BRASIL
¿Qué relación existe entre Bolsonaro y los incendios en la Amazonía?
Luego de que el Instituto Nacional de Pesquisas Espaciales (INPE) de Brasil alertara que el número de incendios forestales en la Amazonía en
lo que va de este año es un 83% superior al del mismo período del
2018, el presidente Jair Bolsonaro salió al frente para decir que los
responsables serían los “oenegeros” que buscan llamar la atención y
atentar contra su gobierno. ”Esa es la guerra que estamos enfrentando”,
afirmó Bolsonaro.
Los datos del INPE, basados en imágenes tomadas vía satélite, señalan que entre enero y agosto de este año se han detectado 72 843 focos de incendios en la Amazonía.
¿A qué se debe el récord de incendios en la Amazonía?
Acre, en la frontera con el Perú lleva en alerta desde el viernes.
Mato Grosso y Pará son los otros dos estados donde la frontera agrícola del Brasil ha entrado en la cuenca del Amazonas.
“Si todos los datos de deforestación de los últimos diez años fueran verdad, la Amazonía ya no existiría”, se defendió Bolsonaro en julio al ser preguntado sobre los datos oficiales del propio Gobierno. “Sabemos que si deforestamos esto se transforma en desierto”, agregó.
De acuerdo con el diario El País, el presidente sostuvo que hay mucha presión externa sobre la Amazonía para intentar influir en la política brasileña. ”La Amazonia es nuestra, no de ustedes”, insistió. Dijo que ve exagerada la preocupación por los indígenas afectados. ”Ustedes quieren tratar a los indígenas como seres prehistóricos. Y hay indígenas que quieren trabajar, producir”.
Pese a que es usual que se produzcan incendios forestales en estación seca, las organizaciones ambientalistas han denunciado en reiteradas ocasiones que los agricultores deforestan ilegalmente por su interés en las tierras de la zona para la cría del ganado.
Bolsonaro ha dicho que los agricultores usan el fuego para limpiar la tierra en lo que denominan ”la época del año de la queimada” y que”Esta sería la temporada”.
Sin embargo, el investigador de INPE, Alberto Setzer, rechaza cualquier teoría orientada a fenómenos naturales: ”No hay nada raro en el clima este año, ni en los niveles de lluvia en la región amazónica, que sólo está un poco por debajo del promedio. La estación seca crea las condiciones favorables para la propagación del fuego, pero su inicio es obra de los humanos, ya sea deliberadamente o por accidente”.
Ante esto, Bolsonaro no dudó en acusar a Noruega de “matar ballenas” además de promover la explotación del crudo en el Ártico y tildar al país de “doble moral”.
Los grupos ambientales argumentaron que el apoyo público de Bolsonaro al Acuerdo de París es insuficiente, debido a que planea abrir a la Amazonía a un mayor desarrollo que haría imposible que Brasil cumpla con sus objetivos de reducción de emisiones en los próximos años. La nación sudamericana tiene aproximadamente 60% de la selva tropical de la Amazonía, a la que los científicos consideran crucial preservar como parte de la campaña para desacelerar el cambio climático.
ó que si
llegaba al poder, ni “un centímetro más” de tierra sería demarcado para
reservas indígenas. Horas después de haber asumido el cargo, emitió una
serie de decretos que los críticos alegaron beneficiarían a sus aliados
del poderoso “caucus rural”, partidario del desarrollo en la selva de
Brasil.
Bolsonaro transfirió la responsabilidad de la demarcación de los territorios indígenas del Ministerio de Justicia al Ministerio de Agricultura, acción que un legislador describió como “dejar que el zorro se haga cargo del gallinero”.
En el decreto también se transfirió la agencia de asuntos indígenas del Ministerio de Justicia al recién creado Ministerio de la Mujer, Familia y Derechos Humanos que está dirigido por un pastor evangélico ultraconservador. El máximo tribunal del país revirtió el decreto.
Su ministra de Agricultura es Tereza Cristina, quien formó parte de la poderosa bancada de la agroindustria en la cámara baja del Congreso y se ha opuesto a las solicitudes de las comunidades indígenas.
El ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles, escribió en el 2018 en la publicación de internet Medium que la agroindustria en Brasil estaba “bajo amenaza”. El año pasado, una corte de Sao Paulo lo declaró culpable de fraude por haber modificado un plan de protecciones ambientales para favorecer los intereses mineros, mientras fungía como el ministro de Medio Ambiente del estado de Sao Paulo entre 2016 y 2018.
El ministro de Relaciones Exteriores Ernesto Araujo ha escrito en su blog que el cambio climático es un “dogma” utilizado por la izquierda para impulsar el crecimiento de China, y dijo que quería “ayudar a Brasil y al mundo a liberarse de la ideología globalista”.
En un principio, el ministro de Medio Ambiente Salles también canceló un seminario preparatorio de la ONU sobre cambio climático, que se lleva a cabo esta semana en Salvador, en el estado norteño de Bahía. Ante la presión del alcalde de la ciudad, finalmente el seminario de una semana sí se llevará a cabo y se prevé que Salles asista.
Las imágenes de los incendios que han recorrido el mundo son dramáticas. Expertos en el Bioma Amazónico alertan que las decisiones del ultraderechista, Jair Bolsonaro, ponen en peligro la conservación del “pulmón del mundo”, territorio ancestral de 305 pueblos indígenas. Lo que suceda con la selva brasilera debería importarle a todo el continente, al mundo y, sobre todo, al presidente de Brasil.
(Con información de AP y El Comercio)
Con
la llegada del llamado “verano amazónico”, la selva se queda más
susceptible a incendios / Foto: Alcaldía de Diamantino (Mato Grosso)
Los datos del INPE, basados en imágenes tomadas vía satélite, señalan que entre enero y agosto de este año se han detectado 72 843 focos de incendios en la Amazonía.
¿A qué se debe el récord de incendios en la Amazonía?
Brasil en emergencia
El 9 de agosto, el estado de Amazonas declaró una emergencia en el sur y en su capital, Manaos. Sin embargo, son más los estados brasileños que están siendo afectados por las llamas.Acre, en la frontera con el Perú lleva en alerta desde el viernes.
Mato Grosso y Pará son los otros dos estados donde la frontera agrícola del Brasil ha entrado en la cuenca del Amazonas.
Bolsonaro y los incendios
El considerable incremento de incendios forestales desde la llegada al poder de Jair Bolsonaro desde el 1 de enero del 2019 reaviva los temores que surgieron en la campaña electoral, cuando el derechista prometió usar la región amazónica para el desarrollo del sector minero y la agricultura. Además, sus vínculos con los terratenientes ganaderos y agricultores son notorios.“Si todos los datos de deforestación de los últimos diez años fueran verdad, la Amazonía ya no existiría”, se defendió Bolsonaro en julio al ser preguntado sobre los datos oficiales del propio Gobierno. “Sabemos que si deforestamos esto se transforma en desierto”, agregó.
De acuerdo con el diario El País, el presidente sostuvo que hay mucha presión externa sobre la Amazonía para intentar influir en la política brasileña. ”La Amazonia es nuestra, no de ustedes”, insistió. Dijo que ve exagerada la preocupación por los indígenas afectados. ”Ustedes quieren tratar a los indígenas como seres prehistóricos. Y hay indígenas que quieren trabajar, producir”.
Pese a que es usual que se produzcan incendios forestales en estación seca, las organizaciones ambientalistas han denunciado en reiteradas ocasiones que los agricultores deforestan ilegalmente por su interés en las tierras de la zona para la cría del ganado.
Bolsonaro ha dicho que los agricultores usan el fuego para limpiar la tierra en lo que denominan ”la época del año de la queimada” y que”Esta sería la temporada”.
Sin embargo, el investigador de INPE, Alberto Setzer, rechaza cualquier teoría orientada a fenómenos naturales: ”No hay nada raro en el clima este año, ni en los niveles de lluvia en la región amazónica, que sólo está un poco por debajo del promedio. La estación seca crea las condiciones favorables para la propagación del fuego, pero su inicio es obra de los humanos, ya sea deliberadamente o por accidente”.
Protesta internacional
Noruega y Alemania, los principales estados patrocinadores de Fondo Amazonía –dedicado a la protección ambiental en Brasil- se han visto obligados a suspender las donaciones debido al impulso de tala de árboles en el pulmón verde del planeta.Ante esto, Bolsonaro no dudó en acusar a Noruega de “matar ballenas” además de promover la explotación del crudo en el Ártico y tildar al país de “doble moral”.
