¿Qué habría ganado Rusia con el asesinato del ex espía ruso Sergei Skripel y su hija Yulia? Esta simple pregunta está totalmente descartada del “razonamiento” de los políticos y de ese poder de facto que son los medios de prensa de los países de la OTAN, y sin embargo planteársela es “elemental”, como diría Sherlock Holmes, sobre todo si vemos el impecable realismo para no agravar las tensiones que el presidente ruso Vladimir Putin ha demostrado en el manejo de los conflictos creados por Estados Unidos y sus aliados en Ucrania, Siria y otros países.
Es por eso que hay “coincidencias” que merecen ser examinadas con atención, sobre todo en asuntos de sumo interés mundial y sin caer en un razonamiento “conspiracionista”. Me refiero a esta “coincidencia” tan puntual y que “cae como anillo al dedo” que ha sido el envenenamiento del ex espía ruso y su hija en Salisbury, Gran Bretaña, el domingo 4 de marzo, justo cuando ya era visible el desinfle del “Rusiagate”, la fábula de que Rusia, y en particular el presidente Vladimir Putin, habían manipulado la elección estadounidense para que ganara Donald Trump.
En efecto, conociendo el comportamiento de los gobernantes y servicios de inteligencia de Londres y Washington a lo largo de la historia, y especialmente en los últimos tiempos, hay muy buenas razones para pensar que lo sucedido a Skripal y a su hija, un grave hecho que aún no ha sido y que ni siquiera se quiere que sea elucidado, tuvo lugar en un momento muy particular, cuando periodistas británicos del Channel 4 estaban por revelar que la manipulación de la elección estadounidense, y del referendo sobre el Brexit, habían sido la obra de una empresa británica, Cambridge Analytica, que tiene oficinas en Londres, Nueva York y Washington y que utilizó datos proporcionados por Facebook (1).
Cambridge Analytica (CA), un “brote” de la empresa Strategic Communications Laboratories (SCL), manipuló elecciones en numerosos países –incluyendo algunos de Latinoamérica-, lo que necesariamente implica que tenía fuertes nexos con el mundo político relacionado con Washington y las estructuras de gobierno (e inteligencia), lo que no es extraño si vemos que uno de sus principales accionistas es nada menos que el multimillonario estadounidense Robert Mercer, quien entre otras “causas” bien reaccionarias financió las campañas de varios Republicanos, entre ellas la de Donald Trump (2).
El reportaje de Channel 4
El 19 de marzo pasado el canal de TV Channel 4 News de Gran Bretaña difundió un reportaje (3) sobre CA que había sido realizado gracias a grabaciones –algunas hechas en secreto- entre finales del 2017 y enero del 2018, que exponían a través de los directivos y colaboradores de Cambridge Analytica todas las formas de manipulación que esta firma utilizó en el proceso referendario del Brexit en Gran Bretaña y en las elecciones de Estados Unidos (EEUU) que dieron el triunfo a Donald Trump, dos procesos a partir de los cuales se montaron increíbles campañas de propaganda para tratar de “mostrar” que habían sido manipulados por el gobierno de Moscú.
El primer dato curioso y revelador es que antes de que el Channel 4 difundiera el reportaje, el fundador y director de CA, Alexander Nix, renunció a su cargo, lo que implica que estaba al tanto de lo que iba a revelarse y de las consecuencias que tendría tanto para la firma y sus propietarios, como también para las conexiones políticas de CA en Londres y Washington.
Pero en realidad mucho antes, como por ejemplo el 15 de diciembre del 2017 –según la información del diario The Wall Street-, el consejero especial Robert Mueller pedía que CA “una empresa de datos que trabajó en la campaña para el presidente Donald Trump, entregase los documentos como parte de su investigación en la interferencia de Rusia en la elección del 2016 en EEUU” (4), lo que implica que ya entonces los servicios de inteligencia de EEUU y sus aliados estaban al tanto del papel que CA había jugado en el proceso electoral estadounidense.
Más aún, el diario The Times of Israel (5) acaba de revelar que CA trabajó con empresas israelíes y que además de utilizar los datos de Facebook –según el directivo de la división política de CA, Mark Turnbull-, efectuaba operaciones clásicas de chantaje y las “honey traps” (utilización de prostitutas ucranianas para grabar situaciones que permiten chantajear), y que para ello utilizaba ex espías británicos e israelíes. El informático canadiense Christopher Wylie, que trabajó para CA y decidió dar a conocer estas operaciones (6), acaba de revelar que la compañía canadiense AggregateIQ trabajó en el programa informático Ripon “que fue utilizado para identificar los votantes republicanos antes de la elección presidencial de EEUU en el 2016”.
Con la información disponible y la que empieza a salir a luz es claro que toda esta operación, así como quienes participaron en ella y quienes fueron sus beneficiarios, era de conocimiento de los servicios de inteligencia de EEUU y sus aliados, y mucho antes del 19 de marzo, cuando Channel 4 News difundió su reportaje.
O sea que mucho antes del 19 de marzo y del fatídico 4 de marzo –el envenenamiento de Skripel y su hija-, los personajes claves en Londres y Washington sabían que el Rusiagate que se jugaba en el Capitolio de Washington no solo estaba destinado a desplomarse definitiva y estrepitosamente, sino que habría que enfrentar el costo político y diplomático de esa campaña contra Rusia, fraguada desde el comienzo por millonarios, políticos y empresas de EEUU y Gran Bretaña.
Los vientos de marzo
Para tener una mejor visión del contexto hay que recordar que el 1 de marzo el presidente ruso Vladimir Putin hizo un discurso muy importante en el cual abordó importantes asuntos de política interior y –para poner las cosas en su lugar frente a Washington y la OTAN-, dio a conocer los avances que su país había logrado en armas estratégicas.
Asimismo ya había comenzado en Siria la preparación de la ofensiva para liberar las estratégicas zonas cercanas a Damasco, la capital, que estaban bajo el control de distintas fuerzas terroristas financiadas y armadas por el imperialismo y sus aliados, las cuales preparaban una operación de utilización de armas químicas que sería atribuida al gobierno de Siria para justificar la intervención militar de EEUU y sus aliados, que tenían planeado bombardear los edificios del gobierno en Damasco y las instalaciones del Ejercito Árabe Sirio.
Rusia advirtió que quienes preparaban ataques con armas químicas eran los terroristas armados y financiados por EEUU y sus aliados, llamó a cooperar para impedir la provocación y advirtió de manera clara que en caso de ataques aéreos contra instalaciones donde hubiera rusos la respuesta sería contundente y dirigida no solamente a los misiles sino a los aviones, buques e instalaciones que los lanzaran. De esta manera Moscú hizo que se volatilizaran las provocaciones preparadas por Washington y sus aliados para poder lanzar ataques en Siria y escalar las campañas mediáticas, políticas y diplomáticas contra Rusia.
Y es en este contexto que el domingo 4 de marzo en la ciudad de Salisbury ocurre el aún inexplicado envenenamiento de Skripel y de su hija, y que inmediatamente y sin prueba alguna las autoridades británicas acusan a Rusia de un intento de asesinato con un agente químico.
Curioso que el “ataque” con armas químicas que no pudo suceder en la zona cercana a Damasco sucediera en menor escala, según las autoridades de Londres, pero en nada menos que en Gran Bretaña, un importante país de la OTAN…
¿Algo más que coincidencias?
Por el momento ya se pueden plantear algo más que dudas sobre la coincidencia entre 1) el desplome total del Rusiagate en Washington y otras capitales que habían acusado a Rusia de intervenir y manipular elecciones, 2) el envenenamiento (porque todavía no se sabe si fue un intento de asesinato) de Sergei Skripal y su hija, y 3) el reportaje elaborado por periodistas del Channel 4 que reveló el papel que CA, sus propietarios y colaboradores, así como Facebook y ex espías de países occidentales jugaron en el referendo sobre el Brexit, en las elecciones en EEUU y de muchos otros países.
Pero para quien ha cubierto la política de agresión de EEUU hacia muchos países durante casi 60 años, las “coincidencias” que parecen “caídas del cielo” y que permiten no solamente seguir agrediendo sino aumentar la fuerza de la agresión, siempre han sido “operaciones con banderas de conveniencias” (false flags operations) para poner en acción los “planes B” que permiten continuar y escalar el plan original de agresión.
Es posible y deseable que se investigue cuándo las autoridades (y servicios de inteligencia) se enteraron del contenido de las entrevistas grabadas por el Channel 4, de la misma manera que se debe investigar cómo y con qué producto químico fueron envenenados o se envenenaron los Skripel, y de dónde provenía el producto, y todo esto en el contexto de la necesaria pregunta ¿a quién favoreció lo sucedido?
Mis recuerdos sobre la cobertura de los atentados contra el World Trade Center en el 2001 y de cómo esa tragedia fue manipulada por el poder político y mediático estadounidense para lanzar la guerra contra Irak para derribar a Saddam Hussein en el 2003, me hacen dudar de que la verdad salga a luz a menos que funcionarios honestos decidan no ser cómplices de más guerras y graves tensiones internacionales, y den a conocer los elementos que permitan llegar a saber lo que realmente sucedió.
