Berta Cáceres: “Me lo dijo el río”
Berta Cáceres fue una prominente líder indígena de Honduras, cofundadora y coordinadora general del Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH). Fue asesinada en 2016 por su lucha contra la construcción del proyecto hidroeléctrico de Agua Zarca, enclavado en una zona crucial para la supervivencia de las comunidades indígenas. El proyecto, ahora paralizado, restringe el acceso de la comunidad Lenca al Río Gualcarque y, por extensión, a su agua y alimentos. De llevarse a cabo, los pueblos afectados perderían su medio de vida y se verían abocados a abandonar sus tierras. Berta luchaba para impedirlo.
"Cuando iniciamos la lucha contra Agua Zarca”, solía decir. “Yo sabía lo duro que iba a ser. Pero también sabía que íbamos a triunfar. Me lo dijo el río"... Ahora que se cumplen dos años de su asesinato, Laura Zúñiga, hija de Berta Cáceres, nos explica cómo avanza la investigación de su muerte. Laura, ¿cómo sois la comunidad Lenca?Somos la comunidad más grande de Honduras y hay mucha diversidad entre quienes la integramos. Somos custodios de la naturaleza, de la tierra, y sobre todo de los ríos. En nuestra tradición, los espíritus femeninos residen en los ríos y las mujeres son sus principales guardianas. Nuestra vida espiritual está vinculada a los bosques y unida al agua. Somos una comunidad que regala sonrisas. Un pueblo fuerte y aguerrido. Luchamos contra el proyecto de Agua Zarca desde una postura de no violencia, esgrimiendo el derecho a la justicia y al agua, y demandando el respeto y la dignidad del pueblo Lenca.Han pasado casi dos años desde el asesinato de tu madre. ¿Cuáles han sido los avances y cuáles siguen siendo las preocupaciones?
Actualmente hay ocho personas detenidas, todas ellas vinculadas a la autoría material del asesinato de mi madre. Algunas de estas personas están vinculadas a la empresa DESA –concesionaria de la represa contra la que luchaba– y otras al ejército.
¿Se encuentran detenidos todos los culpables?
No hay certeza, en estos momentos, de que todos los detenidos estén implicados y nuestro deseo es esclarecer la verdad. La justicia verdadera es desmontar la estructura criminal que mató a mi mami y por ello pedimos una investigación internacional independiente que aclare su asesinato. Además de la búsqueda y enjuiciamiento de los autores materiales del crimen, queremos que se lleven ante la justicia a los autores intelectuales porque, la impunidad de estos últimos, podría interpretarse como una puerta abierta a más asesinatos y persecución de defensoras y defensores en Honduras.
¿A quién le interesaba acallar a Berta Cáceres?
Berta Cáceres era un símbolo dentro de nuestra comunidad. Con su asesinato quisieron sembrar el miedo y la desunión entre nosotros. Pero la construcción en colectivo es lo único que nos puede ayudar a ganar y eso lo aprendimos bien de mi madre. Ellos tendrán las armas y el poder. Querrán burlar la justicia, comprar la impunidad, pero nosotros tenemos la verdad. Somos un pueblo valiente.
© Sergio Ortiz/Amnistía Internacional
Lucháis contra gigantes. ¿Dónde dejáis el miedo?Mi madre nos enseñó a no tener miedo. Aprendimos a vivir sin él porque ni lo merecemos ni lo queremos. ¿De qué nos sirve para seguir luchando? Somos una comunidad y luchamos por nuestras tierras y convicciones. A pesar de las amenazas, de la violencia que intentan ejercer sobre los hombres y las mujeres que conformamos la comunidad Lenca tenemos una gran ventaja sobre ellos: luchamos por nuestros derechos y por nuestra vida. Luchamos por la convicción de vivir.
Dentro de esta situación de riesgo, las comunidades indígenas y las mujeres son las más perseguidas. ¿Sois las mujeres la punta de lanza de la resistencia?
Para las mujeres el desafío es doble. Nosotras somos las más vulnerables y las más fáciles de atacar en una sociedad masculinizada. Se nos estigmatiza, desacredita, se nos persigue... Estamos muy expuestas en una sociedad patriarcal. Pero tras el asesinato de mi madre, la profunda indignación se ha convertido en un grito de unión entre las mujeres, en el grito de “Berta no murió, se multiplicó”.
Tu madre decía cosas como: “Vos tenés la bala… Yo la palabra… La bala muere al detonarse… La palabra vive al replicarse”…
Mi mami era defensora incondicional del medio ambiente. Defendía los intereses del pueblo Lenca. Creía en la verdad, la libertad. Creía en los derechos humanos. Sus ideas, su lucha, sus principios le daban la fuerza para luchar. Ella no se doblegó nunca, ni se dejó vencer. Su vitalidad, su compromiso y su valentía siguen vivos en nosotros. Su capacidad de seguir adelante incluso en los momentos más adversos es nuestra fuerza para avanzar. Nosotros tampoco nos vamos a doblegar. “No nos queda otro camino”, nos repetía siempre. “Hemos luchado y lo vamos a seguir haciendo”.
¿Cómo se convive con el dolor de la muerte de una madre mientras se continúa con la lucha que ella lideraba?
El mundo perdió a una persona irrepetible y eso nos tiene que doler a todos. Pero Berta Cáceres no está muerta, está multiplicada. Ella sigue presente en cada una de las personas que continuamos con la lucha. Mi madre me dejó muchas enseñanzas y toda su fuerza. Las personas que luchan por la vida, nunca mueren.
Noticias Internacionales Independientes
Una nueva e impactante investigación vincula el asesinato de Berta Cáceres con directivos de la empresa hondureña de represas
01 de noviembre de 2017
Analizamos
una impactante revelación publicada el martes en relación al asesinato
de Berta Cáceres: se estableció un vínculo entre directivos de la
empresa contra cuyo proyecto de represa hidroeléctrica se manifestaban
la reconocida líder indígena hondureña y ambientalista junto a la
comunidad indígena lenca a la que pertenecía.
Para saber más de este tema, puede ver la entrevista que le hicimos a Elisabeth Malkin. Malkin es periodista de The New York Times y acaba de leer el nuevo informe realizado por un equipo de cinco abogados internacionales. El equipo encontró evidencias de que el plan para asesinar a Cáceres llegó a la dirección de la empresa de energía hondureña Desarrollos Energéticos, conocida como DESA, responsable de la construcción de la represa. Los abogados fueron seleccionados por la hija de Cáceres, Bertha Zúniga y son independientes de la actual investigación oficial del gobierno hondureño. Examinaron unas 40 mil páginas de mensajes de textos.
La investigación también reveló que DESA ejerció un control sobre las fuerzas de seguridad en la zona, dio instrucciones y pagó alojamiento, comida y equipamiento para las unidades policiales.
Para saber más de este tema, puede ver la entrevista que le hicimos a Elisabeth Malkin. Malkin es periodista de The New York Times y acaba de leer el nuevo informe realizado por un equipo de cinco abogados internacionales. El equipo encontró evidencias de que el plan para asesinar a Cáceres llegó a la dirección de la empresa de energía hondureña Desarrollos Energéticos, conocida como DESA, responsable de la construcción de la represa. Los abogados fueron seleccionados por la hija de Cáceres, Bertha Zúniga y son independientes de la actual investigación oficial del gobierno hondureño. Examinaron unas 40 mil páginas de mensajes de textos.
La investigación también reveló que DESA ejerció un control sobre las fuerzas de seguridad en la zona, dio instrucciones y pagó alojamiento, comida y equipamiento para las unidades policiales.
A la memoria de Berta Cáceres…
Queremos compartir la presente
producción audiovisual dedicada la lideresa e indígena lenca Berta
Cáceres. Junto a ella, su palabra y lecciones , profundizo nuestro
acervo cultural y pensamiento, en este largo caminar, que es decir la
lucha por nuestros pueblos y los bienes ecológicos.
La canción Aliados, es fiel expresión y sentir, del dúo de rap indígena underground Kuna Revolution de Panamá, que en junto a los productores de Radio Temblor, presentan distintas imágenes de los actos y movilizaciones en el marco del Encuentro Internacional de los pueblos “Berta Cáceres” en Honduras. Además, de algunas imágenes del pueblo indígena Ngäbé Büglé que deliberan una gran batalla contra el extractivismo en Panamá.