En la campaña y como presidente
Durante su campaña presidencial, Bolsonaro dijo que seguiría los pasos del presidente estadounidense Donald Trump y sacaría a Brasil del Acuerdo de París contra el cambio climático. Sin embargo, justo antes de las elecciones, dio marcha atrás y dijo que continuaría en el tratado siempre y cuando la soberanía de Brasil en la Amazonía no se viera amenazada o desafiada.Los grupos ambientales argumentaron que el apoyo público de Bolsonaro al Acuerdo de París es insuficiente, debido a que planea abrir a la Amazonía a un mayor desarrollo que haría imposible que Brasil cumpla con sus objetivos de reducción de emisiones en los próximos años. La nación sudamericana tiene aproximadamente 60% de la selva tropical de la Amazonía, a la que los científicos consideran crucial preservar como parte de la campaña para desacelerar el cambio climático.
Tierras indígenas
Cuando era candidato a la Presidencia, Bolsonaro prometiBolsonaro transfirió la responsabilidad de la demarcación de los territorios indígenas del Ministerio de Justicia al Ministerio de Agricultura, acción que un legislador describió como “dejar que el zorro se haga cargo del gallinero”.
En el decreto también se transfirió la agencia de asuntos indígenas del Ministerio de Justicia al recién creado Ministerio de la Mujer, Familia y Derechos Humanos que está dirigido por un pastor evangélico ultraconservador. El máximo tribunal del país revirtió el decreto.
Dime a quién nombras…
Los nombramientos ministeriales de Bolsonaro van en consonancia con su promesa de campaña de ayudar a que los negocios expandan sus operaciones en Brasil, incluido a sus zonas naturales protegidas.Su ministra de Agricultura es Tereza Cristina, quien formó parte de la poderosa bancada de la agroindustria en la cámara baja del Congreso y se ha opuesto a las solicitudes de las comunidades indígenas.
El ministro de Medio Ambiente, Ricardo Salles, escribió en el 2018 en la publicación de internet Medium que la agroindustria en Brasil estaba “bajo amenaza”. El año pasado, una corte de Sao Paulo lo declaró culpable de fraude por haber modificado un plan de protecciones ambientales para favorecer los intereses mineros, mientras fungía como el ministro de Medio Ambiente del estado de Sao Paulo entre 2016 y 2018.
El ministro de Relaciones Exteriores Ernesto Araujo ha escrito en su blog que el cambio climático es un “dogma” utilizado por la izquierda para impulsar el crecimiento de China, y dijo que quería “ayudar a Brasil y al mundo a liberarse de la ideología globalista”.
Cumbre del Cambio Climático de la ONU 2019
En noviembre del 2018, luego de que el nuevo gobierno ganó las elecciones y antes de la juramentación de Bolsonaro, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil decidió retirar su oferta para albergar la conferencia sobre cambio climático de las Naciones Unidas en 2019. El ministerio señaló que tenía “limitaciones fiscales y presupuestarias”, pero los activistas y grupos ambientales consideraron que la acción era un gesto de concesión hacia Bolsonaro.En un principio, el ministro de Medio Ambiente Salles también canceló un seminario preparatorio de la ONU sobre cambio climático, que se lleva a cabo esta semana en Salvador, en el estado norteño de Bahía. Ante la presión del alcalde de la ciudad, finalmente el seminario de una semana sí se llevará a cabo y se prevé que Salles asista.
Las imágenes de los incendios que han recorrido el mundo son dramáticas. Expertos en el Bioma Amazónico alertan que las decisiones del ultraderechista, Jair Bolsonaro, ponen en peligro la conservación del “pulmón del mundo”, territorio ancestral de 305 pueblos indígenas. Lo que suceda con la selva brasilera debería importarle a todo el continente, al mundo y, sobre todo, al presidente de Brasil.