La razón de fondo para el plan B
Si poco me extrañan las extravagantes acusaciones que lanzan los gobernantes británicos y estadounidenses es porque, como dice un respetado profesor de relaciones internacionales (que no voy a nombrar), veo mucha frustración y rabia no contenida en el comportamiento patológico de los maestros del universo. Que el mundo no evoluciona en un buen sentido para ellos.
Basta leer la parte pública de la Estrategia de Seguridad Nacional (ESN) que el gobierno de Trump dio a conoce a finales del 2017, y de la Estrategia de Defensa Nacional (EDF) dada a conocer a comienzos del 2018, y ver que en ambos casos hay una profunda preocupación en Washington (y por lo tanto en la OTAN) por la guerra que están perdiendo en Siria, por la pérdida de influencia y de hegemonía regional y mundial del sistema de dominación económica, comercial y financiera que conocemos bajo la figura de “globalización neoliberal”, y el encogimiento del poder político (y del “soft power”), frente a lo que ambos documentos denominan como “potencias rivales” que no aceptan las reglas del juego de la (ya pérdida) hegemonía que EEUU logró con el desmembramiento de la Unión Soviética.
¿Cuáles son esas potencias rivales? Rusia y China, a la primera se la asedia con bases y armamentos, se le aplican sanciones tras sanciones y se la acusa de todo lo imaginable. A China, que ya es la segunda potencia mundial económicamente hablando y que puede poner en entredicho el sistema monetario basado en el dólar, se la ataca con aranceles sobre los laminados de acero y aluminio, y se la amenaza con sanciones por no respetar los derechos de propiedad intelectual, mientras avanzan planes para aumentar el cerco militar que existe en Asia.
Washington y sus aliados ven que el realismo y la serenidad de Moscú y Beijing frente a estas provocaciones es una irrefutable muestra de convicción en el camino que ambos países han escogido. No desconocen que la fortaleza para resistir los embates proviene de la cohesión social y política de esos países, lo cual en lugar de llevar a la adopción de políticas realistas sigue alimentando el irracional, obcecado y hasta rabioso clima político que reina en las cúpulas del imperio y de la mayoría de sus aliados.
En el fondo, y la historia me parece que lo confirma, no solamente a los imperios no les gustar perder, sino que raramente aprenden cómo perder sin enloquecerse. No en vano el historiador Eric Hobsbawm nos advirtió del peligro implícito en la decadencia del imperio estadounidense, que desde su creación utilizó la fuerza militar como instrumento de dominación.
Lo cierto es que hay que terminar con la globalización de este capitalismo imperialista si además de impedir las guerras y hasta un conflicto nuclear queremos solucionar los peligros fatales para la humanidad que son el cambio climático, la destrucción de los ecosistemas y la falta de desarrollo en África para alimentar y hacer vivir una multiplicación de su población, como señala el biólogo estadounidense Paul Erlich (7).
El plan A fracasó y casi seguro que el plan B también fracasará, pero debemos estar conscientes que en Washington, Londres, Tel Aviv y otras capitales del imperio tienen más planes para avivar tensiones, crear focos de guerra y de subversión (Venezuela, Irán, Corea del Norte y países de África están en la mira) que pueden adquirir dimensiones regionales y llevar a confrontaciones nucleares.
Lo que es menos seguro es que en lugar de aceptar la realidad, que el mundo unipolar terminó hace rato, y que en lugar de ladrar y lanzar amenazas en el Consejo de Seguridad de la ONU, los actuales dirigentes occidentales den muestras de realismo para crear un mundo multipolar que respete las diferencias y legítimos intereses de todos los países, y que permita a África y otras regiones desarrollarse para enfrentar la dura realidad que se nos viene encima.
Notas
1.- Un canadiense que trabajó para Cambridge Analytica revela la manipulación: https://www.rt.com/uk/422471-c
https://www.rt.com/uk/422438-c
2.- La historia y composición de Cambridge Analytica en Wikipedia: https://en.wikipedia.org/wiki
3.- Reportaje del Channel 4 News; (https://www.channel4.com/news
4.- Wall Street: https://www.wsj.com/articles/m
5.- The Times of Israel: https://www.timesofisrael.com/
6.- Christopher Wylie: https://in.reuters.com/article
7.- Paul Erlich. https://www.theguardian.com/ci
- Alberto Rabilotta es periodista argentino-canadiense.
https://www.alainet.org/es/art
"Rusia tiene muchos tentáculos": Departamento de Estado de EE.UU. compara a Moscú con un "monstruo"
Publicado: 28 mar 2018 05:00 GMT | Última actualización: 28 mar 2018 08:58 GMT - RT
En respuesta, la Embajada rusa en EE.UU.
recordó que la propaganda nazi ya utilizó metáforas de este tipo en el
pasado.
La
portavoz del Departamento de Estado de EE.UU., Heather Nauert, comparó a
Rusia con un monstruo de las profundidades del mar. En respuesta a
estas declaraciones, la Embajada rusa en EE.UU. recordó que la propaganda nazi ya utilizó metáforas de este tipo en el pasado.
En una sesión informativa de este martes, una periodista preguntó a Nauert si las próximas elecciones estadounidenses en noviembre serían más seguras después de la expulsión del país norteamericano de 60 diplomáticos rusos.
"No podemos decir que [debido a esta medida] las elecciones en EE.UU. vayan a ser seguras. Rusia tiene brazos largos, Rusia tiene muchos tentáculos. Creemos que van a seguir mostrando interés en nuestras elecciones, así como en las de otros países", aseguró Nauert y, para sorpresa de los reporteros, remató: "Es un monstruo de las profundidades del mar".
Unas horas más tarde, la Embajada de Rusia en Washington citó en su cuenta de Twitter las palabras de Nauert agregando un cartel antibolchevique de la Alemania nazi de la década de 1930. El cartel muestra una araña roja con un casco del Ejército Rojo 'apresando' el planeta acompañada de las palabras en alemán "bolchevismo" y "gran espectáculo antibolchevique".
Russia in USA 🇷🇺 @RusEmbUSA
"Hoy presenciamos 'el gran espectáculo antibolchevique' realizado por la representante oficial del Departamento de Estado", escribió la misión diplomática en su tuit.
En una sesión informativa de este martes, una periodista preguntó a Nauert si las próximas elecciones estadounidenses en noviembre serían más seguras después de la expulsión del país norteamericano de 60 diplomáticos rusos.
"No podemos decir que [debido a esta medida] las elecciones en EE.UU. vayan a ser seguras. Rusia tiene brazos largos, Rusia tiene muchos tentáculos. Creemos que van a seguir mostrando interés en nuestras elecciones, así como en las de otros países", aseguró Nauert y, para sorpresa de los reporteros, remató: "Es un monstruo de las profundidades del mar".
Unas horas más tarde, la Embajada de Rusia en Washington citó en su cuenta de Twitter las palabras de Nauert agregando un cartel antibolchevique de la Alemania nazi de la década de 1930. El cartel muestra una araña roja con un casco del Ejército Rojo 'apresando' el planeta acompañada de las palabras en alemán "bolchevismo" y "gran espectáculo antibolchevique".
Russia in USA 🇷🇺 @RusEmbUSA
Today, we witnessed “Grosse antibolschewistische Schau” performed by @statedeptspox:
“Russia has long arms; Russia has lots of tentacles... It’s a beast from the deep sea”
"Hoy presenciamos 'el gran espectáculo antibolchevique' realizado por la representante oficial del Departamento de Estado", escribió la misión diplomática en su tuit.
- Este lunes, EE.UU. decidió expulsar a doce empleados de la misión rusa ante la ONU y a otros 48 diplomáticos rusos que trabajan en el país norteamericano como respuesta al caso Skripal.
- Varios países de la OTAN y Europa también expulsaron a diplomáticos rusos, alegando su "solidaridad" con Londres como razón para tomar esta decisión.
- Hasta el momento, el Reino Unido, que responsabiliza a Rusia del envenenamiento del agente doble Serguéi Skripal y su hija Yulia en Salisbury el pasado 4 de marzo, no ha presentado ninguna prueba que avale sus acusaciones.
28 países y 0 pruebas: ¿Cómo el caso Skripal desembocó en una crisis diplomática sin precedentes?
Publicado: 26 mar 2018 18:51 GMT
| Última actualización: 28 mar 2018 12:18 GMT - RT
En un plazo de tan solo tres semanas, el trágico
suceso que se produjo en la ciudad británica de Salisbury, donde fueron
envenenados el ex doble agente ruso, Serguéi Skripal, y su hija Yulia,
ha desembocado en una crisis diplomática sin precedentes en la que se
encuentran involucrados más de 20 países.
Este 26 de marzo, EE.UU. anunció la expulsión de 60 diplomáticos rusos. Otros 26 países, entre ellos 18 Estados miembros de la Unión Europea (UE) han anunciado medidas similares, aunque a menor escala. ¿Cómo ha evolucionado el escándalo y por qué ha llevado a unas consecuencias tan graves?
