ARGENTINA
12/08/2019
Guardando los globos: aplastante derrota de Mauricio Macri
Sorprendiendo a propios y extraños, la fórmula Alberto
Fernández-Cristina Fernández del Frente de Todos se impuso este domingo
en las PASO por el amplio margen de 47,65% contra el 32,08% de votos
logrado a nivel nacional por el Frente Por el Cambio de la fórmula
Mauricio Macri-Miguel Angel Pichetto. En la provincia de Buenos Aires,
Axel Kicillof se impuso por un 49,34% contra el 32,56% logrado por María
Eugenia Vidal. Un contundente voto castigo – que se repetirá en octubre
– de la población contra las políticas económicas macristas de ajuste,
recortes, despidos, desocupación, inflación y pérdida del valor
adquisitivo. Derrota, también, de los medios hegemónicos oficialistas y
de la mayoría de las consultoras privadas, que pronosticaban empates o
poca diferencia. Expectativa por cómo reaccionan los «mercados». Por ANRed.
Contra todos los pronósticos de posibles empates técnicos o pequeños márgenes de diferencia, que los medios tradicionales hegemónicos oficialistas y muchas consultoras privadas instalaron durante las semanas previas a las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO), la fórmula Alberto Fernández-Cristina Fernández se impuso a la de Mauricio Macri-Miguel Angel Pichetto a nivel nacional por 15 puntos. Más contundente aún fue la diferencia de casi 17 puntos de la fórmula Axel Kicillof-Verónica Magario sobre la de María Eugenia Vidal-Daniel Salvador en la estratégica provincia de Buenos Aires.
Los resultados se conocieron tardíamente. En un principio, desde los equipos de prensa del Ministerio del Interior (a cargo de Rogelio Frigerio) se hizo circular entre los y las periodistas presentes la versión de que el recuento provisorio de votos iba a tardar más de la cuenta debido a una caída en el sistema digital de SmartMatic, la empresa contratada por el gobierno de Cambiemos para esa función. Luego se supo por veedores internacionales que el sistema siempre funcionó bien, sólo que el gobierno esperó a tener «una muestra más representativa» antes de dar a conocer resultados. Fue una maniobra que anticipó, junto con la imagen del empleado que empezaba a guadar los globos amarillos, la contundente derrota que se avecinaba.
Fue así que el – todavía – presidente Mauricio Macri, cuando aún no habían datos oficiales y poco después de las 22, reconocía: «Hemos tenido una mala elección y eso nos obliga a redoblar los esfuerzos de cara a octubre para seguir con los cambios – expresó, visiblemente triste y mostrándose aún en competencia – Quiero que sepan que escuchamos el voto de la gente. Creemos en la democracia y en la expresion en la gente«, sostuvo. El broche de su intervención fue cuando mandó a dormir a los argentinos y argentinas, sin resultados oficiales, para ocultar lo imponente de la derrota: «es hora de ir a dormir». Un poco más tarde, rápidamente se viralizaba en las redes la imagen desoladora del personaje popular conocido como el Mago Sin Dientes, quedándose sólo en el búnker oficialista. Todo un símbolo de fin de ciclo.
Luego habló el resto de precandidatos, salvo María Eugenia Vidal quien, visiblemente molesta por los resultados, no quiso dar declaraciones en la conferencia de prensa oficialista. Alberto Fernández fue el último en dirigir unas palabras: «se terminó el concepto de venganza, de grieta y de cualquier cosa que nos divida. Hoy la Argentina dió un veredicto claro, que dice cambiemos, pero en serio. Nosotros éramos el cambio, no ellos. Una vez más vamos a arreglar los problemas que otros generaron«, aseguró. Y agregó: «los que se fueron a dormir, les pido que no duerman».
Con un 75,78% de participación de la población y el 98,67% de las mesas computadas a nivel nacional, el resultado prácticamente ya corona a Alberto Fernández como el próximo presidente argentino, dado que nada parece hacer cambiar las cosas de cara a octubre. Si el kirchnerismo conserva esos votos gana cómodo en la primera vuelta porque el macrismo no llega a competir ni aún sumando el porcentaje de votos logrado por el resto de partidos de centro o derecha, como el partido Consenso Federal de Roberto Lavagna (8,22%), el Frente Nos de Cynthia Hotton (2,63%), el partido Unite por la Libertad y la Dignidad de Luis Espert (2,18%), el Frente Patriota del fascista Alejandro Biondini (0,24%) y el Movimiento de Acción Vecinal de Raúl Albarracín (0,14%).
Se trató de un contundente voto popular que castigó al gobierno de Mauricio Macri por sus políticas económicas de ajuste, recortes, despidos, cierre de fábricas, desocupación, aumento de la pobreza y la indigencia, aumento constante de la inflación, pérdida imparable del valor del peso argentino y deuda exhorbitante con el FMI.
El resultado se mantuvo, o se amplió incluso más, en casi todas las provincias del país, con excepción de Córdoba y la Ciudad de Buenos Aires. En Córdoba, Juntos por el Cambio se impuso por 48,18% contra un 30,39%. Mientras que en la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta ganó por un 44,71% contra un digno 33,04% de Matías Lammens.
Otra de las preguntas que queda flotando es si el centenario partido UCR desaparece como experiencia política. Arrastrado a la derrota por su alianza con el macrismo, el partido radical perdió también contundentemente en las únicas dos provincias en las que era fuerte: Mendoza, donde el gobernador Alfredo Cornejo tuvo que salir a reconocer su derrota por tres puntos (40,48% contra 37,33%), y en Jujuy, donde la diferencia fue de 46,09% contra 29,09%.
La victoria total de los Fernández desfiguró las caras en el gobierno y despejó fantasmas que se agitaron desde las encuestas, de parte de algunos malintensionados analistas y desde el «periodismo de guerra» oficialista, que por momentos hizo creer, a los ojos de la virtualidad, que era posible una reelección anómala en la historia de las ciencias políticas: que sea reelecto un gobierno al que le dan mal todos los índices económicos. Detrás de la pirotecnica publicitaria estaba esperando un contudente escarmiento: el voto castigo de una población que vivió la fragilidad económica con un alza en el costo de vida constante, la pérdida de trabajo y del consumo.
La vuelta del peronismo plantea el fin de la aventura de un sector de la burguesía que apostaba algún poroto a que Cambiemos podía pilotear la tormenta. Desde ahora se reconfigura un nuevo escenario en torno al recambio, a las deudas por pagar y como llegar a la transición. El giro contundente también trastorna el escenario Latinoamericano, con un parate a las fuerzas liberales y de corte populistas de derecha que habían avanzado con la caída los progresismos en la anterior oleada.
El primer signo habría sido el triunfo de Manuel López Obrador en México. El presidente estadounidense Donald Trump hizo público el apoyo a Mauricio Macri, quien había desestimado el proyecto de «la nueva ruta de la seda» que impulsa China y que lideraba las arremetidas contra la Venezuela de Nicolás Maduro. La debacle de Cambiemos pone hasta en riesgo la transición en un clima de desmoralización de su principales aliados en el sector político, empresario y en los grandes medios de comunicación, que endurecieron su crítica en las últimas horas.
La mayoría de los medios de comunicación liberales y especializados en finanzas del mundo salieron a caracterizar la elección como un triunfo del «populismo» y una regresión de Argentina. Ahora, todas las miradas están atentas a la posibilidad o no de que se abra un canal de diálogo entre Mauricio Macri y el futuro presidente Alberto Fernández para encauzar la transición para lo que resta del año. También hay expectativa por cuál será la reacción de los llamados «mercados» luego de los resultados, por lo que se esperan nuevas corridas por el dólar, que volvería a impactar en el valor del peso, reduciendo aún más la capacidad adquisitiva de argentinos y argentinas, en el marco de este fin de fiesta, donde se guardaron los globos amarillos.
KAOS EN LA RED - Publicado en: 12 agosto, 2019
Contra todos los pronósticos de posibles empates técnicos o pequeños márgenes de diferencia, que los medios tradicionales hegemónicos oficialistas y muchas consultoras privadas instalaron durante las semanas previas a las elecciones primarias, abiertas, simultáneas y obligatorias (PASO), la fórmula Alberto Fernández-Cristina Fernández se impuso a la de Mauricio Macri-Miguel Angel Pichetto a nivel nacional por 15 puntos. Más contundente aún fue la diferencia de casi 17 puntos de la fórmula Axel Kicillof-Verónica Magario sobre la de María Eugenia Vidal-Daniel Salvador en la estratégica provincia de Buenos Aires.
Los resultados se conocieron tardíamente. En un principio, desde los equipos de prensa del Ministerio del Interior (a cargo de Rogelio Frigerio) se hizo circular entre los y las periodistas presentes la versión de que el recuento provisorio de votos iba a tardar más de la cuenta debido a una caída en el sistema digital de SmartMatic, la empresa contratada por el gobierno de Cambiemos para esa función. Luego se supo por veedores internacionales que el sistema siempre funcionó bien, sólo que el gobierno esperó a tener «una muestra más representativa» antes de dar a conocer resultados. Fue una maniobra que anticipó, junto con la imagen del empleado que empezaba a guadar los globos amarillos, la contundente derrota que se avecinaba.
Fue así que el – todavía – presidente Mauricio Macri, cuando aún no habían datos oficiales y poco después de las 22, reconocía: «Hemos tenido una mala elección y eso nos obliga a redoblar los esfuerzos de cara a octubre para seguir con los cambios – expresó, visiblemente triste y mostrándose aún en competencia – Quiero que sepan que escuchamos el voto de la gente. Creemos en la democracia y en la expresion en la gente«, sostuvo. El broche de su intervención fue cuando mandó a dormir a los argentinos y argentinas, sin resultados oficiales, para ocultar lo imponente de la derrota: «es hora de ir a dormir». Un poco más tarde, rápidamente se viralizaba en las redes la imagen desoladora del personaje popular conocido como el Mago Sin Dientes, quedándose sólo en el búnker oficialista. Todo un símbolo de fin de ciclo.
Luego habló el resto de precandidatos, salvo María Eugenia Vidal quien, visiblemente molesta por los resultados, no quiso dar declaraciones en la conferencia de prensa oficialista. Alberto Fernández fue el último en dirigir unas palabras: «se terminó el concepto de venganza, de grieta y de cualquier cosa que nos divida. Hoy la Argentina dió un veredicto claro, que dice cambiemos, pero en serio. Nosotros éramos el cambio, no ellos. Una vez más vamos a arreglar los problemas que otros generaron«, aseguró. Y agregó: «los que se fueron a dormir, les pido que no duerman».
Con un 75,78% de participación de la población y el 98,67% de las mesas computadas a nivel nacional, el resultado prácticamente ya corona a Alberto Fernández como el próximo presidente argentino, dado que nada parece hacer cambiar las cosas de cara a octubre. Si el kirchnerismo conserva esos votos gana cómodo en la primera vuelta porque el macrismo no llega a competir ni aún sumando el porcentaje de votos logrado por el resto de partidos de centro o derecha, como el partido Consenso Federal de Roberto Lavagna (8,22%), el Frente Nos de Cynthia Hotton (2,63%), el partido Unite por la Libertad y la Dignidad de Luis Espert (2,18%), el Frente Patriota del fascista Alejandro Biondini (0,24%) y el Movimiento de Acción Vecinal de Raúl Albarracín (0,14%).
Se trató de un contundente voto popular que castigó al gobierno de Mauricio Macri por sus políticas económicas de ajuste, recortes, despidos, cierre de fábricas, desocupación, aumento de la pobreza y la indigencia, aumento constante de la inflación, pérdida imparable del valor del peso argentino y deuda exhorbitante con el FMI.
El resultado se mantuvo, o se amplió incluso más, en casi todas las provincias del país, con excepción de Córdoba y la Ciudad de Buenos Aires. En Córdoba, Juntos por el Cambio se impuso por 48,18% contra un 30,39%. Mientras que en la Ciudad de Buenos Aires, Horacio Rodríguez Larreta ganó por un 44,71% contra un digno 33,04% de Matías Lammens.
Otra de las preguntas que queda flotando es si el centenario partido UCR desaparece como experiencia política. Arrastrado a la derrota por su alianza con el macrismo, el partido radical perdió también contundentemente en las únicas dos provincias en las que era fuerte: Mendoza, donde el gobernador Alfredo Cornejo tuvo que salir a reconocer su derrota por tres puntos (40,48% contra 37,33%), y en Jujuy, donde la diferencia fue de 46,09% contra 29,09%.
La victoria total de los Fernández desfiguró las caras en el gobierno y despejó fantasmas que se agitaron desde las encuestas, de parte de algunos malintensionados analistas y desde el «periodismo de guerra» oficialista, que por momentos hizo creer, a los ojos de la virtualidad, que era posible una reelección anómala en la historia de las ciencias políticas: que sea reelecto un gobierno al que le dan mal todos los índices económicos. Detrás de la pirotecnica publicitaria estaba esperando un contudente escarmiento: el voto castigo de una población que vivió la fragilidad económica con un alza en el costo de vida constante, la pérdida de trabajo y del consumo.
La vuelta del peronismo plantea el fin de la aventura de un sector de la burguesía que apostaba algún poroto a que Cambiemos podía pilotear la tormenta. Desde ahora se reconfigura un nuevo escenario en torno al recambio, a las deudas por pagar y como llegar a la transición. El giro contundente también trastorna el escenario Latinoamericano, con un parate a las fuerzas liberales y de corte populistas de derecha que habían avanzado con la caída los progresismos en la anterior oleada.
El primer signo habría sido el triunfo de Manuel López Obrador en México. El presidente estadounidense Donald Trump hizo público el apoyo a Mauricio Macri, quien había desestimado el proyecto de «la nueva ruta de la seda» que impulsa China y que lideraba las arremetidas contra la Venezuela de Nicolás Maduro. La debacle de Cambiemos pone hasta en riesgo la transición en un clima de desmoralización de su principales aliados en el sector político, empresario y en los grandes medios de comunicación, que endurecieron su crítica en las últimas horas.
La mayoría de los medios de comunicación liberales y especializados en finanzas del mundo salieron a caracterizar la elección como un triunfo del «populismo» y una regresión de Argentina. Ahora, todas las miradas están atentas a la posibilidad o no de que se abra un canal de diálogo entre Mauricio Macri y el futuro presidente Alberto Fernández para encauzar la transición para lo que resta del año. También hay expectativa por cuál será la reacción de los llamados «mercados» luego de los resultados, por lo que se esperan nuevas corridas por el dólar, que volvería a impactar en el valor del peso, reduciendo aún más la capacidad adquisitiva de argentinos y argentinas, en el marco de este fin de fiesta, donde se guardaron los globos amarillos.
Noam Chomsky contra Macri
Cuestionó al Presidente por las políticas que "subyugan" la democracia argentina
PÁGINA 12 - 10 de agosto de 2019
Imagen: Gentileza: La Garganta Poderosa
El
filósofo estadounidense Noam Chomsky volvió a cuestionar al presidente
Mauricio Macri. Esta vez no sólo por sus políticas económicas que
“subyugan” la democracia argentina a los mandatos de los organismos
internacionales sino sobre todo por “promover mentiras” a través de las
redes sociales y las tecnologías de comunicación. En este sentido,
recomendó que la forma de contrarrestar los efectos de esa estrategia es
“utilizar esas mismas herramientas para organizarnos de forma
constructiva contra la opresión”.
A través de un artículo publicado en La Garganta Poderosa, el intelectual de renombre internacional advirtió que las maniobras de comunicación del macrismo son las mismas que utilizan “los gobiernos antipopulares” que ponen en marcha políticas “diseñadas para el beneficio de los ricos y el poder concentrado que no pueden prosperar sin el pueblo maniatado”.
“No por coincidencia todos esos gobiernos antipopulares pagan increíbles campañas en redes sociales y apuestan a las aplicaciones que permiten promover las mentiras”, escribió Chomsky en su artículo titulado “Hoy más que nunca, Argentina”.
En ese texto puntualiza que Macri “no es un problema tan solo de los argentinos” sino que es parte de la “avanzada neoliberal” que recorre América latina y algunos países de Europa, como Gran Bretaña, donde el nuevo gobierno conservador intenta “promover u modelo de mercado” en las universidades.
Al respecto señaló que el mandatario argentino también va “a contramano de la educación pública” porque “nada puede resultar más amenazante para sus fines que liberar a las personas, emanciparlas y ayudarlas a pensar”.
Chomsky también criticó a Macri por “subyugar” la democracia argentina “a los mandatos del FMI” a través de acuerdos “de estancamiento” económico y “programas de ajuste” que “recortaron el pasado reciente, desmoronaron el presente y condicionaron el futuro”.