La canción Aliados, es fiel expresión y sentir, del dúo de rap indígena underground Kuna Revolution de Panamá, que en junto a los productores de Radio Temblor, presentan distintas imágenes de los actos y movilizaciones en el marco del Encuentro Internacional de los pueblos “Berta Cáceres” en Honduras. Además, de algunas imágenes del pueblo indígena Ngäbé Büglé que deliberan una gran batalla contra el extractivismo en Panamá.
ONU exige verdad y sanción a todos los autores del asesinato de Berta Cáceres
Este
2 de marzo 2018, a dos años del asesinato de Berta Cáceres, la Oficina
del Alto Comisionado de los Derechos Humanos de las Naciones Unidas en
Honduras (OACNUDH), reitera al Estado hondureño la urgencia de
profundizar la investigación para el esclarecimiento de la verdad y la
sanción de todos los responsables en el crimen contra la destacada
ambientalista.
EL LIBERTADOR publica el comunicado íntegro emitido este día por la OACNUDH, rectorada por María Soledad Pazo.
Redacción Central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa.
La Oficina del Alto Comisionado de los Derechos Humanos de las Naciones
Unidas en Honduras (OACNUDH), en el marco del segundo aniversario del
asesinato de la defensora de derechos humanos y ambientalista Berta
Cáceres y tentativa de asesinato del ambientalista Gustavo Castro desea
expresar lo siguiente:
Reiteramos
la responsabilidad del Estado de investigar este caso, con la debida
diligencia lo cual conlleva la obligación del Estado de realizar una
investigación que sea expedita, independiente, pronta y exhaustiva, que
agote la extensión de las diferentes autorías y grados de participación,
permitiendo conocer la verdad de los hechos y la reparación de las
víctimas y sus familiares.
El
Estado además deberá garantizar el derecho de las víctimas a participar
en el proceso, lo cual implica que tengan acceso y capacidad de actuar
en todas las etapas e instancias de dichas investigaciones y procesos
judiciales a través de la figura de acusación privada.
En
este sentido, la Oficina considera importante que el ente de
investigación y persecución penal pueda dar respuesta en un plazo
razonable a las solicitudes presentadas por la acusación privada,
incluyendo el requerimiento presentado el pasado mes de octubre sobre
posibles autorías intelectuales a la luz de hallazgos encontrados en
documentación compartida, mediante orden judicial.
La
Oficina reconoce el incremento gradual del acceso a la información en
relación a las diligencias investigativas, no obstante, se siguen
observando fuertes desafíos en materia de transparencia en cuanto a la
falta de claridad sobre los criterios seguidos para determinar de la
secretividad de la información.
La
Oficina desea recordar que la limitación de este acceso debe imponerse
en la medida estrictamente necesaria para garantizar la plena
efectividad de la participación de la acusación privada.
Como
parte de las medidas de no repetición, la Oficina considera fundamental
que el Estado de Honduras en atención a las recomendaciones de los
órganos de tratados y procedimientos especiales de Naciones Unidas,
adopte las medidas que permitan superar las debilidades institucionales y
normativas que persisten en el país para que los pueblos indígenas
puedan tener un acceso efectivo a la justicia y obtener una protección
judicial de sus derechos, incluyendo la protección de sus territorios y
recursos naturales.
Como
ya fue señalado por la Relatora Especial sobre Pueblos Indígenas, el
Estado Hondureño tiene la obligación de desarrollar y fortalecer
mecanismos específicos y permanentes que permitan a los pueblos
indígenas presentar sus demandas y obtener una reparación por
violaciones a los derechos sobre sus tierras y recursos conforme al
Convenio núm. 169 de la OIT y la Declaración de las Naciones Unidas
sobre los Derechos de los Pueblos Indígenas.
La
Oficina reitera la obligación del Estado de establecer un marco
normativo e institucional que garantice el goce de los derechos de los
pueblos indígenas, siendo la consulta previa un pilar fundamental para
tal fin. Igualmente importante es investigar los posibles actos de
corrupción y abuso de autoridad que hayan posibilitado la adjudicación
de recursos naturales en detrimento del derecho a la consulta y
consentimiento libre, previo e informado.
Aparejado
a esta obligación estatal, la Oficina invita a que las empresas
incorporen gradualmente los Principios Rectores de Naciones Unidas sobre
Empresas y Derechos Humanos, que garanticen el respeto de los derechos
de los pueblos indígenas, sus tradiciones, prácticas y procedimientos de
decisión, particularmente en proyectos que puedan tener una afectación a
sus medios de vida y territorios.
La
OACNUDH continúa expresando su apoyo a la familia de Berta Cáceres y su
acompañamiento en los esfuerzos por la búsqueda de la verdad, reitera
al Ministerio Público su ofrecimiento de colaboración para avanzar en el
esclarecimiento del crimen e identificar las responsabilidades tanto
materiales como intelectuales.
Finalmente,
OACNUDH reconoce y apoya el rol fundamental de la labor de las personas
defensoras de derechos humanos en una sociedad democrática, recordando
al estado la obligación de tomar medidas que garanticen un entorno
seguro y propicio para la no-repetición de ataques y crímenes de esta
naturaleza.
LA LUCHA POR LA LEGITIMACION
Las flamas gigantes de llantas
incendiadas sobre el pavimento, símbolo de la resistencia popular
contra la dictadura, siguen vivas en Honduras.
Es decir, no estamos en tiempos de
nostalgias, pesadumbres, quejumbres, ni falsos lutos, porque es tiempo
de lucha, de resistencia e insurrección.
Así lo entienden en el oriente, norte,
occidente y centro del país, donde la población no olvida ni perdona a
los asesinos de Berta Cácares ni a los 150 asesinatos políticos después
del golpe de estado de 2009. Y no los olvida, porque los conoce bien.
No olvida ni perdona porque los
criminales arropados con el poder de la bandera nacional y rociados de
agua bendita por los cristianos diabólicos, permenecen todavía
inalcansables. Son los fraudulentos, los corruptos, los impostores que
el pueblo no quiere ver ni obedecer.
Por eso en la tarde noche de ayer
viernes y este sábado 3, en al menos ocho ciudades hondureñas y
aproximadamente 30 capitales del mundo, hay actividad con flores, velas,
pancartas, manifestaciones, cantos, poesías, esculturas, discursos y
reclamos de todo tipo.
El clamor es general, ahora faltan los
autores intelectuales del crimen contra Berta, los que pagaron e
inspiraron su asesinato: EL FMO de Holanda, el Find Found de Finlandia,
el Banco Centroamericano, FICHOSA, el COHEP, los jefes de los militares
en las Fuerzas Armadas y, particularmente, la cúpula del Partido
Nacional en Intibucá, La Paz, Santa Bárbara y Lempira. Todos ellos y
ellas son responsables. Y deben pagar.
Así lo recordó Austraberta – la madre –
en Tegucigalpa; Olivia – la hija diputada – en San Pedro Sula; Berta
Isabel – la coordinadora del COPINH – en La Esperanza y miles de Bertas
en el mundo entero.
La memoria colectiva está bien clara
al asociar este proyecto de muerte con el crimen organizado, la cúpula
política golpista, los militares y policías narcos, también con las
empresas financieras transnacionales, el gobierno de Estados Unidos y
los carteles cristianos.
Esos son los actores que atacan la
vida de los pueblos originarios y garífunas que rechazan su modelo de
muerte. Y son los mismos que dieron el golpe de estado en 2009 y apoyan
ahora la dictadura. Y los mismos que se robaron el Seguro Social. Y los
mismos que justifican las muertes y los presos políticos de la oposición
nacional.
Además, el segundo aniversario de la
siembra universal de Berta Cáceres ha servido concretamente para mirar
con ojos críticos el soporte ideológico y económico del Pentágono para
la instalación de la dictadura del impostor en centroamérica.
Igualamente, el segundo aniversario de
la multiplicación del pensamiento de Berta ha servido para revelar la
estrategia de legitimación política de Juan Orlando Hernández, que
evidentemente ha pactado la entrega de algunos mimebros de su partido al
ruedo mediático concertado para ganar legitimación internacional como
una “dictadura democrática” que lucha contra su propia corrupción.
Nada es casual. La visita oficial de
la embajadora de Trump, la exhibición de armamentos militares, la
captura de Rosa Elena Bonilla, el desfile de delincuentes de la Red ante
la MACCIH y la detención del teniente coronel de West Point que intentó
sobornar en vida a Berta Cáceres y que al no poder, planificó su
asesinato con la venia de sus jefes.