El 4 de marzo, Serguéi Skripal, de 66 años, y su hija Yulia, de 33, fueron hallados inconscientes en un banco en el centro comercial The Maltings, en Salisbury, tras haber sido envenenados por una sustancia tóxica. Ambos fueron trasladados a un hospital en estado crítico. Pocos días después, se informó que se trataba de un envenenamiento deliberado con un agente nervioso, aunque no se reveló cuál era el veneno.
Sin embargo, en el 2010, el entonces presidente de Rusia, Dmitri Medvédev, le indultó junto a otros tres ciudadanos rusos condenados por espionaje a favor de Estados Unidos y el Reino Unido. Así, en el 2010 los cuatro fueron intercambiados por 10 personas retenidas por las autoridades estadounidenses acusadas de espiar a favor de Moscú. Tras su liberación, Skripal se refugió en territorio británico.
La jefa del Gobierno británico destacó que el ataque fue un acto directo del Estado ruso contra el Reino Unido o el Gobierno ruso permitió que este agente tóxico cayera en las manos equivocadas. "O fue un acto directo del Estado ruso contra nuestro país, o el Gobierno ruso perdió el control de este agente nervioso potencial y catastróficamente dañino y le permitió llegar a manos de otros", sugirió la primera ministra.
Rusia no proporcionó la información exigida debido a que no había obtenido ninguna muestra del agente neurotóxico utilizado contra Skripal. El jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, afirmó que según la Convención sobre armas químicas, el Reino Unido tenía que haberse dirigido directamente al país sospechoso de haber utilizado la sustancia, proporcionándole acceso a la misma.
Adicionalmente, Rusia presentó un proyecto de declaración breve y fáctico al Consejo de Seguridad de la ONU en el que se instaba a todos los países interesados a "consultar y cooperar en la investigación" para construir un "mundo libre de armas químicas", pero el Reino Unido bloqueó la propuesta. "Es obvio que se está ocultando la verdad", denunció la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, María Zajárova.
El 17 de marzo, en respuesta a Londres, el Gobierno ruso decidió tomar una medida recíproca y calificó de personas no gratas a 23 diplomáticos del Reino Unido.
"Les daré la opinión de un químico profesional: para que los especialistas británicos puedan con total confianza establecer que este gas es exactamente el Novichok, y no algún otro, ellos sin falta deben tener lo que se llama 'un estándar de control'. Para probar que se trata del compuesto en cuestión, hay que compararlo con el estándar correspondiente. Si los británicos dicen que se trata del gas Novichok, entonces a priori tienen un estándar de esta sustancia, así como su colección y su fórmula", explicó el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia.
"Desde los años 1970, en Europa Occidental se realizaban trabajos para desarrollar sustancias tóxicas de nueva generación. El Reino Unido era y sigue siendo uno de los países que están realizando dicho programa, y tiene unos conocimientos y una experiencia enorme en el desarrollo de estas sustancias", anunció a su vez el jefe de las Tropas de Protección Radiológica, Química y Biológica, Ígor Kiríllov. En cuanto al caso Skripal, Kiríllov afirmó que es posible crear gas Novichok usando un equipamiento especial y conociendo la fórmula publicada en el libro de Vil Mirzayánov en el 2008. En la obra también se describía en detalle el proceso de síntesis de dicha sustancia.
No obstante, el 23 de marzo, el Consejo Europeo adoptó una declaración sobre el caso Skripal en la que afirmaba compartir "la evaluación del Gobierno del Reino Unido", que considera "muy probable" que Rusia fuera la responsable del ataque, en el sentido de que "no hay una explicación alternativa plausible". "Mantenemos una solidaridad incondicional con el Reino Unido frente a este grave desafío a nuestra seguridad compartida", afirmó la declaración.
En respuesta, Moscú denunció que "la formulación empleada por la UE, que atribuye a Rusia la responsabilidad de lo ocurrido solo a partir de que no hay otra explicación alternativa verosímil, constituye otra acusación infundada contra nosotros". Según el Ministerio de Exteriores ruso, la UE "prefirió seguir el curso de la nueva campaña antirrusa lanzada por Londres y sus aliados transatlánticos con el objetivo evidente de poner un obstáculo más a la normalización de la situación en el continente europeo".
Alemania, Polonia y Francia co nfirmaron que cada país expulsará a cuatro diplomáticos rusos en relación con el caso Skripal. La República Checa, por su parte, decidió expulsar a tres diplomáticos rusos.
Lituania anunció que expulsará a tres, incluidos dos agregados militares, mientras que Letonia expulsará a otro y a un empleado de Aeroflot. Estonia, por su parte, anunció la expulsión del agregado militar de la Embajada rusa en el país báltico. Suecia, Rumania, Croa cia, Finlandia y Hungría anunciaron que expulsan a un funcionario de la diplomacia rusa, cada uno.
Dinamarca, así como los Países Bajos, Italia y España optaron por expulsar del país a dos funcionarios rusos cada uno.
El presidente de Ucrania, Piotr Poroshenko, anunció por su parte, que Kiev expulsa a 13 diplomáticos rusos. Medidas similares decidió tomar Canadá, que anunció la expulsión de cuatro diplomáticos de Moscú por el mismo motivo. Albania, por su parte, decidió enviar fuera de su territorio a dos funcionarios de la diplomacia rusa.
También se sumó Noruega y Macedonia, al anunciar la salida de uno y dos diplomáticos respectivamente.
El 27 de marzo, la televisión irlandesa RTÉ, con referencias al Gobierno nacional, anunció la expulsión de un diplomático ruso en relación con el incidente en Salisbury.
Horas después, el Ministerio de Exteriores de Moldavia anunció que su país expulsará a tres diplomáticos de Rusia por las mismas razones. Australia, por su parte, decidió enviar fuera de su territorio a dos diplomáticos rusos. Mientras tanto, Bélgica y Montenegro optaron por expulsar a un funcionario de la diplomacia rusa cada uno.
Mientras tanto, EE.UU. expulsó el mayor número de diplomáticos: 48 empleados de las sedes diplomáticas rusas así como 12 empleados de la misión de Rusia en la ONU. Además, el Gobierno de EE.UU. ordenó el cierre del Consulado de Rusia en Seattle.
"EE.UU. está destruyendo lo poco que quedaba de las relaciones ruso-estadounidenses" y tendrá "toda la responsabilidad de las consecuencias", respondió el embajador de Rusia en EE.UU., Anatoli Antónov. Antónov expresó "una firme protesta por las acciones ilegales de EE.UU." y subrayó que "hasta hoy, no existe ni una sola prueba de la injerencia de Rusia en la investigación del caso, ni de su participación en la tragedia que se produjo en Salisbury".
A su vez, el Ministerio de Exteriores de Rusia condenó este acto, que confirma "la tan mentada solidaridad con Londres" y denunció que "las autoridades del Reino Unido adoptaron una postura preconcebida, sesgada e hipócrita" al presentar acusaciones infundadas. "A pesar de nuestras reiteradas solicitudes a Londres, la parte rusa no dispone de ninguna información al respecto", criticó el Ministerio, que también prometió ofrecer una respuesta a este "paso hostil".
Desde Exteriores denunciaron que con el paso adoptado "los aliados del Reino Unido siguen ciegamente el principio de la unidad euroatlántica a expensas del sentido común, las normas del diálogo interestatal civilizado y los principios del derecho internacional".
Este 26 de marzo, EE.UU. anunció la expulsión de 60 diplomáticos rusos. Otros 26 países, entre ellos 18 Estados miembros de la Unión Europea (UE) han anunciado medidas similares, aunque a menor escala. ¿Cómo ha evolucionado el escándalo y por qué ha llevado a unas consecuencias tan graves?
El 4 de marzo, Serguéi Skripal, de 66 años, y su hija Yulia, de 33, fueron hallados inconscientes en un banco en el centro comercial The Maltings, en Salisbury, tras haber sido envenenados por una sustancia tóxica. Ambos fueron trasladados a un hospital en estado crítico. Pocos días después, se informó que se trataba de un envenenamiento deliberado con un agente nervioso, aunque no se reveló cuál era el veneno.
¿Quién es Serguéi Skripal?
En el 2004, el excoronel del Departamento General de Inteligencia de las Fuerzas Armadas de Rusia (GRU, por sus siglas en ruso), fue arrestado por el Servicio Federal de Seguridad ruso después de que se descubriera que durante su servicio en el Ejército en 1995, fue reclutado por los servicios de inteligencia del Reino Unido y les pasó información considerada secreto de Estado. En el 2006, el Tribunal Militar del Distrito de Moscú condenó a Skripal a cumplir 13 años en una prisión de máxima seguridad.Sin embargo, en el 2010, el entonces presidente de Rusia, Dmitri Medvédev, le indultó junto a otros tres ciudadanos rusos condenados por espionaje a favor de Estados Unidos y el Reino Unido. Así, en el 2010 los cuatro fueron intercambiados por 10 personas retenidas por las autoridades estadounidenses acusadas de espiar a favor de Moscú. Tras su liberación, Skripal se refugió en territorio británico.