“Hoy más que nunca, necesitamos reunir a las buenas personas, reflexionar sobre los problemas y crear estructuras que nos permitan alimentar, abordar y superar en conjunto nuestros peores trances, nunca desde la resignación, siempre desde la acción, por adentro y por afuera de las redes”, postuló.
No es la primera vez que Chomsky, uno de los intelectuales más respetados en todo el mundo, cuestiona a Macri. A solo 15 meses de haber asumido el gobierno de Cambiemos, el politólogo fue uno de los adherentes de la solicitada que intelectuales de varios países advirtieron sobre las políticas de ajuste, los hechos de corrupción en que fueron involucrados miembros del Gabinete nacional y los presos políticos en la Argentina.
El texto completo de Chomsky:
Macri es todo eso, representa eso, expresa eso, comanda eso, a contramano de la educación pública. Y no por casualidad: nada puede resultar más amenazante para sus fines que liberar a las personas, emanciparlas, ayudarlas a pensar, invitarlas a desafiar o impulsarlas a preguntar las realidades que ningún jefe de marketing podría explicar. Pues todos los sistemas orientados a la dominación necesitan aliarse con los mecanismos de alienación, anular los cuestionamientos y convertir a la gente en robots obedientes. Aquí o allá, este tipo de gobierno sigue siempre un mismo guión: todo el presupuesto educativo transferido a la subordinación.
Al unísono, poco antes o poco después, desde distintos ángulos de América Latina, diversas democracias se han ido subyugando a los mandatos del FMI, firmando conscientemente las garantías del estancamiento y los programas de ajuste que no sólo recortaron el pasado reciente, desmoronaron el presente y condicionaron el futuro, quién sabe por cuántas décadas. No se trata de ingenuidades, ni equivocaciones, son políticas generales diseñadas para el beneficio de los ricos y el poder concentrado, que no pueden prosperar sin el pueblo maniatado.
No por coincidencia todos esos gobiernos antipopulares pagan increíbles campañas en redes sociales y apuestan a las aplicaciones que permiten promover las mentiras. Por eso entonces, debemos utilizar esas mismas herramientas para organizarnos de forma constructiva contra la opresión, porque sólo así podremos resistir. Hoy más que nunca, necesitamos reunir a las buenas personas, reflexionar sobre los problemas y crear estructuras que nos permitan alimentar, abordar y superar en conjunto nuestros peores trances, nunca desde la resignación, siempre desde la acción, por adentro y por afuera de las redes.
Hoy grito yo.
Mañana les toca a ustedes.
#YoGritoNuncaMacri
A través de un artículo publicado en La Garganta Poderosa, el intelectual de renombre internacional advirtió que las maniobras de comunicación del macrismo son las mismas que utilizan “los gobiernos antipopulares” que ponen en marcha políticas “diseñadas para el beneficio de los ricos y el poder concentrado que no pueden prosperar sin el pueblo maniatado”.
“No por coincidencia todos esos gobiernos antipopulares pagan increíbles campañas en redes sociales y apuestan a las aplicaciones que permiten promover las mentiras”, escribió Chomsky en su artículo titulado “Hoy más que nunca, Argentina”.
En ese texto puntualiza que Macri “no es un problema tan solo de los argentinos” sino que es parte de la “avanzada neoliberal” que recorre América latina y algunos países de Europa, como Gran Bretaña, donde el nuevo gobierno conservador intenta “promover u modelo de mercado” en las universidades.
Al respecto señaló que el mandatario argentino también va “a contramano de la educación pública” porque “nada puede resultar más amenazante para sus fines que liberar a las personas, emanciparlas y ayudarlas a pensar”.
Chomsky también criticó a Macri por “subyugar” la democracia argentina “a los mandatos del FMI” a través de acuerdos “de estancamiento” económico y “programas de ajuste” que “recortaron el pasado reciente, desmoronaron el presente y condicionaron el futuro”.
“Hoy más que nunca, necesitamos reunir a las buenas personas, reflexionar sobre los problemas y crear estructuras que nos permitan alimentar, abordar y superar en conjunto nuestros peores trances, nunca desde la resignación, siempre desde la acción, por adentro y por afuera de las redes”, postuló.
No es la primera vez que Chomsky, uno de los intelectuales más respetados en todo el mundo, cuestiona a Macri. A solo 15 meses de haber asumido el gobierno de Cambiemos, el politólogo fue uno de los adherentes de la solicitada que intelectuales de varios países advirtieron sobre las políticas de ajuste, los hechos de corrupción en que fueron involucrados miembros del Gabinete nacional y los presos políticos en la Argentina.
El texto completo de Chomsky:
"HOY MÁS QUE NUNCA, ARGENTINA"
El proceso de avanzada neoliberal que Mauricio Macri ha desarrollado durante su presidencia, no es un problema tan sólo de los argentinos. Y no tiene nada de nuevo, ni exclusivo, en absoluto. De igual manera dramática, está sucediendo en Brasil, pero tampoco se circunscribe al contexto latinoamericano. De hecho, ahora mismo, el gobierno conservador británico está intentando controlar a las grandes universidades, como Oxford y Cambridge, para promover un modelo de mercado, convirtiendo a instituciones académicas de primera en meras arcas comerciales.Macri es todo eso, representa eso, expresa eso, comanda eso, a contramano de la educación pública. Y no por casualidad: nada puede resultar más amenazante para sus fines que liberar a las personas, emanciparlas, ayudarlas a pensar, invitarlas a desafiar o impulsarlas a preguntar las realidades que ningún jefe de marketing podría explicar. Pues todos los sistemas orientados a la dominación necesitan aliarse con los mecanismos de alienación, anular los cuestionamientos y convertir a la gente en robots obedientes. Aquí o allá, este tipo de gobierno sigue siempre un mismo guión: todo el presupuesto educativo transferido a la subordinación.
Al unísono, poco antes o poco después, desde distintos ángulos de América Latina, diversas democracias se han ido subyugando a los mandatos del FMI, firmando conscientemente las garantías del estancamiento y los programas de ajuste que no sólo recortaron el pasado reciente, desmoronaron el presente y condicionaron el futuro, quién sabe por cuántas décadas. No se trata de ingenuidades, ni equivocaciones, son políticas generales diseñadas para el beneficio de los ricos y el poder concentrado, que no pueden prosperar sin el pueblo maniatado.
No por coincidencia todos esos gobiernos antipopulares pagan increíbles campañas en redes sociales y apuestan a las aplicaciones que permiten promover las mentiras. Por eso entonces, debemos utilizar esas mismas herramientas para organizarnos de forma constructiva contra la opresión, porque sólo así podremos resistir. Hoy más que nunca, necesitamos reunir a las buenas personas, reflexionar sobre los problemas y crear estructuras que nos permitan alimentar, abordar y superar en conjunto nuestros peores trances, nunca desde la resignación, siempre desde la acción, por adentro y por afuera de las redes.
Hoy grito yo.
Mañana les toca a ustedes.
#YoGritoNuncaMacri
Apabullante triunfo de Alberto Fernández sobre Mauricio Macri
Por Fernando CibeiraKAOS EN LA RED - Publicado en: 12 agosto, 2019
«Los argentinos empezamos a escribir otra historia»
211723-los-argentinos- empezamos-a-escribir-otra- historia
Flanqueado por la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, Eugenia Vidal; el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez, y su compañero de fórmula, el peronista Miguel Ángel Pichetto, Macri subrayó que en las próximas elecciones generales del 27 de octubre
Y agregó:
Se conoció después que el Frente de Todos ganaba con más de 47 por ciento, con 15 puntos de diferencia, y en la provincia de Buenos Aires también se imponían sus candidatos por más de 18 puntos.
Desde Santa Cruz, donde estaba la aspirante a vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, envió un mensaje, recibido con gritos y cánticos por la multitud que fue creciendo al paso de las horas. Habló con serenidad sobre la importancia de la unidad que se había logrado y la esperanza de encontrarse todos juntos, después de los comicios del 27 de octubre. Pero también remarcó: “estamos absolutamente conscientes de la crisis que está atravesando Argentina, y al referirse a los desocupados y a la pobreza, sostuvo que
Alberto Fernández agradeció a su compañera de fórmula, a quien destacó por su generosidad y su capacidad de estadista y por su compromiso con la unidad.
La política económica de este gobierno -con Mauricio Macri y sus funcionarios a la cabeza- estuvo, sin dudas, al servicio de los Mercados, el FMI y la renta financiera y en contra de la soberanía, la producción y el trabajo.
Despidos, suspensiones, pérdida del poder adquisitivo del salario, inflación, cierre de fábricas, tarifazos, represión, criminalización de la protesta, no fueron los efectos indeseados, sino las consecuencias de una política planificada, de transferencia de recursos hacia los sectores más concentrados de la economía.
Desde la CTA Autónoma estuvimos desde el primer momento en la calle, enfrentando las políticas de ajuste del gobierno de Macri, y en defensa de los derechos que los trabajadores y las trabajadoras supimos conseguir a lo largo de la historia.
Es por eso que desde nuestra Central, celebramos el resultado de estas elecciones, que marcan una derrota clara del neoliberalismo, y lo vivimos como un triunfo de la lucha y de la organización popular.
No obstante, este escenario nos pone en el compromiso de redoblar los esfuerzos para que el próximo gobierno asuma una agenda para devolver los derechos a la clase trabajadora: reincorporación de las y los despedidos, derogación de la reforma previsional y 82% móvil para las y los jubilados, recuperación del salario, paritarias libres, marcha atrás con los tarifazos en los servicios públicos, entre otras reivindicaciones urgentes.
Pero además, es imperioso que el nuevo gobierno genere las condiciones para un desarrollo productivo y soberano, promoviendo el progreso de la ciencia y la tecnología nacional, apoyo a los institutos de investigación, mejora de la educación y de la salud pública, apoyo a las Pymes y a los pequeños productores, y promoción de procesos productivos que generen más y mejor trabajo.
Asimismo, es fundamental que quien asuma la nueva gestión tome la agenda del movimiento de mujeres, colectivo LGTTBYQ y feminista por el derecho a decidir, por la igualdad de oportunidades y la lucha para erradicar todos los tipos de violencia, ratificando el Convenio 190 de la OIT, sobre violencia y acoso en el mundo del trabajo con perspectiva de género.
Una vez más ratificamos nuestro compromiso con los trabajadores y las trabajadoras de la Argentina, y nos reafirmamos en la autonomía de los gobiernos y de los patrones. Por eso es que, gobierne quien gobierne, estaremos en la calle defendiendo los intereses de la clase.
Ricardo Piedro, secretario general de la CTA-A Claudia Baigorria, secretaria general adjunta Hugo "Cachorro" Godoy, secretario general adjunto
URUGUAY
Valeria Ripoll y Eduardo Vignolo, en conferencia de prensa de ADEOM.
El
candidato del Frente de Todos derrotó por 15 puntos de diferencia al
Presidente, en un triunfo que se extendió por todo el país. Axel
Kicillof, en tanto, superó ampliamente a María Eugenia Vidal en la
provincia de Buenos Aires, en el otro resultado impactante de la
jornada.
Alberto
Fernández consiguió un espectacular triunfo sobre Mauricio Macri en las
PASO con un porcentaje del 47,3 por ciento contra el 32,2, sacando nada
menos que 15 puntos de diferencia. La amplitud del resultado, que no
pronosticó ninguna encuesta, coloca al candidato presidencial del Frente
de Todos como un casi seguro vencedor en la primera vuelta del 27 de
octubre de no mediar alguna catástrofe. La paliza, extendida
prácticamente por todo el país, también alcanzó a la provincia de Buenos
Aires, donde Axel Kicillof incluso superó por mayor porcentaje a la
gobernadora María Eugenia Vidal, el supuesto gran activo de Juntos por
el Cambio: 49,2 a 32,7 por ciento. «Los argentinos comenzamos a escribir
otra historia», sostuvo Alberto Fernández poco antes de la medianoche
en el eufórico búnker del Frente de Todos en Colegiales, copado por la
militancia tanto dentro como afuera, en la calle. El candidato
presidencial los convocó a convencer a quienes no lo habían votado para
hacerlo en las elecciones de octubre y consideró concluido el tiempo de
«la grieta». «Argentina se dio cuenta que nosotros eramos el cambio, no
ellos», afirmó.
En un gesto
simbólico, Alberto Fernández apareció en el escenario del brazo de Taty
Almeida -Madres de Plaza de Mayo- y Lita Boitano -Familiares de
Desaparecidos y Detenidos-. Ya habían hablado Matías Lammens, Máximo
Kirchner, Sergio Massa y Kicillof. El del candidato presidencial no fue
un mero discurso de agradecimiento sino que repasó algunos de los
principales ejes de su campaña. Habló de la importancia de las escuelas y
las universidades públicas, de la necesidad de que las pymes reciban
ayuda estatal y de que los jubilados tienen derecho a acceder a un
sistema de salud. Mencionó a Cristina Kirchner, quien votó en Santa
Cruz y apareció a través de un video grabado en el que destacó la
jornada electoral «sin incidentes» y «con números que nos ponen muy
contentos».
Alberto Fernández
agradeció a los gobernadores del PJ, personalizado en el tucumano Juan
Manzur, presente sobre el escenario, dominado por una atractiva pantalla
led. «Estamos seguros que el país que vamos a hacer va a ser mejor»,
afirmó Fernández, y convocó a terminar con «este tiempo de mentiras».
«Una vez más vamos a arreglar los problemas que nos dejaron», avisó.
Luego salió a un escenario montado en la calle junto a su pareja Fabiola
Yáñez, para otro mensaje a la multitud que se había agolpado allí
afuera para participar de los festejos.
El
triunfo del Frente de Todos fue vaticinado por los primeros boca de
urna que aparecieron al mediodía, pero los resultados oficiales
terminaron siendo mucho más amplios. Tal como venía anticipando la
oposición, la actuación de la empresa Smartmatic en el recuento fue un
desastre. El Gobierno prometió los primeros datos oficiales a las 21,
pero estuvieron una hora y media más tarde. Luego aparecieron los
cómputos pero la página web se cayó una y otra vez.
Antes
que eso, Macri tuvo una salida insólita, en la que salió a reconocer su
derrota sin que se hubiera difundido ni un sólo número. «Hicimos una
mala elección», admitió. Sostuvo que el resultado obligaba al Gobierno a
«redoblar los esfuerzos» a partir de hoy e insistió con el latiguillo
de que en esta elección se jugaban «los próximos 30 años de la
Argentina», sea eso lo que quiera decir. Ya había sostenido algo
parecido a la mañana cuando fue a votar y se paseó alegremente por la
veda al sostener que «los mercados esperan que los argentinos sigamos en
el mismo camino». La referencia era a la operación bursátil que armó el
propio Gobierno el viernes para hacer subir la Bolsa y simular una
apoyo del mundo financiero. No sirvió de nada.
«Duele
que no hayamos tenido el apoyo que habíamos esperado», dijo Macri,
quien saludó a Vidal, a su lado, que esta vez no habló luego de haber
sido prácticamente la voz del oficialismo durante toda la campaña. Y
felicitó a Horacio Rodríguez Larreta por el triunfo en la ciudad de
Buenos Aires, el único motivo de festejo en Costa Salguero. Que las
cosas venían mal se había notado un par de horas antes, cuando las
cámaras identificaron a un empleado sacar los globos que se habían
colocado a los costados del escenario. No había clima. Para completar lo
atípico de la salida de Macri en el búnker de Juntos por el Cambio,
cuando terminó de hablar dijo «ahora a dormir». Lo curioso era que
todavía no se había difundido ningún dato y mandaba a la ciudadanía a la
cama. Alberto Fernández no se la dejó pasar. «A los que nos mandaron a
dormir, les pido que no duerman más que ya muchos problemas nos
generaron», le lanzó, para algarabía de la militancia.
Mientras
Macri y Vidal se preparaban para una conferencia de prensa, apareció en
el escenario Elisa Carrió en una confusa arenga para animar a los
simpatizantes que se habían quedado sin habla. Tiró unos porcentajes que
no se entendieron y opinó que no era mala la adversidad porque «nos
quita la soberbia». «La mayoría se siente más cómodo con los
autoritarios y los farones», lanzó.
A lo largo y lo ancho
El
triunfo del Frente de Todos se extendió por casi todo el país, a
excepción de Córdoba y Ciudad de Buenos Aires, aunque en ambos casos
cumpliendo con el objetivo impuesto por el equipo de Alberto Fernández
de alcanzar al menos el 30 por ciento de los votos. En cambio, lograba
una sorprendente victoria en Mendoza, lo mismo que en Jujuy y
Corrientes. En los tres casos se trata de provincias gobernadas por el
radicalismo, en los que un resultado favorable se ponía en duda.
