Pentágono planeó el uso de armas nucleares en Vietnam, según documentos desclasificados
El general William Westmoreland, comandante de las fuerzas
estadounidenses en Vietnam entre los años 1964 y 1968, había elaborado
un plan secreto para usar armas nucleares contra el norte comunista
durante la Guerra de Vietnam, antes de que el presidente Lyndon Johnson
se enterara de los preparativos y los detuviera, revelan documentos
desclasificados citados por The New York Times.
Al encontrarse en un punto muerto contra el Ejército de Vietnam del Norte en medio de la batalla de Khe Sanh en 1968, que duró meses, el general Westmoreland ideó un plan de contingencia para usar armas nucleares en caso de que las fuerzas de EE.UU. se encontraran al borde de la derrota.
El plan, denominado ‘Fracture Jaw’, incluía una transferencia de armas nucleares desde Okinawa, Japón, a Vietnam del Sur, y recibió aprobación del comandante de las fuerzas estadounidenses en el Pacífico, Ulysses S. Grant Sharp Jr.
Tom Johnson, asistente especial del entonces mandatario, señaló en declaraciones a NYT que este estaba “extraordinariamente molesto” después de enterarse de que los planes para desplegar las armas nucleares ya se habían puesto en marcha. El presidente envió un mensaje a través de Rostow, “y pienso que directamente a Westmoreland, para cancelarlos”, recordó Johnson, explicando que el mandatario temía provocar una “guerra más amplia” que involucrara a China en Vietnam.
Después de que el presidente desechara la idea, Sharp ordenó en un cable a Westmoreland “descontinuar toda la planificación de Fracture Jaw”, así como “informar a todo el personal con acceso a este proyecto de planificación que no puede haber divulgación del contenido del plan o del conocimiento de que dicha planificación estaba en curso o suspendida”.
Algunos de los documentos con los detalles de la operación secreta fueron desclasificados hace ya unos años, pero no recibieron atención hasta que fueron descubiertos por el historiador presidencial Michael Beschloss durante su investigación para el próximo libro ‘Presidents of War’, apunta NYT.
(Con información de RT y The New York Times)
Otro 16 por ciento de los encuestados señala que no podía decir si Washington había tenido éxito o había fracasado en la guerra de Afganistán: de hecho, el conflicto bélico más prolongado librado por Estados Unidos en toda su historia.
Los resultados del sondeo son casi similares a otros llevados a cabo por Pew en 2014 y 2015, cuando los estadounidenses manifestaron opiniones más negativas que positivas sobre la misión militar de EE.UU. en Afganistán.
No obstante, la opinión de la sociedad estadounidense difiere de forma crucial de la expresada en 2009 y 2011. Entonces la mayoría de las personas se mostraron optimistas cuando se les preguntó si EE.UU. tendría éxito en el conflicto afgano.
Después de más de 17 años de guerra, que se ha cobrado la vida de más de 2200 militares estadounidenses y decenas de miles de civiles afganos, los insurgentes talibanes controlan el 61 por ciento de Afganistán, según un artículo de New York Times. Cifras que contradicen los datos ofrecidos por la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y EE.UU., que estiman el control talibán en un 44 por ciento.
La intervención militar de la OTAN, que tenía como objetivo derrocar al grupo Talibán, “luchar” contra los terroristas e intensificar la lucha antidrogas, solo ha empeorado las condiciones ya de por sí malas del país asiático, y para mayor inri los talibanes se hacen más fuertes y se vislumbra una nuevo actor en la escena: el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) toma posiciones en dicho país.
ftm/alg/nii/
Al encontrarse en un punto muerto contra el Ejército de Vietnam del Norte en medio de la batalla de Khe Sanh en 1968, que duró meses, el general Westmoreland ideó un plan de contingencia para usar armas nucleares en caso de que las fuerzas de EE.UU. se encontraran al borde de la derrota.
El plan, denominado ‘Fracture Jaw’, incluía una transferencia de armas nucleares desde Okinawa, Japón, a Vietnam del Sur, y recibió aprobación del comandante de las fuerzas estadounidenses en el Pacífico, Ulysses S. Grant Sharp Jr.
Temor a una “guerra más amplia”
Sin embargo, cuando el asesor de seguridad nacional, Walt W. Rostow, alertó a la Casa Blanca sobre los preparativos, el presidente Johnson canceló de inmediato el despliegue secreto de armas.Tom Johnson, asistente especial del entonces mandatario, señaló en declaraciones a NYT que este estaba “extraordinariamente molesto” después de enterarse de que los planes para desplegar las armas nucleares ya se habían puesto en marcha. El presidente envió un mensaje a través de Rostow, “y pienso que directamente a Westmoreland, para cancelarlos”, recordó Johnson, explicando que el mandatario temía provocar una “guerra más amplia” que involucrara a China en Vietnam.
Después de que el presidente desechara la idea, Sharp ordenó en un cable a Westmoreland “descontinuar toda la planificación de Fracture Jaw”, así como “informar a todo el personal con acceso a este proyecto de planificación que no puede haber divulgación del contenido del plan o del conocimiento de que dicha planificación estaba en curso o suspendida”.
Algunos de los documentos con los detalles de la operación secreta fueron desclasificados hace ya unos años, pero no recibieron atención hasta que fueron descubiertos por el historiador presidencial Michael Beschloss durante su investigación para el próximo libro ‘Presidents of War’, apunta NYT.
(Con información de RT y The New York Times)
Desclasificado: General de EE.UU. preparó un plan secreto para usar armas nucleares en Vietnam
Publicado: 7 oct 2018 11:45 GMT - RT
Cuando el presidente Lyndon Johnson se
enteró del plan, canceló de inmediato los preparativos, por temor a que
provocaran una "guerra más amplia" que involucrara a China.