Ultimátum de 36 horas
A pesar de que la investigación del caso acababa de comenzar, eso no impidió que varios medios occidentales empezaran a especular enseguida sobre el supuesto papel de Rusia en el suceso. No obstante, el 12 de marzo, fue la propia primera ministra británica, Theresa May, quien, sin presentar pruebas al respecto, afirmó que era "muy probable que Rusia fuera responsable" del envenenamiento. Según May, el ataque se realizó utilizando "un agente neurotóxico de uso militar del tipo producido en Rusia", llamado 'Novichok', y dio a Moscú un ultimátum de 36 horas exigiendo explicaciones.La jefa del Gobierno británico destacó que el ataque fue un acto directo del Estado ruso contra el Reino Unido o el Gobierno ruso permitió que este agente tóxico cayera en las manos equivocadas. "O fue un acto directo del Estado ruso contra nuestro país, o el Gobierno ruso perdió el control de este agente nervioso potencial y catastróficamente dañino y le permitió llegar a manos de otros", sugirió la primera ministra.
Rusia no proporcionó la información exigida debido a que no había obtenido ninguna muestra del agente neurotóxico utilizado contra Skripal. El jefe de la diplomacia rusa, Serguéi Lavrov, afirmó que según la Convención sobre armas químicas, el Reino Unido tenía que haberse dirigido directamente al país sospechoso de haber utilizado la sustancia, proporcionándole acceso a la misma.
Expulsión de los diplomáticos
El 14 de marzo, May calificó a Rusia como "culpable" del incidente y anunció medidas en contra del país, incluida la expulsión de 23 diplomáticos. Al mismo tiempo, a pesar de que Rusia se mostró abierta desde el primer momento a colaborar en la investigación del caso, Londres se negó a proporcionarle a Moscú acceso a los materiales de la investigación sin explicar claramente los motivos. "El argumento principal de Theresa May en cuanto a la culpabilidad de Rusia es 'highly likely' [altamente probable, en español, fue la expresión utilizada por la premier británica]", ironizó Serguéi Lavrov.Adicionalmente, Rusia presentó un proyecto de declaración breve y fáctico al Consejo de Seguridad de la ONU en el que se instaba a todos los países interesados a "consultar y cooperar en la investigación" para construir un "mundo libre de armas químicas", pero el Reino Unido bloqueó la propuesta. "Es obvio que se está ocultando la verdad", denunció la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, María Zajárova.
El 17 de marzo, en respuesta a Londres, el Gobierno ruso decidió tomar una medida recíproca y calificó de personas no gratas a 23 diplomáticos del Reino Unido.
El agente tóxico Novichok
A pesar de que May asegurara que el agente tóxico Novichok, supuestamente utilizado contra Skripal y su hija, fue "producido en Rusia", Moscú denunció que tanto el Reino Unido como EE.UU. trabajaron en el desarrollo de esta sustancia y existen razones para pensar que el agente podría haber sido producido en el propio territorio británico."Les daré la opinión de un químico profesional: para que los especialistas británicos puedan con total confianza establecer que este gas es exactamente el Novichok, y no algún otro, ellos sin falta deben tener lo que se llama 'un estándar de control'. Para probar que se trata del compuesto en cuestión, hay que compararlo con el estándar correspondiente. Si los británicos dicen que se trata del gas Novichok, entonces a priori tienen un estándar de esta sustancia, así como su colección y su fórmula", explicó el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia.
"Desde los años 1970, en Europa Occidental se realizaban trabajos para desarrollar sustancias tóxicas de nueva generación. El Reino Unido era y sigue siendo uno de los países que están realizando dicho programa, y tiene unos conocimientos y una experiencia enorme en el desarrollo de estas sustancias", anunció a su vez el jefe de las Tropas de Protección Radiológica, Química y Biológica, Ígor Kiríllov. En cuanto al caso Skripal, Kiríllov afirmó que es posible crear gas Novichok usando un equipamiento especial y conociendo la fórmula publicada en el libro de Vil Mirzayánov en el 2008. En la obra también se describía en detalle el proceso de síntesis de dicha sustancia.
"Solidaridad incondicional con el Reino Unido"
Sin embargo, la falta de argumentos convincentes no impidió que varios países expresaran su apoyo al Reino Unido, incluida Alemania, Francia y EE.UU. "¿Basándose en qué se hacen semejantes declaraciones? ¿Les entregaron datos de algún tipo? […] A nosotros nadie nos ha entregado nada, a la OPAQ nadie le ha entregado nada. Existe lo que se llaman pruebas, materiales, muestras de la sustancia encontrada. ¿Alguien además de las autoridades británicas tiene estos datos? Nadie", expuso Zajárova. "¿Cómo puedes solidarizarte con algo que no comprendes porque no tienes datos originales concretos?", se preguntó la diplomática.No obstante, el 23 de marzo, el Consejo Europeo adoptó una declaración sobre el caso Skripal en la que afirmaba compartir "la evaluación del Gobierno del Reino Unido", que considera "muy probable" que Rusia fuera la responsable del ataque, en el sentido de que "no hay una explicación alternativa plausible". "Mantenemos una solidaridad incondicional con el Reino Unido frente a este grave desafío a nuestra seguridad compartida", afirmó la declaración.
En respuesta, Moscú denunció que "la formulación empleada por la UE, que atribuye a Rusia la responsabilidad de lo ocurrido solo a partir de que no hay otra explicación alternativa verosímil, constituye otra acusación infundada contra nosotros". Según el Ministerio de Exteriores ruso, la UE "prefirió seguir el curso de la nueva campaña antirrusa lanzada por Londres y sus aliados transatlánticos con el objetivo evidente de poner un obstáculo más a la normalización de la situación en el continente europeo".
27 países expulsan a diplomáticos rusos
El escándalo alcanzó su auge este 26 de marzo, cuando EE.UU., 16 Estados miembros de la UE, así como Canadá, Ucrania, Noruega, Albania y Macedonia decidieron expulsar a diplomáticos rusos del territorio de sus respectivos países.Alemania, Polonia y Francia co
Lituania anunció que expulsará a tres, incluidos dos agregados militares, mientras que Letonia expulsará a otro y a un empleado de Aeroflot. Estonia, por su parte, anunció la expulsión del agregado militar de la Embajada rusa en el país báltico. Suecia, Rumania, Croa
Dinamarca, así como los Países Bajos, Italia y España optaron por expulsar del país a dos funcionarios rusos cada uno.
El presidente de Ucrania, Piotr Poroshenko, anunció por su parte, que Kiev expulsa a 13 diplomáticos rusos. Medidas similares decidió tomar Canadá, que anunció la expulsión de cuatro diplomáticos de Moscú por el mismo motivo. Albania, por su parte, decidió enviar fuera de su territorio a dos funcionarios de la diplomacia rusa.
También se sumó Noruega y Macedonia, al anunciar la salida de uno y dos diplomáticos respectivamente.
El 27 de marzo, la televisión irlandesa RTÉ, con referencias al Gobierno nacional, anunció la expulsión de un diplomático ruso en relación con el incidente en Salisbury.
Horas después, el Ministerio de Exteriores de Moldavia anunció que su país expulsará a tres diplomáticos de Rusia por las mismas razones. Australia, por su parte, decidió enviar fuera de su territorio a dos diplomáticos rusos. Mientras tanto, Bélgica y Montenegro optaron por expulsar a un funcionario de la diplomacia rusa cada uno.
Mientras tanto, EE.UU. expulsó el mayor número de diplomáticos: 48 empleados de las sedes diplomáticas rusas así como 12 empleados de la misión de Rusia en la ONU. Además, el Gobierno de EE.UU. ordenó el cierre del Consulado de Rusia en Seattle.
"EE.UU. está destruyendo lo poco que quedaba de las relaciones ruso-estadounidenses" y tendrá "toda la responsabilidad de las consecuencias", respondió el embajador de Rusia en EE.UU., Anatoli Antónov. Antónov expresó "una firme protesta por las acciones ilegales de EE.UU." y subrayó que "hasta hoy, no existe ni una sola prueba de la injerencia de Rusia en la investigación del caso, ni de su participación en la tragedia que se produjo en Salisbury".
A su vez, el Ministerio de Exteriores de Rusia condenó este acto, que confirma "la tan mentada solidaridad con Londres" y denunció que "las autoridades del Reino Unido adoptaron una postura preconcebida, sesgada e hipócrita" al presentar acusaciones infundadas. "A pesar de nuestras reiteradas solicitudes a Londres, la parte rusa no dispone de ninguna información al respecto", criticó el Ministerio, que también prometió ofrecer una respuesta a este "paso hostil".
Desde Exteriores denunciaron que con el paso adoptado "los aliados del Reino Unido siguen ciegamente el principio de la unidad euroatlántica a expensas del sentido común, las normas del diálogo interestatal civilizado y los principios del derecho internacional".
Casi 160 países creen que Londres debe mostrar pruebas de la participación rusa en el caso Skripal
Publicado: 27 mar 2018 21:27 GMT | Última actualización: 27 mar 2018 21:52 GMT - RT
Según la Embajada rusa en el Reino Unido,
numerosos países del mundo "no occidental" entienden que no se pueden
dar por sentadas las palabras de Londres sin prueba alguna.
