ARGENTINA
Se cumple una nueva huelga contra el modelo económico
El quinto paro contra Macri es una realidad
La
medida de fuerza de 24 horas fue convocada por la CGT con la adhesión
del Frente Sindical para el Modelo Nacional, las CTA y las
organizaciones sociales y es contundente. No circulan los transportes y
hay piquetes en distintos accesos a la Ciudad de Buenos Aires.
La imagen de una ciudad vacía se repetirá por quinta vez desde la llegada de Macri al gobierno.
El
quinto paro general que realiza la Confederación General del Trabajo
(CGT) se muestra contundente y no sólo por la determinación de la
central obrera –que incluye la adhesión del Frente Sindical para el
Modelo Nacional (FSMN) y las CTA– sino fundamentalmente porque es un
reclamo generalizado de las bases sindicales ante la magnitud de la
crisis económica. El paro no contempla la movilización pero en varias
provincias la metodología incluye concentraciones que organizan las
regionales de la CGT. Por otra parte, en todo el país las organizaciones
sociales realizarán ollas populares como forma de repudiar la política
económica de Mauricio Macri, que en el último año provocó que la brecha
entre la inflación alimentaria y la evolución salarial alcanza un 21,8
por ciento según un estudio de la consultora Proyecto Económico.
La adhesión de los gremios del transporte le otorga a la medida de fuerza una mayor contundencia porque no circularán colectivos, trenes y en la ciudad de Buenos Aires no habrá subtes. Tampoco hay vuelos aerocomerciales ni transporte marítimo. En todo el país estan cerradas las escuelas, los bancos, comercios y en los hospitales solo hay guardias mínimas. En ese sentido, el titular del gremio de la alimentación, Rodolfo Daer, anticipó que este miércoles se podrán “ver imágenes de una ciudad vacía porque los trabajadores en su conjunto coinciden en las razones de la convocatoria a este paro”, dijo. En esa misma línea opinó Héctor Daer, el cosecretario general de la CGT, quien dijo que el paro será masivo porque “todas las actividades tomaron nota de la gravedad de la situación nacional” y, como tal, señaló que la medida de fuerza “es para plantear al gobierno que debe dictar medidas porque la debacle y la caída son sistemáticas. Algunos ganaron bastante y, si no se toma el toro por las astas, la crisis será cada vez peor”.
A su turno, el secretario adjunto de Camionero, Pablo Moyano, enmarcó la contundencia de la medida de fuerza al considerarla como “la continuidad de la protesta con movilización del 30 de abril último” que realizó el Frente Sindical para el Modelo Nacional.
El otro elemento que le otorgará una mayor masividad a la medida de fuerza son las consecuencias nefastas del plan económico que, como sostiene el informe de la consultora Proyecto Económico, impacta tanto en el continuo cierre de empresas donde la rama industrial es la más afectada. Sólo esta rama “muestra una caída ininterrumpida del empleo asalariado formal que acumula casi 125.000 puestos de trabajo destruidos en menos de 4 años”. Esto impacta de lleno en la suba del desempleo que a fines de 2018 llegó al 9,1 por ciento pero que las previsiones de la consultora que dirige la economista Fernanda Vallejos para este año ya la ubican en los dos dígitos. A todo esto hay que sumarle el crecimiento natural de la población económicamente activa que busca incorporarse a un mercado en recesión y sin muestras de recuperación.
A pesar de estos datos, el consejo directivo de la CGT decidió no realizar movilizaciones y prefiere la imagen de las ciudades vacías a la de la protesta. Sin embargo, hay regionales de la CGT que decidieron realizar por lo menos concentraciones en las capitales de algunas provincias.
Por caso, en La Pampa la CGT local junto a los gremios que integran el Frente Sindical, las CTA, las 62 Organizaciones Peronistas, la Corriente Federal y docentes se concentrarán en la plaza San Martín de la capital donde además se realizarán ollas populares. “El pueblo ya no aguanta más, no soporta más el aumento de tarifas, de los alimentos, ni los ajustes ni ésta política de hambre y desocupación que lleva adelante el gobierno nacional”, aseguró el dirigente de Luz y Fuerza pampeano, Julio Acosta a la agencia Télam. En Santa Fe sucederá algo similar donde la capital provincial será el escenario de volanteadas, concentraciones y también la realización de ollas populares que, en todo el país, son impulsadas por las organizaciones sociales (ver nota aparte).
En tanto, para el vicejefe de Gobierno, Diego Santilli, el paro es algo inconveniente y dijo que “sería bueno que todos podamos trabajar en conjunto para que no suceda esto, para no incomodar a la sociedad”.
En todo el país organizaciones sociales y políticas realizan manifestaciones en el marco del Paro General convocado por la CGT. En Buenos Aires, hubo cortes en Puente Pueyrredón, Puente La Noria, acceso a la autopista Buenos Aires-La Plata, Autopista del Oeste, Avenida General Paz al 5445 y en el cruce de Panamericana y 197. Confluirán en un acto a las 12 en el Obelisco porteño. En el Puente Pueyrredón la Prefectura Naval y Policía Federal bloquearon los accesos y reprimieron a las 9.30 a manifestantes, hiriendo con balas de goma a dos integrantes del Polo Obrero: un hombre con un impacto en una mejilla y una mujer con siete impactos en su pierna izquierda, que llevarán a un hospital. En el Acceso Oeste también hubo represión policial: le fracturaron la mano a una manifestante. Ampliaremos. Por ANRed | Videos: Lidia Barán.
En Avellaneda la jornada comenzó tensa, cuando organizaciones sociales y políticas realizaron desde la mañana una protesta activa en los accesos al Puente Pueyrredón, en el marco del Paro General convocado por la CGT, al que también se plegaron el Frente Sindical para el Modelo Nacional, que integran La Bancaria, Camioneros y SMATA.
Alrededor de las 9, cuando las organizaciones pretendieron avanzar hacia el puente, efectivos de la Prefectura Federal avanzaron lanzando gases lacrimógenos. Allí se pudo ver entre los afectados por los gases a Eduardo Belliboni, referente del Polo Obrero.
La situación siguió tensa, porque las organizaciones pretendieron cruzar hacia la Ciudad de Buenos Aires para participar del acto central, donde luego confluirían con las demás organizaciones de los otros cortes en el conurbano, desde las 12, en el Obelisco porteño.
Un poco más tarde, a las 9.30, las organizaciones quisieron colocar neumáticos sobre el asfalto, y fueron nuevamente reprimidas con gases lacrimógenos y balas de goma. Producto del accionar represivo, dos integrantes del Polo Obrero resultaron heridos con balas de goma: un hombre con un impacto en una mejilla y una mujer con siete impactos en su pierna izquierda, que llevarán a un hospital.
Al
cierre de esta nota la situación seguía tensa en el lugar, aunque las
organizaciones negociaban con las fuerzas represivas la posibilidad de
poder cruzar hacia la Capital, eventualmente liberando un carril para
que pasen vehículos.
En tanto, del otro lado de Capital, en el Acceso Oeste, también hubo represión a los y las manifestantes. Producto del accionar represivo, le fracturaron la mano a la manifestante Micaela Femenías.
En el acceso de Puente La Noria diversas organizaciones políticas cortaron dos carriles. «Dónde está esa famosa CGT que no se ve», fue la consigna más cantada, orientada a señalarle a la central sindical la falta de combatividad en el marco de despidos masivos, bajos salarios, ajuste generalizado, aumento de los precios de los productos y caída constante del valor del peso. Hubo un gran despliegue de la Gendarmería Nacional.
Por su parte, una gran cantidad de organizaciones también realizaron un corte y manifestación en la subida de la Autopista Buenos Aires-LaPlata. Entre las organizaciones presentes se pudo ver al Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), el Polo Obrero, Marabunta, el MST, el PTS, el Frente Popular Darío Santillán-CN, el Partido Obrero y ANCLA, entre OTRAS. También el gobierno de María Eugenia Vidal desplegó un fuerte operativo represivo de la Policía Bonaerense.
La CGT anunció a los medios que a las 15 realizará una conferencia de prensa en la sede de la calle Azopardo para balancear el impacto y alcance del paro general. planea realizar hoy a las 11 un informe sobre la marcha de la medida de fuerza. Por su parte, desde el Frente Sindical para el Modelo Nacional, que integran La Bancaria, Camioneros y SMATA y las CTA, entre otros sindicatos, anunciaron una conferencia de prensa en el gremio de Camioneros.