El
general William Westmoreland, comandante de las fuerzas estadounidenses
en Vietnam entre 1964 y 1968, había preparado un plan secreto para usar
armas nucleares contra el norte comunista durante la Guerra de Vietnam,
antes de que el presidente Lyndon Johnson se enterara de los
preparativos y los detuviera, revelan documentos desclasificados citados
por The New York Times.
Al encontrarse en un punto muerto contra el Ejército de Vietnam del Norte en medio de la batalla de Khe Sanh en 1968, que duró meses, el general Westmoreland ideó un plan de contingencia para usar armas nucleares en caso de que las fuerzas de EE.UU. se encontraran al borde de la derrota.
El plan, denominado 'Fracture Jaw', incluía una transferencia de armas nucleares desde Okinawa, Japón, a Vietnam del Sur, y recibió aprobación del comandante de las fuerzas estadounidenses en el Pacífico, Ulysses S. Grant Sharp Jr.
Tom Johnson, asistente especial del entonces mandatario, señaló en declaraciones a NYT que este estaba "extraordinariamente molesto" después de enterarse de que los planes para desplegar las armas nucleares ya se habían puesto en marcha. El presidente envió un mensaje a través de Rostow, "y pienso que directamente a Westmoreland, para cancelarlos", recordó Johnson, explicando que el mandatario temía provocar una "guerra más amplia" que involucrara a China en Vietnam.
Después de que el presidente desechara la idea, Sharp ordenó en un cable a Westmoreland "descontinuar toda la planificación de Fracture Jaw", así como "informar a todo el personal con acceso a este proyecto de planificación que no puede haber divulgación del contenido del plan o del conocimiento de que dicha planificación estaba en curso o suspendida".
Algunos de los documentos con los detalles de la operación secreta fueron desclasificados hace ya unos años, pero no recibieron atención hasta que fueron descubiertos por el historiador presidencial Michael Beschloss durante su investigación para el próximo libro 'Presidents of War', apunta NYT.
Al encontrarse en un punto muerto contra el Ejército de Vietnam del Norte en medio de la batalla de Khe Sanh en 1968, que duró meses, el general Westmoreland ideó un plan de contingencia para usar armas nucleares en caso de que las fuerzas de EE.UU. se encontraran al borde de la derrota.
El plan, denominado 'Fracture Jaw', incluía una transferencia de armas nucleares desde Okinawa, Japón, a Vietnam del Sur, y recibió aprobación del comandante de las fuerzas estadounidenses en el Pacífico, Ulysses S. Grant Sharp Jr.
Temor a una "guerra más amplia"
Sin embargo, cuando el asesor de seguridad nacional, Walt W. Rostow, alertó a la Casa Blanca sobre los preparativos, el presidente Johnson canceló de inmediato el despliegue secreto de armas.Tom Johnson, asistente especial del entonces mandatario, señaló en declaraciones a NYT que este estaba "extraordinariamente molesto" después de enterarse de que los planes para desplegar las armas nucleares ya se habían puesto en marcha. El presidente envió un mensaje a través de Rostow, "y pienso que directamente a Westmoreland, para cancelarlos", recordó Johnson, explicando que el mandatario temía provocar una "guerra más amplia" que involucrara a China en Vietnam.
Después de que el presidente desechara la idea, Sharp ordenó en un cable a Westmoreland "descontinuar toda la planificación de Fracture Jaw", así como "informar a todo el personal con acceso a este proyecto de planificación que no puede haber divulgación del contenido del plan o del conocimiento de que dicha planificación estaba en curso o suspendida".
Algunos de los documentos con los detalles de la operación secreta fueron desclasificados hace ya unos años, pero no recibieron atención hasta que fueron descubiertos por el historiador presidencial Michael Beschloss durante su investigación para el próximo libro 'Presidents of War', apunta NYT.
‘La mitad de estadounidenses cree que EEUU fracasó en Afganistán’
Casi
la mitad de los estadounidenses cree que EE.UU. ha fracasado en
Afganistán, después de 17 años de una guerra que supuestamente acabaría
con el terrorismo.
Según la encuesta realizada por el centro de investigación Pew y
publicada el viernes, el 49 por ciento de los adultos estadounidenses
dice que Washington ha fracasado en el cumplimiento de su objetivo, y el
35 por ciento, que ha tenido éxito.Otro 16 por ciento de los encuestados señala que no podía decir si Washington había tenido éxito o había fracasado en la guerra de Afganistán: de hecho, el conflicto bélico más prolongado librado por Estados Unidos en toda su historia.
Los resultados del sondeo son casi similares a otros llevados a cabo por Pew en 2014 y 2015, cuando los estadounidenses manifestaron opiniones más negativas que positivas sobre la misión militar de EE.UU. en Afganistán.
No obstante, la opinión de la sociedad estadounidense difiere de forma crucial de la expresada en 2009 y 2011. Entonces la mayoría de las personas se mostraron optimistas cuando se les preguntó si EE.UU. tendría éxito en el conflicto afgano.
Después de más de 17 años de guerra, que se ha cobrado la vida de más de 2200 militares estadounidenses y decenas de miles de civiles afganos, los insurgentes talibanes controlan el 61 por ciento de Afganistán, según un artículo de New York Times. Cifras que contradicen los datos ofrecidos por la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) y EE.UU., que estiman el control talibán en un 44 por ciento.