También obtenía importantes victorias en Santa Fe y en Entre Ríos, dos
provincias en las que se había impuesto Cambiemos en las presidenciales
de 2015. Un resultado llamativo fue el de Rosario, donde Fernández le
sacó 20 puntos a Macri.
Otro número
impactante fue el de Río Negro, la provincia de Miguel Angel Pichetto,
donde el Frente de Todos le ganó por más de 30 puntos a Juntos por el
Cambio. Además, Pichetto había sumado como incorporación al senador
puntano Adolfo Rodríguez Saá, pero en San Luis también cayeron por el 10
por ciento. En verdad, el triunfo se extendió por todo el norte y el
sur del país. En Santa Cruz, por casi 30 puntos. Además, en un lento
recuento debido a las complicaciones habituales que ocasiona el sistema
de la ley de Lemas, la gobernadora Alicia Kirchner obtenía su reelección
al cierre de esta edición (ver página 19).
Pero,
más allá de esos resultados más o menos impactantes, sin dudas la gran
sorpresa se daba en la provincia de Buenos Aires, con el muy cómodo
triunfo de Kicillof sobre la gobernadora Vidal, que a priori se
presentaba como la principal figura del oficialismo. El Frente de Todos
consiguió porcentajes fuera de lo común en municipios populosos como La
Matanza -61 a 21 por ciento- o Lomas de Zamora –55 a 26–. Pero también
se imponía en municipios en los que gobierna el macrismo como Lanús,
Morón, Quilmes, Pilar, Tres de Febrero y La Plata. En Mar del Plata
quedaron casi empatados.
En su
discurso de triunfo, Kicillof destacó lo desigual que había sido la
campaña en cuanto recursos. «No se gastaron millones en publicidad. No
se mintió, no se agredió», resaltó, y reiteró los 90 mil kilómetros
recorridos en el ya mítico Renault Clío de su amigo Carlos Bianco.
Omnipresente en los medios en las semanas previas, ayer Vidal pasó
cabizbaja por el búnker de Costa Salguero y no dijo palabra. En su
entorno, le apuntaban al jefe de Gabinete, Marcos Peña, por el mal
manejo de la campaña. Vidal quería desdoblar la elección para asegurarse
otro mandato en la Provincia. Sin embargo, la magnitud de la derrota
hace pensar que hubiera perdido de cualquier forma.
En
una señal de que ya se empieza a jugar la sucesión en el oficialismo,
Rodríguez Larreta dio un discurso de triunfo dedicado exclusivamente a
la Ciudad. Su triunfo del 46,4 por ciento contra el muy buen 32 por
ciento de Lammens lo dejó cerca de un triunfo en primera vuelta en
octubre. Aunque con los resultados generales de ayer, no había que dar
nada por sentado.
Polarización extrema
Entre
las dos principales fuerzas se llevaron el 80 por ciento de los votos,
lo que dejó poco para repartir entre el resto. Con el 8,3 por ciento,
Roberto Lavagna salió a celebrar el módico consuelo de haber convertido a
Consenso Federal -a años luz de los dos primeros- en la tercera fuerza
del país. Por la noche, Lavagna llamó a Alberto Fernández para
felicitarlo, lo que podía anticipar un acercamiento entre ambas fuerzas.
Las
otras tres fuerzas que consiguieron superar el piso para competir en
las elecciones generales eran el FIT-Unidad con el 2,9 por ciento, el
Frente NOS de Juan José Gómez Centurión que obtuvo el 2,6 por ciento y
la alianza Unite del mediático economista José Luis Espert, quien luego
de tantas dificultades para llevar adelante su postulación, consiguió
apenas el 2,2 por ciento, bastante menos de lo que le auguraban los
sondeos.
https://www.pagina12.com.ar/"Hemos tenido un día muy malo", dice Macri tras el impacto de su derrota en los mercados
Publicado: 12 ago 2019 19:26 GMT | Última actualización: 12 ago 2019 20:10 GMT - RT
El presidente de Argentina mantuvo una
reunión con su Gabinete y aseguró que no habrá cambio de funcionarios de
cara a las elecciones generales de octubre.
El presidente de Argentina, Mauricio Macri, ofreció una conferencia de prensa en la tarde de este lunes, luego de la contundente derrota del oficialismo en las elecciones primarias y el brusco impacto económico que generó el resultado, tanto en el precio del dólar como en los mercados financieros.
"Toda elección es un mensaje y nosotros lo hemos escuchado", sostuvo Macri desde la Casa Rosada. Y añadió que espera revertir el resultado en las elecciones generales de octubre. "Estamos convencidos de que tenemos muchas cosas para proponer todavía. Va a ser una buena oportunidad para demostrar que el cambio continúa", aseguró.
"Los votos que no nos acompañaron representan una bronca acumulada de los últimos tres años y medio. Lo entendemos, estamos acá para seguir trabajando y vamos a revertir la mala elección de ayer", manifestó el jefe de Estado argentino, reconociendo el impacto de un "voto bronca" impulsado por las "dificultades".
En tanto, sobre las repercusiones económicas que tuvo el resultado electoral, señaló que "el mundo no confía en el kirchnerismo". En ese sentido, vinculó el cimbronazo financiero a la posibilidad de una nueva derrota a manos del peronismo: "Hemos tenido un día muy malo, estamos más pobres que antes de las primarias", afirmó. Y pidió que "el kirchnerismo se haga cargo".
El Gobierno deberá enfrentar sus últimos casi tres meses de gestión sin haber podido resolver la crisis, y con la dificultad adicional de saber que, probablemente, sea superado nuevamente por el peronismo en las generales del 27 de octubre, si es que la diferencia de más de 15 puntos expresada este domingo en las urnas, se mantiene en los comicios definitorios.
Macri y los funcionarios de su Gabinete tenían planeado reunirse a las 11:00 de la mañana de este lunes, pero decidieron postergar el cónclave a la espera del cierre de una jornada cambiaria frenética, en la que el valor del dólar trepó 32 % en los bancos en solo dos horas, alcanzando los 61 pesos. Finalmente, tras la intervención del Banco Central, que vendió 100 millones de dólares para contener la suba, la divisa cerró en 57,30 pesos.
A nivel nacional, el peronismo opositor logró en estas primarias un 47 % de los votos, contra el 32 % del oficialismo. Asimismo, en la provincia de Buenos Aires, el distrito más populoso y determinante en la elección, el candidato a gobernador Axel Kicillof consiguió 49,34 % de los sufragios, frente a un 32,56 % de la gobernadora actual, María Eugenia Vidal. De mantenerse la diferencia, que muchos pronostican irreversible, el macrismo no podrá intentar revalidar su gestión en un eventual balotaje.
"Hemos tenido una mala elección" o "nadie esperaba este resultado", fueron algunas de las frases que dejó el jefe de Estado cuando salió a hablar cuatro horas después de cerrados los comicios, cuando todavía no habían sido dadas a conocer las cifras oficiales.
Prácticamente ninguna de las encuestadoras preveía semejante distancia entre los candidatos, en el marco de una fuerte polarización entre dos modelos muy diferentes que marcan la llamada 'grieta' en el país sudamericano.
En definitiva, aunque todavía falta mucho para la contienda electoral que definirá al próximo Gobierno, el mal clima económico se vio reflejado en las urnas y coloca en un brete a Macri y sus aliados.
"Toda elección es un mensaje y nosotros lo hemos escuchado", sostuvo Macri desde la Casa Rosada. Y añadió que espera revertir el resultado en las elecciones generales de octubre. "Estamos convencidos de que tenemos muchas cosas para proponer todavía. Va a ser una buena oportunidad para demostrar que el cambio continúa", aseguró.
"Los votos que no nos acompañaron representan una bronca acumulada de los últimos tres años y medio. Lo entendemos, estamos acá para seguir trabajando y vamos a revertir la mala elección de ayer", manifestó el jefe de Estado argentino, reconociendo el impacto de un "voto bronca" impulsado por las "dificultades".
En tanto, sobre las repercusiones económicas que tuvo el resultado electoral, señaló que "el mundo no confía en el kirchnerismo". En ese sentido, vinculó el cimbronazo financiero a la posibilidad de una nueva derrota a manos del peronismo: "Hemos tenido un día muy malo, estamos más pobres que antes de las primarias", afirmó. Y pidió que "el kirchnerismo se haga cargo".
Sin cambios en el Gabinete
Consultado por la prensa, el presidente Macri descartó que vaya a aplicar cambios en su Gabinete, ratificando así a todos sus funcionarios. "No tiendo a hacer cambios por cuestiones simbólicas", expresó, al tiempo que aseguró que el equipo económico "está trabajando".El Gobierno deberá enfrentar sus últimos casi tres meses de gestión sin haber podido resolver la crisis, y con la dificultad adicional de saber que, probablemente, sea superado nuevamente por el peronismo en las generales del 27 de octubre, si es que la diferencia de más de 15 puntos expresada este domingo en las urnas, se mantiene en los comicios definitorios.
Macri y los funcionarios de su Gabinete tenían planeado reunirse a las 11:00 de la mañana de este lunes, pero decidieron postergar el cónclave a la espera del cierre de una jornada cambiaria frenética, en la que el valor del dólar trepó 32 % en los bancos en solo dos horas, alcanzando los 61 pesos. Finalmente, tras la intervención del Banco Central, que vendió 100 millones de dólares para contener la suba, la divisa cerró en 57,30 pesos.
Un resultado contundente empujado por el 'voto castigo'
La alianza gobernante Juntos por el Cambio —antes denominada Cambiemos— recibió un duro golpe electoral el domingo al ser superado ampliamente por el Frente de Todos, un espacio peronista ampliado que lleva como candidato a presidente al exjefe de Gabinete del kichnerismo, Alberto Fernández, y a la expresidenta Cristina Fernández de Kirchner, como vice.A nivel nacional, el peronismo opositor logró en estas primarias un 47 % de los votos, contra el 32 % del oficialismo. Asimismo, en la provincia de Buenos Aires, el distrito más populoso y determinante en la elección, el candidato a gobernador Axel Kicillof consiguió 49,34 % de los sufragios, frente a un 32,56 % de la gobernadora actual, María Eugenia Vidal. De mantenerse la diferencia, que muchos pronostican irreversible, el macrismo no podrá intentar revalidar su gestión en un eventual balotaje.
"Hemos tenido una mala elección" o "nadie esperaba este resultado", fueron algunas de las frases que dejó el jefe de Estado cuando salió a hablar cuatro horas después de cerrados los comicios, cuando todavía no habían sido dadas a conocer las cifras oficiales.
Prácticamente ninguna de las encuestadoras preveía semejante distancia entre los candidatos, en el marco de una fuerte polarización entre dos modelos muy diferentes que marcan la llamada 'grieta' en el país sudamericano.
En definitiva, aunque todavía falta mucho para la contienda electoral que definirá al próximo Gobierno, el mal clima económico se vio reflejado en las urnas y coloca en un brete a Macri y sus aliados.
Una noche sin globos y con caras largas
Cómo se vivió la derrota en el bunker macrista
El
Presidente mandó a los argentinos a dormir antes de que se conocieran
los resultados. Dijo que "la mayoría de los argentinos no votó por
volver al pasado" y que Fernández tiene que hacerse cargo de las
eventuales corridas cambiarias.
Mauricio Macri y Miguel Angel Pichetto, las caras de la derrota en el bunker de Juntos por el Cambio.
El
resultado claramente no satisface a Mauricio Macri. El presidente no se
relajó con los números que arrojaron las PASO, sino que salió a
amonestar al electorado: "Me duele en el alma que tantos argentinos
hayan creído que hay que volver al pasado", los aleccionó el mandatario.
También le reclamó a Alberto Fernández que se haga cargo de las
consecuencias económicas y que "explique" su proyecto a "los mercados".
La diferencia de 15 puntos con respecto a la fórmula Fernández-Fernández
no fue una caricia significativa de los votantes hacia los años de
gobierno cambiemita, signados por la inflación, el crecimiento de la
pobreza y la caída del salario real.
El escenario de Juntos por el Cambio se reitera elección a elección: las mismas pantallas gigantes, la misma música sonando a todo volumen. Pero algo era diferente estas vez. Esta vez no hubo globos, ni amarillos ni de ningún otro color. Sí lanzaron humo blanco desde el escenario. Mucho humo. Desde temprano, comenzaron a circular las bandejas con distintas delicatessen, una de las marcas del bunker macrista. Los ánimos circulaban entre quienes se tienen fe y quienes esperaban una derrota módica, que se pudiera revertir en octubre o en noviembre. Todo eso, velozmente, estallaría en pedazos.
Caras largas
Con caras serias y pocas sonrisas, la velada la abrió el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y los que condujeron las campañas porteña y bonaerense, que salieron a expresar optimismo. "Creemos que hemos hecho una muy buena elección. Estamos contentos con el resultado que vamos viendo", sostuvo Peña, que quedaría en ridículo unas horas más tarde. Peña salió a inyectar optimismo junto al ministro de Espacio Público porteño, Eduardo Macchiavelli, y el jefe de Gabinete bonaerense, Federico Salvai, jefes de campaña de la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires respectivamente. Todos repitieron la frase "estamos muy contentos", a esta altura un latiguillo de la comunicación macrista. Por ejemplo: "Estamos muy contentos con lo que has pasado hoy en la Argentina. Una jornada en paz. Los argentinos se han expresado en libertad", dijo Peña.
De todas maneras, se atajó: "Nuestro electorado no está convencido de las PASO. No es una elección definitiva".
Larreta animador
No obstante, el clima de optimismo no era lo que primaba. Cerca de las 21.20, el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, salió a intentar levantar los ánimos. Se entiende: es la mejor elección que tendrían para mostrar. "El esfuerzo vale la pena. Estamos haciendo la mayor transformación en la historia de la Ciudad. Una transformación que comenzó con Mauricio y María Eugenia", recordó el mandatario.
"Sí, se puede", coreó la tribuna PRO, que hasta ese momento se había mostrado apagada pese a la música de fiesta. "Hoy en la Ciudad también ratificamos el apoyo al cambio que está llevando Mauricio en todo el país", festejó Larreta. Luego invitó a subir al vicejefe Diego Santilli, que subió saltando y lo abrazó. A continuación lo llamó a Martín Lousteau, con el que también se abrazaron. Y a Maximiliano Ferraro, el hombre de confianza de Elisa Carrió. Larreta le dijo a Lousteau que "después de estar en lugares diferentes, hoy estamos juntos". Quizás fue el momento en que más en evidencia quedó la diferencia entre el armado de Larreta en la Ciudad, que sumó a sectores importantes que no eran parte del PRO, en relación al de Macri a nivel nacional, que no tuvo incorporaciones significativas, más allá de la figura de Miguel Angel Pichetto. Se vislumbra un nuevo liderazgo dentro del PRO, si Larreta es el único que conserva un Ejecutivo.
Con las pantallas gigantes de fondo diciendo "gracias" y "juntos podemos más", Larreta cerró un momento de festejo. Seguía sin haber datos oficiales que lo aguaran. Pero la alegría simulada no duró mucho.
Derrota
Con el resultado electoral (que todavía no se daba a conocer) grabado en los rostros, salieron a las 22.08 Macri, la gobernadora María Eugenia Vidal, el compañero de fórmula Miguel Angel Pichetto, la vicepresidenta Gabriela Michetti, y la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió. "Reconocemos que hemos tenido una mala elección. Eso nos lleva a redoblar los esfuerzos para que en octubre continuemos con el cambio", sostuvo. Minutos más tarde, se conocería que la fórmula del Frente de Todos superaba el 45 por ciento. "Creemos en la democracia, recién hablábamos con Miguel de las dificultades que tuvimos en los últimos años. Esto ha llevado a que haya mucha angusta y mucha duda", intentó explicar, antes de mandar a todos los argentinos a dormir a las diez de la noche y sin conocer los resultados.
Mientras Macri se preparaba para dar una conferencia de prensa, Carrió tomó el micrófono y salió a hablar sola, con un Mario Negri que se le fue acercando lentamente como en un paso de comedia. "Necesito hablarles en nombre de todo Cambiemos. La única certeza que tengo es que la república democrática gana por más del 50 por ciento en octubre", afirmó. "Sé por experiencia estadística que el PJ nunca ha podido superar el 45 por ciento", dijo cuando CFK ganó por el 54 en 2011 y ayer los cómputos le daban 47 por ciento. Luego aleccionó al electorado: "La mayoría se siente cómoda con los autoritarimos y los faraones". "Por sobrevivir, para no ser Venezuela, Cuba o Rusia, va a ganar la argentina republicana".