Todo esto ocurrió en las últimas 48
horas, como en una película de acción antes del segundo aniversario de
Berta. En realidad, quieren quitarle prestada a la oposición la bandera
anticorrupción y la defensa de los derechos humanos por un instante,
para simular que pueden autojuzgarse. Pero es un show, y lo sabemos. Por
eso la incredulidad general. Porque los conocemos.
Por eso el segundo aniversario de la
resurrección de Berta Cácares también sirvió para demostrar que la
conciencia universal está intacta, que no da tregua a los asesinos ni se
olvida del heroísmo de las personas que han ofrendado su vida por la
vida de todo un pueblo.
Esta es la lección principal, la lucha
permanente por la legitimación de la verdad y la estampa viva de un
pueblo invencible, frente a los intentos de una dictadura narca,
corrupta y asesina por hallar en la prensa vendida un espacio ruidoso
para exhibir su estiércol hediondo.
Con su permiso, buenas noches!DiCaprio visitaría Honduras en conmemoración de muerte a Berta Cáceres
El
destacado actor de Hollywood y conocido ambientalista, Leonardo
DiCaprio, reaccionó solidario con la familia Cáceres cuando se enteró
del asesinato de la laureada hondureña defensora del ambiente en la
madrugada del 3 de marzo de 2016, cuyo castigo a los autores
intelectuales siguen reclamando personas e instituciones de Honduras y
del mundo.
Redacción Central / EL LIBERTADOR
Tegucigalpa. A
dos años del asesinato de la ambientalista hondureña Berta Cáceres, la
madrugada del 3 de marzo de 2016, ha trascendido que el reconocido
ambientalista y actor de Hollywood, Leonardo DiCaprio, visitaría a
Honduras para asistir al evento de conmemoración de la muerte a la
hondureña defensora del ambiente.
El
protagonista de Titanic y otras tantas películas de impacto mundial
vendría directamente a ciudad occidental, La Esperanza, Intibucá, donde
Berta nació y murió defendiendo las montañas y los ríos de su pueblo
Lenca.- Además, se conoció que llegaría en compañía de la lideresa
indígena guatemalteca y Premio Nobel de la Paz, Rigoberta Menchú.
El
destacado actor de Hollywood y conocido ambientalista, reaccionó
solidario con la familia Cáceres cuando se enteró del asesinato de la
hondureña defensora del ambiente, cuyo castigo a los autores
intelectuales siguen reclamando familiares, personas e instituciones de
Honduras y del mundo.
Desde
1998 DiCaprio creó su propia fundación ambiental para velar por el tema
ecológico y calentamiento global, desde donde otorga fondos a proyectos
y programas de conservación innovadores y eficaces a instituciones
confiables sin fines de lucro.
A dos años del asesinato de Berta Cáceres su familia denuncia "criminalización y persecución"
Este viernes, cuando se cumplieron dos años del asesinato de Berta Cáceres, fue detenido el presidente de DESA, David Castillo, acusado de ser el presunto autor intelectual del crimen. Desde COPINH aseguran que seguirán denunciando a "toda la estructura criminal y asesina detrás del asesinato de nuestra compañera Berta Cáceres y de la cual David Castillo es solo una pieza".
A dos años del asesinato de la activista hondureña, Berta Cáceres sus
familiares denunciaron que han sufrido ataques por parte de personas
desconocidas.
Las hijas de fallecida activista ambientalista, Olivia Zúñiga Cáceres y Laura Zuñiga Cáceres, coincidieron en que actualmente se encuentran viviendo la misma situación que su madre antes de ser asesinada “criminalización y persecución e incluso atentados en dos ocasiones”.
“Ha habido una campaña mediática contra nosotros y nos han amenazado con levantar procesos judiciales”, alertaron.
A su vez denunciaron las pésimas labores por parte del Ministerio Público hondureño para resolver de manera definitiva el asesinato de su madre.
Lamentaron que a dos años del asesinato aún se encuentran en la espera de la celebración del juicio oral, “el juicio comienza con una gran carencia. Hay ocho personas detenidas pero, entre ellas no están los autores intelectuales. (…).
Olivia Zuñiga, quien también es diputada por el Partido Libertad y Refundación, explicó que acaba de presentar en el Congreso el proyecto de “Ley Berta Cáceres” el cual busca anularlos contratos que el Estado mantiene con la firma Desarrollos Energéticos S.A (DESA) para la concesión del proyecto hidroeléctrico Agua Zurca.
Proyecto contra el cual estaba luchando Berta cuando fue asesinada por considerarlo una amenaza contra el territorio de la comunidad de la etnia Lenca.
Tras la detención el Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH) emitió un comunicado en el que afirma que “seguirá denunciando a toda la estructura criminal y asesina detrás del asesinato de nuestra compañera Berta Cáceres y de la cual David Castillo es solo una pieza”
“Gracias a todo el trabajo y la presión creada con la solidaridad y trabajo de las organizaciones a nivel nacional e internacional. Y no gracias a la celeridad del MP, quienes han intentado por todos lo medios ocultar la verdad en el caso”, expresa el texto.
“El Estado de Honduras intenta opacar las manifestaciones del día de hoy a 2 años del asesinato de nuestra compañera Berta Cáceres, con esta captura, sin embargo, el COPINH desde el inicio lo ha denunciado a él como gerente general, junto a toda la junta directiva de la empresa DESA, propiedad de la familia Atala Zablah”, alerta el comunicado.
Finalmente advierte “el COPINH seguirá denunciando a toda la estructura criminal y asesina detrás del asesinato de nuestra compañera Berta Cáceres y de la cual David Castillo es solo una pieza”.
Las hijas de fallecida activista ambientalista, Olivia Zúñiga Cáceres y Laura Zuñiga Cáceres, coincidieron en que actualmente se encuentran viviendo la misma situación que su madre antes de ser asesinada “criminalización y persecución e incluso atentados en dos ocasiones”.
“Ha habido una campaña mediática contra nosotros y nos han amenazado con levantar procesos judiciales”, alertaron.
A su vez denunciaron las pésimas labores por parte del Ministerio Público hondureño para resolver de manera definitiva el asesinato de su madre.
Lamentaron que a dos años del asesinato aún se encuentran en la espera de la celebración del juicio oral, “el juicio comienza con una gran carencia. Hay ocho personas detenidas pero, entre ellas no están los autores intelectuales. (…).
Olivia Zuñiga, quien también es diputada por el Partido Libertad y Refundación, explicó que acaba de presentar en el Congreso el proyecto de “Ley Berta Cáceres” el cual busca anularlos contratos que el Estado mantiene con la firma Desarrollos Energéticos S.A (DESA) para la concesión del proyecto hidroeléctrico Agua Zurca.
Proyecto contra el cual estaba luchando Berta cuando fue asesinada por considerarlo una amenaza contra el territorio de la comunidad de la etnia Lenca.
Detención del presidente de DESA
Este viernes fue detenido el presidente de DESA, David Castillo, acusado de ser el presunto autor intelectual del asesinato de Berta Cáceres.Tras la detención el Consejo Cívico de Organizaciones Populares e Indígenas de Honduras (COPINH) emitió un comunicado en el que afirma que “seguirá denunciando a toda la estructura criminal y asesina detrás del asesinato de nuestra compañera Berta Cáceres y de la cual David Castillo es solo una pieza”
“Gracias a todo el trabajo y la presión creada con la solidaridad y trabajo de las organizaciones a nivel nacional e internacional. Y no gracias a la celeridad del MP, quienes han intentado por todos lo medios ocultar la verdad en el caso”, expresa el texto.
“El Estado de Honduras intenta opacar las manifestaciones del día de hoy a 2 años del asesinato de nuestra compañera Berta Cáceres, con esta captura, sin embargo, el COPINH desde el inicio lo ha denunciado a él como gerente general, junto a toda la junta directiva de la empresa DESA, propiedad de la familia Atala Zablah”, alerta el comunicado.
Finalmente advierte “el COPINH seguirá denunciando a toda la estructura criminal y asesina detrás del asesinato de nuestra compañera Berta Cáceres y de la cual David Castillo es solo una pieza”.
Los y las defensoras del país más riesgoso para defender DDHH
Por: Sandra Rodríguez
Tegucigalpa.- Ser defensor o defensora de derechos
humanos no excluye a nadie, puede ser una acción temporal o permanente,
en cualquier lugar donde se violenten los mismos; En Honduras hay por
doquier, justo en un país catalogado entre los más peligrosos para
defensores ambientalistas, indígenas, mujeres, periodistas, abogados,
diversidad sexual, niñez y otros. Y hoy 09 de diciembre se conmemora su
día.