La intervención militar de la OTAN, que tenía como objetivo derrocar al grupo Talibán, “luchar” contra los terroristas e intensificar la lucha antidrogas, solo ha empeorado las condiciones ya de por sí malas del país asiático, y para mayor inri los talibanes se hacen más fuertes y se vislumbra una nuevo actor en la escena: el grupo terrorista EIIL (Daesh, en árabe) toma posiciones en dicho país.
ftm/alg/nii/
EE.UU.: Haremos la vida en Siria "lo más miserable posible, incluso si la ONU no lo aprueba"
Publicado: 29 sep 2018 02:02 GMT | Última actualización: 29 sep 2018 03:47 GMT - RT
Así se ha expresado el representante
especial de EE.UU. para el compromiso con Siria, quien prometió realizar
el plan si el gobierno de Al Assad no reescribe la Constitución.
EE.UU.,
con la ayuda de sus aliados de Europa, Asia y Oriente Medio, efectuará
"una estrategia de aislamiento", incluidas sanciones, contra Siria, si
su presidente, Bashar al Assad, no coopera en la reescritura de la Constitución siria como preludio para las elecciones, ha afirmado este viernes el representante especial de EE.UU. para el compromiso con Siria, James Jeffrey.
"Si el régimen hace eso, creemos que podemos ir tras él de la misma manera que lo hicimos con Irán antes del 2015: con sanciones internacionales realmente duras", ha precisado el diplomático, refiriéndose a las sanciones secundarias contra Teherán por su programa nuclear.
Asimismo, Jeffrey ha aseverado que ni siquiera el Consejo de Seguridad de la ONU podrá detener este plan de Washington. "Incluso si el Consejo de Seguridad de la ONU no las aprueba [las sanciones], lo haremos a través de la Unión Europea, lo haremos a través de nuestros aliados asiáticos", ha revelado.
"Y luego nos concentraremos en hacer la vida lo más miserable posible para ese cadáver del régimen", ha concluido.
Estoy sentado en el espléndido edificio de la Biblioteca Nacional de Singapur, en una habitación semioscura, con un microfilm insertado en un aparato de alta tecnología. Estoy visionando, filmando y fotografiando viejos periódicos malasios de octubre de 1965.
Estos artículos fueron publicados justo después del terrible golpe militar que se produjo en Indonesia en 1965, que derrocó al presidente progresista Sukarno y liquidó el tercer mayor partido comunista del planeta, el PKI (Partai Komunis Indonesia). Entre 1 y 3 millones de personas perdieron la vida en una de las más terribles masacres del siglo XX. Indonesia pasó de ser un país socialista (y a punto de ser comunista) a hundirse en el agujero turbo-capitalista y de locura religiosa y de extrema derecha en que se encuentra todavía en el presente.
Estados Unidos, Reino Unido, Australia, Holanda y otras naciones occidentales promovieron el golpe de Estado y colocaron a las facciones traidoras pro-occidentales del ejército y a los líderes religiosos en la vanguardia del genocidio.
Toda la información está, por supuesto, al alcance de cualquiera que le interese, en los archivos desclasificados de la CIA y del Departamento de Estado de EE.UU. Se puede acceder a ella, analizarla y reproducirla. Yo dirigí un documental sobre estos sucesos, al igual que otros directores.
Pero no forman parte de la memoria de la humanidad. En el sudeste asiático, solo un puñado de intelectuales conocen estos hechos.
En Malasia, Singapur o Tailandia, el fascismo que gobernó Indonesia a partir de 1965 es un tema tabú. Simplemente no se habla de ello. Aquí, como en otros estados clientelares de Occidente, los intelectuales “progresistas” son pagados para elucubrar sobre su orientación sexual, sobre temas de género y de “libertades” personales, pero claramente no para preocuparse por los temas esenciales que han configurado tan negativamente esta parte del mundo: el imperialismo occidental, el neocolonialismo, las formas salvajes y grotescas del capitalismo, el saqueo de los recursos locales y del medio ambiente, así como la desinformación y la ignorancia forzosa que acompañan a la amnesia de masas.
En Indonesia, en concreto, el Partido Comunista está prohibido y el gran público lo considera el culpable y no la víctima.
Occidente, mientras tanto, se parte de risa a espaldas de sus adoctrinadas víctimas. Y sigue riendo todo el camino hasta llegar al banco. Las mentiras, obviamente, producen buenos dividendos.
Ninguna otra parte del mundo ha sufrido tanto el imperialismo occidental posterior a la Segunda Guerra Mundial como el sudeste asiático, quizás con dos excepciones: África y Oriente Próximo.
En la llamada Indochina, Occidente asesinó a cerca de 10 millones de personas, mediante campañas de bombardeos indiscriminados y otras formas de terrorismo, en Vietnam, Laos y Camboya. El mencionado golpe de Estado en Indonesia arrebató al menos un millón de vidas humanas. El 30 por ciento de la población de Timor Oriental fue exterminado durante la ocupación de Indonesia, que contaba con el apoyo total de Occidente. El régimen tailandés, completamente subordinado a Occidente, mató indiscriminadamente a los izquierdistas del norte del país y de la capital. Toda la región ha sufrido las consecuencias de los implantes religiosos extremistas, con el favor de Occidente y de sus aliados del Golfo.
Sin embargo, en esta parte del mundo se admira a Occidente, casi con un fervor religioso.
Las agencias de prensa y los “centros culturales” estadounidenses, británicos y franceses difunden desinformación a través de los medios de comunicación locales propiedad de élites serviles. La “educación” local ha sido adaptada con devoción a los conceptos didácticos occidentales. En lugares como Malasia e Indonesia, pero también en Tailandia, el mayor triunfo es conseguir un grado universitario en uno de los países que colonizaron esta parte del mundo.