(Con información de AP y El Comercio)
DESTRUCCIÓN
Humo de incendios criminales en la Amazonía se propaga por todo el continente
Avanzan las acciones de terratenientes en la selva; incendios aumentaron un 82% con relación al mismo período de 2018
Ouça o áudio:
El
humo producido por incendios que se suceden a un ritmo acelerado en la
selva amazónica llegó hasta la capital de São Paulo, en el sudeste
brasileño, el último lunes (19). Las partículas de los incendios
viajaron miles de kilómetros, primero hacia el oeste del continente
y chocaron contra la Cordillera de los Andes, para después volver hacia
el sur. El humo que afectó a São Paulo volvió a Brasil potencializado
por incendios en la selva en Bolivia y Paraguay. Brasil vive la quema
más grande de los últimos cinco años, según el Instituto Nacional de
Investigaciones Espaciales (Inpe).
En esta época de sequía en la Amazonia y en otras áreas de
selvas de Brasil, el bosque se vuelve susceptible a incendios. Sin
embargo, en este caso específico, el fuego se origina mayoritariamente
en la acción depredadora de terratenientes que buscan expandir sus
pastizales o cultivos de soja, por ejemplo.
En el suroeste del estado de Pará, los terratenientes
llegaron a realizar un “día del fuego”, donde realizaron quemas
simultáneas a los márgenes de la carretera BR 163, para llamar la
atención del gobierno afirmando que el “único modo de trabajar es
tumbando la selva”.
Mientras eso, el presidente Jair Bolsonaro (Partido Social
Liberal), que se autodenominó “el capitán motosierra” sigue cuestionando
los datos presentados por el INPE (Instituto Nacional de Investigación
Espacial) y ya cambió la dirección del mismo, reemplazó al físico
Ricardo Galvão por un oficial de la Fuerza Aérea Brasileña.
Desde enero de este año, se registraron 71.497 focos de incendio frente a 39.194 focos del año pasado, un aumento de 82%.
El investigador del programa de incendios del INPE, Alberto Setzer, habló con el portal de noticias G1, y enfatizó que aunque la sequía ayude a propagar el fuego, los incendios son causados por acción humana.
Los estados donde hubo un aumento de incendios fueron Mato
Grosso do Sul (260%), Rondonia (198%), Pará (188%), Acre (176%) y Rio de
Janeiro (176%).
Entre el 17 y el 19 de agosto, el INPE registró 5.253 focos
de incendio en Brasil, 1.618 na Bolívia, 1.116 en Perú y 465
en Paraguay.
En una entrevista concedida al portal de noticias UOL,
el investigador de la Administración Nacional de la Aeronáutica y del
Espacio (NASA), Santiago Gasso, explicó las características del humo que
afectó a São Paulo y afirmó que su material puede propagarse largas
distancias en la atmósfera, generando mala calidad del aire, impactos en
el clima y en el ecosistema.
Edición: Rodrigo Chagas
La imagen del día: Anochece en Sao Paulo en pleno día por incendios en el Amazonas
La semana pasada todo el mundo se sorprendió por la forma en que el
Sol desapareció del cielo en Siberia, sin que ocurriera un eclipse. El
motivo, la nube de cenizas provenientes de los masivos incendios
forestales que asolaban en ártico y que destruyeron gran parte de la
vegetación de Groenlandia y Siberia.
Y aunque muchos pensaban que nunca vivirían un fenómeno así, ocurrió en nuestro continente la tarde del lunes cuando Sao Paulo quedó a oscuras por las llamas que devoran el Amazonas.
La
situación, que llamó la atención en las redes sociales, sucedió cerca
de las tres de la tarde del lunes, cuando una fuerte nubosidad, formada
por vientos marítimos del sur y sureste cubrieron el cielo, dejando la
ciudad a oscuras.
A través de su cuenta de Twitter, la ONG Greenpeace publicó una foto del hecho, apuntando que “el
humo de los incendios en el Amazonas volvió a los cielos de Sao Paulo, a
más de 3000 km de distancia, oscuro. Lo que sucede en el Amazonas no se
queda en el Amazonas”. Esta imagen se hizo viral en esta jornada.
(Con información de Publímetro)
Con el hashtag #PrayForAmazonia
(#RezaPorLaAmazonía), miles de personas hicieron un llamado en redes
sociales a atender los incendios, que representan un riesgo mundial
porque afectan al pulmón del planeta.
La Amazonía brasileña, considerada el "pulmón del planeta", lleva 16 días incendiándose
y organizaciones denuncian que el Gobierno de Jair Bolsonaro ha
guardado silencio ante lo que han llamado un "crimen ambiental".