En declaraciones a los medios, el secretario general de la Confederación Argentina de los Trabajadores del Transporte (CATT) Juan Carlos Schmid aseguró que el paro tuvo un «alto acatamiento», que «es el más contundente del año», y que «expresa el fracaso del programa económico del Gobierno».
Por su parte, el secretario general de La Bancaria, Sergio Palazzo, sostuvo que «es un paro con una altísima contundencia» y que el paro del 30 de abril impulsado por el FRESIMONA «fue el que impulsó a la CGT a acelerar la medida de fuerza».
La adhesión de los gremios del transporte le otorga a la medida de fuerza una mayor contundencia porque no circularán colectivos, trenes y en la ciudad de Buenos Aires no habrá subtes. Tampoco hay vuelos aerocomerciales ni transporte marítimo. En todo el país estan cerradas las escuelas, los bancos, comercios y en los hospitales solo hay guardias mínimas. En ese sentido, el titular del gremio de la alimentación, Rodolfo Daer, anticipó que este miércoles se podrán “ver imágenes de una ciudad vacía porque los trabajadores en su conjunto coinciden en las razones de la convocatoria a este paro”, dijo. En esa misma línea opinó Héctor Daer, el cosecretario general de la CGT, quien dijo que el paro será masivo porque “todas las actividades tomaron nota de la gravedad de la situación nacional” y, como tal, señaló que la medida de fuerza “es para plantear al gobierno que debe dictar medidas porque la debacle y la caída son sistemáticas. Algunos ganaron bastante y, si no se toma el toro por las astas, la crisis será cada vez peor”.
A su turno, el secretario adjunto de Camionero, Pablo Moyano, enmarcó la contundencia de la medida de fuerza al considerarla como “la continuidad de la protesta con movilización del 30 de abril último” que realizó el Frente Sindical para el Modelo Nacional.
El otro elemento que le otorgará una mayor masividad a la medida de fuerza son las consecuencias nefastas del plan económico que, como sostiene el informe de la consultora Proyecto Económico, impacta tanto en el continuo cierre de empresas donde la rama industrial es la más afectada. Sólo esta rama “muestra una caída ininterrumpida del empleo asalariado formal que acumula casi 125.000 puestos de trabajo destruidos en menos de 4 años”. Esto impacta de lleno en la suba del desempleo que a fines de 2018 llegó al 9,1 por ciento pero que las previsiones de la consultora que dirige la economista Fernanda Vallejos para este año ya la ubican en los dos dígitos. A todo esto hay que sumarle el crecimiento natural de la población económicamente activa que busca incorporarse a un mercado en recesión y sin muestras de recuperación.
A pesar de estos datos, el consejo directivo de la CGT decidió no realizar movilizaciones y prefiere la imagen de las ciudades vacías a la de la protesta. Sin embargo, hay regionales de la CGT que decidieron realizar por lo menos concentraciones en las capitales de algunas provincias.
Por caso, en La Pampa la CGT local junto a los gremios que integran el Frente Sindical, las CTA, las 62 Organizaciones Peronistas, la Corriente Federal y docentes se concentrarán en la plaza San Martín de la capital donde además se realizarán ollas populares. “El pueblo ya no aguanta más, no soporta más el aumento de tarifas, de los alimentos, ni los ajustes ni ésta política de hambre y desocupación que lleva adelante el gobierno nacional”, aseguró el dirigente de Luz y Fuerza pampeano, Julio Acosta a la agencia Télam. En Santa Fe sucederá algo similar donde la capital provincial será el escenario de volanteadas, concentraciones y también la realización de ollas populares que, en todo el país, son impulsadas por las organizaciones sociales (ver nota aparte).
En tanto, para el vicejefe de Gobierno, Diego Santilli, el paro es algo inconveniente y dijo que “sería bueno que todos podamos trabajar en conjunto para que no suceda esto, para no incomodar a la sociedad”.
29/05/2019
Paro general: represión policial y tensión en varios cortes
En todo el país organizaciones sociales y políticas realizan manifestaciones en el marco del Paro General convocado por la CGT. En Buenos Aires, hubo cortes en Puente Pueyrredón, Puente La Noria, acceso a la autopista Buenos Aires-La Plata, Autopista del Oeste, Avenida General Paz al 5445 y en el cruce de Panamericana y 197. Confluirán en un acto a las 12 en el Obelisco porteño. En el Puente Pueyrredón la Prefectura Naval y Policía Federal bloquearon los accesos y reprimieron a las 9.30 a manifestantes, hiriendo con balas de goma a dos integrantes del Polo Obrero: un hombre con un impacto en una mejilla y una mujer con siete impactos en su pierna izquierda, que llevarán a un hospital. En el Acceso Oeste también hubo represión policial: le fracturaron la mano a una manifestante. Ampliaremos. Por ANRed | Videos: Lidia Barán.
En Avellaneda la jornada comenzó tensa, cuando organizaciones sociales y políticas realizaron desde la mañana una protesta activa en los accesos al Puente Pueyrredón, en el marco del Paro General convocado por la CGT, al que también se plegaron el Frente Sindical para el Modelo Nacional, que integran La Bancaria, Camioneros y SMATA.
Alrededor de las 9, cuando las organizaciones pretendieron avanzar hacia el puente, efectivos de la Prefectura Federal avanzaron lanzando gases lacrimógenos. Allí se pudo ver entre los afectados por los gases a Eduardo Belliboni, referente del Polo Obrero.
La situación siguió tensa, porque las organizaciones pretendieron cruzar hacia la Ciudad de Buenos Aires para participar del acto central, donde luego confluirían con las demás organizaciones de los otros cortes en el conurbano, desde las 12, en el Obelisco porteño.
Un poco más tarde, a las 9.30, las organizaciones quisieron colocar neumáticos sobre el asfalto, y fueron nuevamente reprimidas con gases lacrimógenos y balas de goma. Producto del accionar represivo, dos integrantes del Polo Obrero resultaron heridos con balas de goma: un hombre con un impacto en una mejilla y una mujer con siete impactos en su pierna izquierda, que llevarán a un hospital.
En tanto, del otro lado de Capital, en el Acceso Oeste, también hubo represión a los y las manifestantes. Producto del accionar represivo, le fracturaron la mano a la manifestante Micaela Femenías.
En el acceso de Puente La Noria diversas organizaciones políticas cortaron dos carriles. «Dónde está esa famosa CGT que no se ve», fue la consigna más cantada, orientada a señalarle a la central sindical la falta de combatividad en el marco de despidos masivos, bajos salarios, ajuste generalizado, aumento de los precios de los productos y caída constante del valor del peso. Hubo un gran despliegue de la Gendarmería Nacional.
Por su parte, una gran cantidad de organizaciones también realizaron un corte y manifestación en la subida de la Autopista Buenos Aires-LaPlata. Entre las organizaciones presentes se pudo ver al Frente de Organizaciones en Lucha (FOL), el Polo Obrero, Marabunta, el MST, el PTS, el Frente Popular Darío Santillán-CN, el Partido Obrero y ANCLA, entre OTRAS. También el gobierno de María Eugenia Vidal desplegó un fuerte operativo represivo de la Policía Bonaerense.
La CGT anunció a los medios que a las 15 realizará una conferencia de prensa en la sede de la calle Azopardo para balancear el impacto y alcance del paro general. planea realizar hoy a las 11 un informe sobre la marcha de la medida de fuerza. Por su parte, desde el Frente Sindical para el Modelo Nacional, que integran La Bancaria, Camioneros y SMATA y las CTA, entre otros sindicatos, anunciaron una conferencia de prensa en el gremio de Camioneros.
En declaraciones a los medios, el secretario general de la Confederación Argentina de los Trabajadores del Transporte (CATT) Juan Carlos Schmid aseguró que el paro tuvo un «alto acatamiento», que «es el más contundente del año», y que «expresa el fracaso del programa económico del Gobierno».
Por su parte, el secretario general de La Bancaria, Sergio Palazzo, sostuvo que «es un paro con una altísima contundencia» y que el paro del 30 de abril impulsado por el FRESIMONA «fue el que impulsó a la CGT a acelerar la medida de fuerza».