Los países víctimas, en lugar de buscar compensaciones en los tribunales, admiran y copian a Occidente, al tiempo que piden financiación a sus pasados y presentes opresores, incluso la suplican.
El sudeste asiático es ahora obediente, sumiso, flemático, ha sido despojado de antiguas ideologías revolucionarias de izquierda. Aquí, el adoctrinamiento y la propaganda occidental han logrado una incuestionable victoria.
***
Ese mismo día, conecté el televisor de la habitación de mi hotel y estuve viendo la cobertura que los medios occidentales ofrecían de la situación en Idlib, el último bastión de los terroristas apoyados por Occidente en territorio sirio.
Rusia había convocado una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU para advertir que los terroristas podrían lanzar un ataque químico para luego culpar, con el apoyo de Occidente, a las fuerzas del presidente Bashar al-Assad.
La OTAN ha desplegado buques de guerra en la región. No cabe duda de que ha sido una buena puesta en escena de los actores europeos y estadounidenses: “Te golpeamos, matamos a tu gente y después, en castigo, te bombardeamos”.
Luego, los gánsteres imperialistas señalan con dedos acusativos a las víctimas (Siria, en este caso) y a aquellos que intentan protegerlas (Rusia, Irán, Hezbolá, China). Tal y como ocurría en la guardería o en la escuela primaria, ¿recuerda? Un niño pegaba a otro desde atrás y luego gritaba, señalando a un tercero con el dedo: “¡Ha sido él, ha sido él!”. Milagrosamente, hasta ahora, Occidente siempre se ha salido con la suya con esta estrategia, a costa, claro está, de millones de víctimas en todos los continentes.
Así ha sido durante siglos y así sigue siendo. Así es como seguirá siendo hasta que se ponga fin al terror y al gansterismo.
***
Durante años y durante décadas, nos han dicho que el mundo está ahora más interconectado, que nada verdaderamente importante podía suceder, sin ser inmediatamente detectado y reportado por las lentes vigilantes de los medios de comunicación y la “sociedad civil”.
Sin embargo, miles de cosas suceden continuamente de las que nadie se da cuenta.
Solo en los dos últimos decenios, ha habido país enteros a los que Norteamérica y Europa han señalado, han intentado matar de hambre mediante embargos y sanciones para, finalmente, atacarlos y hacerlos pedazos: Afganistán, Iraq y Libia entre otros. Gobiernos de distintas naciones han sido derribados, bien desde el exterior, o bien a través de sus propias élites y medios de comunicación serviles. Sirvan de ejemplo Brasil, Honduras y Paraguay. Innumerables compañías occidentales y sus secuaces locales están realizando un saqueo desenfrenado a los recursos naturales de lugares como Borneo o la República Democrática del Congo, destruyendo por completo selvas enteras y aniquilando cientos de especies (como el emblemático orangután).
¿Estamos realmente interconectados, como planeta? ¿Qué tanto sabemos las personas unas de otras, o de lo que sufren nuestros hermanos y hermanas en los distintos continentes?
He trabajado en unos 160 países y puedo afirmar sin la menor duda: “Casi nada”. O, peor aún, “¡Menos que nada!”.
El imperio occidental y sus mentiras han conseguido fragmentar el mundo hasta extremos anteriormente desconocidos. Todo se hace “abiertamente”, a plena vista del mundo, incapaz por otra parte de observar e identificar las amenazas más urgentes para su propia supervivencia. Los medios de comunicación de masas sirven como vehículos para el adoctrinamiento, al igual que las instituciones culturales y “educativas” de Occidente, o aquellas instituciones locales moldeadas por los conceptos occidentales. Entre estas últimas estarían instrumentos tan diversos como las universidades, los manipuladores del tráfico de Internet, los censores y los individuos que se autocensuran, las redes sociales, las agencias de publicidad y los “artistas” de la cultura pop.
***
La barbarie y las mentiras colonialistas y neocolonialistas occidentales se guían por un claro patrón:
“”El presidente de Indonesia, Sukarno, y su mayor aliado, el Partido Comunista de Indonesia (PKI) se proponían construir un país progresista y autosuficiente. Por tanto, era preciso parales los pies, derribar al gobierno, masacrar a los miembros del partido, prohibir el PKI y privatizar el país entero, venderlo a los intereses extranjeros. La abrumadora mayoría de los indonesios tiene el cerebro tan lavado por la propaganda local y occidental, que siguen culpando a los comunistas por el golpe de Estado, a pesar de lo que dicen los archivos de la CIA”.
El presidente Mossaddeq de Irán perseguía también un proyecto progresista, y terminó del mismo modo que Sukarno. Y todo el mundo quedó fascinado por el carnicero puesto en el trono por Occidente: el Sha y su fastuosa esposa.
En Chile, en 1973, se reprodujo el mismo patrón letal, en una nueva muestra del amor por la libertad y la democracia que tiene Occidente.
Patrice Lumumba, en el Congo, nacionalizó los recursos naturales e intentó alimentar y educar a su gran nación. ¿El resultado? Derribado, asesinado. El precio: unos ocho millones de personas masacradas en los últimos veinte años, quién sabe si muchas más (mi película Rwanda Gambit trata de ello). Nadie lo sabe, o todo el mundo pretende que no lo sabe.
¡Siria! El mayor crimen de este país, al menos a ojos de Occidente, fue intentar proporcionar a sus ciudadanos una buena calidad de vida, a la vez que promovía el panarabismo. Los resultados todos los conocemos (¿de verdad los conocemos?): cientos de miles asesinados por extremistas asesinos apadrinados por Occidente, millones de refugiados y de desplazados internos. Y Occidente, naturalmente, culpa al presidente sirio y está dispuesto a “castigarlo” si gana la guerra.