Casi
160 países que no pertenecen al "bloque occidental" creen que Londres
debe presentar pruebas de que Rusia estuvo involucrada en el
envenenamiento del exagente doble Serguéi Skripal en Salisbury, indicó
el secretario de prensa de la Embajada rusa en Londres.
Tendría que presentar todas las pruebas a Rusia, la comunidad internacional y británica"Prestamos atención a las declaraciones de la primera ministra [Theresa May]. Los matices pueden variar, pero lo más importante sigue siendo lo mismo. Incluso si May dijo que estaba absolutamente segura de que Rusia era responsable del incidente en Salisbury, tendría que presentar todas las pruebas a Rusia, la comunidad internacional y británica. Esta es la opinión de casi 160 países que no son miembros del bloque occidental. Es obvio que en el resto del mundo no se dan por sentadas las palabras del Reino Unido", dijo el portavoz de la misión diplomática rusa, citado por RIA Novosti.
- Este lunes, EE.UU. decidió expulsar a doce empleados de la misión rusa ante la ONU y a otros 48 diplomáticos rusos que trabajan en el país norteamericano como respuesta al caso Skripal.
- Varios países de la OTAN y Europa también expulsaron a diplomáticos rusos, alegando su "solidaridad" con Londres como razón para tomar esta decisión.
- Hasta el momento, el Reino Unido, que acusa a Rusia del envenenamiento del agente doble Serguéi Skripal y su hija Yulia en Salisbury el pasado 4 de marzo, no ha presentado ninguna prueba.
- A pesar de que Rusia se mostró abierta desde el primer momento a colaborar en la investigación del caso, Londres no solo se negó a cooperar con Moscú directamente, sino tampoco a través de intermediarios, algo que constituye una "grave violación" de la Convención sobre la prohibición de las armas químicas, denunció el ministro de Relaciones Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.
"Quiero ver los hechos": El presidente checo insta a Londres a mostrar pruebas sobre el caso Skripal
Publicado: 28 mar 2018 00:44 GMT | Última actualización: 28 mar 2018 01:30 GMT - RT
Praga expulsó a tres diplomáticos rusos,
solidarizándose así con Londres, que acusó a Moscú del envenenamiento de
Skripal sin presentar prueba alguna.
El Reino Unido debe proporcionar pruebas sólidas de la supuesta participación de Rusia en el caso Skripal, afirmó el presidente checo, Milos Zeman.
"Quiero ver los hechos. Sin duda, me alegrará si el Reino Unido presenta algunas evidencias de que los rusos querían matar al doble agente Skripal", dijo el mandatario a la cadena Blesk.
Por otra parte, afirmó no oponerse a la decisión de Londres de expulsar a diplomáticos rusos, pero cree que eso fue "un poco superfluo".
"Déjalo estar. Con el tiempo volverán", señaló el líder checo, quien también disipó los rumores de que el Kremlin se puso en contacto con él en un intento de influir en su postura al respecto. "Nadie de Moscú se puso en contacto conmigo, ni me visitó", dijo.
El Gobierno checo, a su vez, expulsó a tres diplomáticos rusos en manifestación de solidaridad con el Reino Unido, que tomó esta medida contra Moscú por el caso Skripal sin presentar ninguna prueba de la supuesta participación rusa en el incidente del pasado 4 marzo en Salisbury.
Por su parte, la Embajada rusa en Londres destacó que casi 160 países que no pertenecen al "bloque occidental" creen que el Reino Unido debe presentar pruebas de que Rusia estuvo involucrada en el envenenamiento del exagente doble.
"No creo en eso, pero siempre es mejor tener información de contrainteligencia que confirme que estas acusaciones son falsas, que vivir en la creencia de que podrían ser ciertas", dijo el político.
"Quiero ver los hechos. Sin duda, me alegrará si el Reino Unido presenta algunas evidencias de que los rusos querían matar al doble agente Skripal", dijo el mandatario a la cadena Blesk.
Por otra parte, afirmó no oponerse a la decisión de Londres de expulsar a diplomáticos rusos, pero cree que eso fue "un poco superfluo".
"Déjalo estar. Con el tiempo volverán", señaló el líder checo, quien también disipó los rumores de que el Kremlin se puso en contacto con él en un intento de influir en su postura al respecto. "Nadie de Moscú se puso en contacto conmigo, ni me visitó", dijo.
El Gobierno checo, a su vez, expulsó a tres diplomáticos rusos en manifestación de solidaridad con el Reino Unido, que tomó esta medida contra Moscú por el caso Skripal sin presentar ninguna prueba de la supuesta participación rusa en el incidente del pasado 4 marzo en Salisbury.
Por su parte, la Embajada rusa en Londres destacó que casi 160 países que no pertenecen al "bloque occidental" creen que el Reino Unido debe presentar pruebas de que Rusia estuvo involucrada en el envenenamiento del exagente doble.
Origen del agente nervioso
Este lunes, el presidente Zeman ordenó a las agencias de inteligencia del país que investigaran las acusaciones de que el agente nervioso que presuntamente se usó para envenenar a Skripal podría haberse originado en la República Checa."No creo en eso, pero siempre es mejor tener información de contrainteligencia que confirme que estas acusaciones son falsas, que vivir en la creencia de que podrían ser ciertas", dijo el político.
Moscú califica de "fracaso total" de May las diapositivas británicas sobre el caso Skripal
Publicado: 27 mar 2018 22:43 GMT | Última actualización: 27 mar 2018 22:57 GMT - RT
La portavoz de la Cancillería rusa, María
Zajárova, lamenta que las severas decisiones diplomáticas se hayan
tomado con base en seis diapositivas.
Moscú
formuló una fuerte crítica a la presentación que sobre el caso Skripal
realizó la misión diplomática de Reino Unido en Rusia ante
representantes de otras embajadas extranjeras, el pasado 22 de marzo. La
portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ruso, María Zajárova, lamentó que varias naciones decidieran expulsar a diplomáticos rusos con base en ese documento, divulgado por Kommersant.
"Esto es un fracaso total de [la primera ministra británica] Theresa May", aseveró Zajárova respecto a las diapositivas que conformaron la presentación, y que no brindaron ninguna prueba concreta que inculpe a Moscú en el envenenamiento del exagente doble ruso Serguéi Skripal y su hija Yulia.
"Se ha revelado la mayor manipulación de la opinión pública mundial, en la que están involucradas las autoridades británicas. Juzguen ustedes: con base en seis diapositivas fueron tomadas decisiones sobre la responsabilidad de un Estado en un ataque químico", agregó la portavoz a través de Facebook.
Por
su parte, el embajador ruso en Reino Unido, Alexánder Yakovenko,
convocó este martes a una reunión análoga de diplomáticos
internacionales, donde los mismos participantes le informaron sobre la falta de pruebas
por parte de Londres. "Las preguntas y reacciones de los participantes
confirmaron que la parte británica no proporcionó a sus colegas ningún
hecho sobre lo que sucedió en Salisbury", acotó Yakovenko, citado por RIA Novosti.
"Esta línea genera desconcierto respecto al cuerpo diplomático de Londres y, por lo tanto, respecto a la comunidad internacional", agregó el diplomático, enfatizando que la parte británica se niega a cooperar con Moscú para investigar el incidente del pasado 4 de marzo, a pesar de la disposición reiterada por Rusia en ese sentido.
Al respecto, la Embajada rusa en Reino Unido precisó que Londres tendría que presentar todas las pruebas a Rusia y a la comunidad internacional, incluso si May dijo que estaba absolutamente segura de que Moscú era responsable del incidente. "Esta es la opinión de casi 160 países que no son miembros del bloque occidental", detalló la misión diplomática rusa en ese país.
"Esto es un fracaso total de [la primera ministra británica] Theresa May", aseveró Zajárova respecto a las diapositivas que conformaron la presentación, y que no brindaron ninguna prueba concreta que inculpe a Moscú en el envenenamiento del exagente doble ruso Serguéi Skripal y su hija Yulia.
"Se ha revelado la mayor manipulación de la opinión pública mundial, en la que están involucradas las autoridades británicas. Juzguen ustedes: con base en seis diapositivas fueron tomadas decisiones sobre la responsabilidad de un Estado en un ataque químico", agregó la portavoz a través de Facebook.
"Esta línea genera desconcierto respecto al cuerpo diplomático de Londres y, por lo tanto, respecto a la comunidad internacional", agregó el diplomático, enfatizando que la parte británica se niega a cooperar con Moscú para investigar el incidente del pasado 4 de marzo, a pesar de la disposición reiterada por Rusia en ese sentido.
Al respecto, la Embajada rusa en Reino Unido precisó que Londres tendría que presentar todas las pruebas a Rusia y a la comunidad internacional, incluso si May dijo que estaba absolutamente segura de que Moscú era responsable del incidente. "Esta es la opinión de casi 160 países que no son miembros del bloque occidental", detalló la misión diplomática rusa en ese país.
"El frenesí contra Rusia demuestra que el caso Skripal es solo un pretexto"
Publicado: 27 mar 2018 04:22 GMT | Última actualización: 27 mar 2018 04:26 GMT - RT
Según Anatoli Antónov, hay sospechas de que
Washington y Londres coordinaron y planearon la crisis diplomática con
Moscú, y que lo sucedido al exagente Skripal fue solo un detonante.