Los defensores y defensoras de los derechos humanos son personas que,
a título individual o colectivo, trabajan para hacer realidad los
derechos recogidos en la Declaración Universal de los Derechos Humanos.
Por lo que es importante desarrollar trabajos en redes y grupos afines a
un mismo propósito.
El Comité de Familiares de Detenidos Desaparecidos en Honduras (COFADEH), le ha apostado a dicho trabajo y dedicado a la formación de redes de defensores y defensoras de DDHH a nivel nacional, conociendo desde el origen a cada grupo y acompañándolo en su crecimiento y trabajo en campo, siempre enfocado en los derechos civiles y políticos.
Más
de un centenar de voluntarios y voluntarias forman parte de la red de
Defensores/as Ocotepecanos de Derechos Humanos (DEOCODERH); Red de
Defensores/as de DDHH de Lempira (Red Lempira); Red de defensores y
defensoras de DDHH del Sur (REDEHSUR); Red de Defensores/as y
Comunicadores/as Sociales del departamento de El Paraíso (RED-ORIENTE),
Red con defensores por el acceso a la tierra con el Observatorio
Permanente de Derechos Humanos del Bajo Aguán (OPDHA), La Vía
Campesina, Central Nacional de Trabajadores del Campo (CNTC), e
indígenas Lencas de La Paz; Red de Jóvenes con representación en La
Esperanza, Santa Bárbara, Siguatepeque, Santa Bárbara, Juticalpa,
Santa Ana y Tegucigalpa; alianzas con gremios profesionales,
sindicatos, estudiantes, ambientalistas y demás líderes sociales.
En esta coyuntura, organismos internacionales instan a los Estados
que deben velar por la protección y seguridad del defensor y defensora
de derechos humanos. En Honduras hay casos de defensores y defensoras
que gozando de medidas cautelares otorgadas por la Comisión
Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que fueron asesinados, por
mencionar algunos nombres está Héctor Martínez Motiño (2015), Berta
Cáceres Flores y José Ángel Flores (2016).Asimismo, continúan las denuncias de hostigamiento, estigmatización, persecución y amenazas a muerte contra defensores y defensoras en Honduras, pese a que desde el 2015 se aprobó una ley de protección para defensores de DDHH, periodistas, comunicadores sociales y operadores de justica, las estadísticas de denuncia son interpuestas en mayor cantidad y confianza ante organizaciones de DDHH que, quizás el mismo Mecanismo de Protección (parte de la Ley), tal como lo reveló el informe del fondo de emergencia ejecutado por el COFADEH, Centro de Estudios de la Mujer- Honduras (CEM-H); y el Comité por la Libre Expresión (C-Libre).
El informe “Sistematización
de las buenas prácticas, lecciones aprendidas, sobre el Fondo de
Emergencia para protección de defensores/as de derechos humanos en
Hondura”, benefició a 254 de personas desde el año 2013 hasta marzo
reciente, entre ellas defensores y/o familiares a veces por estar en
prisión o huyendo de la persecución.
El derecho internacional reconoce claramente el papel fundamental de las personas defensoras derechos humanos en poner un término de de manera efectiva a las violaciones de estos derechos. La Declaración de las Naciones Unidas sobre las personas defensoras de los derechos humanos urge a los Estados a apoyar y proteger estas personas.
Pero en Honduras, la ley se aplica –casi siempre- contra los y las
defensoras de derechos humanos que son señalados por funcionarios
estatales, empresarios o terratenientes. Algunas defensoras como
Magdalena Morales y Gladys Lanza, no alcanzaron ver la victoria de su
lucha, ya que la persecución judicial les deterioró la salud hasta la
muerte.
Abel Pérez, Santos Hernández, Carlos López y Samuel Martínez,
estuvieron en prisión por defender el derecho a la tierra, fueron
acusados de irrespetar las medidas sustitutivas a la prisión, en un
proceso que las autoridades judiciales los lleva al manquillo de los
acusados por usurpadores.
Mientras que, los defensores de derechos estudiantiles, Moisés
Cáceres, Sergio Ulloa y Cesario Padilla, fueron condenados por el delito
de usurpación en perjuicio de la Universidad Nacional Autónoma de
Honduras (UNAH), desde el 2015 y la individualización de la pena fue en
agosto pasado, aun sin tener pena concreta, semanas después hasta su
abogado defensor, Laureano Carvajal fue privado de libertad acusado de
falsificación de documentos privados –en un caso de años anteriores-,
los cuatro permanecen con medidas sustitutivas a la prisión.
Casi
90 defensores de la educación superior (en cuenta cuatro defensores de
ddhh y periodistas) han sido criminalizados este año, por autoridades de
la UNAH, Ministerio Público y la Procuraduría General de la República.
En el caso de los tres estudiantes condenados, la UNAH violentó un
acuerdo de homologación formado el 20 de julio del 2016, donde se
estableció la suspensión de todos los requerimientos fiscales, pues
había un grupo 75 jóvenes con procesos por usurpación, como le llaman a
las protestas sociales en defensa de la educación pública.
En Honduras, las amenazas son cada vez más constantes, en el marco
post electoral del 26 de noviembre, el gobierno de Juan Orlando
Hernández, decretó un ilegal toque de queda, que dejó como saldo 12
personas asesinadas por la Policía Militar del Orden Público (PMOP) y
dos policías preventivos, según informe del COFADEH. En este marco hay
cientos de detenidos y golpeados, pero cientos de miles enfrentándose al
poder político y militar por la defensa de la soberanía patria, porque
la reelección presidencial es ilegal.En conmemoración del día internacional de las personas defensoras de los derechos humanos, el 9 de diciembre, la Organización de las Naciones Unidas, insta a todos los Estados a que apoyen y protejan a quienes defienden los derechos humanos, sea a nivel internacional, regional o nacional, a través de la construcción de alianzas en favor de las y los defensores y de la adopción de medidas concretas para proteger a estas personas.
En la Declaración de la ONU sobre los Defensores de los Derechos Humanos aprobada por la Asamblea General el 9 de diciembre de 1998, las Naciones Unidas no solo reconocieron su legitimidad al considerar la defensa de los derechos humanos como un derecho en sí mismo, sino también el papel decisivo que desempeñan y la necesidad de garantizar su protección.
Por su parte Amnistía Internacional apoya a las defensoras y defensores porque se sitúan en primera línea de la lucha por los derechos humanos y porque ponen al descubierto la inmensa brecha entre los compromisos retóricos de los gobiernos y su limitado cumplimiento en la práctica.
Opiniones:
Rigoberto Matute- Red Lempira
Para mi ser defensor de derechos humanos en mi municipio es estar apoyando al más necesitados haciendo que se respeten sus derechos y haciéndoles saber que no están solos y a las autoridades qué hay alguien que los vigila que los va estar observando y que van a denunciar. En mi caso me he dado a conocer con la policía, me he ganado el respeto y en cualquier cosa me toman en cuenta en la comunidad, es un orgullo ser defensor de derechos humanos.
Oscar Henríquez- Red Lempira
He estado tan pendiente de todo lo que sucede a mí alrededor, mirando lo injusto, a punto de perder el control, pero mi formación no me lo ha permitido; pero si hoy me di cuenta quien es el enemigo del pueblo que sufre y seguirá sufriendo. El proceso de cambio en Honduras es largo. Mientras tanto, estaré vigilante del más atropellado en su derecho, soy un defensor muy bien formado al servicio de un pueblo. Estoy más que listo para lo que sea.
Cecilia Lagos- Red Lempira
Ser defensora de DDHH, es poder brindar ayuda a toda persona que se le violentan sus derechos humanos, dar acompañamiento, documentar para tener un registro.
Patricia Eguigure- Red Oriente
Una defensora de DDHH es aquella que ayuda a otras personas que han sido objeto de agresión por parte de cualquier funcionario público.
URUGUAY
Programa de Alta Dedicación Operativa: mismas acciones en modernos disfraces
Diego León Pérez y Tamara Samudio
Este artículo describe el funcionamiento del Programa de Alta Dedicación Operativa (PADO) del Ministerio del Interior. Los autores reflexionan sobre el lugar que este ocupa en la política de seguridad del gobierno y plantean algunas tensiones que atraviesan al programa: la alta presión ejercida sobre determinadas poblaciones, el sesgo implícito en el uso de la tecnología y el carácter productor de subjetividad de estas intervenciones.