El Frente Sindical para el Modelo Nacional definió como contundente la medida de fuerza nacional
"El paro refleja el rechazo al modelo de Macri"
En
la sede de Camioneros, los dirigentes del Frente Sindical destacaron el
alto acatamiento al paro.También y llamaron a los trabajadores a seguir
luchando para que el gobierno de Macri y su modelo económico termine en
octubre.
El
paro general es contundente. Así lo reflejaron los gremios que integran
el Frente Sindical para el Modelo Nacional (FSMN) que adelantaron la
evaluación que tiene previsto realizar más tarde la Confederación
General del Trabajo (CGT). En la sede de Camioneros, los principales
dirigentes de este sector gremial destacaron el alto acatamiento que
tiene la medida de fuerza y reclamaron el cambio del modelo económico:
"Es la demostración más importante del rechazo de los trabajadores a las
políticas que implementa el gobierno", aseguró Hugo Moyano quien
advirtió que el gobierno de Macri será derrotado en octubre.
El Frente Sindical realizó su conferencia de prensa para evaluar el impacto de la medida de fuerza y hasta allí llegaron Sergio Palazzo de bancarios, Daniel Catalano de ATE capital, Omar Plani de canillitas, el secretario adjunto de Smata Mario Manrique, Eduardo López de docentes porteños, entre otros. El costado político lo aportó el intendente de Merlo, Gustavo Menéndez.
"El paro tiene un altísimo acatamiento y eso demuestra la necesidad del trabajador, el desempleo, el jubilado de expresar el mal momento que están viviendo. Acá todos se ven afectado por la política económica y por lo tanto no debe sorprender el alto rechazo que se está expresando", aseguró Moyano rodeado de los dirigentes sindicales.
A su turno, Palazzo criticó los dichos de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, sobre su hartazgo con los paros. "Es una actitud autoritaria", indicó. También cuestionó al ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, cuando afirmó que el costo del paro asciende a 40 mil millones de pesos: "Si corrigieran la política económica y modificaran la base salarial solo el uno por ciento el crecimiento sería de 80 mil millones. Entonces habría más consumos y más trabajo", señaló el titular de la Bancaria.
La conferencia se realizó después de que las fuerzas de seguridad reprimieran a los piquetes que realizaron organizaciones sociales y eso para los sindicalistas fue una demostración de la nula intención del gobierno de corregir el modelo económico. "La represión es la respuesta de los que no tienen respuesta. Este paro tiene una modalidad particular que son las ollas populares. Ahí está verdad, por eso reprimen para que los medios hablen de eso y no de los verdaderos problemas que tienen los argentinos", advirtió el dirigente mecánico Manrique.
Moyano aportó a esa crítica al sostener que la ministra Bullrich recurre a la represión porque "cree que así doblegará a la gente pero no es así. No lo conseguirá ni con las amenazas, los cuadernos, no lo van a lograr. Por eso repudiamos todo tipo de represión a los que trabajan o los desempleados que reclaman por una vida digna".
El tema del hambre y las ollas populares a la que han recurrido los gremios del Frente Sindical fue destacado por el dirigente docente Eduardo López quien aseguró que "hoy a las escuelas los chicos llegan con hambre porque sus familias perdieron su trabajo y nosotros, los maestros, estamos con los salarios a la baja y por eso luchamos para que no se cierren las escuelas y los chicos lleguen con la mente abierta para aprender. Por eso es preciso ganar para que los pibes vayan a las escuelas sin hambre", aseguró.
Los referentes del Frente Sindical evitaron opinar sobre la conducción de la CGT. Incluso Moyano se hizo el distraído cuando le preguntaron sobre la decisión de la central obrera de no movilizar u organizar ollas populares como realiza el FSMN. Ante la insistencia periodística, Manrique tomó el micrófono y dijo que "son momentos en este país donde tenemos que hacer lo que se considera mejor para los trabajadores", dijo. Luego agregó que "nosotros respondemos con nuestros hechos. El paro lo decretó la CGT y acatamos", remarcó y recordó que "el 30 de abril decretamos un paro y ellos no lo acataron y por eso tenemos compañeros procesados. De todas formas no vamos a calificar a otros dirigentes eso lo hará la gente", concluyó.
El tema político y, sobre todo el electoral, no estuvo ausente pese a la insistencia de los dirigentes gremiales por concentrarse en la jornada de lucha. Pero ante la insistencia periodística, Moyano respondió. En primer lugar aseguró que los trabajadores ya no volverán a confundirse como en 2015 y que en esta oportunidad votarán bien. Luego señaló que "los que pertenecemos al peronismo y los sectores sociales y de otros partidos, estamos haciendo el esfuerzo para poder en octubre cambiar la historia nefasta".
Moyano no se olvidó de espacios políticos como el de Alternativa Federal pero sin nombrarlos dijo que "creemos que aquel que no se suma a este esfuerzo evidentemente está jugando para el enemigo porque tratar de restarle votos para favorecer a los que están gobernando". Por último aseguró que está convencido que a este espacio, donde se encuentran los gobernadores Juan Schiaretti (Córdoba), Juan Manuel Urtubey (Salta) y los dirigentes Sergio Massa y Miguel Ángel Pichetto, de que "no les va a alcanzar porque los trabajadores dicen que no nos vamos a equivocar. En octubre vamos a cambiar la historia".
El Frente Sindical realizó su conferencia de prensa para evaluar el impacto de la medida de fuerza y hasta allí llegaron Sergio Palazzo de bancarios, Daniel Catalano de ATE capital, Omar Plani de canillitas, el secretario adjunto de Smata Mario Manrique, Eduardo López de docentes porteños, entre otros. El costado político lo aportó el intendente de Merlo, Gustavo Menéndez.
"El paro tiene un altísimo acatamiento y eso demuestra la necesidad del trabajador, el desempleo, el jubilado de expresar el mal momento que están viviendo. Acá todos se ven afectado por la política económica y por lo tanto no debe sorprender el alto rechazo que se está expresando", aseguró Moyano rodeado de los dirigentes sindicales.
A su turno, Palazzo criticó los dichos de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, sobre su hartazgo con los paros. "Es una actitud autoritaria", indicó. También cuestionó al ministro de Producción y Trabajo, Dante Sica, cuando afirmó que el costo del paro asciende a 40 mil millones de pesos: "Si corrigieran la política económica y modificaran la base salarial solo el uno por ciento el crecimiento sería de 80 mil millones. Entonces habría más consumos y más trabajo", señaló el titular de la Bancaria.
La conferencia se realizó después de que las fuerzas de seguridad reprimieran a los piquetes que realizaron organizaciones sociales y eso para los sindicalistas fue una demostración de la nula intención del gobierno de corregir el modelo económico. "La represión es la respuesta de los que no tienen respuesta. Este paro tiene una modalidad particular que son las ollas populares. Ahí está verdad, por eso reprimen para que los medios hablen de eso y no de los verdaderos problemas que tienen los argentinos", advirtió el dirigente mecánico Manrique.
Moyano aportó a esa crítica al sostener que la ministra Bullrich recurre a la represión porque "cree que así doblegará a la gente pero no es así. No lo conseguirá ni con las amenazas, los cuadernos, no lo van a lograr. Por eso repudiamos todo tipo de represión a los que trabajan o los desempleados que reclaman por una vida digna".
El tema del hambre y las ollas populares a la que han recurrido los gremios del Frente Sindical fue destacado por el dirigente docente Eduardo López quien aseguró que "hoy a las escuelas los chicos llegan con hambre porque sus familias perdieron su trabajo y nosotros, los maestros, estamos con los salarios a la baja y por eso luchamos para que no se cierren las escuelas y los chicos lleguen con la mente abierta para aprender. Por eso es preciso ganar para que los pibes vayan a las escuelas sin hambre", aseguró.
Los referentes del Frente Sindical evitaron opinar sobre la conducción de la CGT. Incluso Moyano se hizo el distraído cuando le preguntaron sobre la decisión de la central obrera de no movilizar u organizar ollas populares como realiza el FSMN. Ante la insistencia periodística, Manrique tomó el micrófono y dijo que "son momentos en este país donde tenemos que hacer lo que se considera mejor para los trabajadores", dijo. Luego agregó que "nosotros respondemos con nuestros hechos. El paro lo decretó la CGT y acatamos", remarcó y recordó que "el 30 de abril decretamos un paro y ellos no lo acataron y por eso tenemos compañeros procesados. De todas formas no vamos a calificar a otros dirigentes eso lo hará la gente", concluyó.