En material difundido en redes sociales, se observan kilómetros de la Amazonía en llamas, lo que ha puesto en riesgo a poblaciones enteras y a miles de especies.
En uno de los videos difundidos en internet, una mujer que vive en este gigantesco territorio del noroeste de Brasil grita desesperada y señala los incendios en la Amazonía.
Con el hashtag #PrayForAmazonia (#RezaPorLaAmazonía), miles de personas hicieron un llamado en redes sociales a atender los incendios que representan un riesgo para el planeta entero, ya que ese inmenso pulmón vegetal produce el 20 % del oxígeno del mundo.
El lunes en la tarde, la ciudad de Sao Paulo quedó a oscuras a causa de los incendios en la Amazonía y debido a un frente frío con vientos marítimos, pese a que el "pulmón del planeta" se ubica a miles de kilómetros de allí.
Datos del Instituto Nacional de Investigación Espacial de Brasil (Inpe) indican que la deforestación destruyó 2.254 kilómetros cuadrados de la Amazonía brasileña el pasado julio, 278 % más que los 596,6 kilómetros cuadrados del mismo mes de 2018.
El aumento de la deforestación en la Amazonía provocó que Alemania y Noruega anunciasen la semana pasada el congelamiento de ayudas destinadas a la preservación de la selva.
"Quienes deforestan y destruyen la Amazonía se sienten alentados por el discurso y las acciones del gobierno de Bolsonaro que, desde que asumió el cargo, ha hecho un verdadero desmantelamiento de la política ambiental del país", señaló en un comunicado Danicley Aguiar, vocero de la organización Greenpeace en Brasil.
"El clima seco, el viento y el calor hicieron que los incendios aumentaran considerablemente en todo el país", explicó el ministro Salles, agregando que el equipo está disponible y "ya está en uso".
En material difundido en redes sociales, se observan kilómetros de la Amazonía en llamas, lo que ha puesto en riesgo a poblaciones enteras y a miles de especies.
En uno de los videos difundidos en internet, una mujer que vive en este gigantesco territorio del noroeste de Brasil grita desesperada y señala los incendios en la Amazonía.
Con el hashtag #PrayForAmazonia (#RezaPorLaAmazonía), miles de personas hicieron un llamado en redes sociales a atender los incendios que representan un riesgo para el planeta entero, ya que ese inmenso pulmón vegetal produce el 20 % del oxígeno del mundo.
Aumento de incendios
Los focos de incendio aumentaron en Brasil un 82 % en comparación con el año pasado, según datos del gobierno, que entre enero y agosto de 2019 registró 71.497 siniestros de esta naturaleza, un número considerablemente superior a las 39.194 quemas que ocurrieron en el mismo período de 2018.El lunes en la tarde, la ciudad de Sao Paulo quedó a oscuras a causa de los incendios en la Amazonía y debido a un frente frío con vientos marítimos, pese a que el "pulmón del planeta" se ubica a miles de kilómetros de allí.
Datos del Instituto Nacional de Investigación Espacial de Brasil (Inpe) indican que la deforestación destruyó 2.254 kilómetros cuadrados de la Amazonía brasileña el pasado julio, 278 % más que los 596,6 kilómetros cuadrados del mismo mes de 2018.
El aumento de la deforestación en la Amazonía provocó que Alemania y Noruega anunciasen la semana pasada el congelamiento de ayudas destinadas a la preservación de la selva.
"Quienes deforestan y destruyen la Amazonía se sienten alentados por el discurso y las acciones del gobierno de Bolsonaro que, desde que asumió el cargo, ha hecho un verdadero desmantelamiento de la política ambiental del país", señaló en un comunicado Danicley Aguiar, vocero de la organización Greenpeace en Brasil.
Respuesta del Gobierno
El ministro de Medio Ambiente de Brasil, Ricardo Salles, señaló en su cuenta de Twitter que el Gobierno ha puesto a disposición de los estados afectados aviones y un equipo de brigadistas para detener los incendios."El clima seco, el viento y el calor hicieron que los incendios aumentaran considerablemente en todo el país", explicó el ministro Salles, agregando que el equipo está disponible y "ya está en uso".