de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República (Udelar): Marcel Achkar, coordinador del instituto, Ismael Díaz, Ana Domínguez y Fernando Pesce (coordinador nacional del Departamento de Geografía del Consejo de Formación en Educación). El texto está destinado al público general, pero es también una herramienta para maestros y profesores. Eso explica por qué entre quienes asistieron a la presentación del libro predominaba el plantel docente, reforzado por el rector de la Udelar, Roberto Markarian; el decano de Ciencias, Juan Cristina; el presidente del Consejo Directivo Central de la Administración Nacional de Educación Pública, Wilson Netto, y la directora general de Secundaria, Celsa Puente. Participaron también, en calidad de oradores, el presidente de la Asamblea General y vicepresidente de la República, Raúl Sendic, y la senadora Ivonne Passada.
El libro tiene casi 400 páginas, a todo color y con muchas fotografías, mapas y gráficas; incorpora datos de imágenes satelitales, del Censo General Agropecuario de 2011, encuestas agrícolas y de los censos de población, hogares y viviendas de 2011 y define conceptos básicos.
En la presentación, Sendic agradeció “la generosidad de los autores” por “no quedarse con ese conocimiento”. El vicepresidente comentó que el libro le ha servido para mostrarles el país a los visitantes del exterior, y mencionó que recibió a una delegación “de alto nivel de los Emiratos Árabes”, cuyos integrantes quedaron “fascinados con las fotografías y los mapas”. En relación a ellos, comentó que “estábamos tratando de convencerlos sobre algunas inversiones que se tienen que hacer en determinados lugares”, y que el libro le permitió “mostrarles lugares del Uruguay donde necesitamos impulsar desarrollo, trabajo”. “Esta visión integrada es una tremenda herramienta para poder conocer lo que en realidad somos”, dijo Sendic. Agregó que el texto sirve para considerar el compromiso ambiental y para pensar cómo encarar “los desafíos económicos, cómo tenemos que cuidar determinados procesos, inversiones, decisiones que se tienen que tomar que efectivamente puedan generar cambios importantes, estrategias de ocupación territorial que queremos desarrollar para frenar la concentración de la población y el vaciamiento de determinadas zonas del país”, y otros problemas, como el envejecimiento de la población.
Ritmos productivos
“Era necesario poner a disposición un nuevo tratado de geografía del Uruguay, en el que se presentaran las transformaciones territoriales a escala urbana y rural que se fueron procesando en el país a lo largo de los últimos años y consolidando en la última década”, explicó Pesce en la presentación. El libro está dividido en 12 capítulos en los que se abordan los aspectos físicos, el agua, los ecosistemas, las ecorregiones y el Uruguay dentro de la Cuenca del Plata, y se analiza la población, la actividad pecuaria, la agricultura, la diversidad productiva, el sector servicios, las áreas protegidas y la gestión de los bienes de la naturaleza.
Entre los aspectos demográficos, los autores señalan el lento crecimiento de la población, el descenso de la población rural en los últimos 50 años, el vaciamiento en el centro del país y el mayor crecimiento en los departamentos periféricos (país “cáscara”), en las ciudades y en especial del área metropolitana.
El texto caracteriza 11 ecorregiones del país, denominadas a partir del relieve y las principales actividades económicas productivas. Los autores reseñan que “el espacio agrario uruguayo se ha tornado progresivamente especializado, con un incremento de la frontera agrícola en torno a la tríada soja, arroz y forestación”. Señalan que se han detectado “profundas transformaciones territoriales en el uso de la tierra, en la matriz productiva y en la tecnología incorporada por capitales transnacionales que han comenzado a desarrollar una agricultura de escala y precisión que incluye el uso de agroquímicos y transgénicos”. Como ejemplo, indican que en el rubro forestal tres transnacionales manejan 64% del millón de hectáreas de pinos y eucaliptos que hay en el país. Entre los impactos, los autores mencionan el desplazamiento de productores familiares y el aumento de la contaminación, constatable en la erosión de suelos; la pérdida de diversidad biológica y de ecosistemas como las praderas y monte nativo; la degradación de humedales y la pérdida de hábitat de fauna autóctona. Identifican que, además del área sembrada, creció el rendimiento productivo del arroz, el maíz y la soja. También la cantidad de agroquímicos: según datos del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, en 2005 Uruguay consumía poco más de 50 millones de dólares al año de agroquímicos, y en 2014 la cifra tocaba los 250 millones de dólares. Para dar una idea del volumen, cuentan los 48 millones de plaguicidas usados durante 2013 y lo dividen en los 3,2 millones de habitantes, lo que equivale a 14,7 kilos (o litros) de plaguicidas por persona al año.