Luego de que lograron que Carrió se retirara del escenario, Macri dio una conferencia de prensa en que las caras eran aún peores, en especial la de Vidal. El presidente dijo que no había llamado a Alberto Fernández y eludió una pregunta sobre si se reuniría con él. Aseguró que la elección se puede revertir. "La mayoría de los argentinos no votó por volver al pasado. Vamos a ver qué pasa en octubre, posiblemente qué pasa en noviembre", se esperanzó. E intentó meter miedo: "Si nos asustamos y volvemos atrás en mitad del río, va a ser un problema", dijo. Además, remarcó que Fernández tiene que hacerse cargo de las eventuales corridas cambiarias: "Es necesario que el mundo entienda a la mayoría de la dirigencia y que la Argentina es un lugar al que se puede apostar". Macri se retiró con el rostro enojado y sin argumentos para su derrota.
El escenario de Juntos por el Cambio se reitera elección a elección: las mismas pantallas gigantes, la misma música sonando a todo volumen. Pero algo era diferente estas vez. Esta vez no hubo globos, ni amarillos ni de ningún otro color. Sí lanzaron humo blanco desde el escenario. Mucho humo. Desde temprano, comenzaron a circular las bandejas con distintas delicatessen, una de las marcas del bunker macrista. Los ánimos circulaban entre quienes se tienen fe y quienes esperaban una derrota módica, que se pudiera revertir en octubre o en noviembre. Todo eso, velozmente, estallaría en pedazos.
Caras largas
Con caras serias y pocas sonrisas, la velada la abrió el jefe de Gabinete, Marcos Peña, y los que condujeron las campañas porteña y bonaerense, que salieron a expresar optimismo. "Creemos que hemos hecho una muy buena elección. Estamos contentos con el resultado que vamos viendo", sostuvo Peña, que quedaría en ridículo unas horas más tarde. Peña salió a inyectar optimismo junto al ministro de Espacio Público porteño, Eduardo Macchiavelli, y el jefe de Gabinete bonaerense, Federico Salvai, jefes de campaña de la Ciudad y la Provincia de Buenos Aires respectivamente. Todos repitieron la frase "estamos muy contentos", a esta altura un latiguillo de la comunicación macrista. Por ejemplo: "Estamos muy contentos con lo que has pasado hoy en la Argentina. Una jornada en paz. Los argentinos se han expresado en libertad", dijo Peña.
De todas maneras, se atajó: "Nuestro electorado no está convencido de las PASO. No es una elección definitiva".
Larreta animador
No obstante, el clima de optimismo no era lo que primaba. Cerca de las 21.20, el jefe de Gobierno, Horacio Rodríguez Larreta, salió a intentar levantar los ánimos. Se entiende: es la mejor elección que tendrían para mostrar. "El esfuerzo vale la pena. Estamos haciendo la mayor transformación en la historia de la Ciudad. Una transformación que comenzó con Mauricio y María Eugenia", recordó el mandatario.
"Sí, se puede", coreó la tribuna PRO, que hasta ese momento se había mostrado apagada pese a la música de fiesta. "Hoy en la Ciudad también ratificamos el apoyo al cambio que está llevando Mauricio en todo el país", festejó Larreta. Luego invitó a subir al vicejefe Diego Santilli, que subió saltando y lo abrazó. A continuación lo llamó a Martín Lousteau, con el que también se abrazaron. Y a Maximiliano Ferraro, el hombre de confianza de Elisa Carrió. Larreta le dijo a Lousteau que "después de estar en lugares diferentes, hoy estamos juntos". Quizás fue el momento en que más en evidencia quedó la diferencia entre el armado de Larreta en la Ciudad, que sumó a sectores importantes que no eran parte del PRO, en relación al de Macri a nivel nacional, que no tuvo incorporaciones significativas, más allá de la figura de Miguel Angel Pichetto. Se vislumbra un nuevo liderazgo dentro del PRO, si Larreta es el único que conserva un Ejecutivo.
Con las pantallas gigantes de fondo diciendo "gracias" y "juntos podemos más", Larreta cerró un momento de festejo. Seguía sin haber datos oficiales que lo aguaran. Pero la alegría simulada no duró mucho.
Derrota
Con el resultado electoral (que todavía no se daba a conocer) grabado en los rostros, salieron a las 22.08 Macri, la gobernadora María Eugenia Vidal, el compañero de fórmula Miguel Angel Pichetto, la vicepresidenta Gabriela Michetti, y la líder de la Coalición Cívica, Elisa Carrió. "Reconocemos que hemos tenido una mala elección. Eso nos lleva a redoblar los esfuerzos para que en octubre continuemos con el cambio", sostuvo. Minutos más tarde, se conocería que la fórmula del Frente de Todos superaba el 45 por ciento. "Creemos en la democracia, recién hablábamos con Miguel de las dificultades que tuvimos en los últimos años. Esto ha llevado a que haya mucha angusta y mucha duda", intentó explicar, antes de mandar a todos los argentinos a dormir a las diez de la noche y sin conocer los resultados.
Mientras Macri se preparaba para dar una conferencia de prensa, Carrió tomó el micrófono y salió a hablar sola, con un Mario Negri que se le fue acercando lentamente como en un paso de comedia. "Necesito hablarles en nombre de todo Cambiemos. La única certeza que tengo es que la república democrática gana por más del 50 por ciento en octubre", afirmó. "Sé por experiencia estadística que el PJ nunca ha podido superar el 45 por ciento", dijo cuando CFK ganó por el 54 en 2011 y ayer los cómputos le daban 47 por ciento. Luego aleccionó al electorado: "La mayoría se siente cómoda con los autoritarimos y los faraones". "Por sobrevivir, para no ser Venezuela, Cuba o Rusia, va a ganar la argentina republicana".
Luego de que lograron que Carrió se retirara del escenario, Macri dio una conferencia de prensa en que las caras eran aún peores, en especial la de Vidal. El presidente dijo que no había llamado a Alberto Fernández y eludió una pregunta sobre si se reuniría con él. Aseguró que la elección se puede revertir. "La mayoría de los argentinos no votó por volver al pasado. Vamos a ver qué pasa en octubre, posiblemente qué pasa en noviembre", se esperanzó. E intentó meter miedo: "Si nos asustamos y volvemos atrás en mitad del río, va a ser un problema", dijo. Además, remarcó que Fernández tiene que hacerse cargo de las eventuales corridas cambiarias: "Es necesario que el mundo entienda a la mayoría de la dirigencia y que la Argentina es un lugar al que se puede apostar". Macri se retiró con el rostro enojado y sin argumentos para su derrota.
El lento adiós de Mauricio Macri, vapuleado en las elecciones primarias
por Rubén Armendáriz
LA HAINE - 12/08/2019
El 'hit' del verano (Mauricio Macri la puta que te parió), cantado en todos los estadios, se hizo carne este domingo
Por
un margen de 15 por ciento de diferencia (según los primeros cómputos),
los candidatos presidenciales del Frente de Todos, Alberto Fernández y
Cristina Kirchner, se impusieron en las elecciones primarias, abiertas,
simultáneas y obligatorias (PASO) sobre los candidatos oficialistas
Mauricio Macri y Miguel Angel Pichetto, de la alianza Juntos para el
Cambio.
Más de dos tercios de los argentinos dijeron no al gobierno neoliberal de Mauricio Macri. El pesimismo fue creciendo en filas del oficialismo al divulgarse extraoficialmente uno de los resultados más destacados de la jornada, mientras se demoraba el escrutinio final: el triunfo del exministro de Economía Axel Kicilof (FdT) sobre la gobernadora macrista de la populosa provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal.
Las elecciones 2019 tuvieron este domingo su primer acto, cuando más del 75% de un padrón de 33 millones de personas fueron a las urnas en para elegir a sus candidatos entre miles de postulantes en todas las provincias, pero con la mira puesta en la reelección de Macri.
Se eligieron este domingo en todo el país los candidatos a presidente y vicepresidente que competirán en los comicios generales del 27 de octubre próximo, así como los postulantes para renovar 130 bancas en la Cámara de Diputados, mientras que en ocho provincias se eligió a quienes competirán en octubre para ingresar al Senado.
Para hacerse de la victoria en la primera vuelta de las elecciones presidenciales del 27 de octubre se deberá alcanzar el 45% de los votos válidos, para no tener necesidad de concurrir a una segunda vuelta o balotaje.
En la mayoría de los centros de votación concluyeron los comicios a las 18 horas, pero en algunos había aún largas filas y el horario de cierre fue ampliado. Según datos oficiales, alrededor del 75 por ciento de los electores pasaron por el cuarto oscuro.
Tras las serias acusaciones de un eventual fraude en la transmisión de datos confiada por el Gobierno a la empresa Smartmatic, la jueza con competencia electoral María Servini de Cubría dispuso que los datos de escrutinio provisorio se dieran a conocer en el sitio oficial solamente cuando esté cargado el diez por ciento del total de los cuatro distritos más populosos: Capital Federal, Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba.
Además en la ciudad de Buenos Aires se eligieron los candidatos para la jefatura de gobierno, mientras que en las provincias de Buenos Aires, Catamarca y Santa Cruz se votó por los candidatos a gobernador. El comicio en la sureña Santa Cruz fue el único definitorio, ya que no es primaria. Allí Alicia Kirchner, hermana del expresidente Néstor Kirchner y exministra de Desarrollo Social, buscó su reelección.
En estas elecciones surgió una tercera fuerza, el Consenso Federal que llevó de candidatos al economista Roberto Lavagna y al exgobernador Juan Manuel Urtubey, detrás del Frente de Todos y de Juntos por el Cambio.
El aún presidente Mauricio Macri emitió su voto en el barrio capitalino de Palermo y habló de una "fiesta de la democracia", al tiempo que dijo que "esta elección define los próximos treinta años de la historia del país". Apuntó que "los mercados esperan que sigamos en el mismo camino" y que "hicimos todo lo que había que hacer". Dspués de las 22 horas reconoció la derrota: “hemos trenido una mala elección”, dijo lacónicamente.
Tras votar, Alberto Fernández volvió a hablar de la inquietud que en la oposición genera el cambio al sistema de conteo de votos que impulsó el gobiermo. "Nos genera muchas dudas el modo en que se contrató esta empresa (Smartmatic) y sus antecededentes”, dijo. La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner sufragó en la sureña ciudad de Río Gallegos. Llegó e hizo la fila durante unos treinta minutos, se sacó fotos y se retiró sin hacer declaraciones pese al acoso de los periodistas.
La diputada y líder de la macrista Coalición Cívica Elisa Carrió afirmó que los resultados de las elecciones primarias “no (le) preocupan” porque tiene “la certeza de que en octubre gana la república democrática”. Además pronosticó que el triunfo será “en primera vuelta” y que “no habrá balotaje”. Eso sí, se abstuvo de decir quién será el ganador.
El macrismo ganó nuevamente en la capital, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, pero con un diferencial menor que en elecciones anteriores. Dos provincias importantes, por el caudal de votos, y que favorecieron en las anteriores elecciones a la alianza macrista Cambiemos, mostraron signos de cambio.
En Córdoba creció el número de votantes por la fórmula de Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner y Santa Fe mostró un importante triunfo opositor. Otro avance significativo del Frente de Todos fue en la ciudad bonaerense de Bahía Blanca
La Tercera Sección Electoral de la provincia de Buenos Aires, donde votan más de cuatro millones de votantes –zona vapuleada por la crisis económicasocial- fue nuevamente bastión del peronismo, que mostró asimismo un progreso general en la Buenos Aires no conurbana, que representa el 14 por ciento del padrón electoral.
El Frente de Todos mostró triunfos contundentes en distritos populosos como Tucumán y Misiones, en Corrientes (gobernado por el macrismo)y se registraron triunfos del peronismo unificado y sus aliados en Chubut y con alta probabilidad también en Jujuy.
Hacia el 27 de octubre quedan dos interrogantes: si votará más gente que en las PASO y si esos ciudadanos repetirán los resultados de este domingo. Desde el oficialismo especulan que para las elecciones presidenciales, parte de los votantes de la fórmula Lavagna-Urtubey volcarán sus sufragios hacia el macrismo, con el que sienten identificados ideológicamente, lo que sería un suicidio político de un grupo que logró el tercer lugar este domingo.
CLAE
Más de dos tercios de los argentinos dijeron no al gobierno neoliberal de Mauricio Macri. El pesimismo fue creciendo en filas del oficialismo al divulgarse extraoficialmente uno de los resultados más destacados de la jornada, mientras se demoraba el escrutinio final: el triunfo del exministro de Economía Axel Kicilof (FdT) sobre la gobernadora macrista de la populosa provincia de Buenos Aires, María Eugenia Vidal.
Las elecciones 2019 tuvieron este domingo su primer acto, cuando más del 75% de un padrón de 33 millones de personas fueron a las urnas en para elegir a sus candidatos entre miles de postulantes en todas las provincias, pero con la mira puesta en la reelección de Macri.
Se eligieron este domingo en todo el país los candidatos a presidente y vicepresidente que competirán en los comicios generales del 27 de octubre próximo, así como los postulantes para renovar 130 bancas en la Cámara de Diputados, mientras que en ocho provincias se eligió a quienes competirán en octubre para ingresar al Senado.
Para hacerse de la victoria en la primera vuelta de las elecciones presidenciales del 27 de octubre se deberá alcanzar el 45% de los votos válidos, para no tener necesidad de concurrir a una segunda vuelta o balotaje.
En la mayoría de los centros de votación concluyeron los comicios a las 18 horas, pero en algunos había aún largas filas y el horario de cierre fue ampliado. Según datos oficiales, alrededor del 75 por ciento de los electores pasaron por el cuarto oscuro.
Tras las serias acusaciones de un eventual fraude en la transmisión de datos confiada por el Gobierno a la empresa Smartmatic, la jueza con competencia electoral María Servini de Cubría dispuso que los datos de escrutinio provisorio se dieran a conocer en el sitio oficial solamente cuando esté cargado el diez por ciento del total de los cuatro distritos más populosos: Capital Federal, Buenos Aires, Santa Fe y Córdoba.
Además en la ciudad de Buenos Aires se eligieron los candidatos para la jefatura de gobierno, mientras que en las provincias de Buenos Aires, Catamarca y Santa Cruz se votó por los candidatos a gobernador. El comicio en la sureña Santa Cruz fue el único definitorio, ya que no es primaria. Allí Alicia Kirchner, hermana del expresidente Néstor Kirchner y exministra de Desarrollo Social, buscó su reelección.
En estas elecciones surgió una tercera fuerza, el Consenso Federal que llevó de candidatos al economista Roberto Lavagna y al exgobernador Juan Manuel Urtubey, detrás del Frente de Todos y de Juntos por el Cambio.
El aún presidente Mauricio Macri emitió su voto en el barrio capitalino de Palermo y habló de una "fiesta de la democracia", al tiempo que dijo que "esta elección define los próximos treinta años de la historia del país". Apuntó que "los mercados esperan que sigamos en el mismo camino" y que "hicimos todo lo que había que hacer". Dspués de las 22 horas reconoció la derrota: “hemos trenido una mala elección”, dijo lacónicamente.
Tras votar, Alberto Fernández volvió a hablar de la inquietud que en la oposición genera el cambio al sistema de conteo de votos que impulsó el gobiermo. "Nos genera muchas dudas el modo en que se contrató esta empresa (Smartmatic) y sus antecededentes”, dijo. La expresidenta Cristina Fernández de Kirchner sufragó en la sureña ciudad de Río Gallegos. Llegó e hizo la fila durante unos treinta minutos, se sacó fotos y se retiró sin hacer declaraciones pese al acoso de los periodistas.
La diputada y líder de la macrista Coalición Cívica Elisa Carrió afirmó que los resultados de las elecciones primarias “no (le) preocupan” porque tiene “la certeza de que en octubre gana la república democrática”. Además pronosticó que el triunfo será “en primera vuelta” y que “no habrá balotaje”. Eso sí, se abstuvo de decir quién será el ganador.
El macrismo ganó nuevamente en la capital, la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, pero con un diferencial menor que en elecciones anteriores. Dos provincias importantes, por el caudal de votos, y que favorecieron en las anteriores elecciones a la alianza macrista Cambiemos, mostraron signos de cambio.