¿Qué es el PADO?
Desde hace ya varios años la principal preocupación de los uruguayos, de acuerdo a los barómetros de opinión pública, es “la inseguridad”. Si bien el Frente Amplio no articula un discurso potente al respecto, este problema sistemáticamente aparece en escena asociado al miedo al delito común, con un destaque de las rapiñas. Tabaré Vázquez se comprometió, durante la campaña electoral, a reducir un 30% las mismas. El Ministro Bonomi, por su parte, sostiene que este delito “lleva a la gente a sentir más inseguridad” [1]. La solución a la principal preocupación de los uruguayos pasa entonces por la reducción de las rapiñas.
El PADO comienza en Montevideo a partir de 2015, expandiéndose a Canelones y San José en 2016 y 2017, e implementa un sistema de patrullaje focalizado en zonas delimitadas por la concentración de denuncias de delito. La premisa es simple: el delito se concentra en determinados lugares de la ciudad, por lo que, con la tecnología adecuada, se puede estimar la ubicación de esos lugares y concentrar recursos policiales allí. El PADO promete, de manera moderna y eficiente reducir las rapiñas, que, mutatis mutandis sería reducir la inseguridad.
Éste programa ocupaba, a julio de 2016, a 815 policías, que desde distintas procedencias (400 de Montevideo, 120 de Canelones, 25 de San José y 270 de la Guardia Republicana) [2] se disponían a integrarse al Programa, a cambio de un incentivo salarial. La OPP calcula que el programa costó 538 millones de pesos durante el ejercicio 2016. La operativa se coordina desde el moderno centro de control de la Unidad de Análisis Criminal (UAC). Allí se procesa toda la información recabada por la policía (a través de las denuncias realizadas, patrullaje, y cámaras de videovigilancia). El PADO depende de la Secretaría del MI, y es comandado por el Director de Policía Nacional, Crio. General (r) Mario Layera. Esta estructura de mando centralizado es diferente de la lógica de patrullaje territorial coordinada por comisarías, y aunque existe un movimiento hacia la concentración de mando operativo en el vértice del ministerio, estas lógicas aún conviven.
La intervención apunta a la ejecución de dos estrategias conjuntas y complementarias: la realización de un patrullaje de prevención y represión del delito, y la elaboración de un relevamiento ambiental, a través de un formulario que recoge características del territorio delimitado.
Moderno disfraz
Se parte de la base que «existe una vinculación “fuerte” entre lugar y delito (más que entre delito y persona), lo que significa plantear la hipótesis de que los microterritorios tienen características físicas y sociales que incrementan las oportunidades para cometer delitos» [3]. Ante la situación de crecimiento de las denuncias de rapiñas durante 10 años consecutivos, el Ministerio del Interior decidió actuar en las zonas donde se éstas se desarrollan en mayor medida. Definió entonces incorporar softwares de georreferenciación y sistematización de los hechos, fortaleciendo para ello la Unidad de Análisis Criminal (UAC), y desarrollando el Sistema de Gestión de Seguridad Pública, que se orienta a sistematizar datos vinculados a la consecución de delitos. Una de las piezas claves de este enfoque de policiamiento predictivo es PredPol.
PredPol nace de un proyecto de investigación realizado por el Departamento de Policía de Los Ángeles y la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA). Este software se alimenta de datos de delitos, los procesa en función de un algoritmo propietario, y devuelve una retícula en un mapa, con determinados “puntos calientes”. Dichos puntos indican que allí existe una alta probabilidad de que se cometa un delito. La lógica operativa se orienta, entonces, a ubicar patrullaje extra en esos puntos, de manera de estar ahí para prevenir reprimiendo. PredPol, y otros softwares similares han sido utilizados en diferentes ciudades del mundo con resultados ambiguos, y el sistema de policiamiento que propone ha sido puesto en cuestión en numerosas ocasiones.
Estos programas realizan machine learning; es decir, detectan patrones en los datos de los que se alimenta, para luego repetirlos en futuras predicciones. Por lo tanto, y esto vale para todos los sistemas que dependen de algoritmos, la información que nos devuelva será sólo tan buena como los datos que ingresemos. Esto presenta un cuestionamiento fundamental: como señalan Lum e Isaac [4], los registros policiales no miden el crimen, sino una interacción compleja entre la criminalidad, la estrategia policial y las relaciones entre la policía y la comunidad.
Como ejemplo, en el estudio citado se encuentra que en Oakland, Estados Unidos, esa interacción resulta en el envío de policías a ejercer presión sobre zonas pobres, que eran por otra parte las zonas donde la policía tradicionalmente ejercía presión. Por lo tanto, eran las zonas que aparecían en los registros que se utilizaron para alimentar al PredPol en un primer lugar. Un algoritmo es una máquina de encontrar patrones y repetirlos. Aplicada sin cuidado, su lógica es la del círculo vicioso. La tecnología se convierte en un legitimador del viejo olfato policial.
Para el Ministerio del Interior, sin embargo, dicho sistema logró “tener conocimiento cabal de cuál es la situación criminal en el país” pudiendo establecer “perfil de la víctima, del victimario y del escenario donde están operando los criminales” [5].
Cabría cuestionar dicha afirmación, ya que en sus primeros dos meses de actividad el PADO registró a 39.327 personas para detener a 734. Parece plausible pensar que, si una patrulla registra personas que pasan por un determinado cuadrante donde estadísticamente se han producido más delitos, eventualmente pueda encontrar personas que lo hayan cometido ¿Es entonces esa una estrategia eficiente?
En territorio
El trabajo de georreferenciación realizado por la UAC estableció 120 segmentos [6] en 28 circuitos, lo que representa el 8% del territorio metropolitano, el 1% del total de las calles montevideanas, y el 27% de su población. En Canelones, se definieron 50 segmentos en 19 circuitos, mientras que en San José 11 segmentos en 5 circuitos.
El abordaje territorial se simplificó en sostener la custodia constante de éstas áreas creadas, “asignando a cada circuito un equipo conformado de manera estándar por: un oficial (con vehículo de cuatro ruedas), entre dos y tres policías de a pie por segmento, y de dos a cuatro policías en moto“. De esta forma, se ubica a los policías de a pie en segmentos, que son acompañados por el patrullaje de móviles en los circuitos, dotados con equipos de acceso a bases de datos de control de personas, vehículos, así como contacto con la base.
De esta forma, bajo fines “prevencionistas”, se logra imponer en zonas calificadas “de conflicto” un sistema de vigilancia y revisión casi constante de personas, vehículos, instalaciones y actividades desarrolladas. Asimismo, las tareas de previsión se tornan tareas represivas, con la utilización y abuso de “controles de rutina” tales como el pedido de documentación, registro o cacheo en la vía pública, sin razón aparente.
Este trabajo territorial se complementa con el desarrollo de una segunda tarea prevista por el programa, que es la elaboración de un relevamiento ambiental. El mismo supone una caracterización de la zona, en función de la búsqueda y localización de elementos que “estimulan” el delito. Así, se construyen y caracterizan escenarios peligrosos, “propensos al delito”, en función de la identificación de “factores criminogénicos”. Esto constituye una clasificación territorial basada en impresiones subjetivas, como es la “valoración del estado de edificaciones y limpieza del lugar y (..) descripción de las características predominantes percibidas en los individuos que circulan la zona”. La percepción subjetiva marca la estrategia analítica y clasificatoria de un espacio social determinado.
La intervención se focaliza en territorios delimitados por parte de fuerzas represivas, que, inexpertas para trabajar en primer nivel de abordaje, controlan, presionan y registran poblaciones, y en paralelo dibujan un mapa subjetivo de la zona, basado en calificaciones arbitrarias sobre sus características.
Lo que reproduce
El modelo de patrullaje de alta intensidad trae aparejado el aumento en éstas zonas de la intervención sobre personas, que es realizada de forma aleatoria y discrecional. En efecto, de acuerdo a la OPP, en Montevideo por cada persona detenida se paró y registró a otras 48 en promedio, mientras que en Canelones y San José se realizaron registros a 121 (en promedio). Sólo en las zonas donde el PADO intervino los primeros dos meses fueron paradas y registradas cerca de 40.000 personas. Debe a su vez mencionarse que las detenciones no significan la resolución de algún hecho delictivo. Hablando en términos de eficiencia, los resultados de ésta tarea deberían ser fuertemente cuestionados.