Los autores son cuatro geógrafos, docentes e investigadores en el Laboratorio de Desarrollo Sustentable y Gestión Ambiental del Territorio de la Facultad de Ciencias de la Universidad de la República (Udelar): Marcel Achkar, coordinador del instituto, Ismael Díaz, Ana Domínguez y Fernando Pesce (coordinador nacional del Departamento de Geografía del Consejo de Formación en Educación). El texto está destinado al público general, pero es también una herramienta para maestros y profesores. Eso explica por qué entre quienes asistieron a la presentación del libro predominaba el plantel docente, reforzado por el rector de la Udelar, Roberto Markarian; el decano de Ciencias, Juan Cristina; el presidente del Consejo Directivo Central de la Administración Nacional de Educación Pública, Wilson Netto, y la directora general de Secundaria, Celsa Puente. Participaron también, en calidad de oradores, el presidente de la Asamblea General y vicepresidente de la República, Raúl Sendic, y la senadora Ivonne Passada.
El libro tiene casi 400 páginas, a todo color y con muchas fotografías, mapas y gráficas; incorpora datos de imágenes satelitales, del Censo General Agropecuario de 2011, encuestas agrícolas y de los censos de población, hogares y viviendas de 2011 y define conceptos básicos.
En la presentación, Sendic agradeció “la generosidad de los autores” por “no quedarse con ese conocimiento”. El vicepresidente comentó que el libro le ha servido para mostrarles el país a los visitantes del exterior, y mencionó que recibió a una delegación “de alto nivel de los Emiratos Árabes”, cuyos integrantes quedaron “fascinados con las fotografías y los mapas”. En relación a ellos, comentó que “estábamos tratando de convencerlos sobre algunas inversiones que se tienen que hacer en determinados lugares”, y que el libro le permitió “mostrarles lugares del Uruguay donde necesitamos impulsar desarrollo, trabajo”. “Esta visión integrada es una tremenda herramienta para poder conocer lo que en realidad somos”, dijo Sendic. Agregó que el texto sirve para considerar el compromiso ambiental y para pensar cómo encarar “los desafíos económicos, cómo tenemos que cuidar determinados procesos, inversiones, decisiones que se tienen que tomar que efectivamente puedan generar cambios importantes, estrategias de ocupación territorial que queremos desarrollar para frenar la concentración de la población y el vaciamiento de determinadas zonas del país”, y otros problemas, como el envejecimiento de la población.
Ritmos productivos
“Era necesario poner a disposición un nuevo tratado de geografía del Uruguay, en el que se presentaran las transformaciones territoriales a escala urbana y rural que se fueron procesando en el país a lo largo de los últimos años y consolidando en la última década”, explicó Pesce en la presentación. El libro está dividido en 12 capítulos en los que se abordan los aspectos físicos, el agua, los ecosistemas, las ecorregiones y el Uruguay dentro de la Cuenca del Plata, y se analiza la población, la actividad pecuaria, la agricultura, la diversidad productiva, el sector servicios, las áreas protegidas y la gestión de los bienes de la naturaleza.
Entre los aspectos demográficos, los autores señalan el lento crecimiento de la población, el descenso de la población rural en los últimos 50 años, el vaciamiento en el centro del país y el mayor crecimiento en los departamentos periféricos (país “cáscara”), en las ciudades y en especial del área metropolitana.
El texto caracteriza 11 ecorregiones del país, denominadas a partir del relieve y las principales actividades económicas productivas. Los autores reseñan que “el espacio agrario uruguayo se ha tornado progresivamente especializado, con un incremento de la frontera agrícola en torno a la tríada soja, arroz y forestación”. Señalan que se han detectado “profundas transformaciones territoriales en el uso de la tierra, en la matriz productiva y en la tecnología incorporada por capitales transnacionales que han comenzado a desarrollar una agricultura de escala y precisión que incluye el uso de agroquímicos y transgénicos”. Como ejemplo, indican que en el rubro forestal tres transnacionales manejan 64% del millón de hectáreas de pinos y eucaliptos que hay en el país. Entre los impactos, los autores mencionan el desplazamiento de productores familiares y el aumento de la contaminación, constatable en la erosión de suelos; la pérdida de diversidad biológica y de ecosistemas como las praderas y monte nativo; la degradación de humedales y la pérdida de hábitat de fauna autóctona. Identifican que, además del área sembrada, creció el rendimiento productivo del arroz, el maíz y la soja. También la cantidad de agroquímicos: según datos del Ministerio de Ganadería, Agricultura y Pesca, en 2005 Uruguay consumía poco más de 50 millones de dólares al año de agroquímicos, y en 2014 la cifra tocaba los 250 millones de dólares. Para dar una idea del volumen, cuentan los 48 millones de plaguicidas usados durante 2013 y lo dividen en los 3,2 millones de habitantes, lo que equivale a 14,7 kilos (o litros) de plaguicidas por persona al año.