El amplio esfuerzo coordinado que condujo a la mayor expulsión colectiva de diplomáticos rusos en la historia fue probablemente premeditado. Así lo afirmó el embajador ruso en EE.UU., Anatoli Antónov, precisando que el envenenamiento del agente doble Serguéi Skripal habría sido solo un detonante.
"La escala del daño infligido y la campaña de información que le precedió sugieren que lo más probable es que se planificara con antelación, y que simplemente fue pospuesto para el momento adecuado", aseveró Antónov, según le cita la embajada a través de su cuenta en Facebook.
La primera ministra británica, Theresa May, había afirmado anteriormente s in fundamentación alguna que
era "muy probable que Rusia fuera responsable" de lo ocurrido al
exagente y su hija Yulia, quienes se encuentran en estado crítico tras
el ataque sufrido el pasado 4 de marzo en la ciudad británica de
Salisbury.
"La ausencia de hechos que confirmen las acusaciones de Washington y Londres en contra nuestra no puede dejar de suscitar sospechas de una estrecha coordinación y planificación conjunta de lo sucedido", señaló el embajador. Apuntó además a sus esfuerzos por utilizar el frenesí en torno al caso Skripal para sus propios intereses.
"Los problemas internos de los que Washington y Londres intentan desviar la atención con la 'amenaza rusa', no irán a ninguna parte. A nuestros oponentes no les gusta que Rusia sea fuerte y poderosa, capacidades que han sido demostradas recientemente", acotó Antónov.
Este lunes, Washington decidió expu lsar a 60 diplomáticos rusos por el caso Skripal, además de ordenar el cierre del consulado ruso en Seattle. Otros 22 países, entre ellos 16 Estados miembros de la Unión Europea, anunciaron medidas similares, aunque a menor escala.
"La escala del daño infligido y la campaña de información que le precedió sugieren que lo más probable es que se planificara con antelación, y que simplemente fue pospuesto para el momento adecuado", aseveró Antónov, según le cita la embajada a través de su cuenta en Facebook.
La primera ministra británica, Theresa May, había afirmado anteriormente s
"La ausencia de hechos que confirmen las acusaciones de Washington y Londres en contra nuestra no puede dejar de suscitar sospechas de una estrecha coordinación y planificación conjunta de lo sucedido", señaló el embajador. Apuntó además a sus esfuerzos por utilizar el frenesí en torno al caso Skripal para sus propios intereses.
"Los problemas internos de los que Washington y Londres intentan desviar la atención con la 'amenaza rusa', no irán a ninguna parte. A nuestros oponentes no les gusta que Rusia sea fuerte y poderosa, capacidades que han sido demostradas recientemente", acotó Antónov.
Este lunes, Washington decidió expu
EE.UU. expulsa a 60 diplomáticos rusos por el caso Skripal
Publicado: 26 mar 2018 13:02 GMT | Última actualización: 26 mar 2018 17:30 GMT - RT
Además, el Gobierno de EE.UU. ha ordenado el cierre del consulado de Rusia en Seattle.
EE.UU. ha decidido expulsar a 60 diplomáticos rusos por el caso Skripal, incluidos 12 empleados de la misión de Rusia en la ONU.
Además, el Gobierno de EE.UU. ha ordenado el cierre del consulado de Rusia en Seattle. "Hoy, el presidente Donald Trump ha ordenado la expulsión de decenas de oficiales de Inteligencia de Rusia de EE.UU. y el cierre del consulado ruso en Seattle debido a su proximidad a una de nuestras bases de submarinos y [la compañía] Boeing", ha anunciado la Casa Blanca en un comunicado.
La Casa Blanca ha afirmado que EE.UU. "toma esta acción junto con nuestros aliados de la OTAN y los socios en todo el mundo en respuesta al uso de un arma química de grado militar por parte de Rusia en el territorio de Reino Unido".
En ese texto, Washington ha indicado que "EE.UU. está preparado para cooperar con el fin de construir una mejor relación" con los rusos, "pero eso solo puede ocurrir con un cambio en el comportamiento del Gobierno de Rusia".
Asimismo, ese diplomatico ha precisado que Rusia cerrará su consulado en Seattle el 30 de marzo. Antónov ha agregado que entre los expulsados estarán 46 diplomáticos de Washington y dos del Consulado General de Nueva York.
"EE.UU. está destruyendo lo poco que quedaba de las relaciones rusoestadounidenses" y tendrá "toda la responsabilidad de las consecuencias", ha expresado el embajador de Rusia en territorio estadounidense.
Antónov ha expresado "una firme protesta por las acciones ilegales de EE.UU." y ha subrayado que "hasta hoy, no existe ni una prueba sola de la injerencia Rusia en la investigación del caso ni de su participación en la tragedia que se produjo en Salisbury".
A su vez, el Ministerio de Exteriores de Rusia ha condenado este acto que confirma "la tan mentada solidaridad con Londres" y ha denunciado que "las autoridades de Reino Unido han adoptado una postura preconcebida, sesgada e hipócrita" al presentar acusaciones infundadas.
"A pesar de nuestras reiteradas solicitudes a Londres, la parte rusa no dispone de ninguna información al respecto", ha criticado ese organismo oficial de Rusia, que también ha prometido ofrecer una respuesta a este "paso hostil".
A pesar de que Rusia se mostró abierta desde el primer momento a colaborar en la investigación del caso, Londres no solo se negó a cooperar con Moscú directamente, sino tampoco a través de intermediarios, algo que constituye una "grave violación" de la Convención sobre la prohibición de las armas químicas, según denunció Lavrov. "Es obvio que se está ocultando la verdad", criticó a su vez la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova.
Por otra parte, pese a que May asegurara que el agente tóxico Novichok, supuestamente utilizado contra Skripal y su hija, fue "producido en Rusia", Moscú ha denunciado que tanto el Reino Unido como EE.UU. trabajaron en el desarrollo de esta sustancia y existen razones para pensar que el agente podría haber sido producido en el propio territorio británico.
"Para probar que se trata del compuesto en cuestión, hay que compararlo con el estándar correspondiente. Si los británicos dicen que se trata del gas Novichok, entonces, a priori, tienen un estándar de esta sustancia, así como su colección y su fórmula", explicó el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia.
Sin embargo, la falta de argumentos convincentes no impidió que varios países expresaran su apoyo al Reino Unido. "¿Basándose en qué se hacen semejantes declaraciones? ¿Les entregaron datos de algún tipo? […] A nosotros nadie nos ha entregado nada, a la OPAQ nadie le ha entregado nada. Existe lo que se llaman pruebas, materiales, muestras de la sustancia encontrada. ¿Alguien además de las autoridades británicas tiene estos natos? Nadie", expuso Zajárova. "¿Cómo puedes solidarizarte con algo que no comprendes porque no tienes datos originales concretos?", se preguntó la diplomática.
Mientras tanto, el exagente doble de inteligencia Serguéi Skripal y su hija Yulia, envenenados en la ciudad británica de Salisbury el 4 de marzo, siguen en un estado crítico. El jefe de la diplomacia rusa ha expresado la esperanza de que cuando se recuperen, puedan "arrojar luz" sobre lo ocurrido.
Además, el Gobierno de EE.UU. ha ordenado el cierre del consulado de Rusia en Seattle. "Hoy, el presidente Donald Trump ha ordenado la expulsión de decenas de oficiales de Inteligencia de Rusia de EE.UU. y el cierre del consulado ruso en Seattle debido a su proximidad a una de nuestras bases de submarinos y [la compañía] Boeing", ha anunciado la Casa Blanca en un comunicado.
La Casa Blanca ha afirmado que EE.UU. "toma esta acción junto con nuestros aliados de la OTAN y los socios en todo el mundo en respuesta al uso de un arma química de grado militar por parte de Rusia en el territorio de Reino Unido".
En ese texto, Washington ha indicado que "EE.UU. está preparado para cooperar con el fin de construir una mejor relación" con los rusos, "pero eso solo puede ocurrir con un cambio en el comportamiento del Gobierno de Rusia".
"EE.UU. está destruyendo lo poco que quedaba de las relaciones rusoestadounidenses"
"No se pueden dejar sin respuesta las acciones provocadoras de Washington", ha declarado por su parte el embajador de Rusia en EE.UU., Anatoli Antónov.Asimismo, ese diplomatico ha precisado que Rusia cerrará su consulado en Seattle el 30 de marzo. Antónov ha agregado que entre los expulsados estarán 46 diplomáticos de Washington y dos del Consulado General de Nueva York.
"EE.UU. está destruyendo lo poco que quedaba de las relaciones rusoestadounidenses" y tendrá "toda la responsabilidad de las consecuencias", ha expresado el embajador de Rusia en territorio estadounidense.
Antónov ha expresado "una firme protesta por las acciones ilegales de EE.UU." y ha subrayado que "hasta hoy, no existe ni una prueba sola de la injerencia Rusia en la investigación del caso ni de su participación en la tragedia que se produjo en Salisbury".