Sin embargo, las consecuencias de dicho accionar “preventivo” son la extensión y legitimación de una práctica violenta y estigmatizante para la población que por allí circula, que es controlada de forma permanente y discrecional por la policía. Esto limita su libertad. A su vez, dicho sesgo se profundiza si tomamos en cuenta la “selección criminalizante” que la policía realiza sobre un otro “sospechoso”, donde los jóvenes varones pobres provenientes de zonas periféricas, son los más sometidos a la revisión y violencia policial [7].
Para el Ministerio del Interior no parece ser un problema, ya que, más allá de las estadísticas de crimen, no evalúa los efectos que la acción discrecional de la policía en territorio, y la violencia asociada a la misma tiene en las comunidades afectadas.
Misma receta
La intervención territorial ejecutada puede ser calificada como exitosa si nos focalizamos en los objetivos propuestos por el MI; las zonas bajo custodia del PADO vieron reducidos cerca de un 41% la cantidad de rapiñas para 2016. Los resultados parecen vistosos en términos cuantitativos. Para los objetivos y la definición política que en materia de seguridad ha incorporado el Ministerio, esta estrategia cuadra perfectamente con las acciones desarrolladas en los últimos años [8]. A su vez, la campaña de visualización en incorporación de tecnología legitima la estrategia, disfrazándola de ciencia desplegada. Esto se inscribe en la retórica del proceso de modernización, cristalizado en la “nueva policía”.
El PADO profundiza una forma de pensar y ejecutar la política pública en materia de seguridad ciudadana, basada en mostrar que se están reprimiendo los delitos que más influyen en la opinión pública (delitos contra la propiedad: rapiñas, hurtos y copamientos). Desafortunadamente no existen respuestas tan espectaculares para el delito de cuello blanco, los delitos ambientales o la violencia de género, que reportan altos riesgos para la población.
A su vez, esta jerarquización se desarrolla desde y en haras de continuar delineando un sujeto peligroso, segregando territorial y socioeconómicamente a la población residente en determinadas zonas de la ciudad [9]. La policía realiza un trabajo de creación de “chivos expiatorios individuales y barriales, con el fin de poder, con los primeros, generar un miedo próximo, dado que, los delincuentes, al ser mostrados como sujetos errantes en las urbes, omnipotentes y omniscientes, pueden atacar en cualquier momento; (…) encarnar el delito en un espacio físico, en particular barrios marginados para intervenir esos lugares con operativos aleatorios y, a su vez, justificar el avance del control y la vigilancia en los otros, por prevención” [10].
[1] “No me niego a discutir aumentar penas”. Entrevista a Bonomi en Semanario Brecha, 17 de junio de 2016. En: https://brecha.com.uy/no-me-ni ego-discutir-aumentar-penas/
[2] Hacia la rendición de cuentas de 2017 se preveía la incorporación de mayor personal policial (cerca de 500 efectivos), gran proporción de ellos provenientes de la Guardia Republicana (al menos 150).
[3] Dirección de Gestión y Evaluación, Oficina de Planeamiento y Presupuesto. Evaluación DID del Programa de Alta Dedicación Operativa. Montevideo, año 2016. Disponible en http://transparenciapresupuest aria.opp.gub.uy/inicio/registr o-nacional-d...
[4] o predict and serve? Kristian Lum y William Isaac, publicado en Octubre de 2016 en Significance (V13-I5). Disponible en: http://onlinelibrary.wiley.com /doi/10.1111/j.1740-9713.2016. 00960.x/full
[5] Ana Sosa, Jefa de la Unidad de Análisis Criminal, Ministerio del Interior. En “Huellas codiciadas” Artículo de Semanario Brecha. 7 de julio de 2017. En https://brecha.com.uy/huellas- codiciadas/
[6] El punto crítico, lugar inicial de la clasificación territorial del fenómeno, es un lugar de hasta 10 metros donde han ocurrido como mínimo 14 rapiñas en un año. El segmento, por su parte, es un trayecto de entre 100 y 200 metros donde se registran por lo menos 15 rapiñas al año. El circuito es un espacio territorial que engloba ambas caracterizaciones.
[7] En este sentido, vale recordar la encuesta sobre Violencia policial que realizó Serpaj en conjunto con otras organizaciones, que confirma la selectividad marcada en cacheos y detenciones de adolescentes y jóvenes en los espacios públicos de Montevideo: el 16,1% de los adolescentes y jóvenes varones residentes en barrios de contexto fueron parados por la policía entre 2011 y 2015 (cifra que aumenta considerablemente en mayores de 18 años), ejecutándose su mayoría en barrios con peores indicadores socioeconómicos. Esta situación se sostiene en los territorios donde aumenta el nivel socioeconómico, siendo alta la proporción de jóvenes intervenidos por la policía que residen en barrios pobres. Ver en http://www.serpaj.org.uy/serpa j/index.php/documentos-de-inte res/file/52-vi
[8] Operativos de saturación, razzias, desarrollo de sistema de videovigilancia, construcción de nuevas cárceles, aumento sostenido de las penas, son algunos ejemplos
[9] Sansone, Mostrar sin demostrar: un acercamiento crítico a la política de comunicación del Ministerio del Interior de Uruguay. Tesis de grado FCS-Udelar, Montevideo, abril 2017
[10] Sansone 2017, página 2
Desde hace ya varios años la principal preocupación de los uruguayos, de acuerdo a los barómetros de opinión pública, es “la inseguridad”. Si bien el Frente Amplio no articula un discurso potente al respecto, este problema sistemáticamente aparece en escena asociado al miedo al delito común, con un destaque de las rapiñas. Tabaré Vázquez se comprometió, durante la campaña electoral, a reducir un 30% las mismas. El Ministro Bonomi, por su parte, sostiene que este delito “lleva a la gente a sentir más inseguridad” [1]. La solución a la principal preocupación de los uruguayos pasa entonces por la reducción de las rapiñas.
El PADO comienza en Montevideo a partir de 2015, expandiéndose a Canelones y San José en 2016 y 2017, e implementa un sistema de patrullaje focalizado en zonas delimitadas por la concentración de denuncias de delito. La premisa es simple: el delito se concentra en determinados lugares de la ciudad, por lo que, con la tecnología adecuada, se puede estimar la ubicación de esos lugares y concentrar recursos policiales allí. El PADO promete, de manera moderna y eficiente reducir las rapiñas, que, mutatis mutandis sería reducir la inseguridad.
Éste programa ocupaba, a julio de 2016, a 815 policías, que desde distintas procedencias (400 de Montevideo, 120 de Canelones, 25 de San José y 270 de la Guardia Republicana) [2] se disponían a integrarse al Programa, a cambio de un incentivo salarial. La OPP calcula que el programa costó 538 millones de pesos durante el ejercicio 2016. La operativa se coordina desde el moderno centro de control de la Unidad de Análisis Criminal (UAC). Allí se procesa toda la información recabada por la policía (a través de las denuncias realizadas, patrullaje, y cámaras de videovigilancia). El PADO depende de la Secretaría del MI, y es comandado por el Director de Policía Nacional, Crio. General (r) Mario Layera. Esta estructura de mando centralizado es diferente de la lógica de patrullaje territorial coordinada por comisarías, y aunque existe un movimiento hacia la concentración de mando operativo en el vértice del ministerio, estas lógicas aún conviven.
La intervención apunta a la ejecución de dos estrategias conjuntas y complementarias: la realización de un patrullaje de prevención y represión del delito, y la elaboración de un relevamiento ambiental, a través de un formulario que recoge características del territorio delimitado.
Moderno disfraz
Se parte de la base que «existe una vinculación “fuerte” entre lugar y delito (más que entre delito y persona), lo que significa plantear la hipótesis de que los microterritorios tienen características físicas y sociales que incrementan las oportunidades para cometer delitos» [3]. Ante la situación de crecimiento de las denuncias de rapiñas durante 10 años consecutivos, el Ministerio del Interior decidió actuar en las zonas donde se éstas se desarrollan en mayor medida. Definió entonces incorporar softwares de georreferenciación y sistematización de los hechos, fortaleciendo para ello la Unidad de Análisis Criminal (UAC), y desarrollando el Sistema de Gestión de Seguridad Pública, que se orienta a sistematizar datos vinculados a la consecución de delitos. Una de las piezas claves de este enfoque de policiamiento predictivo es PredPol.