Claro que es irracional. ¿Pero puede el fascismo a escala global ser racional?
Las mentiras difundidas por Occidente se están acumulando. Se superponen unas con otras, a menudo se contradicen. Pero el público del mundo ya no está entrenado para buscar la verdad. Subconscientemente siente que le han mentido, pero la verdad es tan horripilante que la gran mayoría de las personas prefieren simplemente sacarse selfis, analizar y exhibir su orientación sexual, ponerse auriculares y escuchar música pop vacía, en lugar de luchar por la supervivencia de la humanidad.
He escrito libros enteros sobre ello, incluyendo el volumen de casi mil páginas “Exposing Lies Of The Empire” (Mostrando las mentiras del Imperio). Este artículo no es más que una cadena de pensamientos que me han venido a la cabeza mientras estaba sentado junto al proyector en una habitación en penumbra de la Biblioteca Nacional de Singapur.
Una pregunta retórica no dejaba de atormentarme: “¿Es posible que todo esto esté pasando?” “¿Puede Occidente esquivar el castigo por todos los crímenes que ha cometido durante siglos en todo el mundo?”
La respuesta es evidente: “Por supuesto que sí, mientras no se le detenga”. Por tanto, A luta continua!
Fuente:https://www. investigaction.net/en/115390/
Traducción de Rebelión
"Si el régimen hace eso, creemos que podemos ir tras él de la misma manera que lo hicimos con Irán antes del 2015: con sanciones internacionales realmente duras", ha precisado el diplomático, refiriéndose a las sanciones secundarias contra Teherán por su programa nuclear.
Asimismo, Jeffrey ha aseverado que ni siquiera el Consejo de Seguridad de la ONU podrá detener este plan de Washington. "Incluso si el Consejo de Seguridad de la ONU no las aprueba [las sanciones], lo haremos a través de la Unión Europea, lo haremos a través de nuestros aliados asiáticos", ha revelado.
"Y luego nos concentraremos en hacer la vida lo más miserable posible para ese cadáver del régimen", ha concluido.
- Las autoridades sirias califican de ilegítima la presencia militar estadounidense en su territorio. Así lo declaró en septiembre de 2017, en una entrevista con RT, el ministro de Asuntos Exteriores de Siria, Walid Muallem
- A pesar de esa postura oficial de Damasco, el entonces secretario de Estado de EE.UU., Rex Tillerson, anunció el 17 de enero de 2018 que las fuerzas estadounidenses se mantendrían en territorio sirio y aseguró que no habrá lugar para el presidente Al Assad en el futuro de esa nación árabe
- En el mismo discurso, Tillerson manifestó que EE.UU. y sus aliados no tienen intención de colaborar en la reconstrucción de las regiones controladas por el presidente Bashar al Assad e incluso urgió a otros países a ejercer presión económica sobre el Gobierno sirio
- Desde el punto de vista de Moscú, la estrategia de EE.UU. en Siria tiene como objetivo la desintegración de ese país árabe.
En Siria o en el Sudeste Asiático Occidente mintió, miente y seguirá mintiendo
Por:
Estoy sentado en el espléndido edificio de la Biblioteca Nacional de Singapur, en una habitación semioscura, con un microfilm insertado en un aparato de alta tecnología. Estoy visionando, filmando y fotografiando viejos periódicos malasios de octubre de 1965.
Estos artículos fueron publicados justo después del terrible golpe militar que se produjo en Indonesia en 1965, que derrocó al presidente progresista Sukarno y liquidó el tercer mayor partido comunista del planeta, el PKI (Partai Komunis Indonesia). Entre 1 y 3 millones de personas perdieron la vida en una de las más terribles masacres del siglo XX. Indonesia pasó de ser un país socialista (y a punto de ser comunista) a hundirse en el agujero turbo-capitalista y de locura religiosa y de extrema derecha en que se encuentra todavía en el presente.
Estados Unidos, Reino Unido, Australia, Holanda y otras naciones occidentales promovieron el golpe de Estado y colocaron a las facciones traidoras pro-occidentales del ejército y a los líderes religiosos en la vanguardia del genocidio.
Toda la información está, por supuesto, al alcance de cualquiera que le interese, en los archivos desclasificados de la CIA y del Departamento de Estado de EE.UU. Se puede acceder a ella, analizarla y reproducirla. Yo dirigí un documental sobre estos sucesos, al igual que otros directores.
Pero no forman parte de la memoria de la humanidad. En el sudeste asiático, solo un puñado de intelectuales conocen estos hechos.
En Malasia, Singapur o Tailandia, el fascismo que gobernó Indonesia a partir de 1965 es un tema tabú. Simplemente no se habla de ello. Aquí, como en otros estados clientelares de Occidente, los intelectuales “progresistas” son pagados para elucubrar sobre su orientación sexual, sobre temas de género y de “libertades” personales, pero claramente no para preocuparse por los temas esenciales que han configurado tan negativamente esta parte del mundo: el imperialismo occidental, el neocolonialismo, las formas salvajes y grotescas del capitalismo, el saqueo de los recursos locales y del medio ambiente, así como la desinformación y la ignorancia forzosa que acompañan a la amnesia de masas.
En Indonesia, en concreto, el Partido Comunista está prohibido y el gran público lo considera el culpable y no la víctima.
Occidente, mientras tanto, se parte de risa a espaldas de sus adoctrinadas víctimas. Y sigue riendo todo el camino hasta llegar al banco. Las mentiras, obviamente, producen buenos dividendos.