El tema político y, sobre todo el electoral, no estuvo ausente pese a la insistencia de los dirigentes gremiales por concentrarse en la jornada de lucha. Pero ante la insistencia periodística, Moyano respondió. En primer lugar aseguró que los trabajadores ya no volverán a confundirse como en 2015 y que en esta oportunidad votarán bien. Luego señaló que "los que pertenecemos al peronismo y los sectores sociales y de otros partidos, estamos haciendo el esfuerzo para poder en octubre cambiar la historia nefasta".
Moyano no se olvidó de espacios políticos como el de Alternativa Federal pero sin nombrarlos dijo que "creemos que aquel que no se suma a este esfuerzo evidentemente está jugando para el enemigo porque tratar de restarle votos para favorecer a los que están gobernando". Por último aseguró que está convencido que a este espacio, donde se encuentran los gobernadores Juan Schiaretti (Córdoba), Juan Manuel Urtubey (Salta) y los dirigentes Sergio Massa y Miguel Ángel Pichetto, de que "no les va a alcanzar porque los trabajadores dicen que no nos vamos a equivocar. En octubre vamos a cambiar la historia".
Moyano llamó "a cambiar la historia a partir de octubre" y resaltó la masividad del paro
El
líder camionero cruzó fuerte al gobierno nacional en la conferencia de
prensa del Frente Sindical que convocó a la jornada de protesta.
Hugo
Moyano, cerca del mediodía, se refirió a la masividad de la medida de
fuerza que se desarrolla este miércoles. "El paro ha sido realmente muy
efectivo, importante y con mucha adhesión", aseguró. El líder camionero
se manifestó en la conferencia de prensa convocada por el Frente
Sindical que llamó al paro de actividades de 24 horas. "El acatamiento
muestra una vez más la necesidad del trabajador de expresar el mal
momento que está viviendo", señaló.
Insistió Moyano que la adhesión fue muy alta y "muestra una vez más la necesidad del trabajador de expresar el mal momento que está viviendo". Luego fue muy enfático al definir las acciones futuras: "La alternativa es cambiar la historia a partir de octubre. Llamamos a los trabajadores a que no se vuelven a equivocar". Resaltó Moyano luego que "este gobierno lleva adelante una política nefasta para el pueblo argentino".
En un momento, ironizó: "El único camión que no paró fue el de la señora (Patricia) Bullrich". La referencia fue a la implementación de las nuevas vallas anti movilizaciones, presentadas por primera vez por la Gendarmería, esta mañana, en el Puente Pueyrredón".
El dirigente camionero aseguró: "Es muy difícil hacerle entender a quien no pasa necesidades, a quien no sabe lo que que sufre la gente que las pasa. Eso es lo que no entiende este señor", en referencia al presidente Mauricio Macri. "Espero que todo esto haga reflexionar al presidente", agregó.
Por su parte, el municipal Rubén García, aseguró: "Pararon más del 90 por ciento de los trabajadores". Aseguró también, respondiéndole a la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, quien aseguró que está "harta de los paros", que "nosotros estamos hartos de las cesantías, los bajos salarios, caída de las industrias. Nosotros pensamos en octubre en la unidad del campo popular".
Insistió Moyano que la adhesión fue muy alta y "muestra una vez más la necesidad del trabajador de expresar el mal momento que está viviendo". Luego fue muy enfático al definir las acciones futuras: "La alternativa es cambiar la historia a partir de octubre. Llamamos a los trabajadores a que no se vuelven a equivocar". Resaltó Moyano luego que "este gobierno lleva adelante una política nefasta para el pueblo argentino".
En un momento, ironizó: "El único camión que no paró fue el de la señora (Patricia) Bullrich". La referencia fue a la implementación de las nuevas vallas anti movilizaciones, presentadas por primera vez por la Gendarmería, esta mañana, en el Puente Pueyrredón".
El dirigente camionero aseguró: "Es muy difícil hacerle entender a quien no pasa necesidades, a quien no sabe lo que que sufre la gente que las pasa. Eso es lo que no entiende este señor", en referencia al presidente Mauricio Macri. "Espero que todo esto haga reflexionar al presidente", agregó.
Por su parte, el municipal Rubén García, aseguró: "Pararon más del 90 por ciento de los trabajadores". Aseguró también, respondiéndole a la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, quien aseguró que está "harta de los paros", que "nosotros estamos hartos de las cesantías, los bajos salarios, caída de las industrias. Nosotros pensamos en octubre en la unidad del campo popular".
La CGT resaltó el alto acatamiento que tuvo la medida de fuerza
"La mayoría del pueblo argentino acompañó el paro"
En
la sede de Azopardo, la conducción de la central obrera en conferencia
de prensa definió como contundente el acatamiento al paro en todo el
país y criticó las políticas económicas del gobierno de Macri. "El
movimiento obrero reitera a las autoridades que tomen acciones
inmediatas para frenar esta decadencia social,política y económica",
advirtieron los secretarios generales de la central obrera, Héctor Daer y
Carlos Acuña
PÀGINA 12 - 29 de mayo de 2019
En
la sede de Azopardo, la conducción de la central obrera en conferencia
de prensa definió como contundente el acatamiento al paro el todo el
país y criticó las políticas económicas del gobierno de Macri. El
secretario de la CGT Héctor Daer señaló que "la sumatoria de los
trabajadores más un sector mayoritario del pueblo se sumó a la
convocatoria de la CGT para reclamar medidas urgentes contra las medidas
económicas que fueron erosionado la actividad ecónomica".
"La mayoría del pueblo argentino acompañó la medida", subrayó Daer -junto a su par Carlos Acuña y otros dirigentes de la central obrera- y destacó la "reacción del movimiento obrero en forma pacífica" en la jornada de hoy.
El dirigente también subrayó que "el acatamiento fue contundente" a la medida de fuerza en todo el país. "El movimiento obrero reitera a las autoridades que tomen acciones inmediatas para frenar esta decadencia social, política y económica", al tiempo que indicó que desde la central obrera "queremos ratificar el rumbo que ha tomado esta confederación", en el sentido "de ir en busca de un camino que resuelva el tema de los mas necesitados, los temas de fondo de nuestro país y que permita de una vez por todas que en la Argentina se pueda vivir dignamente".
Por su parte, el secretario Carlos Acuña señaló que "la gente nos está pidiendo alguna acción para mandarle un mensaje al gobierno, que se deje de hacer cortinas de humo". Agregó que nunca "hemos encontrado respuestas (del Gobierno) para mejorar los destinos de los argentinos". También afirmó que el paro de hoy "no es político, no es contra nadie, es un reclamo para que la situación cambie y que nuestro trabajo pueda ser digno".
Además, Acuña repudió las expresiones de la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, quien señaló que "estamos hartos de los paros". Acuña respondió que desde la CGT "queremos repudiar las palabras de la ministra de seguridad".
"No entiende que (el paro) es una herramienta constitucional que tenemos los trabajadores para que nos escuchen", concluyó.
"La mayoría del pueblo argentino acompañó la medida", subrayó Daer -junto a su par Carlos Acuña y otros dirigentes de la central obrera- y destacó la "reacción del movimiento obrero en forma pacífica" en la jornada de hoy.
El dirigente también subrayó que "el acatamiento fue contundente" a la medida de fuerza en todo el país. "El movimiento obrero reitera a las autoridades que tomen acciones inmediatas para frenar esta decadencia social, política y económica", al tiempo que indicó que desde la central obrera "queremos ratificar el rumbo que ha tomado esta confederación", en el sentido "de ir en busca de un camino que resuelva el tema de los mas necesitados, los temas de fondo de nuestro país y que permita de una vez por todas que en la Argentina se pueda vivir dignamente".
Por su parte, el secretario Carlos Acuña señaló que "la gente nos está pidiendo alguna acción para mandarle un mensaje al gobierno, que se deje de hacer cortinas de humo". Agregó que nunca "hemos encontrado respuestas (del Gobierno) para mejorar los destinos de los argentinos". También afirmó que el paro de hoy "no es político, no es contra nadie, es un reclamo para que la situación cambie y que nuestro trabajo pueda ser digno".