PredPol nace de un proyecto de investigación realizado por el Departamento de Policía de Los Ángeles y la Universidad de California en Los Ángeles (UCLA). Este software se alimenta de datos de delitos, los procesa en función de un algoritmo propietario, y devuelve una retícula en un mapa, con determinados “puntos calientes”. Dichos puntos indican que allí existe una alta probabilidad de que se cometa un delito. La lógica operativa se orienta, entonces, a ubicar patrullaje extra en esos puntos, de manera de estar ahí para prevenir reprimiendo. PredPol, y otros softwares similares han sido utilizados en diferentes ciudades del mundo con resultados ambiguos, y el sistema de policiamiento que propone ha sido puesto en cuestión en numerosas ocasiones.
Estos programas realizan machine learning; es decir, detectan patrones en los datos de los que se alimenta, para luego repetirlos en futuras predicciones. Por lo tanto, y esto vale para todos los sistemas que dependen de algoritmos, la información que nos devuelva será sólo tan buena como los datos que ingresemos. Esto presenta un cuestionamiento fundamental: como señalan Lum e Isaac [4], los registros policiales no miden el crimen, sino una interacción compleja entre la criminalidad, la estrategia policial y las relaciones entre la policía y la comunidad.
Como ejemplo, en el estudio citado se encuentra que en Oakland, Estados Unidos, esa interacción resulta en el envío de policías a ejercer presión sobre zonas pobres, que eran por otra parte las zonas donde la policía tradicionalmente ejercía presión. Por lo tanto, eran las zonas que aparecían en los registros que se utilizaron para alimentar al PredPol en un primer lugar. Un algoritmo es una máquina de encontrar patrones y repetirlos. Aplicada sin cuidado, su lógica es la del círculo vicioso. La tecnología se convierte en un legitimador del viejo olfato policial.
Para el Ministerio del Interior, sin embargo, dicho sistema logró “tener conocimiento cabal de cuál es la situación criminal en el país” pudiendo establecer “perfil de la víctima, del victimario y del escenario donde están operando los criminales” [5].
Cabría cuestionar dicha afirmación, ya que en sus primeros dos meses de actividad el PADO registró a 39.327 personas para detener a 734. Parece plausible pensar que, si una patrulla registra personas que pasan por un determinado cuadrante donde estadísticamente se han producido más delitos, eventualmente pueda encontrar personas que lo hayan cometido ¿Es entonces esa una estrategia eficiente?
En territorio
El trabajo de georreferenciación realizado por la UAC estableció 120 segmentos [6] en 28 circuitos, lo que representa el 8% del territorio metropolitano, el 1% del total de las calles montevideanas, y el 27% de su población. En Canelones, se definieron 50 segmentos en 19 circuitos, mientras que en San José 11 segmentos en 5 circuitos.
El abordaje territorial se simplificó en sostener la custodia constante de éstas áreas creadas, “asignando a cada circuito un equipo conformado de manera estándar por: un oficial (con vehículo de cuatro ruedas), entre dos y tres policías de a pie por segmento, y de dos a cuatro policías en moto“. De esta forma, se ubica a los policías de a pie en segmentos, que son acompañados por el patrullaje de móviles en los circuitos, dotados con equipos de acceso a bases de datos de control de personas, vehículos, así como contacto con la base.
De esta forma, bajo fines “prevencionistas”, se logra imponer en zonas calificadas “de conflicto” un sistema de vigilancia y revisión casi constante de personas, vehículos, instalaciones y actividades desarrolladas. Asimismo, las tareas de previsión se tornan tareas represivas, con la utilización y abuso de “controles de rutina” tales como el pedido de documentación, registro o cacheo en la vía pública, sin razón aparente.
Este trabajo territorial se complementa con el desarrollo de una segunda tarea prevista por el programa, que es la elaboración de un relevamiento ambiental. El mismo supone una caracterización de la zona, en función de la búsqueda y localización de elementos que “estimulan” el delito. Así, se construyen y caracterizan escenarios peligrosos, “propensos al delito”, en función de la identificación de “factores criminogénicos”. Esto constituye una clasificación territorial basada en impresiones subjetivas, como es la “valoración del estado de edificaciones y limpieza del lugar y (..) descripción de las características predominantes percibidas en los individuos que circulan la zona”. La percepción subjetiva marca la estrategia analítica y clasificatoria de un espacio social determinado.
La intervención se focaliza en territorios delimitados por parte de fuerzas represivas, que, inexpertas para trabajar en primer nivel de abordaje, controlan, presionan y registran poblaciones, y en paralelo dibujan un mapa subjetivo de la zona, basado en calificaciones arbitrarias sobre sus características.
Lo que reproduce
El modelo de patrullaje de alta intensidad trae aparejado el aumento en éstas zonas de la intervención sobre personas, que es realizada de forma aleatoria y discrecional. En efecto, de acuerdo a la OPP, en Montevideo por cada persona detenida se paró y registró a otras 48 en promedio, mientras que en Canelones y San José se realizaron registros a 121 (en promedio). Sólo en las zonas donde el PADO intervino los primeros dos meses fueron paradas y registradas cerca de 40.000 personas. Debe a su vez mencionarse que las detenciones no significan la resolución de algún hecho delictivo. Hablando en términos de eficiencia, los resultados de ésta tarea deberían ser fuertemente cuestionados.
Sin embargo, las consecuencias de dicho accionar “preventivo” son la extensión y legitimación de una práctica violenta y estigmatizante para la población que por allí circula, que es controlada de forma permanente y discrecional por la policía. Esto limita su libertad. A su vez, dicho sesgo se profundiza si tomamos en cuenta la “selección criminalizante” que la policía realiza sobre un otro “sospechoso”, donde los jóvenes varones pobres provenientes de zonas periféricas, son los más sometidos a la revisión y violencia policial [7].
Para el Ministerio del Interior no parece ser un problema, ya que, más allá de las estadísticas de crimen, no evalúa los efectos que la acción discrecional de la policía en territorio, y la violencia asociada a la misma tiene en las comunidades afectadas.
Misma receta
La intervención territorial ejecutada puede ser calificada como exitosa si nos focalizamos en los objetivos propuestos por el MI; las zonas bajo custodia del PADO vieron reducidos cerca de un 41% la cantidad de rapiñas para 2016. Los resultados parecen vistosos en términos cuantitativos. Para los objetivos y la definición política que en materia de seguridad ha incorporado el Ministerio, esta estrategia cuadra perfectamente con las acciones desarrolladas en los últimos años [8]. A su vez, la campaña de visualización en incorporación de tecnología legitima la estrategia, disfrazándola de ciencia desplegada. Esto se inscribe en la retórica del proceso de modernización, cristalizado en la “nueva policía”.
El PADO profundiza una forma de pensar y ejecutar la política pública en materia de seguridad ciudadana, basada en mostrar que se están reprimiendo los delitos que más influyen en la opinión pública (delitos contra la propiedad: rapiñas, hurtos y copamientos). Desafortunadamente no existen respuestas tan espectaculares para el delito de cuello blanco, los delitos ambientales o la violencia de género, que reportan altos riesgos para la población.
A su vez, esta jerarquización se desarrolla desde y en haras de continuar delineando un sujeto peligroso, segregando territorial y socioeconómicamente a la población residente en determinadas zonas de la ciudad [9]. La policía realiza un trabajo de creación de “chivos expiatorios individuales y barriales, con el fin de poder, con los primeros, generar un miedo próximo, dado que, los delincuentes, al ser mostrados como sujetos errantes en las urbes, omnipotentes y omniscientes, pueden atacar en cualquier momento; (…) encarnar el delito en un espacio físico, en particular barrios marginados para intervenir esos lugares con operativos aleatorios y, a su vez, justificar el avance del control y la vigilancia en los otros, por prevención” [10].
[1] “No me niego a discutir aumentar penas”. Entrevista a Bonomi en Semanario Brecha, 17 de junio de 2016. En: https://brecha.com.uy/no-me-ni
[2] Hacia la rendición de cuentas de 2017 se preveía la incorporación de mayor personal policial (cerca de 500 efectivos), gran proporción de ellos provenientes de la Guardia Republicana (al menos 150).