En Córdoba creció el número de votantes por la fórmula de Alberto Fernández y Cristina Fernández de Kirchner y Santa Fe mostró un importante triunfo opositor. Otro avance significativo del Frente de Todos fue en la ciudad bonaerense de Bahía Blanca
La Tercera Sección Electoral de la provincia de Buenos Aires, donde votan más de cuatro millones de votantes –zona vapuleada por la crisis económicasocial- fue nuevamente bastión del peronismo, que mostró asimismo un progreso general en la Buenos Aires no conurbana, que representa el 14 por ciento del padrón electoral.
El Frente de Todos mostró triunfos contundentes en distritos populosos como Tucumán y Misiones, en Corrientes (gobernado por el macrismo)y se registraron triunfos del peronismo unificado y sus aliados en Chubut y con alta probabilidad también en Jujuy.
Hacia el 27 de octubre quedan dos interrogantes: si votará más gente que en las PASO y si esos ciudadanos repetirán los resultados de este domingo. Desde el oficialismo especulan que para las elecciones presidenciales, parte de los votantes de la fórmula Lavagna-Urtubey volcarán sus sufragios hacia el macrismo, con el que sienten identificados ideológicamente, lo que sería un suicidio político de un grupo que logró el tercer lugar este domingo.
CLAE
Los argentinos le dieron una "paliza" al neoliberalismo, afirman analistas
©
REUTERS / Luisa González
21:30 12.08.2019(actualizada a las 21:41 12.08.2019) - SPUTNIK NEWS
Macrismo en crisis, ¿el fracaso que nadie anticipó?
Publicado: 12 ago 2019 15:56 GMT - RT
Ni él ni nadie esperaba que perdiera por más de 15 puntos contra Alberto Fernández,
el candidato del Frente de Todos, una alianza de inmensa mayoría
peronista en la que la ex presidenta Cristina Fernández de Kirchner va
como candidata a la vicepresidencia. Hasta ayer, Macri creía que
quedaría abajo solo por tres o cuatro puntos, que emparejaría en la
primera vuelta de octubre y que ganaría la reelección en la segunda
vuelta prevista para noviembre. Que sería presidente hasta 2023.
Pero todos los escenarios cambiaron y, de confirmarse esta diferencia de votos en las elecciones del 27 de octubre, el 'ballotage' ya ni siquiera sería necesario. Tan fuerte fue el golpe que en varios tramos del discurso, en el que el presidente reconoció su fracaso, parecía que se estaba despidiendo. Fue la primera noche electoral de su carrera política en la que no hubo festejos, ni globos, ni sonrisas, ni música, ni bailes, ni lluvia de papelitos. Sabe que cuenta con poco más de dos meses de campaña y que modificar una distancia electoral de esta magnitud sería una proeza. Aunque Argentina, bien lo sabemos, es un país impredecible en el que las expectativas pueden cambiar de un momento a otro.
Ninguna encuesta había logrado detectar que el descontento contra el macrismo fuera tan alto, que ayer lo votaría el 32% y que la fórmula Fernández-Fernández de Kirchner se quedaría con el 47,65%. Cecilia González, periodista y escritora mexicana en Argentina. Los resultados de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), en las que cada fuerza política confirma a sus candidatos para las elecciones generales, sorprendieron al gobierno, a la oposición, a la prensa y a la población en general. Ninguna encuesta había logrado detectar que el descontento contra el macrismo fuera tan alto, que ayer lo votaría el 32% y que la fórmula Fernández-Fernández de Kirchner se quedaría con el 47,65%. Rumbo a octubre, para ganar en primera vuelta, cualquier candidato necesita el 45% de los votos o, en una segunda opción, el 40 %, pero con una distancia de 10 % con respecto al segundo lugar. La oposición ya tiene esos votos, por ahora.
Hasta ayer se seguía hablando de "posible paridad" y "polarización" entre el macrismo y el peronismo. Así, uno de los datos más sorprendentes del año electoral en Argentina era que un presidente que había sumido al país en una grave crisis económica (que achacaba principalmente a factores externos y al pasado gobierno), tenía posibilidades reales de reelegirse, tal y como vaticinaban el oficialismo y medios y periodistas afines, a pesar de que no había grandes logros para presumir.
Al contrario.
En tres de sus cuatro años de gobierno hubo recesión. La inflación tuvo un alza constante y el año pasado rozó un récord de casi 50 %. La deuda aumentó en 27 % y hoy representa alrededor del 95 % del Producto Interno Bruto (PIB). Para cumplir con las exigencias del Fondo Monetario Internacional (FMI), el gobierno redujo drásticamente el gasto público. Los ministerios de Salud, Cultura y Ciencia y Tecnología, entre otros, fueron rebajados al rango de secretaría. La devaluación fue persistente y el precio del dólar aumentó de 9,50 (o 15, según el valor más alto que tenía en el mercado paralelo en 2015) a los 45 pesos que costaba el pasado viernes, con una tendencia permanentemente alcista. El desempleo aumentó hasta un 10,1%, los temidos dos dígitos.
Pero un solo dato se convirtió en el talón de Aquiles del macrismo. Durante su campaña, Macri prometió Pobreza Cero. Luego, ya en el gobierno, aclaró que sólo era "una aspiración" y que, de todas maneras, quería que su gobierno fuera evaluado por este indicador. "Si cuando termine mi presidencia no bajé la pobreza, habré fracasado. Más allá de las cosas que hayamos obtenido, todo lo demás serán excusas", dijo.
Este año, la pobreza aumentó al 32 % y al cierre del mandato de Macri se prevé que la cifra superará la que le dejó Fernández de Kirchner. La mitad de los niños argentinos son pobres. Tan solo durante el último año, en Argentina hubo 2,6 millones de nuevos pobres, personas con rostros, nombres e historias. Una de las pruebas más visibles de este aumento de la pobreza fue la invasión de indigentes durmiendo en las calles de Buenos Aires, quienes fueron objeto de una despectiva campaña por parte de figuras afines al oficialismo. Los argentinos que todavía tienen un lugar para vivir, apenas si llegan a fin de mes, y cada semana padecen los aumentos de precios de productos y servicios. La inflación no cesa.
Macri pidió que lo evaluaran por sus resultados en materia de pobreza. Lo evaluaron. Y ayer casi el 70% de los ciudadanos lo desaprobó. Cecilia González, periodista y escritora. Macri pidió que lo evaluaran por sus resultados en materia de pobreza. Lo evaluaron. Y ayer casi el 70% de los ciudadanos lo desaprobó.
Lejos quedaron ahora los eslóganes que lo llevaron a la presidencia: "Tenemos al mejor equipo de los últimos 50 años", "hagamos la revolución de la alegría", "es maravilloso lo que estamos logrando juntos", "no vas a perder nada de lo que tenés", "no vamos a devaluar", "derrotar a la inflación va a ser muy fácil", "haciendo lo que hay que hacer", "no habrá ningún ajuste", "lo peor ya pasó", "no vamos a pedirle prestado al FMI". Un mix de frases de autoayuda y promesas incumplidas que abonaron una derrota que no logró frenar ni siquiera por haber elegido a un peronista, Miguel Ángel Pichetto, como su candidato a la vicepresidencia. La jugada no le generó ningún rédito político y ahora está en la búsqueda de nuevos lemas publicitarios para conseguir el mayor número posible de votos de aquí a octubre.
Inútil fue, también, la campaña del miedo. El presidente, sus funcionarios, sus aliados y la prensa militante macrista amenazaron hasta el último minuto con que un triunfo del "populismo" implicaría el regreso del "pasado autoritario, violento, vengativo e intolerante". Que el peronismo manipularía a la Justicia para liberar a los ex funcionarios acusados de corrupción, la mayoría de ellos presos sin condena, y garantizaría la impunidad de Fernández de Kirchner, multiprocesada por presuntos actos de corrupción. Que Argentina se "aislaría del mundo" y se convertiría "en una nueva Venezuela" con "milicias chavistas en las calles". Nunca dejaron de usar electoralmente la tragedia humanitaria del país caribeño.
Quisieron asustar a los argentinos diciéndoles que lo peor estaba por venir, pero, de acuerdo con los resultados del domingo, la mayoría de los argentinos cree que lo peor ya lo están viviendo aquí y ahora, con este gobierno. Cecilia González, periodista y escritora. Quisieron asustar a los argentinos diciéndoles que lo peor estaba por venir, pero, de acuerdo con los resultados del domingo, la mayoría de los argentinos cree que lo peor ya lo están viviendo aquí y ahora, con este gobierno.
A sabiendas del impacto de la crisis económica, en la recta final de la campaña rumbo a las PASO, el presidente apostó por el voto emocional. "No se necesitan argumentos, no es necesario dar explicaciones. Es tu autoridad, tu confianza, tu credibilidad, la que tus relaciones valoran para acompañarte en tu decisión", escribió Macri, con la esperanza de que el voto a su favor se hiciera público en masa y se generara un efecto contagio. Convocó al voto vergüenza, pero obtuvo el voto castigo.
Ahora se viene la contención de daños y el diseño de una estrategia urgente para paliar la crisis política, que se suma a la crisis económica y a los temores de una nueva y acelerada devaluación, y al impacto negativo que tiene el triunfo de Fernández en "los mercados", es decir, entre los especuladores de siempre. Las exigencias para que cambie el gabinete comenzaron a resonar ayer mismo. Como ocurre siempre ante cualquier derrota, las peleas internas del oficialismo, que parecía tan unido y organizado, recrudecieron. El catártico reparto de culpas convive con la urgente necesidad de garantizar la gobernabilidad durante los escasos cuatro meses que le quedan al macrismo en el poder, si su fracaso electoral se consolida.
Por eso, desde anoche, tanto la oposición como el oficialismo se exigieron mutuamente responsabilidad. Ojalá así sea.
Pero todos los escenarios cambiaron y, de confirmarse esta diferencia de votos en las elecciones del 27 de octubre, el 'ballotage' ya ni siquiera sería necesario. Tan fuerte fue el golpe que en varios tramos del discurso, en el que el presidente reconoció su fracaso, parecía que se estaba despidiendo. Fue la primera noche electoral de su carrera política en la que no hubo festejos, ni globos, ni sonrisas, ni música, ni bailes, ni lluvia de papelitos. Sabe que cuenta con poco más de dos meses de campaña y que modificar una distancia electoral de esta magnitud sería una proeza. Aunque Argentina, bien lo sabemos, es un país impredecible en el que las expectativas pueden cambiar de un momento a otro.
Ninguna encuesta había logrado detectar que el descontento contra el macrismo fuera tan alto, que ayer lo votaría el 32% y que la fórmula Fernández-Fernández de Kirchner se quedaría con el 47,65%. Cecilia González, periodista y escritora mexicana en Argentina. Los resultados de las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO), en las que cada fuerza política confirma a sus candidatos para las elecciones generales, sorprendieron al gobierno, a la oposición, a la prensa y a la población en general. Ninguna encuesta había logrado detectar que el descontento contra el macrismo fuera tan alto, que ayer lo votaría el 32% y que la fórmula Fernández-Fernández de Kirchner se quedaría con el 47,65%. Rumbo a octubre, para ganar en primera vuelta, cualquier candidato necesita el 45% de los votos o, en una segunda opción, el 40 %, pero con una distancia de 10 % con respecto al segundo lugar. La oposición ya tiene esos votos, por ahora.
Hasta ayer se seguía hablando de "posible paridad" y "polarización" entre el macrismo y el peronismo. Así, uno de los datos más sorprendentes del año electoral en Argentina era que un presidente que había sumido al país en una grave crisis económica (que achacaba principalmente a factores externos y al pasado gobierno), tenía posibilidades reales de reelegirse, tal y como vaticinaban el oficialismo y medios y periodistas afines, a pesar de que no había grandes logros para presumir.
Al contrario.
En tres de sus cuatro años de gobierno hubo recesión. La inflación tuvo un alza constante y el año pasado rozó un récord de casi 50 %. La deuda aumentó en 27 % y hoy representa alrededor del 95 % del Producto Interno Bruto (PIB). Para cumplir con las exigencias del Fondo Monetario Internacional (FMI), el gobierno redujo drásticamente el gasto público. Los ministerios de Salud, Cultura y Ciencia y Tecnología, entre otros, fueron rebajados al rango de secretaría. La devaluación fue persistente y el precio del dólar aumentó de 9,50 (o 15, según el valor más alto que tenía en el mercado paralelo en 2015) a los 45 pesos que costaba el pasado viernes, con una tendencia permanentemente alcista. El desempleo aumentó hasta un 10,1%, los temidos dos dígitos.
Pero un solo dato se convirtió en el talón de Aquiles del macrismo. Durante su campaña, Macri prometió Pobreza Cero. Luego, ya en el gobierno, aclaró que sólo era "una aspiración" y que, de todas maneras, quería que su gobierno fuera evaluado por este indicador. "Si cuando termine mi presidencia no bajé la pobreza, habré fracasado. Más allá de las cosas que hayamos obtenido, todo lo demás serán excusas", dijo.
Este año, la pobreza aumentó al 32 % y al cierre del mandato de Macri se prevé que la cifra superará la que le dejó Fernández de Kirchner. La mitad de los niños argentinos son pobres. Tan solo durante el último año, en Argentina hubo 2,6 millones de nuevos pobres, personas con rostros, nombres e historias. Una de las pruebas más visibles de este aumento de la pobreza fue la invasión de indigentes durmiendo en las calles de Buenos Aires, quienes fueron objeto de una despectiva campaña por parte de figuras afines al oficialismo. Los argentinos que todavía tienen un lugar para vivir, apenas si llegan a fin de mes, y cada semana padecen los aumentos de precios de productos y servicios. La inflación no cesa.
Macri pidió que lo evaluaran por sus resultados en materia de pobreza. Lo evaluaron. Y ayer casi el 70% de los ciudadanos lo desaprobó. Cecilia González, periodista y escritora. Macri pidió que lo evaluaran por sus resultados en materia de pobreza. Lo evaluaron. Y ayer casi el 70% de los ciudadanos lo desaprobó.
Lejos quedaron ahora los eslóganes que lo llevaron a la presidencia: "Tenemos al mejor equipo de los últimos 50 años", "hagamos la revolución de la alegría", "es maravilloso lo que estamos logrando juntos", "no vas a perder nada de lo que tenés", "no vamos a devaluar", "derrotar a la inflación va a ser muy fácil", "haciendo lo que hay que hacer", "no habrá ningún ajuste", "lo peor ya pasó", "no vamos a pedirle prestado al FMI". Un mix de frases de autoayuda y promesas incumplidas que abonaron una derrota que no logró frenar ni siquiera por haber elegido a un peronista, Miguel Ángel Pichetto, como su candidato a la vicepresidencia. La jugada no le generó ningún rédito político y ahora está en la búsqueda de nuevos lemas publicitarios para conseguir el mayor número posible de votos de aquí a octubre.
Inútil fue, también, la campaña del miedo. El presidente, sus funcionarios, sus aliados y la prensa militante macrista amenazaron hasta el último minuto con que un triunfo del "populismo" implicaría el regreso del "pasado autoritario, violento, vengativo e intolerante". Que el peronismo manipularía a la Justicia para liberar a los ex funcionarios acusados de corrupción, la mayoría de ellos presos sin condena, y garantizaría la impunidad de Fernández de Kirchner, multiprocesada por presuntos actos de corrupción. Que Argentina se "aislaría del mundo" y se convertiría "en una nueva Venezuela" con "milicias chavistas en las calles". Nunca dejaron de usar electoralmente la tragedia humanitaria del país caribeño.
Quisieron asustar a los argentinos diciéndoles que lo peor estaba por venir, pero, de acuerdo con los resultados del domingo, la mayoría de los argentinos cree que lo peor ya lo están viviendo aquí y ahora, con este gobierno. Cecilia González, periodista y escritora. Quisieron asustar a los argentinos diciéndoles que lo peor estaba por venir, pero, de acuerdo con los resultados del domingo, la mayoría de los argentinos cree que lo peor ya lo están viviendo aquí y ahora, con este gobierno.
A sabiendas del impacto de la crisis económica, en la recta final de la campaña rumbo a las PASO, el presidente apostó por el voto emocional. "No se necesitan argumentos, no es necesario dar explicaciones. Es tu autoridad, tu confianza, tu credibilidad, la que tus relaciones valoran para acompañarte en tu decisión", escribió Macri, con la esperanza de que el voto a su favor se hiciera público en masa y se generara un efecto contagio. Convocó al voto vergüenza, pero obtuvo el voto castigo.
Ahora se viene la contención de daños y el diseño de una estrategia urgente para paliar la crisis política, que se suma a la crisis económica y a los temores de una nueva y acelerada devaluación, y al impacto negativo que tiene el triunfo de Fernández en "los mercados", es decir, entre los especuladores de siempre. Las exigencias para que cambie el gabinete comenzaron a resonar ayer mismo. Como ocurre siempre ante cualquier derrota, las peleas internas del oficialismo, que parecía tan unido y organizado, recrudecieron. El catártico reparto de culpas convive con la urgente necesidad de garantizar la gobernabilidad durante los escasos cuatro meses que le quedan al macrismo en el poder, si su fracaso electoral se consolida.