Además, Acuña repudió las expresiones de la ministra de Seguridad Patricia Bullrich, quien señaló que "estamos hartos de los paros". Acuña respondió que desde la CGT "queremos repudiar las palabras de la ministra de seguridad".
"No entiende que (el paro) es una herramienta constitucional que tenemos los trabajadores para que nos escuchen", concluyó.
CGT: "La mayoría de la población acompañó la medida de fuerza"
Lo
dijo Héctor Daer, quien destacó que el acatamiento fue "contundente en
todo el país". Carlos Acuña repudió las declaraciones de la ministra de
Seguridad. "El paro es una medida constitucional", señaló.
La
CGT aseguró que el paro nacional tuvo un acatamiento "muy contundente
en todo el país" y reclamó al gobierno que dé respuestas a sus
exigencias. Los jefes de la central sindical realizaron un balance de la
quinta medida de fuerza contra la política económica del gobierno en la
sede de la CGT de la calle Azopardo en la tarde de este miércoles.
"El acatamiento fue muy importante en todo el país, y la contundencia de esta medida quedó demostrada en la fotografía de las grandes ciudades desiertas durante todo el día", señaló Héctor Daer, uno de los dos dirigentes que encabeza la central obrera.
Daer, que también es secretario general del gremio de la Sanidad, aseguró que "los trabajadores, más un sector mayoritario del pueblo argentino, se sumaron a la convocatoria de la CGT para reclamar medidas urgentes de rectificación de las políticas económicas que se llevan adelante".
"El movimiento obrero reitera y le decimos a las autoridades que tomen acciones inmediatas para lograr frenar esta decadencia social, política y económica que estamos teniendo en nuestro país", reclamó Daer.
Carlos Acuña, el otro jefe del binomio que dirige la CGT, criticó al Gobierno por lo que calificó como falta de diálogo: "Esta CGT tuvo la prudencia siempre necesaria para el diálogo, pero nunca hemos encontrado una respuesta a los pedidos e inquietudes nuestras para mejorar el destino de los argentinos", sentenció.
Para Acuña, el gobierno sí da respuesta a "amigos y acreedores". Dijo: "Evidentemente este presidente escuchaba a los amigos y los acreedores que tenía al lado para seguir haciendo el mismo juego para el mismo sector que hoy debe estar festejando lo bien que le fue en la Argentina a esos sectores", disparó en la conferencia de prensa en la sede de la CGT.
Acuña señaló que "la gente nos está pidiendo alguna acción para mandarle un mensaje al gobierno, que se deje de hacer cortinas de humo". Además, repudió las expresiones de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien dijo que "estamos hartos de los paros". Acuña respondió que desde la CGT "queremos repudiar las palabras de la ministra de seguridad. No entiende que (el paro) es una herramienta constitucional que tenemos los trabajadores para que nos escuchen".
"El acatamiento fue muy importante en todo el país, y la contundencia de esta medida quedó demostrada en la fotografía de las grandes ciudades desiertas durante todo el día", señaló Héctor Daer, uno de los dos dirigentes que encabeza la central obrera.
Daer, que también es secretario general del gremio de la Sanidad, aseguró que "los trabajadores, más un sector mayoritario del pueblo argentino, se sumaron a la convocatoria de la CGT para reclamar medidas urgentes de rectificación de las políticas económicas que se llevan adelante".
"El movimiento obrero reitera y le decimos a las autoridades que tomen acciones inmediatas para lograr frenar esta decadencia social, política y económica que estamos teniendo en nuestro país", reclamó Daer.
Carlos Acuña, el otro jefe del binomio que dirige la CGT, criticó al Gobierno por lo que calificó como falta de diálogo: "Esta CGT tuvo la prudencia siempre necesaria para el diálogo, pero nunca hemos encontrado una respuesta a los pedidos e inquietudes nuestras para mejorar el destino de los argentinos", sentenció.
Para Acuña, el gobierno sí da respuesta a "amigos y acreedores". Dijo: "Evidentemente este presidente escuchaba a los amigos y los acreedores que tenía al lado para seguir haciendo el mismo juego para el mismo sector que hoy debe estar festejando lo bien que le fue en la Argentina a esos sectores", disparó en la conferencia de prensa en la sede de la CGT.
Acuña señaló que "la gente nos está pidiendo alguna acción para mandarle un mensaje al gobierno, que se deje de hacer cortinas de humo". Además, repudió las expresiones de la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, quien dijo que "estamos hartos de los paros". Acuña respondió que desde la CGT "queremos repudiar las palabras de la ministra de seguridad. No entiende que (el paro) es una herramienta constitucional que tenemos los trabajadores para que nos escuchen".
29/05/2019
«La huelga es un éxito y el país está paralizado gracias a los trabajadores y trabajadoras argentinas»
n la mañana de hoy se llevó a cabo un acto en Panamericana y
197, en donde sindicatos, agrupaciones sociales y partidos políticos de
izquierda manifiestaron su descontento y rechazo a las políticas que
ejecuta el gobierno de Mauricio Macri. También la mayor parte de los
motivos del descontento se los lleva el acuerdo que se realizó con el
FMI y sus políticas neoliberales. Por corresponsal popular. «La huelga
es un éxito. No es un apoyo a quienes convocaron el paro; es un repudio,
ya que la medida se tendría que haber convocado hace meses», remarcó
Carlos Zerrizuela, de la Comisión interna del Frigorífico Rioplatense. Crónica y fotos: Ezequiel Ojeda para ANRed.
«La huelga es un éxito y el país está paralizado gracias a los trabajadores y trabajadoras argentinas. No es un apoyo a quienes convocaron el paro; es un repudio, ya que la medida se tendría que haber convocado hace meses. Mientras el Gobierno aplicaba todo un ataque contra la clase trabajadora para imponer los planes del Fondo Monetario, los burócratas sindicales miraban para otro lado», manifestó Carlos Zerrizuela, de la Comisión interna del Frigorífico Rioplatense.
Por otro lado, los choferes de la Línea 60, que venían luchando por los despidos de sus compañeros ayer se presentaron en el Ministerio de trabajo, y lograron la conciliación obligatoria y en el día de mañana van a ser reincorporarse a sus tareas.
E«La huelga es un éxito y el país está paralizado gracias a los trabajadores y trabajadoras argentinas. No es un apoyo a quienes convocaron el paro; es un repudio, ya que la medida se tendría que haber convocado hace meses. Mientras el Gobierno aplicaba todo un ataque contra la clase trabajadora para imponer los planes del Fondo Monetario, los burócratas sindicales miraban para otro lado», manifestó Carlos Zerrizuela, de la Comisión interna del Frigorífico Rioplatense.
Por otro lado, los choferes de la Línea 60, que venían luchando por los despidos de sus compañeros ayer se presentaron en el Ministerio de trabajo, y lograron la conciliación obligatoria y en el día de mañana van a ser reincorporarse a sus tareas.
Con críticas a la CGT, al gobierno y a la oposición, los sindicatos de izquierda cerraron los piquetes con un acto en el Obelisco
Las
organizaciones gremiales y sociales que organizaron 64 cortes de
ruta en todo el país confluyeron en el centro porteño donde se
delimitaron del "paro dominguero" y exigieron "un paro activo de 36
horas" y "romper definitivamente con el FMI".
Desde
bien temprano, los principales dirigentes de los partidos de izquierda y
sindicatos clasistas que orientan esas fuerzas comenzaron a
concentrarse en los cinco puntos que eligieron para realizar cortes en
los ingresos de la Ciudad de Buenos Aires. Los piquetes, en algunos
casos con miles de manifestantes, se desarrollaron en el Puente
Pueyrredón, el Acceso Oeste, la Panamericana, la General Paz a la altura
del INTI y la Autopista Buenos Aires La Plata.
Pero los cortes, organizados por el Plenario del Sindicalismo Combativo (PSC) que agrupa, entre otros, al Sindicato del Neumático, la seccional oeste de la Unión Ferroviaria, la AGD-UBA, el sindicato ceramista del Neuquén y el gremio docente Ademys, además de organizaciones sociales independientes como el Polo Obrero y el Teresa Vive, se extendieron hasta 64 puntos a lo largo y ancho del país. El propósito declarado fue el de darle un carácter activo a la medida de fuerza y reclamar la continuidad del plan de lucha con un paro activo de 36 horas.