Ninguna otra parte del mundo ha sufrido tanto el imperialismo occidental posterior a la Segunda Guerra Mundial como el sudeste asiático, quizás con dos excepciones: África y Oriente Próximo.
En la llamada Indochina, Occidente asesinó a cerca de 10 millones de personas, mediante campañas de bombardeos indiscriminados y otras formas de terrorismo, en Vietnam, Laos y Camboya. El mencionado golpe de Estado en Indonesia arrebató al menos un millón de vidas humanas. El 30 por ciento de la población de Timor Oriental fue exterminado durante la ocupación de Indonesia, que contaba con el apoyo total de Occidente. El régimen tailandés, completamente subordinado a Occidente, mató indiscriminadamente a los izquierdistas del norte del país y de la capital. Toda la región ha sufrido las consecuencias de los implantes religiosos extremistas, con el favor de Occidente y de sus aliados del Golfo.
Sin embargo, en esta parte del mundo se admira a Occidente, casi con un fervor religioso.
Las agencias de prensa y los “centros culturales” estadounidenses, británicos y franceses difunden desinformación a través de los medios de comunicación locales propiedad de élites serviles. La “educación” local ha sido adaptada con devoción a los conceptos didácticos occidentales. En lugares como Malasia e Indonesia, pero también en Tailandia, el mayor triunfo es conseguir un grado universitario en uno de los países que colonizaron esta parte del mundo.
Los países víctimas, en lugar de buscar compensaciones en los tribunales, admiran y copian a Occidente, al tiempo que piden financiación a sus pasados y presentes opresores, incluso la suplican.
El sudeste asiático es ahora obediente, sumiso, flemático, ha sido despojado de antiguas ideologías revolucionarias de izquierda. Aquí, el adoctrinamiento y la propaganda occidental han logrado una incuestionable victoria.
***
Ese mismo día, conecté el televisor de la habitación de mi hotel y estuve viendo la cobertura que los medios occidentales ofrecían de la situación en Idlib, el último bastión de los terroristas apoyados por Occidente en territorio sirio.
Rusia había convocado una reunión de emergencia del Consejo de Seguridad de la ONU para advertir que los terroristas podrían lanzar un ataque químico para luego culpar, con el apoyo de Occidente, a las fuerzas del presidente Bashar al-Assad.
La OTAN ha desplegado buques de guerra en la región. No cabe duda de que ha sido una buena puesta en escena de los actores europeos y estadounidenses: “Te golpeamos, matamos a tu gente y después, en castigo, te bombardeamos”.
Luego, los gánsteres imperialistas señalan con dedos acusativos a las víctimas (Siria, en este caso) y a aquellos que intentan protegerlas (Rusia, Irán, Hezbolá, China). Tal y como ocurría en la guardería o en la escuela primaria, ¿recuerda? Un niño pegaba a otro desde atrás y luego gritaba, señalando a un tercero con el dedo: “¡Ha sido él, ha sido él!”. Milagrosamente, hasta ahora, Occidente siempre se ha salido con la suya con esta estrategia, a costa, claro está, de millones de víctimas en todos los continentes.
Así ha sido durante siglos y así sigue siendo. Así es como seguirá siendo hasta que se ponga fin al terror y al gansterismo.
***
Durante años y durante décadas, nos han dicho que el mundo está ahora más interconectado, que nada verdaderamente importante podía suceder, sin ser inmediatamente detectado y reportado por las lentes vigilantes de los medios de comunicación y la “sociedad civil”.
Sin embargo, miles de cosas suceden continuamente de las que nadie se da cuenta.
Solo en los dos últimos decenios, ha habido país enteros a los que Norteamérica y Europa han señalado, han intentado matar de hambre mediante embargos y sanciones para, finalmente, atacarlos y hacerlos pedazos: Afganistán, Iraq y Libia entre otros. Gobiernos de distintas naciones han sido derribados, bien desde el exterior, o bien a través de sus propias élites y medios de comunicación serviles. Sirvan de ejemplo Brasil, Honduras y Paraguay. Innumerables compañías occidentales y sus secuaces locales están realizando un saqueo desenfrenado a los recursos naturales de lugares como Borneo o la República Democrática del Congo, destruyendo por completo selvas enteras y aniquilando cientos de especies (como el emblemático orangután).
¿Estamos realmente interconectados, como planeta? ¿Qué tanto sabemos las personas unas de otras, o de lo que sufren nuestros hermanos y hermanas en los distintos continentes?
He trabajado en unos 160 países y puedo afirmar sin la menor duda: “Casi nada”. O, peor aún, “¡Menos que nada!”.
El imperio occidental y sus mentiras han conseguido fragmentar el mundo hasta extremos anteriormente desconocidos. Todo se hace “abiertamente”, a plena vista del mundo, incapaz por otra parte de observar e identificar las amenazas más urgentes para su propia supervivencia. Los medios de comunicación de masas sirven como vehículos para el adoctrinamiento, al igual que las instituciones culturales y “educativas” de Occidente, o aquellas instituciones locales moldeadas por los conceptos occidentales. Entre estas últimas estarían instrumentos tan diversos como las universidades, los manipuladores del tráfico de Internet, los censores y los individuos que se autocensuran, las redes sociales, las agencias de publicidad y los “artistas” de la cultura pop.