A su vez, el Ministerio de Exteriores de Rusia ha condenado este acto que confirma "la tan mentada solidaridad con Londres" y ha denunciado que "las autoridades de Reino Unido han adoptado una postura preconcebida, sesgada e hipócrita" al presentar acusaciones infundadas.
"A pesar de nuestras reiteradas solicitudes a Londres, la parte rusa no dispone de ninguna información al respecto", ha criticado ese organismo oficial de Rusia, que también ha prometido ofrecer una respuesta a este "paso hostil".
Acusaciones infundadas
La crisis diplomática se desencadenó después de que la primera ministra británica, Theresa May, afirmara de manera infundada que era "muy probable que Rusia fuera responsable" del envenenamiento. Al mismo tiempo, Londres se negó a proporcionarle a Moscú acceso a los materiales de la investigación sin explicar claramente los motivos. "El argumento principal de Theresa May en cuanto a la culpabilidad de Rusia es 'highly likely' [altamente probable, en español, la expresión utilizada por la 'premier' británica]", ironizó el ministro de Exteriores ruso, Serguéi Lavrov.A pesar de que Rusia se mostró abierta desde el primer momento a colaborar en la investigación del caso, Londres no solo se negó a cooperar con Moscú directamente, sino tampoco a través de intermediarios, algo que constituye una "grave violación" de la Convención sobre la prohibición de las armas químicas, según denunció Lavrov. "Es obvio que se está ocultando la verdad", criticó a su vez la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova.
Por otra parte, pese a que May asegurara que el agente tóxico Novichok, supuestamente utilizado contra Skripal y su hija, fue "producido en Rusia", Moscú ha denunciado que tanto el Reino Unido como EE.UU. trabajaron en el desarrollo de esta sustancia y existen razones para pensar que el agente podría haber sido producido en el propio territorio británico.
"Para probar que se trata del compuesto en cuestión, hay que compararlo con el estándar correspondiente. Si los británicos dicen que se trata del gas Novichok, entonces, a priori, tienen un estándar de esta sustancia, así como su colección y su fórmula", explicó el representante permanente de Rusia ante la ONU, Vasili Nebenzia.
Sin embargo, la falta de argumentos convincentes no impidió que varios países expresaran su apoyo al Reino Unido. "¿Basándose en qué se hacen semejantes declaraciones? ¿Les entregaron datos de algún tipo? […] A nosotros nadie nos ha entregado nada, a la OPAQ nadie le ha entregado nada. Existe lo que se llaman pruebas, materiales, muestras de la sustancia encontrada. ¿Alguien además de las autoridades británicas tiene estos natos? Nadie", expuso Zajárova. "¿Cómo puedes solidarizarte con algo que no comprendes porque no tienes datos originales concretos?", se preguntó la diplomática.
Mientras tanto, el exagente doble de inteligencia Serguéi Skripal y su hija Yulia, envenenados en la ciudad británica de Salisbury el 4 de marzo, siguen en un estado crítico. El jefe de la diplomacia rusa ha expresado la esperanza de que cuando se recuperen, puedan "arrojar luz" sobre lo ocurrido.
"El cierre del consulado ruso en Seattle es una incautación abierta de propiedad rusa por EE.UU."
Publicado: 28 mar 2018 21:17 GMT | Última actualización: 28 mar 2018 21:44 GMT - RT
Tras la decisión de Washington, muchos
empleados del consulado ruso en Seattle tendrán que regresar a Rusia.
El
cierre de la residencia del cónsul general de Rusia en Seattle es una
incautación abierta de una propiedad rusa por parte de las autoridades
de EE.UU., dijo a RIA Novosti el cónsul consejero Halit Aisin.
Aisin agregó que parte del personal del consulado general de Rusia en la ciudad estadounidense "será redistribuido" entre los consulados generales en Nueva York y Houston, así como en la Embajada en Washington. No obstante, numerosos empleados se verán obligados a "regresar a Rusia".
Los archivos del consulado de Seattle también serán enviados a la Embajada rusa en la capital de EE.UU.
El Departamento de Estado de EE.UU. prometió "garantizar la seguridad" de las instalaciones del consulado ruso en Seattle, indicó un representante oficial a RIA Novosti.
Según Aisin, la residencia del cónsul general ruso en Seattle correrá la misma suerte que la del consulado de San Francisco, cuyas actividades fueron suspendidas por el Gobierno estadounidense en septiembre pasado.
Este lunes, Washington decidió expulsar a 60 diplomáticos rusos por el caso Skripal, además de ordenar el cierre del Consulado ruso en Seattle. Otros países, entre ellos varios Estados miembros de la Unión Europea, anunciaron medidas similares, aunque a menor escala. El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, prometió responder a "este descaro".
Aisin agregó que parte del personal del consulado general de Rusia en la ciudad estadounidense "será redistribuido" entre los consulados generales en Nueva York y Houston, así como en la Embajada en Washington. No obstante, numerosos empleados se verán obligados a "regresar a Rusia".
Los archivos del consulado de Seattle también serán enviados a la Embajada rusa en la capital de EE.UU.
El Departamento de Estado de EE.UU. prometió "garantizar la seguridad" de las instalaciones del consulado ruso en Seattle, indicó un representante oficial a RIA Novosti.
Según Aisin, la residencia del cónsul general ruso en Seattle correrá la misma suerte que la del consulado de San Francisco, cuyas actividades fueron suspendidas por el Gobierno estadounidense en septiembre pasado.
Este lunes, Washington decidió expulsar a 60 diplomáticos rusos por el caso Skripal, además de ordenar el cierre del Consulado ruso en Seattle. Otros países, entre ellos varios Estados miembros de la Unión Europea, anunciaron medidas similares, aunque a menor escala. El ministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Lavrov, prometió responder a "este descaro".
14 países de la Unión Europea, Canadá y Ucrania expulsan a diplomáticos rusos por el caso Skripal
Publicado: 26 mar 2018 12:59 GMT | Última actualización: 26 mar 2018 15:56 GMT - RT
Los ministerios de Exteriores de varios
Estados europeos, así como de Canadá y Ucrania, han confirmado la
expulsión de diplomáticos rusos en relación con el caso Skripal.
Este
26 de marzo 14 Estados miembros de la UE han decidido expulsar a
diplomáticos rusos del territorio de sus respectivos países en
consonancia con las medidas adoptadas por el Reino Unido en el marco del
caso Skripal, ha anunciado en su cuenta de Twitter el ex primer ministro de Polonia y actual presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk.
"No se descartan medidas adicionales, que incluyan más expulsiones en los próximos días, semanas", ha añadido Tusk.
Alemania, Polonia y Francia han confirmado que cada país expulsará a cuatro diplomáticos rusos en relación con el caso Skripal. La República Checa, por su parte, ha decidido expulsar a tres diplomáticos rusos.
Lituania anuncia que expulsará a tres, mientras que Letonia expulsará a otro. Estonia, por su parte, anuncia la expulsión del agregado militar de la Embajada rusa en el país báltico. Suecia, Rumania, Croacia y Finlandia han anunciado que expulsan a un funcionario de la diplomacia rusa, cada uno.
Dinamarca, así como los Países Bajos e Italia, han optado por expulsar del país a dos funcionarios rusos cada uno. La agencia Europa Press informa que España está considerando la expulsión de dos diplomáticos rusos.
El presidente de Ucrania, Piotr Poroshenko, ha anunciado por su parte, que Kiev expulsa a 13 diplomáticos rusos. Medidas similares ha decidido tomar Canadá, que ha anunciado la expulsión de cuatro diplomáticos de Moscú por el mismo motivo. Albania, por su parte, ha decidido enviar fuera de su territorio a dos funcionarios de la diplomacia rusa.
Mientras que EE.UU. ha decidido expulsar a 60 diplomáticos rusos, incluidos 12 empleados de la misión de Rusia en la ONU.
"Consideramos que este paso es hostil y que no cumple con las tareas y los intereses para establecer las causas y buscar a los culpables del incidente que ocurrió este 4 de marzo en la ciudad de Salisbury", reza el comunicado de la Cancillería rusa, publicado en su sitio web.
"El gesto provocativo de la decantada solidaridad con Londres de estos países, que van a la zaga de las autoridades británicas en el llamado 'caso Skripal', sin haberse esforzado para entender las circunstancias del incidente, es una continuación de la línea de confrontación para escalar la situación", sostiene el documento.
Asimismo, el Ministerio ruso ha tachado la postura del Reino Unido en el caso Skripal de "prejuiciosa, comprometida e hipócrita" y sus acusaciones a Rusia de "infundadas".
"Se trata de un intento de asesinato de ciudadanos rusos en el territorio del Reino Unido", han recordado desde el Ministerio, al añadir que hasta el momento Londres no ha ofrecido ninguna información detallada al respecto, a pesar de las solicitudes reiteradas de la parte rusa.
"Tampoco tienen estos datos objetivos y exhaustivos los aliados del Reino Unido que siguen ciegamente el principio de la unidad euroatlántica a expensas del sentido común, las normas del diálogo interestatal civilizado y los principios del derecho internacional", ha subrayado el Ministerio ruso.