Por eso, desde anoche, tanto la oposición como el oficialismo se exigieron mutuamente responsabilidad. Ojalá así sea.
Las declaraciones y opiniones
expresadas en este artículo son de exclusiva responsabilidad de su autor
y no representan necesariamente el punto de vista de RT.
Hoy parimos otra argentina, dice el aspirante opositor
Arrasa Alberto Fernández, del Frente de Todos, en las primarias; Macri sufre
mala elección
Cristina Fernández habla de unidad y de la responsabilidad que enfrenta
▲ Alberto Fernández, del Frente de Todos, y Mauricio Macri, de Juntos
por el Cambio, buscarán la presidencia de Argentina en octubre próximo.Foto Afp
Stella Calloni
Corresponsal
Periódico La Jornada
Lunes 12 de agosto de 2019, p. 26
Lunes 12 de agosto de 2019, p. 26
Buenos Aires.
Más temprano, cuatro horas y media después de que cerraron las urnas,
sin que hubiera ningún resultado oficial, el presidente Mauricio Macri
llegó a su comando de campaña y sus primeras palabras fueron: Argentina hoy está pariendo otro país; en ese país del que hablaba Cristina (Fernández de Kirchner), el único trabajo que tenemos es que los argentinos recuperen la felicidad, dijo el candidato a presidente del Frente de Todos, Alberto Fernández, quien llamó a la unidad y a acabar con la venganza y la grieta, ante una multitud reunida en las calles, que seguía cantando y bailando a la medianoche, festejando el histórico triunfo en las elecciones Primarias, Abiertas, Simultáneas y Obligatorias (PASO) celebradas ayer.
hemos tenido una mala elección; aún no había cifras en la pizarra del centro de cómputos, lo que creaba fuerte incertidumbre y dudas.
Flanqueado por la gobernadora de la provincia de Buenos Aires, Eugenia Vidal; el jefe de gobierno porteño, Horacio Rodríguez, y su compañero de fórmula, el peronista Miguel Ángel Pichetto, Macri subrayó que en las próximas elecciones generales del 27 de octubre
se definirán los próximos 30 años de Argentina, lo mismo que había dicho sobre las PASO ayer por la mañana, cuando fue a votar.
Y agregó:
duele que hoy no tengamos todo el apoyo político que esperamosy pidió que fueran a dormir todos a sus casas, para comenzar este lunes a remontar esta situación que, evidentemente, no se esperaba.
Se conoció después que el Frente de Todos ganaba con más de 47 por ciento, con 15 puntos de diferencia, y en la provincia de Buenos Aires también se imponían sus candidatos por más de 18 puntos.
Desde Santa Cruz, donde estaba la aspirante a vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner, envió un mensaje, recibido con gritos y cánticos por la multitud que fue creciendo al paso de las horas. Habló con serenidad sobre la importancia de la unidad que se había logrado y la esperanza de encontrarse todos juntos, después de los comicios del 27 de octubre. Pero también remarcó: “estamos absolutamente conscientes de la crisis que está atravesando Argentina, y al referirse a los desocupados y a la pobreza, sostuvo que
lejos de ponernos felices por el triunfo, estamos pensando en la responsabilidad sobre lo que vamos a enfrentar a partir de ahora.
Alberto Fernández agradeció a su compañera de fórmula, a quien destacó por su generosidad y su capacidad de estadista y por su compromiso con la unidad.
A partir de mañana todos vamos a trabajar por una nueva Argentina, vamos a hacer un país que todos nos merecemos, expresó Fernández en un discurso vibrante.
Agregó:
Se comprometió con la federalización del país y prometió una administración para los 24 gobernadores en un
Poco antes, debido a la demora del centro de cómputo para brindar resultados de la contienda, los partidos opositores comenzaron a dar a conocer los datos que tenían en sus conteos paralelos, después de haber denunciado ante la justicia electoral las irregularidades del gobierno al mantener a la empresa Smartmatic a pesar de todas a las advertencias y que terminó cometiendo errores graves y sin dar resultados concretos llegando a la medianoche.
La sospecha es que el gobierno intentó retrasar los resultados para ver si podía incidir en algunos, pero debieron rendirse ante la realidad y especialmente lo sucedido en la provincia de Buenos Aires, que tiene 37 por ciento del electorado de todo el país.
Ahí los candidatos a gobernador y vice del Frente de Todos, el ex ministro de Economía, Axel Kicillof, acompañado de Verónica Magario, intendente de La Matanza, se imponían con más de 18 por ciento sobre la gobernadora María Eugenia Vidal, que busca su relección.
Lo que se destaca en este caso es que Kicillof, quien comenzó su campaña tardíamente, recorrió toda la provincia con su viejo automóvil y logró lo que parecía imposible, mientras en La Mataza, el más populoso del conurbano bonaerense, lograron más de 65 por ciento de los votos.
La alianza oficialista Cambiemos, perdió
debemos estar unidos e integrados. No podemos vivir felices sabiendo que hay niños con hambre, y se comprometió a terminar con la pobreza recuperando las fábricas cerradas y la producción; se refirió a la situación de los jubilados que tienen el derecho a estar protegidos.
Se comprometió con la federalización del país y prometió una administración para los 24 gobernadores en un
país integrado y no segregado. Expuso:
vamos a trabajar todo lo que haga falta para que entendamos que debemos abrazarnos, no le vamos a preguntar por quién votó, sino si quiere una Argentina para todos.
Poco antes, debido a la demora del centro de cómputo para brindar resultados de la contienda, los partidos opositores comenzaron a dar a conocer los datos que tenían en sus conteos paralelos, después de haber denunciado ante la justicia electoral las irregularidades del gobierno al mantener a la empresa Smartmatic a pesar de todas a las advertencias y que terminó cometiendo errores graves y sin dar resultados concretos llegando a la medianoche.
La sospecha es que el gobierno intentó retrasar los resultados para ver si podía incidir en algunos, pero debieron rendirse ante la realidad y especialmente lo sucedido en la provincia de Buenos Aires, que tiene 37 por ciento del electorado de todo el país.
Ahí los candidatos a gobernador y vice del Frente de Todos, el ex ministro de Economía, Axel Kicillof, acompañado de Verónica Magario, intendente de La Matanza, se imponían con más de 18 por ciento sobre la gobernadora María Eugenia Vidal, que busca su relección.
Lo que se destaca en este caso es que Kicillof, quien comenzó su campaña tardíamente, recorrió toda la provincia con su viejo automóvil y logró lo que parecía imposible, mientras en La Mataza, el más populoso del conurbano bonaerense, lograron más de 65 por ciento de los votos.
La alianza oficialista Cambiemos, perdió
por palizadijeron periodistas anoche. En esta capital el jefe de gobierno Horacio Rodríguez Larreta ganaba con 46.32, seguido de Matías Lammens, su contendiente del Frente de Todos, que lograba más de 32 por ciento, la cifra más alta en esta ciudad que siempre ha votado por la derecha.
Histórica depreciación de la moneda argentina: el valor del dólar supera los 60 pesos
Publicado: 12 ago 2019 14:39 GMT | Última actualización: 12 ago 2019 17:12 GMT - RT
Tras el triunfo de Alberto Fernández en las
elecciones primarias de este domingo, los mercados reaccionan de forma
negativa ante el posible regreso del kirchnerismo a la Presidencia.
Luego
de darse a conocer el triunfo de Alberto Fernández en las elecciones
Primarias Abiertas Simultáneas y Obligatorias (PASO) de este domingo,
este lunes los mercados reaccionan de forma negativa: la cotización del dólar salta desde los 45,20 pesos hasta un promedio de 59 —57 para la compra y 61 para la venta,
según la pizarra del Banco Nación—, mientras las acciones de empresas
argentinas en Wall Street caen un 25% y el valor de los bonos se reduce
14%.
Al mismo tiempo, en algunas entidades privadas el valor de la divisa estadounidense ronda los 61 pesos. Así, se produce una depreciación histórica de la moneda nacional, que puede crecer con el correr de los minutos. En este país latinoamericano, cuando se eleva la cotización del dólar suelen aumentar los precios de consumo, situación que se traduce en inflación.
Mientras transcurre esta jornada adversa para Buenos Aires, el sitio del Banco Nación se encuentra saturado y el Banco Central no difunde datos sobre la cotización del dólar. Por su parte, el director de la casa madre del sistema bancario local, Guido Sandleris, se reunió con el presidente, Mauricio Macri, pero no realizó declaraciones públicas.
En otras palabras, el objetivo es que los bonos, llamados Leliq, también sean apetecibles, para poder disminuir la demanda de la divisa estadounidense e intentar evitar otra escalada abrupta en su valor.
Si bien es cierto que en las primarias no se definen cargos políticos, se trata de un primer panorama general para saber cómo se posicionan los candidatos de cara a las presidenciales de octubre, cuando Macri irá en busca de su reelección.
Con este escenario, el mandatario ya admitió que su desempeño electoral no fue bueno y reconoció la derrota en manos del kirchnerismo: "Hicimos una mala elección", admitió. Sin embargo, aseguró que intentarán "revertir la situación".
Al mismo tiempo, en algunas entidades privadas el valor de la divisa estadounidense ronda los 61 pesos. Así, se produce una depreciación histórica de la moneda nacional, que puede crecer con el correr de los minutos. En este país latinoamericano, cuando se eleva la cotización del dólar suelen aumentar los precios de consumo, situación que se traduce en inflación.
Mientras transcurre esta jornada adversa para Buenos Aires, el sitio del Banco Nación se encuentra saturado y el Banco Central no difunde datos sobre la cotización del dólar. Por su parte, el director de la casa madre del sistema bancario local, Guido Sandleris, se reunió con el presidente, Mauricio Macri, pero no realizó declaraciones públicas.
- El Banco Central eleva la tasa de interés
En otras palabras, el objetivo es que los bonos, llamados Leliq, también sean apetecibles, para poder disminuir la demanda de la divisa estadounidense e intentar evitar otra escalada abrupta en su valor.
- "Los mercados se dan cuenta de que fueron estafados"
Dura derrota para Macri
El presidente argentino quedó en segunda posición con el 32,08% de los votos, según el conteo provisorio de los recientes comicios. En contrapartida, el opositor Alberto Fernández alcanzó el primer puesto, con el 47,65%, aumentando sus chances de llegar a la Casa Rosada en diciembre de este año.Si bien es cierto que en las primarias no se definen cargos políticos, se trata de un primer panorama general para saber cómo se posicionan los candidatos de cara a las presidenciales de octubre, cuando Macri irá en busca de su reelección.
Con este escenario, el mandatario ya admitió que su desempeño electoral no fue bueno y reconoció la derrota en manos del kirchnerismo: "Hicimos una mala elección", admitió. Sin embargo, aseguró que intentarán "revertir la situación".
La bolsa anotó una pérdida en dólares de 48 por ciento
Las acciones se pulverizaron
Imagen: Télam
Los
activos argentinos sufrieron un colapso este lunes. La bolsa de Buenos
Aires anotó una pérdida de 48 por ciento en dólares. Se trata de la
segunda caída diaria más importante de la historia de los mercados
bursátiles en los últimos 70 años. La base datos para hacer la
comparación pertenece a Bloomberg y recopila información de 94 países.
El podio lo encabeza Sri Lanka con un rojo de 62 por ciento en 1989.
El tercer lugar de las pérdidas más importantes también lo ocupa la Bolsa de Buenos Aires. Se trata de la caída del 45 por ciento del 2002. El cuarto lugar de la lista es del mercado de Kazajistán con una merma de 38 por ciento en 2002. La bolsa de Mongolia se ubica en quinto lugar con una baja del 35 por ciento en 2004.
El ajuste de los precios financieros este lunes sorprendió a los operadores. Nadie esperaba una diferencia tan abultada en el proceso electoral. Tampoco estimaban en los escenarios una caída semejante de las acciones y lo bonos soberanos. Los bancos llegaron a perder más de 60 por ciento de su valor en dólares y los bonos registraron caídas superiores al 30 por ciento a lo largo de toda la curva de vencimientos.
Las entidades financieras fueron algunas de las empresas que más perdieron en la bolsa de Nueva York. Se destacaron los retrocesos de 59 por ciento de Supervielle, de 56 por ciento de Banco Francés, de 52 por ciento de Banco Macro y de 56 por ciento del Galicia. Las energéticas fueron otra de las empresas con importantes contracciones. Sobresalieron los retrocesos de 59 por ciento de Edenor, de 56 por ciento de Central Puerto y de 48 por ciento de la Transportadora Gas del Sur. No fueron las únicas firmas con caídas fuertes. Resaltó también la baja del 38 por ciento de IRSA y del 34 por ciento de la petrolera YPF.
Los bonos fueron otro de los activos argentinos con importante pérdida. Las bajas fueron generalizadas. Se desplomaron tanto los de corto como los de mediano y largo plazo. El Bonar 2020 anotó un retroceso de 25 por ciento, mientras que el Bonar 2024 marcó una contracción de 33 por ciento, el Discount 2033 del 28 por ciento, el Argentina 2037 del 29, el Par en moneda extranjera del 18,2 y el centenario de 24 por ciento.
La prima de riesgo de los seguros contra default de la Argentina se duplicó y en el mercado aseguran que el riesgo país a partir de este marte registrará en su índice un fuerte salto (computando las caídas de más del 30 por ciento del precio de los bonos de principio de la semana). Los rendimientos de los títulos públicos superan el 25 por ciento en moneda dura y ya son entre cuatro y cinco veces más elevados que en la región. La posibilidad de salir a emitir nueva deuda en estas condiciones es cercana a cero.
El tercer lugar de las pérdidas más importantes también lo ocupa la Bolsa de Buenos Aires. Se trata de la caída del 45 por ciento del 2002. El cuarto lugar de la lista es del mercado de Kazajistán con una merma de 38 por ciento en 2002. La bolsa de Mongolia se ubica en quinto lugar con una baja del 35 por ciento en 2004.
El ajuste de los precios financieros este lunes sorprendió a los operadores. Nadie esperaba una diferencia tan abultada en el proceso electoral. Tampoco estimaban en los escenarios una caída semejante de las acciones y lo bonos soberanos. Los bancos llegaron a perder más de 60 por ciento de su valor en dólares y los bonos registraron caídas superiores al 30 por ciento a lo largo de toda la curva de vencimientos.
Las entidades financieras fueron algunas de las empresas que más perdieron en la bolsa de Nueva York. Se destacaron los retrocesos de 59 por ciento de Supervielle, de 56 por ciento de Banco Francés, de 52 por ciento de Banco Macro y de 56 por ciento del Galicia. Las energéticas fueron otra de las empresas con importantes contracciones. Sobresalieron los retrocesos de 59 por ciento de Edenor, de 56 por ciento de Central Puerto y de 48 por ciento de la Transportadora Gas del Sur. No fueron las únicas firmas con caídas fuertes. Resaltó también la baja del 38 por ciento de IRSA y del 34 por ciento de la petrolera YPF.
Los bonos fueron otro de los activos argentinos con importante pérdida. Las bajas fueron generalizadas. Se desplomaron tanto los de corto como los de mediano y largo plazo. El Bonar 2020 anotó un retroceso de 25 por ciento, mientras que el Bonar 2024 marcó una contracción de 33 por ciento, el Discount 2033 del 28 por ciento, el Argentina 2037 del 29, el Par en moneda extranjera del 18,2 y el centenario de 24 por ciento.
La prima de riesgo de los seguros contra default de la Argentina se duplicó y en el mercado aseguran que el riesgo país a partir de este marte registrará en su índice un fuerte salto (computando las caídas de más del 30 por ciento del precio de los bonos de principio de la semana). Los rendimientos de los títulos públicos superan el 25 por ciento en moneda dura y ya son entre cuatro y cinco veces más elevados que en la región. La posibilidad de salir a emitir nueva deuda en estas condiciones es cercana a cero.
El mercado en debacle por culpa del gobierno de Macri, con el aval del FMI
¿Quiénes son responsables de la corrida cambiaria?
El
régimen de valorizaciones financiera de estos casi cuatro años de
economía macrista explotó. No lo hizo por el triunfo electoral de la
oposición. Los nombres de los principales funcionarios del área
económica responsables de la crisis.
Mauricio Macril, el principal responsable político de la debacle económica.
El descontrol de la paridad cambiaria y el derrumbe de acciones y bonos tienen un único responsable.