En todos los casos se registraron fuertes operativos represivos protagonizados por las fuerzas policiales y la Prefectura Naval que trataron de impedir las manifestaciones y llegaron a reprimir con balas de goma y gases lacrimógenos en el Puente Pueyrredón.
Sobre las 11 de la mañana y en forma coordinada, los cortes se levantaron para confluir en el centro de la ciudad donde se realizó un acto a los pies del Obelisco que comenzó pasadas las 12 del mediodía. Allí, diez oradores hicieron uso de la palabra con la mira puesta en “el ajuste del FMI, Macri y los gobernadores”, y en la “complicidad de la CGT que apuesta a un recambio con la oposición fondomonetarista”.
Ante unas cinco mil personas que se movilizaron en autos, micros y bicicletas, el acto comenzó con las palabras de Rubén “el Pollo” Sobrero que señaló que “los más de 60 cortes muestran la fuerza de las nuevas direcciones que salen a pelearle a la burocracia sindical”. Para el ferroviario, “los dirigentes de la CGT trataron de evitar esta jornada, pero los trabajadores estamos hartos de este plan económico”.
El dirigente, denunció a la cúpula de la CGT porque “nos dicen que es el último paro y vamos a las elecciones pero nosotros creemos que sin una ruptura con el FMI no hay salida. Los charlatanes dicen que hay que negociar con el FMI pero nosotros queremos una salida de clase.”.
Luego hicieron uso de la palabra, entre otros, el metrodelegado Claudio Dellecarbonara y Mónica Sulle dirigente del Movimiento Sin Trabajo Teresa Vive que señaló que “hicimos posible que este paro no sea dominguero” y se quejó porque “cada vez hay más compañeros en los comedores". Para Sulle "es responsabilidad de este gobierno que le paga al FMI y no se fija en la deuda interna”.
El otro dirigente de organizaciones sociales, Eduardo “Chiquito” Belliboni del Polo Obrero saludó a “Mary, que muchos de ustedes no conocen pero se comió siete tiros en el Puente Pueyrredón y quiso estar en este acto igual. Bien distinta a la burocracia de la CGT que lo mira por televisión mientras deshoja la margarita para ver que alternativa patronal va a apoyar en octubre”.
Ileana Celotto, secretaria general de la Asociación Gremial Docente de la UBA también disparó contra la CGT: “este paro está en las antípodas de El Cordobazo. La CGT quiere anestesiar al movimiento obrero y buscan dilapidar esta fuerza para cumplir con los ajustadores”. El objetivo, según Celotto, es “trabajar por un recambio fondomonetarista en octubre. Por eso no preparan un plan de lucha”.
Para la dirigente de los docentes universitarios el agrupamiento que se reunió en el Obelisco “levanta un programa que es contrario a los diez puntos del macrismo: partimos de la defensa del salario y las jubilaciones y planteamos la nacionalización de la banca y el comercio exterior y el no pago de la deuda externa”.
Guillermo Pacagnini, del sindicato de médicos bonaerenses, la CICOP, coincidió en que “nosotros planteamos un programa obrero para romper este ajuste mientras, para ellos el programa es esperar a octubre”.
El cierre quedó a cargo del secretario general del Sindicato del Neumático, Alejandro Crespo, que destacó que “los trabajadores hicieron el mayor paro desde que está Macri. Es por el hartazgo con esta dirigencia que ha fracasado en traer una solución a los trabajadores”.
Y también puso el foco en la cúpula de la CGT señalando que “si no fuera por esa burocracia sindical que quiere hacer un puente hasta las elecciones tendríamos millones de trabajadores en la calle”. Finalmente expresó que “necesitamos una dirección que defienda a los trabajadores. Hace falta una conducción sindical que vaya al centro del poder político y diga: ‘este ajuste se acabó’”.
Crespo la emprendió también con la oposición kirchnerista señalando que “con el pacto social que proponen se repite la historia como farsa. Ya sabemos que el pacto social viene con más ajuste sobre los trabajadores”, por eso llamó “a los trabajadores a confiar en sus propias fuerzas en los lugares de trabajo y, cuando haya que votar, hacerlo por la única alternativa que nos representa, que es el Frente de Izquierda”.
Sobre las 13 concluyó el acto y los manifestantes despejaron el cruce de las avenidas Corrientes y 9 de julio en las que circulaban apenas un puñado de vehículos particulares.
Pero los cortes, organizados por el Plenario del Sindicalismo Combativo (PSC) que agrupa, entre otros, al Sindicato del Neumático, la seccional oeste de la Unión Ferroviaria, la AGD-UBA, el sindicato ceramista del Neuquén y el gremio docente Ademys, además de organizaciones sociales independientes como el Polo Obrero y el Teresa Vive, se extendieron hasta 64 puntos a lo largo y ancho del país. El propósito declarado fue el de darle un carácter activo a la medida de fuerza y reclamar la continuidad del plan de lucha con un paro activo de 36 horas.
En todos los casos se registraron fuertes operativos represivos protagonizados por las fuerzas policiales y la Prefectura Naval que trataron de impedir las manifestaciones y llegaron a reprimir con balas de goma y gases lacrimógenos en el Puente Pueyrredón.
Sobre las 11 de la mañana y en forma coordinada, los cortes se levantaron para confluir en el centro de la ciudad donde se realizó un acto a los pies del Obelisco que comenzó pasadas las 12 del mediodía. Allí, diez oradores hicieron uso de la palabra con la mira puesta en “el ajuste del FMI, Macri y los gobernadores”, y en la “complicidad de la CGT que apuesta a un recambio con la oposición fondomonetarista”.
Ante unas cinco mil personas que se movilizaron en autos, micros y bicicletas, el acto comenzó con las palabras de Rubén “el Pollo” Sobrero que señaló que “los más de 60 cortes muestran la fuerza de las nuevas direcciones que salen a pelearle a la burocracia sindical”. Para el ferroviario, “los dirigentes de la CGT trataron de evitar esta jornada, pero los trabajadores estamos hartos de este plan económico”.
El dirigente, denunció a la cúpula de la CGT porque “nos dicen que es el último paro y vamos a las elecciones pero nosotros creemos que sin una ruptura con el FMI no hay salida. Los charlatanes dicen que hay que negociar con el FMI pero nosotros queremos una salida de clase.”.
Luego hicieron uso de la palabra, entre otros, el metrodelegado Claudio Dellecarbonara y Mónica Sulle dirigente del Movimiento Sin Trabajo Teresa Vive que señaló que “hicimos posible que este paro no sea dominguero” y se quejó porque “cada vez hay más compañeros en los comedores". Para Sulle "es responsabilidad de este gobierno que le paga al FMI y no se fija en la deuda interna”.
El otro dirigente de organizaciones sociales, Eduardo “Chiquito” Belliboni del Polo Obrero saludó a “Mary, que muchos de ustedes no conocen pero se comió siete tiros en el Puente Pueyrredón y quiso estar en este acto igual. Bien distinta a la burocracia de la CGT que lo mira por televisión mientras deshoja la margarita para ver que alternativa patronal va a apoyar en octubre”.
Ileana Celotto, secretaria general de la Asociación Gremial Docente de la UBA también disparó contra la CGT: “este paro está en las antípodas de El Cordobazo. La CGT quiere anestesiar al movimiento obrero y buscan dilapidar esta fuerza para cumplir con los ajustadores”. El objetivo, según Celotto, es “trabajar por un recambio fondomonetarista en octubre. Por eso no preparan un plan de lucha”.
Para la dirigente de los docentes universitarios el agrupamiento que se reunió en el Obelisco “levanta un programa que es contrario a los diez puntos del macrismo: partimos de la defensa del salario y las jubilaciones y planteamos la nacionalización de la banca y el comercio exterior y el no pago de la deuda externa”.
Guillermo Pacagnini, del sindicato de médicos bonaerenses, la CICOP, coincidió en que “nosotros planteamos un programa obrero para romper este ajuste mientras, para ellos el programa es esperar a octubre”.