[3] Dirección de Gestión y Evaluación, Oficina de Planeamiento y Presupuesto. Evaluación DID del Programa de Alta Dedicación Operativa. Montevideo, año 2016. Disponible en http://transparenciapresupuest
[4] o predict and serve? Kristian Lum y William Isaac, publicado en Octubre de 2016 en Significance (V13-I5). Disponible en: http://onlinelibrary.wiley.com
[5] Ana Sosa, Jefa de la Unidad de Análisis Criminal, Ministerio del Interior. En “Huellas codiciadas” Artículo de Semanario Brecha. 7 de julio de 2017. En https://brecha.com.uy/huellas-
[6] El punto crítico, lugar inicial de la clasificación territorial del fenómeno, es un lugar de hasta 10 metros donde han ocurrido como mínimo 14 rapiñas en un año. El segmento, por su parte, es un trayecto de entre 100 y 200 metros donde se registran por lo menos 15 rapiñas al año. El circuito es un espacio territorial que engloba ambas caracterizaciones.
[7] En este sentido, vale recordar la encuesta sobre Violencia policial que realizó Serpaj en conjunto con otras organizaciones, que confirma la selectividad marcada en cacheos y detenciones de adolescentes y jóvenes en los espacios públicos de Montevideo: el 16,1% de los adolescentes y jóvenes varones residentes en barrios de contexto fueron parados por la policía entre 2011 y 2015 (cifra que aumenta considerablemente en mayores de 18 años), ejecutándose su mayoría en barrios con peores indicadores socioeconómicos. Esta situación se sostiene en los territorios donde aumenta el nivel socioeconómico, siendo alta la proporción de jóvenes intervenidos por la policía que residen en barrios pobres. Ver en http://www.serpaj.org.uy/serpa
[8] Operativos de saturación, razzias, desarrollo de sistema de videovigilancia, construcción de nuevas cárceles, aumento sostenido de las penas, son algunos ejemplos
[9] Sansone, Mostrar sin demostrar: un acercamiento crítico a la política de comunicación del Ministerio del Interior de Uruguay. Tesis de grado FCS-Udelar, Montevideo, abril 2017
[10] Sansone 2017, página 2
La economía de a pie.
LA INDUSTRIA EN URUGUAY 2018.
Primera quincena marzo 2018.
LA INDUSTRIA EN URUGUAY 2018.
La industria
manufacturera localizada en Uruguay se ha reestructurado durante los
últimos cuarenta años en un marco de pérdida de importancia dentro del
PBI y el empleoi.
Extranjerización casi absoluta de los principales rubros exportadores
apoyados en materias primas locales, integración a cadenas regionales
controladas por grandes grupos económicos o desaparición de actividades
históricamente volcadas al mercado local.
Su escaso dinamismo
proviene casi exclusivamente de algunos rubros ubicados en zonas
francas que funcionan como apéndices de empresas foráneas mientras el
promedio del núcleo industrial se ha estancado o retrocede en el largo
plazo. Los datos finales respecto al índice de volumen físico de la
industria publicados por el INE para 2018, confirman la tendencia.
El registro
desciende un 7% respecto a 2016, aunque el cierre de la refinería de
ANCAP durante gran parte del año distorsiona las cifras. Empero si se
excluye su incidencia el crecimiento durante todo el año es un escuálido
0.3%ii.
El índice de horas trabajadas descendió aproximadamente un 2%. La
inversión en maquinarias y equipo industriales también cayó 11% en el
año según datos de la Cámara de Industrias.
El último decenio
revela que la producción de celulosa se multiplicó por 12 merced a los
enclaves de UPM y Montes del Plata localizados en las zonas francas de
Fray Bentos y Punta Pereira a la par que crecieron en menor medida
sectores de la química que las abastecen y concentrados de bebida
también en zonas francas. Ganancias y dinamismo se transfieren a las
casas matrices más allá de las etapas de instalación de las plantas que
incentivan como una estrella fugaz actividades vinculadas como la
metalurgia y construcción.
La otra cara de la
moneda son ramas industriales ubicadas en territorio nacional que crecen
débilmente, se encuentran estancadas, han reducido drásticamente su
actividad o incluso han cesado su producción.
El moderado crecimientoiii
de algunos rubros alimenticios vinculados a la exportación se ha
moldeado al compás del mercado internacional y los ciclos de producción
de las materias primas. Frigoríficos, molinos, lácteos, pesca,
ejemplifican al respecto. En particular los tres últimos rubros
mencionados se encuentran actualmente en graves dificultades, como lo
revelan cierres de plantas y concursos de acreedores.
La industria textil se ha reducido a menos de la mitad en los últimos 10 añosiv la vestimenta a la quinta partev, la producción de las curtiembres se redujo en un 20%vi.
La Cámara de
industrias en su último reporte sobre capacidad ociosa del tercer
trimestre de 2017, registra que se utilizó solamente un 63%. La
principal causa esgrimida por el 54% de los encuestados fue la
insuficiencia de demanda interna y un 53% falta de demanda externa.
Solamente un 10% mencionó costos laborales.
La encuesta revela
que la competencia de productos importados de hecho subsidiados por las
políticas de retraso del tipo de cambio y el neoliberalismo galopante
con su eliminación de medidas proteccionistas golpean la actividad de
las industrias volcadas al mercado local. Grupos industriales se
transforman en importadores. Paralelamente el atraso del tipo de cambio
afecta negativamente exportaciones
El saldo de las
transformaciones industriales no es positivo. La inversión extranjera
significó generalmente un cambio de propiedad de las empresas que no
dinamizó el sector ni generó empleos. Los enclaves de celulosa
contribuyeron también al incremento de la apropiación de plusvalía y
riquezas locales por parte de grupos transnacionales.
GOTITAS DE ECONOMÍA
-
Grupos financieros especuladores en los centros imperiales continúan obteniendo “dinero fácil” en sus zonas origen a tasas de interés muy bajas y otorgando créditos a países del sur con enormes rendimientos económicos pero mayor riesgo. En eso consiste lo que algunos denominan “carry trade”. El cono sur de América latina y en particular Uruguay reciben prestados esos dólares y euros, pagando enormes tasas de interés medidas en esas monedas. El consiguiente aumento de la oferta de divisas es una de las explicaciones del atraso del tipo de cambio en Uruguay.
-
El presidente del BCU niega el atraso cambiario. Mientras tanto el dólar “barato” convierte a Uruguay es uno de los países más caros del mundo en dicha moneda. El jerarca alega que el BCU compró 4000 millones en 2017 para evitar que el dólar baje. Sin embargo las reservas del BCU son prácticamente iguales a un año atrás. ¿Donde están los dólares supuestamente comprados? ¿Porqué no dice además que aumenta la emisión de deuda pública por parte de esa institución atrayendo mayor oferta de dólares para provocar el descenso de su cotización?
-
Se reiteran rechazos de contenedores de carne bovina enviados desde Uruguay a Europa. Los reportes de los servicios sanitarios de la Comisión europea argumentan la existencia de micro organismos patógenos. En enero de 2018 se registraron dos casos en puertos de Holanda y otro en Italia a los que se agrega en febrero un rechazo en Alemania. Descuidos en las plantas exportadoras? Fallas en los controles sanitarios locales? Proteccionismo europeo? O un poco de cada cosa.
-
Prensa argentina informa que la UIA Argentina y la CNI brasilera redactaron un informe elevado a los negociadores del acuerdo Mercosur Unión europea en nombre de las cámaras industriales de los países del sur en el que expresan su disconformidad con la falta de transparencia y reclaman extensión de los períodos de desgravación arancelaria, eliminación de subsidios agrícolas europeos, mantenimiento de los límites al acceso a compras y licitaciones del sector público, rechazo a extensión de patentes.
-
La asunción de Jerome Powell como presidente de la autoridad monetaria de Estados Unidos genera cautela en los mercados financieros respecto a las futuras políticas sobre las tasas de interés en ese país. Las declaraciones iniciales del jerarca no marcaron mayores diferencias con sus antecesores.
-
La prensa informa de un derrame de petróleo en la Amazonía peruana. El responsable Energás, compañía que figura como canadiense.
iEn
1977 representaba el 30% del producto. En la actualidad apenas supera
el 15%. La ocupación descendió desde un entorno de 240.000 trabajadores a
poco más de 100.000..
ii El IVF del cuarto trimestre exhibe un descenso desde 147.2 a 145.9 respecto al mismo período del año anterior.
iiiApr0oximadamente un 2% anual en los últimos doce años.
ivCon índice 100 en 2006, actualmente ronda un valor de 40.
vCon base 100 en 2006, el promedio de 2017 fue de 18.15.
viEL índice 100 de 2006 en el promedio de 2017 se reduce a 78.8.