No son los operadores financieros que se ocupan de lo que saben hacer,
que es especular con el dólar y activos bursátiles. Tampoco son
culpables la mayoría de las encuestadoras que se dedicaron a hacer lo de
siempre: vender expectativas positivas al oficialismo, que maneja un
billetera más abultada para comprar sondeos electorales y así intentar
manipular la opinión pública. Ninguna responsabilidad puede atribuirse
al caos cambiario a la fuerza política que arrasó con el macrismo. Quien tiene que hacerse cargo de la catástrofe de otra megadevaluación es el gobierno de Cambiemos.
La desregulación total del mercado cambiario, la apertura irrestricta para el ingreso y egreso de capitales financieros, el endeudamiento desaforado y la inmensa bicicleta con las Lebac, primero, y con las Leliq, después, son los elementos de un combo devastador. Las bases de la economía macrista son las que provocaron esta debacle.
El responsable político es la alianza macrismo-radicalismo que ha arrojado a la sociedad argentina a otra crisis de proporciones, entre las peores que se han registrado. Pero hay economistas que han estado en puestos claves que fueron los ideólogos y ejecutores de una política que terminó en este descalabro. Como tienen la fortuna de la impunidad que les brinda el establishment, resulta oportuno recordar quienes deberán ser recordados como culpables de este nuevo drama socioeconómico: Alfonso Prat Gay, Federico Sturzenegger, Lucas Llach, Luis Caputo, Nicolás Dujovne, Guido Sandleris, Gustavo Cañonero.
A lo largo de estos cuatro años ellos fueron los funcionarios del Palacio de Hacienda y del Banco Central que han alimentado una obscena orgía financiera. Hasta festejaron la emisión de un bono de deuda a 100 años. Después, aparece una inmensa legión de economistas de la city que buscaron darle legitimidad a un plan económico que resultó un fiasco.
Como ha sucedido en crisis pasadas, en la de 1989 que derivó en hiperinflación, y en la de 2001 cuyo desenlace fue el default y megadevaluación, el Fondo Monetario Internacional ha cumplido el papel de avalar un programa financiero y cambiario pésimo para la estabilidad macroeconómica. Con el gobierno de Macri fue más audaz que en esas dos experiencias traumáticas. Entregó el crédito más abultado de su historia a un país cuando la economía macrista ya había naufragado, en marzo del año pasado, en el momento que Wall Street le cerró el grifo de dólares.
El FMI, o sea Estados Unidos, entregó millones de dólares a una economía que ya no tenía suficientes divisas sólo por una decisión geopolítica de sostener a un gobierno de derecha para frenar el regreso al poder de una fuerza populista. Fracasaron en ese intento. El resultado de las urnas de este domingo fue un golpe certero a esa ambición.
Los inmensos costos de este nuevo experimento neoliberal, hegemonizado por un régimen de valorización financiera, se han empezado a padecer desde hace varios meses. Pero, lamentablemente, de acuerdo a otras crisis traumáticas, recién a partir de ahora se empezará a observar el peor rostro del desastre económico cuya exclusiva responsabilidad es del gobierno de Mauricio Macri.
La desregulación total del mercado cambiario, la apertura irrestricta para el ingreso y egreso de capitales financieros, el endeudamiento desaforado y la inmensa bicicleta con las Lebac, primero, y con las Leliq, después, son los elementos de un combo devastador. Las bases de la economía macrista son las que provocaron esta debacle.
El responsable político es la alianza macrismo-radicalismo que ha arrojado a la sociedad argentina a otra crisis de proporciones, entre las peores que se han registrado. Pero hay economistas que han estado en puestos claves que fueron los ideólogos y ejecutores de una política que terminó en este descalabro. Como tienen la fortuna de la impunidad que les brinda el establishment, resulta oportuno recordar quienes deberán ser recordados como culpables de este nuevo drama socioeconómico: Alfonso Prat Gay, Federico Sturzenegger, Lucas Llach, Luis Caputo, Nicolás Dujovne, Guido Sandleris, Gustavo Cañonero.
A lo largo de estos cuatro años ellos fueron los funcionarios del Palacio de Hacienda y del Banco Central que han alimentado una obscena orgía financiera. Hasta festejaron la emisión de un bono de deuda a 100 años. Después, aparece una inmensa legión de economistas de la city que buscaron darle legitimidad a un plan económico que resultó un fiasco.
Como ha sucedido en crisis pasadas, en la de 1989 que derivó en hiperinflación, y en la de 2001 cuyo desenlace fue el default y megadevaluación, el Fondo Monetario Internacional ha cumplido el papel de avalar un programa financiero y cambiario pésimo para la estabilidad macroeconómica. Con el gobierno de Macri fue más audaz que en esas dos experiencias traumáticas. Entregó el crédito más abultado de su historia a un país cuando la economía macrista ya había naufragado, en marzo del año pasado, en el momento que Wall Street le cerró el grifo de dólares.
El FMI, o sea Estados Unidos, entregó millones de dólares a una economía que ya no tenía suficientes divisas sólo por una decisión geopolítica de sostener a un gobierno de derecha para frenar el regreso al poder de una fuerza populista. Fracasaron en ese intento. El resultado de las urnas de este domingo fue un golpe certero a esa ambición.
Los inmensos costos de este nuevo experimento neoliberal, hegemonizado por un régimen de valorización financiera, se han empezado a padecer desde hace varios meses. Pero, lamentablemente, de acuerdo a otras crisis traumáticas, recién a partir de ahora se empezará a observar el peor rostro del desastre económico cuya exclusiva responsabilidad es del gobierno de Mauricio Macri.
El impacto del dolarazo macrista: aumentos de 20 por ciento y suspensión de entrega de mercadería
Remarcación generalizada de precios
La
economía real ingresó este jornada en estado de shock. El desborde
cambiario paralizó el movimiento comercial por el freno en los
despachos. En muchos sectores no había precios de referencia.
En la cadena comercial hay suspensión de entregas, no se aceptan nuevos pedidos y aumentos de precios.
Imagen: Guadalupe Lombardo
Imagen: Guadalupe Lombardo
Las grandes empresas de consumo masivo frenaron las entregas a mayoristas y supermercados o ya enviaron nuevas listas de precios con subas escalonadas del 20 por ciento.
Harinas y derivados, aceites, artículos de limpieza e higiene personal
aumentaron los precios, aunque en las góndolas todavía no se siente
plenamente. “Es muy difícil pero es así, no se puede remarcar el precio
en la cara a la gente, tampoco es posible subir todos los precios que
hay en exhibición, no hay tiempo físico”. Ese clima se vive en un
autoservicio mayorista.
El abismo financiero y cambiario al que
viene empujando desde hace casi cuatro años el gobierno de Mauricio
Macri a la Argentina se precipitó este lunes, con otro fuerte salto del
dólar y derrumbe en el precio de los activos financieros. Pero además, la economía “real” entró en estado de shock:
salvo los grandes jugadores que ya se adelantaron y enviaron aumentos,
todo el resto frenó toda su actividad a la espera de que la situación se
despeje.
Consumo masivo
“Molinos Rio de la Plata suspendió la venta de harinas y aceites, también Unilever dejó de entregar. ADG no tiene precio del aceite y Molinos Cañuelas está entregando pero con aumentos. Las marcas más chicas suspendieron las entregas. Son empresas en mejor posición porque tienen un canal de distribución con representantes y directamente no sacaron a la calle a los vendedores. En cambio los autoservicios estamos fritos, no podes remarcarle así a la gente en la cara. Tampoco es posible remarcar todo lo que tenés en exhibición, no hay tiempo físico”, advierten desde la Cámara de Mayoristas.
Además de suspender las ventas y no tomar pedidos, Molinos ya envío una lista de precios con aumentos escalonado del 20 por ciento. La empresa Refinería de Maíz (Hellmann´s, Caldos Knorr, Puré Sica) suspendió las ventas porque, dijeron, “se fue todo a la mierda”. Tampoco los importadores de alimentos toman pedidos. Distinto sería el caso de los lácteos, que tienen tanto sobrestock por la caída de las ventas que no aumentaron sus precios.
“Te negocian sobre la entrega, o sea, sobre lo que ya pediste. Eso es lo primero, después vienen las nuevas listas. Las que iban a llegar en septiembre se adelantan. Los electrodomésticos congelaron la entrega”, dice un supermercadista. “Nadie del Gobierno no nos llamó por estos temas, creo que están mirando la película del dólar todavía”, advierte.
Otros rubros
Buena parte de la economía carece de precios en esta jornada. Las concesionarias de autos no aceptan operaciones porque no saben a qué precio deberán reponer mercadería, mientras que fabricantes de muebles indicaron a este diario que “el precio tal vez se sepa al final de la jornada, por ahora no hay precio y no hay operaciones”. “No se despacha, no te venden y no se vende. No hay precios en hilados ni telas de ningún tipo”, mencionaron desde la Cámara del Sweater.
Una firma que fabrica anteojos comentó que “como usamos insumos importados, no tenemos parámetros de precios. No sabemos qué hacer, si vender o no vender, si aumentar o no. Tenemos corredores en la calle y no podemos decirles que frenen todo”. Algunas mercerías y ferreterías de barrio pegaron cartelitos en las vidrieras advirtiendo que “todo aumenta un 20 por ciento” y hasta los kioskos retacean ventas de productos como resmas de papel.
Los autopartistas cuentan que “la mayoría de los proveedores de insumos de metal están completamente desconcertados. Algunos ya mandaron aumentos del 23 por ciento. El que puede, se retira del mercado y no vende”.
Los supermercados también están en pie de guerra
contra la industria porque les aumentaron los precios de las entregas
que ya se habían pactado. Todo recaerá, más temprano que tarde, sobre el castigado poder adquisitivo del salario. En otros rubros hay una paralización total de actividades,
desde los despachos de acero hasta ventas de resmas de papel en los
kioskos, pasando por aumentos “de todo” en mercerías y ferreterías en un
20 por ciento a la suspensión de las ventas de autos en concesionarias.
Consumo masivo
“Molinos Rio de la Plata suspendió la venta de harinas y aceites, también Unilever dejó de entregar. ADG no tiene precio del aceite y Molinos Cañuelas está entregando pero con aumentos. Las marcas más chicas suspendieron las entregas. Son empresas en mejor posición porque tienen un canal de distribución con representantes y directamente no sacaron a la calle a los vendedores. En cambio los autoservicios estamos fritos, no podes remarcarle así a la gente en la cara. Tampoco es posible remarcar todo lo que tenés en exhibición, no hay tiempo físico”, advierten desde la Cámara de Mayoristas.
Además de suspender las ventas y no tomar pedidos, Molinos ya envío una lista de precios con aumentos escalonado del 20 por ciento. La empresa Refinería de Maíz (Hellmann´s, Caldos Knorr, Puré Sica) suspendió las ventas porque, dijeron, “se fue todo a la mierda”. Tampoco los importadores de alimentos toman pedidos. Distinto sería el caso de los lácteos, que tienen tanto sobrestock por la caída de las ventas que no aumentaron sus precios.
“Te negocian sobre la entrega, o sea, sobre lo que ya pediste. Eso es lo primero, después vienen las nuevas listas. Las que iban a llegar en septiembre se adelantan. Los electrodomésticos congelaron la entrega”, dice un supermercadista. “Nadie del Gobierno no nos llamó por estos temas, creo que están mirando la película del dólar todavía”, advierte.
Otros rubros
Buena parte de la economía carece de precios en esta jornada. Las concesionarias de autos no aceptan operaciones porque no saben a qué precio deberán reponer mercadería, mientras que fabricantes de muebles indicaron a este diario que “el precio tal vez se sepa al final de la jornada, por ahora no hay precio y no hay operaciones”. “No se despacha, no te venden y no se vende. No hay precios en hilados ni telas de ningún tipo”, mencionaron desde la Cámara del Sweater.
Una firma que fabrica anteojos comentó que “como usamos insumos importados, no tenemos parámetros de precios. No sabemos qué hacer, si vender o no vender, si aumentar o no. Tenemos corredores en la calle y no podemos decirles que frenen todo”. Algunas mercerías y ferreterías de barrio pegaron cartelitos en las vidrieras advirtiendo que “todo aumenta un 20 por ciento” y hasta los kioskos retacean ventas de productos como resmas de papel.
Los autopartistas cuentan que “la mayoría de los proveedores de insumos de metal están completamente desconcertados. Algunos ya mandaron aumentos del 23 por ciento. El que puede, se retira del mercado y no vende”.
Entrevista
Ricardo Peidro: “Haber derrotado a Macri en las PASO es un triunfo de la organización y de la lucha de la clase trabajadora”
Lunes 12 de agosto de 2019, por *
Así se
refirió a la derrota de Mauricio Macri ayer en las elecciones primarias,
Ricardo Peidro, Secretario General de la CTA Autónoma, quien además
llamó a seguir trabajando para garantizar y conquistar nuevos derechos
para la clase trabajadora que es la verdadera constructora de las
riquezas de nuestro país. Que se reincorporen todos y todas las
trabajadoras, que se garantice el 82% móvil, así como el derecho de las
mujeres a decidir sobre sus cuerpos, que se recuperen los bienes comunes
y que los salarios y las condiciones de trabajo sean dignas, estuvieron
entre sus principales exigencias para el próximo Gobierno.
-¿Cómo lee la CTA Autónoma los resultados de las PASO de ayer?
Haber derrotado la política social y económica encarnada por Macri en estas elecciones PASO es un triunfo producto de la lucha de nuestro pueblo y de la clase trabajadora que supo decir no a las políticas de ajuste en las calles, en los paros, en cada resistencia y que tuvo su correlato en el golpe contundente del día de ayer.
Desde la CTA Autónoma estuvimos desde el primer momento en la calle denunciando las políticas neoliberales de este Gobierno: los despidos, los cierres de fábricas y empresas, la represión, la depresión del salario de nuestra clase, la falta de políticas públicas, los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional. Por eso a estas elecciones y su resultado provisorio pero contundente, lo vivimos como un triunfo de la lucha y de la organización popular.
-¿Qué esperan del próximo Gobierno?
Vamos a seguir exigiendo que se cumpla lo que venimos pidiendo desde hace mucho tiempo: que se termine con la pobreza, con la desocupación, que se reincorpore a todos y todas las trabajadoras, que el Estado esté al servicio de los intereses populares, que se termine con la política represiva hacia las expresiones populares, ya que el discurso de este gobierno tiene su correlato en la muerte de militantes populares y en la represión como única salida a la crisis; que podamos construir un país en el que todo el pueblo tenga salud, educación, trabajo, vivienda de calidad. Que los jubilados y las jubiladas tengan el 82% móvil y que las mujeres puedan decidir sobre sus propios cuerpos.
También exigimos paritarias libres, tanto para el sector público como para el sector privado y que recuperemos nuestros bienes comunes; que se termine con la reprimerización de nuestra economía que destruye el aparato productivo y el medio ambiente con los agro tóxicos, la deforestación y la mega minería, que enriquece a unos pocos y empobrece a la mayoría.
-¿Cuál es tu opinión sobre la corrida bancaria de esta mañana?
Como decimos siempre, los poderosos votan todos los días tratando de presionar con la corrida cambiaria para condicionar y crear terror en nuestro pueblo pero ya los conocemos, no nos pueden subestimar, hagan lo que hagan van a seguir sufriendo las derrotas que sabe propiciar la clase trabajadora. No vamos a tolerar el revanchismo de los poderosos que lejos del voto institucional pretenden votar presionando y creando terror en nuestro pueblo.
-Ayer el pueblo votó en defensa de sus intereses
Totalmente, aunque no se puede subestimar el poder de los medios de comunicación, ayer nuestro pueblo votó por sus necesidades, en contra de las políticas de ajuste y de los tarifazos. Aunque fue una elección primaria, el triunfo contra las políticas neoliberales fue rotundo. Seguiremos en la calle, como lo hemos hecho siempre, para seguir garantizando y conquistando nuevos derechos para la clase trabajadora que es la verdadera hacedora de las riquezas del país.
En esta época en que se consolidó nuestra legalidad, que nuestros gremios consolidaron sus políticas a través de elecciones y que se fortalecen nuestras organizaciones sociales, necesitamos profundizar el debate por el camino de los tiempos por venir.
Haber derrotado la política social y económica encarnada por Macri en estas elecciones PASO es un triunfo producto de la lucha de nuestro pueblo y de la clase trabajadora que supo decir no a las políticas de ajuste en las calles, en los paros, en cada resistencia y que tuvo su correlato en el golpe contundente del día de ayer.