***
La barbarie y las mentiras colonialistas y neocolonialistas occidentales se guían por un claro patrón:
“”El presidente de Indonesia, Sukarno, y su mayor aliado, el Partido Comunista de Indonesia (PKI) se proponían construir un país progresista y autosuficiente. Por tanto, era preciso parales los pies, derribar al gobierno, masacrar a los miembros del partido, prohibir el PKI y privatizar el país entero, venderlo a los intereses extranjeros. La abrumadora mayoría de los indonesios tiene el cerebro tan lavado por la propaganda local y occidental, que siguen culpando a los comunistas por el golpe de Estado, a pesar de lo que dicen los archivos de la CIA”.
El presidente Mossaddeq de Irán perseguía también un proyecto progresista, y terminó del mismo modo que Sukarno. Y todo el mundo quedó fascinado por el carnicero puesto en el trono por Occidente: el Sha y su fastuosa esposa.
En Chile, en 1973, se reprodujo el mismo patrón letal, en una nueva muestra del amor por la libertad y la democracia que tiene Occidente.
Patrice Lumumba, en el Congo, nacionalizó los recursos naturales e intentó alimentar y educar a su gran nación. ¿El resultado? Derribado, asesinado. El precio: unos ocho millones de personas masacradas en los últimos veinte años, quién sabe si muchas más (mi película Rwanda Gambit trata de ello). Nadie lo sabe, o todo el mundo pretende que no lo sabe.
¡Siria! El mayor crimen de este país, al menos a ojos de Occidente, fue intentar proporcionar a sus ciudadanos una buena calidad de vida, a la vez que promovía el panarabismo. Los resultados todos los conocemos (¿de verdad los conocemos?): cientos de miles asesinados por extremistas asesinos apadrinados por Occidente, millones de refugiados y de desplazados internos. Y Occidente, naturalmente, culpa al presidente sirio y está dispuesto a “castigarlo” si gana la guerra.
Claro que es irracional. ¿Pero puede el fascismo a escala global ser racional?
Las mentiras difundidas por Occidente se están acumulando. Se superponen unas con otras, a menudo se contradicen. Pero el público del mundo ya no está entrenado para buscar la verdad. Subconscientemente siente que le han mentido, pero la verdad es tan horripilante que la gran mayoría de las personas prefieren simplemente sacarse selfis, analizar y exhibir su orientación sexual, ponerse auriculares y escuchar música pop vacía, en lugar de luchar por la supervivencia de la humanidad.
He escrito libros enteros sobre ello, incluyendo el volumen de casi mil páginas “Exposing Lies Of The Empire” (Mostrando las mentiras del Imperio). Este artículo no es más que una cadena de pensamientos que me han venido a la cabeza mientras estaba sentado junto al proyector en una habitación en penumbra de la Biblioteca Nacional de Singapur.
Una pregunta retórica no dejaba de atormentarme: “¿Es posible que todo esto esté pasando?” “¿Puede Occidente esquivar el castigo por todos los crímenes que ha cometido durante siglos en todo el mundo?”
La respuesta es evidente: “Por supuesto que sí, mientras no se le detenga”. Por tanto, A luta continua!
Fuente:https://www.
Traducción de Rebelión
Stoltenberg reconoce que el bombardeo a Yugoslavia fue para derrocar a Milosevic
El punto
22:45 08.10.2018 SPUTNIK NEWS
En
un encuentro con estudiantes de idiomas escandinavos de la Facultad de
Filología de la Universidad de Belgrado, el titular de la Alianza
Atlántica, Jens Stoltenberg, insistió en que la OTAN bombardeó la
antigua Yugoslavia en 1999 "para proteger a los civiles y detener el
régimen" de su entonces presidente Slobodan Milosevic.
Para
la experta rusa Irina Rúdneva, no es la primera tentativa "rídicula" de
los países occidentales para justificar el bombardeo de Yugoslavia.
Siempre dicen a los serbios de que todo se hacía en aras del bien: al principio se habló de "catástrofe humanitaria", después de salvar a los albaneses y, ahora la versión que siempre se supo, EEUU y sus aliados decidieron quitar a Milosevic por la fuerza para poner en su lugar a otro más cómodo, afirma la especialista. El experto español Enrique Refoyo, dice que hay que remontarse al año 2015, cuando el propio Stoltenberg empezó a decir que hay que disculparse por los bombardeos porque la popularidad de la OTAN, tanto en Montenegro como en Serbia es muy baja. Entonces se tragaron el orgullo, se disculparon por las muertes y la destrucción pero señalando siempre a Milosevic y sus atrocidades en Kosovo como el causante de los bombardeos.
Además: Presidente de Serbia cataloga a Milosevic de gran líder que quería lo mejor
Brasil se va a una segunda ronda de votaciones presidenciales. El próximo 28 de octubre se medirán en el balotaje, el ultraderechista, Jair Bolsonaro, y el candidato del PT, Fernando Haddad, que obtuvieron en las elecciones del domingo el respaldo electoral del 46,00% y 29,3% respectivamente.
En Moscú, el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, reitera a su homólogo italiano, Enzo Moavero Milanesi, que Rusia está interesada en una Unión Europea fuerte y en el saneamiento del diálogo Moscú-Bruselas. En Siria, el presidente de Siria, Bashar Asad, afirma que la histeria de países occidentales en relación con la batalla por Idlib se debe a su carácter crucial, ya que la victoria de los sirios en esta batalla hará fracasar los planes de Occidente sobre Siria.
Estos y otros temas podrán escuchar con más detalle en esta edición de El Punto, un espacio informativo-analítico de Radio Sputnik desde Moscú.