El cierre quedó a cargo del secretario general del Sindicato del Neumático, Alejandro Crespo, que destacó que “los trabajadores hicieron el mayor paro desde que está Macri. Es por el hartazgo con esta dirigencia que ha fracasado en traer una solución a los trabajadores”.
Y también puso el foco en la cúpula de la CGT señalando que “si no fuera por esa burocracia sindical que quiere hacer un puente hasta las elecciones tendríamos millones de trabajadores en la calle”. Finalmente expresó que “necesitamos una dirección que defienda a los trabajadores. Hace falta una conducción sindical que vaya al centro del poder político y diga: ‘este ajuste se acabó’”.
Crespo la emprendió también con la oposición kirchnerista señalando que “con el pacto social que proponen se repite la historia como farsa. Ya sabemos que el pacto social viene con más ajuste sobre los trabajadores”, por eso llamó “a los trabajadores a confiar en sus propias fuerzas en los lugares de trabajo y, cuando haya que votar, hacerlo por la única alternativa que nos representa, que es el Frente de Izquierda”.
Sobre las 13 concluyó el acto y los manifestantes despejaron el cruce de las avenidas Corrientes y 9 de julio en las que circulaban apenas un puñado de vehículos particulares.
Un megaparo de trabajadores contra las políticas de Macri atiza el ambiente electoral en Argentina
Publicado: 29 may 2019 11:10 GMT | Última actualización: 29 may 2019 20:53 GMT - RT
Las principales centrales obreras, junto a
movimientos sociales y políticos de izquierda, encabezan el quinto paro
contra el Gobierno argentino.
La
Confederación General del Trabajo (CGT) de Argentina, la central
sindical más importante de ese país, realiza este miércoles el quinto
paro nacional por 24 horas contra las políticas del presidente Mauricio Macri, impulsado ante "el deterioro de la situación social" y "la pérdida del poder de compra de los salarios, las jubilaciones y las asignaciones sociales".
Durante toda la jornada, no funcionan buses, ni trenes, ni hay vuelos. Tampoco trabajan bancos ni oficinas estatales, ni hay recolección de residuos. En tanto, los hospitales públicos atienden únicamente urgencias.
La medida de fuerza ocurre casi un mes después de la huelga que realizaron el 30 de abril los gremios considerados 'combativos', agrupados en el Frente Sindical por el Modelo Nacional (Fresimona), de la que también participaron las dos facciones de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA). A pesar de estar enfrentados a la cúpula de la CGT por su tendencia "dialoguista" con el Gobierno, estos espacios gremiales se plegaron al paro, que esta vez tendrá una contundencia mayor a la registrada en aquella protesta.
Es
que en esta oportunidad han convocado al paro 'Los Gordos' de la CGT,
denominados así por su peso en términos políticos y su enorme caudal de
afiliados, ya que dirigen los gremios del Transporte (CATT), estatales
(UPCN), los de la construcción (UOCRA), empleados de Comercio (SEC),
entre otros. En la convocatoria, anunciada el 14 de mayo, la central
obrera llamó a un paro "sin movilización", aunque las
organizaciones sociales y partidos políticos de izquierda llevarán
adelante manifestaciones, cortes de calles y 'ollas populares' en todo
el país.
En horas de la mañana, un grupo de manifestantes que intentaban bloquear el Puente Pueyrredón, que une la localidad bonaerense de Avellaneda con la Capital Federal, fueron reprimidos por la Policía.
En tanto, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, cuestionó la medida de fuerza. "Estamos hartos de los paros, de que cada dos por tres hagan un paro. Es el quinto. Cuando hay un gobierno que no es del partido de los sindicalistas, pasa esto", opinó en una entrevista con radio La Red.
Por su parte, el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, sostuvo que el paro general de este miércoles originó pérdidas superiores a los 40.000 millones de pesos (casi 900 millones de dólares) al país.
La fecha elegida sugiere un condimento especial, ya que se cumplen 50 años de la histórica protesta que en 1969 encabezaron trabajadores y movimientos estudiantiles de la provincia de Córdoba contra la dictadura de Juan Carlos Onganía, conocida como 'El Cordobazo'. Aquella jornada, que se extendió al 30 de mayo, provocó una insurrección popular que hizo tambalear al gobierno de facto, y allanó el camino para acabar con la proscripción del peronismo, que ganó las elecciones cuatro años más tarde, en 1973.
Uno de los secretarios generales de la CGT, Carlos Acuña, reconoció en una entrevista radial que la huelga de este miércoles se enmarca en "un momento muy difícil del país", ya que "muy pocas veces" los argentinos han atravesado "esta situación tan grave".
Los propios datos oficiales del Gobierno respaldan esa dramática caracterización: en abril, la inflación registrada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) fue de 3,4 %, con una leve desaceleración respecto a marzo (4,7 %). Aún así, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) marca una inflación analizada de 55,8 %, mientras la mayoría de los salarios y las jubilaciones no crecieron de manera proporcional en el país sudamericano.
El fuerte aumento de las tarifas de servicios públicos es también un factor erosivo para el bolsillo de los argentinos, con subas promedio de entre el 35 y el 55 % solo en el último año.
El aumento del desempleo es otro de los síntomas más visibles derivados de las políticas del gobierno de Mauricio Macri. En marzo, el INDEC informó que en el último trimestre de 2018 alcanzó el 9,1 %, un punto y medio por encima de la desocupación registrada en el mismo periodo de 2017. En este marco, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) estimó que el desempleo trepará este año al 12 %.
En diálogo con RT, el secretario general de la CTA, Hugo Yasky, anticipó que el paro será "el pico" en toda la serie de protestas gremiales realizadas al presidente Mauricio Macri "desde que empezó con el plan de ajuste contra los trabajadores".
En ese sentido, Yasky evaluó que la huelga de este 29 de mayo "va a repercutir dentro y fuera del país por su masividad". Y se mostró seguro de ello porque "no solamente tiene como convocantes a las principales centrales sindicales del país, sino también a los movimientos sociales, y cuenta con el apoyo de las organizaciones que agrupan al empresariado Pyme".
Por eso, estimó el diputado de la Provincia de Buenos Aires por Unidad Ciudadana (kirchnerismo), el paro "se va a notar también en la actividad comercial".
Yasky sostiene que una medida de fuerza de este tenor debió hacerse "hace mucho", pero no fue posible por diferencias entre los sectores gremiales más importantes del país. "Lo hemos venido sosteniendo desde hace tiempo. Lo dijimos cuando hicimos el paro del 30 de abril, que la CGT en su momento decidió no acompañar", señala el docente.
Pero aunque solo restan cinco meses para las elecciones, Yasky cree que "no hay que descartar" más medidas de fuerza de aquí a octubre.
"La situación social es gravísima, crece el desempleo, cada vez hay más inflación, la recesión está haciendo estragos y la economía está paralizada. Todo indica que el padecimiento social se va a agravar", concluyó.
Emmanuel Gentile
Durante toda la jornada, no funcionan buses, ni trenes, ni hay vuelos. Tampoco trabajan bancos ni oficinas estatales, ni hay recolección de residuos. En tanto, los hospitales públicos atienden únicamente urgencias.
La medida de fuerza ocurre casi un mes después de la huelga que realizaron el 30 de abril los gremios considerados 'combativos', agrupados en el Frente Sindical por el Modelo Nacional (Fresimona), de la que también participaron las dos facciones de la Central de Trabajadores de la Argentina (CTA). A pesar de estar enfrentados a la cúpula de la CGT por su tendencia "dialoguista" con el Gobierno, estos espacios gremiales se plegaron al paro, que esta vez tendrá una contundencia mayor a la registrada en aquella protesta.
En horas de la mañana, un grupo de manifestantes que intentaban bloquear el Puente Pueyrredón, que une la localidad bonaerense de Avellaneda con la Capital Federal, fueron reprimidos por la Policía.
En tanto, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, cuestionó la medida de fuerza. "Estamos hartos de los paros, de que cada dos por tres hagan un paro. Es el quinto. Cuando hay un gobierno que no es del partido de los sindicalistas, pasa esto", opinó en una entrevista con radio La Red.
Por su parte, el ministro de Hacienda, Nicolás Dujovne, sostuvo que el paro general de este miércoles originó pérdidas superiores a los 40.000 millones de pesos (casi 900 millones de dólares) al país.