Desde la CTA Autónoma estuvimos desde el primer momento en la calle denunciando las políticas neoliberales de este Gobierno: los despidos, los cierres de fábricas y empresas, la represión, la depresión del salario de nuestra clase, la falta de políticas públicas, los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional. Por eso a estas elecciones y su resultado provisorio pero contundente, lo vivimos como un triunfo de la lucha y de la organización popular.
-¿Qué esperan del próximo Gobierno?
Vamos a seguir exigiendo que se cumpla lo que venimos pidiendo desde hace mucho tiempo: que se termine con la pobreza, con la desocupación, que se reincorpore a todos y todas las trabajadoras, que el Estado esté al servicio de los intereses populares, que se termine con la política represiva hacia las expresiones populares, ya que el discurso de este gobierno tiene su correlato en la muerte de militantes populares y en la represión como única salida a la crisis; que podamos construir un país en el que todo el pueblo tenga salud, educación, trabajo, vivienda de calidad. Que los jubilados y las jubiladas tengan el 82% móvil y que las mujeres puedan decidir sobre sus propios cuerpos.
También exigimos paritarias libres, tanto para el sector público como para el sector privado y que recuperemos nuestros bienes comunes; que se termine con la reprimerización de nuestra economía que destruye el aparato productivo y el medio ambiente con los agro tóxicos, la deforestación y la mega minería, que enriquece a unos pocos y empobrece a la mayoría.
-¿Cuál es tu opinión sobre la corrida bancaria de esta mañana?
Como decimos siempre, los poderosos votan todos los días tratando de presionar con la corrida cambiaria para condicionar y crear terror en nuestro pueblo pero ya los conocemos, no nos pueden subestimar, hagan lo que hagan van a seguir sufriendo las derrotas que sabe propiciar la clase trabajadora. No vamos a tolerar el revanchismo de los poderosos que lejos del voto institucional pretenden votar presionando y creando terror en nuestro pueblo.
-Ayer el pueblo votó en defensa de sus intereses
Totalmente, aunque no se puede subestimar el poder de los medios de comunicación, ayer nuestro pueblo votó por sus necesidades, en contra de las políticas de ajuste y de los tarifazos. Aunque fue una elección primaria, el triunfo contra las políticas neoliberales fue rotundo. Seguiremos en la calle, como lo hemos hecho siempre, para seguir garantizando y conquistando nuevos derechos para la clase trabajadora que es la verdadera hacedora de las riquezas del país.
En esta época en que se consolidó nuestra legalidad, que nuestros gremios consolidaron sus políticas a través de elecciones y que se fortalecen nuestras organizaciones sociales, necesitamos profundizar el debate por el camino de los tiempos por venir.
Comunicado de prensa
La derrota de Macri es el triunfo de la organización de la clase trabajadora
Lunes 12 de agosto de 2019, por *
En la
jornada de ayer asistimos a una derrota determinante de la alianza
“Juntos por el cambio” en las elecciones Primarias Abiertas, Simultáneas
y Obligatorias (PASO). El pueblo argentino, en las urnas, se manifestó
en contra de la política de saqueo, de entrega y de ajuste que viene
realizando este gobierno desde hace casi cuatro años y que empobreció al
pueblo trabajador.
La política económica de este gobierno -con Mauricio Macri y sus funcionarios a la cabeza- estuvo, sin dudas, al servicio de los Mercados, el FMI y la renta financiera y en contra de la soberanía, la producción y el trabajo.
Despidos, suspensiones, pérdida del poder adquisitivo del salario, inflación, cierre de fábricas, tarifazos, represión, criminalización de la protesta, no fueron los efectos indeseados, sino las consecuencias de una política planificada, de transferencia de recursos hacia los sectores más concentrados de la economía.
Desde la CTA Autónoma estuvimos desde el primer momento en la calle, enfrentando las políticas de ajuste del gobierno de Macri, y en defensa de los derechos que los trabajadores y las trabajadoras supimos conseguir a lo largo de la historia.
Es por eso que desde nuestra Central, celebramos el resultado de estas elecciones, que marcan una derrota clara del neoliberalismo, y lo vivimos como un triunfo de la lucha y de la organización popular.
No obstante, este escenario nos pone en el compromiso de redoblar los esfuerzos para que el próximo gobierno asuma una agenda para devolver los derechos a la clase trabajadora: reincorporación de las y los despedidos, derogación de la reforma previsional y 82% móvil para las y los jubilados, recuperación del salario, paritarias libres, marcha atrás con los tarifazos en los servicios públicos, entre otras reivindicaciones urgentes.
Pero además, es imperioso que el nuevo gobierno genere las condiciones para un desarrollo productivo y soberano, promoviendo el progreso de la ciencia y la tecnología nacional, apoyo a los institutos de investigación, mejora de la educación y de la salud pública, apoyo a las Pymes y a los pequeños productores, y promoción de procesos productivos que generen más y mejor trabajo.
Asimismo, es fundamental que quien asuma la nueva gestión tome la agenda del movimiento de mujeres, colectivo LGTTBYQ y feminista por el derecho a decidir, por la igualdad de oportunidades y la lucha para erradicar todos los tipos de violencia, ratificando el Convenio 190 de la OIT, sobre violencia y acoso en el mundo del trabajo con perspectiva de género.
Una vez más ratificamos nuestro compromiso con los trabajadores y las trabajadoras de la Argentina, y nos reafirmamos en la autonomía de los gobiernos y de los patrones. Por eso es que, gobierne quien gobierne, estaremos en la calle defendiendo los intereses de la clase.
Ricardo Piedro, secretario general de la CTA-A Claudia Baigorria, secretaria general adjunta Hugo "Cachorro" Godoy, secretario general adjunto
URUGUAY
ADEOM hará campaña contra la reforma constitucional impulsada por Larrañaga
El gremio se declaró en conflicto y denuncia que la IM hará más privatizaciones.
Ayer de tarde, luego de una asamblea general, la Asociación de
Empleados y Obreros Municipales (ADEOM) resolvió declararse en
conflicto. Valeria Ripoll, secretaria general del gremio, habló en
conferencia de prensa. Recordó que tuvieron “grandes problemas de
relacionamiento” con la administración de la Intendencia de Montevideo
(IM) desde que asumió Daniel Martínez como jefe de la comuna, y subrayó
que hoy, con Christian Di Candia al frente, siguen “padeciendo las
mismas políticas”. Destacó que “durante un buen tiempo” apostaron al
diálogo en la negociación e intentaron evitar la privatización del
sector de contenedores. No obstante, dijo que la IM hace “poco tiempo”
resolvió lanzar un pliego licitatorio para privatizar ese sector.
Ripoll denunció que la IM les sacó 12 camiones y que “algunos de ellos estaban operativos” para “preparárselos a empresas privadas de cara al pliego licitatorio”. Subrayó que Di Candia se “comprometió, personalmente” a que los camiones “iban a ser devueltos”, mientras Fernando Puntigliano, director de Desarrollo Ambiental de la IM, les señaló que eso “no iba a ser así”. “A la postre, terminó siendo que lo que dijo Puntigliano era la realidad. A esto nos referimos cuando decimos que las políticas que se venían aplicando en la administración de Martínez están continuando con Di Candia”, enfatizó Ripoll.
Por otro lado, la sindicalista dijo que se enteraron de que también se abrirá un pliego licitatorio para “privatizar” el servicio de limpieza de “todas las ferias de Montevideo”, lo que significa un “crecimiento importante en las privatizaciones”. Señaló que esta situación les “preocupa” porque, además, tienen “400 compañeras en lista de prelación, desde 2011, para poder ingresar a la administración municipal”. “En los últimos días salieron artículos de prensa en los que la IM manifiesta que por primera vez en 2018 ingresaron el mismo número de mujeres que de hombres, como si fuera un logro en equidad de género, cuando en realidad esto se justifica porque habían ingresado todos los hombres de la lista de prelación obrera, y no les quedó más remedio de que ingresaran mujeres”, sostuvo Ripoll, y agregó que esas “compañeras perfectamente podrían estar trabajando” en los sectores que la IM resolvió privatizar.
Por último, Ripoll subrayó que en la asamblea general también se decidió hacer “una campaña contra la reforma” constitucional en materia de seguridad propuesta por el senador del Partido Nacional Jorge Larrañaga. Para esto, ADEOM armará un “equipo de trabajo” que se plegará a la coordinación que está haciendo el PIT-CNT por el mismo motivo.
A todo esto, Di Candia dijo a Radio Universal que en ADEOM “o tienen amnesia o hay mala intención”, y que le sorprende lo dicho en la conferencia, porque, entre otras cosas, el miércoles contestó “la mayor cantidad de consultas y situaciones que planteaba el gremio, no solamente profundizando el diálogo sino haciendo lugar a unas cuantas situaciones”.
Ripoll denunció que la IM les sacó 12 camiones y que “algunos de ellos estaban operativos” para “preparárselos a empresas privadas de cara al pliego licitatorio”. Subrayó que Di Candia se “comprometió, personalmente” a que los camiones “iban a ser devueltos”, mientras Fernando Puntigliano, director de Desarrollo Ambiental de la IM, les señaló que eso “no iba a ser así”. “A la postre, terminó siendo que lo que dijo Puntigliano era la realidad. A esto nos referimos cuando decimos que las políticas que se venían aplicando en la administración de Martínez están continuando con Di Candia”, enfatizó Ripoll.
Por otro lado, la sindicalista dijo que se enteraron de que también se abrirá un pliego licitatorio para “privatizar” el servicio de limpieza de “todas las ferias de Montevideo”, lo que significa un “crecimiento importante en las privatizaciones”. Señaló que esta situación les “preocupa” porque, además, tienen “400 compañeras en lista de prelación, desde 2011, para poder ingresar a la administración municipal”. “En los últimos días salieron artículos de prensa en los que la IM manifiesta que por primera vez en 2018 ingresaron el mismo número de mujeres que de hombres, como si fuera un logro en equidad de género, cuando en realidad esto se justifica porque habían ingresado todos los hombres de la lista de prelación obrera, y no les quedó más remedio de que ingresaran mujeres”, sostuvo Ripoll, y agregó que esas “compañeras perfectamente podrían estar trabajando” en los sectores que la IM resolvió privatizar.
Por último, Ripoll subrayó que en la asamblea general también se decidió hacer “una campaña contra la reforma” constitucional en materia de seguridad propuesta por el senador del Partido Nacional Jorge Larrañaga. Para esto, ADEOM armará un “equipo de trabajo” que se plegará a la coordinación que está haciendo el PIT-CNT por el mismo motivo.
A todo esto, Di Candia dijo a Radio Universal que en ADEOM “o tienen amnesia o hay mala intención”, y que le sorprende lo dicho en la conferencia, porque, entre otras cosas, el miércoles contestó “la mayor cantidad de consultas y situaciones que planteaba el gremio, no solamente profundizando el diálogo sino haciendo lugar a unas cuantas situaciones”.
Milagro Pau: “El pueblo demostró que es sabio y no se deja engañar”
Para la responsable de la Secretaría de Género, Equidad y Diversidad
del PIT-CNT, Milagro Pau, el resultado de la consulta popular realizada
el pasado domingo deja en evidencia que ante cualquier intento de
cercenamiento en materia de derechos, la ciudadanía “va a defender las
conquistas”.
Pau aseguró que Uruguay se ha caracterizado “y así es reconocido en el mundo” por la construcción de una agenda de derechos “especialmente en estos últimos tiempos que hemos defendido los DDHH en todos los planos”. En este sentido, dijo que el movimiento sindical salió en defensa de la Ley Trans “de la misma manera que defendemos los derechos de la mujer, porque es muy notorio que quienes se oponen a la nueva agenda de derechos en ocasiones lo han hecho engañando y apelando a una supuesta ideología de género. Lo hemos visto, hubo propaganda -no tramposa sino fascista y terrible- engañando a la gente. Pero el pueblo ha demostrado que es sabio, que sabe diferenciar lo que es el engaño, lo que es el fascismo y lo que es la democracia. Y este es un mensaje que tenemos que darle a los de acá y al mundo y así lo hicimos en el día de ayer, reafirmando el lugar en que estamos inmersos en las democracias del mundo”.
Pau valoró la atención de la prensa y los movimientos sociales a nivel internacional sobre el pronunciamiento del pueblo uruguayo en defensa de la Ley Trans. “Creo que es importante, el mundo nos está mirando con lupa y les decimos, sigan mirando porque los uruguayos defendemos los derechos humanos. En la misma dirección, la titular de la Secretaría de Género, Equidad y Diversidad de la central sindical reflexionó que “el pueblo uruguayo demostró que no estamos para cercenar derechos y que marchamos hacia una sociedad más igualitaria y respetuosa”. Pau agregó que el resultado de las urnas y la falta de apoyo a la iniciativa opositora, “es una señal muy clara de que vamos hacia un proyecto de país igualitario, con derechos y que claramente tenemos que ser muy respetuosos de lo que piensa el otro. Creo que es una demostración muy de lo que es la democracia, el sentir de todos y todas, y también creo que es una reflexión de mirar al pasado, de ver lo que fueron las injusticias y no olvidar. No quedarnos en el pasado porque tenemos que seguir avanzando y no vivir en el pasado si queremos un futuro, pero no olvidar lo que pasó en la dictadura y eso es una señal muy positiva que ha dado el pueblo. Eso también marcó la jornada de ayer, a pesar de que hubo presiones para ir a votar, hubo intimidación de algunos sectores para que fueran a votar, agitando un cuco de lo que es el reclamo de los derechos de las compañeras y compañeros trans. Yo creo que eso justamente es lo que marcó, que no estamos dispuestos a recortar más derechos y eso señala el modelo de país que queremos hacia delante. Y así como con los derechos humanos, lo mismo sucede con los convenios colectivos, con las libertades sindicales, y con tantos derechos que no estamos dispuestos a que nos sean recortados. Por eso creo que es un mensaje muy importante que se ha dado para algunos políticos que quieren cambiar nuestra historia” sentenció.
Pau aseguró que Uruguay se ha caracterizado “y así es reconocido en el mundo” por la construcción de una agenda de derechos “especialmente en estos últimos tiempos que hemos defendido los DDHH en todos los planos”. En este sentido, dijo que el movimiento sindical salió en defensa de la Ley Trans “de la misma manera que defendemos los derechos de la mujer, porque es muy notorio que quienes se oponen a la nueva agenda de derechos en ocasiones lo han hecho engañando y apelando a una supuesta ideología de género. Lo hemos visto, hubo propaganda -no tramposa sino fascista y terrible- engañando a la gente. Pero el pueblo ha demostrado que es sabio, que sabe diferenciar lo que es el engaño, lo que es el fascismo y lo que es la democracia. Y este es un mensaje que tenemos que darle a los de acá y al mundo y así lo hicimos en el día de ayer, reafirmando el lugar en que estamos inmersos en las democracias del mundo”.
Pau valoró la atención de la prensa y los movimientos sociales a nivel internacional sobre el pronunciamiento del pueblo uruguayo en defensa de la Ley Trans. “Creo que es importante, el mundo nos está mirando con lupa y les decimos, sigan mirando porque los uruguayos defendemos los derechos humanos. En la misma dirección, la titular de la Secretaría de Género, Equidad y Diversidad de la central sindical reflexionó que “el pueblo uruguayo demostró que no estamos para cercenar derechos y que marchamos hacia una sociedad más igualitaria y respetuosa”. Pau agregó que el resultado de las urnas y la falta de apoyo a la iniciativa opositora, “es una señal muy clara de que vamos hacia un proyecto de país igualitario, con derechos y que claramente tenemos que ser muy respetuosos de lo que piensa el otro. Creo que es una demostración muy de lo que es la democracia, el sentir de todos y todas, y también creo que es una reflexión de mirar al pasado, de ver lo que fueron las injusticias y no olvidar. No quedarnos en el pasado porque tenemos que seguir avanzando y no vivir en el pasado si queremos un futuro, pero no olvidar lo que pasó en la dictadura y eso es una señal muy positiva que ha dado el pueblo. Eso también marcó la jornada de ayer, a pesar de que hubo presiones para ir a votar, hubo intimidación de algunos sectores para que fueran a votar, agitando un cuco de lo que es el reclamo de los derechos de las compañeras y compañeros trans. Yo creo que eso justamente es lo que marcó, que no estamos dispuestos a recortar más derechos y eso señala el modelo de país que queremos hacia delante. Y así como con los derechos humanos, lo mismo sucede con los convenios colectivos, con las libertades sindicales, y con tantos derechos que no estamos dispuestos a que nos sean recortados. Por eso creo que es un mensaje muy importante que se ha dado para algunos políticos que quieren cambiar nuestra historia” sentenció.