"No hace falta decir que este paso hostil de dicho grupo de países no pasará desapercibido y tomaremos medidas de respuesta", ha concluido.
"No se descartan medidas adicionales, que incluyan más expulsiones en los próximos días, semanas", ha añadido Tusk.
Alemania, Polonia y Francia han confirmado que cada país expulsará a cuatro diplomáticos rusos en relación con el caso Skripal. La República Checa, por su parte, ha decidido expulsar a tres diplomáticos rusos.
Lituania anuncia que expulsará a tres, mientras que Letonia expulsará a otro. Estonia, por su parte, anuncia la expulsión del agregado militar de la Embajada rusa en el país báltico. Suecia, Rumania, Croacia y Finlandia han anunciado que expulsan a un funcionario de la diplomacia rusa, cada uno.
Dinamarca, así como los Países Bajos e Italia, han optado por expulsar del país a dos funcionarios rusos cada uno. La agencia Europa Press informa que España está considerando la expulsión de dos diplomáticos rusos.
El presidente de Ucrania, Piotr Poroshenko, ha anunciado por su parte, que Kiev expulsa a 13 diplomáticos rusos. Medidas similares ha decidido tomar Canadá, que ha anunciado la expulsión de cuatro diplomáticos de Moscú por el mismo motivo. Albania, por su parte, ha decidido enviar fuera de su territorio a dos funcionarios de la diplomacia rusa.
Mientras que EE.UU. ha decidido expulsar a 60 diplomáticos rusos, incluidos 12 empleados de la misión de Rusia en la ONU.
Reacción de Moscú
En respuesta a la decisión tomada por una serie de países miembros de la UE y la OTAN de expulsar a diplomáticos rusos, el Ministerio de Asuntos Exteriores ruso ha expresado una fuerte protesta."Consideramos que este paso es hostil y que no cumple con las tareas y los intereses para establecer las causas y buscar a los culpables del incidente que ocurrió este 4 de marzo en la ciudad de Salisbury", reza el comunicado de la Cancillería rusa, publicado en su sitio web.
"El gesto provocativo de la decantada solidaridad con Londres de estos países, que van a la zaga de las autoridades británicas en el llamado 'caso Skripal', sin haberse esforzado para entender las circunstancias del incidente, es una continuación de la línea de confrontación para escalar la situación", sostiene el documento.
Asimismo, el Ministerio ruso ha tachado la postura del Reino Unido en el caso Skripal de "prejuiciosa, comprometida e hipócrita" y sus acusaciones a Rusia de "infundadas".
"Se trata de un intento de asesinato de ciudadanos rusos en el territorio del Reino Unido", han recordado desde el Ministerio, al añadir que hasta el momento Londres no ha ofrecido ninguna información detallada al respecto, a pesar de las solicitudes reiteradas de la parte rusa.
"Tampoco tienen estos datos objetivos y exhaustivos los aliados del Reino Unido que siguen ciegamente el principio de la unidad euroatlántica a expensas del sentido común, las normas del diálogo interestatal civilizado y los principios del derecho internacional", ha subrayado el Ministerio ruso.
"No hace falta decir que este paso hostil de dicho grupo de países no pasará desapercibido y tomaremos medidas de respuesta", ha concluido.
- La semana pasada, el Consejo Europeo adoptó una declaración sobre el caso Skripal en la que afirmaba compartir "la evaluación del Gobierno del Reino Unido", que considera "muy probable" que Rusia fuera la responsable del ataque, en el sentido de que "no hay una explicación alternativa plausible". "Mantenemos una solidaridad incondicional con Reino Unido frente a este grave desafío a nuestra seguridad compartida", reza la declaración.
- En respuesta, Moscú denunció que "la formulación empleada por la UE, que atribuye a Rusia la responsabilidad de lo ocurrido solo a partir de que no hay otra explicación alternativa verosímil, constituye otra acusación infundada contra nosotros". Según el Ministerio de Exteriores ruso, la UE "prefirió seguir el curso de la nueva campaña antirrusa lanzada por Londres y sus aliados transatlánticos con el objetivo evidente de poner un obstáculo más a la normalización de la situación en el continente europeo".
- El 4 de marzo de 2018, el ex doble agente ruso Serguéi Skripal y su hija Yulia fueron envenenados con un agente nervioso en el territorio británico, un hecho que Londres atribuyó a Moscú sin presentar pruebas al respecto. Pese a que Londres asegura que el agente tóxico Novichok, supuestamente utilizado contra Skripal, fue "producido en Rusia", hay razones para creer que el propio Reino Unido tiene la fórmula química de esta sustancia, por lo cual podría haber sido producido en el propio territorio británico.
- El caso Skripal desató una crisis diplomática entre ambas naciones, con la expulsión de 23 diplomáticos rusos de Reino Unido y la pronta adopción de posibles medidas análogas por parte de Rusia, que ofreció su cooperación en la investigación a pesar de la negativa de la parte británica.
Rusia anunció que responderá el "chantaje colosal" de Estados Unidos
Continúa la tensión internacional ya que este lunes, Estados Unidos decidió expulsar a 60 diplomáticos rusos y cerrar el consultado de la ciudad de Seattle
La expulsión de 60 diplomáticos rusos de Estados Unidos, y el cierre
de su consulado en Seattle no ha caído para nada bien en Moscú, que ya
anunció a través de su Ministerio de Relaciones Exteriores que responderá apropiadamente a las medidas del gobierno estadounidense.
De acuerdo al ministro de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov, la expulsión de diplomáticos rusos en varios países de Europa y el mundo, responde a “presiones colosales” del gobierno de Donald Trump. “Este es el resultado de una presión colosal, un chantaje colosal que es el principal instrumento de Washington en la arena internacional”, manifestó el jerarca. “¡ Responderemos, no tengo dudas! Nadie quiere tolerar un comportamiento tan grosero, y no lo haremos”, exclamó Lavrov, quien se encuentra participando en Uzbekistán de una conferencia sobre Afganistán.
Este lunes, Estados Unidos anunció que expulsaría a 60 diplomáticos rusos, uniéndose así a las medidas de varios países europeos, Canadá, Australia y Ucrania para castigar a Rusia por un ataque contra un ex espía ruso, Serguéi Skripal y su hija en Salisbury (Reino Unido), utilizando un agente nervioso al que los londinenses llaman Novichok.
Londres no tardó en culpar al Kremlin del intento de asesinato, basándose en que el gas químico que se utilizó para atacar al ex espía es de fabricación rusa. Sin embargo, Rusia ha expresado en numerosas ocasiones que no es el responsable del ataque, y aseguró que ningún país todavía ha proporcionado ninguna evidencia que Moscú está detrás del atentado con el gas nervioso contra el ex espía ruso y su hija de 33 años.
Hace unos días atrás, el portavoz del presidente Vladimir Putin, Dmitri Peskov, aseveró en una entrevista que Skripal “fue entregado al Reino Unido como resultado de un intercambio. ¿Por qué Rusia entregaría a un hombre de alguna importancia o valor? Es impensable. Si fue entregado, entonces Rusia renuncia a él. Es de cero valor, de cero importancia”. Además remarcó que Skripal tendría que ser considerado un “agente británico”, ya que trabajó para la inteligencia MI6. “Es un ciudadano ruso, pero no es un espía ruso”.
De acuerdo al ministro de Relaciones Exteriores, Serguéi Lavrov, la expulsión de diplomáticos rusos en varios países de Europa y el mundo, responde a “presiones colosales” del gobierno de Donald Trump. “Este es el resultado de una presión colosal, un chantaje colosal que es el principal instrumento de Washington en la arena internacional”, manifestó el jerarca. “¡ Responderemos, no tengo dudas! Nadie quiere tolerar un comportamiento tan grosero, y no lo haremos”, exclamó Lavrov, quien se encuentra participando en Uzbekistán de una conferencia sobre Afganistán.
Este lunes, Estados Unidos anunció que expulsaría a 60 diplomáticos rusos, uniéndose así a las medidas de varios países europeos, Canadá, Australia y Ucrania para castigar a Rusia por un ataque contra un ex espía ruso, Serguéi Skripal y su hija en Salisbury (Reino Unido), utilizando un agente nervioso al que los londinenses llaman Novichok.
Londres no tardó en culpar al Kremlin del intento de asesinato, basándose en que el gas químico que se utilizó para atacar al ex espía es de fabricación rusa. Sin embargo, Rusia ha expresado en numerosas ocasiones que no es el responsable del ataque, y aseguró que ningún país todavía ha proporcionado ninguna evidencia que Moscú está detrás del atentado con el gas nervioso contra el ex espía ruso y su hija de 33 años.
Hace unos días atrás, el portavoz del presidente Vladimir Putin, Dmitri Peskov, aseveró en una entrevista que Skripal “fue entregado al Reino Unido como resultado de un intercambio. ¿Por qué Rusia entregaría a un hombre de alguna importancia o valor? Es impensable. Si fue entregado, entonces Rusia renuncia a él. Es de cero valor, de cero importancia”. Además remarcó que Skripal tendría que ser considerado un “agente británico”, ya que trabajó para la inteligencia MI6. “Es un ciudadano ruso, pero no es un espía ruso”.