Siempre dicen a los serbios de que todo se hacía en aras del bien: al principio se habló de "catástrofe humanitaria", después de salvar a los albaneses y, ahora la versión que siempre se supo, EEUU y sus aliados decidieron quitar a Milosevic por la fuerza para poner en su lugar a otro más cómodo, afirma la especialista. El experto español Enrique Refoyo, dice que hay que remontarse al año 2015, cuando el propio Stoltenberg empezó a decir que hay que disculparse por los bombardeos porque la popularidad de la OTAN, tanto en Montenegro como en Serbia es muy baja. Entonces se tragaron el orgullo, se disculparon por las muertes y la destrucción pero señalando siempre a Milosevic y sus atrocidades en Kosovo como el causante de los bombardeos.
Además: Presidente de Serbia cataloga a Milosevic de gran líder que quería lo mejor
Brasil se va a una segunda ronda de votaciones presidenciales. El próximo 28 de octubre se medirán en el balotaje, el ultraderechista, Jair Bolsonaro, y el candidato del PT, Fernando Haddad, que obtuvieron en las elecciones del domingo el respaldo electoral del 46,00% y 29,3% respectivamente.
En Moscú, el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, reitera a su homólogo italiano, Enzo Moavero Milanesi, que Rusia está interesada en una Unión Europea fuerte y en el saneamiento del diálogo Moscú-Bruselas. En Siria, el presidente de Siria, Bashar Asad, afirma que la histeria de países occidentales en relación con la batalla por Idlib se debe a su carácter crucial, ya que la victoria de los sirios en esta batalla hará fracasar los planes de Occidente sobre Siria.
Estos y otros temas podrán escuchar con más detalle en esta edición de El Punto, un espacio informativo-analítico de Radio Sputnik desde Moscú.
Pentágono: China es un "riesgo significativo y creciente" para la industria de Defensa de EE.UU.
Publicado: 6 oct 2018 01:58 GMT - RT
Un extenso informe elaborado por orden de
Donald Trump detectó alrededor de 300 vulnerabilidades que podrían
afectar a materiales y componentes esenciales para el Ejército
norteamericano.
China
representa una amenaza creciente para el suministro de materiales
críticos para el Ejército de EE.UU., sostiente un extenso informe
elaborado por el Pentágono y publicado este viernes.
El informe, de casi 150 páginas, busca identificar debilidades en las industrias estadounidenses que son vitales para la seguridad nacional. Encargado por una orden ejecutiva del presidente Donald Trump el año pasado, el documento detectó en total alrededor de 300 "vulnerabilidades" que podrían afectar a materiales y componentes esenciales para el Ejército norteamericano.
"El dominio del comercio" de Pekín y su disposición "a utilizar el comercio como un arma de poder blando" aumenta los riesgos que enfrenta la base industrial de manufactura y defensa de Estados Unidos, al tener que depender de "un competidor estratégico para bienes, servicios y productos críticos", detalla el informe.
Una de las preocupaciones destacadas es el dominio del país asiático
en el suministro mundial de minerales de tierras raras, fundamentales
para los programas militares de EE.UU. El informe también hace hincapié
en el papel de China en el suministro de ciertos tipos de productos
electrónicos, así como de productos químicos utilizados en las
municiones estadounidenses.
El documento proporciona una serie de recomendaciones para fortalecer la industria estadounidense, como la expansión de la inversión directa en sectores considerados críticos. Otra de las sugerencias claves es "diversificar la dependencia total de las fuentes de suministro con respecto a países políticamente inestables que pueden cortarle el acceso a EE.UU.".
El informe, de casi 150 páginas, busca identificar debilidades en las industrias estadounidenses que son vitales para la seguridad nacional. Encargado por una orden ejecutiva del presidente Donald Trump el año pasado, el documento detectó en total alrededor de 300 "vulnerabilidades" que podrían afectar a materiales y componentes esenciales para el Ejército norteamericano.
"Un riesgo significativo y creciente"
Un "hallazgo clave" subrayado en ese texto es que China representa "un riesgo significativo y creciente" para el suministro de materiales y tecnologías "considerados estratégicos y fundamentales para la seguridad nacional" de EE.UU."El dominio del comercio" de Pekín y su disposición "a utilizar el comercio como un arma de poder blando" aumenta los riesgos que enfrenta la base industrial de manufactura y defensa de Estados Unidos, al tener que depender de "un competidor estratégico para bienes, servicios y productos críticos", detalla el informe.
El documento proporciona una serie de recomendaciones para fortalecer la industria estadounidense, como la expansión de la inversión directa en sectores considerados críticos. Otra de las sugerencias claves es "diversificar la dependencia total de las fuentes de suministro con respecto a países políticamente inestables que pueden cortarle el acceso a EE.UU.".
Tensión en aumento
El nuevo informe llega en el contexto de una escalada de tensiones entre ambas potencias en diversos ámbitos.- En el terreno político, el presidente de EE.UU., Donald Trump, y su vicepresidente, Mike Pence, acusaron a Pekín de interferir en los asuntos internos y en el proceso electoral estadounidense, afirmaciones que China ha tachado de "calumnias".
- Por otro lado, la semana pasada estuvo marcada por una serie de incidentes en los mares de la China Meridional y Oriental, como operaciones de tránsito de bombarderos estadounidenses B-52 o un encuentro poco amistoso entre el destructor norteamericano USS Decatur y un destructor chino de clase Luyang, cerca de las islas Spratly.
- Estos incidentes tienen lugar en medio de la batalla comercial entre los dos países y de las recientes sanciones estadounid
enses contra el complejo industrial militar chino, así como del apoyo militar que Washington presta a Taiwán, considerado por Pekín como una parte integral de China.
El Pentágono abre los ojos de Trump a 300 vulnerabilidades de la industria militar de EEUU
©
AP Photo / Mindaugas Kulbis
22:22 06.10.2018 SPUTNIK NEWS