La fecha elegida sugiere un condimento especial, ya que se cumplen 50 años de la histórica protesta que en 1969 encabezaron trabajadores y movimientos estudiantiles de la provincia de Córdoba contra la dictadura de Juan Carlos Onganía, conocida como 'El Cordobazo'. Aquella jornada, que se extendió al 30 de mayo, provocó una insurrección popular que hizo tambalear al gobierno de facto, y allanó el camino para acabar con la proscripción del peronismo, que ganó las elecciones cuatro años más tarde, en 1973.
Uno de los secretarios generales de la CGT, Carlos Acuña, reconoció en una entrevista radial que la huelga de este miércoles se enmarca en "un momento muy difícil del país", ya que "muy pocas veces" los argentinos han atravesado "esta situación tan grave".
Los propios datos oficiales del Gobierno respaldan esa dramática caracterización: en abril, la inflación registrada por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (INDEC) fue de 3,4 %, con una leve desaceleración respecto a marzo (4,7 %). Aún así, el Índice de Precios al Consumidor (IPC) marca una inflación analizada de 55,8 %, mientras la mayoría de los salarios y las jubilaciones no crecieron de manera proporcional en el país sudamericano.
El fuerte aumento de las tarifas de servicios públicos es también un factor erosivo para el bolsillo de los argentinos, con subas promedio de entre el 35 y el 55 % solo en el último año.
El aumento del desempleo es otro de los síntomas más visibles derivados de las políticas del gobierno de Mauricio Macri. En marzo, el INDEC informó que en el último trimestre de 2018 alcanzó el 9,1 %, un punto y medio por encima de la desocupación registrada en el mismo periodo de 2017. En este marco, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) estimó que el desempleo trepará este año al 12 %.
En diálogo con RT, el secretario general de la CTA, Hugo Yasky, anticipó que el paro será "el pico" en toda la serie de protestas gremiales realizadas al presidente Mauricio Macri "desde que empezó con el plan de ajuste contra los trabajadores".
En ese sentido, Yasky evaluó que la huelga de este 29 de mayo "va a repercutir dentro y fuera del país por su masividad". Y se mostró seguro de ello porque "no solamente tiene como convocantes a las principales centrales sindicales del país, sino también a los movimientos sociales, y cuenta con el apoyo de las organizaciones que agrupan al empresariado Pyme".
Por eso, estimó el diputado de la Provincia de Buenos Aires por Unidad Ciudadana (kirchnerismo), el paro "se va a notar también en la actividad comercial".
Yasky sostiene que una medida de fuerza de este tenor debió hacerse "hace mucho", pero no fue posible por diferencias entre los sectores gremiales más importantes del país. "Lo hemos venido sosteniendo desde hace tiempo. Lo dijimos cuando hicimos el paro del 30 de abril, que la CGT en su momento decidió no acompañar", señala el docente.
El componente político del paro en un año de elecciones
En los últimos días, algunos referentes sindicales de peso expresaron su apoyo a la fórmula Alberto Fernández-Cristina Fernández de Kirchner para las próximas elecciones de octubre. Yasky estima que el amplio respaldo a un mismo espacio peronista podría tender "un puente" hacia la unificación de buena parte del movimiento obrero, dividido en estos años por la figura de la expresidenta.Pero aunque solo restan cinco meses para las elecciones, Yasky cree que "no hay que descartar" más medidas de fuerza de aquí a octubre.
"La situación social es gravísima, crece el desempleo, cada vez hay más inflación, la recesión está haciendo estragos y la economía está paralizada. Todo indica que el padecimiento social se va a agravar", concluyó.
Emmanuel Gentile
Argentina otra vez en paro nacional contra la política económica de Macri
El paro nacional en Argentina contra la política económica del presidente Mauricio Macri
comenzó este miércoles en todos el país suramericano. Se espera un alto
impacto en la huelga nacional de 24 horas, ya que más allá de
acatamiento de la mayoría de los gremios no hay transporte público de
pasajeros.
Las principales ciudades argentinas amanecieron sin transporte público, ni clases, ni recogida de basuras y con los bancos cerrados y los servicios de salud limitados por la quinta huelga general.
En Buenos Aires, Córdoba y Rosario llama la atención la imagen de calles y estaciones vacías, y tampoco hay vuelos nacionales ni internacionales desde o hacia los más importantes aeropuertos del país, con excepción de la aerolínea de bajo coste Flybondi, que opera en el aeródromo de El Palomar de la capital.
A lo largo de las 24 horas que durará la huelga, convocada por la Confederación General del Trabajo y la quinta a nivel nacional desde la asunción de Macri, no habrá servicios de justicia, clases, vuelos, recolección de basura, bancos, puertos, comercios y los hospitales solo atenderán casos de urgencia.
Tampoco hay servicios de trenes, colectivos, subte ( la red de subterráneos de la Ciudad de Buenos Aires), ni vuelos. La Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte adhiere al paro general.
Se espera que la medida de fuerza sea contundente debido a la adhesión de todos los sectores gremiales y sobre todo de dos sindicatos clave: los colectiveros y los ferroviarios.
Para asegurar el éxito de la huelga, distintos piquetes de organizaciones sociales y partidos de izquierda bloquearon el tránsito de vehículos en algunos accesos a la capital argentina.
No habrá movilizaciones de parte de la central obrera aunque sí de organizaciones sociales y de izquierda, que se manifestarán en los accesos a la Ciudad y que harán un acto en el Obelisco para manifestar su rechazo a las políticas del Gobierno.
Además habrá una serie de acto conocidos como «ollas populares» en distintos barrios como forma de repudiar la política económica de Macri, que en el último año provocó que la brecha entre la inflación alimentaria y la evolución salarial alcanza un 21.8 por ciento, según un estudio de la consultora Proyecto Económico.
La convocatoria al paro es por «el deterioro de la situación económica», «la pérdida de poder adquisitivo de los salarios por la inflación», «por un aumento del salario mínimo vital y móvil», «porque crece el desempleo y se derrumba la actividad económica», «porque las tarifas de los servicios públicos son impagables para los sectores más vulnerables», entre otros reclamos.
(Con información de teleSUR)
Las principales ciudades argentinas amanecieron sin transporte público, ni clases, ni recogida de basuras y con los bancos cerrados y los servicios de salud limitados por la quinta huelga general.
En Buenos Aires, Córdoba y Rosario llama la atención la imagen de calles y estaciones vacías, y tampoco hay vuelos nacionales ni internacionales desde o hacia los más importantes aeropuertos del país, con excepción de la aerolínea de bajo coste Flybondi, que opera en el aeródromo de El Palomar de la capital.
A lo largo de las 24 horas que durará la huelga, convocada por la Confederación General del Trabajo y la quinta a nivel nacional desde la asunción de Macri, no habrá servicios de justicia, clases, vuelos, recolección de basura, bancos, puertos, comercios y los hospitales solo atenderán casos de urgencia.
Tampoco hay servicios de trenes, colectivos, subte ( la red de subterráneos de la Ciudad de Buenos Aires), ni vuelos. La Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte adhiere al paro general.
Se espera que la medida de fuerza sea contundente debido a la adhesión de todos los sectores gremiales y sobre todo de dos sindicatos clave: los colectiveros y los ferroviarios.
Para asegurar el éxito de la huelga, distintos piquetes de organizaciones sociales y partidos de izquierda bloquearon el tránsito de vehículos en algunos accesos a la capital argentina.
No habrá movilizaciones de parte de la central obrera aunque sí de organizaciones sociales y de izquierda, que se manifestarán en los accesos a la Ciudad y que harán un acto en el Obelisco para manifestar su rechazo a las políticas del Gobierno.
Además habrá una serie de acto conocidos como «ollas populares» en distintos barrios como forma de repudiar la política económica de Macri, que en el último año provocó que la brecha entre la inflación alimentaria y la evolución salarial alcanza un 21.8 por ciento, según un estudio de la consultora Proyecto Económico.
La convocatoria al paro es por «el deterioro de la situación económica», «la pérdida de poder adquisitivo de los salarios por la inflación», «por un aumento del salario mínimo vital y móvil», «porque crece el desempleo y se derrumba la actividad económica», «porque las tarifas de los servicios públicos son impagables para los sectores más vulnerables», entre otros reclamos.
(Con información de teleSUR)
#ParoNacional: la lucha obrera inundó las calles rosarinas